Bibliofalante - 10 Congress

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Bibliofalante - 10 Congress
Bibliofalante
multilíngua
Español • Français • Português • Italiano • English
X Congresso da AMP
O Corpo falante, sobre o inconsciente no século XXI
Presidente Miquel Bassols
Diretor Marcus André Vieira
Coordenação Equipes Inter-Escolas Lucíola Freitas de Macêdo
Coordenação Bibliografia Jorge Pimenta e Maria Silvia Hanna (português),
Clotilde Leguil (francês), Débora Nitzcaner (espanhol),
Maria Cristina Aguirre (inglês), Maria Bolgiani (italiano)
Articulação Marcela Antelo
Bibliohablante
EL CUERPO HABLANTE• 5
Biblioparlant
LE CORPS PARLANT• 129
Bibliofalante
O CORPO FALANTE• 247
Biblioparlante
Bibliofalante
Editora Marcela Antelo
Comissão Editorial Clotilde Leguil, Débora Nitzcaner, Jorge Pimenta,
Maria Bolgiani, Maria Cristina Aguirre, Maria Silvia Hanna.
Diagramação e concepção de capa Celeste Hampton
Imagem da Capa Muniz, Vik – Female Model Standing Before a Mirror, after C.W. Eckersberg, 2012.
© MUNIZ, Vik/Licenciado por AUTVIS, Brasil, 2015.
Copyright ©2016 by Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo
IL CORPO PARLANTE• 371
Bibliospeaking
THE SPEAKING BODY• 431
Y así tu Pintor,
de cualquiera escuela que seas,
atiende según las circunstancias,
a la cualidad de los que hablan,
y a la naturaleza de las cosas de que se habla.
X Congreso de la Asociación Mundial de Psicanálisis
25 a 28 de Abril de 2016, Río de Janeiro
Leonardo da Vinci, Tratado de la pintura *
Bibliohablante
Bibliofalante es un instrumento de investigación basado en la elección de citas precisas que
ayuden a orientar lecturas, desde Freud hasta el más contemporáneo de los autores, que se refieran
al cuerpo hablante. Una bibliografía para exploradores, como indica Jacques-Alain Miller en su
conferencia de apertura.
Equipos constituidos en las cinco lenguas más habladas en el Campo Freudiano tomaron como
brújula compartida el significante parlêtre.
EL CUERPO HABLANTE
Sobre el inconsciente en el Siglo XXI
Cada una de las lenguas eligió la fina extensión de la articulación del “parlêtre” con otros
significantes que surgieron en el curso de la investigación: cuerpo, RSI, Sinthome, Inconsciente,
Escabel, etc.
Las lenguas se distinguen por colores, extrayendo de ellas el toque de Real que les es propio.
El formato flippingbook, fue elegido por su potencial interactivo y por ser un soporte que
permite singularizar el recorrido de cada uno. Búsqueda por autor, por palabra, envío de la
selección por email, acceso en el teléfono, IPad, en el sitio, descarga del livro fala por todos lados.
Hasta la realización del Congreso, la Bibliofalante será publicada en dos tiempos.
Cada lengua contó con un equipo que aparecerá mencionado en su color correspondiente.
Desde ya agradecemos la buena disposición de los colegas aquí nombrados, provenientes de todas
las Escuelas de la AMP, por integrarse en este viaje.
Marcela Antelo
[Editora]
* [http://hera.ugr.es/tesisugr/17368716.pdf ]
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BÚSQUEDA DE REFERENCIAS
Coordinación general:
Débora Nitzcaner
POR EOL
Coordinación: Irene Kuperwajs (Parlêtre), Nicolás Bousoño (Cuerpo hablante), Celeste Viñal (Sinthome), Alberto Justo
(Inconsciente), Esteban Stringa (Escabel)
Natali Boghossian, Gastón Cottino, Lisa Erbin, Marcos Fina, Paula M. Iglesias Genta, Soledad González Prado, Ruth
Gorenberg, Ana Larrosa, Claudia Lijtisntens, Ana Laura Piovano, Christian Ríos, Eugenia Serrano, Gisela Smania,
Liliana Zaremsky, Sonia Beldarrain, María A. Pérez Duhalde, Cecilia Fasano, Adriana Fanjul, Antonela Garbet, Luis
Martínez, Florencia Menseguez, Gisele Ringuele, Mariana Santoni, Jorge Santopolo, Alvaro Stella, Liliana Aguilar,
Alejandra Antuña, Andrea Berger, Jorge Castillo, Manuel Carrasco Quintana, Roxana Cozza, Valeria Goldstein,
Alejandra Loray, Silvina Rojas, Carolina Rovere, Claudio Spivak, Raquel Vargas, Roxana Vogler, Sergio Zabalza, Belén
Zubillaga, Dolores Amdem, Lorena Buchner, Verónica Chrawolobsky, Iván D’ Antoni, Elvira Dianno, Sebastián
Llaneza, Fernanda Maillat, Silvina Molina, Alejo Recalde, Gabriela Rodríguez, Sohar Ruiz, Silvia Salvarezza, Diego
Vilariño, Gabriel Vulpara, Esmeralda Miras, Carmen González Táboas, Gisele Ringuelet
Agradecimientos: Graciela Brodsky, Osvaldo Delgado, Graciela Esperanza, Leonardo Gorostiza, Juan Carlos Indart,
Malu Boruchowicz [Créditos imágenes]
POR ELP
Responsable: Ruth Pinkasz
Laura Canedo, Concepción Lechon, Marta Maside, Esperanza Mollera, María Navarro, Gracia Viscasillas [Miembros
de la ELP]
Colaboración especial: Maricruz Alba Castaño (Murcia), Lorena Oberlin Rippstein [Alicante]
POR NEL
Responsable: Ana Viganó
Angélica Celeste Ballón Sánchez, Carlos Chávez Bedregal, Silvana Di Rienzo, Fernando España, José Armando García,
David Hafner, Ricardo Hernández, María Auxiliadora Rodríguez, Jorge Santiago, Carlos Varela Nájera
Asesores por la NEL: María Hortensia Cárdenas, Raquel Cors, Juan Fernando Pérez, Piedad Ortega de Spurrier, José
Fernando Velásquez
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
Leer, por lo pronto,
es una actividad posterior
a la de escribir más resignada,
más civil, más intelectual.
La música empieza
donde se acaba el lenguaje.
E.T.A. Hoffmann
J.L. Borges
Editorial 1er. Tiempo
Editorial 2do. Tiempo
– Autores Escuela Una –
El parlêtre lacaniano es la brújula de nuestro Xº Congreso AMP, se trata de “una palabra
agalmática, un misterio’’, así fue precisado por J-A Miller en su Conferencia. Esta es nuestra
ocasión de encontrar un modo de saber trasmitirlo y porqué no también, de saber usarlo.
Esta es la flecha indicadora por donde se orientó la Bibliohablante de lengua española,
desde “Freud hacia el parlêtre” en cada cita hallar esa marca. Se trata de una Rayuela en
donde el buscador advertirá que el índice es un hilvanado, un trayecto de enseñanza,
una vez situado el concepto de parlêtre, retroactivamente se desliza por el inconsciente, el
cuerpo hablante, el sinthome y por el inédito concepto de escabel. Ha sido una decisión
detenerse en el tramo final de la obra de J. Lacan, en ella encontramos desconcierto y
opacidad, pero a su vez se trata de un momento decisivo en su pensamiento, de una
elaboración sobre su práctica. De esta manera, inspirados en la invitación a componer
una sinfonía psicoanalítica, a la nota “la’’ respondemos con un “si’’. Y como no-todo
puede ser hallado, es la vía inconclusa el camino que le proponemos al lector.
Esta segunda etapa de la bibliohablante la cita es con los autores de la Escuela Una.
En cada uno de ellos se puede constatar la diversidad de estilos e interpretaciones,
los compases de una escritura original. Lo inédito que resuena en cada autor se
destaca por la trasmisión de una orientación lacaniana en continuidad con la época.
La idea esencial de la búsqueda y edición se centró en la dimensión clínica
del concepto parlêtre, es desde donde creemos se pueden palpar las razones
de su invención. Fue a partir de los hallazgos que se crea “el pasehablante”, un
resultado contingente en donde se destacaba la experiencia del­pase–parlêtre.
Si la introducción de la bibliohablante fue iniciada con una cita de J. Borges,
aquí el autor elegido es un músico y escritor que se consagró por el cuento
“el cascanueces”. En ella se encuentra la resonancia de aquello que enseño y
causo esta búsqueda: analizar a un parlêtre es la partitura de un cuerpo hablante.
Definitivamente, podemos decir que la conclusión de este trabajo nos permite celebrar lo
que ha sido esta gran red de transferencias AMP!
Débora Nitzcaner
[Coordinación y Edición]
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Débora Nitzcaner
[Coordinación y Edición]
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
Sumario
1.
Sigmund Freud
II/ a.3 Otros Textos
14
II /b.1 El Seminario
26
26
I /a. Afecto, Defensa, Trauma
14
II /b.2 Otros Escritos
31
I /b. Sexualidad, Libido, Sublimación
16
II /b.3 Otros Textos
32
I /c. Represión primaria, Pulsión, Fijación
18
I /d. Correspondencias
21
2.
Jacques Lacan
II /a. Parlêtre
10
II /b. Inconsciente
25
II /c. Cuerpo hablante
II /c.1 El Seminario
33
33
II /c.2 Otros Escritos
37
II /c.3 Otros Textos
38
II /d. Sinthome
39
39
II /d.1 El Seminario
22
II /a.1 El Seminario
22
22
II /a.2 Otros Escritos
24
II /e. Escabel
II /e.1 El Seminario
42
42
II /e.2 Otros Escritos 43
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
3.
Jacques–Alain Miller
III /a. Parlêtre 45
III /a.1 Los Cursos Psicoanalíticos
45
45
III /a.2 Otros Textos
56
III /b. Inconsciente III /b.1 Los Cursos psicoanalíticos III /c. Cuerpo hablante
Otros autores
IV /a. Parlêtre
IV /b. Pasehablante
79
79
113
58
58
III /c.1 Los Cursos psicoanalíticos
62
62
III /c.2 Otros Textos
67
III /d. Sinthome III /d.1 Los Cursos psicoanalíticos
68
68
III /d.2 Otros Textos
76
III /e. Escabel 12
4.
III /e.1 Los Cursos psicoanalíticos
76
76
III /e.2 Otros Textos
78
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Sigmund Freud
I /a. Afecto, Defensa, Trauma
Tratamiento psíquico. Tratamiento del alma (1890). Tomo I, Obras
Completas Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“En ciertos estados anímicos denominados afectos, la coparticipación del cuerpo
es tan llamativa y tan grande que muchos investigadores del alma dieron en
pensar que la naturaleza de los afectos consistía sólo en estas exteriorizaciones
corporales (…).” p. 118
“Los afectos en sentido estricto se singularizan por una relación muy particular
con los procesos corporales; pero, en rigor, todos los estados anímicos, aún los
que solemos considerar procesos de pensamiento, son en cierta medida afectivos, y
de ninguno están ausentes las exteriorizaciones corporales (…).” p. 119
Extractos de las notas de Freud a su traducción de Charcot, Leçons du
mardi (1892 – 1994). Tomo I, Obras Completas Amorrortu. Buenos
Aires, Argentina
“Un trauma se podría definir como un aumento de excitación dentro del sistema
nervioso, que este último no es capaz de tramitar suficientemente mediante
reacción motriz.” p. 172
Algunas consideraciones con miras a un estudio comparativo de
las parálisis motrices orgánicas e histéricas (1893). Tomo I, Obras
Completas Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“(…) la lesión de las parálisis histéricas debe ser por completo independiente de
la anatomía del sistema nervioso, puesto que la histeria se comporta en sus parálisis
y otras manifestaciones como si la anatomía no existiera, o como si no tuviera noticia
alguna de ella. (…) Toma los órganos en el sentido vulgar popular del nombre
que llevan (…).” p. 206
14
Sigmund Freud
1.
EL CUERPO HABLANTE
“(…) la parálisis del brazo consiste en el hecho de que la concepción del brazo
no puede entrar en asociación con las otras ideas que constituyen al yo del cual
el cuerpo del individuo forma una parte importante. La lesión seria entonces la
abolición de la accesibilidad asociativa de la concepción del brazo. Este se comporta
como si no existiera para el juego de las asociaciones.” p. 208
Estudios sobre la histeria (1893 – 1994). Tomo II, Obras Completas
Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
Sobre el mecanismo psíquico de fenómenos histéricos: comunicación
preliminar.
“En el caso de neurosis traumática, la causa eficiente de la enfermedad no es la
ínfima lesión corporal; lo es, en cambio el afecto de horror, el trauma psíquico.”
p. 31
“(…) debemos aseverar que el trauma psíquico, o bien el recuerdo de él, obra al
modo de cuerpo extraño que aún mucho tiempo después de su intrusión tiene
que ser considerado como de eficacia presente (…).” p. 32
“(…) el ser humano encuentra en el lenguaje un sustituto de la acción; con su
auxilio el afecto puede ser “abreaccionado” casi de igual modo.” p. 34
“(…) se entiende el modo en que produce efectos curativos el método de
psicoterapia (…) Cancela la acción eficiente de la representación originariamente
no abreaccionada, porque permite a su afecto estrangulado el decurso a través
del decir (…).” p. 42
Historiales clínicos
Señora Emmy Von N. 40 años de Livonia
“Puntualicé tomando ejemplos de la vida corriente, que una investidura
(Besetzun) así de una representación con afecto no tramitado conlleva siempre
cierto grado de inaccesibilidad asociativa, de inconciliabilidad con nuevas
investiduras.” p. 108
Señorita Elisabeth Von R. “Me resolví, pues, a plantear,
a la conciencia ensanchada de la enferma, la pregunta directa por la impresión
psíquica a que se anudó la génesis primera de los dolores en las piernas.”
p. 160
“(…) la representación erótica fue reprimida (esforzada al desalojo) de la
asociación, y el afecto a ella adherido fue aplicado para elevar o reanimar un
dolor corporal presente de manera simultánea (…). Era, pues, el mecanismo de
una conversión con el fin de la defensa (…).” p. 162
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Sobre la psicoterapia de la histeria
“No dudo de que al destino le resultaría por fuerza más fácil que a mi librarlo
de su padecer. (…) es grande la ganancia si conseguimos mudar su miseria
histérica en infortunio ordinario. Con una vida anímica restablecida usted podrá
defenderse mejor de este último.” p. 309
Fragmento de análisis de un caso de histeria (1905). Tomo VII, Obras
Completas Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“¿Son los síntomas de la histeria de origen psíquico o somático? (…) Hasta
donde yo alcanzo a verlo, todo síntoma histérico requiere de la contribución
de las dos partes. No puede producirse sin cierta solicitación somática (…) Pero
no se produce más que una sola vez – y está en el carácter del síntoma histérico
la capacidad de repetirse – si no posee un significado psíquico, un sentido. El
síntoma histérico no trae consigo ese sentido, sino que le es prestado, es soldado
con él y en cada caso puede ser diverso de acuerdo con la naturaleza de los
pensamientos sofocados (…).” p. 37
I /b. Sexualidad, Libido, Sublimación
Tres ensayos de teoría sexual (1905). Tomo VII, Obras Completas,
Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“El sustituto del objeto sexual, en general, una parte del cuerpo muy poco
apropiada a un fin sexual (el pie, los cabellos)…” p. 139
“(…) cualquier otro sector de piel o de mucosa puede prestar los servicios de
una zona erógena, para lo cual es forzoso que conlleve una cierta aptitud. Por
tanto, para la producción de una sensación placentera, la cualidad del estímulo
es más importante que la complexión de las partes del cuerpo.” p. 166
La perturbación psicógena de la visión según el psicoanálisis (1910).
Tomo XI, Obras Completas, Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“(…) si vemos a un órgano que de ordinario sirve a la percepción sensorial
comportarse directamente como un genital a raíz de la elevación de su papel
erógeno, no consideraremos improbables aún alteraciones tóxicas en él.”
Sigmund Freud
“En la señorita Elisabeth von R. el mecanismo psíquico de la simbolización no
se situaba en primera línea, él no había creado la abasia (…).’’ p. 167
EL CUERPO HABLANTE
Introducción del narcisismo (1914). Tomo XIV, Obras Completas
Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“(…) el yo tiene que ser desarrollado. Ahora bien, las pulsiones autoeróticas son
iniciales, primordiales; por tanto, algo tiene que agregarse al autoerotismo, una
nueva acción psíquica, para que el narcisismo se constituya.” p. 74
“Llamemos a la actividad por la cual un lugar del cuerpo envía a la vida anímica
estímulos de excitación sexual su erogenidad (…).” p. 81
“La sublimación es un proceso que atañe a la libido de objeto y consiste
en que la pulsión se lanza a otra meta, distante de la satisfacción sexual. La
idealización es un proceso que envuelve al objeto; sin variar de naturaleza, éste es
engrandecido y realzado psíquicamente.” p. 91
“(…) La formación del ideal del yo se confunde a menudo, en detrimento de
la comprensión, con la sublimación de la pulsión. Que alguien haya trocado su
narcisismo por la veneración de un elevado ideal del yo no implica que haya
alcanzado la sublimación de sus pulsiones libidinosas.” p. 91
“(…) El ideal del yo reclama por cierto esa sublimación, pero no puede forzarla;
la sublimación sigue siendo un proceso especial cuya iniciación puede ser
incitada por el ideal, pero cuya ejecución es por entero independiente de tal
incitación.’’ p. 91
“(…) la formación de ideal y la sublimación contribuyen en proporciones
por entero diversas en la causación de la neurosis. (…) la formación del ideal
aumenta las exigencias del yo y es el más fuerte favorecedor de la represión. La
sublimación constituye aquella vía de escape que permite cumplir esa exigencia
sin dar lugar a la represión.” p. 91-92
Conferencias de introducción al Psicoanálisis (1916 – 1917)
Conferencia 22a. Tomo XVI, Obras Completas Amorrortu. Buenos
Aires, Argentina
“(…) las mociones pulsionales de carácter sexual son extraordinariamente
plásticas (…) Pueden remplazarse unas a otras, una puede tomar sobre sí la
intensidad de las otras; cuando la satisfacción de una es frustrada por la realidad,
la de otra puede ofrecer un resarcimiento pleno. Se comportan entre sí como
una red de vasos comunicantes (…).” p. 314
p. 215
16
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“En la esquizofrenia se observa, (…) una serie de alteraciones del lenguaje, (…)
muchas veces pasa al primer plano una referencia a órganos o a innervaciones
del cuerpo. (…) semejantes a las formaciones sustitutivas de la histeria o
de la neurosis obsesiva, la relación entre el sustituto y lo reprimido exhibe
peculiaridades que nos resultarían sorprendentes en los casos de estas dos
neurosis mencionadas.” p. 194
El yo y el ello (1923). Tomo XIX, Obras Completas Amorrortu.
Buenos Aires, Argentina
“(…) La trasposición así cumplida de la libido de objeto en libido narcisista
conlleva, manifiestamente, una resignación de las metas sexuales, una
desexualización y, por tanto, una suerte de sublimación. (…) ¿No es este el
camino universal hacia la sublimación? ¿No se cumplirá toda sublimación por
la mediación del yo, que primero muda la libido de objeto en libido narcisista,
para después, acaso ponerle {setzen} otra meta?” p. 32
I /c. Represión primaria, Pulsión, Fijación
Pulsiones y destinos de pulsión (1915). Tomo XIV, Obras Completas
Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“(…) la «pulsión» nos aparece como un concepto fronterizo entre lo anímico
y lo somático, como un representante psíquico de los estímulos que provienen
del interior del cuerpo y alcanzan el alma, como una medida de la exigencia
de trabajo que es impuesta a lo anímico a consecuencia de su trabazón con lo
corporal.” p. 117
La represión (1915). Tomo XIV, Obras Completas Amorrortu.
Buenos Aires, Argentina
“(…) tenemos razones para suponer una represión primordial, una primera fase
de la represión que consiste en que a la agencia representante {Representanz}
psíquica (agencia representante representación) de la pulsión se le deniega la
admisión en lo conciente. Así se establece una fijación; a partir de ese momento
la agencia representante en cuestión persiste inmutable y la pulsión sigue ligada a
ella.” p. 14
18
Sigmund Freud
Lo inconsciente (1915). Tomo XIV, Obras Completas Amorrortu.
Buenos Aires, Argentina
EL CUERPO HABLANTE
Lo inconsciente (1915). Tomo XIV, Obras Completas Amorrortu.
Buenos Aires, Argentina
“Así como Kant nos alertó para que no juzgásemos la percepción como idéntica
a lo percibido incognoscible, descuidando el condicionamiento subjetivo de ella,
así el psicoanálisis nos advierte que no hemos de sustituir el proceso psíquico
inconsciente, que es el objeto de la conciencia, por la percepción que ésta hace
de él.” p. 167
“De igual modo, el aludido mecanismo de sustracción de una investidura
preconsciente no funcionaria cuando estuviera en juego la figuración de la
represión primordial; es que en ese caso está presente una representación
inconsciente que Aún no ha recibido investidura alguna del Prcc y, por lo tanto,
ella no puede serle sustraída.” p. 178
El yo y el ello (1923). Tomo XIX, Obras Completas Amorrortu.
Buenos Aires, Argentina
“El yo es sobre todo una esencia–cuerpo; no es sólo una esencia–superficie, sino,
él mismo, la proyección de una superficie.” p. 27
“Al principio, toda libido esta acumulada en Ello, en tanto el yo se encuentra
todavía en proceso de formación o es endeble. El Ello envía una parte de esa
libido a investiduras eróticas de objeto, luego de lo cual el yo fortalecido procura
apoderarse de esa libido de objeto e imponerse al ello como objeto de amor.”
p. 47
Inhibición, síntoma y Angustia (1925). Tomo XX, Obras Completas
Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“(…) la función yoica de un órgano se deteriora cuando aumenta su erogenidad,
su significación sexual.” p. 85
“Un instructivo ejemplo de este tipo de inhibición general intensiva, de corta
duración, pude observarlo en un enfermo obsesivo que caía en una fatiga
paralizante, de uno a varios días, a raíz de ocasiones que habrían debido
provocarle, evidentemente, un estallido de ira.” p. 86
“En otro escrito he puntualizado que la mayoría de las represiones con que
debemos habérnosla en el trabajo terapéutico son casos de esfuerzo de dar caza.
Presupone represiones primordiales producidas con anterioridad, y que ejercen su
influjo de atracción sobre la situación reciente.” p. 90
“(…) percibimos en la angustia sensaciones corporales más determinadas que
referimos a ciertos órganos. Puesto que aquí no nos interesa la fisiología de la
19
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
«31º Conferencia. La descomposición de la personalidad psíquica»,
Nuevas conferencias de introducción al psicoanálisis (1933). Tomo
XXII, Obras Completas Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“El yo puede tomarse a sí mismo por objeto, tratarse como a los otros objetos,
observarse, criticarse, y Dios sabe cuántas otras cosas podrá emprender consigo
mismo. Para ello, una parte del yo se contrapone al resto. El yo es, entonces,
escindible (…).” p. 54
“(…) esa instancia, una de cuyas funciones sería la conciencia moral y otra la
observación de sí (…) designaré en lo sucesivo «superyó» a esa instancia situada
en el interior del yo.” p. 55-56
“(…) grandes sectores del yo y del superyó pueden permanecer inconscientes,
son normalmente inconscientes.” p. 65
I /d. Correspondencias
Fragmentos de la correspondencia con Fliess (1896). Tomo I, Obras
Completas Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
Manuscrito K. “(…) la inclinación a la defensa se vuelve nociva
cuando se dirige contra representaciones que pueden desprender un
displacer nuevo también siendo recuerdos (…).” p. 261
Carta 52 “(…) la memoria no preexiste de manera simple, sino
múltiple, está registrada en diversas variedades de signos.” p. 27
“(…) una defensa patológica, en cambio, sólo existe contra una huella mnémica
todavía no traducida de una fase anterior.” p. 276
“(…) las fantasías sirven a la tendencia de refinar los recuerdos, de sublimarlos.
Son establecidas por medio de las cosas que fueron oídas y que se valorizan con
posterioridad, y así combinan lo vivenciado y lo oído, lo pasado con lo visto por
uno mismo (…).” p. 289
“Imaginamos que en su extremo [el ello] está abierto hacia lo somático, ahí
acoge dentro de sí las necesidades pulsionales que en él hallan su expresión
psíquica (…) no tiene ninguna organización, no concentra una voluntad global,
sólo el afán de procurar satisfacción a las necesidades pulsionales con observancia
del principio del placer.” p. 68-69
Cartas a Wilhelm Fliess (1887 – 1904). Editorial Amorrortu, 2008
“Así, pulsionado por el ello, apretado por el superyó, repelido por la realidad, el
yo pugna por dominar su tarea económica, por establecer la armonía entre las
fuerzas e influjos que actúan dentro de él y sobre él (…).” p. 73
Carta 98 “El excedente sexual impide la traducción (…) no puede crear
Análisis terminable e interminable (1937). Tomo XXIII, Obras
Completas Amorrortu. Buenos Aires, Argentina
“(…) el análisis hace que el yo madurado y fortalecido emprenda una revisión
de estas antiguas represiones; algunas serán liquidadas y otras reconocidas, pero a
estas se las edificará de nuevo sobre un material más sólido. Estos nuevos diques
tienen una consistencia por entero diversa que los anteriores.” p. 230
20
Sigmund Freud
angustia, bástenos con destacar algunos representantes de esas sensaciones: la
más frecuentes y nítidas son las que sobrevienen en los órganos de la respiración
y en el corazón.’’ p. 125
EL CUERPO HABLANTE
Carta 52 “La neurosis alimentaria paralela a la melancolía es la anorexia.
Me parece que la famosa anorexia nervosa de las niñas jóvenes es una melancolía
en caso de sexualidad no desarrollada. (…) pérdida de apetito = en lo sexual,
pérdida de libido.” p. 99
todavía ninguna represión, para ello hace falta la cooperación de la defensa, pero
sin excedente sexual la defensa no produce neurosis alguna.” p. 198
Carta 262 “Sueño e histeria no te decepcionará eventualmente. El
principal asunto en él sigue siendo lo psicológico, el aprovechamiento del sueño,
algunas particularidades de los pensamientos inconsciente. Sobre lo orgánico
sólo hay lamparazos, justamente sobre las zonas erógenas y la bisexualidad.”
p. 477
21
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Jacques Lacan
II /a. Parlêtre
II /a.1 El Seminario
Sujeto del significante / Ser hablante / lalengua
El Seminario, Libro XX. Aún (1972 – 1973). Buenos Aires, Editorial
Paidós, 1992
“Porque hay inconsciente, a saber, lalengua en tanto que por cohabitar con ella
se define un ser llamado el ser que habla, puede el significante estar llamado a
ser signo. Entiendan el signo como les plazca, incluso como el thing del inglés, la
cosa.” p. 171
“La contingencia, la encarné en el cesa de no escribirse. Pues no hay allí más
que encuentro, encuentro, en la pareja, de los síntomas, de los afectos, de todo
cuanto en cada quien marca la huella de su exilio, no como sujeto sino como
hablante, de su exilio de la relación sexual.” p. 175
El Seminario, Libro XXI. Los no incautos yerran (1973 – 1974).
Inédito en español
Clase del 13 Noviembre 1973 “(…) Es la definición del sujeto
lo que aquí doy. Del sujeto tal como lo constituye el inconsciente. Lo descifra
aquél que por ser hablante está en posición de proceder a esa operación, lo que
inclusive hasta cierto punto es forzoso, hasta que alcance un sentido. Y es allí
que se detiene.”
Clase del 13 Noviembre 1973 “(…) Y bien, allí está apuntado lo
que tengo que decirles, considerando la diferencia que se enhebra a lo que ocurre
con los no incautos (les non dupes). Si los no incautos (les non dupes) son aquéllos
o aquéllas que se rehúsan a la captura del espacio del ser hablante (…) hay algo
22
Jacques Lacan
2.
EL CUERPO HABLANTE
que es preciso saber imaginar: la absoluta necesidad que de ello resulta, de una
no errancia sino error.”
Clase del 20 noviembre 1973 “El lenguaje está hecho así. Es algo
que, por mucho que extremen ustedes su cifrado, nunca llegará a soltar lo que
tiene que ver con el sentido, porque él está allí en el lugar del sentido (…) Y lo
que hace que la relación sexual no pueda escribirse es justamente ese agujero
allí, que tapa todo el lenguaje como tal, el acceso del ser hablante a algo que se
presenta efectivamente, como en cierto punto que toca a lo real (…).”
Clase del 15 enero 1974 “El saber, en tanto que inconsciente, en
tanto que en nosotros ‘eso trabaja’ parece, pues, implicar una suposición (…)
se ‘supone’ que existe algo que se llama, que yo he designado, en fin, como el
ser hablante. Lo cual es un pleonasmo, porque no hay ser sino por hablar; si no
hubiera el verbo ser, no habría ser en absoluto.”
Clase del 11 junio 1974 “No hay relación natural. No es que si fuera
natural se la podría escribir, sino que justamente no se la puede escribir porque
no hay nada natural en la relación sexual de ese ser que es menos ser hablante
que ser hablado.”
Sentido / Habla – ser / Goce fálico
El Seminario, Libro XXII, R.S.I, (1974 – 1975). Inédito en español
Clase del 17 diciembre de 1974 “Hablo aquí de la debilidad
mental de los sistemas de pensamiento que suponen (…) pues la metáfora de
la relación sexual, no existente bajo ninguna forma, bajo la de la copulación,
particularmente ‘grotesca’ en el parlêtre, que está reputado de ‘representar’ la
relación que yo digo que no existe humanamente.”
Clase del 15 abril 1975 “El hablaser, no está extendido, pero es
como el moho, eso tiene tendencia a la expansión. Entonces contentémonos con
decir que el inconsciente, es lo real en tanto que está afligido en el hablaser por
la única cosa que haga agujero, que nos asegura agujero, a saber lo que llamo lo
simbólico, encarnándolo en el significante del cual, a fin de cuentas, no hay otra
definición que el agujero. El significante hace agujero.”
El Seminario, Libro XXIII El sinthome (1975 – 1976). Buenos Aires,
Editorial Paidós, 2006
“(…) Este nudo calificable de borromeo no se puede cortar sin disolver el
mito del sujeto – del sujeto como no supuesto, es decir, como real –, al que
23
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) En cambio, el goce fálico se sitúa en la conjunción de lo simbólico con lo
real. Esto en la medida en que, en el sujeto que tiene su soporte en el parlêtre,
que es eso que designo como el inconsciente, está el poder de conjugar la
palabra con cierto goce, ese llamado fálico, que se experimenta como parasitario,
debido a la palabra misma, debido al parlêtre. Inscribo, pues, aquí el goce fálico
como contrapeso a lo que ocurre con el sentido. Es el lugar de lo que el parlêtre
designa, a conciencia, como poder.” p. 56
“¿Qué es un hecho? Es justamente él quien lo hace. Solo hay hecho por el
hecho de que el parlêtre lo diga. No hay otros hechos más que los que el parlêtre
reconoce como tales diciéndolos (…).” p. 64
El Seminario, Libro XXIV, Lo no sabido que sabe de la una–
equivocación se ampara en la morra (1976 – 1977). Inédito en
español
Clase del 14 diciembre 1976 “(…) El hombre habla–ser, como lo
he dicho, lo que no quiere decir otra cosa que él habla significante, con lo cual la
noción de ser se confunde. Eso es real.”
Clase del 11 enero 1977 “(…) El inconsciente, es que en suma uno
habla –si es que hay parlêtre – solo. Uno habla solo porque uno no dice jamás
sino una sola y misma cosa – salvo si uno se abre a dialogar con un psicoanalista.
No hay medio de hacer otra cosa que recibir de un psicoanalista lo que molesta
de su defensa.”
Clase del 8 marzo 1977 “(…) no solamente hay el parlêtre, sino
que también hay el parlêtre, en otros términos, que todo eso no existiría si no
hubiera el funcionamiento de esta cosa grotesca que se llama el pensamiento.”
II /a.2 Otros Escritos
Buenos Aires, Editorial Paidós, 2012
El Atolondradicho (1972)
“(…) pudo arreglárselas con todo lo que le viniese del inconsciente, hasta el
momento en que, al decirlo ‘estructurado como un lenguaje’, permití pensar que
de tanto hablar, era poco lo dicho: que eso habla y habla (cause), pero que eso es
todo lo que eso sabe hacer. Tan poco me comprendieron, mejor así, que puedo
contar que un día me lo van a objetar.” p. 492
24
Jacques Lacan
no distingue de cada cuerpo aislable como parlêtre, cuerpo que solo tiene un
estatuto respetable, en el sentido común de la palabra, por este nudo.” p. 38
EL CUERPO HABLANTE
“Vale decir que hace falta el decir primero (le dire d`abord). El “significado” del
decir solo es, como pienso haberlo hecho sentir desde un comienzo con mis
frases, ex–sistencia al dicho (aquí al dicho de que no todo puede decirse). O sea:
que no es el sujeto, el cual es efecto de dicho.” p. 496
“Ahí está el filo tajante de nuestra enunciación de partida. El dicho primero
idealmente espontáneo, del analizante solo tiene sus efectos de estructura en
tanto “parsea” (parsoit) el decir, dicho de otra manera, que la interpretación haga
apareser (parêtre).” p. 512
Introducción a la edición alemana de un primer volumen de los
Escritos (1973)
“Hay buena suerte. Es más, no hay sino eso: ¡el azar! Los ‘seres’ hablantes son
felices, felices por naturaleza, es incluso lo que les queda de ella.” p. 582
Joyce el Síntoma (1975)
“(…) De allí mi expresión parlêtre [hablaser], que sustituirá al ICS de Freud
(inconsciente, que se lee así): apártate de ahí para que yo me instale, pues.”
p. 592
“Es para no perderlo, ese salto del sentido, que he enunciado ahora que hay que
mantener que el hombre tiene un cuerpo, o sea que habla con su cuerpo, dicho
de otro modo, que parlêtre por naturaleza. Así surgido como cabez(a)ón del arte,
(…).” p. 592
II/ a.3 Otros Textos
Respuesta de Lacan a una pregunta de Marcel Ritter. Strasbourg,
1975. Estudios de psicosomática, vol. 2. Buenos Aires, Editorial
Atuel, 1994
“Es cierto que sólo el parlêtre, el ser parlante puede llegar a la noción de la
que partí para lo que es del inconsciente. Hay algo que no es por nada que
se resume en una cicatriz, en un lugar del cuerpo que hace nudo y que este
nudo es puntuable, no más en su lugar seguramente, ya que hay ahí el mismo
desplazamiento que está ligado a la función y al campo de la palabra.” p. 12
“Digo el falo, que no es la misma cosa que lo que designamos por el órgano que
tiene, en el parlêtre especialmente, una importancia prevalente.” p. 14
25
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“No se puede decir que esta no–relación sexual, que considero como
fundamental en lo real para lo que es del parlêtre, no se puede decir que esto
corresponde a un pequeño despertar del lado de la universalidad de la muerte.”
p. 17
El triunfo de la religión (1974). Precedido de “Discurso a los
Católicos”. Buenos Aires, EditorialPaidós, 2005
“El parlêtre es una manera de expresar el inconsciente. El hecho completamente
imprevisto y totalmente inexplicable de que el hombre sea un animal parlante,
saber lo que es, con qué se fabrica esta actividad de la palabra, es el tema sobre
el que intento echar alguna luz (…) Está muy ligado a ciertas cosas que Freud
consideró como sexualidad. En efecto, existe una relación, pero esto se vincula
con la sexualidad de una manera muy particular.” p. 87
Conferencias en Estados Unidos (1975). Inédito en español. Texto
original en francés publicado en Scilicet Nº6 y Nº7, Editions Du
Seuil, París
“¿Qué ocurre después de haber distinguido ese simbólico, este imaginario y
este real y haberlo especificado, con el hecho que lo simbólico sea nuestro lazo
al lenguaje y que es por esta distinción que somos seres parlantes? El decir que
somos seres parlantes es un círculo vicioso, nosotros somos parlêtre, palabra que
tiene la ventaja de sustituir al inconsciente (…).” p. 9
II /b. Inconsciente
II /b.1 El Seminario
Inconsciente/ Pulsión
El Seminario, Libro XI, Los cuatro conceptos fundamentales del
psicoanálisis (1964 – 1965). Buenos Aires, Editorial Paidós, 2003
“(…) cuando se remitan a los textos de Freud. Fíjense de dónde parte él –de
la Etimología de las neurosis– y ¿qué encentra en el hueco, en la ranura, en la
26
Jacques Lacan
“Parece en todo caso que la noción, que no es por nada que Freud la designó
con el término de función fálica, introduzca irreductiblemente en el parlêtre,
en la relación entre los sexos, un tercero, cuya importancia no es menor en una
mujer (…).” p. 14-15
EL CUERPO HABLANTE
hiancia característica de la causa? Algo que pertenece al orden de lo no realizado.
(…) El inconsciente se manifiesta primero como algo que está a la espera, en el
circulo, diría yo, de lo no nacido.” p. 30
“La relación con el Otro hace surgir, para nosotros, lo que representa la laminilla
– no la polaridad sexuada, la relación de lo masculino con lo femenino, sino la
relación del sujeto viviente con lo que pierde por tener que pasar por el ciclo
sexual para reproducirse.” p. 206
“Así explico la afinidad esencial de toda pulsión con la zona de la muerte y
concilio las dos caras de la pulsión –la pulsión que, a un tiempo, presentifica la
sexualidad en el inconsciente y representa, en su esencia, a la muerte.” p. 207
Significante/ Escritura/ Letra
El Seminario, Libro XVIII De un discurso que no fuera del semblante
(1970 – 1971). Buenos Aires, Editorial Paidós, 2011
“¿Quién no se da cuenta de que el mito del Edipo resulta necesario para designar
lo real? Porque es exactamente lo que él pretende hacer. O, más exactamente,
aquello a lo que el teórico se limita cuando formula este hipermito, es que a lo
real, hablando con propiedad ¿se encarne en qué?, ¿en el goce sexual como qué?
Como imposible (…).” p. 32
“La escritura no calca el significante. No se remonta allí más que para nombrase,
pero exactamente de la misma manera que ocurre con todas las cosas que
nombra la batería significante después de haberlas enumerado. (..) La escritura,
la letra, está en lo real, y el significante, en lo simbólico.” p. 114
“Lo que Freud demuestra, lo que aportó de decisivo es que, por medio del
inconsciente, vislumbramos que todo lo que atañe al lenguaje tiene que ver con
el sexo, está en cierta relación con el sexo, pero especialmente en el hecho de que
la relación sexual no puede, por lo menos hasta ahora, inscribirse de ninguna
manera.” p. 121
El Seminario, Libro XIX…, O peor (1971 – 1972). Buenos Aires,
Editorial Paidós, 2012
“Por lo demás, la cuestión no es la del descubrimiento del inconsciente, que en
lo simbólico tiene su materia preformada, sino la de la creación del dispositivo
en el que lo real toca a lo real, es decir, lo que articulé como el discurso
analítico.” p. 236-237
27
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
El Seminario, Libro XX, Aún (1972 – 1973). Buenos Aires, Editorial
Paidós, 1992
“Comienzo con mis fórmulas difíciles, o que supongo tales: – el inconsciente
no es que el ser piense, como lo implica, sin embargo, cuanto de él se dice en la
ciencia tradicional – el inconsciente es que el ser, hablando, goce y, agrego yo, no
quiera saber nada más de eso. Añado que esto quiere decir: no saber absolutamente
nada.” p. 128
“Lalengua sirve para otras cosas muy diferentes de la comunicación. Nos lo ha
mostrado la experiencia del inconsciente, en cuanto está hecho de lalengua, esta
lalengua que escribo en una sola palabra, como saben, para designar lo que es el
asunto de cada quién, lalengua llamada, y no en balde, materna.” p. 166
“Si dije que el lenguaje es aquello como lo cual el inconsciente está estructurado,
es de seguro porque el lenguaje, en primer lugar, no existe. El lenguaje es lo que
se procura saber respecto de la función de lalengua.” p. 167
inconsciente quizás sea disarmónico, pero que tal vez nos lleva un poco más a
ese real que a la muy poca realidad que es la nuestra, la del fantasma; que tal vez
nos lleva más allá, al puro real.”
El Seminario, Libro XXII, RSI (1974 – 1975). Inédito en español
Clase del 17 diciembre 1974 “Lo que Freud nos aporta en lo
concerniente al Otro, es esto– no hay Otro más que al decirlo, pero es imposible
decirlo completamente. Hay una Urverdrängt, un inconsciente irreducible,
decirlo no solamente se define como imposible, sino que introduce como tal la
categoría de lo imposible.”
Clase del 21 enero 1975 “El uno de sentido, es el ser, el ser
especificado por lo inconsciente en tanto que ex–siste por lo menos al cuerpo,
pues si hay una cosa impresionante es que ex–iste en la discordia. No hay nada
en el inconsciente que haga acuerdo al cuerpo. El inconsciente es discordante. El
inconsciente es lo que por hablar, determina al sujeto en tanto que ser (…).”
Clase del 15 abril 1975 “Solo el inconsciente permite ver cómo hay
“El lenguaje sin duda está hecho de lalengua. Es una elucubración de saber
sobre lalengua. Pero el inconsciente es un saber, una habilidad, un savoir–
faire con lalengua. Y lo que se sabe hacer con lalengua rebasa con mucho aquello
de que puede darse cuenta en nombre del lenguaje.” p. 167
un saber, no en lo real, ya es mucho que esté soportado por este simbólico (…)
Lo Simbólico [es cierto] gira en redondo, pero no consiste más que en el agujero
que hace.”
El Seminario, Libro XXI, Los no incautos yerran (1973 – 1974).
Inédito en español
El Seminario, Libro XXIII El Sinthome (1975 – 1976). Buenos Aires,
Editorial Paidós, 2006
Clase del 11 junio 1974 “El inconsciente es parasitario. Un parásito
del que parece que cierta especie entre otras se adapta muy bien, (…) el ser
hablante lo habita pero no sin toda clase de inconvenientes.”
Clase del 11 junio 1974 “Porque la experiencia analítica nos muestra
que alrededor de esa forma grotesca se pone a pivotear esa suerte de suplencia
(…) el sentido no es sexual sino porque el sentido sustituye justamente a lo
sexual que falta. (…) no que el sentido refleje lo sexual sino que lo suple.”
Clase del 11 junio 1974 “Lalengua tiene todo el parasitismo que el
goce fálico con relación a todos los otros goces, y es ella la que determina como
parasitario en lo real lo que tiene que ver con el inconsciente.”
Clase del 11 junio 1974 “Pero es quizás en ese andar [erre] (…)
que podremos apostar a encontrar lo real, un poco después; advertir que el
28
Jacques Lacan
Saber hacer con lalengua
EL CUERPO HABLANTE
Inconsciente / Real
“(…) el goce fálico se sitúa en la conjunción de lo simbólico con lo real. Esto
en la medida en que, el sujeto que tiene su soporte en el parlêtre, que es eso que
designo como el inconsciente, está el poder de conjugar la palabra con cierto
goce, ese llamado fálico, que se experimenta como parasitario, debido a la
palabra misma, debido al parlêtre.” p. 56
“Se trata de situar qué tiene que ver el sinthome con lo real, lo real del
inconsciente, si es cierto que el inconsciente es real. ¿Cómo saber si el
inconsciente es real o imaginario? Esta es la pregunta. Este participa de un
equívoco entre los dos.” p. 99
“El psicoanálisis, en suma, no es más que cortocircuito que pasa por el sentido–
el sentido como tal, que hace poco definí mediante la copulación del lenguaje,
puesto que asiento allí el inconsciente, con nuestro propio cuerpo.” p. 120
29
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) En la medida en que el inconsciente conlleva una referencia al cuerpo,
pienso que puede distinguirse la función de lo real.” p. 133
“La antigua noción del inconsciente, la Unerkannt se apoyaba precisamente en
nuestra ignorancia de lo que pasa en nuestro cuerpo. El inconsciente de Freud
es justamente la relación que hay entre un cuerpo que nos es ajeno (…) y el
inconsciente, siendo estas dos cosas de todos modos equivalentes una a la otra.”
p. 147
“Se lee claramente en Joyce que la epifanía es lo que hace que, gracias a la falta,
se anuden inconsciente y real.” p. 152
El Seminario, Libro XXIV, Lo no sabido que sabe de la unaequivocación se ampara en la morra (1976 – 1977). Inédito en
español
Clase del 16 noviembre 1976 “El inconsciente no tiene nada
que ver con la inconsciencia, ¿por qué, en consecuencia, no traducirlo muy
tranquilamente por l’une–bévue (la una equivocación)?”
Clase del 16 noviembre 1976 “Un sueño, constituye una
equivocación (bévue), tal como un acto fallido o un chiste, excepto que uno se
reconoce en el chiste porque él se sostiene en lo que llamé la lengua. El interés
del chiste para el inconsciente está ligado a la adquisición de la lengua.”
Clase del 16 noviembre 1976 “¿A qué se identifica uno, pues, al
fin del análisis? ¿Se identificaría a su inconsciente? (…) No veo que se pueda dar
un sentido al inconsciente, si no es el de situarlo en este Otro portador de los
significantes que tira los hilos de lo que se llama imprudentemente el sujeto.”
Clase del 11 enero 1977 “El inconsciente es que, en suma, uno
habla –si es que hay parlêtre– solo. Uno habla sólo, porque uno no dice sino
una sola y misma cosa – salvo si uno se abre a dialogar con un psicoanalista. No
hay manera de hacer otra cosa que recibir de un psicoanalista lo que molesta la
defensa.”
Clase del 15 febrero 1977 “El inconsciente es una entidad que
intenté definir por lo Simbólico pero que en suma es sólo una entidad más. Una
entidad con la que se trata de savoir y faire [saber hacer “con”]. Savoir y faire no
es lo mismo que un saber, que el saber absoluto (…).”
30
Jacques Lacan
“(…) no hay inconsciente colectivo. Sólo hay inconscientes particulares, en la
medida en que cada uno, a cada instante, da un retoquecito a la lengua que
habla.” p. 131
EL CUERPO HABLANTE
Clase del 26 febrero 1977 “Que Freud que (do) afectado por
lo que las histéricas le contaban, esto nos parece ahora cierto. El inconsciente
se origina del hecho de que la histérica no sabe lo que dice, cuando dice
perfectamente algo por las palabras que le faltan. El inconsciente es un sedimento
de lenguaje.”
Clase del 10 mayo 1977 “(…) l’une–bévue, por el que he traducido
el Unbewusst, que quiere decir en alemán inconsciente. Pero traducido por l’une–
bévue, eso quiere decir muy otra cosa — un escollo, un tropiezo, una patinada
de palabra a palabra. Es precisamente de eso que se trata. (…) Equivocación
(bévue) es el único sentido que nos queda para esta conciencia. La conciencia no
tiene otro soporte que permitir una equivocación (bévue).”
II /b.2 Otros Escritos
Buenos Aires, Editorial Paidós 2012
Radiofonía (1970)
“El inconsciente puede ser como dije la condición de la lingüística. Esta no
tiene sin embargo sobre él el menor influjo. Porque ella deja en blanco lo que
allí hace afecto: el objeto a con el cual, al mostrar que él es la apuesta del acto
psicoanalítico, pensé haber esclarecido cualquier otro acto.” p. 432
“El inconsciente, lo vemos, no es más que un término metafórico para designar
el saber que solo se sostiene por presentarse como imposible, para que a partir de
allí se confirme por ser real (entiendan discurso real)” p. 448
Televisión (1973)
“De hecho el sujeto del inconsciente solo toca el alma por el cuerpo, por
introducir en él el pensamiento, esta vez contradiciendo a Aristóteles. El hombre
no piensa con su alma, como lo imagina El filósofo.” p. 538
“Es ahí donde la psicoterapia, sea la que fuere, se malogra antes de tiempo, no
porque no ejerza algún bien, sino porque vuelve a llevar a lo peor. (…) de ahí
que el inconsciente, si la estructura que se reconoce por hacer el lenguaje en
lalengua, como lo digo, lo dirige bien.” p. 540
“El inconsciente ex–siste a él tanto más cuanto no se atestigua claramente sino en
el discurso de la histérica, en cualquier otro lugar no hay sino su injerto (…).”
p. 544
31
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(… ) ¿el inconsciente implica que se lo escuche? En mi opinión, sí. Pero no
implica seguramente sin el discurso al cual ex–siste que se lo evalúe como saber
que no piensa, ni calcula, ni juzga, lo que no le impide trabajar (en el sueño por
ejemplo). Digamos que es el trabajador ideal…” p. 544
“(…) lo que hay se sopesar es si mi idea de que el inconsciente está estructurado
como un lenguaje permite verificar más seriamente el lenguaje (…).” p. 550
Posfacio al Seminario 11 (1973)
“Ahora bien, lo que se lee, es de eso de lo que hablo, puesto que lo que digo está
consagrado al inconsciente, es decir, a lo que se lee ante todo.” p.
529
II /b.3 Otros Textos
Discurso a los católicos (1960). El triunfo de la religión: precedido de
Discurso a los católicos. Editorial Paidós, Buenos Aires, 2006
“El inconsciente freudiano se caracteriza por ser traducible Aún allí donde
no puede ser traducido, es decir, en cierto punto radical del síntoma –
especialmente del síntoma histérico – que es de la naturaleza de lo indescifrado.”
p. 24
“En efecto, hay en el inconsciente cosas significantes que se repiten y que
corren constantemente a espaldas del sujeto. (…) me preguntarán qué son estos
elementos significantes, y yo responderé que el ejemplo más puro del significante
es la letra, una letra tipográfica.” p. 25
Consideraciones sobre la Histeria (1977). Editorial Universidad de
Granada, 2013
“El inconsciente se origina en el hecho de que la histeria no sabe lo que dice
cuando, de hecho, algo dice con las palabras que le faltan. El inconsciente es un
sedimento de lenguaje.” p. 24
“En el extremo opuesto de nuestra práctica está lo real. Se trata de una idea
límite, la idea de lo que no tiene sentido.” p. 24
“¿Qué podrían ser las representaciones inconscientes?… Lo simbólico consiste
en palabras, nada que ver con representaciones. (…) sí, se puede concebir que
las palabras sean inconscientes. No son más que palabras lo que se cuenta, y a
montones.” p.
32
25-26
Jacques Lacan
EL CUERPO HABLANTE
II /c. Cuerpo hablante
II /c.1 El Seminario
Ser hablante / Corporización / Significante / Goce del
Uno
El Seminario, Libro XIX… O peor (1971 – 1972). Editorial
Paidós, Buenos Aires, 2012
“No tenemos entonces por un lado el sexo, irresistiblemente asociado a la
vida por estar en el cuerpo, el sexo imaginado como la imagen de lo que, en la
reproducción de la vida, sería el amor, y por otro lado el cuerpo en la medida en
que tiene que defenderse de la muerte.” p. 41
“El punto sensible, el punto de surgimiento de algo de lo cual aquí todos
nosotros creemos más o menos formar parte, el ser hablante, por así decirlo, es
esa relación perturbada con su propio cuerpo que se denomina goce.” p. 41
“(…) solo en el hecho de hablar es posible percatarse de que lo que habla, sea
lo que fuere, es lo que goza de sí como cuerpo, lo que goza de un cuerpo al
que vive como lo que ya enuncié con el tu–able, es decir, como tuteable, de un
cuerpo al que tutea y un cuerpo al que dice “máta–te” en la misma línea.”
p. 149
El Seminario, Libro XX, Aún (1972 – 1973). Editorial Paidós, Buenos
Aires, 1991
“El amuro es lo que aparece en señales extrañas sobre el cuerpo. Son esos
caracteres sexuales que vienen de más allá, de ese lugar (…) del cual quiero
señalarles que no se puede decir que sea la vida ya que también acarrea
la muerte, la muerte del cuerpo, porque lo repite. De allí le viene el aún
encuerpo. (…) el cuerpo lleva huellas. Hay huellas en el amuro.” p. 13
“Gozar de un cuerpo cuando ya no hay traje deja intacta la pregunta acerca de lo
que configura al Uno, es decir la de la identificación. (…) Dicho de otra manera,
lo que hay bajo el hábito y que llamamos cuerpo, quizá no es más que ese resto
que llamo objeto a. Lo que hace que la imagen se mantenga es un resto.”
p. 14
“(…) el ser es el goce del cuerpo como tal, es decir como asexuado, ya que
lo que se llama goce sexual está marcado, dominado, por la imposibilidad de
33
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) les propongo sopesar (…) el gozar de un cuerpo, de un cuerpo que
simboliza al Otro, y que acaso consta de algo que permite establecer otra forma
de sustancia, la sustancia gozante. (…) Propiedad del cuerpo viviente sin duda,
pero no sabemos qué es estar vivo a no ser por esto, que un cuerpo es algo que se
goza. No se goza sino corporeizándolo de manera significante.” p. 32
“El significante es la causa del goce. Sin el significante ¿cómo siquiera abordar
esa parte del cuerpo? ¿Cómo, sin el significante, centrar ese algo que es la causa
material del goce?” p. 33
“En todo lo que se desprendió por efecto del cristianismo, en especial en arte–
por eso voy a dar en el barroquismo ese que acepto que me encasqueten–todo
es exhibición de cuerpos que evocan el goce, y créanme pues es el testimonio de
alguien que acaba de regresar de una orgía de iglesias en Italia. Todo menos la
copulación. No en balde no está presente.” p. 137
“Esta hiancia inscrita en el estatuto mismo del goce en tanto que
dichomansión del cuerpo, en el ser que habla, es algo que brota de nuevo a
través de esa cáscara–no digo otra cosa–que es la existencia de la palabra.”
p. 139
“Ahí está la abertura por la cual el mundo es el que viene a hacer de nosotros su
pareja. Es el cuerpo que habla en tanto que no logra reproducirse sino gracias a
un malentendido de su goce. Lo cual es decir que no se reproduce sino errando
lo que quiere decir…” p. 146
“Lo real, diré es el misterio del cuerpo que habla, es el misterio del inconsciente.”
p. 158
El Seminario, Libro XXII, RSI (1974 – 1975). Inédito en español
Clase del 10 diciembre 1974 “(…) ¡Y bien!, Diré que si el ser
hablante se demuestra consagrado a la debilidad mental, es por el hecho de
lo imaginario. Esta noción, en efecto, no tiene otro punto de partida que la
referencia al cuerpo. Y la menor de las suposiciones que implica el cuerpo es ésta
– lo que para el ser hablante se representa no es sino el reflejo de su organismo.’’
Clase del 10 diciembre 1974 “(…) un automóvil, incluso un
ordenador según las últimas noticias, es también un cuerpo. Para decirlo todo,
no va de suyo que un cuerpo sea viviente.’’
34
Jacques Lacan
establecer como tal, en ninguna parte en lo enunciable, ese único Uno que nos
interesa, el Uno de la relación proporción sexual.” p. 14
EL CUERPO HABLANTE
Clase del 18 febrero 1975 “(…) ¿Qué es lo que soporta un cuerpo?
Un cuerpo no tiene para ustedes aspecto sino por ser lo que resiste, lo que
consiste antes de disolverse.”
Clase del 8 abril 1975 “Que el agujero sea eso sobre lo cual esté
puesto el acento en lo corporal por todo el pensamiento analítico, eso más bien
lo tapona, (…) El hecho de que sea en el orificio que se haya suspendido todo lo
que hay de pre–edípico, como se dice, que toda la perversidad se oriente como
siendo la de toda nuestra conducta integralmente, eso es muy extraño”
Clase del 13 mayo 1975 “El cuerpo no entra en la perspectiva
analítica más que en tanto que hace orificio, y que se anuda a algo simbólico o
real.”
Tener un cuerpo / Adoración de un cuerpo / Cuerpo
bolsa / Cuerpo envase / Cuerpo mueble
El Seminario, Libro XXIII, El Sinthome (1975 – 1976). Editorial
Paidós, Buenos Aires, 2006
“(…) No piensan que las pulsiones son el eco en el cuerpo del hecho de que
hay un decir. Para que resuene este decir, para que consuene, otro término del
sinthome madaquin, es preciso que el cuerpo sea sensible a ello. De hecho lo es.”
p. 18
“Lo sorprendente es que la forma no revela más que la bolsa, o si ustedes
quieren, la burbuja, ya que es algo que se infla.” p. 18
“Sin embargo, una bolsa vacía sigue siendo una bolsa, es decir, el uno que solo
es imaginable por la ex– sistencia y la consistencia que tiene el cuerpo, por ser
envase.” p. 18
“El amor propio es el principio de la imaginación. El parlêtre adora su cuerpo
porque cree que lo tiene. En realidad, no lo tiene, pero su cuerpo es su única
consistencia – consistencia mental, por supuesto, porque su cuerpo a cada rato
levanta campamento” p. 64
“El inconsciente de Freud es justamente la relación que hay entre un cuerpo
que nos es ajeno y algo que forma círculo, hasta recta infinita, y que es el
inconsciente, siendo estas dos cosas de todos modos equivalentes una a la otra.”
p. 147
“(…) Pero la forma, en Joyce, del abandonar, del dejar caer la relación con el
propio cuerpo resulta completamente sospechosa para un analista, porque la
35
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
El Seminario, Libro XXIV, Lo no sabido que sabe de la Una
equivocación se ampara en la morra (1976 – 1977). Inédito en
español
Clase del 16 noviembre 1976 “Me dí cuenta de que consistir
quería decir que había que hablar de cuerpo, que hay un cuerpo de lo
imaginario, un cuerpo de lo simbólico –es la lengua– y un cuerpo de lo real del
que no se sabe cómo sale.”
Clase del 18 enero 1977 “Noten que esta manera de hacer la
cadena nos interroga sobre esto, que lo real está muy especialmente suspendido
al cuerpo. (…) Es, en efecto, lo que pasa, puesto que los cuerpos no son
producidos, de la manera más fútil, sino como apéndices, si puedo decir, de la
vida, dicho de otro modo de eso sobre lo cual especula Freud cuando habla del
germen.”
Clase del 19 abril 1977 “Todo lo que sabemos, es que hay lesiones
del cuerpo llamado viviente que nosotros causamos, y que suspenden la
memoria, o al menos no permiten contar sobre las huellas que uno le atribuye
cuando se trata de la memoria del discurso.”
Apartado, Palabras sobre la histeria (26 febrero de 1977). Jacques
Lacan habla en Bruselas
“Un cuerpo, eso se reproduce por una forma. El cuerpo hablante no puede tener
éxito en reproducirse sino por una pifiada, es decir gracias a un malentendido de
su goce.”
El Seminario, Libro XXV El momento de concluir (1977 – 1978).
Inédito en español
Clase del 20 diciembre 1977 “(…) El fantasma del cuerpo, es
lo extenso imaginado por Descartes. Hay distancia entre lo extenso, lo extenso
imaginado por Descartes, y el fantasma. Aquí interviene el análisis que colorea el
fantasma de sexualidad.”
Clase del 17 enero 1978 “El hecho de que el ser viviente se defina
casi como un garrote (trique), a saber que tiene una boca, incluso un ano, y
además algo que amuebla (meuble) el interior de su cuerpo, es algo que tiene
consecuencias (…).”
36
Jacques Lacan
idea de sí mismo como cuerpo tiene un peso. Eso precisamente lo que se llama
el ego.” p. 147
EL CUERPO HABLANTE
II /c.2 Otros Escritos
Editorial Paidós, Buenos Aires, 2012
Alocución sobre la enseñanza pronunciada para la clausura del
Congreso de la Escuela Freudiana de París (1970)
“(…) desde donde el efecto del lenguaje se impone al cuerpo, por lo que vuelve
al ideal, por un lado, y del objeto a, por el otro. Es un pathos para el ideal, pero
también una corp(se)ificación. Es en el objeto a donde el goce retorna, pero la
ruina del alma solo se consuma con un incorporal.” p. 325
Radiofonía (1970)
“Quién no sabe el punto crítico con el que nosotros fechamos en el hombre al
ser hablante: la sepultura, es decir, donde, de una especie se afirma que, (…) el
cuerpo muerto conserva ahí lo que le daba al viviente el carácter: cuerpo. Corpse
resta, no se vuelve carroña, el cuerpo que la palabra habitaba, que el lenguaje
corp(se)ificaba.” p. 431-432
“El cuerpo si lo tomamos en serio, es primero lo que puede llevar la marca
propia que lo ordena en una serie de significantes. Ya desde esta marca, es
soporte de la relación, no eventual, sino necesaria, ya que es aún soportarla por
el hecho de sustraerse a ella.” p. 432
“Desde siempre, Menos-Uno designa el lugar (…) del Otro (con la letra O
mayúscula). El lecho del Uno-en-Menos está hecho con la intrusión que avanza
desde la extrusión; es el significante mismo.” p. 432
“No le sucede así a toda carne. Solo de aquellas que el signo marca al
negativizarlas, se elevan, desde el cuerpo del que separan, las nubes, aguas
superiores, de su goce, cargadas de rayos que distribuyen cuerpo y carne.”
p. 432
“Que bajo lo que se inscribe se deslice la pasión del significante, hay que decirlo:
goce del Otro, porque en la medida en que este goce esté encantado con un
cuerpo, este deviene el lugar del Otro.” p. 440
El Atolondradicho (1973)
“El cuerpo de los hablantes está sujeto a dividirse de sus órganos, lo bastante
para tener que encontrarles función. (…) Así, por el discurso psicoanalítico,
un órgano se hace el significante. Aquel del que puede decirse que se aísla en la
realidad corporal como carnada, por funcionar allí (…) para ser anzuelo, con lo
37
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
p. 480-481
Televisión (1973)
“De hecho el sujeto del inconsciente solo toca el alma por el cuerpo, por
introducir en él el pensamiento: esta vez contradiciendo a Aristóteles. El hombre
no piensa con su alma (…) Piensa porque una estructura, la del lenguaje –la
palabra [mot] lo comporta–, porque una estructura recorta su cuerpo, y sin que
nada tenga que ver con la anatomía.” p. 538
« Joyce El Síntoma » (1975 – 1976)
“Es para no perderlo, ese salto del sentido, que he enunciado ahora que hay que
mantener que el hombre tiene un cuerpo, o sea que habla con su cuerpo, dicho
de otro modo, que parlétre por naturaleza.” p. 592
II /c.3 Otros Textos
“¿De qué tenemos miedo? Ello no quiere decir simplemente: ¿a partir de qué
tenemos miedo? ¿De qué tenemos miedo? De nuestro cuerpo.” p. 102
Conferencia en Ginebra sobre el síntoma (1975). Intervenciones y
textos 2. Editorial Manantial, Argentina, 2001
“Si el hombre –decirlo parece una banalidad– no tuviese lo que se llama un
cuerpo, no voy a decir que no pensaría, pues esto es obvio, sino que no estaría
profundamente capturado por la imagen de ese cuerpo.” p. 118
II /d. Sinthome
II /d.1 El Seminario
Inconsciente/ Sinthome
El Seminario, Libro XXIII, El Sinthome (1975 – 1976). Editorial
Paidós, Buenos Aires, 2006
El fenómeno lacaniano (Niza 1974). Revista Lacaniana de
Psicoanálisis N°16. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2014
“Sinthome es una forma arcaica de escribir lo que posteriormente se ha escrito
symptôme (síntoma).” p. 11
“(…) por el hecho de que el hombre. (…) ama a su imagen como lo que le es
más prójimo, es decir su cuerpo (…) Cree que es yo [moi]. Cada uno cree que
es él. Es un agujero. Y después, afuera está la imagen. Y con esta imagen hace el
mundo.’’ p. 15
“Es la falta, el sin, eso con lo que mi sinthome tiene la ventaja de comenzar.”
“(…) Lo que hay como agujero en el centro del lenguaje vale igual que lo
que hay como agujero en el centro del cuerpo, de lo cual solo sabemos sus
proliferaciones imaginarias. Debe haber también agujero en el corazón, en
el centro de lo real. Es lo que permite figurarse esta configuración tórica que
articulo con el nudo borromeo.” p.18
La Tercera, Conferencia en Roma (1974). Intervenciones y textos 2.
Editorial Manantial, Argentina, 2001
“El cuerpo se introduce en la economía del goce –de allí partí yo– por la imagen
del cuerpo. La relación del hombre, de lo que llamamos así, con su cuerpo,
si algo subraya muy bien que es imaginaria es el alcance que tiene en ella la
imagen. Desde el principio subrayé muy bien que a fin de cuentas esto debería
tener una razón en lo real.” p. 9
38
Jacques Lacan
cual este último acento contribuye en las diversas pescas que hacen discurso de
las voracidades con las que se tapona la inexistencia de la relación sexual.”
EL CUERPO HABLANTE
p. 13
“Con mi título de este año, introduzco el pero no eso como sinthome.”
p. 14
“La buena manera (de ser hereje) es la que, habiendo reconocido la naturaleza
del sinthome, no se priva de usarlo lógicamente, es decir, de usarlo hasta alcanzar
su real, al cabo de lo cual él apaga su sed.” p. 15
“Ustedes tienen la amabilidad de reírse, pero no es divertido, porque a fin de
cuentas solo tenemos eso, el equívoco, como arma contra el sinthome.” p. 17
“Digo que hay que suponer tetrádico lo que hace al lazo borromeo – que
perversión solo quiere decir versión hacia el padre –, que, en suma, el padre es un
síntoma, o un sinthome, como ustedes quieran. Plantear el lazo enigmático de
lo imaginario, lo simbólico y lo real implica o supone la existencia del síntoma.”
p. 20
“Joyce alcanzó con su arte, de manera privilegiada, el cuarto término llamado
sinthome.” p. 38
39
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“En la medida en que el sinthome lo especifica, hay un término que se liga allí
más especialmente. El término que tiene una relación privilegiada con lo que
atañe al sínthome es el inconsciente.” p. 54
“Hay pareja porque hay un lazo del sinthome con algo particular. En la medida
que el sinthome se enlaza con el inconsciente y lo imaginario se liga a lo real,
tratamos con algo de lo que surge el sinthome.” p. 54
“He constatado que si tres nudos se mantuvieron libres entre sí, un nudo
triple, que pone en juego una completa aplicación de su textura, ex–siste. Y es
propiamente el cuarto. Se llama el sinthome.” p. 56
“Me he permitido afirmar que el sinthome es precisamente el sexo al que no
pertenezco, es decir una mujer. Si una mujer es un sinthome para todo hombre,
es completamente claro que hay necesidad de encontrar otro nombre para lo que
es el hombre para la mujer, puesto que el sinthome se caracteriza justamente por
la no equivalencia.” p. 99
“Se trata de situar qué tiene que ver el sinthome con lo real…” p.
99
“En la medida en que el sinthome forma un falso agujero con lo simbólico, existe
una praxis cualquiera, es decir, algo que depende del decir, de lo que llamaré
también el arte–decir [l’art–dire], para deslizar hacia el ardor [l’ardeur].”
p. 116
“Se me pregunta esto – ¿Si el psicoanálisis es un sinthome –yo no dije que el
psicoanálisis fuera un sinthome–, lo que usted hace con su nudo y sus matemas no
es acaso descifrarlo, con la consecuencia de disipar su significación? No pienso que el
psicoanálisis sea un sinthome.” p. 132-133
“Se trata de un empalme de lo imaginario con el saber inconsciente. Todo esto
para obtener un sentido, lo que es objeto de la respuesta del analista a lo que el
analizante expone a lo largo de su síntoma.” p. 70
“Si lo real está desprovisto de sentido, no estoy seguro de que el sentido de este
real no podría aclararse al ser considerado como nada menos que un sinthome.”
“Cuando realizamos este empalme, hacemos con él al mismo tiempo otro,
precisamente entre lo que es simbólico y lo real. Es decir que por algún lado
enseñamos al analizante a hacer un empalme entre su sínthome y lo real parásito
de goce. Lo característico de nuestra operación, volver posible este goce, es lo
mismo que escribiría j´ouïs–sens. Es lo mismo que oír un sentido.” p. 70
“Pienso que el psicoanalista solo puede considerarse como un sinthome. El
psicoanálisis no es un sinthome, sí el psicoanalista.” p. 133
“Al mismo tiempo, si lo simbólico se libera, como indiqué antes, tenemos un
medio de reparar esto. Es hacer lo que, por primera vez, definí como el sinthome.
Es algo que permite a lo simbólico, lo imaginario y lo real mantenerse juntos,
Aúnque allí, debido a dos errores, ya ninguno este unido al otro.” p. 92
“Pero es claro que el arte de Joyce es algo tan particular que el término sinthome
es justo el que le conviene.” p. 92
“Lo que sostengo con el sinthome está marcado aquí por un redondel de cuerda
que considera que se produce en el lugar mismo donde, digamos, yerra el
trazado del nudo.” p. 95
40
Jacques Lacan
“Diremos, por lo tanto, que un cuarto nudo siempre se apoyará en tres soportes
que es esta ocasión llamaremos subjetivos, es decir, personales. Si recuerdan el
modo en que introduje este cuarto elemento respecto de los tres elementos que
se supone constituyen cada uno algo personal, el cuarto será lo que enuncio este
año como el sinthome.” p. 52
EL CUERPO HABLANTE
p. 133
Anexos, Joyce el Síntoma Conferencia dictada en el gran Anfiteatro de
la Sorbona, en la apertura del V Simposio internacional James Joyce
(1975)
“Remítanse al Bloch y von Wartburg, diccionario etimológico de base sólida,
donde leen que el symptôme se escribió primero sinthome.” p. 159
“Todo esto solo llevó a darse cuenta de que no es lo mismo decir Joyce el
sinthome que Joyce el símbolo.” p. 162
“Pero hay otra manera de llamarlo. Así, lo que atañe al Nombre del Padre, en la
medida en que Joyce testimonia de él, hoy lo recubro con lo que conviene llamar
el sinthome.” p. 165
“En la medida en que hay sinthome, no hay equivalencia sexual, es decir, hay
relación.” p. 98-99
El Seminario, Libro XXIV, Lo no sabido que sabe de la una–
equivocación se ampara en la morra (1976 – 1977). Inédito en
español
“Allí donde hay relación es en la medida en que hay sinthome, es decir, donde el
otro sexo es sostenido por el sinthome.” p. 99
lo que yo escribo con el nombre de sinthome, es decir signo.”
Clase del 10 mayo 1977 “Todo lo que es mental, al fin de cuentas, es
41
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Clase del 10 enero 1978 “El análisis no consiste en que uno
esté liberado de sus ‘síntomas’ (‘sinthomes’), dado que es así como lo escribo
‘symptome’. El análisis consiste en que se sepa por qué se está enredado en eso:
eso se produce debido a que hay lo Simbólico.’’
Clase del 10 enero 1978 “Lo simbólico es el lenguaje: se aprende a
hablar y eso deja trazas. Eso deja trazas y, debido a eso, deja consecuencias que
no son ninguna otra cosa que el ‘síntoma’ (‘sinthome’), y el análisis consiste –hay
con todo un progreso en el análisis– el análisis consiste en darse cuenta por
qué se tienen esos ‘síntomas’ (‘sinthomes’), de suerte que el análisis está ligado al
saber.”
II /d.2 Otros Textos
De James Joyce como síntoma (1976), Le croquant N°28, Centro
Universitario Mediterráneo de Niza, 2000
“Lo que da sustancia al sinthome (…) una psiqué, una realidad psíquica, he ahí
aquello cuya sustancia da el síntoma.”
II /e. Escabel
II /e.1 El Seminario
Escabel/ Sublimación
“Freud hace notar que el artista, luego de haber operado en el plano de la
sublimación, es beneficiario de su operación en la medida en que la misma
es luego reconocida, cosechando precisamente en forma de gloria, honor,
incluso dinero, las satisfacciones fantasmáticas que estaban en el principio de la
tendencia, la cual de este modo es satisfecha por la vía de la sublimación.”
p. 177-178
“Intento asimismo hacerles ver que la estética freudiana, en el sentido más
amplio del término, es decir, el análisis de toda la economía de los significantes,
nos muestra esa Cosa, inaccesible. Debe ser colocada en el punto de partida del
problema, para tratar de articular sus consecuencias, en particular el papel de la
idealización.” p. 195
“La sublimación, en efecto, no es lo que piensa el común de la gente, ni se ejerce
siempre obligatoriamente en el sentido de lo sublime. El cambio de objeto no
hace desaparecer, lejos de ello, el objeto sexual –el objeto sexual, acentuado
como tal, puede nacer en la sublimación. El juego sexual más crudo puede ser
objeto de una poesía, sin que ésta pierda sin embargo su mira sublimante.”
p. 197
El Seminario, Libro XXIII, El sinthome (1975 – 1976). Editorial
Paidós, Buenos Aires, 2006
“Habría que seguir esta problemática de la obra capital y última, de la obra a la
que en suma Joyce reservó la función de ser su escabel. Porque desde el principio
él quiso ser alguien cuyo nombre, precisamente el nombre, sobreviviera para
siempre. Para siempre significa que él marca una fecha.” p. 163
II /e.2 Otros Escritos
El Seminario, Libro VII, La Ética del psicoanálisis (1959 – 1960).
Editorial Paidós, Buenos Aires, 1988
« Joyce el síntoma », Sesión inaugural, en el Gran Anfiteatro de la
Sorbona (1975). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2012
“Y la fórmula más general que les doy de la sublimación es la siguiente –ella lleva
un objeto– (…) a la dignidad de la Cosa.” p. 138
“LOM: en francés eso dice bien lo que eso quiere decir. Basta con escribirlo
fonéticamente: eso es lo fAúnético (fAún…), a su medida: lo ollebsceno
[l’eaubscène]. Escriban eso olleb… para recordar que lo bello no es otra cosa.
Élsecreebello a escribir como escabello sin el cual nohay quien sea ding! denombre
dehombre. LOM se hombrelamina a cada cual mejor. Moje, le dicen, hay que
hacerlo. Sin mojar no hay escabello.” p. 591
“(…) diría que ese término del que me sirvo con ustedes para intentar dar, por
fin, a la sublimación una articulación conforme con aquello con lo que nos
enfrentamos, das Ding, lo que llamo la Cosa, es un lugar decisivo en torno al
cual debe articularse la definición de la sublimación antes de que yo (je) haya
nacido y con más razón Aún antes de que los Ich–ziele, las metas del yo (je),
aparezcan.” p. 193
42
Jacques Lacan
El Seminario, Libro XXV, El momento de concluir (1977 – 1978).
Inédito en español
EL CUERPO HABLANTE
“Tiene (incluso su cuerpo) por el hecho de que pertenece al mismo tiempo a
tres… llamemos a eso órdenes. Testimoniando así el hecho de que chamulla para
atarearse con la esfera con la que hacerse un escabello. Digo eso para hacerme
43
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“El S. K. Bello es lo que condiciona en el hombre el hecho de que él viva del
ser (= que vacía el ser) en la medida que él tiene –su cuerpo: por lo demás no lo
tiene sino a partir de eso–. De allí mi expresión parlêtre [hablaser]…” p. 592
“Joyce no es un Santo. Joyza demasiado del S.K.Bello para eso, tiene de su arte
artegullo hasta la saciedad.” p. 593
“Porque no hay vía canónica para la santidad, a pesar del querer de los Santos,
no hay vía que los especifique, que haga de los Santos una especie. Sólo hay la
escabellostración [scabeaustration] pero la castración del escabello sólo se cumple
con la escapada. No hay santo más que no queriendo serlo, renunciando allí a la
santidad.” p. 593
“Joyce, él, quería no tener nada, salvo lo escabello del decir magistral, y eso
basta para que no sea un santo hombre del todo simple, sino el síntoma ptipo
[symptôme ptypé].” p. 593
“Como montones de cosas en las que creemos sin adherir a ellas: los escabellos
de la reserva donde cada cual toma. Que haya habido un hombre para pensar en
revisar todos los aspectos de esa reserva y dar del escabello la fórmula general, ahí
está lo que llamo Joyce el Síntoma. Pues esa fórmula, no la halló, por no tener de
ella la más mínima idea. Corría sin embargo ya por todas partes bajo forma de
ese ICS al que califico como parlêtre.” p. 594
“Joyce es el primero en saber bien escabelmotear por haber llevado el escabello
hasta el grado de consistencia lógica en que lo mantiene, artegullosamente,
acabo de decirlo.” p. 595
Jacques – Alain Miller
uno, y justamente para rebajar así a la esfera, hasta ahora indestronable en su
supremo escabello. Así demuestro que el S.K.Bello es primero porque preside a
la producción de la esfera.” p. 591-592
EL CUERPO HABLANTE
3.
Jacques–Alain Miller
III /a. Parlêtre
III /a.1 Los Cursos Psicoanalíticos
De la naturaleza de los Semblantes (1991 – 1992). Editorial Paidós,
Buenos Aires, 2002
“(…) en la perspectiva de Lacan,… no se debe dudar en separar el ser de lo real,
y en situar al ser del lado del semblante. A mi entender, este es el sentido exacto
de la condensación lacaniana parlêtre (parecer– ser), (…); el ser no se opone al
parecer (paraître), sino que confunde con él.” p. 12
“Y es también el valor de esa otra condensación contemporánea que opera
Lacan al hablar de parlêtre (hablanteser), (…) Parlêtre no es simplemente una
abreviación de la expresión être parlant (ser hablante), esta condensación
atribuye al hombre –término genérico– un ser de semblante, le atribuye el
parecer.” p. 12
La fuga de sentido (1995 – 1996). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2012
“¿El ser hablante que evoca Lacan es el cuerpo? Al menos es necesario señalar
que en el Seminario Aún se subraya una copertenencia entre el ser y cuerpo.
Es notable que cuando Lacan le da esta frase a ese jurista y la menciona en su
auditorio, dice el ser que habla. No dice que el lenguaje no es el sujeto que habla,
dice que no es el ser que habla.” p. 235
“Me parece, en efecto, que la dimensión suplementaria introducida por la
expresión ser que habla, y que la hace estar en disyunción con el lenguaje, es,
hablando con propiedad, la dimensión del viviente, del cuerpo viviente.”
p. 235
44
45
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“Pero en el momento en que el punto de aplicación se desplaza, en que la
definición del inconsciente se modifica, hasta favorecer incluso unilateralmente
la separación, vemos aparecer otro término para calificar el inconsciente. Vemos
aparece el término ser. El ser hablante, es ser hablado, el parecer.” p. 270
“¿Qué es lo que implica esta frase sino que el inconsciente y su misterio es otro
modo de decir el misterio del cuerpo hablante? Esta definición de ser hablante
como equivalente al inconsciente es completamente diferente de la definición
del inconsciente como sujeto tachado, porque eso incluye, bajo cierto estatuto,
bajo una forma que no es simplemente visual ni orgánica, una referencia al
cuerpo.” p. 270
El Partenaire-síntoma (1997 – 1998). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2008
“Por lo tanto, a partir del Seminario Aún y lo que sigue, podemos decir que el
término sujeto ya no le alcanza a Lacan. Puesto que al término sujeto en ese
momento se lo toma como muerto, como vaciado de goce, se hace necesario
agregarle una relación con un resto de goce, retomando la fórmula del fantasma.
(…) a partir de esa fecha es el ser hablante que incluye el cuerpo, porque de ahí
en más no piensa más al inconsciente sin la pulsión.” p. 164
“(…) podemos decir que, en el primer movimiento de su enseñanza, el término
ser estaba dominado por la falta–en–ser producida por el significante, y que en
este segundo movimiento, por el contrario, la función que aparecía como falta–
en –ser, la del sujeto, reaparece bajo la forma del parlêtre. Se ve claramente que
se trata de dos términos opuestos, la falta–en–ser y el parlêtre, porque el parlêtre
lleva incluido detrás el goce del cuerpo.” p. 274
“El cuerpo del ser hablante está profundamente alterado por el significante. (… )
No obstante una vez dicho eso, se puede considerar al goce en su faz de goce del
cuerpo y se lo puede considerar en su faz de goce del lenguaje, del significante,
pero sin olvidar nunca que no son sino dos caras del goce como tal.” p. 397
“Toda la demostración de Lacan, entonces, apunta a que no hay goce bruto en
el ser hablante. No se puede pensar un goce anterior al significante. En el ser
hablante el goce está ligado al significante, es una consecuencia de él.” p. 399
46
Jacques – Alain Miller
“¿No podemos acaso seguir, en esta enseñanza, todo el esfuerzo que fue hecho
para que el lenguaje sea el cuerpo, para reconducir al ser hablante al lenguaje?
Me parece que si Lacan, al comienzo de su Seminario Aún, resume su enseñanza
de este modo, es justamente porque esta fórmula toma de través el conjunto de
esta enseñanza.” p. 235
EL CUERPO HABLANTE
“El cuerpo de goce, como lo llamé, también está del lado del Otro. Fue así
como propuse, impulsado por la necesidad, el término partenaire-síntoma como
simétrico a parlêtre, destinado a sustituir a la pareja constituida por el sujeto
tachado y el Otro.” p. 401
“Aquí cobra todo su sentido la fórmula ‘no hay relación sexual, que quiere decir
que los parlêtres, como seres sexuados, forman pareja, no a nivel del significante
sino a nivel del goce, y que este enlace es siempre sintomático.” p. 410
La experiencia de lo real en la cura psicoanalítica (1998 –
1999). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2008
“Es posible entonces hablar de lo escrito en la palabra, pero aún falta que esté el
cuerpo en el asunto. Y correlativamente a la noción de la interpretación como
perturbación hay que introducir algo como el parlêtre, una noción del orden de
lo que Lacan anhela que vaya más lejos que el inconsciente.” p. 136
“(…) Lacan apuntó a una noción que iría más allá del inconsciente, y que se
inscribe en este lugar: lo llamó el parlêtre, donde la función del inconsciente se
completa con el cuerpo, pero no el cuerpo simbolizado, el cuerpo imaginario,
sino con lo que el cuerpo tiene de real.” p. 136
“En efecto, cuando Lacan lo introduce, el sujeto es esencialmente una falta en
ser y todo lo contrario, todo el negativo de un ser; es lo que justifica su símbolo
$. Pero en el Seminario Aún lo sustituye por una instancia completamente
distinta, con la que al mismo tiempo lo intenta articular: es lo que llama el ser
hablante.” p. 207
“Si el sujeto se vuelve en Lacan ser hablante, es porque se trata de una instancia
anclada en el cuerpo. Aquí el cuerpo hace la diferencia.” p. 208
“Si nos orientamos con El Seminario 20, veremos que, por el contrario, el sujeto
y el goce ya no son pensados como relación, y por una razón muy simple: Lacan
renuncia al sujeto para inventar la categoría del ser hablante, donde el sujeto y
el goce se presentan como una entidad nueva, la de un cuerpo afectado por el
significante, un cuerpo conmovido, movilizado por el inconsciente.” p. 209
“Y la incidencia especial de Lacan, cuyo eco parece que aún perdura en dicho
país, fue haber desplazado este focus, este punto focal sobre el ego hacia el sujeto
hablante, lo que constituye la innovación del informe de Roma.” p. 210
“Y esto es muy distinto de partir de la evidencia de que hay goce en tanto
propiedad de un cuerpo vivo (…) a partir de Aún (…) Solo hay psicoanálisis
de un cuerpo vivo y que habla, lo que para Lacan en este Seminario merece ser
47
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) el traumatismo en el sentido de Lacan, el nudo del acontecimiento
traumático, no se remite a un accidente, pero la posibilidad misma del accidente
contingente –que, por otra parte, se produce siempre necesariamente– que deja
huellas de afecto, en el sentido amplio que indiqué, descubre la incidencia de la
lengua en el ser hablante y, con más precisión, en su cuerpo.” p. 378
“El afecto esencial es el que traza la lengua sobre el cuerpo, y no la seducción,
la amenaza de castración, la pérdida del amor, la observación del coito parental,
ni el Edipo, hecho que Lacan resume de una manera excesiva en la fórmula el
significante es causa de goce.” p. 378
“Pero, de hecho, consideró el cuerpo esencialmente en el nivel del fantasma
en tanto que interviene en la formación de los síntomas, lo que se indica en su
grafo doble. Hasta introducir el parlêtre pensó el cuerpo en este nivel que escribe
la necesidad de completar con un elemento corporal el sujeto del significante:
$<>a.” p. 379
“Y esta segunda estructura, que es de alguna manera el reverso de la
significantización, se podría llamar la corporización; es más bien el significante
que entra en el cuerpo. Esta estructura se distingue completamente de la
primera –que es elevación, sublimación de la Cosa hacia el significante– por ser
el significante que afecta al cuerpo del ser hablante, que se vuelve cuerpo, que
fragmenta el goce de este y hace brotar el plus de gozar, que es allí virtual.”
p. 397
“(…) en definitiva hay que corporizar al Otro, que el cuerpo del partenaire,
incluso del partenaire hablante, es ineliminable Aúnque este tenga la forma de
Dios – cosa que las Memorias ilustran bien. Schreber nos mostraría entonces un
Otro que no existe como todo saber, pero que sin duda posee un cuerpo que
quiere gozar y que lo necesita a él para eso.” p. 398
Los usos del lapso (1999 – 2000). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2004
“(…) Es necesario que el sujeto en cuestión tenga precisamente una influencia
sobre los espíritus, sobre los locutores de la lengua, en los seres hablantes
(parlêtres) de esa lengua, a través de las ideas, los afectos y, como decimos
nosotros, los sentimientos.” p. 72
48
Jacques – Alain Miller
calificado de misterio. Así termina una de sus lecciones de ese año. En otras
palabras, lo supuesto es el por el cuerpo.” p. 270
EL CUERPO HABLANTE
“El ser–de–a–varios en trenzado matricial es una posibilidad que para mí
resuena con el parlêtre, ‘ser que habla’ tal como Lacan lo presenta hacia el fin de
su vida, en ‘El Atolondradicho’.” p. 472
“La cuestión de ese parlêtre respecto de la escena primitiva no es la del deseo
sexual del sujeto triangular con la pareja parental edípica, sino la del sujeto–por–
nacer o no–ser (…) al borde del Real cuerpo–psiquis en el ser–de–a–tres a nivel
parcial de la experiencia no consciente compartida (…) donde nos encontramos
más próximos a la cuestión del cuerpo en psicoanálisis.” p. 473
El lugar y el lazo (2000 – 2001). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“(…) Por un lado, Dios crea, y por el otro, el hombre nombra. El mito vuelve
patente esta brecha entre la creación y la nominación. El poder de dar nombres
es confiado al famoso Adán, de tal suerte que a la creación divina sigue la
nominación humana, es decir que se da cabida a lo que Lacan llama “el parloteo
del parlêtre.” p. 274
“La referencia del nudo borromeo no es entonces el sujeto del inconsciente, ya
que la definición de sujeto incluye al Otro, sino el parlêtre, que es exactamente
un ser que es solo sentido. Por eso el parlêtre deja lo real en el exterior de
su parloteo. Digamos que el parlêtre es una instancia condenada al Uno del
redondel de cuerda.” p. 323
“Un psicoanálisis somete al parlêtre a la experiencia del sentido. Somete lo
que para él tiene sentido a la experiencia de enunciarlo (…) lo somete a la
experiencia del sentido que resulta de la cadena significante, y la pregunta es si
por esta experiencia él accede a un real, es decir, a una posición que ex–sista al
sentido.” p. 334
“(…) el desplazamiento que Lacan operará en su última enseñanza cuando
hable del parlêtre: situará el ser del lado de lo simbólico –Parlêtre es otro modo
de decir sujeto.– (…) pero el ser se eclipsa ante lo real, y de eso se trata en
la última enseñanza de Lacan, en la que él decide operar de entrada con las
tres dimensiones y no reservar la dimensión de lo real para el más allá del
atravesamiento.” p. 348-349
Piezas sueltas (2004 – 2005). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“La pregunta que plantea el Seminario El Sinthome es cómo, a partir del
acontecimiento, hacer otra cosa que se parezca a ese sueño de eternidad. ¿Cómo
hacer del acontecimiento algo que perdure cuando ya no se es uno mismo?
De ese acontecimiento singular, de ese traumatismo contingente y que no se
parece al de nadie, de ese acontecimiento que afecta en su singularidad a cada
49
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“Luego, finalmente, dice que siempre hace falta el sinthome, es decir, una
invención, para que se mantenga unido. Esa invención es una obra. Esa obra
arraigada en el sinthome es lo que Lacan denomina escabel; para bromear lo
escribió, S.K.beau (S.K. bello). El ser hablante necesita un escabel. Dado que
el lenguaje introduce o reproduce un agujero, él necesita un suplemente para
hacerse valer.” p. 51
“Pasar entonces del inconsciente estructurado como un lenguaje, del
inconsciente ECUL, a lo que denominó parlêtre. (…) Tratándose del parlêtre
no tenemos ese bello ordenamiento que teníamos gracias a la relación entre
el significante y el significado – relación que luego puede repartirse según los
mecanismos bien conocidos (la metáfora y la metonimia) que corresponden al
estado ECUL del parlêtre, es decir, al estado del parlêtre una vez que pasó por la
caja negra, que pasó por la máquina analítica.” p. 162
“Si acompañamos esta perspectiva, ¿qué se despeja como consistencia primera
de un ser que no es sujeto sino parlêtre? Lo que se despeja como consistencia
primera es el cuerpo, no el sujeto del significante.’’ p. 417
“Lacan entonces aísla como primaria la relación corporal, la relación del parlêtre
con su propio cuerpo– aquí está implicado lo imaginario–, y luego establece la
distinción entre esa relación primaria y la relación con el cuerpo otro, en la que
hay pensamiento, sentido, y referencia a la relación sexual.’’ p. 418
El ultimísimo Lacan (2006 – 2007). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2013
“Pues bien, en el reverso de la enseñanza de Lacan (…) El Otro está destituido
y el sujeto es pensado a partir de lo real, de los simbólico y de lo imaginario en
tanto son tres consistencias. (…) Ya no es, en efecto, el sujeto del significante ni
tampoco el sujeto de la identificación, sino el ser humano que Lacan califica de
parlêtre.” p. 107
“(…) es más del lado del tener que del ser como se plantea el Un–cuerpo. El
Un–cuerpo, dice Lacan, es la ‘única consistencia’ del parlêtre. En esta frase
se encuentran reducidos todos los reflejos de este vertedero que es el Otro
con mayúscula. Se trata del Un–cuerpo en tanto única consistencia (…) esta
consistencia es mental (…).” p. 108
50
Jacques – Alain Miller
parlêtre (neologismo por condensación entre parler –‘hablar’– y être –‘ser’– ),
¿cómo extraer algo que valga como una lección, que valdrá para los otros, que se
apropiarán de ella? (…).’’ p. 48
EL CUERPO HABLANTE
“(…) tiene que ver con el amor pero no el amor del padre, sino el amor
propio, en el sentido del amor del Un–cuerpo (…) ‘El parlêtre adora su cuerpo’.
Diría q eso es lo más seguro de lo que viene al lugar de los tres modos de la
identificación (…) este tener no es más que una creencia, creencia de tener su
cuerpo como si fuese un objeto disponible (…) el Un–cuerpo, dice Lacan, es la
única consistencia del parlêtre.” p. 108
“Cuando hay relación sexual, sólo puede ser dentro de la relación con una
alteridad interna a la estructura el parlêtre. A eso le debemos la conocida
oposición que se encuentra en el Seminario El sinthome entre el sinthome y el
estrago: la mujer hace sinthome, el hombre hace estrago. En eso se puede decir
que Lacan salva la relación sexual, pero indexándola a una alteridad interna a la
estructura del parlêtre.” p. 114
“(…) inventa una geometría de la relación sexual totalmente distinta del espacio
concéntrico de lo imaginario (…) Inventa, que la geometría de la relación sexual
es más bien la del guante dado vuelta (…) a partir de la ecuación especial que
Joyce sentía respecto a su esposa (…) Formula entonces que todo lo que subsiste
de la relación sexual en la soledad del parlétre es la geometría del guante dado
vuelta.” p. 114
“ (Rosine y Robert Lefort) Mostraron que el autismo era, si así puedo decir, el
estatuto nativo del “sujeto”. La palabra “sujeto” tiene acá que llevar comillas y
seguramente cederle su lugar al término parlêtre, que Lacan usaba para designar
a la vez el sujeto y el inconsciente.” p. 119
“El ser humano –les trumains, como lo escribe en esa época– está condenado al
sueño. Hay mucho para decir sobre les trumains en relación con lo que Lacan
llamaba el parlêtre. La primera diferencia consiste en haber elegido el plural, en
haber privilegiado el plural.” p. 185
“Aprender a hablar tiene consecuencias, y estas consecuencias son lo que
llamamos el sinthome. Aprender a hablar se hace con los parientes cercanos. Es
eso el rostro del Otro en el aprendizaje de la lengua. Por eso hay una sociología
inmediata del parlêtre, y por eso el parlêtre es les trumains.” p. 190
“(…) hay en el parlêtre, una disconformidad con lo simbólico. (…) el
parlêtre, aquel que sostiene su ser de hablar, por el contrario, se embrolla con
lo simbólico. El fenómeno del embrollarse no surge como un incidente, un
accidente, sino al contrario como nombrando la relación fundamental del
parlêtre con el lenguaje.” p. 211
51
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“El Seminario ‘El momento de concluir’ produce un clivaje, por un lado el
individuo afectado de inconsciente, es decir, el parlêtre y, por otro lado, el sujeto
de un significante.” p. 226
“El parlêtre es una categoría que incluye el cuerpo, de tal modo que no alcanza,
en el análisis, con evacuar el cuerpo diciendo que es un residuo. El cuerpo es,
por el contrario, cuando se trata del parlêtre, algo fundamental.” p. 245
Sutilezas Analíticas (2008 – 2009). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2011
“Esta es una propiedad fundamental del parlêtre: la causa de su deseo depende
siempre de un encuentro, su goce no es genérico, no se debe a la especie; la
modalidad propia de su goce obedece en cada caso a una contingencia.”
p. 37
“Y en esto Lacan reconocía el verdadero psicoanálisis, que es el que admite
los efectos del lenguaje en la enfermedad intrínseca del ser humano como ser
hablante y como ser hablado, como parlêtre.” p. 38
“(…) el sujeto que habla es también un sujeto hablado. De ahí el neologismo
de Lacan parlêtre, un ser hablado hablante. Este adquiere una densidad especial
que permitiría decir que el parlêtre es el conjunto de esta articulación: (…) y el
producto de la articulación. Esta articulación S1– S2 no es necesariamente la
suya, por el contrario, es incluso primordialmente la del Otro.” p. 89
“La verdad es que, para el parlêtre, el efecto de encuentro es instantáneo. Todo
responde al acontecimiento, que debe ser encarnado, que es un acontecimiento
corporal –según la definición que Lacan da del sinthome–. El resto, en la mayoría
de los casos, son preparativos necesarios.” p. 103
“Un analista sería alguien que sabría medir la distancia entre verdad y real, y
de este modo sabría instituir la experiencia analítica, esto es, la histerización
del discurso. Simplemente –y para anunciar aquello con lo que trataré de
continuar–, ya no es el pase del sujeto del saber, es el pase del parlêtre. Y el pase
del parlêtre no es el testimonio de un éxito, sino de cierto modo del fracaso.”
p. 135
Jacques – Alain Miller
“Lacan dice entonces que el efecto natural de los simbólico sobre el parlêtre es la
debilidad, es el extravío, es el embrollo, del que se puede, sin embargo, salir, a
condición de poner en forma la debilidad, y entonces es el delirio.” p. 212
EL CUERPO HABLANTE
no es, pues, el testimonio de una travesía del fantasma, sino la elucidación de la
relación con el goce, de cómo el sujeto cambió respecto de lo que no cambia,
su modo de gozar, y cómo se elaboraron para él las variaciones de su verdad, su
camino de mentira.” p. 146-147
“Una vez atravesada la ventana del fantasma, lo que se manifiesta no es la
libertad de un sujeto barrado, vacío. Más allá de la ventana del fantasma, está lo
que llamaré, para concluir, la prisión del parlêtre.” p. 162
“El parlêtre, un sujeto que habla y que es hablado, está en relación con un
cuerpo, al cual Lacan se abstuvo, además, de dar una letra. No hizo de este un
matema, abandonó sus matemas por los nudos, que quizás también lo sean pero
con un configuración muy diferente.” p. 191
“En otras palabras, hay para el sujeto, y más exactamente para el parlêtre, lo
imposible de negativizar, un positivo absoluto, que designamos goce, y que
se asemeja a la libido freudiana, pero a diferencia de esta, que se desplaza,
permanece.” p. 248
“El cuerpo, la entidad cuerpo, es lo que hay que suponer para que el goce tenga
un soporte. De aquí los reparos al concepto de sujeto del significante, y que
Lacan se vea llevado a conceptualizar al paciente en la experiencia analítica como
un parlêtre (es lo que lo obliga a reintroducir el ser en el candelero).” p. 250
“(…) en ese que ya no llamamos sujeto sino parlêtre, el cuerpo mismo, su
cuerpo, no está antes del significante, no es una realidad anterior al significante.
(…) Tiene su cuerpo como un bien, una propiedad, un objeto que se trata bien
o mal, que se desdeña, se abandona o se arregla. Los cuidados prodigados o no a
ese cuerpo denotan el valor inconsciente que se le atribuye.” p. 284
“(…) el goce del que el parlêtre es capaz es siempre el que no hace falta. Del goce
siempre se puede decir en latín non decet (no conviene), y es que el único que
convendría sería el de la relación sexual, que no existe. (…).” p. 288
“(…) No existe nada de lo que entra en la esfera del interés del parlêtre en lo que
no se pueda ubicar un goce. Parafraseando a Leibniz, podríamos decir que Nada
es sin goce.” p. 289
“Así, el goce puede ser acorralado en todas las manifestaciones del interés, y
vemos que nada subsiste para el parlêtre que no tenga su coeficiente de goce. Por
eso la formación del síntoma es coextensiva de su emergencia.” p. 290
“Necesitó diez años más para presentar el parlêtre, que es sin duda el ser, que
no es ser sino por hablar –cuando no se habla, no se es un ser – (…) el ser que
habla su goce, cuyo goce es la razón última de sus dichos. (…) El pase del parlêtre
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Clase del 2 marzo 2011 “Tocar el más allá del Edipo, ir más allá del
inconsciente, es tocar el goce femenino, puro acontecimiento de cuerpo, y hacer
lugar a la ley a la que responde el parlêtre, la del no-todo.”
Clase del 16 marzo 2011 “El sujeto es supuesto al significante, al
saber y esta suposición es el inconsciente mismo. Se trata –pongan atención– de
una suposición ontológica, ya sea que le acordemos el sentido de la falta en ser
y la escribamos como sujeto tachado o bien el del ser hablante y parlêtre. Lacan
nunca deja de decir, cuando se refiere al parlêtre, que sólo tiene ser porque
habla.”
Clase del 23 marzo 2011 “El psicoanálisis rehúsa aceptar la noción
de un ser eterno, para volcarse a favor del ser discursivo, inexorablemente ligado
a la función del tiempo. (…) De lo que se trata –en todo caso, en los términos
de la invitación que nos formula Lacan– es de abandonar la noción de la
persistencia de un mundo y del ser hablante como ser en el mundo. Pensarlo
como ser en el discurso prohíbe transferirle las propiedades que se le atribuían a
su ser en el mundo.”
Clase del 23 marzo 2011 “El psicoanálisis no conduce a plantear
un ser más acá, sino, en los términos de Lacan, un ser al lado, junto a, derivado
de, un ser para, que es precisamente el que nos aporta el lenguaje. Entonces, lo
que se sustituye al esquema apariencia-ser –respeto provisoriamente el dibujo del
muro del lenguaje–, es un para-ser, un ser que está siempre a un costado de, junto
a y detrás, el muro del lenguaje.”
Clase del 23 marzo 2011 “Dicho de otro modo, hay una
conjunción del para–ser y de la palabra que encuentra su punto culminante
cuando uno se expresa en términos de ser hablante y hay otra conjunción
esencial entre existencia y escritura: esa escritura que califiqué de primera.”
Clase del 30 marzo 2011 “Estamos obligados a poner el cuerpo en
Clase del 25 mayo 2011 “(…) la pulsión que viene a quedar
decididamente implicada en el síntoma, se constata también cuando Lacan
borra en forma progresiva, por decirlo así, el término de sujeto –por excelencia
perteneciente al orden significante– y lo reemplaza, querría reemplazarlo por el
de parlêtre. De toda evidencia, pulsión y sujeto están en disyunción, en tanto el
parlêtre incluye el cuerpo y Lacan dice entonces: este es el nombre que habrá de
reemplazar el de inconsciente.”
Clase del 25 mayo 2011 “(…) Lacan dice a veces el inconsciente
es real; por serlo, se distingue decididamente del freudiano y encaminado
en esa vía, propone algunas veces reemplazarlo. (…) Evoca la alternativa de
reemplazarlo por el término de parlêtre donde queda incluido el cuerpo y es
coherente con la noción de oigo–sentido: no hay sentido que vaya sin goce y
entonces no hay significante, no hay deseo que no esté conectado con la pulsión,
etc. y la raíz del Otro es el Uno.”
Clase del 25 mayo 2011 “Entonces, el parlêtre es aquel que por
el hecho de hablar, en cierto modo superpone un ser al cuerpo que tiene,
un ser al tener y su tener esencial es el cuerpo. El parlêtre es también el ‘sólo
tiene un cuerpo’, si puedo decir así. Hay por consiguiente, en todo esto, una
desvalorización del significante, una aminoración del valor de la verdad y de la
potencia significante.”
Clase del 25 mayo 2011 “(…) lo exaltado por Lacan era, por el
contrario, el poder de creación del significante que se ejerce ex–nihilo, a partir de
nada: allí donde no hay nada, el significante hace que algo sea y, en particular,
hace ser la verdad. Pues bien, en este apólogo, encontramos el revés del
decorado: tiene existencia algo (…) a lo cual no se condesciende acordarle una
nominación.”
Clase del 25 mayo 2011 “Este apólogo con el que da comienzo
la acción puntual y por eso Lacan se refiere al parlêtre es decir, un ser que sólo
funda su ser en la palabra. Es un ser evidentemente frágil, discutible y acerca del
cual nada dice a priori que tenga acreditada una reserva de real.”
el Seminario El Sinthoma, ilustra el carácter primario de lo real; es con el
significante que comienzan los embrollos, los enredos de los verdadero, del
deseo, de la interdicción, del Edipo, porque el significante viene a percutir en la
raíz de lo real, de los cuerpos.”
existencia. Es un tener sólo marcado a partir del vacío del sujeto; es la razón
por la cual, cuando Lacan abandonó el término de ‘sujeto de la palabra’, forjó
esencialmente el de parlêtre.”
el parlêtre introduce una falla que es también la falta (faute) y al mismo tiempo
el falo; (…) cuando uno proponía como ideal para el final de un análisis la
sublimación (…) también era en nombre de una idea acerca del arte discutida
Clase del 4 mayo 2011 “Tener un cuerpo se ubica del lado de la
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Jacques – Alain Miller
El ser y el Uno (2010 – 2011). Inédito en español
EL CUERPO HABLANTE
Clase del 25 mayo 2011 “Ese choque inicial, ese traumatismo en
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
III /a.2 Otros Textos
El psicoanálisis en el Siglo XXI y la sociedad (Un esfuerzo de poesía,
clase 26-3-2003). Revista Mediodicho Nº40 « A brillar mi amor »
EOL – Sección Córdoba, 2014
“Esto no es más que admitir la siguiente definición del sujeto que introduce
Lacan: se habla de él. Antes de ser hablante, el sujeto es hablado. Cuando se dice
la sociedad, en singular, se le hace equivaler al campo del Otro.” p. 17
Improvisación sobre Rerum Novarum (Texto extraído de J.–A. Miller,
« Le Neveu de Lacan », París, Verdier, 2003, p. 313), en Revista
Lacaniana de Psicoanálisis N°2. Grama Ediciones, EOL – Buenos
Aires, 2004
“Al ver un león rodeado de tres leonas, Lacan se preguntaba si las leonas sabían
contar hasta tres. ¿Cómo hacían para soportar a la otra leona? No tenían los
medios tal vez para hacer la suma. Solo un ser que se descuenta a sí mismo,
como el parlêtre, puede sumar. Pero Lacan mismo dice del número que es un
real en el lenguaje.” p. 13
Una fantasía, Conferencia en el IV Congreso de la AMP (2004).
Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°3. Grama Ediciones, EOL –
Buenos Aires, 2005
“(…) vemos al inconsciente agotarse trabajando, mientras que el parlêtre
lacaniano, en absoluto. El parlêtre lacaniano es lo que Lacan quería que
reemplace al inconsciente freudiano. Quería que lo reemplace para responder,
me parece, al problema que he planteado (…) es decir que hay que desplazar el
psicoanálisis a toda velocidad. El parlêtre lacaniano se mueve, hierve, infecta; es
más bien del estilo del parásito.” p. 19
Iluminaciones Profanas II (2005 – 2006). Revista Lacaniana de
Psicoanálisis N°5 y Nº6. Grama Ediciones, EOL – Buenos Aires, 2007
Jacques – Alain Miller
por Lacan en el Seminario El Sinthoma, (…) ¿Qué quiere decir esto? Ocurre que
Lacan nos invita aquí a tratar la obra de arte en sí, esa obra escrita a partir de la
pulsión, diría yo, scriptuaire, a situar esa obra en el autoerotismo del parlêtre.’’
EL CUERPO HABLANTE
De un otro al Otro explora la relación entre la inconsistencia del Otro y aquello
que vuelve del goce, digamos, del lado del sujeto, así como más tarde el examen
de la correlación entre el sujeto y el goce conducirá a Lacan a hacer intervenir ese
ser singular que él llama parlêtre.” p. 16
Iluminaciones Profanas (2005 – 2006). Revista Lacaniana de
Psicoanálisis N°7. Grama Ediciones, EOL – Buenos Aires, 2007
“El sujeto barrado es un sujeto articulado a una cadena, y no se puede hacer
de él soporte de esta función; es lo que conducirá a Lacan, mucho más tarde
a hablar del parlêtre (…) no tenemos todavía más que las premisas de esta
antinomia entre lo pulsional y lo sexual, con lo que Lacan iniciará su Seminario
20, Aún, la oposición entre lo pulsional y lo sexual” p.15
El reverso de Lacan texto publicado en La cause freudienne N°67
(2007), Navarin. Revista Lacaniana de Psicoanálisis, N°10, Grama
Ediciones, EOL – Buenos Aires, 2010
“En el reverso de Lacan el Otro es destituido, el sujeto es pensado a partir de lo
real, de lo simbólico y de lo imaginario como siendo sus tres consistencias. No se
trata más (…) del sujeto del significante, del sujeto de la identificación, sino del
ser humano calificado como parlêtre.” p. 21
“Eso – el ego – tiene que ver con el amor. No el amor del padre, sino el amor
propio, en el sentido del amor del Un – cuerpo. El parlêtre adora su cuerpo” (…)
Este Un – cuerpo, dice Lacan un poco más adelante (…) es la única consistencia
del parlêtre.” p. 21
Revista Freudiana Revista psicoanalítica editada en Barcelona bajo
los auspicios de la ELP. Barcelona
El ultrapase. Freudiana Nº66. 2012. http://www.freudiana.com/
revistas.php?idrevista=15
“(…) Lacan borra progresivamente el término sujeto que pertenece por
excelencia al orden significante, y lo reemplaza, o quiere reemplazar, por el
término serhablante. El sujeto está disjunto de la pulsión mientras que el
serhablante incluye al cuerpo.” p. 18
“(…) podríamos decir que todo el Seminario De un otro al otro explora esta
proposición, discretamente esbozada en el Escrito Subversión del sujeto. Es decir,
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X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) tener un cuerpo, es del orden de la existencia y se trata de un
saber que no se logra más que a partir del vacío del sujeto. (…) Con el
término parlêtre (Lacan) señaló que ese sujeto no tiene más ser que el que se
refiere a la palabra pero que no puede plantearse como tal, (…), más que a partir
del cuerpo, del hecho que tiene un cuerpo.’’ p. 14
Instrumentos para la lectura de la ultimísima enseñanza de Lacan,
“eso traumático”, Revista Mediodicho Nº39. EOL – Sección
Córdoba, 2013
“Aprendamos a hablar, dice Lacan, y eso deja huellas, tiene consecuencias, son
por otra parte esas consecuencias lo que llamamos el síntoma. Aprendamos a
hablar y eso le viene de sus parientes cercanos. Es eso el rostro del gran otro, en
el aprendizaje de la lengua. Y es por ello que hay una sociología inmediata del
parlêtre. Es por eso que el parlêtre es los trumanos. ¿Llego a justificárselos?”
p. 20
III /b. Inconsciente
III /b.1 Los Cursos psicoanalíticos
Los signos del goce (1986 – 1987). Editorial Paidós, Buenos Aires,
1998
“Encontrarán en RSI la fórmula que sostiene que del inconsciente todo Uno es
susceptible de escribirse con una letra (…).” p. 327
“Las preguntas de su RSI son por completo distintas. Es la misma pero
desplazada: ¿el inconsciente es real? O también: ¿el inconsciente es real o
imaginario?” p. 413
“(…) la discusión sobre el estatuto imaginario del inconsciente. Lacan no
considera que esté resuelto. ¿Acaso sólo es posible abordar el inconsciente por los
efectos de significación?” p. 413
“Al formular que el inconsciente es un saber sin sujeto se está diciendo también
que es un saber sin el Otro, un saber que no está en absoluto en el lugar del
Otro, que está separado de ese lugar.” p. 430
58
Jacques – Alain Miller
Más allá del pase. Revista Freudiana Nº69. 2013. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=3
EL CUERPO HABLANTE
Donc. La lógica de la cura (1993 – 1994). Editorial Paidós, Buenos
Aires, 2011
“Una vez percibida la inconsistencia lógica del inconsciente –es decir, la
inconsistencia lógica del pensamiento, en el sentido de Freud– y su carácter de
engaño radical, surge la necesidad de delimitar como consistencia lógica lo que
queda de ser. Así Lacan será llevado a acentuar tanto la consistencia lógica del
objeto a como la posición del analista como acto –es decir, creación– (…).”
p. 438
La fuga del sentido (1995 – 1996). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2012
“(…) Lacan atribuye y asigna al hecho que la experiencia del inconsciente
nos habría mostrado, en la medida en que el inconsciente está hecho de
lalengua. (…) hay allí, en el nivel llamado lalengua, otra finalidad que la de la
comunicación. (…) es precisamente una finalidad de goce.” p. 133
“Esta definición de ser hablante como equivalente al inconsciente es
completamente diferente de la definición del inconsciente como sujeto tachado,
porque eso incluye, bajo cierto estatuto, bajo una forma que no es simplemente
visual ni orgánica, una referencia al cuerpo.” p. 270-271
La experiencia de lo real en la cura psicoanalítica (1998 – 1999).
Editorial Paidós, Buenos Aires, 2003
“Situarlo [al inconsciente] respecto de lo real es indicar que el inconsciente es
sobre todo un soliloquio, un hablar solo en el semblante para protegerse de
lo real, es volver el psicoanálisis imposible o hacer de este una excepción, que es
donde se ubica la última enseñanza de Lacan.” p. 34
Los usos del lapso (1999 – 2000). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2005
“El inconsciente –repetición, es el inconsciente en tanto manifiesta como
la repetición de lo mismo, bajo especies de “una vez más”, que obedece a la
recurrencia del más–uno. De ese lado, del lado del inconsciente –repetición,
puede desplegarse una ontología del inconsciente, destacarse aquello que del
inconsciente es real.” p. 223
El lugar y el lazo (2001 – 2002). Editorial Pálidos, Buenos Aires,
2013
“(…) para Freud el inconsciente era algo real. Para él sin duda la disciplina del
psicoanálisis era una disciplina de lo real. Esto no deja de ser paradójico, dado
59
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“La hipótesis del inconsciente que él introdujo no entra en contradicción con su
índice de real, sino que permite aportar una ganancia de sentido, una ganancia
semántica sobre lo real. En esa posibilidad de dar sentido a los síntomas Freud
veía una prueba del inconsciente, lo real del inconsciente.” p. 54
“Cuando aportó lalengua, pasó a considerar el leguaje, la gramática y la
estructura como meras elucubraciones (…) Esto es correlativo del reemplazo
sistemático del término sujeto por el término parlêtre (…).” p. 116
“(…) que lo real está en otra parte, particularmente en el traumatismo, y que
este siempre es traumatismo de goce, mientras que el inconsciente, en la medida
en que es proceso primario, tiene la función de taponar ese real, amortiguarlo,
velarlo.” p. 319
“La referencia del nudo borromeo no es entonces el sujeto del inconsciente, ya
que la definición del sujeto incluye al Otro, sino el parlêtre.” p.323
“Un psicoanálisis somete al parlêtre a la experiencia del sentido. Somete lo que
para él tiene sentido a la experiencia de enunciarlo. (…) y la pregunta es si
por esta experiencia él accede a un real, es decir una posición que ex–sista al
sentido.” p. 334
“(…) en la última enseñanza de Lacan el inconsciente recibe al menos un
estatus doble: unas veces es referido a la suposición del discurso analítico, y otras
depende de la ex–sistencia, a tal punto que Lacan puede considerarlo real. (…)
navega en esta problemática, no se detiene.” p. 344
“(…) el inconsciente no es tanto un saber que no se sabe, cuanto un no saber
hacer con. Por eso Lacan propone una categoría nueva, la debilidad mental, (…)
significa que el parlêtre está aquejado de la disarmonía con lo simbólico, lo real y
lo imaginario.” p. 396
“Es un esfuerzo por situar el inconsciente en el nivel de lo real fuera–de–sentido.
Darle sentido supone que le prestemos atención, pero al hacerlo nos engañamos
(…).” p. 415
Piezas Sueltas (2004 – 2005). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“(…) la diferencia entre el síntoma y el sinthome es un eco de la diferencia entre
el lenguaje y lalengua.” p. 19
60
Jacques – Alain Miller
que evidentemente es ante todo una disciplina de la palabra (…) ¿Cómo podría
esta disciplina de la palabra ser también una disciplina de lo real?” p. 51
EL CUERPO HABLANTE
“(…) las formaciones del inconsciente no son más que bordados en torno del
cogollo de lo real, desde la cual la meta del análisis es aislar ese cogollo, y para
hacerlo habrá que dejar caer el bordado.” p. 39
“¿Cuál es pues la diferencia entre el sinthome y el síntoma? Que el sinthome
designa precisamente lo que el síntoma tiene de rebelde al inconsciente, lo que
en el síntoma no representa al sujeto, lo que en el síntoma no se presta a ningún
efecto de sentido que produzca una revelación.” p. 72
“La noción de real sin ley es la más precisa formulación de la noción–a construir,
a inventar– de un real que sería exterior a lo simbólico, es decir, un real que
captamos antes de la formación regular del inconsciente ECUL.” p. 164
El Ultimísimo (2006 – 2007). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“Cuando (…) el espacio de un lapsus ya no tiene ningún alcance de sentido (o
interpretación) solo entonces uno está seguro de estar en el inconsciente”. (…)
esta frase –en realidad muy sorprendente– enuncia la disyunción entre el
inconsciente y la interpretación.” p. 12
“(…) uno está seguro de estar en el inconsciente cuando no hay esta conexión
transferencial (…).” p. 14
“Lo que guía a Lacan al final de su Seminario El Sinthome (…) hace del
inconsciente un real (…) como exterior al sujeto supuesto saber, exterior a la
máquina significante que produce sentido de sobra, si se la deja funcionar según
lo que uno se cree obligado de hacer.” p. 18
“(…) en el capítulo IX de El sinthome estamos, por el contrario, en el camino de
un inconsciente que es, por decirlo así, el discurso del Uno, este Uno del cual
Lacan dice que plantea problemas, ya que se trata de un Uno solo.” p. 75
“La hipótesis lacaniana sería entonces que este agujero en lo real, este agujero
constituido por la ausencia del Otro del Otro, sería el soporte del inconsciente.”
p. 91
“Pero al cuestionar la noción misma de finalidad significante de las formaciones
del inconsciente, Lacan aísla el inconsciente real, que es un inconsciente sin
represión.” p. 101
“(…) allí donde Lacan hablaba de orden simbólico (…) diría que después trató
más bien con el cuerpo de lo simbólico, que se llama lalengua. En la ultimísima
enseñanza de Lacan, el cuerpo de lo simbólico está en el lugar antes ocupado por
el orden simbólico.” p. 254
61
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Clase del 26 enero 2011 “… donde la primera opción hegeliana de
Lacan, le permite inscribir al psicoanálisis en el registro de la ciencia. Es ella la
que permite afirmara que lo real del que se trata en el psicoanálisis es un real
estructurado; lo dice bajo la forma de: El inconsciente está estructurado como un
lenguaje.”
Clase del 26 enero 2011 “Ha sido repetida como si se tratase de una
fórmula de levitación, pero sólo guarda el sentido lacaniano siempre y cuando
llegue a captarse… ¡que el inconsciente es real!’’
Clase del 26 enero 2011 “… la proposición: hay saber en lo real. Algo
que constituye, al fin de cuentas, desde Galileo, el postulado científico según el
cual la naturaleza está escrita en signos matemáticos. Desde esta perspectiva, el
inconsciente es para Lacan una estructura, es decir, un saber en lo real. Se trata
de saber cuál, pero hay saber en lo real.”
III /c. Cuerpo hablante
“Nota paso a paso”, El Seminario, Libro XXIII, El Sinthome.
Editorial Paidós, Buenos Aires, 2006
“(…) Lacan se pregunta entonces por el verdadero origen del significante Uno
(p. 128 y 129). (…) sugiere que el cuerpo podría ser el modelo, es decir, el
origen imaginario, no del uno–solo, que es significante, marca, trazo, corte, sino
del uno–extra, que es el conjunto vacío. Es decir simplemente que el cuerpo
existe como bolsa de piel, vacío, por fuera y al lado de sus órganos.” p. 20
III /c.1 Los Cursos psicoanalíticos
Donc. La lógica de la cura (1993 – 1994). Editorial Paidós, Buenos
Aires, 2011
“El problema es la pulsión. Sin duda en ella están en juego datos que
llamaremos corporales. Pero la pulsión, (…) en su uso analítico, no es un
mensaje.” p. 155
“(…) Freud aísla dos rasgos del goce. Primero, que está ligado a una función
vital pero que se independiza de ella. Segundo, que no tiene un objeto
62
Jacques – Alain Miller
El ser y el Uno (2010 – 2011). Inédito en español
EL CUERPO HABLANTE
sexual exterior, sino que es autoerótico y concierne al propio cuerpo; (…) el
goce encuentra su satisfacción, y su meta ha de hallarse en la zona erógena
misma.” p. 277
“El deseo depende de la articulación significante y corre bajo el significante
como una especie de significado. Por desplazarse así, se presta a ser confundido
con la vida, con el movimiento de la vida, pero hay que distinguirlo de la
pulsión, que concierne al cuerpo.” p. 354
“(…) Lacan retoma al comienzo de su Seminario Aún: el gozar del cuerpo del
Otro va al lugar de cierto gozar del cuerpo propio. Es decir que lo que funda eso
que llamamos acto sexual es esta transferencia de goce. (…) lo que se transfiere
en la forma de objeto de goce es la sustracción de goce en el nivel del uso del
órgano y, más generalmente, en el nivel del cuerpo propio.” p. 475
La experiencia de lo real en la cura psicoanalítica (1998 – 1999).
Editorial Paidós, Buenos Aires, 2008
“Hay un cuerpo que habla, que goza por diferentes medios. El lugar del goce
es siempre el mismo, y el cuerpo puede gozar masturbándose o simplemente
hablando. Por hablar, este cuerpo no está ligado al Otro, solo está unido a su
propio goce, a su goce Uno.” p. 273
“El cuerpo no depende del ser, sino del tener, y eso es lo que acentúa
sorprendentemente Lacan en la frase el hombre tiene un cuerpo, que es encarnado
en el derecho inglés en la fórmula del hábeas corpus.” p. 310
“Esta clínica se encuentra en el horizonte de lo que llamo biología lacaniana. Se
trata de la recuperación de la sintomatología a partir de los acontecimientos del
cuerpo (…).” p. 321
“Los cuerpos de la especie humana son la vergüenza de la creación porque están
enfermos de la verdad. Y es que esta –la verdad variable, la verdad que habla, la
verdad que cambia– trastorna la relación del cuerpo con el mundo y con el puro
real.” p. 363
“(…) para precisar esta definición del acontecimiento del cuerpo podría decirse
que es una condensación. (…) se trata siempre de acontecimientos discursivos
que dejaron huellas en el cuerpo, que lo perturban y producen síntomas en él,
pero solo en la medida en que el sujeto en cuestión sea apto para leer y descifrar
estas marcas.” p. 373
63
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) la no relación sexual es el acontecimiento lacaniano en el sentido del
trauma, ese que deja huellas en cada uno –no como sujeto sino como hablante–,
en el cuerpo, huellas que son síntoma y afecto.
Y es lo que le permite a Lacan definir el amor como el encuentro con todo
lo que marca en cada uno, en un cuerpo, la huella de su exilio de la relación
sexual.” p. 386
“Así, para dar cuenta del afecto como acontecimiento del cuerpo, nos
despegamos de la figura sublimatoria de la significantización para sustituirla por
esta función de corporización.” p. 398
“(…) la corporización es susceptible de ilustración antropológica (…) en el
cuerpo como superficie sobre la cual se escribe, se decora, se pinta, o en ese del
que se sustrae la sustancia, que a veces se mutila. En todas estas operaciones
resulta evidente la corporización del significante.” p. 398
El lugar y el lazo (2000 – 2001). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“Al tener un cuerpo tenemos un mundo (…) El cuerpo, se dirá, tiene empero un
lazo con lo real, porque si queremos encontrarlo este lazo está en la instancia, en
la insistencia del goce.” p. 62-3
“(…) hay que prestar atención, ya que relacionar lo simbólico con el cuerpo no
es para Lacan relacionarlo con lo real. El cuerpo no es lo real. En la tripartición
R–S–I de Lacan, el cuerpo está asignado a lo imaginario, mientras que la vida
puede ser un nombre de lo real. Por lo tanto, inscribamos una disyunción al
menos posible entre el cuerpo y el ser vivo.” p. 320
“Que el goce del cuerpo propio sea opaco vuelve tanto más interesante
el psicoanálisis, pues en efecto eso significa que la operación propia del
psicoanálisis es un forzamiento que relaciona el goce con el sentido para
resolverlo, una resolución que aquí significa desanudamiento.” p. 389
Piezas Sueltas (2004 – 2005). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“Desde el punto de vista psicoanalítico cabe también decir –es lo que a mi
entender implica el Seminario El sinthome– que el cuerpo es comparable a un
montón de piezas sueltas. No lo notamos en la medida en que permanecemos
cautivados por su forma, en la medida en que la pregnancia de su forma impone
la idea de su unidad.” p. 15-16
64
Jacques – Alain Miller
“(…) el significante no tiene solamente efecto de significado, sino también de
afecto en un cuerpo. El término afecto debe ser entendido en sentido amplio: se
trata de lo que perturba, deja huella en el cuerpo.” p. 376-377
EL CUERPO HABLANTE
“Los órganos son piezas sueltas. Como lo vemos en la esquizofrenia, el
sujeto debe encontrarles una función: aquí vemos desplegarse el hecho de la
fragmentación, cuando la operación de unificación imaginaria no intervino.”
p. 17
“(…) el principal ejemplo de pieza suelta en psicoanálisis, que es el falo, ese
órgano fálico que, como pieza separada del cuerpo, deviene significante en el
discurso analítico.” p. 17
“(…) lo que un análisis revela de entrada es la adoración que quien habla tiene
por su cuerpo en la medida que experimenta su consistencia –su consistencia
imaginaria, ya que en lo tocante a su materia, o más bien a sus órganos, ya es
bastante increíble que puedan mantenerse unidos durante cierto tiempo.”
p. 36
“Lo que afecta al cuerpo debe entenderse, según Lacan, como un modo del
goce. Por eso, la experiencia psicoanalítica desde la perspectiva lacaniana obliga a
adjudicar al cuerpo otra sustancia cuyo modo es ese cuerpo, a saber –para decirlo
al modo cartesiano–, la sustancia gozante.” p. 44
“(…) el yerro es un concepto que va en yunta con el goce. El goce es propio del
cuerpo así como el yerro es propio del pensamiento. El yerro se sigue del cuerpo
y de su goce.” p. 44
“(…) el cuerpo hablante es el inconsciente, que el cuerpo hablante en cuanto
inconsciente es real, y que el precio de esta definición es que en él hay misterio.”
p. 57
“La perspectiva borromea apunta a disolver el misterio del cuerpo hablante, que
es el misterio del inconsciente, mediante la intrusión del nudo borromeo, y esto
al precio de la disyunción previa de los tres registros: lo simbólico, lo imaginario
y lo real.” p. 58
“Todo lo que Lacan formula acerca del cuerpo apunta a constituirlo como una
entidad aislada. Por eso su argumentación se teje en torno de esta frase central: el
cuerpo nos es extraño.” p. 64-65
“(…) la última enseñanza de Lacan es –¿cómo decirlo?– más realista al no tomar
como referencia el lenguaje sino lalengua concebida como una secreción, la
secreción de cierto cuerpo, y al ocuparse menos de los efectos de sentido –los
hay– que de esos efectos que son afectos.” p. 71
“El corazón de la operación analítica apunta a la relación con el cuerpo, a los
acontecimientos de cuerpo, que no hacen todo ese ruido, que no son conocidos,
65
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“El psicoanálisis no opera entonces en el lazo social, ni siquiera tanto en la
relación sexual, sino en la relación corporal.” p. 394-395
“(…) la propuesta esencial de Lacan para el psicoanálisis es no entrar en esa
pesadilla, en la pesadilla de la historia, sino despertarse de ella, como dice Joyce,
y mantenerse lo más cerca posible de la relación entre el decir y el cuerpo, es
decir, de lo que la tradición analítica denomina pulsiones.” p. 398
“(…) esa consistencia se basa en una relación del parlêtre con su cuerpo. Hay
aquí una relación. La relación que Lacan perdió en el nivel sexual, la relación
cuya inexistencia en el nivel sexual formuló, reaparece en el nivel corporal. En
cierto modo James Joyce sirve de ejemplo de un Hay una relación corporal.”
p. 417
“(…) habría que oponer la adoración del cuerpo propio a la yoización del
cuerpo propio. La primera relación, la de adoración del cuerpo, sigue siendo una
relación de tener, mientras que la segunda es una relación de ser.” p. 419
El ultimísimo Lacan (2006 – 2007). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2013
“Se trata de un tener que uno lleva consigo (…). El cuerpo es un mueble. Se
lo puede movilizar, transportar, pero en relación con el sujeto, con el sujeto
tachado, simbólico, lo que es del orden de lo imaginario, es decir, el cuerpo, es
fundamentalmente extranjero.” p. 79
“El ego se establece a partir de la relación con Un–cuerpo. No hay ahí
identificación, hay pertenencia, propiedad. No se divide según la modalidad
del trozo del rasgo unario, (…) no apunta al punto de falta del otro sujeto.
Sin embargo, tiene que ver con el amor, pero no el amor al padre sino el amor
propio, en el sentido del amor del Un–cuerpo.” p. 108
“(…) Lacan sólo se preocupa por poner de relieve la resonancia corporal de
la palabra, es decir, el eco del decir en el cuerpo. (…) el circuito de la palabra
pone la oreja en función (…) y el agujero corporal de la boca (…) y la voz, su
resonancia en el cuerpo. (…) esta resonancia pone en función el cuerpo y el
lenguaje, y el circuito del sentido pasa por estos dos polos.” p. 170
“Queda una x que es la poesía (…) una poesía que operaría una relación directa
del significante con el cuerpo. (…) Por lo tanto, ni gramática, ni lógica: poesía.”
Jacques – Alain Miller
que son imperceptibles, que carecen de fanfarria, que son algo tan tenue como
ese sentimiento de un dejar caer del cuerpo.” p. 394
EL CUERPO HABLANTE
Sutilezas Analíticas (2008 – 2009). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2011
“(…) está lo singular del sinthome donde eso no le habla a nadie. (…) No es
un acontecimiento de pensamiento, no es un acontecimiento del lenguaje,
es un acontecimiento del cuerpo. Falta aún saber de qué cuerpo. No es un
acontecimiento del cuerpo especular, (…) sino un acontecimiento del cuerpo
sustancial, ese que tiene consistencia de goce.” p. 106-107
“¿Cuál es la relación entre el cuerpo que se goza y la palabra? Para Lacan, el
cuerpo no se goza sino con la condición de corporizarlo de manera significante (…).”
p. 251
“(…) ¿Qué es esta referencia, la corporización significante? Si trato de
representarla, me topo, en la pista que nos da Freud en ‘Pegan a un niño’ con
la flagelación. Y es que en la escena de la flagelación tenemos la relación (…)
más inmediata, entre el significante y el cuerpo, tenemos casi la matriz de la
incidencia del Otro sobre el cuerpo, al que marca como carne para gozar.”
p. 251
“Lacan lo llama la gloria de la marca, y si la ubica en la raíz del fantasma, es
porque se refiere por supuesto al texto princeps de Freud. El cuerpo golpeado es
al mismo tiempo el cuerpo glorioso, el que mereció que el Otro se esfuerce en él
para dejarle su huella.” p. 251
“Cuando arriesgamos la expresión sustancia gozante, se trata de la sustancia
corporal, se trata del cuerpo viviente considerado como sustancia y cuyo atributo
principal sería el goce como afección del cuerpo. El goce sería propiedad y
afección del cuerpo viviente.” p. 272-273
III /c.2 Otros Textos
Revistas Freudianas. Revista psicoanalítica editada en Barcelona bajo
los auspicios de la ELP (Escuela Lacaniana de Psicoanálisis)
El ultrapase. Freudiana Nº66. 2012 http://www.freudiana.com/
revistas.php?idrevista=15
“La raíz del Otro es el Uno. El serhablante es aquel que, al hablar, superpone un
ser al cuerpo que tiene. Superpone el ser al tener, a su tener esencial que es el
cuerpo. El serhablante es, si puedo decir, el na Kun corps.” p. 18
p. 211
66
67
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
La causa lacaniana. Freudiana Nº67. 2013
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=8
“Lo (…) que se despeja una vez el discurso se ha desasido de la relación
sexual, es la conjunción del Uno y el cuerpo.” p. 19
“Lo que Lacan denomina el cuerpo es la encarnación del Ello freudiano, es decir,
el cuerpo en tanto que se goza.” p. 19 De la falta en ser al agujero. Freudiana Nº70. 2014
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=2
“Ese hay lo Uno que persiste es el nombre de lo que Freud denominó restos
sintomáticos. El goce viene a un primer plano, el goce del cuerpo que llamamos
el cuerpo propio y que es el cuerpo de lo Uno.” p. 18 “A partir de la jaculatoria hay lo Uno (…). El cuerpo aparece entonces como
lo Otro del significante y en la medida en que está marcado, que el significante
ha provocado en él un acontecimiento. A partir de aquí ese acontecimiento del
cuerpo que es el goce aparece como la verdadera causa de la realidad psíquica.”
p. 18
III /d. Sinthome
III /d.1 Los Cursos psicoanalíticos
El lugar y el lazo (2000 – 2001). Buenos Aires, Editorial Paidós, 2013
“(…) la última enseñanza de Lacan opera una transmutación que se apoya en el
rechazo del sentido. Lacan no aportó el termino sinthome para hacerse el vivo,
sino para instalar, como algo central en la clínica, una instancia en la que ya no
se diferencia entre el síntoma y el fantasma. Cuando ustedes no los diferencian,
¿cómo hacen para ir más allá del uno hacia el otro? Les han cortado la ruta del
más allá, si me permiten. El nudo borromeo es una máquina de cortar el más
allá. Ya no pueden transgredir una barrera hacia el goce cuando Lacan elabora
un goce que está por todas partes, cuando renuncia a hacer la distinción entre el
placer y el goce, y cuando formula: que ‘donde eso habla, goza’.” p. 115
68
Jacques – Alain Miller
“(…) en su raíz, el significante viene a percutir lo real, el cuerpo. Y ese choque
inicial, ese traumatismo, produce en el serhablante una falla que es tanto el falo
como la falta, o aún, en inglés, el sin, el pecado, como dice Lacan destacando la
primera sílaba de la palabra sinthome.” p. 19
EL CUERPO HABLANTE
El Desencanto del Psicoanálisis (2001 – 2002). Inédito en español
Clase del 8 mayo 2002 “Perdimos la seguridad de lo discontinuo
y lo estanco y el resultado es que el síntoma se vuelve la unidad elemental de la
clínica y ya no eso que llamábamos la estructura clínica que era una clase. Es el
síntoma el que se convierte en unidad elemental de la clínica y, después de todo,
el síntoma –eso que Lacan llamó el sinthome hacia el final de su enseñanza–, es
la versión lacaniana de la fragmentación de las entidades clínicas en el DSM.”
Piezas Sueltas (2004 – 2005). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“Pero el sinthome que Lacan inventa después de su Seminario Aún es, por el
contrario, una pieza suelta. Si me permiten, es una pieza que se separa para
disfuncionar, una pieza carente de función, o que no tiene otra que la de trabar–
así es como se la aísla– las funciones del individuo. (…) lejos de ser tan solo
una traba, en una organización más secreta la pieza suelta tiene una función
eminente. De ahí la idea de que en el análisis es cuestión de encontrarle, de
improvisarle, una función.” p. 20
“Digamos que el enunciado No hay relación sexual es el lado negativo del hecho
positivo que es Hay sinthome.” p. 23
“¿Cuál es pues la diferencia entre el sinthome y el síntoma? Que el sinthome
designa precisamente lo que el síntoma tiene de rebelde al inconsciente, lo
que en el síntoma no representa al sujeto, lo que en el síntoma no se presta a
ningún efecto de sentido que produzca una revelación. Efectos de sentido hay
hasta el hartazgo, son casi automáticos, pero con el sinthome se desvanece la
representación.’’ p. 72
“(…) la perspectiva del sinthome es ante todo –creo haberlo dicho ya aquí– la de
positivar la reacción terapéutica negativa.” p. 109-110
“Tal vez ahora comprendan que Lacan no se reía en la cara de su auditorio
–un poco sí, es cierto– cuando hacía sus presentaciones de enfermos y decía
que el tipo que estaba ahí –y que era el sinthome en estado puro– era normal.
Pues bien, eso simplemente significaba que eso es lo más normal, que ese es
el caso normal. El condensado de las neurosis y todo el resto es sin duda una
degradación de las capacidades multiformes y multívocas que puede presentar la
especie humana.” p. 189
69
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
El ultimísimo Lacan (2006 – 2007). Editorial Paidós, Buenos Aires.
2013
“(…) Lacan objeta que el psicoanálisis sea un sinthome, lo que significa que el
psicoanálisis no es del orden de lo real. (…) El psicoanálisis funciona en el nivel
de la realidad.” p. 91
“Cuando hay relación sexual, solo puede ser dentro de la relación con una
alteridad interna a la estructura del parlêtre. A eso le debemos la conocida
oposición que se encuentra en el Seminario El sinthome entre el sinthome y el
estrago: la mujer hace sinthome, el hombre hace estrago. En eso se puede decir
que Lacan salva la relación sexual, pero indexándola a una alteridad interna a la
estructura del parlêtre.” p. 114
“El síntoma está articulado como un lenguaje de la misma forma que el
inconsciente. Como el inconsciente, está fracturado entre significante y
significado, y por eso su mansión o su casa pueden ser tanto el cuerpo como el
pensamiento (…).” p. 132
“Pues bien, a esta definición de síntoma, me contento con oponerle la definición
del sinthome, y en primer lugar por la negativa, a saber, que el sinthome no es una
formación del inconsciente. El sinthome tiene con el inconsciente una relación
mucho más compleja y, en todo caso, distinta.” p. 132
“El sinthome es lo singular en cada individuo.” p.
132
“Le doy aquí al identificarse con su síntoma el valor de reconocer su identidad
sinthomal. No significa (…) que se llegaría simplemente a identificarse con su
síntoma, sino que se es su sinthome. Identificarse con eso, ser su sinthome, es
librarse, después de haberlas recorrido, de las escorias heredadas del discurso del
Otro.” p. 140
Sutilezas Analíticas (2008 – 2009). Editorial Paidós, Buenos Aires,
2011
“El punto de vista del sinthome borra la distinción neurosis–psicosis cuando
destaca el modo de gozar en su singularidad, es decir, sustrayéndolo de las
categorías.” p. 76
“La incidencia del concepto de sinthome es profundamente desestructurante,
borra las fronteras del síntoma y del fantasma, de la neurosis y de la psicosis.”
p. 77
“¿Qué es un analista en la clínica del sinthome? Por lo menos, es un sujeto que
ha percibido su modo de gozar como absolutamente singular, la contingencia
70
Jacques – Alain Miller
EL CUERPO HABLANTE
de ese modo de gozar, que ha captado –¿de qué modo?– su goce como fuera de
sentido.’’ p. 95
“Sin duda, allí donde eso habla eso goza, pero la orientación hacia el sinthome
acentúa que eso goza allí donde eso no habla, donde no produce sentido.”
p. 107
“Y así como Lacan había invitado al analista a ocupar el lugar del objeto a, en
El Seminario 23 formula que el analista es un sinthome. Como está sostenido
por el sinsentido, se lo exime de sus motivaciones, no se explicará. Más bien
representará el acontecimiento corporal, el semblante del traumatismo. Y tendrá
que sacrificar mucho para merecer ser –o ser tomado por– un trozo de real.”
p. 107
“Por supuesto que un análisis que dura pide atravesar el estancamiento,
soportarlo, es decir, explorar los límites: la jaula del sinthome, es, si se quiere,
lo que llamaba hace tiempo la experiencia de lo real según la modalidad de la
inercia.” p. 114-115
“Hay un funcionamiento que incluye el exceso, que lo vuelve rutina, y es eso lo
que Lacan llama sinthome.” p. 120
“Si el pasante de la doctrina clásica se supone que testimonia un saber, el
que Lacan nos plantea al final de su enseñanza –cuando está preparando,
elucubrando el concepto de sinthome, es decir, se está enfrentando sin mediación
al estatuto del goce– solo puede testimoniar una verdad mentirosa.” p. 128
“Lacan llama sinthome a algo que no es susceptible de atravesamiento, fractura ni
anulación, no puede ser reconducido a cero. La idea es más bien que la relación
del sujeto con el sinthome se vuelva satisfactoria.” p. 162
“En resumen, no trascendencia del goce, sino inmanencia, que es la extensión
conceptual del fantasma que Lacan llamó sinthome. Debió inventar un
neologismo –que es de hecho un arcaísmo– para marcar que no se trata del
síntoma–formación del inconsciente, sino del síntoma como el nuevo nombre
de las formaciones del inconsciente: mientras que el sinthome designa el
conjunto de estas formaciones y, más allá, su fondo de goce, su fondo libidinal.”
p. 178
“Por lo tanto, hoy termino con una lección de modestia, de mesura. Lo más
difícil de alcanzar no es el hombre nuevo, no es el nuevo nacimiento, no es la
tierra prometida (el sinthome no tiene tierra prometida). Hay simplemente un
andar bastante mejor. Cuando este se instala, cuando dura, cuando les cuesta
menos –y más, en particular, el análisis– pues bien, ya es suficiente.” p. 180
71
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“La cuestión se ordena y despunta en la fórmula que propongo: ¿cómo se
conjugan el cuerpo y el lenguaje para hacer gozar? Mi respuesta –que no es tal
porque se apoya en un concepto de Lacan que tiene su propia complejidad– (…)
es que para producir goce, el cuerpo y el lenguaje se conjugan en el sinthome. El
sinthome domina el cuerpo, pero es articulación. Y justamente decimos sinthome
porque no hay abordaje directo del goce, porque este goce bruto, imaginario,
siempre está refractado por el sinthome.” p. 285
“Por algo para calificar la cima de la relación con el goce, Lacan eligió la palabra
sinthome, que es una modificación, justificada por la etimología, de síntoma,
término del vocabulario freudiano del que, Aúnque quiere decir muchas cosas,
destaco su sentido de sustitución.” p. 285
“Por lo tanto, la teoría del goce debe ser ella también, si me permiten
desedipizada, lo que implica que lo que se nos da de goce no conviene a la
relación sexual, y por eso el goce produce sinthome. El sinthome de Lacan
simplemente es el síntoma generalizado, el síntoma por cuanto no hay
pulsión sexual total. Y eso produce síntoma, pero un síntoma, si me permiten,
irremediable.” p. 289
“No hay atravesamiento del fantasma…Pero ¿qué ocupa su lugar? Primero
la semblantización del sentido, que es la reducción de la verdad a la verdad
mentirosa. Si no se juega en relación con el fantasma sino respecto del sinthome,
el pase no es la revelación de la verdad. Revela que la verdad es mentirosa, que el
sentido es semblante.’’ p. 303
“Este pase del sinthome es también querer el eterno retorno de su singularidad
en el goce. Como el guerrero aplicado, se trata de un parlêtre que ya no estaría
atormentado por la verdad. Ese final sin duda es él mismo contingente. Quizás
el final de análisis tenga la estructura del encuentro.” p. 303
El ser y el Uno (2010 – 2011). Inédito en español
Clase del 9 febrero 2011 “Hay no obstante una segunda versión
de lo real, diferente del trozo, fragmento o tramo final, aquella que Lacan llama
el sinthome. Se trata por cierto de otra cosa; en la medida en que el sinthome es
un sistema, se sitúa mucho más allá del trozo de real: el sinthome es lo real y su
repetición.”
Clase del 2 marzo 2011 “Entre esos dos extremos ¿qué era el
pase? Era la idea según la cual una cierta revelación de la verdad podía tener
72
Jacques – Alain Miller
“Y lo que Lacan llamó al final sinthome es un concepto que trata de acercarse a la
sustancia gozante, a la dimensión óntica del goce.” p. 252
EL CUERPO HABLANTE
consecuencias en lo real; con mayor precisión, podía tener esta consecuencia que
se llama la caída del objeto a, es decir, despegar al sujeto de su ventana abierta a
lo real, de aquello que otorga para el significación a lo real. El punto de vista del
sinthome, en cambio, es el de considerar que esa revelación de algo de la verdad
deja intacto lo real.”
Clase del 23 marzo 2011 “Lacan pudo generalizar la instancia de
este goce mudo que él descubría en la sexualidad femenina. En el fondo, más
tarde la extendió también al varón para decir que es esa instancia la que acuerda
el estatuto fundamental del goce como opaco al sentido. Por esta razón tuvo que
inventar el regreso a la escritura del sinthome, a distinguir de síntoma.”
Clase del 23 marzo 2011 “El goce repetitivo, el que damos en
llamar de la adicción y precisamente lo designado por Lacan como sinthome se
ubica en el nivel de la adicción, sólo guarda relación con el significante Uno, con
el S1. Esto quiere decir que no tiene relación con el S2, representante del saber.”
Clase del 30 marzo 2011 “El sinthome queda definido como
un acontecimiento de cuerpo que de toda evidencia da lugar a la emergencia
de sentido; a partir de ese acontecimiento, una semántica de los síntomas se
despliega, pero en la raíz de los síntomas freudianos que hablan con tanta
elocuencia y se descifran en el análisis, que producen sentido, hay un puro
acontecimiento del cuerpo.”
Clase del 4 mayo 2011 “Les hago notar que todo esto procede de la
saeta de Lacan, esa breve oración ‘Haiuno’. ‘Haiuno’ significa: más allá del des–
ser, existe, permanece, queda el sinthome, el acontecimiento del cuerpo.”
Clase del 18 mayo 2011 “Si resulta tan difícil circunscribir el
sinthome es precisamente porque no tenemos para hacerlo puntos de referencia
en el imaginario, como tampoco en el sentido, como no sea negativamente.”
Clase del 18 mayo 2011 “Se trata de algo que no es una
representación, no es una Imago, no es un fantasma, algo acerca de lo cual diré,
de manera general y valiéndome de un término griego que no es del orden de
la idea, tal como se la entiende en oposición a la energeia. El sinthome no es idea
sino energeia y la energeia griega encuentra aquí su nombre lacaniano de goce.”
Clase del 18 mayo 2011 “En primer lugar, Haiuno, fórmula que
constituye una reducción sensacional de lo simbólico y en particular, de la
articulación para despejar como su real esencial la iteración; la iteración como
núcleo, centro, como aquello que permanece de la articulación y que Lacan
formula cuando dice El sinthome, de hecho, es un etcétera.”
73
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
punto de llegada, una conclusión de la clínica de Lacan, diremos –como ya tuve
ocasión de hacerlo– que es el término alrededor del cual gira su última clínica,
tal como aparece formulado en el Seminario 23. Esto ocurre después de haber
emitido su Haiuno, después de haber reducido lo simbólico al Uno, de haber
renegado decididamente de la ontología para reportarse a la lógica y haberlo
dicho fundado en la lógica.”
Clase del 25 mayo 2011 “Es algo que tiene lugar en su Seminario
O peor y continúa en su célebre Seminario Aún, el Seminario 20. De los dos
últimos Seminarios de Lacan, el 24 y 25, el último tramo de su enseñanza,
que me ocupé de deletrear con ustedes tiempo atrás, no se desprende una
consistencia clínica tan operativa como la que surge del Seminario El sinthome.”
Clase del 25 mayo 2011 “¿Qué era lo que ocupaba antes ese mismo
lugar en la enseñanza de Lacan, ese lugar de consistencia clínica a partir del cual
el analista ubica su operación? Pues bien, antes del sinthome –que ubico entonces
en tercer lugar– tenemos el fantasma, aquél cuyo atravesamiento supuestamente
representa ser, hace existir la conclusión del análisis.”
Clase del 25 mayo 2011 “Tendríamos entonces: formaciones del
inconsciente, fantasma, sinthome. De modo que si consideramos la enseñanza
de Lacan a partir del momento puntuado por él mismo como el del comienzo,
«Función y campo de la palabra y del lenguaje», y sus seis primeros Seminarios,
queda allí indicado que la operación del analista se dirige, apunta a las
formaciones del inconsciente. Es a continuación y progresivamente que viene a
centrar la conclusión del análisis en el fantasma. Después, la única consistencia
nueva que aparece es la del sinthome.”
Clase del 25 mayo 2011 “¿Cuál es la buena manera de ser herético
en la práctica psicoanalítica? [Lacan] Propone al respecto una fórmula que
es a meditar: esa manera es la que, por el hecho de haber reconocido bien la
naturaleza del sinthome, no se priva de servirse de él de manera lógica, es decir,
de hacerlo alcanzar su real, más allá del cual deja de estar sediento, los reenvío a
la pág.15 del Seminario El sinthome.”
Jacques – Alain Miller
Clase del 25 mayo 2011 “Si quiero inscribir el sinthome como un
EL CUERPO HABLANTE
restos sintomáticos de sus pacientes y que lo condujo a decir: después de un
tiempo de latencia, uno espera cinco años, luego vuelve a empezar y siempre
quedarán restos sintomáticos. Lacan avanza hasta el límite cuando considera
que siempre habrá restos sintomáticos, porque resistir al sentido es propio de la
naturaleza del goce.”
Clase del 25 mayo 2011 “En este punto, la herejía de Lacan a la
que busco darle esplendor, reside en poner distancia del sentido cuando se trata
del sinthome, en el fondo, así como el psicoanálisis implicado por Lacan como
ortodoxo provee sentido, este psicoanálisis hereje desteta del sentido al paciente.
Es, al menos, una práctica que corresponde al tiempo del más–allá–del–pase,
donde el analista tiene que vérselas con restos sintomáticos cuando el sujeto no
se ha librado de ellos.”
Clase del 15 junio 2011 “En cierto modo, la tensión se resolvió, para
Lacan, basculando del lado de la invención: el saber se inventa; pero también lo
radicalizó en el otro sentido, el del sinthome, que se repite sin que podamos nada
al respecto.”
Clase del 15 junio 2011 “Entonces, por un lado, radicaliza la
invención, invención para el analizante de una verdad que, de todos modos, será
mentirosa. Y por el otro radicaliza la inercia, el carácter estático de un sinthome
que se repite, pero lo hace de manera estacionaria. Porque esto es lo que viene a
subrayar la iteración; iteración quiere decir: es estacionario.”
Clase del 15 junio 2011 “Así, por un lado, radicaliza la dinámica de
la experiencia y por el otro, radicaliza también su aspecto estacionario. Algo que,
en efecto, produce un cierto desgarramiento, como también lo produce pensar
y admitir que el empuje de la invención no pueda corregir lo estacionario del
sinthome.”
Clase del 15 junio 2011 [El ser como creación de lenguaje] “Resulta
bastante evidente que se trata de algo con vocación de no tener límite, algo sólo
limitado por la iteración del sinthome, otra faz aún del Uno que se repite.”
Clase del 25 mayo 2011 “Se trata de un llamado a la naturaleza del
sinthome, en la perspectiva de dar alcance a su real, no a su verdad; la noción en
juego es la del sinthome como real, a distinguir de un retorno de lo reprimido.”
Clase del 25 mayo 2011 “Ubicado en lo real, el sinthome no se
apacigua con la verdad ni con el sentido, algo de lo cual Freud se había dado
cuenta muy bien cuando se encontró cargando con lo que designó como los
74
75
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Revistas Freudianas, Revista psicoanalítica editada en Barcelona bajo
los auspicios de la ELP (Escuela Lacaniana de Psicoanálisis)
El ultrapase, Freudiana Nº66. 2012. http://www.freudiana.com/
revistas.php?idrevista=15
“(…) en su raíz, el significante viene a percutir lo real, el cuerpo. Y ese choque
inicial, ese traumatismo, produce en el serhablante una falla que es tanto el falo
como la falta, o aún, en inglés, el sin, el pecado, como dice Lacan destacando la
primera sílaba de la palabra sinthome.” p. 19
“Lo real del sinthome, (…) es la pura percusión del cuerpo por el significante.”
p. 21
La causa lacaniana. Freudiana Nº67. 2013. http://www.freudiana.
com/revistas.php?idrevista=8
“(…) la causalidad real, (…) cuyo efecto central no es la imagen, no es el
fantasma, no es la imago capturada, sino el sinthome.” p. 18
El desnivel entre ser y existencia. Freudiana Nº 68. 2013. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=4
“El goce repetitivo, (…) en el que se sitúa el sinthome (…) es autogoce del
cuerpo por el sesgo del S1 sin el S2. Lo que hace la función de S2 en la materia,
la función del Otro, es el cuerpo mismo.” p. 22
El Otro sin Otro (Una lectura del Seminario 6). Freudiana Nº68.
Barcelona, 2013
“(…) (Lacan) finalmente definió el Nombre del Padre como un sinthome, es
decir, como un modo gozar entre otros.” p. 143
III /e. Escabel
III /e.1 Los Cursos psicoanalíticos
Piezas sueltas (2004 – 2005). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“(…) como Marcel Duchamp, supo colocar el mingitorio sobre el pedestal, le
inventó una función a su síntoma. (…) sin duda depende de ecos en el lenguaje,
un sujeto que lejos de hundirse en él, de ser esclavizado por él, tiene esa libertad
76
Jacques – Alain Miller
III /d.2 Otros Textos
EL CUERPO HABLANTE
de maniobra, ese margen que le permite construir con ese síntoma lo que en
otro lugar Lacan denomina su escabel, es decir, el pedestal sobre el cual ponemos
algo bello.” p. 20-21
“(…) es Finnegans Wake, la obra última de Joyce, (…) confiaba en esta obra para
hacerse lo que Lacan denomina su escabel (…) es el concepto inédito que Lacan
introduce a partir de James Joyce. Sin duda, es una burla concerniente a lo bello.
Es una versión sardónica, podría decir, de la estética. (…) Forjar un escabel es
lo que para Joyce está en juego, forjarlo a partir del afecto del cuerpo (…) que
Lacan da su nombre freudiano modificado, a saber, sinthome. Ese es el escabel.”
p. 47
“¿Cómo hacer de ese acontecimiento, de esa mediocre desgracia, algo que pudo
ser llamado bello y que no es más que escabel? Es un ideal, incluso el único
ideal que Lacan delinea en sus últimos Seminarios una vez despojado de las
ensoñaciones del lazo social, que había cultivado.” p. 48
“(…) el sujeto no solo aparece como un sujeto del significante, sino como un
sujeto del fantasma. El sujeto aparece encaramado sobre su fantasma (Lacan
hablará, al final de su enseñanza de un escabel), y la perspectiva es hacerlo caer de
ese fantasma y, por consiguiente, destituirlo como sujeto.” p. 161
“El escabel –nos dice con gran precisión Lacan en « Joyce el Síntoma »– está
condicionado por el hecho de que el hombre tiene un cuerpo y solo uno, un
cuerpo en el que sobrevienen acontecimientos.” p. 92
“En vez de hablar de la Aufhebung, Lacan hablaba del escabel, para mover el
propio cuerpo.” p. 187
Escabel / Sublimación
«Nota paso a paso. Sublimación = escabel». El Seminario, Libro
XXIII, El sinthome. Editorial Paidós, Buenos Aires, 2006
“A menudo Lacan nombró el medio elevatorio de la sublimación como operación
ascensional con el término hegeliano muy conocido Aufhebung. En su escrito «
Joyce el Síntoma » le da el nombre más expresivo de ‘escabel’.” p. 565-570
“El escabel hace hincapié en el cuerpo. Asimismo, Lacan designa el sinthome
como “acontecimiento corporal” (ibid., p. 569), cuando definía el síntoma
freudiano como “verdad” (E1, pp. 224 y 225). Joyce, ‘hereje’, partidario del
sinthome–rueda–cuando–te–empujo, “priva al sinthome de su madaquinismo” (p.
15). Pero esto no le impide querer treparse con su sinthome al “l’SK beau” de su
obra de arte.” p. 204
77
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“(…) el mero hecho de hablar es equivalente a una sublimación. La sexualidad
no está fuera de la estructura del lenguaje, ya que toda pulsión se ajusta a esa
falta central en ella, de modo tal que no hay ninguna convergencia respecto de
no se sabe qué pulsión genital. En definitiva, esta falta, que puede ser escrita –j,
es el lugar que refleja la sublimación.” p. 322
Piezas sueltas (2004 – 2005). Editorial Paidós, Buenos Aires, 2013
“Sublimación es una palabra sublime, pero eso mismo es lo que Lacan rebaja al
denominarla escabel (…) Como ven [Miller se sube a su silla], nos elevamos. Con
el escabel se les suben… los humos. Del escabel resulta lo Bello, lo Verdadero,
el Bien, todo ello del mismo orden –como bien lo había visto Víctor Cousin,
quien hizo un libro titulado con esos tres términos (…) El escabel: filosofía,
ética, estética. (…) lo Bello –que está en escabel. Lacan lo muestra escribiéndolo
S.K.beau [S.K.bello]. Ese es el nuevo nombre de la sublimación. ¿No es bello?
Tiene que ser bello. Hay que hacer de eso un objeto de arte.” p. 92
III /e.2 Otros Textos
El ruiseñor de Lacan (1999). Del Edipo a la sexuación. Editorial
Paidós, Buenos Aires, 2001
“(…) Aúnque la finalidad del síntoma, tomando una palabra kantiana, se ha
desvanecido, persiste su elemento formal. Por esta razón, y de manera correlativa
a la desinvestidura, se produce quizá necesariamente (…) una estetización del
síntoma. Se vuelve pues como “una finalidad sin fin” – que es la definición
kantiana del arte.” p. 261
Los seis paradigmas del goce (1999). EL Lenguaje aparato de goce.
Colección Diva, Buenos Aires, 2000
“(…) en Aún, Lacan nos da una versión de la sublimación que no implica al
Otro, sino como lo que es la salida propia de la palabra de goce, de la palabra
solitaria.” p. 178
78
Otros Autores/ Parlêtre
Los signos del goce (1986 – 1987). Editorial Paidós, Buenos Aires,
1998
EL CUERPO HABLANTE
4.
Otros autores
IV /a. Parlêtre
A
Abadi, Betty
Por la travesía del síntoma en el RSI. Entredichos N°9 y N°10.
VIII y XIX Jornadas de la Clínica Psicoanalítica. El Síntoma en
psicoanálisis. El fantasma en la experiencia analítica. Escuela del
Campo Freudiano, Caracas, 1994
“(…) para que algo exista es necesario que en alguna parte haya agujero, sin ellos
no habría nada que anudara y son estos anudamientos donde se deposita la ex –
sistencia, que se metaforiza a partir del goce fálico, fuera del cuerpo y en relación
a lo real que ex – siste, es decir, a partir de la toma del cuerpo por el significante
(…) Es cierto que ante la presencia del síntoma como reflejo de lo real hay algo
que no funciona, y es en la medida en que hay parlêtre, palabras del ser que se
representan la presencia de este agujero.” p. 37
Alazraki, Noemí
¿Un secreto en dos cuerpos? Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°16.
Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2014
“En el Seminario Aun Lacan evoca el misterio del cuerpo que habla, afectado en
su goce por el saber de lalengua, de manera siempre singular. Se trata del parlêtre,
aquel que reemplaza al sujeto disyuntor de la pulsión, aquel que tiene sustancia
de cuerpo, pensado mas allá de su estructura clínica, aquel que habla de una
historia que ignora.” p. 122
79
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Mesa redonda: El Lazo y el Síntoma. Virtualia N°19, Revista digital
de la Escuela de la Orientación Lacaniana, 2009. http://virtualia.eol.
org.ar/019/template.asp
“Dicho de otra manera si nos preguntaran que es lo que tienen en común los
seres hablantes tendríamos que decir: la imposibilidad. Qué es lo que tienen en
común los seres hablantes: la no relación. Y por eso mismo hacen vínculo, para
responder a la relación, a la imposibilidad, y esto es verdaderamente un modo
absolutamente distinto, les aseguro, de pensar lo social.” p. 64
Lacan, Foucault: el debate sobre el constructivismo. Virtualia Nº 7,
Revista Digital de la Escuela de la Orientación Lacaniana, 2003.
http://virtualia.eol.org.ar/007/default.asp
“Nunca se podrá decir que Lacan en su enseñanza haya promovido un
partenaire apropiado al parlêtre. Más bien indago en una soledad que pudiera ser
distinta a la del autismo de goce.”
Alfaro, Alba (responsable) Renato Andrade, Patricia Tagle, Gustavo
Zapata
Un real y los nudos. Trabajo para la Conversación de la NEL hacia el
IX Congreso de la AMP Un real para el siglo XXI
“Desde esta perspectiva “molestar la defensa” implica, por un lado, que la
interpretación opere una separación entre el sentido y el goce; y por otro, que
haga resonar de un modo inédito la mordedura de lalengua sobre Un cuerpo.
Es ahí donde la interpretación hace eco en el parlêtre, cobrando, tanto como la
poesía, su valor de acontecimiento.”
Amadeo de Freda, Damasia
Una interpretación. El Caldero Online de la Escuela Nº2. 2015
“La lectura que hace Miller del Seminario El Sinthome en las primeras cinco
clases del curso [Piezas sueltas] la leo así: Lacan modifica su propia idea del
inconsciente, sustituye ese término por el de parlêtre y concibe a la estructura
como un nudo borromeo de los tres registros RSI cuya característica es de
“desorden” más que de “orden” y donde se privilegia la “contingencia”
mucho más que la “coherencia”. Es decir, entiendo (…) es la manera en que
lee el Seminario El Sinthome.”
Apartín, Rosa
Un psicoanalista puede hacer sonar otra cosa que el sentido. Revista
Lacaniana de Psicoanálisis N°18. Grama Ediciones, EOL-Buenos
Aires, 2015
“El discurso del parlêtre está dado por una imposibilidad que marca un agujero:
la de la escritura de la relación sexual, donde no hay saber inscripto en el
inconsciente. Hay de lo Uno es un correlato a nivel de lo real. El Uno de la
existencia se funda en un efecto de escrito y no efecto de significación.”
p. 148
Arango-Álvarez, Isolda
Teen-ages ¿tiempo lógico y síntoma de la época? Logos 6. Ediciones
Grama, Buenos Aires, 2010
“En esta clínica ya no se trata del sujeto como efecto del lenguaje, sino más bien
del parlêtre y de las condiciones de goce que lo habitan en la medida en que esas
condiciones de goce marcarán la vía de aquello que lo anula.” p 23-45
Álvarez, Margarita
Arenas, Alicia
Sobre el momento clínico del pase. Freudiana N°65. Barcelona, 2012.
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=16
La feminidad ¿sin Edipo? Lacaniana de Psicoanálisis N°14. Ediciones
Grama, Buenos Aires, 2013
“El acontecimiento (de cuerpo) no responde al descifrado sino a la revelación.
Tras el fantasma emerge el sinthome donde se cierne la relación fundamental
con el goce. No se trata de la estática del fantasma sino de una dinámica, de
un funcionamiento. Ya no se trata del sujeto sino del parlétre: el sujeto más su
satisfacción.” p. 134
80
Otros Autores/ Parlêtre
Alemán, Jorge
EL CUERPO HABLANTE
“Tomando la noción de semblante y el nudo borromeo como referencias, Lacan
propone una clínica de lo femenino con la que abre para el psicoanálisis un
campo de elaboración teórica y clínica fuera de las clasificaciones y de los tipos
que tiene enormes consecuencias para los síntomas que la época presenta. En
esa clínica, la temática de la diferencia sexual y del más allá del Edipo apuntan
a los excepcional de cada caso, más allá de la anatomía y de los ideales, pues
81
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
¿Hay un cambio de la posición del analista en la práctica de nuestra
época, a partir de los efectos del “nuevo simbólico’? Bitácora Lacaniana
N°2: Satisfacciones del cuerpo. 2013
“Lo cierto es que si en la clínica del sinthome seguimos manteniendo el matema
del discurso analítico como referencia, es a partir de que los discursos son
vínculos sociales, modos de lazo. (…) “el vínculo social se desarrolla en el reino
de la contingencia” no en el de la necesidad. Se trata de conducir al sujeto -ahora
parlêtre- a los S1 que establecieron la contingencia de su existencia.”
p. 155-156
Un lugar éxtimo. “Hablar con el cuerpo, las crisis de las normas y
la agitación de lo real: volumen del VI ENAPOL. Grama Ediciones,
Buenos Aires, 2014
“Se trata al fin y al cabo de reinstalar algo de lo imaginario y lo simbólico
junto con la noción de que en las cuestiones del parlêtre hay una inconsistencia
fundamental. Del lugar del sujeto supuesto saber, eminentemente simbólico,
pasa el analista a un lugar en el que el uso del verbo ha de apuntar
fundamentalmente a nuevos arreglos con el goce.” p. 72
Arenas, Gerardo
El cuerpo sinthomático. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°14,
Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2013
“El parlêtre no recibe su ser del cuerpo que él sería, sino de la palabra (…)
Para examinar la relación del parlêtre con el cuerpo, Lacan se sirve de un sutil
fenómeno. Joyce describe cómo se le quita una capa de odio “con la misma
facilidad con la que se desprende la suave piel de un fruto maduro”. Este cuerpo
calza en el nuevo imaginario, pues mantiene unido mediante una consistencia
que no conoce separación, desconexión, corte o fractura. Por eso mismo, puede
desprender o caer en bloque.” p. 37
Arranz, Ricard
Parlêtre y secreto. Freudiana Nº66. Barcelona, 2012. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“Lacan va a plantear que lo real es previo al significante, y que el encuentro del
82
Otros Autores/ Parlêtre
lo que queda en primer plano es que el ser hablante, hombre o mujer, está
estructuralmente inmerso en registros que no son compatibles, que no encajan,
y con los que tiene que aprender a vivir.” p. 149
EL CUERPO HABLANTE
sujeto con el significante y el lenguaje no alcanza para absorber todo el real, y
que queda algo, algo no simbolizable: un goce, que se inscribe en el cuerpo del
parlêtre.” p. 29
B
Bassols, Miquel
El lenguaje como trastorno de lo real. Intervención en el Congreso de
la New Lacanian School (NLS). Atenas, 2013. Publicada por el autor
en su blog tres días después. Texto original en francés disponible
en: http://miquelbassols.blogspot.com.es/2013/05/le-langage-commetrouble-du-reel.html
“La experiencia de escritura de James Joyce pudo precisamente mostrar a Lacan
que no hay trastornos del lenguaje propiamente dichos sino que el lenguaje
mismo es el trastorno, un trastorno del cual se puede hacer en el mejor de los
casos un sinthome, un modo de gozar singular para el sujeto.”
“Es porque el lenguaje mismo es un trastorno de lo real que podemos sostener
también que todo el mundo delira. Es precisamente la introducción del lenguaje
y del equívoco del significante lo que introduce un abismo en lo real, una
dimensión del ser hablante que lo hace también sujeto del goce, un goce tan
irreductible como el lenguaje mismo. Y si una cierta tecnociencia sueña todavía
con un real que sería curado del trastorno del lenguaje, el psicoanálisis está aquí
para mostrar lo incurable de este trastorno en cada ser hablante.”
Dossier: Escabel y parlêtre. “Comité de Acción de la Escuela Una.
Parlêtre, sinthome, cuerpo y escabel. Segunda noche preparatoria
del Congreso AMP 2016”, “Parletre”, en Revista Lacaniana de
Psicoanálisis N°18. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“La pregunta que a mí se me plantea es si cuando hablamos de parlêtre y de
escabel estamos hablando de conceptos al mismo estilo de “Los cuatro conceptos
fundamentales del psicoanálisis del año 64.” p. 72
“Decir parlêtre, es decir el ser. Es decir el ser decir. Solo hay ser por el hecho del
decir. Parlêtre intentaría condensar entonces ´decir´ y ´ser´ a la vez, de modo que
algo sea por el hecho de decirlo.” p. 72
“Hacer del término parlêtre y escabel un acontecimiento de cuerpo en el
momento en que son proferidos.” p. 72
83
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“Si podemos decir que, en la última enseñanza de Lacan, el cuerpo es lo
imaginario, es porque lo imaginario solo toma presencia en una imagen
corporizada, encarnada de alguna manera que tenga una consistencia para el
sujeto. Ese es el cuerpo que el parlêtre tiene.” p. 73
“Lacan nos lleva hacia un nuevo ternario, no a una dualidad sino a una
estructura ternaria, y creo que es precisamente el punto de articulación entre
cuerpo hablante y parlêtre, o inconsciente real como parlêtre” p. 74
“Porque hay parlêtre -el parlante-, hay palabra; hay la letra de la sustancia
gozante que va a estar inscrita en el síntoma, que va a estar inscrita filialmente
en el sinthome; y hay el ser. Digamos que el parlêtre anuda los tres términos de
estas tres res, de estas tres sustancias con las que Lacan va más allá de Descartes,
y también más allá de algunos impasses de la ciencia moderna.” p. 75
Basz, Samuel
Lo singular en el síntoma: un principio clínico. Virtualia Nº9, Revista
Digital de la EOL, 2004. http://virtualia.eol.org.ar/009/default.
asp?notas/sbasz-03.html
“Siguiendo esta lógica se ve bien porqué es lo singular el rasgo que se demuestra
en el síntoma producto de la cura. Pero también que lo singular es lo específico
a verificar de todo síntoma del parlêtre. Se entiende así cómo algo que se obtiene
en el fin de la cura justifica su deslizamiento moebiano a la condición de
principio clínico. Principio que como tal orienta desde el comienzo de la cura el
tratamiento analítico del síntoma.”
El aire, objeto instituyente del parlêtre. Lacaniana Nº17. EOL. Grama
Ediciones, Buenos Aires, 2014
“Respecto del parlêtre, la perspectiva de lalangue, en tanto no es estructura, abre
la posibilidad de interrogar la operación en que este se instituye, y la condición
de objeto que le concierne. Tratemos de subrayar cómo el parlêtre no es sin el
cuerpo que surge de la misma operación en que instituye como tal.” p. 51
84
Otros Autores/ Parlêtre
Para mí el problema es (…) cómo se articula el cuerpo hablan­te en tanto éste
sería lo real del inconsciente, y el parlêtre como el ser que no es un cuerpo sino
que lo tiene.” p. 73
EL CUERPO HABLANTE
Baudini, Silvia
El síntoma: un funcionamiento. Virtualia N°16, Revista digital de la
Escuela de la Orientación Lacaniana, 2007. http://virtualia.eol.org.
ar/016/default.asp
“Piezas sueltas, en este curso el síntoma, sinthome es trabajado como una pieza
suelta, un acontecimiento de cuerpo que no está regulado por el padre en su
vertiente de goce, donde la misión del padre no alcanza para regular el todo del
goce del cuerpo. Es una pieza suelta a la que el parlêtre debe encontrarle una
función” p. 76
Berenguer, Enric
Presentación del dossier. Autismo: síntoma o estructura. Freudiana
Nº 65. Barcelona, 2012. http://www.freudiana.com/revistas.
php?idrevista=16
“Que un niño, o un adulto, como en el caso de Donna Williams, deba seguir los
pasos lógicos del estadio del espejo para poder hacerse un cuerpo, (…) del doble
-todo ello nos muestra hasta qué punto algo del primer tiempo del síntoma
autista se sitúa en un statu quo ante de la subjetivación y la apropiación del
cuerpo por parte del ser hablante.”
p. 29
“La forclusión autista tendría quizás esta fórmula: una sustracción del cuerpo
como Otro del Uno del significante, que deja al Uno completamente solo.” p.
30
Berkoff, Mirta
Del Padre a Joyce. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°9, Año X.
EOL. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“Hay algo que ocurre en el cuerpo a causa de la lengua que genera un relieve
opaco de sentido. Entonces, la referencia ya no es el lenguaje y sus bordados, que
hacen transparente al goce aliándolo al saber, ahora la nueva referencia es al goce
opaco de la lengua.” p. 182
85
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Blanco, Paloma
Tinta y humo. Cuadernos de Psicoanálisis N°36. Instituto del Campo
Freudiano, Madrid
“Si bien lo real, como tal, no puede nombrarse, pensarse, representarse, es un
no saber ineludible, cada hablanteser está atravesado por un real singular. Según
esta perspectiva, el sinthome es la invención de cada uno, irrepetible, para
arreglárselas con ese real imposible, sin ley.” p.
63
Briole, Guy
La huella. Freudiana N°67. Barcelona, 2013. http://www.freudiana.
com/revistas.php?idrevista=8
“Este Uno es la marca constitutiva del parlêtre, la marca sobre el cuerpo. En
este sentido, el lenguaje es aparato del goce, reducido entonces a la letra, a
la singularidad de cada uno. Podría decirse a la singularidad más singular.
Es también un Uno que vuelve siempre al mismo lugar y es por eso que lo
llamamos real. Este Uno remite a la ex-sistencia, a la cuestión óntica.” p. 66
La ruptura causa / efecto. Freudiana Nº69. Barcelona, 2013. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=3
“Entonces, el camino de Lacan va desde el inconsciente es verdad hacia
el inconciente es saber para bascular en el inconciente es real. Lacan sustituye
al sujeto por el parlêtre; este último incluye el cuerpo. El parlêtre es lo que
reemplaza el inconciente en el sentido que no hay sens sin jouis-sens y la
reescritura del Otro es el Uno. El Otro es el cuerpo.” p. 18
“Así, pasamos del Otro de la palabra, ordenado por el deseo, a considerar que
el Otro es el cuerpo y que él no está ordenado por el deseo sino por el goce.
Es lo que podemos llamar la consistencia clínica del sinthome.” p. 18
“En la última enseñanza de Lacan, el verdadero cambio es el pasaje de lo
ontológico a lo óntico. Con su afirmación Yad’lun distingue el Uno referido al
Otro de un Uno separado del Otro. Este Uno es la marca del parlêtre, inscrita
en el cuerpo. Marca singular de cada uno que remite a la cuestión óntica, la de
la ex-sistencia.” p. 19
86
Otros Autores/ Parlêtre
EL CUERPO HABLANTE
Breglia, Alejandra
La experiencia de lo real en la cura psicoanalítica. Virtualia Nº9,
Revista Digital de la Escuela de la Orientación Lacaniana, 2004.
http://virtualia.eol.org.ar/009/default.asp?notas/libros-abreglia-01.html
“Admitiendo que el síntoma es goce y que el goce pasa por el cuerpo; la
definición de síntoma como acontecimiento del cuerpo resulta un indicador
fundamental. Se trata siempre de acontecimientos discursivos que dejaron
huellas en el cuerpo, que lo perturban y que producen síntomas en él. Es la
incidencia de la lengua en el ser hablante y, con más precisión, en su cuerpo.”
Brousse, Marie-Hélène
¿La clínica contemporánea? Cuadernos de Psicoanálisis Nº33.
Instituto del Campo Freudiano, Madrid, 2011
“En esas condiciones, aunque resulte un poco abstracto, decir que “todos
deliran” es, sin embargo, considerar que la dimensión de lo verdadero es para
la mayoría de los seres hablantes (parlêtres) lo que les sirve de alguna manera
de real. Podemos decir que con lo real como tal no tienen ninguna relación,
en todo caso ninguna relación directa. (…) como un mixto de imaginario y
simbólico, es decir, como un acuerdo autoritario sobre los significantes que nos
rodean.” p. 29
C
Caldas Telles, Heloisa
Sexo y lógica en la escritura de Lewis Carroll. Virtualia Nº10, Revista
Digital de la EOL, 2004. http://virtualia.eol.org.ar/010/default.
asp?notas/hcaldas-01.html
“Al final de su enseñanza, Lacan resalta más todavía la intimidad entre el
significante tolo y el sexo. Deja un poco de lado el concepto de sujeto y adopta
el concepto nuevo de parlêtre (ser hablante –parlant; ser de letra –par l’être). El
hablanteser difiere del sujeto porque no es abstraído de lo corporal, no se trata
de habla-de-ser, más de ser que, con el habla, hace el cuerpo en el cual el sexo
acontece. (…) sin invalidar las cuestiones de la teoría anterior del sujeto, se
orienta por la brújula del goce en el lenguaje (…)”
87
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Seminario de Formación Lacaniana Cuerpo, imagen y lenguaje:
Sus anudamientos -”¿Qué anudamientos entre cuerpo, imagen y
lenguaje posibilita el concepto de imagen reina?” http://www.nel-amp.
org/index.php?file=Actividades/Seminario-de-Formacion-Lacaniana/
Programacion/Que-anudamientos-entre-cuerpo-imagen-y-lenguaje.html
“Este fue el paso necesario de un más allá del narcisismo, cuando la pulsión deja
de depender de la imagen, y la imagen no domina más el goce. Se trata de un
narcisismo con el que el parlêtre se enlaza al cuerpo en una relación de creencia.
(…) El escabel surge aquí y le permite al parlêtre creerse amo de su ser, un amo
bello. Hay como una “negación del inconsciente” y es debido a esta creencia que
se desconoce el hecho de que “Yo hablo con mi cuerpo, y sin saber. Luego digo
siempre más de lo que sé.”
Sinthome y cuerpo hablante. Disponible en: http://nellimablog.com/
tag/sinthome-y-cuerpo-hablante/
“El cuerpo goza en silencio y repite siempre, por fuera del sentido, la inscripción
de una satisfacción imborrable. La fórmula hablar con el cuerpo permite
abordar el encuentro contingente que fija un goce en el cuerpo, a partir del
cual el ser hablante no puede más que producir síntomas y padecer la exigencia
de los mismos. El acontecimiento de goce en el cuerpo, siempre contingente y
traumático deja inscrita una marca primaria que se repite de manera vana y sin
remedio produciendo efectos que afectan al amor y al deseo…”
Castro, Eugenio
Del síntoma al sinthome por la letra. Cuadernos de Psicoanálisis
Nº36. Instituto del Campo Freudiano, Madrid
“Así pues el hablaser que ha nacido en un mundo de lenguaje, lleva la marca de
un simbólico que no cesa de escribirse en su síntoma. Pero no como letra sino
como número que conlleva el cálculo de un goce, que en los dibujos del nudo
Borromeo, Lacan coloca como borde simbólico de la lúnula en donde está el
Goce Otro, el No-todo.” p. 78-79
Castro, Jaime
Cuerpos toxicómanos. Hablar con el cuerpo, las crisis de las normas y
la agitación de lo real: volumen del VI ENAPOL, Grama Ediciones,
Buenos Aires, 2014
88
Otros Autores/ Parlêtre
Cárdenas, María Hortensia
EL CUERPO HABLANTE
“El encuentro con el analista, bajo transferencia, le puede permitir a un sujeto
recorrer ampliamente el árbol de significaciones de su vida, para ir decantando y
aislando aquello que se juega a nivel del sinsentido y que está ligado a las marcas
de goce en el cuerpo, que determinan en buena medida el factor pulsional del
síntoma y su repetición incesante. Es precisamente por vía de esta dimensión de
lalengua que se inscribe en el cuerpo, produciendo un goce para el ser hablante,
que puede pensarse cierta dimensión tóxica del goce sintomático.” p. 319
Coccoz, Vilma
Un recorrido personal por el Seminario 23. Le Sinthome. El
psicoanálisis Nº22. Escuela Lacaniana de Psicoanálisis ELP,
Barcelona, 2012
“En el seminario 23 asistimos, pues, a un Nuevo Génesis, al nacimiento, no
del humano en pecado, sino del sinthombre, (…) en la medida en que no hay
parlêtre sin síntoma, sin “el misterio de la encarnación” del sínthoma.”
p. 145
“En la estructura borromea, trinitaria del parlêtre, lo símbolico cumple la
función de agujero y no es más importante que lo imaginario y lo real. Lo
imaginario constituye el cuerpo, le otorga consistencia, y lo real, ex-siste a
los otros dos, es el parásito cuya intrusión permite distinguir simbólico e
imaginario.” p. 147
El cuerpo, sede del goce, en el barroco, en el body art, en el síntoma.
Cuerpos que hablan. Colofón Nº33, Boletín de la Federación
Internacional de Bibliotecas de la Orientación Lacaniana. París, 2013
“ORLAN reivindicaba la formación de una nueva subjetividad femenina (…)
En sus performance-operaciones de estética… utilizaba su cuerpo para esculpir
detalles de míticas figuras femeninas. (…) Parece haber comprendido que no
es necesario destrozar el cuerpo para hacerse una nueva identidad. Lo que hace
falta es vestir lo real del síntoma hasta otorgarle la de un SKbeau, un escabel
desde donde presentarlo al Otro” p. 51
Cottet, Serge
“12 estudios freudianos” Serie Tyché. Edita UNSAM y Pasaje 865/,
Buenos Aires, 2013
“El esfuerzo de Lacan consistirá, luego de la disolución de los conceptos, en
sustituirlos por significantes nuevos, en retroceder la lengua de Freud para evitar
89
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
D
D’Angelo, Lucía
El parlêtre, El pasaje del sujeto al parlêtre. Freudiana N°66.
Barcelona, 2012 http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“Lacan sustituye el concepto de sujeto por el de parlêtre y el parlêtre es el cuerpo.
Más precisamente, es un injerto de ser sobre un cuerpo.” p. 103
Da Silva, Rômulo Ferreira
Un nuevo imaginario. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°18.
Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“El término parlêtre, introducido por Lacan en su última enseñanza, queda
dilucidado porque no se trata más del sujeto efecto de la articulación
significante, sino del ser humano expuesto al lenguaje.” p. 166
“El psicoanálisis puede ofrecer, a cada encuentro con el analista, el escabel al
parlêtre hasta que se llegue al final.” p. 168
Dicker, Susana
Boletín Un Real Nº 15. http://ampblog2006.blogspot.mx/2014/02/
unreal-boletin-n-15.html
“El síntoma no es para interpretarse sino para reducirse, para hacer de él un
uso lógico, una reducción a un hueso, a un resto que es resto fecundo. He
aquí la invención de Lacan, lo que él llama su herejía, pues hace de ese resto
–que recupera los restos sintomáticos freudianos– no el índice del fracaso del
psicoanálisis, sino lo singular de cada uno. Esto se efectúa en la medida en que
el parlêtre logra hacer del traumatismo original que no se cura, una obra, una
invención, lo que Lacan llama escabel, sinthome (…) Eso que el parlêtre usa
para poder vivir, a riesgo de que le sea incómodo.”
Otros Autores/ Parlêtre
los sintagmas estereotipados, la hipótesis de la subjetividad, la objetivación de las
instancias, en crear neologismos: el parlêtre (…).” p. 126
EL CUERPO HABLANTE
F
Fajnwaks, Fabián
Paul Celan - Martín Heidegger - Jacques Lacan, Los lazos de un nudo.
Revista Enlaces Nº17. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2011
“El término parlêtre responde a lo que el sujeto puede recuperar como ser
a través de la palabra y con él reformula al sujeto como consecuencia de la
formulación “no hay metalenguaje”, que resuena en la reflexión heideggeriana
del “fin de la metafísica”. (…) Lacan implica lalengua, palabra asociada al goce
que esta articula. (…) Lo que Heidegger aspiraba para la lengua en general,
lalengua de Lacan lo propone para un sujeto en singular.” p. 108
Como vivimos hoy, Colección Grulla, CIEC, 2015 “(…) una equivocación’. Con este término propone Lacan que sitúa al
inconsciente en su dimensión real, como corte, ruptura, sin forzosamente darle
a esta hiancia un sentido (…) La una equivocación se deduce del ser hablante,
es el correlato de abordar la experiencia en términos del ser que se deduce de la
palabra y del real articulado a ella como hiancia, buscando definir el fenómeno
inconsciente de manera positiva.” p. 64
Febres, Cordero de Espinel Mónica
La época del parlêtre, Bitácora Lacaniana Nº4, “Sinthome y cuerpo
hablante”. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“En la época del parlêtre el significante Uno irrumpe en el cuerpo, introduce un
disturbio de goce e incide sobre algo que “está ahí”. Como resultado se produce
un saber corporal y en adelante el sujeto se encuentra tomado en un ciclo de
repeticiones. Este goce repetitivo, fuera de sentido es el sinthome y guarda
relación con el S1 y no con el saber. Por eso el sinthome, como síntoma del
parlêtre es de su época y depende de su cuerpo. Vertiente epistémica y clínica
que orienta la práctica lacaniana hoy.” p. 35
Fischer, Ángela
Género y cuerpo: el error común como defensa ante lo real. Bitácora
Lacaniana Nº2. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2013
“La relación con el propio goce tanto para el sujeto masculino como para el
femenino, plantea siempre una relación perturbada entre el ser hablante y su
90
91
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Foos, Claudine
Lo que el tatuaje escribe en el cuerpo: el tatuaje como signo. Letras
Nº4. Comunidad de Madrid de la ELP, Madrid, 2012
“Podemos deducir que para algunos sujetos adolescentes. Tatuarse hará de ese
cuerpo desconocido que reciben, una piel ilustrada como la de su prójimo. Así el
tatuaje sería una marca de lo imposible de significar. Lo que no se puede poner
en palabras, lo que no se puede elaborar desde el discurso, se pone en el cuerpo.”
p. 27
Fridman, Pablo
Acerca de la causa. Virtualia Nº21, Revista digital de la Escuela de la
Orientación Lacaniana, 2010. http://virtualia.eol.org.ar/021/template.
asp
(…) Lacan ha propuesto llamar al animal humano parlêtre, y no être parlante
(ser que habla), es el hecho de que habla lo que le permite ser. Poner en primer
lugar el hablar (parler) y luego el ser (être) define al humano como aquel que es
porque habla, y en su momento de constitución como el que es hablado desde
fuera, el que es hablado por el Otro. (…)” p. 56
Gaviria, Luz Elena
El misterio del cuerpo hablante. Bitácora Lacaniana Nº4, “Sinthome y
cuerpo hablante”. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“Se hereda el cuerpo de parlêtre traumatizado, real, el inconsciente que parletrea,
que habla. Pero agreguémosle algo: que con ese hablar parletreado del cuerpo
se inventa una vida. Es aquí en donde el artista nos enseña: en tanto parlêtre –
misterio- él habla con su arte, hace de su sinthome que itera un escabel, se hace
bello.” p. 31
Genchev, Evgeni
¿Cómo gozar de un cuerpo? Cuerpos que hablan. Colofón, Boletín
de la Federación Internacional de Bibliotecas de la Orientación
Lacaniana Nº33. París, 2013
“Lacan hace una distinción importante entre el organismo humano y el cuerpo
del serhablante- parlêtre, que es efecto del lenguaje que viene del Otro materno.
Un Otro que da cuerpo al organismo del niño, porque el cuerpo es el lugar del
Otro…Un Otro que nos inscribe en la humanidad, por su deseo no anónimo,
como lo indica Lacan en su Nota sobre el niño.” p. 42
Godínez, Rosa
Bienvenidos señores!, El psicoanálisis Nº19. Escuela Lacaniana de
Psicoanálisis ELP, Barcelona, 2011
G
“En el campo del amor pues, discernidos algunos de los elementos que están en
juego para el varón, cuando algo en el parlêtre se desestabiliza ello habla y se hace
sentir en la dimensión del cuerpo en sus tres niveles RSI.” p. 32
García, Germán
Goldenberg, Mario
Derivas analíticas del siglo. Serie Tyché. Edita UNSAM y Pasaje 865,
Buenos Aires, 2014
Soledades. Virtualia Nº19, Revista digital de la Escuela de la
Orientación Lacaniana, 2009. http://virtualia.eol.org.ar/019/template.
asp
“Encontrar a la mujer en el “hombre enmascarado” es la consecuencia de
mostrar que los nombres históricos para explicar la pérdida de goce son efectos
de ignorar que esta pérdida es constitutiva al parlêtre.” p. 59
92
Otros Autores/ Parlêtre
cuerpo, Lacan pasa este goce sexual a lo escrito, en el sentido que cada uno
guarda una relación particular con este goce y es con este con quien se hace de
un partenaire; eso es justamente lo que hace barrera a la relación directa entre los
sexos.” p. 187
EL CUERPO HABLANTE
“Lacan dice, uno habla solo y dice siempre lo mismo, salvo si encuentra un
analista. Por tanto, se puede decir que el análisis es una experiencia en soledad
con otro - no un semejante -, que le permite al ex-sistente, al ser que habla, al
parlêtre , una invención de su soledad, y a la vez una salida de la soledad, en
tanto lo confronta con lo Otro, lo ajeno, lo hétero, lo femenino.” p. 122
93
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
¿Cómo podemos entender esto? Boletín de las VIII Jornadas de la NEL.
Lo femenino no sólo es asunto de mujeres. El pivote irreductible de
un análisis. Eva-Lilith Nº29, 2014
“Es desde el Uno y no desde el Otro. Que ese significante que entra y produce
goce no es entendido como proveniente del Otro, es del Uno. Es un compacto
de significante y goce, y de lo cual el ser vivo siente en su cuerpo resonancias,
que son de él, no vienen del Otro, el Otro no existe todavía para este hablanteser.
En esta concepción del Uno el Otro está elidido, no existe, todo sucede en el
Uno, y lo que sucede en el Uno fundamentalmente son resonancias.”
González, Gloria
¿Posesión demoniaca en el Siglo XXI?, Bitácora Lacaniana Nº2.
Grama Ediciones, Buenos Aires, 2013
“(…) si la histérica requiere una armadura es porque ella debe defenderse de algo
– si con Freud teníamos términos como conflicto y defensa, Lacan introduce
esta armadura, fuertes batallas las que debe librar un ser hablante por el hecho de
nacer en un mundo de lenguaje- la armadura protege lo que ella cubre, ¿qué?”
p. 176
González Táboas, Carmen
Siglo XXI: La elección de sexo en el laberinto. Virtualia Nº22, Revista
digital de la Escuela de la Orientación Lacaniana, 2011. http://
virtualia.eol.org.ar/022/template.asp
(…) El sujeto no es causa sino respuesta que se encarna en su síntoma como
modo de gozar del inconsciente, a un lado o al otro en la lógica de la sexuación.
Donde se trata del parlêtre; el hablante, el ser, el parecer, y la letra de goce de ese
ser efecto de discurso; no sin un cuerpo.” p. 46
Gorali, Vera
Decir con el cuerpo. Cuerpos que hablan. Colofón Nº33, Boletín de la
Federación Internacional de Bibliotecas de la Orientación Lacaniana.
París, 2013
“Eventualmente, el parlêtre hace lazo social con el Otro. Pues si el significante
unario no se suma al objeto pequeño a que ubica en el otro (S1 + a), el cuerpo
94
Otros Autores/ Parlêtre
Gómez Smith, Fernando
EL CUERPO HABLANTE
no adquiere la consistencia necesaria, y no se asegura la unión de los tres
elementos separados que conforman al dicho parlêtre.” p. 36
“La proporción sexual que no se establece, es el agujero en el que el parlêtre no
cesa de embrollarse.” p. 36-37
Gorostiza, Leonardo
El pragmatismo del síntoma. Incidencias de la última enseñanza de
Lacan en la práctica analítica, Colección Orientación Lacaniana –
EOL–. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2006
“(…) Lacan constantemente está trabajando para precisar que el sujeto va a ser
respuesta, nunca será previo jamás, ningún substare. Es cierto que el término
parlêtre, que nosotros traducimos como ser hablante, es hablanteser. Porque el ser
surge del hablar, de la locura que nos ocurre en tanto parlêtre, de introducir la
idea de que hay un ser preexistente. Me parece oportuno remarcar ¿cómo evitar
el uso imprudente de la noción de sujeto y de objeto?” p. 197
Pienso, luego se goza. El psicoanálisis Nº21. Barcelona, Escuela
Lacaniana de Psicoanálisis –ELP– 2012
“Mientras que en lo que llamamos orden simbólico no hay nadie, porque el
sujeto tachado que es efecto de dicho orden, es un sujeto muerto, un sujeto sin
substancia, en los confines de dicho orden – cuando en realidad ya no se trata de
dicho orden sino de la acción de los significantes aislados de lalengua se constata
que el parletre aun sin saberlo goza en sus pensamientos y en su cuerpo.”
p. 16
Trauma y real. “eso traumático”. Revista Mediodicho Nº39, –EOL–.
Córdoba, 2013
“(…) la expresión neológica les trumains hace alusión a la huella del traumatismo
que lleva cada parlêtre de su encuentro con su lalengua, pero haciendo la
salvedad de que dicho encuentro no es único sino múltiple. Tal vez sea por eso
que Lacan no vacila en decir que hay más de un agujero en lo que llamamos el
hombre y que por ello este es incluso un verdadero colador.” p. 31
Goya, Amanda
Contrapunto sobre el cuerpo entre Filosofía y Psicoanálisis. Letras
Nº3. Madrid, Comunidad de Madrid de la ELP, 2012
“¿Qué distingue entonces al filósofo del psicoanalista? Una práctica, el artificio
de una experiencia que lejos de especular sobre el cuerpo, lo trata en su
95
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
H
Harari, Angelina
“Goce, cuerpo y pulsión. Un recorrido temático en el curso de la
orientación lacaniana”. Cuerpos que hablan. Colofón Nº33, Boletín
de la Federación Internacional de Bibliotecas de la Orientación
Lacaniana. París, 2013
“Lacan postula la inconsistencia del Otro, corporificándolo al mismo tiempo.
En esta perspectiva introduce el hablanteser (parlêtre) como no teniendo más el
Otro como partenaire, como en el sujeto del inconsciente, pero si el síntoma
como partenaire.” p. 28
“Lacan postula la inconsistencia del Otro, corporificándolo al mismo tiempo.
En esta perspectiva introduce el hablanteser (parlêtre) como no teniendo mas
el Otro como partenaire, como en el sujeto del inconsciente lacaniano, pero si
el síntoma como partenaire. Por lo tanto, proponemos abordar (…) la noción
de partenaire- síntoma, haciendo pareja con el hablanteser (parlêtre) como
paradigma de los nuevos síntomas.” p. 28
Holguín, Clara María
Una cosmética sin barreras, más allá de la piel. Hablar con el cuerpo,
las crisis de las normas y la agitación de lo real: volumen del VI
ENAPOL. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2014
“Arreglárselas con la vida es lo que el parlêtre ha hecho desde siempre, siendo
su cuerpo la sede. ¿Cómo hace un sujeto para tener un cuerpo o incluso para
prescindir de él?” p. 179
El cuerpo cosmético (Trabajo para la Conversación Clínica del VI
ENAPOL Hablar con el cuerpo. La crisis de las normas y la agitación
de lo real. En colaboración con: María Cristina Giraldo, Isolda
Álvarez, Raquel Cors, María Victoria Clavijo. http://www.enapol.
com/es/template.php?file=Las-Conversaciones-del-ENAPOL/El-cuerpocosmetico/Clara-Holguin.html
96
Otros Autores/ Parlêtre
dimensión sintomática, lo encara como un cuerpo agitado por los significantes
que lo habitan, una práctica que persigue trastocar la economía libidinal de ese
cuerpo corroído por los significantes, para aligerar su peso.” p. 15
EL CUERPO HABLANTE
“¿De qué orden es este cuerpo, que ya no es adorado, única relación que
habíamos dicho el parlêtre puede tener con él? (…) El cuerpo operado,
recortado, muestra su interior, su cara resto, al estar separado del Otro. Mas que
tener, el parlêtre queda reducido a ese resto, al puro desperdicio. Él es eso.”
I
Iglesias, Mercedes
Imaginario y cuerpo: una construcción. Bitácora Lacaniana Nº4,
“Sinthome y cuerpo hablante”. Grama ediciones, Buenos Aires, 2015
“Una vez que admitimos que lo real es lo imposible y que lo que lo caracteriza
es la no relación sexual, queda lo sensible que otorga el imaginario, puesto que
lo simbólico, la palabra, el sentido, han sufrido una caída. El parlêtre busca así
algo a lo cual asirse. Y, así viene la imagen a dar una consistencia. En la última
etapa será la construcción de un imaginario que Miller denominará escabel y que
tendrá como función hacer un maquillaje del goce opaco del síntoma.”
p. 220
K
Kizer, Manuel
El síntoma en Psicoanálisis: la producción del S1 y el objeto.
Entredichos N°9 y N°10. VIII y XIX Jornadas de la Clínica
Psicoanalítica. El Síntoma en psicoanálisis. El fantasma en la
experiencia analítica. Escuela del Campo Freudiano, Caracas, 1994
“El hablanteser habla el síntoma, que en tanto ser, es estructura de ficción,
como la verdad. Es así mismo escritura. El síntoma es ser de habla o de silencio,
porque hay además de los dichos, un decir inscrito que hace eco, resonando
en el cuerpo que es sensible a este decir, haciendo existir el campo del Otro y
su agujero, como el campo del goce o de la pulsión. El síntoma se ubica en y
entre el campo del lenguaje y campo del goce, ya sea que exista la castración o la
forclusión.” p. 58
97
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Laurent, Eric
Certeza y consistencia de lo imaginario. Usos actuales de la clínica.
EOL-Paidós, Buenos Aires, 2001
“(…) la clínica de los nudos, es lo que le permite [a Lacan] a partir de los
años `70 buscar lo que sería una consistencia imaginaria separada de la forma,
separada de la imagen en tanto que forma. El Seminario Le sinthome trata,
precisamente, de ver hasta qué punto se podría hablar de un narcisismo radical
en relación con el síntoma, narcisismo radical o identificación al síntoma, que
podría prescindir de la relación a la imagen (…)” p. 37
“Es muy llamativo que lo que interesa a Lacan en estas obras de artistas, es cómo
se separan de su cuerpo. Es como si el sujeto artista pudiera ir más allá de la
pregnancia que, el que no tiene la experiencia de la creación artística, conserva
como pregnancia identificatoria (…) Se podría decir que se identifica a esta obra
como enigma y hay una verdadera sustitución de la imagen del cuerpo propio
por la obra como tal. Si hay sujetos que tienen una posibilidad de ir, o que
tratan de ir hacia un narcisismo radical, son los sujetos inscriptos en serio en la
experiencia artística.” p. 38-39
Los dos sexos y el Otro goce. Revista Enlaces N°7. ICdeBa, Buenos
Aires, 2002
“Si hay sublimación en Joyce, la hay en ese punto (…) donde “hacer sublime”
sólo tiene sentido en relación a un cuerpo glorioso, allí donde lo simbólico
“se pliega sobre lo imaginario” (…) “puesta en continuidad” de lo real y de lo
imaginario… construcción eficaz en la joy de Joyce, sobre lo real de su goce.”
p. 5
Dos aspectos de la torsión entre síntoma e institución. Los usos del
psicoanálisis. Editorial Paidós, Buenos Aires, 2003
“El síntoma es un incorporal, pero involucra el cuerpo. Se inscribe sobre una
superficie que es el cuerpo a condición de considerarlo como otra dimensión
distinta de la del narcisismo (…) el acontecimiento que se articula al cuerpo
operando de tal manera que el interior y el exterior se retoman uno en el otro
(…) es en esta torsión que el sujeto aprehende su cuerpo para hacer no un
pliegue, sino una aplicación a la función del deseo.” p. 116
98
Otros Autores/ Parlêtre
L
EL CUERPO HABLANTE
“Decir “acontecimiento de cuerpo” es situar una dimensión en que el cuerpo no
es solamente afectado por “causas”, ya que acontecimiento se opone a causa.”
p. 116
“El síntoma, separado de la imagen del cuerpo, no tiene vocación de ser
individual. Es a la vez de otro cuerpo y plural porque existen “tipos de síntoma
que distingue la clínica. En este sentido el síntoma es a la vez primero y último.”
p. 117
Ciudades psicoanalíticas. Virtualia Nº Junio - Julio, Revista digital de
la Escuela de la Orientación Lacaniana, 2003. http://virtualia.eol.org.
ar/008/default.asp?notas/elaurent-01.html
“La imagen del funcionamiento del inconsciente litoral hoy, eso sería las luces
de neón de la calle de Nankin en Shangai acompañadas por la voz en off, en
traducción perpetua, tatuando el cuerpo de un plus-de-goce inaudito”
La topología del cuerpo y de la mirada. Lost in cognition. Colección
Diva, Buenos Aires, 2005
“Es un cuerpo particular, un cuerpo que tiene una superficie extraña, puesto
que ese cuerpo, dice Lacan, es una envoltura que no tiene ni adentro ni fuera,
y cuando la costura de su centro se da vuelta, todas las miradas se dirigen al
vestido.” p. 140-141
El nombre del padre entre realismo y nominalismo. Blog-Note del
síntoma. Tres Haches, 2006
“No se trata de reanimar la cadena significante (…) sino más bien de centrar
sobre el acontecimiento de cuerpo el “milagro del alarido”. El sujeto es invitado
a decir (…) cómo él se defiende del milagro por una invención particular. El
presidente Schreber nos hubiera entonces hablado del uso que hacía del piano
(…) centramos pues la interpretación sobre el par ordenado (S1-a).”
p. 10-11
El cognitivismo o el cuerpo sinthomatizado. Blog-Note del síntoma,
“Blog-notes: psicopatía de la evaluación”. Tres Haches, Buenos Aires,
2006
“El traumatismo del parásito lenguajero sobre el viviente produce el síntoma,
célula tronco que permite el injerto del parásito lenguajero sobre el cuerpo y
fabrica el parlêtre.” p. 134
99
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“La pregunta “¿qué quiere de mi, de mi cuerpo? Tiene como respuesta la
angustia, con la cual tengo una sensación corporal como tal, un acontecimiento
del cuerpo.” p. 12
El niño como reverso de las familias, El goce sin rostro. Tres Haches,
Buenos Aires, 2010
“(…) Lacan distingue diferentes modalidades de la relación del hablanteser al
cuerpo. Una primera relación al cuerpo es concebida como una adoración una
“adorpción”. Está también la relación al cuerpo de Joyce, que atravesó la idolatría
para alcanzar “la idea de sí como cuerpo.” p. 140
Construir con las ruinas del sentido. El goce sin rostro. Tres Haches,
Buenos Aires, 2010
“(…) tu cuerpo te pertenece, vulgariza al comienzo del siglo un adagio del
liberalismo la cuestión de saber si por el hecho de ignorar en qué ese cuerpo es
sostenido por el sujeto de la ciencia, se va a llegar al derecho de cortar ese cuerpo
en trozos para el intercambio.” p. 125
Nuevas eróticas de lo divino. Revista Enlaces N°15. Grama Ediciones,
Buenos Aires, 2010
“(… ) Lacan… dice que cualquier cosa puede servir para escribir el Uno de la
repetición y propone, como primera superficie de inscripción (…,) la forma del
cuerpo con la confusión que el señala entre el Uno del cuerpo, que se presenta
bajo la forma de un individuo (…) y el Uno significante que se repite.”
p. 25-27
El sujeto de la ciencia y la distinción femenina. Letras Lacanianas
N°8. Comunidad de Madrid de la ELP, Madrid, 2014
“Si el sinthome en general es un acontecimiento de cuerpo, queda por saber de
qué cuerpo. No es uno especular, sino más bien el cuerpo que tiene consistencia
de goce. La posición de la mujer respecto del sinthome la hace más libre en
relación al cuerpo especular del narcisismo. Esta es la paradoja del narcisismo
‘femenino’, que Lacan en una ocasión ha preferido llamar el ‘narcisismo del
deseo’, con un aparente oxímoron.” p. 21.
100
Otros Autores/ Parlêtre
Los órganos del cuerpo en la perspectiva psicoanalítica. El Caldero de
la Escuela, nueva serie N°4, publicación de la Escuela de orientación
Lacaniana, 2008
EL CUERPO HABLANTE
Una lectura del Seminario 19 de Jacques Lacan. Revista Enlaces
N°20. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2014
“En nuestra época, aparece con el hedonismo frenético de la civilización, la
búsqueda de performance en todos los aspectos- incluso los de la vida sexual,
Lacan los remite a los comienzos del discurso del amo.” p. 6
“Lacan… puede pensar su búsqueda que no es contentarse con la inscripción
del Uno en lo imaginario, algo del Uno y del goce más allá de toda sabiduría se
puede escribir en el cuerpo y se trata de ver cómo.” p. 6
El inconsciente es la política, hoy (23/06/2015). Publicado en francés
en Lacan Quotidien N°518, 2015. http://www.lacanquotidien.fr/blog/
wp-content/uploads/2015/06/LQ-518.pdf . Disponible en: http://www.
psicoanalisisinedito.com/2015/06/eric-laurent-el-inconsciente-es-la.html
“Lo que también anuncia nuestra actualidad, (…) es el hincapié en el
inconsciente político, a partir de la sesión de mayo de 1967 en la que Lacan
adelanta por primera vez con esta claridad que El Otro es el cuerpo y no el
espíritu, como algunos habían podido creerlo: “El Otro, en último término,
y si ustedes todavía no lo han adivinado, el Otro, tal como allí está escrito, ¡es
el cuerpo! (…) Que el cuerpo está hecho para inscribir algo que llamamos la
marca, eso evitaría para todos muchos problemas y la repetición de muchas
tonterías.”
“El cuerpo como Otro encontrará todo su desarrollo en la última enseñanza
de Lacan, hasta la consecuencia que despeja J.-A. Miller en su conferencia de
presentación del próximo congreso de la AMP, titulada “El inconsciente y el
cuerpo hablante”, la voluntad de Lacan de sustituir al in consciente freudiano
por el término de parlêtre (…) El enfoque por el parlêtre permite retomar el
comentario de “el inconsciente es la política”, a partir de la inscripción sobre el
cuerpo, a partir del acontecimiento de cuerpo. Es lo que ha hecho Miller en un
texto reciente redactado tras los atentados de enero, que evoca, a propósito de la
blasfemia, “’el dato inmediato de la conciencia’, correlativo a ese displacer carnal,
a ese ‘acontecimiento de cuerpo’ que, en mi hipótesis, afecta al musulmán.”
“(…) notemos primero que el acontecimiento de cuerpo del que hablamos no
afecta al cuerpo en tanto organismo del individuo, sino al cuerpo del sujeto
del lenguaje, de entrada transindividual. El cuerpo hablante viene siempre a
oponerse al cuerpo del individuo. Habla y testimonia del discurso como lazo
social que viene a inscribirse sobre el cuerpo.”
101
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“Habrá que ver, precisamente, el modo por el cual la lengua impactó al cuerpo
produciendo un efecto de goce (…). Por lo tanto, así como Lacan fue llevado en
su última enseñanza a reemplazar al inconsciente por otra cosa (el parlêtre), que
se adapta mejor a lo que es la práctica del psicoanálisis, fue llevado también a
reemplazar la pulsión freudiana por el lugar de la sustancia gozante, que va a ser
finalmente el cuerpo mismo.”
“Entonces, tomemos la expresión de Lacan, “cómo se engancha el significante
al cuerpo”. Luego de que él produjese una escritura que aísla y anota al cuerpo
como distinto de los subconjuntos de goce, este enganche es todo lo que está
en juego en lo que se despliega en el Seminario XXIII: Lacan propone allí, en
efecto, desde la primera clase, una modalidad de cómo se anota el conjunto
vacío, el uno, el dos, cómo se pasa a tres, y cómo así el cuerpo se encuentra
articulado a lo simbólico mismo, a lo imaginario y a lo real.”
“(…) como nos los hizo ver Jacques-Alain Miller en su conferencia de
presentación del X Congreso de la AMP, lo que va a proponer Lacan en su
última enseñanza es decir que hay un goce del cuerpo que se goza, y también
hay un goce de la palabra, que es otro que el goce del cuerpo. Esta cuestión del
goce de la palabra va a interrogar la recuperación de la sublimación freudiana en
el concepto de escabel, pero es un goce que es distinto al del cuerpo. Y, JacquesAlain Miller lo dice muy bien, la lógica de Lacan es decir que la lógica fálica
va a ser identificada al goce de la palabra o del escabel, en la medida en que su
propiedad fundamental es perturbar al cuerpo que se goza, y al que le gustaría
saber lo menos posible sobre este goce que lo perturba.”
102
Otros Autores/ Parlêtre
Se habla del cuerpo. Entrevista realizada por Bernard Jothy y Ariel
Altman, Jornada 2015 del CPCT-París “Ça parle du corps”: http://
cpct-paris.fr/IMG0/CPCT_J15_Entretien_ELaurent.pdf. Disponible en
español: http://www.psicoanalisisinedito.com/2015/09/eric-laurent-sehabla-del-cuerpo-2015.html
EL CUERPO HABLANTE
López- Herrera, Pía
El paradigma biopolítico versus el cuerpo lacaniano. Letras Nº3.
Comunidad de Madrid de la ELP, Madrid, 2012
“Para el último Lacan, el cuerpo habla en tanto que goza, es decir que disfruta
y sufre, es un cuerpo pulsional donde el síntoma es acontecimiento del cuerpo.
Para los seres hablantes no es lo biológico lo que decide su destino, sino el orden
simbólico, y el goce es el producto del atrapamiento del cuerpo orgánico por el
lenguaje.” p. 74
López, Rosa
El cuerpo hablante de la histeria, Letras Nº3. Comunidad de Madrid
de la ELP, Madrid, 2012
“Lo que caracteriza a la histérica es que ella encarna ese desajuste estructural de
la sexualidad (…) Ella no encuentra la paz en un mundo organizado en torno
a la totalidad y la completud. Su carne se convierte en un libro abierto cuyo
mensaje no hace más que mostrar lo que falta, la discordancia entre deseo y
goce, la ausencia de reciprocidad.” p. 35
Lora, Ma. Elena
La posición del analista en la práctica de nuestra época, Bitácora
Lacaniana Nº 2. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2013
“Ciertamente, el verdadero desafío con el que se encuentra cada analista hoy
es escuchar , examinar los encuentros, contingencias, sorpresas y excesos que
conllevan un sufrimiento que afecta al cuerpo de serhablante, de manera que
sus intervenciones permitan la emergencia de algo singular, para abrir y armar
nuevos modos de vivir el goce que implica la vida misma.” p. 172
Lijtinstens, Claudia
M
Vías del hallazgo en la experiencia analítica, Revista Lacaniana de
Psicoanalisis N°12. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2012
Márquez, Carlos
“Nuestra práctica es una práctica semántica ligada al detalle y a la perspectiva
del parlêtre, la del sujeto anudado a un cuerpo y a un decir y es esa la vía
privilegiada que hoy tenemos para responder al amo evaluador que intenta
eliminar la causa, lo imposible, lo disimétrico e introducir un orden absoluto,
aquel de las servidumbres voluntarias.” p. 173
“El parlêtre intenta fijarse con el desgaste de su cuerpo como última garantía.
Garantía que habrá sin embargo que abandonar para dejar de caer por el agujero
Poder Gozar http://marquezcarl.blogspot.com/2015/03/poder-gozar.
html
103
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Medina, Blanca
El escabel de Joyce. Cuadernos de Psicoanálisis Nº36. Instituto del
Campo Freudiano, Madrid
“Finalmente con el sinthome, Lacan pone en primer plano el efecto de goce que
produce el lenguaje sobre el cuerpo del palêtre, el modo en el que el cuerpo lo
acusa y lo encarna. Podemos decir que el sinthome muestra los límites, a nivel del
inconsciente, de un sujeto supuesto saber sobre el goce.” p. 51
Podemos decir, entonces, que el escabel nos lleva a la función de la nominación.
Y, en este sentido, « Joyce, el síntoma» es el acto que toma a su cargo Lacan
dándole este nombre propio.” p. 52
Molina, Andrés
Urgencias del ser, urgencias de existencia, urgencia del sinthome,
urgencia de insatisfacción, “Hablar con el cuerpo, las crisis de las
normas y la agitación de lo real: volumen del VI ENAPOL. Grama
Ediciones, Buenos Aires, 2014
N
Najles, A. Ruth
Enredos de lo femenino. Revista Enlaces Nº21. Grama Ediciones,
Buenos Aires, 2015
“(…) a nivel de lo real, el Otro del Otro del significante es el cuerpo y su goce, o
sea, el conjunto del Uno y del cuerpo. Es decir, que cuando se quita el tapón del
objeto a en tanto semblante de ser, se desnuda un más allá, que es la existencia
real del parlêtre.” p. 10
Dossier: Escabel y parlêtre, “Comité de Acción de la Escuela Una.
Parlêtre, sinthome, cuerpo y escabel, Segunda noche preparatoria del
Congreso AMP 2016”. “Parlêtre”. Revista Lacaniana de Psicoanálisis
N°18. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“(…) existe algo que se llama parlêtre, lo cual es un pleonasmo porque no hay ser
sino por hablar. Si no existiera el verbo ser no habría ser en absoluto (…) Lacan
dice: “…en tanto el parlêtre consiste en un cuerpo -que es diferente de la carne-,
de lo que se trata es de un goce… de un orden diferente a lo relativo al goce
fálico.” p. 59
Musachi, Graciela
“Pero entonces: si el parlêtre es el nombre del inconsciente real, pero al mismo
tiempo es la pura letra de goce, ¿qué diferencia hay entre el parlêtre y el sinthome?
Sinthome es la pura letra de goce que marca la respuesta del parlêtre frente al
trauma de lalengua. ¿O podría pensarse al parlêtre como el conjunto de las
cuatro consistencias separadas, R S I -sinthome? Porque el parlêtre es un ser que
no depende de un cuerpo sino de lo simbólico, y que no es cuerpo. Eso explica
la separación entre el cuerpo y el ser. Vuelvo a preguntarme: ¿qué cuerpo es
éste?” p. 60-61
¡Pobres de nosotros! Coloquio-Seminario sobre el Seminario 23 de J.
Lacan: El sinthome. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2007
O
“Las urgencias de ser se presentan en aquellos parlêtre que están dentro de la
estructura del discurso, aquellos en los cuales ha operado el Nombre del Padre,
donde se va a desarrollar la problemática de la falta, de la falta en ser, el falo, la
significación fálica, el sentido, el goce fálico, el deseo en relación al deseo del
Otro, a la dialéctica del deseo y el fantasma, el deseo y el objeto a.” p. 115
“La adoración del propio cuerpo es una relación. Es la única relación que
hay para el parlêtre hasta tal punto que podemos blasfemar a Dios pero
no a nuestro cuerpo. Por esta adoración primaria tampoco hay relación de
conocimiento con el cuerpo sino de absoluta ignorancia. Que, para Lacan, lo
único que haya es un-cuerpo es su materialismo (…).” p. 57
104
Otros Autores/ Parlêtre
de la existencia mediante el consumo, la crítica, la crítica del consumo o el
consumo de la crítica y resistir a la lógica implacable de la pulsión de muerte,
haciendo de las proximidades de ese agujero un lugar habitable.”
EL CUERPO HABLANTE
Ordóñez, Pilar
El cuerpo de la escritura mística, Freudiana Nº70. Barcelona, 2014.
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=2
“Los místicos probaron que sus cuerpos estaban marcados, pero esa escritura en
la piel resultaba ilegible. Donde estaba el cuerpo, no estaba la palabra.” p. 84
105
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Ello habla por sí solo, en la carne y sin llegar al dicho. Lo que no es
anudado por el falo, Boletín 18SFL: http://www.nel-amp.org/index.
php?file=Actividades/Seminario-de-Formacion-Lacaniana/Boletines/018.
html
¨El cuerpo hablante funciona desde la libido y el asunto es cómo hacerla
aprehensible. Percibirlo y localizarlo es el esfuerzo de captar los efectos del goce
sobre su cuerpo cuando es bañado por lalengua.”
“El goce que excede a la norma fálica, y al núcleo elaborable del goce, es
el trauma del parlêtre, porque es un goce que se resiste a la nominación,
innombrable que Lacan denominó en los 70’ goce femenino y Miller lo ha
llamado goce a secas.”
P
Palomera, Vicente
La cotorra enamorada de Picasso. El psicoanálisis Nº21. Escuela
Lacaniana de Psicoanálisis ELP. Barcelona, 2012 “Lo imaginario se puede abandonar al parlêtre de modo discreto en la parafrenia,
definida por Lacan como un imaginario sin ego, imaginario sin objeto, sin otro,
imaginario, en suma, que no se refiere a un cuerpo, por no haber un resto
que haga de lastre. Por ejemplo, el ego de Joyce, a falta de una imagen que lo
sostenga, tuvo que ser reparado por medio de la escritura.” p. 31
Pocheret, Bernard
La raíz corporal del Sinthome. Cuerpos que hablan. Colofón
Nº33, Boletín de la Federación Internacional de Bibliotecas de la
Orientación Lacaniana. París, 2013
“El sinthome lacaniano es el síntoma separado de su valor de formación del
inconsciente. Es lo incurable de una marca de lalangue sobre el cuerpo. Ésta es
puro goce, es decir, radicalmente fuera de sentido. Si bien el parlêtre no se cura
de esta marca de goce, puede sin embargo consentir y servirse de ella, por haber
captado su relieve.” p. 19
106
Otros Autores/ Parlêtre
Ortega de Spurrier, Piedad
EL CUERPO HABLANTE
Portillo, Ronald
Sobre el cuerpo. Disponible en: http://nel-medellin.org/sobre-elcuerpo/
“Al hablante-ser, no al sujeto, le es atribuido un cuerpo y se establece que el
pensamiento está ligado de manera indisociable al cuerpo, en la medida que
ese cuerpo goza. [...] Lo real del goce realiza la conjunción de la inconsistencia
de lo simbólico, S(A/), con la consistencia de lo imaginario, de lo imaginario
del cuerpo. [...] El elemento que viene a procurar el anudamiento de los tres
registros (RSI) es el sinthome. Es el cuarto aro que viene a unir los cabos
sueltos, de aquí la idea del sinthome como elemento de reparación, vale decir
como factor de curación lograda al final de la experiencia analítica.”
R
Racki, Gabriel
Algunas vibraciones sobre la perturbación de la defensa, Revista
Lacaniana de Psicoanálisis N°16. Grama Ediciones, EOL-Buenos
Aires, 2014
“Lo ininterpretable apunta al parlêtre donde el inconsciente se anuda al cuerpo
ya no imaginario ni simbólico, sino a lo que el cuerpo tiende de real.” p. 114
Réquiz, Gerardo
Algunos usos y funciones de los objetos fuera del cuerpo. Disponible
en: http://citaenlasdiagonales.blogspot.mx/2015/10/gerardo-requizen-algunos-usos-y.html
“Ahora bien, si no somos un cuerpo, como enuncia Lacan, ¿podemos decir que
el parlêtre lo tiene? Lacan así lo afirma pero deja lugar a la duda. Cuando liga
el cuerpo al objeto a la afirmación se problematiza justamente por el límite que
impone este objeto puesto que el cuerpo lo aloja y, de esta manera, ese objeto
pasaría a ser del sujeto, lo que no es cierto.Por otra parte, poner el cuerpo del
lado del objeto a lleva a la pregunta sobre cómo alojarlo en el Otro. Asunto muy
vigente porque ya no se trata sólo de su valor fálico, sino el de un objeto que
puede devenir en un artefacto más.”
107
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
El cuerpo en la enseñanza de Jacques Alain Miller, El psicoanálisis
N°26. Barcelona, Escuela Lacaniana de Psicoanálisis ELP, 2014
“Mientras que el parlêtre es un ser que no depende del cuerpo sino que lo recibe
de la palabra, el cuerpo cuando se trata del parlêtre, es algo fundamental. (…)
la relación, que Lacan perdió en el nivel sexual, reaparece en el nivel corporal. El
cuerpo es la única consistencia del parlêtre, pues es lo que lo mantiene unido.”
p. 169
Russo, Pablo
Variedad de respuestas al malentendido sexual - 1ra parte, Revista
Enlaces Nº10. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2005
“(…) El parlêtre es equivoco -equivocidad constitutiva de todas las lenguas- y en
ese sentido, es malentendido y fallado.” p. 59
“Que haya sexuación es contingente y que el parlêtre se ubique en uno u otro
sexo, también.” p. 64
S
Seldes, Ricardo
Hablar con el cuerpo y la urgencia en psicoanálisis. Revista Lacaniana
de Psicoanálisis N°14. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2013
“(…) la nomenclatura de parlêtre deja de lado al sujeto como falta en ser e
incluye la dimensión del cuerpo.” p. 63
El parlêtre entre el goce de la palabra y el goce del cuerpo. Revista
Lacaniana de Psicoanálisis Nº19. EOL. Año X. Ed Grama, Buenos
Aires, 2015
“El cuerpo que da consistencia al parlêtre, habla en ocasiones de un modo muy
silencioso. ¿Ese goce admite cambios, modificaciones, mutaciones? Un goce
mudo, opaco, se vislumbra en el más allá de esta experiencia y es el analista
trauma, con escasas palabras, quien debe hacerlo hablar.” p. 209
Otros Autores/ Parlêtre
Rodriguez, José A.
EL CUERPO HABLANTE
Serra, Marta
El amor del cuerpo. El psicoanálisis Nº23. Escuela Lacaniana de
Psicoanálisis ELP, Barcelona, 2013
“Cada parlêtre debe inventarle una vida a su cuerpo. Cada hablante es una
compleja relación entre el ser hablante que es, y la sustancia material en que se
sostiene.” p. 40
Silvestri, Nora
Coloquio-Seminario sobre el Seminario 23 de J. Lacan: El sinthome.
Grama Ediciones, Buenos Aires, 2007
“(…) La dificultad que plantea concebir el cuerpo a partir del seminario El
Sinthome es cómo concebir un cuerpo que está sostenido por la imposibilidad
de representar el agujero y con la dificultad de que el cuerpo es sólo el borde,
pero que si uno cuenta no sólo con la consistencia, respecto del borde, sino con
el agujero y con la existencia (…) entonces el cuerpo podía ser el ego en tanto
tal. Aquello que es un artificio de escritura con el cual el parlêtre, ya no el sujeto,
puede soportarse.” p. 80
T
Tarrab, Mauricio
Dossier: Escabel y parlêtre. “Comité de Acción de la Escuela Una.
Parlêtre, sinthome, cuerpo y escabel. Segunda noche preparatoria
del Congreso AMP 2016”, “Escabel”, en Revista Lacaniana de
Psicoanálisis N°18. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“De inmediato el escabel tomó para mí la fisonomía del ornitorrinco, ese extraño
animal australiano con cuerpo y patas de nutria, pico de pato y cola de castor,
anfibio, y que para más curiosi­dad es un mamífero que pone huevos. Su rareza
lo acerca al escabel, ya que se puede pensar que es de piezas sueltas que ha sido
forjado caprichosamente por un bricoleur (…) ¿Serán parlêtre, escabel, sinthome
y cuerpo esos nuevos cuatro conceptos para este psicoanálisis que practicamos
pescados por J.-A. Miller en el mar del último Lacan?” p. 67
“El escabel (…) lleva la marca de lo singular con lo que el parlêtre se presenta al
mundo.” p. 68
108
109
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
La marca del parlêtre. Freudiana N°66. Barcelona, 2012. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“Lacan define el órgano-lenguaje como ex-sistente al cuerpo, como socavando los
órganos del cuerpo, volviéndolos problemáticos; esto introduce la pregunta ¿qué
hacer con ellos? El parlêtre, dice, se verá urgido a darles una función.” p. 110
Tudanca, Luis
Acerca del control. Opacidad del síntoma. Ficciones del fantasma.
Colección Orientación Lacaniana. Editorial EOL-Grama, Buenos
Aires, 2010
“Se desplaza entonces el interés de pensar las fallas de la estructura, a la falla
inicial de la misma en el anudamiento RSI. El síntoma sólo, que no cede, que
permanece intacto, fuera de sentido, que no articula represión, etc, se suma a los
trastornos del imaginario corporal y a los trastornos del lenguaje. En definitiva:
no hay trastornos del lenguaje, el lenguaje es un trastorno para todo parlêtre.”
p. 103
Torres, Mónica
Semblante y sinthome: ¿un binario disyuntivo?, El Caldero de la
Escuela, Nueva Serie Nº9, Publicación de la Escuela de la Orientación
Lacaniana, Buenos Aires, 2009
“El último Lacan se orienta por la invención y la poesía para no velar el
vacío que resulta de la experiencia del sinsentido. El semblante, en su
borde con lo real, permite hacer vivible para el parlaître la experiencia de
ese vacío.” p. 29
De los síntomas al sinthome. Revista Enlaces Nº21. Lecturas On-Line.
http://www.revistaenlaces.com.ar/2.0/revista_enlaces_psicoanalisis_
revista_21_lecturas.html
“Lacan habla de parlêtre, es decir, del ser hablante, del ser viviente que habla. Va
a plantear que para ese parlêtre hay una marca de goce primera, y a esa marca
la va a denominar l’une-bevue, la una-equivocación. Esa primera marca de goce
tendrá que ser distinta del inconsciente como lo entendimos hasta ahora, no
puede ser equivalente de la serie S1, S2, S3… de la cadena en la que se puede
110
Otros Autores/ Parlêtre
Troianovski, Leonora
EL CUERPO HABLANTE
seguir asociando eternamente como pueden hacerlo tanto la histérica como el
obsesivo, la histérica por amor y el obsesivo para demostrar que algo puede ser
eterno, o para postergar el tiempo de concluir.”
“Lacan ya no cree que el inconsciente sea el discurso del Otro, considera que el
inconsciente es el azar de los gruesos errores, es decir, es el modo único singular
y azaroso en que se grabó la marca de goce para cada parlêtre en singular, para
lo cual cada parlêtre en singular tendría que encontrar su solución. Es de esperar
que al final de un análisis cada uno encuentre su solución sinthomática única y
singular, hay que hacer lo posible para que esto ocurra.”
U
Ubieto, José Ramón Estrategias de la acción política del psicoanalista. Freudiana Nº67.
Barcelona, 2013 http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=8
“La enfermedad del parlêtre no es otra que su ser de lenguaje y, la promesa
del psicoanálisis busca obtener del sujeto su diferencia absoluta, ligada a su
condición de objeto a en el fantasma. Por ello el sinthome se presenta como el
límite al furor sanandi, aquello que no cambia por irreductible y sobre el que
cada ser hablante elucubra un saber sobre su modo de gozar singular.” p. 26
V
Vallejo, Paula
Lo infinito del pase del parlêtre. Lacaniana Nº17. Grama Ediciones,
EOL-Buenos Aires, 2014
“En su última enseñanza Lacan nos habla de parlêtre como cuerpo hablante (…)
de ahí la interpretación como reson, consuene más con el parlêtre y no con el
Inconsciente en tanto elucubración de saber (…) La interpretación no trata sólo
de explotar el doble sentido de la palabra –equívoco- , sino introducir un efecto
de agujero que no es sin relación con la resonancia en el cuerpo.” p. 66
111
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Seminario “Cuerpo hablante” - Bolivia (2015) Disponible en Radio
Lacan.
“La función del cuerpo hablante no solamente se define por su forma ni por su
imagen, sino por estar habitado al menos por tres goces: el goce de la imagen, el
goce de lalangue y el goce de la pulsión. Cada dimensión del ser hablante tiene
una manera singular de hacerse al cuerpo, es decir, en cada dimensión existen
órganos psíquicos que le son propios. Así como el cuerpo anatómico tiene
órganos, el cuerpo imaginario tiene unos órganos, el cuerpo simbólico tiene
otros órganos y el cuerpo real tiene otros órganos.”
Velásquez, Jose Fernando
Seminario “Cuerpo hablante” - Bolivia (2015) Disponible en Radio
Lacan.
“El parlêtre está compuesto por tres dimensiones en las que cada ser hablante
habita [...] tres formas de decir que habitamos, tres formas de lenguas que
hablamos, y el asunto es como tres mansiones del dicho,, se anudan para jugar
una consistencia subjetiva al ser hablante lo que nos permite pensar que el
cuerpo puede ser tomado por cada una de las dimensiones de manera diferente.
[...] Cada dimensión del ser hablante tiene una manera singular de hacerse
al cuerpo; en cada dimensión existen órganos psíquicos propios: así como el
cuerpo anatómico tiene órganos, el cuerpo imaginario tiene unos órganos, el
cuerpo simbólico tiene otros órganos, y el cuerpo real tiene otros órganos.”
Vicens, Antoni
Discreta Verdad. Freudiana Nº71. Barcelona, 2014. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=13
“El sinthome es un lenguaje de escritura, fruto de un acto concebido más como
rastro de un parlêtre, de un ser-habla-letra que como atravesamiento; más como
el dejarse llevar por el correr del río que por el franqueamiento de la frontera que
dibuja.” p. 54
Viganó, Ana
Algunas puntuaciones sobre la histeria rígida. (H)ETÉREAS. Las
mujeres, lo femenino y su indecible. Buenos Aires, GRAMA, 2014.
“Después de un análisis el significante amo revela su lazo, no al padre sino al
modo de goce determinado por el objeto. Se opone entonces un Inconsciente
112
Otros Autores/ Pasehablante
Velásquez, Jose Fernando
EL CUERPO HABLANTE
real que privilegia los elementos en su disyunción y no en su concatenación,
lo que Lacan llamó la una-equivocación. Un inconsciente así definido, supone
incluir lo real -y no sólo los efectos del significante- como pura repetición
del un-yerro. El cuerpo hablante del parlêtre ocupa un lugar a la vez de
anudamiento posible y de separación entre lo simbólico y lo real.”
W
Wolodarsky, Diana
El pragmatismo del síntoma. Incidencias de la última enseñanza de
Lacan en la práctica analítica, Colección Orientación Lacaniana –
EOL-. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2006
“(…) con la noción de sujeto respecto de parlêtre, en la medida que la noción
de cuerpo se incluye en el síntoma. La noción de cuerpo, no es que estuviera
ausente en Lacan cuando hablaba de sujeto, sino que el cuerpo en su dimensión
de goce real, no ya simbólico, pasa a tener un tratamiento diferente en la
práctica, por ejemplo, por medio de la interpretación.” p. 195
IV /b. Pasehablante
A
Aromí, Anna
Acerca del deseo del analista. Freudiana N°68. Barcelona, 2013.
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=4
“Lo importante es captar que con el sinthome no salimos del campo del
lenguaje, pero salimos del reino del sentido. Hay el Uno significa que
la incidencia del lenguaje en el parlétre se reduce al significante Unomarca, trazo, letra y que este Uno sin S2 no significa nada. Y esto tiene
consecuencias en cómo concebimos las intervenciones y la posición del
analista, porque si el síntoma estaba tejido con el sentido, el sinthome está
del lado de un goce autoerótico que no significa nada y que se repite sin
fin.” p. 88
113
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Parlêtre y secreto. Freudiana N°66. Barcelona, 2012. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“Pero hay otra perspectiva sobre el pase, el pase del parlêtre, el parlêtre es el ser
hablante, donde se trata de “un injerto del ser sobre el cuerpo”, por tanto se
cambia el orden, y en el cuerpo se inserta un ser. No es una ontología sino una
existencia: “lo que existe es más que el ser que lo habita”. Son los textos de Lacan
de 1976, donde habla de la “urgencia”, pero “urgencia” en el sentido de prisa y el
empuje (pousser, presser, ça urge).” p. 28
B
Bassols, Miquel
Enseñanzas del pase sobre el resto de sentido. Freudiana N°66.
Barcelona, 2012. http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“(…) esta dimensión de resto fecundo se hace especialmente demostrativa
cuando aparece en la intersección entre dos dimensiones del trabajo analítico, el
trabajo de la transferencia y el trabajo del síntoma una vez llevado a su condición
de sinthome, de aquello que lo ha mostrado como lo más singular para el sujeto y
que se sostiene en lo que llamamos “restos sintomáticos” del análisis.” p. 115
“(…) el sujeto que, dividido por la separación de un “pellejo” de su cuerpo, por
la separación de un resto de sentido estrechamente vinculado al goce del cuerpo,
tomará este resto como el producto de una pura operación de la letra, de las
letras que forman el borde, el litoral, en el campo del goce en el que se había
desarrollado el drama de su historia, empezando por la historia de sus propios
padres. La letra será aquí en su sentido más genuino el objeto a que causa la
división del sujeto, la letra como condensador del goce, sin sentido o fuera de
sentido.” p. 117
Comentario del Testimonio Una mujer sin maquillaje, de G.
Grinbaum. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°19. EOL. Año X.
Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“(…) Sólo el ser que habla, sólo el parlêtre en su dimensión más pura puede
fingir que finge. Es una observación que J. Lacan realiza en varios momentos de
sus escritos como algo que distingue radicalmente al ser que habla de cualquier
trasunto o máquina que puede fingir.” p. 148
114
Otros Autores/ Pasehablante
Arranz, Ricard
EL CUERPO HABLANTE
Bonnaud, Hélène
Anatomía de un decir. Freudiana N°64. Barcelona, 2012. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=12
“¿Acaso podríamos decir que el análisis es un cuerpo agujereado por pequeñas
frases, un cuerpo perforado por ciertos significantes, un cuerpo horadado
por estas huellas mnésicas de las que Freud ha señalado que fundaban el
inconsciente?” p. 119
Del atravesamiento del fantasma al sinthome. Freudiana N°65.
Barcelona, 2012. http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=16
“(…) es por el hecho de excluir la frase paterna del Otro del sentido, que ella
tuvo efectos en el cuerpo, efectos de repercusión del significante en el cuerpo. La
ruptura entre la causa y el efecto demuestra que se trata de un real contingente,
un irreconciliable que, sin embargo, gracias al análisis me permitió decirme “es
así”, y aceptarlo.” p. 124
Del goce del secreto al pase. Freudiana N°66. Barcelona, 2012. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“Lo que no podía leerse se escribía en los síntomas del cuerpo. Este decir
marcado por el rechazo del sentido no podía franquear el sentido.” p. 41
Briole, Guy
La frase-Una del todo sola. Freudiana N°64. Barcelona, 2012. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=12
“Con las pequeñas frases nos encontramos, a veces, con grandes efectos.
Cuando menos, con efectos inesperados. Cuando se aborda esta cuestión, nos
damos cuenta enseguida de que si el parlêtre, aquí analizante, ha sido marcado
por palabras que han percutido el cuerpo, han resonado en él dejándole
marcas, importa también saber cómo ha podido operar el acto del analista,
aquí haciéndolas presentes, en otro lugar realizando una torsión, oponiendo
otra pequeña frase que hallará un lugar particular para el analizante.” p. 115
“Esas pequeñas frases, esas palabras, que han tocado al parlêtre, han marcado
al cuerpo, el cual, si bien había conservado la huella, había perdido su
significación.” p. 116
115
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
“Así, el psicoanálisis suscita esta paradoja que hace que, por un lado, no haya
verdadera soledad para el parlêtre pues, dondequiera que esté, es sujeto del Otro
del lenguaje. Pero, de otro lado, el fracaso (ratage) del sujeto del significante
produce una soledad, aquella por la cual la relación sexual no puede escribirse.”
p. 66
Reconocerse… en lo que se es. Freudiana N°66. Barcelona, 2012.
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“Entonces, a lo que se empecina el sujeto es a hacer como si el corte no hubiese
tenido lugar. Pero, señala Lacan, cuanto más uno se empeña en contornearlo,
más se dibuja el contorno. Hete aquí la repetición en el corazón del parlêtre
haciendo de su cuerpo caja de resonancia, allí donde es el borramiento el que
apunta a la repetición.” p. 126
Brodsky, Graciela
Partenaires. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°13. Grama
Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2012
“¿Qué clase de lazo es la transferencia si no es un lazo sintomático, que anuda
el goce del sujeto y de su cuerpo -que llamamos parlêtre- aun partenaire
circunstancial?” p. 59
Après coup. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°18. Grama
Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“Lo diré de otro modo, el goce femenino no es la solución del impasse sexual: el
goce femenino es el problema que está en el origen del impasse sexual. El goce
que excede a la norma fálica, el goce que excede al núcleo elaborable del goce,
ese es el trauma del parlêtre.” p. 88
C
Chiriaco, Sonia
Una Palpitación. Freudiana N°64. Barcelona, 2012. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=12
Otros Autores/ Pasehablante
Soledades. Freudiana N°66. Barcelona, 2012. http://www.freudiana.
com/revistas.php?idrevista=15
EL CUERPO HABLANTE
aunque el goce sea irreductible nos hace tocar ese punto de encuentro entre el
acontecimiento del cuerpo y el significante.” p. 135
À tire d’elle. Freudiana N°65. Barcelona, 2012. http://www.freudiana.
com/revistas.php?idrevista=16
“El fantasma tiene esa función de sostener el cuerpo amparando los significantes
y las imágenes que engañan al sujeto haciéndolo gozar.” p. 126
E
Esqué, Xavier
La vía de la singularidad. Freudiana N°66. Barcelona, 2012. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“(…) del pase saber, es decir, el pase donde lo que predomina es lo obtenido,
lo alcanzado, hemos pasado al pase parlêtre, cuyo énfasis estaría puesto en la
singularidad alcanzada a partir del punto de satisfacción al final del análisis,
un final que, en efecto, incluiría los restos sintomáticos. Todo esto teniendo en
cuenta siempre que no hay una jerarquía entre estas dos formas de entender el
pase y, sobretodo, que tampoco son excluyentes.” p. 156
F
Faire, Emilio
La relación del parlêtre con su cuerpo, Schreber y Joyce. Freudiana
N°71. Barcelona, 2014. http://www.freudiana.com/revistas.
php?idrevista=13
“Como puede desprenderse de los testimonios de algunos de los últimos AE,
perturbada la defensa, al final del análisis para encontrar el eso quiere gozar, será
necesario pasar por el eso quiere decir, y luego por el eso no quiere decir
nada. Llegando el sujeto hasta el punto de encuentro de lalengua y el cuerpo,
donde quedó marcado su modo de goce, punto que dará lugar, posteriormente,
a una iteración -en el sentido matemático del término.” p. 82
“El análisis no se cierra sobre sí mismo, no nos hace volver a la casilla de partida,
116
117
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Entre síntoma y fantasma. Virtualia Nº19, Revista digital de la
Escuela de la Orientación Lacaniana, 2009. http://virtualia.eol.org.
ar/019/template.asp
“El sujeto está encaramado en su fantasma y la fractura de éste lo destituye
como sujeto y se pasa a hablar de parlêtre, (…) el pase del parlêtre (…) es la
elucidación de su goce.” p. 77
El ultimisimo Lacan a la luz del pase. Revista Lacaniana de
Psicoanálisis, N°17. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2014
“El pase del parlêtre (ya no se trata del sujeto del significante sino de un
anudamiento de RSI, hay cuerpo) permite registrar una variedad de finales de
análisis, cada vez menos estandarizados, que hace ampliar la experiencia misma
del pase.” p. 75
Fuentes, Araceli
Lo que atraviesa mi cuerpo. Freudiana N°69. Barcelona, 2013. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=3
“En el encuentro siempre singular entre la lengua y el cuerpo, la voz se escribió
en mi cuerpo como síntoma y como fenómeno psicosomático.” p. 78
G
Gasbarro, Cecilia
Otra lengua, Otro goce. Lacaniana N°19. Publicación de la Escuela de
la Orientación Lacaniana. Año X. Grama Ediciones, 2015
“Hoy me interesa también destacar (de ese sueño) dos cosas, de las que me
advirtió el analista: el hecho de que se hiciera escritura y una Otra lengua (lo
escribo ahora con mayúscula), que seguiría de ahí en más tratando de bordear
lo imposible de decir de lo femenino como tal. Fue para esa época que volvió
guirnalda como girl-land, por ejemplo.”
p. 134
Gorostiza, Leonardo
Otros Autores/ Pasehablante
Favret, Ennia
EL CUERPO HABLANTE
“(…) la oposición planteada por J.A. Miller entre el “pase sujeto o pase saber”,
ligado al atravesamiento del fantasma, y el “pase del parlêtre o pase satisfacción”,
ligado a la identificación al síntoma, suele suscitar la idea de que en este último
caso se extinguiría la noción de acto analítico.” p. 62
Un pragmatismo real. Virtualia N°26, Revista digital de la Escuela
de la Orientación Lacaniana, 2013. http://virtualia.eol.org.ar/026/
template.asp
“(…) sólo el síntoma es testimonio de que no todo es semblante y que es por
allí, que podemos reencontrar un realismo de la estructura. Precisamente en el
punto donde, ante el agujero traumático de la no relación sexual, el ser hablante
inventa su fórmula, su saber, necesario.”
Un pragmatismo real. Virtualia N°26, Revista digital de la Escuela
de la Orientación Lacaniana, 2013. http://virtualia.eol.org.ar/026/
template.asp
“(…) sólo el síntoma es testimonio de que no todo es semblante y que es por
allí, que podemos reencontrar un realismo de la estructura. Precisamente en el
punto donde, ante el agujero traumático de la no relación sexual, el ser hablante
inventa su fórmula, su saber, necesario.”
El padre después del pase. Freudiana N°70. Barcelona, 2014. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=2
“De manera silogística -¡con toda la prudencia que hay que tener al
razonar silogísticamente!- podríamos decir que: si el padre es un síntoma o
un sinthome, y un síntoma o un sinthome es un acontecimiento de cuerpo,
entonces, el padre es un acontecimiento de cuerpo. O, mejor dicho, que el
núcleo, el hueso, el Kern, del padre es un acontecimiento de cuerpo.” p. 142
Comentario del Testimonio Otra lengua, Otro goce.. Revista
Lacaniana de Psicoanálisis N°19. EOL. Año X. Grama Ediciones,
Buenos Aires, 2015
“(…) la mayoría de ustedes lo saben: la aparición de nombres de animales o
animales en los sueños, es el modo en que el parlêtre puede situar algo del orden
del goce, ya que que el animal representa –ilusoriamente- la idea de un goce que
no estaría afectado por el significante.” p. 135
La temporalidad y los usos del síntoma. Revista Lacaniana de
Psicoanálisis N°13. Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2012
118
119
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Una mujer sin maquillaje. Revista Lacaniana de Psicoanálisis Nº19.
EOL. Año X. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“El reparar resta. Reparar sabiendo que aun así el agujero asoma. Siempre restará
una hendidura imposible a reparar pero que ya no angustia.” p. 146
Guéguen, Pierre -Gilles El pase después del pase. Freudiana Nº70. Barcelona, 2014. http://
www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=2
“El fantasma no se da como una verdad; es lo contrario puesto que se trata de
una ficción. No da idea de una completud ya que es singular por definición,
incluso si es común en su formulación. Es una compresión del conjunto de
respuestas del parlêtre a las intrusiones de lo real en el cuerpo.” p. 160
H
Harari, Angelina
La rigidez analítica. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°12. Grama
Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2012
“Buscar la unicidad por la vía del ser hablante, del parlêtre, de un modo distinto
a buscar la unicidad en la vía del partenaire, fue la solución singular, la mía.”
p. 36
K
Kalfus, Paula
Un hueso duro de roer. Presentado en las XXIV Jornadas de la EOL,
2015. Próximamente se publicará en la Revista Letras Lacanianas Nº
11 de la ELP
“El campo semántico del fantasma y el goce del sentido que aparejaba se
revelaron fútiles. Finalmente encontré que el fantasma mentía…La realidad
se fue tiñendo de otro color… reorientando las ficciones de la existencia.En lo
que hace a esa fractura, cual solución de continuidad en la ficción, permanece
Otros Autores/ Pasehablante
Grinbaum, Gabriela
EL CUERPO HABLANTE
inconsolable. De vez en cuando una nota de la realidad la perturba, es entonces
cuando exhibe su horrorosa mueca -como la de la inmensa piedra de la Bocca de
la Veritá - ella no se deja mentir…”
L
Laurent, Eric
De lo real en un psicoanálisis. El reverso del síntoma histérico. El
Caldero de La Escuela Nº77. Escuela de orientación Lacaniana, 2000
“Se sabrá si la interpretación ha sido un acto cuando se esté en el fin de la
historia, cuando se esté frente a la separación entre el sujeto y el Otro. Sabremos
ahí entonces, si su goce ha sido tocado. En esto consiste la concepción de la
regulación de las palabras y de los cuerpos por la interpretación en resón.”
El pase y los restos de identificación. Letras Lacanianas Nº6.
Comunidad de Madrid de la ELP, Madrid, 2013
“El síntoma es lo que permite no rebajar la singularidad a la individualidad o
a la inercia del cuerpo. Supone la puesta en juego de un recubrimiento de los
orificios pulsionales del cuerpo y de los agujeros del inconsciente.” p. 58
El pase y los restos de identificación. Letras Lacanianas Nº6.
Comunidad de Madrid de la ELP, Madrid, 2013
“El síntoma es lo que permite no rebajar la singularidad a la individualidad o
a la inercia del cuerpo. Supone la puesta en juego de un recubrimiento de los
orificios pulsionales del cuerpo y de los agujeros del inconsciente.” p. 58
Lazarus-Matet, Catherine
Informe de la Comisión del pase 2010-11. Carteles A10-B10.
Freudiana Nº71. Barcelona, 2014. http://www.freudiana.com/revistas.
php?idrevista=13
“Ciertos AE han podido transmitir cómo un acontecimiento de cuerpo, de este
cuerpo que tiene consistencia de goce, ha modificado la captura anterior del
goce sobre el cuerpo. Una AE lo ha definido como “lo que vive” acercándose
a Lacan que sitúa la vida a nivel de lo real; para otra, se localiza en un
desequilibrio reconocido que rompe con su avance “hacia lo que se ocultaba
siempre” o, para otra, es con un “desenganche del que siempre debía arrancarse.”
p. 114
120
121
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
La elaboración del testimonio. Virtualia Nº2, Revista Digital de la
Escuela de la Orientación Lacaniana, 2001. http://virtualia.eol.org.
ar/002/notas/index-002.html
“Si insisto en la perspectiva del testimonio como parte de la investigación
colectiva, no hago otra cosa que sostenerme con Lacan (…) cuando Lacan ubica
el posible testimonio de lo real como la dispersión que hace el serhablante de lo
imposible por la vía de la palabra.”
M
Mandil, Ram
La triple D de un análisis: debilidad, delirio y duperie. Revista
Enlaces Nº21. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“Analizar al parlêtre implica, por lo tanto, ampliar nuestro entendimiento de la
noción de debilidad. Podemos decir que, al lado de la debilidad motivada por
el hecho de que un sujeto oscile entre dos discursos, de no estar sólidamente
instalado en ninguno de ellos, hay también una debilidad derivada del hecho de
que el parlêtre tome su cuerpo como Uno.” p. 98
Lo que no cesa. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°18. Grama
Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“La incidencia de la lengua sobre el cuerpo introduce para el parlêtre la cuestión
de la consistencia del cuerpo, de su consistencia “mental”. Podemos decir que,
para el hablanteser (parlêtre), hay algo del orden de su consistencia corporal que
no cesa de no escribirse. Lacan se refiere a la búsqueda de la consistencia del
cuerpo en términos de creencia., fundamentalmente la creencia de tener un
cuerpo. Sabemos también que Lacan señala la relación con la imagen del cuerpo
propio como soporte para esta consistencia.” p. 111
“(…) el hablanteser procura asegurarse de la consistencia de su cuerpo. Por más
aterrador que haya sido el modo de vivir esta escena, mi cuerpo estaba allá.”
p. 111-112
Mildiner, Kuky
Otros Autores/ Pasehablante
Leserre, Anibal
EL CUERPO HABLANTE
“(…) me encontré con un analista que me mostró un cuerpo descompuesto,
como hinchado. A medida que yo más hablaba, y más buscaba esa mirada,
más aparecía frente a mí esa pura presencia del cuerpo, de ojos cerrados, como
agobiado, que se me venía presentando con tanta fuerza los últimos tiempos.
En lugar del reconocimiento de mi silencio por la mirada encontré al analista
haciendo semblante del acontecimiento de cuerpo.”
P
Passos Ribeiro de Campos, Sérgio
La travesura del sinthome. Revista Lacaniana de Psicoanálisis, N°10.
Grama Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2010
“Ahora, como parlêtre, carga consigo la sustancia gozante de lo vivo, pero percibe
que la vida es fugaz y se escurre rápidamente, de modo que surge un deseo de
vivir intensamente.” p. 62
“El parlêtre usa lo imposible de ser reabsorbido como el judo de Lacan. La
máxima del judo es usar la fuerza del adversario a su favor.” p. 64
Porcheret, Bernard
¿Cómo se ocupa el psicoanálisis del cuerpo? ¿Cómo se interesa el
psicoanálisis en el mío? Freudiana N°69. Barcelona, 2013. http://www.
freudiana.com/revistas.php?idrevista=3
“Mi análisis me ha demostrado que, fundamentalmente, el Otro del significante
es el cuerpo, el cuerpo como real, y no el Otro lingüístico.” p. 75
R
Rabinovich, Débora
Primer Testimonio. El laberinto de mi deseo de saber. Revista
Lacaniana de Psicoanálisis Nº18. EOL. Año X. Grama Ediciones,
Buenos Aires, 2015
“Al síntoma lo nombraría: no sé.” p.
89
Un análisis. Tres cuerpos. Próximamente publicado en marzo en
Revista El Psicoanálisis Nº28. Editada por ELP
122
123
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Cinco conclusiones para arribar a un final. Presentado en
Noches de enseñanza del pase: “Lo que resta al final del análisis”,
EOL, 2015. Próximamente se publicará en la Revista Letras
Lacanianas Nº11de la ELP
“(…) nunca tengo la piel de lo que soy. Así que la piel se tiene, como se tiene un
cuerpo. Pero, no se es eso que se tiene. El análisis me permitió circunscribir que
detrás de la negra, de la injuria (…) detrás del temblor de angustia inclusive, hay
algo que persiste. Y que todo aquello fue un fabuloso invento de la neurosis para
intentar atrapar un aspecto del cuerpo que no se deja atrapar.”
S
Salman, Silvia
Lo singular en la resonancia. Virtualia Nº10, Revista Digital de la
Escuela de la Orientación Lacaniana, 2004. http://virtualia.eol.org.
ar/010/default.asp?notas/ssalman-01.html
“El equívoco es un significante librado por el analista que tiene la propiedad de
ser un enunciado de una apertura tal, que no determina de manera unívoca el
significado, es una invitación a que no se concluya sentido. Esta manera de decir
obliga al analizante a poner algo de su parte, es decir, a producir el equívoco de
su lado interpretando así su goce. Se capta en este movimiento el deslizamiento
que se irá produciendo desde lo particular del sujeto hacia lo singular del parlêtre
y sus incidencias en la práctica.”
“(…) la interpretación analítica se dirige a lo que hay del Uno en el parlêtre,
revelando la singularidad de su goce. Por ello esta última, es una resonancia
que se produce en el cuerpo, en tanto este cuerpo es la sustancia sobre la que
se apoya el goce y así se percibe que lalengua no está hecha para decir sino para
gozar, y que ese es nuestro canturreo.”
Otros Autores/ Pasehablante
Recalde, Marina
EL CUERPO HABLANTE
“Es la escritura que Lacan nos propone en el Seminario Aún: la del parlêtre
que hablando goza y que podemos expresar con la fórmula: las palabras hacen
cuerpo.” p. 8
Santiago, Jesús
El héroe en pedazos. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°18. Grama
Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2015
“En la última enseñanza de Lacan, lo imaginario se define por la creencia de que
el hablanteser posee un cuerpo, o sea, lo imaginario, es el cuerpo que cree existir.”
p. 120
“(…) el superyó que es el goce, se extrae del imperativo de que el cuerpo
pertenece al hablanteser.” p. 121
Stiglitz, Gustavo
La página en negro. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°12. Grama
Ediciones, EOL-Buenos Aires, 2012
“De esas piezas de lalengua que han llovido sobre el parlêtre, este toma aquellas
que han resonado en su goce -es decir- en su cuerpo.” p. 62
T
Tizio, Hebe
Repetición Un otro saber hacer. Freudiana N°66. Barcelona, 2012.
http://www.freudiana.com/revistas.php?idrevista=15
“En última instancia se trata de saber cómo el sujeto se acomoda al hecho de que
hay el Uno y hay el cuerpo como el Otro del significante y eso se manifiesta en
un funcionamiento que permite decir que el sujeto es lo que hace. Por eso Lacan
precisó un final de análisis pragmático, un otro saber hacer (…)” p. 130
¨El sexo y el amor en el siglo XXI ¿De qué satisfacción se trata? El
cuerpo en la experiencia del análisis. Cuerpos que hablan. Colofón
Nº33, Boletín de la Federación Internacional de Bibliotecas de la
Orientación Lacaniana. París, 2013
124
125
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
Vieira, Marcus André
En la vecindad. Revista Lacaniana de Psicoanálisis N°19. EOL. Año
X. Grama Ediciones, Buenos Aires, 2015
“¿Cómo no haber un silencio? Imposible hablar sin él. Ahora aquella (la mano
que apretaba la garganta) era hasta bienvenida, pues localizaba la incidencia,
sobre el cuerpo, de un operativo imposible, necesario a los cuerpos hablantes,
que padecen del imposible, para el lenguaje, de decir su real. La mano que
venía entonces a mostrarse, también, marcada, mordida, adquirió nombre,
mordidavida.” p. 164
126
Otros Autores/ Pasehablante
V
EL CUERPO HABLANTE
127
Il faut donc qu’un Peintre,
de quelque école qu’il soit,
avant que d’arrêter son dessin,
considère attentivement la qualité de ce qui parlent
et la nature de la chose dont il s’agit (…)
Xe Congrès de l’AMP
25 - 28 avril 2016, Rio de Janeiro
Léonard de Vinci, Traité de la peinture *
Biblioparlant est un instrument de recherche basé sur le choix de citations précises, qui pourront
aider à s’orienter dans les lectures, depuis Freud jusqu’au plus contemporain des auteurs qui
s’intéressent au corps parlant. Une bibliographie pour explorateurs, comme l’indique JacquesAlain Miller dans sa conférence d’ouverture.
Les équipes constituées dans les cinq langues les plus parlées au sein du Champ freudien ont pris
comme boussole commune de recherche le signifiant « parlêtre ».
Chacune aura a sa charge une extension de l’articulation du « parlêtre » avec d’autres signifiants
rencontrés au cours de la recherche : Corps, RSI, Sinthome, Inconscient, Escabeau, etc.
Biblioparlant
LE CORPS PARLANT
Sur l’inconscient au XXIe siècle
Les langues seront distinguées par des couleurs, extrayant de chacune la touche de réel qui lui est
propre.
Le format flipbook a été choisi pour son potentiel interactif, et pour être un support permettant
de singulariser le parcours que chacun fera avec le matériel. Des recherches par auteur, par mots,
possibilité d’envoi de la sélection par e-mail, accessible sur les Smartphones, Ipad, ou sur le site.
Une fois téléchargé, le livre parle de tous les côtés.
Jusqu’au congrès, la publication de la recherche bibliographique se fera en deux temps.
L’équipe responsable de chaque langue sera mentionnée dans sa couleur.
Nous remercions dès maintenant nos collègues ici nommés, issus de toutes les écoles de l’AMP,
pour leur disposition à faire partie de ce voyage.
Marcela Antelo
[Éditrice]
Traduction: Ligia Gorini
* [https://archive.org/texts/flipbook/flippy.php?id=traitepeinturepa00leon]
128
129
LA BIBLIOGRAPHIE LACANIENNE SUR LE CORPS PARLANT
POUR LE CONGRÈS DE L’AMP
RIO 2016
BIO
Clotilde Leguil, psychanalyste de l’Ecole de la Cause freudienne, maître de conférence au
département de psychanalyse de l’Université de Paris 8 Saint Denis, Agrégée de philosophie.
Auteur de Les Amoureuses, voyage au bout de la féminité (Seuil, 2009), Sartre avec Lacan,
corrélation antinomique, liaison dangeureuse (Navarin-Le champ freudien, 2012), L’être et le
genre, homme/femme après Lacan (PUF, 2015).
Coordonnée par Clotilde Leguil
Collaborateurs:
Patrick Almeida, Laurence Aly, Ligia Gorini, Thierry Jacquemin,
Carolina Koretzky, Inga Metrevali, Edwige Shaki
Assistants:
Andrea Aldrovandi, Melissa di Carlo,
Stein Fossgard Grontoft
Mise en page et finalisation:
Laurence Aly, Edwige Shaki, Clotilde Leguil
130
131
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
LE CORPS PARLANT
Edito 2nd. Temps
Edito 1ère Temps
Le corps n’a pas toujours été parlant chez Lacan. Pour autant, le corps a toujours été présent.
On peut même dire que Lacan a commencé par le corps. Le stade du miroir de 1949 est un
écrit sur le corps, parce que Lacan a d’abord considéré que l’image du corps était le premier
temps de l’assomption subjective. A la fin de son enseignement, à partir du Séminaire Encore,
c’est depuis le corps parlant que la parole et le langage en psychanalyse accède à une nouvelle
fonction. Il y a donc là une trajectoire lacanienne, que l’on peut essayer de suivre pas à pas.
C’est ce que notre petite équipe parisienne de dix personnes (équipe néanmoins internationale
réunissant français, argentins, brésiliens, russes, italiens) a fait. Je les remercie, chacune et
chacun, pour leur investissement dans cette collaboration qui fût l’occasion de commencer
d’explorer ensemble ce thème de « L’inconscient et le corps parlant au XXIe siècle » proposé
par Jacques-Alain Miller après « Un réel pour le XXIe siècle ».
Cette bibliographie sur les citations de Jacques Lacan autour du corps parlant s’articule autour
de trois temps logiques, permettant de repérer les moments de bascule, à partir desquels Lacan
rectifie et réinvente le statut du corps en psychanalyse. Grâce à l’enseignement de JacquesAlain Miller dans son cours de 2011 sur « L’Être et l’Un » notamment, il est possible de repérer
ces temps logiques. Au sein de ces différents temps logiques, nous avons extrait des aphorismes
qui peuvent rester en tête comme une énigme sur laquelle on revient sans cesse, des concepts
qui peuvent servir de boussole, et des petits extraits au sein desquels ces aphorismes sont
déployés.
Le premier serait « La préhistoire du corps parlant ». Avant d’être parlant, le corps lacanien
des années cinquante a été silencieux. Ce fut le corps comme point d’appui de la formation
du moi, le corps du narcissisme, puis le corps comme articulé au symbolique dans le fantasme.
Le corps présent dans le fantasme se manifeste à travers l’inertie qu’il impose au symbolique.
Le second serait celui de « L’émergence du corps parlant ». Le corps lacanien des années
soixante commence à parler une langue autre que celle du signifiant à travers l’objet a. Ce
corps est un organisme qui déconstruit l’image du corps. Il se présentifie à travers l’angoisse
mais aussi à travers la jouissance discursive.
Enfin, le dernier corps s’aborde comme un nouveau continent noir. C’est « Le mystère du
corps parlant ». Le continent noir de Freud fut la féminité. Le continent noir lacanien serait
celui du corps parlant. Ce corps-là se présentifie de façon opaque à travers la lettre comme
inscription de jouissance. Chambre d’écho du dire, le corps infléchit alors le rapport du
parlêtre au signifiant. C’est un corps qui s’envisage à partir de l’incidence de la langue sur la
chair.
Le corps parlant et les affects, pour une psychanalyse du XXIe siècle
Comment l’organisme vient-il à se prendre dans la dialectique du sujet ? Comment passe-t-on
d’une psychanalyse qui vise la vérité à une psychanalyse qui vise la jouissance ? En quel sens le
corps parlant a-t-il à voir avec le corps qui jouit des philosophes matérialistes ou le corps chair
des phénoménologues ? En quel sens s’agit-il d’un corps que seul la psychanalyse peut cerner ?
Cette seconde partie de notre bibliographie sur « Le corps parlant » se compose de trois parties.
Elle propose tout d’abord un retour à Freud.
La théorie freudienne de la libido permet de saisir la première approche du corps en
psychanalyse à partir de l’inconscient. Ce retour à Freud s’articule en deux temps : d’une part
le corps, la libido et l’inconscient (rassemblant des citations et références freudiennes jusqu’à
1920), d’autre part la compulsion de répétition et la pulsion de mort.
La seconde partie est un petit détour du côté de la philosophie. L’excursus philosophique
prend appui sur les références proposées par Jacques-Alain Miller dans sa présentation du
thème de notre congrès et propose quelques entrées d’Aristote à Merleau-Ponty, en passant
par Descartes et Diderot, pour penser le corps, son union avec l’âme ou sa pure matérialité, sa
dimension de chair et son articulation avec le rapport à l’Autre.
La troisième partie est la plus conséquente. Elle constitue aussi ce qui nous a orienté dans
l’ensemble de notre travail sur Lacan. Les aphorismes de Jacques-Alain Miller constituent
donc cette ultime partie. Nous parcourons plus de vingt ans d’enseignement du cours de
Jacques-Alain Miller afin de voir comment a émergé cette nouvelle théorie de la psychanalyse
pour le XXIe siècle. Une psychanalyse qui se fonde aborde le rapport à la parole et le langage
à partir des affects. Ce sont les traces laissées sur le corps par la rencontre avec l’Autre qui
constitue le nouveau territoire de cette psychanalyse d’avenir.
Le Congrès qui se tiendra à Rio saura en dessiner les contours.
Clotilde Leguil
Bonne lecture ! A suivre
Clotilde Leguil
132
133
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
Table des matières
1.
Le retour à Freud
I /c. Le mystère du corps parlant
136
I /a. Corps, libido, inconscient
136
I /b. Compulsion de répétition et pulsion de mort
146
I /c.1 La lettre comme inscription de jouissance dans le corps
173
173
I /c.2 L’incidence de la langue sur le corps
180
3.
2.
Jacques Lacan
I /a. Préhistoire du corps parlant
I /a.1 Le corps qui se tait
151
151
I /a.2 Le corps du fantasme
160
I /b. Émergence du corps parlant (1962 - 1970)
134
151
I /b.1 Le corps de l’objet a
164
164
I /b.2 Le corps de la jouissance discursive
169
Les aphorismes de
Jacques-Alain Miller
193
4.
Excursus philosophique
sur le corps
238
135
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le retour à Freud
I /a. Corps, libido, inconscient
Lettres à Wilhelm Flie β 1887-1904, Édition complète (1950). Paris,
PUF, 2006
« (…) dans l’âge enfantin la déliaison [décharge] sexuelle s’obtiendrait, semblet-il, à partir de très nombreux lieux du corps (…). » p. 270
Esquisse d’une psychologie (1895 [1950a]). Paris, Éditions érès, 2011
« Quand la complexité [s’accroît] à l’intérieur [de l’organisme], le système
neuronique reçoit des stimulations venant de l’élément corporel lui-même, des
stimulations endogènes qui doivent aussi être déchargées » p. 15
« L’organisme humain est d’abord incapable de mettre en œuvre l’action
spécifique. Elle se produit par aide étrangère, quand, par la décharge par voie de
changement interne, l’attention d’une personne d’expérience est attirée sur l’état
de l’enfant. » p. 57
Cinq psychanalyses (1901-1918). PUF, 2001
Dora
Le dégoût : une trace sur le corps de dora
« Le dégoût éprouvé alors n’était pas devenu chez Dora un symptôme
permanent. (…) Cette scène avait, par contre, laissé une autre trace, une
hallucination sensorielle, qui réapparaissait aussi, de temps en temps, pendant
son récit. Elle disait qu’elle ressentait encore maintenant, à la partie supérieure
du corps, la pression de cette étreinte. » p. 19
« Je pense qu’elle avait ressenti, pendant cette étreinte passionnée, non seulement
le baiser sur ses lèvres, mais encore la pression du membre érigé contre son
corps. Cette perception choquante pour elle fut supprimée dans sa mémoire,
refoulée, et remplacée par la sensation inoffensive d’une pression sur le thorax
136
Le retour à Freud
1.
LE CORPS PARLANT
(…) De là, nouveau déplacement de la partie inferieure à la partie supérieure du
corps. » p. 19
Il est remarquable qu’un ensemble de symptômes résulte d’un événement
unique
« Il est remarquable qu’ici trois symptômes – le dégoût, la sensation de pression
sur la partie supérieure du corps et l’horreur des hommes en tête à tête tendre
avec une femme – résultent d’un événement unique. » p. 19
La complaisance somatique
« Une fois l’origine psychique admise, l’on peut encore se demander si tous les
symptômes de l’hystérie sont nécessairement déterminés psychiquement. (…)
Pour autant que je puisse le voir, tout symptôme hystérique a besoin d’apport
des deux côtés. Il ne peut se produire sans une certaine complaisance somatique
qui se manifeste par un processus normal ou pathologique dans ou sur un
organe du corps. » p. 28
La toux concerne une région du corps qui a gardé à un degré très élevé le
rôle de zone érogène
« [...] une réelle irritation organique provoquant la toux..] Cette irritation est
susceptible de fixation, car elle concerne une région du corps ayant gardé à un
degré très élevé, chez la jeune fille, le rôle de zone érogène. » p. 61
Le petit Hans
L’intérêt particulièrement vif du petit Hans pour son organe phallique
« Les premières communications relatives à Hans datent du temps où il n’avait
pas encore tout à fait 3 ans. Il manifestait alors, par divers propos et questions,
un intérêt tout particulièrement vif pour cette partie de son corps qu’il était
accoutumé à désigner du nom de «fait-pipi». » p. 94-95
« Le premier trait que l’on puisse regarder en Hans comme faisant partie de sa
vie sexuelle est un intérêt tout particulièrement vif pour son «fait-pipi» (…)
Hans postule, chez tous les êtres vivants, qu’il juge semblables à lui-même, cette
importante partie du corps, il l’étudie chez les grand animaux, suppose que
ses parents en sont tous deux pourvus, et ne se laisse même pas arrêter par le
témoignage de ses yeux pour en assigner un à sa sœur qui vient de naître. »
p. 169
Le symbolisme du loumf et le fantasme de procréation
« Le plaisir de regarder une personne aimée quand elle satisfait ses besoins
naturels répond à une «intrication des pulsions», intrication dont nous avons
137
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Hans crée un fantasme nouveau : le serrurier ou le plombier a dévissé la
baignoire dans laquelle Hans se trouve et lui a alors donné un coup dans le
ventre avec son grand perçoir. (…) Nous ne pourrons comprendre que plus tard
que c’était là un fantasme de procréation, déformé par l’angoisse. La grande
baignoire, où il est assis dans l’eau, est le corps maternel. » p. 184
« [Hans] fait entrer par un trou rond dans le corps d’une poupée de caoutchouc
un petit canif appartenant à sa mère et le fait ressortir en déchirant l’entrejambe
de la poupée. Les éclaircissement donnés peu après à Hans par ses parents, en
lui enseignant que les enfants croissent, de fait, dans le corps de leur mère et
sont poussés au dehors comme un loumf viennent trop tard : ils ne peuvent
apprendre à Hans rien de nouveau. » p. 186
« [Hans] avait remarqué que sa mère avait grossi pendant les mois ayant précédé
la naissance de la petite fille, qu’elle s’était alitée, avait gémi pendant que la
naissance avait lieu et était redevenue mince quand elle s’était relevée. Il en
conclut par conséquent qu’Anna avait été dans le corps maternel et en était
sortie comme un loumf. » p. 187
Le président Schreber
Schreber veut livrer son corps vivant à la science et aux observations des
savants
« Je ne me suis pas dissimulé les scrupules qui semblent s’opposer à une
publication ; il s’agit en effet des égards dus à certaines personnes encore
vivantes. D’un autre côté, je suis d’avis qu’il pourrait être important pour la
science, et pour la reconnaissance des vérités religieuses que, de mon vivant
encore, soient rendues possibles des observations sur mon corps et sur tout
ce qui m’est arrivé, et que ces observations soient faites par des hommes
compétents . » p. 264
La destruction de certains organes du corps de Schreber
« Depuis des années, à toute heure, à toute minute, il ressentirait ces miracles
dans son propre corps ; ils lui seraient confirmés par des voix qui parleraient
avec lui. Dans les premières années de sa maladie, certains organes de son corps
auraient été détruits au point que de telles destructions auraient infailliblement
tué tout autre homme. » p. 269
138
Le retour à Freud
déjà pu observer un exemple chez Hans. Le père se prête enfin également au
symbolisme du loumf et reconnait qu’il y a une analogie entre la façon dont une
voiture sort d’une porte et celle dont les fèces sortent du corps. » p. 183
LE CORPS PARLANT
Le corps, changé en corps de femme, laissé en plan
« Je cite ici in extenso les passages significatifs des «Mémoires» : «Ainsi s’ourdit
un complot contre moi (à peu près en mars ou avril 1894), complot ayant pour
but, ma maladie nerveuse étant reconnue ou considérée comme incurable,
de me livrer à un homme de telle sorte que mon âme lui soit abandonnée,
cependant que mon corps, — grâce à une conception erronée de la tendance
précitée, tendance qui est à la base de l’ordre de l’univers, — que mon corps,
dis-je, changé en un corps de femme, soit alors livré à un homme en vue d’abus
sexuels et soit ensuite laissé en plan, c’est-à-dire, sans aucun doute, abandonné à
la putréfaction». » p. 270-271
L’individu prend d’abord son propre corps pour objet d’amour
« (…) l’individu en voie de développement rassemble en une unité ses instincts
sexuels, qui jusque-là agissaient sur le mode autoérotique, afin de conquérir un
objet d’amour, et il se prend d’abord lui-même, il prend son propre corps, pour
objet d’amour avant de passer au choix objectal d’une personne étrangère. »
p. 306
L’homme aux loups
Prototype de la castration : renonciation à une partie de son propre corps
« Les fèces constituent le premier cadeau, le premier sacrifice que consent
l’enfant à ce qu’il aime, une partie de son propre corps dont il veut bien se
priver, mais seulement en faveur d’une personne aimée. » p. 386
« L’abandon des fèces en faveur (par amour) d’une autre personne devient de son
côté un prototype de la castration ; c’est la première fois que l’enfant renonce à
une partie de son propre corps. » p. 389
« Les fèces, l’enfant, le pénis, constituent ainsi une unité, un concept inconscient
— sit venia verbo — le concept d’une petite chose pouvant être détachée du
corps. » p. 389
« Trois essais sur la théorie sexuelle » (1905 [1905d]), Œuvres
complètes - vol. VI. Paris, PUF, 2006
« Lust » : besoin et satisfaction réunis
« (…) « Lust » est malheureusement plurivoque et désigne aussi bien la sensation
du besoin que celle de la satisfaction. » p. 67
« La plus belle illustration de la théorie populaire de la pulsion sexuelle est celle
de la fable poétique de la séparation de l’être humain en deux moitiés – homme
et femme – qui aspirent à s’unir à nouveau dans l’amour. » p. 68
139
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
La pulsion sexuelle est indépendante de son objet
« La pulsion sexuelle est vraisemblablement d’abord indépendante de son
objet et sans doute n’est-ce pas non plus aux attraits de celui-ci qu’elle doit son
apparition. » p. 80
« (…) la nature de la pulsion sexuelle est éclairée par le fait qu’elle autorise une
si grande variation et une telle dépréciation de son objet (…). » p. 81
« Certains lieux du corps [les zones érogènes] (…) ont en quelque sorte la
prétention d’être considérées et traitées elles-mêmes comme des organes
génitaux. » p. 86
La pulsion sexuelle est faite de composantes
« Si elles [les perversions] permettent une analyse – une décomposition – c’est
nécessairement qu’elles sont de nature composée. Nous pouvons trouver là un
signal nous indiquant que la pulsion sexuelle n’est peut-être rien de simple, mais
qu’elle est faite de composantes (…). » p. 96
Les symptômes sont l’activité sexuelle des malades
« (…) la vie sexuelle des personnes concernées [les névrosés] se manifeste (…)
dans ces symptômes (…). Les symptômes sont (…) l’activité sexuelle des
malades. » p. 97
« (…) les symptômes constituent un substitut de tendances qui tirent leur force
de cette source qu’est la pulsion sexuelle. » p. 98
La pulsion : un concept-frontière
« Le concept de pulsion nous apparaît comme un concept-frontière entre le
psychique et le somatique. » p. 101-102
« (…) quelque chose d’inné [à tous les êtres humains] se trouve effectivement à
la base des perversions (…). » p. 105
« (…) la succion voluptueuse [le suçotement rythmiquement répété] est reliée
à une totale absorption d’attention, elle conduit (…) soi-même à une réaction
motrice dans une sorte d’orgasme. » p. 114-115
La pulsion est autoérotique
« (…) la pulsion n’est pas orientée sur d’autres personnes ; elle se satisfait sur le
corps propre, elle est autoérotique (…). » p. 116
140
Le retour à Freud
« (…) l’indépendance du choix d’objet par rapport au sexe de l’objet (…)
apparaît comme étant l’élément originel. » p. 78
LE CORPS PARLANT
« Sur le suçotement, ou succion voluptueuse, nous avons déjà noté les trois
caractères essentiels d’une manifestation sexuelle infantile. Celle-ci apparaît
par étayage sur l’une des fonctions corporelles importantes pour la vie, elle
ne connaît encore aucun objet sexuel, étant autoérotique, et son but sexuel se
trouve sous la domination d’une zone érogène. » p. 118
« Le but sexuel de la pulsion infantile consiste à provoquer la satisfaction par la
stimulation appropriée de telle zone érogène choisie d’une façon ou d’une autre.
Cette satisfaction doit avoir été vécue auparavant pour laisser derrière elle un
besoin d’être répétée (…). » p. 119
« (…) ces diverses pulsions partielles aspirent à l’acquisition de plaisir sans
connexion ni dépendance réciproques. » p. 133
« Lorsque la toute première satisfaction sexuelle était encore liée à l’ingestion de
nourriture, la pulsion sexuelle avait un objet sexuel en dehors du corps propre,
dans le sein maternel. Elle le perdit seulement plus tard (…). La pulsion sexuelle
devient alors en règle générale autoérotique (…). » p. 160
La pulsion sexuelle humaine est prédisposée aux perversions
« (…) l’idée s’imposa à nous que la prédisposition aux perversions était la
prédisposition originelle et universelle de la pulsion sexuelle humaine. »
p. 169
« Les excitations provenant de toutes ces sources [les zones érogènes] n’entraient
pas (…) en composition, mais poursuivaient chacune son but isolément, lequel
est simplement le gain d’un certain plaisir. » p. 171
« Du rabaissement généralisé de la vie amoureuse (Contributions
à la psychologie de la vie amoureuse II) » (1912 [1912d]), Œuvres
complètes - vol. XI. Paris, PUF, 2009
La pulsion sexuelle n’est pas favorable à la pleine satisfaction
« (…) on devrait tenir compte de la possibilité que quelque chose dans la nature
de la pulsion sexuelle elle-même n’est pas favorable à ce que se produise la pleine
satisfaction. » p. 139
« Pour introduire le narcissisme » (1913-1914 [1914c]), Œuvres
complètes - vol. XII. Paris, PUF, 2005
« Nous formons ainsi la représentation d’un investissement libidinal
originel du moi, dont plus tard quelque chose est cédé aux objets, mais qui,
fondamentalement, persiste (…). » p. 220
141
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Pour introduire le narcissisme » (1914). Payot, 2013
Le narcissisme : traiter son propre corps de la manière réservée d’habitude
au corps d’un objet sexuel
« Le terme de « narcissisme » est emprunté à la description clinique. Paul Näcke
l’a utilisé en 1899 pour désigner le comportement par lequel un individu traite
son propre corps d’une manière analogue à celle que l’on réserve d’habitude au
corps d’un objet sexuel : c’est-à-dire la manière dont on le contemple, le caresse,
le cajole en éprouvant un bien-être sexuel, jusqu’à parvenir, par ces méthodes,
à une satisfaction complète. Sous cette forme, le narcissisme a la signification
d’une perversion qui a capté toute la vie sexuelle de la personne. » p. 37
L’érogénéité : une qualité de tous les organes
« Si nous appelons « érogénéité » l’activité consistant, pour un emplacement du
corps, à envoyer dans la vie psychique des stimulations sexuellement excitantes
et si nous songeons au fait que les considérations de la théorie sexuelle nous ont
depuis très longtemps habitués à l’idée que certains autres emplacements du
corps – les zones érogènes – pourraient se substituer aux organes génitaux et se
comporter de manière analogue, nous n’avons qu’un seul pas supplémentaire
à risquer ici. Nous pouvons nous décider à considérer l’érogénéité comme une
qualité de tous les organes, et nous pouvons alors parler de son augmentation
ou de sa diminution en une partie déterminée du corps. Chaque transformation
de ce type de l’érogénéité dans les organes pourrait avoir pour pendant une
transformation de l’investissement de libido dans le moi. » p. 54
Nous postulons le narcissisme primaire de tout être humain
« Cela dit, nous n’avons pas conclu que les gens se dissocient en deux groupes
strictement séparés selon qu’ils ont le type de choix d’objet fondé sur l’étayage
ou le type narcissique, mais nous préférons postuler que les deux chemins vers
le choix d’objet sont ouverts à tout homme, chacun pouvant être privilégié.
Nous disons que l’humain a deux objets sexuels originels : lui-même et la femme
qui s’occupe de lui, et nous postulons ce faisant le narcissisme primaire de tout
être humain, sachant que ce trait peut éventuellement s’exprimer de manière
dominante dans son choix d’objet. » p. 61
« Remémoration, répétition et perlaboration » (1914 [1914g]),
Œuvres complètes - vol. XII. Paris, PUF, 2005
142
Le retour à Freud
« Libido et intérêt du moi ont ici le même destin et sont de nouveaux
impossibles à différencier l’un de l’autre. » p. 226
LE CORPS PARLANT
Le névrosé répète le refoulé sans savoir qu’il le répète
« (…) l’analysé ne se remémore absolument rien de ce qui est oublié et refoulé,
mais (…) il l’agit. Il ne le reproduit pas sous forme de souvenir mais sous forme
d’acte, il le répète, naturellement sans savoir qu’il le répète. » p. 190
« Pulsions et destins de pulsions » (1915 [1915c]), Œuvres complètes
- vol. XIII. Paris, PUF, 2005
La pulsion agit comme une force constante
« La pulsion (…) n’agit jamais comme une force d’impact momentanée mais
toujours comme une force constante. » p. 167
La pulsion : une mesure de l’exigence de travail imposée au psychique par
suite de sa corrélation avec le corporel
« (…) la pulsion nous apparaît comme un concept-frontière entre le psychique
et le somatique, comme représentant psychique des stimuli issus de l’intérieur
du corps et parvenant à l’âme, comme une mesure de l’exigence de travail qui est
imposée au psychique par suite de sa corrélation avec le corporel. » p. 169
« Par poussée d’une pulsion, on entend le facteur moteur de celle-ci, la somme
de force ou la mesure d’exigence de travail qu’elle représente. Le caractère
«poussant» est une propriété générale des pulsions, et même l’essence de cellesci. »
« L’objet de la pulsion est ce en quoi ou par quoi la pulsion peut atteindre
son but. Il est ce qu’il y a de plus variable dans la pulsion, il ne lui est pas
originellement connecté, au contraire il ne lui est adjoint qu’en raison de son
aptitude à rendre possible la satisfaction. Il n’est pas nécessairement un objet
étranger, mais c’est tout aussi bien une partie du corps propre. (…) Lorsque la
liaison de la pulsion à l’objet est particulièrement intime, nous la distinguons
par le terme de fixation. Elle se réalise souvent dans les périodes du tout début
du développement de la pulsion et met fin à la mobilité de celle-ci en résistant
intensément à toute dissolution. » p. 170
La source de la pulsion : un processus somatique localisé dans un organe ou
une partie du corps
« Par source de la pulsion, on entend ce processus somatique qui est localisé dans
un organe ou une partie du corps et dont l’excitation est représentée dans la vie
psychique par la pulsion. »
« Le but que chacune d’elles [les pulsions sexuelles] poursuit est l’obtention du
plaisir d’organe. » p. 173
143
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« On peut alors se représenter, plus ou moins, que l’éruption pulsionnelle
première et la plus originelle, poursuit [perpétue] son cours sans changement et
ne subisse absolument aucun développement. » p. 178
« Pulsions et destins des pulsions » (1915), Payot, 2012
Action des pulsions sur la substance vivante
« Nous pouvons donc conclure que ce sont elles, les pulsions, et non les
explications externes, qui constituent le véritable moteur des progrès qui
ont porté le système nerveux, capable de performances infinies, à son niveau
de développement actuel. Rien, bien entendu, n’interdit de supposer que
les pulsions elles-mêmes, du moins en partie, sont les précipités d’effets
d’excitations externes qui, au cours de la phylogenèse, ont agi sur la substance
vivante et l’ont transformée. » p. 65
Objet de la pulsion : objet étranger ou partie de son propre corps
« L’objet de la pulsion est ce sur quoi ou par quoi la pulsion peut atteindre
son but. C’est l’élément le plus variable dans la pulsion, il ne lui est pas lié
de manière originelle, mais lui est seulement assigné en raison de sa capacité
spécifique à permettre la satisfaction. Il ne s’agit pas nécessairement d’un objet
étranger, cela peut aussi bien être une partie de son propre corps. » p. 68
But des pulsions sexuelles : d’abord plaisir de l’organe puis reproduction
« Voilà ce que l’on peut dire des caractéristiques générales des pulsions sexuelles :
elles sont nombreuses, issues de sources organiques multiples, s’activent dans un
premier temps indépendamment les unes des autres et ne sont que tardivement
rassemblées pour une synthèse plus ou moins achevée. Le but que chacune
d’elles s’efforce d’atteindre est le plaisir de l’organe ; c’est seulement une fois la
synthèse accomplie qu’elles se mettent au service de la fonction de reproduction,
ce qui les fait alors généralement connaître en tant que pulsions sexuelles. »
p. 75
144
Le retour à Freud
« (…) la transformation de la pulsion, par renversement de l’activité en passivité
et retournement sur la personne propre, ne s’opère à vrai dire jamais sur le
montant total de la motion pulsionnelle. La direction pulsionnelle active, la plus
ancienne, subsiste, dans une certaine proportion, à côté de la plus jeune, passive,
même quand le procès de mutation de la pulsion a été très extensif. » p. 177
LE CORPS PARLANT
« Le refoulement » (1915 [1915d]), Œuvres complètes - vol. XIII.
Paris, PUF, 2005
Le refoulement originaire
« Nous sommes (…) fondés à admettre un refoulement originaire, une première
phase du refoulement, qui consiste en ceci que le représentant psychique
(représentant-représentation) de la pulsion se voit refuser la prise en charge dans
le conscient. Avec lui se produit une fixation; le représentant correspondant
subsiste, à partir de là, de façon inaltérable et la pulsion demeure liée à lui. »
p. 193
« L’inconscient » (1915 [1915e]), Œuvres complètes - vol. XIII. Paris,
PUF, 2005
« Une pulsion ne peut jamais devenir objet de la conscience, seule le peut la
représentation qui la représente. (…) Nous ne pouvons rien entendre [d’une
motion pulsionnelle refoulée] qu’une motion pulsionnelle dont le représentantreprésentation est inconscient. » p. 218
« Leçons d’introduction à la psychanalyse (Troisième partie. —
Doctrine générale des névroses) » (1916-1917), Œuvres complètes vol. XIV. Paris, PUF, 2000
« (…) la sexualité perverse n’est rien d’autre que la sexualité infantile agrandie,
décomposée en ses motions isolées. » p. 321
« (…) nous observons que le nourrisson veut répéter l’action de la prise de
nourriture sans réclamer de nouvelle nourriture ; il ne se trouve donc pas alors
sous l’impulsion de la faim. Nous disons qu’il suçote ou suçaille ; et qu’en le
faisant il s’endorme de nouveau avec une expression bienheureuse, cela nous
montre que l’action du suçotement lui a apporté en elle-même et pour elle-même
une satisfaction. » p. 323
« L’inquiétant » (1919 [1919e]), Œuvres complètes - vol. XV. Paris,
PUF, 2002
Le caractère démoniaque de la vie psychique
« Dans l’inconscient psychique se fait reconnaître la domination d’une
compulsion de répétition émanant des motions pulsionnelles, qui dépend
vraisemblablement de la nature la plus intime des pulsions elle-même, qui est
assez forte pour se placer au-dessus du principe de plaisir, qui confère à certains
côtés de la vie psychique un caractère démoniaque (…). » p. 172
145
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Au-delà du principe de plaisir » (1919-1920 [1920g]), Œuvres
complètes vol. XV. Paris, PUF, 2002
« (…) la vie de rêve de la névrose traumatique se caractérise en ceci qu’elle
ramène sans cesse le malade à la situation de son accident (…). » p.
283
« (…) la compulsion de répétition ramène aussi ces expériences vécues du passé
qui ne comportent aucune possibilité de plaisir et qui même en leur temps n’ont
pu apporter satisfaction, serait-ce pour les motions pulsionnelles depuis lors
refoulées. » p. 290-291
« Toutes ces circonstances non souhaitées et toutes ces situations affectives
douloureuses sont maintenant répétées dans le transfert par le névrosé (…). »
p. 291
« (…) cette action est malgré tout répétée ; une contrainte [compulsion] pousse
à cela. » p. 292
« (…) nous trouverons le courage d’admettre qu’il y a effectivement dans la vie
psychique une compulsion de répétition qui passe outre au principe de plaisir.
Nous serons donc à présent enclins à rapporter à cette compulsion les rêves des
névrosés du fait d’accident et l’impulsion de l’enfant au jeu. » p. 293-294
« Ces rêves [de la névrose traumatique] cherchent à procéder au rattrapage,
sous-développement d’angoisse, de la maîtrise du stimulus, dont le manque est
devenu la cause de la névrose traumatique. » p. 303
« Cette libido narcissique était naturellement aussi la manifestation de la force
des pulsions sexuelles, au sens analytique, que l’on ne put qu’identifier avec les
«pulsions d’autoconservation» admises dès le départ. Ainsi l’opposition originelle
entre pulsions du moi et pulsions sexuelles était-elle devenue inadéquate. »
p. 325
Au-delà du principe de plaisir (1920), Payot, 2013
Substance vivante et fonction du pare-excitations
« Mais nous avons plus à dire de la vésicule vivante et de sa couche réceptrice
d’excitations. Ce petit fragment de substance vivante est plongé dans un monde
extérieur chargé des énergies les plus fortes et il succomberait sous les coups
des excitations qui en proviennent s’il n’était pourvu d’un pare-excitations qu’il
146
Le retour à Freud
I /b. Compulsion de répétition et pulsion de
mort
LE CORPS PARLANT
acquiert ainsi : sa couche la plus superficielle abandonne la structure propre au
vivant, devient dans une certaine mesure anorganique e fonctionne désormais
comme une enveloppe ou membrane spéciale qui tient l’excitation à l’écart. (…)
Par son dépérissement, la couche extérieure préserve du même destin toutes
les couches plus profondes, du moins tant que des excitations ne surviennent
pas avec une telle force qu’elles font effraction dans le pare-excitations. Pour
l’organisme vivant, la fonction de pare-excitations est presque plus importante
que la réception d’excitations. » p. 77-78
Traumatisme : effraction des excitations externes dans le pare-excitations
« Nous appelons traumatiques les excitations externes assez fortes pour faire
effraction dans le pare-excitations. Je crois qu’on ne saurait comprendre le
concept de traumatisme sans le mettre ainsi en rapport avec la notion d’une
mise à l’écart, d’ordinaire efficace, des excitations. Un événement comme
le traumatisme externe provoquera à coup sûr une perturbation de grande
envergure dans le fonctionnement énergétique de l’organisme et mettra en
mouvement tous les moyens de défense. Mais ici le principe de plaisir est
tout d’abord mis hors d’action. Il n’est plus question d’empêcher l’appareil
psychique d’être submergé par de grandes sommes d’excitation ; c’est bien plutôt
une autre tâche qui apparaît : maîtriser l’excitation, lier psychiquement les
sommes d’excitation qui ont pénétré par effraction pour les amener ensuite à la
liquidation. » p. 81-82
Au-delà du principe de plaisir
« Si les rêves de la névrose d’accident ramènent si régulièrement les malades
à la situation de l’accident, ils ne sont assurément pas par là au service de
l’accomplissement de désir, même si la production hallucinatoire de celui-ci
est devenue leur fonction sous la domination du principe de plaisir. Nous
pouvons admettre que par leur caractère répétitif ils se mettent à la disposition
d’une autre tâche qui doit être accomplie avant que la domination du principe
de plaisir puisse commencer. Ces rêves ont pour but la maîtrise rétroactive de
l’excitation sous-développement d’angoisse, cette angoisse dont l’omission a été
la cause de la névrose traumatique. Ils nous ouvrent ainsi une perspective sur
une fonction de l’appareil psychique qui, sans contredire le principe de plaisir,
est pourtant indépendante de lui et semble plus originaire que la recherche du
gain de plaisir et l’évitement du déplaisir. » p. 86-87
Une définition de la pulsion
« Une pulsion serait une poussée inhérente à l’organisme vivant vers le rétablissement
147
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
La première pulsion : pulsion du retour à l’inanimé
« S’il nous est permis d’admettre comme un fait d’expérience ne souffrant pas
d’exception que tout être vivant meurt, fait retour à l’inorganique, pour des
raisons internes, alors nous ne pouvons que dire : le but de toute vie est la mort
et, en remontant en arrière, le non-vivant était là avant le vivant.
Il advint un jour que les propriétés de la vie furent suscitées dans la matière
inanimée par l’action d’une force qu’on ne peut encore absolument pas se
représenter. (…) La tension survenue dans la substance jusque-là inanimée
cherche alors à se réduire ; ainsi était donnée la première pulsion, celle du retour
à l’inanimé. » p. 100
« Psychanalyse et Théorie de la libido » (1922 [1923a]), Œuvres
complètes vol. XVI. Paris, PUF, 2010
« Il fallut élargir le concept du sexuel jusqu’à ce qu’il englobe plus que la
tendance à l’union des deux sexes dans l’acte sexuel ou à la provocation de
sensations de plaisir déterminées au niveau des organes génitaux. »
p. 193
« Les pulsions d’autoconservation étaient donc aussi de nature libidinale,
c’étaient des pulsions sexuelles qui avaient pris pour objet, au lieu des objets
extérieurs, le moi propre. (…) au lieu d’un conflit entre pulsions sexuelles et
pulsions du moi, il valait mieux parler du conflit entre libido d’objet et libido du
moi (…). » p. 206-207
« Le moi et le ça » (1922 [1923b]), Œuvres complètes vol. XVI. Paris,
PUF, 2010
Le moi est avant tout un moi corporel
« Le moi est avant tout un moi corporel, il n’est pas seulement un être de
surface, mais lui-même la projection d’une surface. » p. 270
148
Le retour à Freud
d’un état antérieur que cet être vivant a dû abandonner sous l’influence de
forces extérieures ; elle serait une sorte d’élasticité organique ou, si l’on veut,
l’expression de l’inertie dans la vie organique. » p. 96
LE CORPS PARLANT
Note en bas de page
« (…) l’Éros poursuit le but de compliquer la vie en rassemblant, de
façon toujours plus extensive, la substance vivante éclatée en particules, et
naturellement, en plus, de la maintenir. » p. 283
« Autoprésentation » (1924 [1925d]), Œuvres complètes vol. XVII.
Paris, PUF, 1992
« (…) des considérations biologiques semblaient interdire qu’on se contentât de
l’hypothèse d’une espèce unique de pulsions. » p. 104
« Inhibition, symptôme et angoisse » (1925 [1926d]), Œuvres
complètes vol. XVII. Paris, PUF, 1992
Le symptôme, substitut d’une satisfaction pulsionnelle qui n’a pas eu lieu
« Le symptôme serait indice [signe] et substitut d’une satisfaction pulsionnelle
qui n’a pas eu lieu (…). » p. 209
« Le malaise dans la culture » (1929 [1930a]), Œuvres complètes vol.
XVIII. Paris, PUF, 2002
La pulsion de mort
« (…) la pulsion de mort travaillait silencieusement, à l’intérieur de l’être vivant,
à la dissolution de celui-ci (…). » p. 305
Tout n’est pas libido dans la pulsion
« (…) à chaque manifestation pulsionnelle participe de la libido, mais en elle
tout n’est pas libido. » p. 307
« Nouvelle suite des leçons d’introduction à la psychanalyse » (1933
[1933a]), Œuvres complètes vol. XIV Paris, PUF, 2004
« La source [de la pulsion] est un état d’excitation dans le corporel, le but,
la suppression de cette excitation (…), son but interne reste, chaque fois,
la modification corporelle ressentie comme satisfaction. » p. 179
Le moi : une projection mentale de la surface du corps
« L’homme Moïse et la religion monothéiste » (1934-1938 [1939a]),
Œuvres complètes vol. XX. Paris, PUF, 2010
« C’est-à-dire : le moi est finalement dérivé de sensations corporelles,
principalement de celles qui ont leur source dans la surface du corps. Il peut
ainsi être considéré comme une projection mentale de la surface du corps (…). »
« (…) les premiers [effets du traumatisme] sont des efforts pour remettre en
œuvre le traumatisme (…). On réunit ces efforts sous le nom de fixations au
traumatisme et de compulsion de répétition. » p. 154
149
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« L’opposition entre pulsion d’autoconservation et pulsion de conservation de
l’espèce, ainsi que l’autre opposition entre amour du moi et amour d’objet, se
situent encore à l’intérieur de l’Éros. » p. 237
« (…) à proprement parler c’est tout le corps qui est une (…) zone érogène. »
p. 240
Jacques Lacan
« Abrégé de psychanalyse » (1938 [1940a]), Œuvres complètes vol.
XX. Paris, PUF, 2010
LE CORPS PARLANT
2.
Jacques Lacan
I /a. Préhistoire du corps parlant (1953 - 1961)
I /a.1 Le corps qui se tait (le corps impliqué dans la
formation du moi) (1953 - 1959)
Le Séminaire, livre I, Les écrits techniques de Freud (1953 - 2954).
Paris, Seuil, 1975
Le corps du stade du miroir
« Dans ma théorie du stade du miroir – la seule vue de la forme totale du corps
humain donne au sujet une maîtrise imaginaire de son corps, prématurée par
rapport à la maîtrise réelle. Cette formation est détachée du processus même de
la maturation et ne se confond pas avec lui. » p. 93
L’image du corps : vase imaginaire qui contient le bouquet de fleurs réel
« Et c’est bien là que l’image du corps donne au sujet la première forme qui lui
permette de situer ce qui est du moi et ce qui ne l’est pas. Eh bien, disons que
l’image du corps, si on la situe dans notre schéma, est comme le vase imaginaire
qui contient le bouquet de fleurs réel. » p. 94
Narcissisme, image réelle, corps, Umwelt
« Il y a d’abord, en effet, un narcissisme qui se rapporte à l’image corporelle.
Cette image est identique pour l’ensemble des mécanismes du sujet et donne
sa forme à son Umwelt, en tant qu’il est l’homme et non pas cheval. Elle fait
l’unité du sujet, et nous la voyons se projeter de mille manières, jusque dans ce
qu’on peut appeler la source imaginaire du symbolisme, qui est ce par quoi le
symbolisme se relie au sentiment, au Selbstgefühl, que l’être humain, le Mensch, a
de son propre corps. » p. 144
150
151
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« L’imaginaire et le réel jouent au même niveau. (…) Il s’agit justement de cela –
d’une coïncidence entre certaines images et le réel. De quoi d’autre parlons-nous
quand nous évoquons une réalité orale, anale, génitale, c’est-à-dire un certain
rapport entre nos images et les images ? Ce n’est rien d’autre que les images du
corps humain, et l’hominisation du monde, sa perception en fonction d’images
liées à la structuration du corps. » p. 161-162
Le corps, inducteur du désir
« Le sujet repère et reconnaît originellement le désir par l’intermédiaire, non
seulement de sa propre image, mais du corps de son semblable. (…) C’est pour
autant que c’est dans le corps de l’autre qu’il reconnaît son désir que l’échange
se fait. C’est pour autant que son désir est passé de l’autre côté qu’il s’assimile le
corps de l’autre et qu’il se reconnaît comme corps. » p. 169
Corps, désir morcelé, corps, idéal de soi
« Le corps comme désir morcelé se cherchant, et le corps comme idéal de
soi, se reprojettent du côté du sujet comme corps morcelé, pendant qu’il voit
l’autre comme corps parfait. Pour le sujet, un corps morcelé est une image
essentiellement démembrable de son corps. » p. 171
L’ego, surface du corps
« Quand Freud parle de l’ego, il (…) souligne que ça doit avoir le plus grand
rapport avec la surface du corps. Il ne s’agit pas de la surface sensible, sensorielle,
impressionnée, amis de cette surface en tant qu’elle est réfléchie dans une forme.
Il n’y a pas de forme qui n’ait de surface, une forme est définie par la surface
– par la différence dans l’identique, c’est-à-dire la surface. L’image de la forme
de l’autre est assumée par le sujet. C’est, située en son intérieur, cette surface
grâce à quoi s’introduit dans la psychologie humaine ce rapport à l’au-dehors de
l’au-dedans par où le sujet se sait, se connaît comme corps. (…) L’homme se sait
comme corps, alors qu’il n’y a après tout aucune raison qu’il se sache, puisqu’il
est dedans. » p. 192-193
Le corps, valeur d’aliénation, engluement de la liberté
« C’est dans une sorte d’engluement corporel de la liberté que s’exprime la
nature du désir. Nous voulons devenir pour l’autre un objet qui ait pour lui la
même valeur de limite qu’a, par rapport à sa liberté, son propre corps. »
p. 242
152
Jacques Lacan
Des images du corps humain, coïncidence entre imaginaire et réel
LE CORPS PARLANT
Parole de vérité qui s’énonce par le corps
« Nous sommes donc amenés par la découverte freudienne à écouter dans le
discours cette parole qui se manifeste à travers, ou même malgré, le sujet. Cette
parole, il nous le dit non seulement par le verbe, mais par toutes ses autres
manifestations. Par son corps même, le sujet émet une parole, qui est, comme
telle, parole de vérité, une parole qu’il ne sait pas même qu’il émet comme
signifiante. C’est qu’il en dit toujours plus qu’il ne veut en dire, toujours plus
qu’il ne sait en dire. » p. 292
Le Séminaire, livre II, Le moi dans la théorie de Freud et dans la
technique de la psychanalyse (1954 - 1955). Paris, Seuil, 1978
Corps morcelé et son unité dans l’autre
« Le corps morcelé trouve son unité dans l’image de l’autre, qui est sa propre
image anticipée – situation duelle où s’ébauche une relation polaire, main nonsymétrique. » p. 72
L’homme a un corps
« C’est très drôle (…) – l’homme a un corps. (…) Ça fait plus sens pour nous
que pour n’importe qui, parce que, avec Hegel et sans le savoir, pour autant
que tout le monde est hégélien sans le savoir, nous avons poussé extrêmement
loin l’identification de l’homme avec son savoir, qui est un savoir accumulé. Il
est tout à fait étrange d’être localisé dans un corps, et on ne saurait minimiser
cette étrangeté, malgré qu’on passe son temps à faire des battements d’ailes en
se vantant d’avoir réinventé l’unité humaine, que cet idiot de Descartes avait
découpée. » p. 93
L’image de son corps, principe de toute unité que l’homme perçoit dans les
objets
« Qu’ai-je essayé de faire comprendre avec le stade du miroir ? Que ce qu’il y
a en l’homme de dénoué, de morcelé, d’anarchique, établit son rapport à ses
perceptions sur le plan d’une tension tout à fait originale. C’est l’image de son
corps qui est le principe de toute unité qu’il perçoit dans les objets. (…) C’est
toujours autour de l’ombre errante de son propre moi que se structureront tous
les objets de son monde. » p. 198
Le rapport humain au monde a quelque chose d’inauguralement lésé
« L’objet est toujours plus ou moins structuré comme l’image du corps du
sujet. Le reflet du sujet, son image spéculaire, se retrouve toujours quelque part
153
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’image du corps humain : ce qui donne sa vibration émotionnelle au
langage humain
« Ici intervient un fait précieux que nous manifeste la cybernétique – quelque
chose n’est pas éliminable de la fonction symbolique du discours humain, et
c’est le rôle qu’y joue l’imaginaire. Les premiers symboles (…) sont issus d’un
certain nombre d’images prévalentes – l’image du corps humain, l’image d’un
certain nombre d’objets évidents (…). Et c’est ce qui donne son poids, son
ressort, et sa vibration émotionnelle, au langage humain. » p. 352
Le Séminaire, livre III, Les psychoses (1955 - 1956). Paris, Seuil, 1986
Corps propre, matériel imaginaire du discours
« Puisqu’il s’agit (…) du discours imprimé, de l’aliéné, que nous soyons dans
l’ordre symbolique est donc manifeste. (…) Quel est le matériel même de
ce discours ? (…) D’une façon générale, le matériel, c’est le corps propre. La
relation au corps propre caractérise chez l’homme le champ en fin de compte
réduit, mais vraiment irréductible, de l’imaginaire. Si quelque chose correspond
chez l’homme à la fonction imaginaire telle qu’elle opère chez l’animal, c’est tout
ce qui le rapporte d’une façon élective (…) à la forme générale de son corps où
tel point est dit zone érogène. » p. 19-20
L’ego, corps agrégé dans l’aliénation imaginaire
« (…) le moi humain, c’est l’autre, et (…) au départ le sujet est plus proche de
la forme de l’autre que du surgissement de sa propre tendance. Il est à l’origine
collection incohérente de désirs – c’est là le vrai sens de l’expression corps morcelé
– et la première synthèse de l’ego est essentiellement alter ego, elle est aliéné. Le
sujet humain désirant se constitue autour d’un centre qui est l’autre en tant qu’il
lui donne son unité. » p. 50
Disjonction du discours, corps morcelé
« Moi la truie, je viens de chez le charcutier, je suis déjà disjointe, corps morcelé,
membra disjecta, délirante, et mon monde s’en va en morceau, comme moimême. » p. 64
Jacques Lacan
dans tout tableau perceptif, et c’est lui qui lui donne une qualité, une inertie
spéciale. (…) Le rapport humain au monde a quelque chose de profondément,
initialement, inauguralement lésé. » p. 199
LE CORPS PARLANT
auquel on s’adresse au-delà de ce qu’on voit. Au milieu, il y a les objets. Et puis,
au niveau du S, il y a quelque chose qui est de la dimension de l’imaginaire, le
moi et le corps, morcelé ou pas, mais plutôt morcelé. » p. 68
Perte de la garantie de l’Autre, morcellement du corps
« Nous aurons à structurer la relation de ce qui garantit le réel dans l’autre, c’està-dire la présence et l’existence du monde stable de Dieu, avec le sujet Schreber
en tant que réalité organique, corps morcelé. Nous verrons (…) qu’une grande
partie de ses fantasmes, de ses hallucinations, de sa construction miraculeuse ou
merveilleuse, est faite d’éléments où se reconnaissent clairement toutes sortes
d’équivalences corporelles. » p. 82
Dévoilement de la dialectique du corps morcelé
« Le rapport du sujet au monde est une relation en miroir. (…) Dieu, avec
tout ce qu’il comporte (…) et Schreber lui-même d’autre part, en tant que
littéralement décomposé en une multitude d’êtres imaginaires qui poursuivent
leurs va-et-vient et transfixions diverses, sont deux structures qui se relaient
strictement. Elles développent d’une façon très attachante pour nous, ce qui
n’est jamais qu’élidé, voilé, domestiqué, dans la vie de l’homme normal – à
savoir la dialectique du corps morcelé par rapport à l’univers imaginaire. »
p. 101
Forclusion du corps primordial de signifiant
« De quoi il s’agit quand je parle de Verwerfung ? Il s’agit d’un signifiant
primordial dans des ténèbres extérieures (…). Il s’agit d’un processus
primordial d’exclusion d’un dedans primitif, qui n’est pas le dedans du
corps, mais celui d’un premier corps de signifiant. (…) C’est à l’intérieur de
ce corps primordial que Freud suppose se constituer le monde de la réalité,
comme déjà ponctué, déjà structuré en termes de signifiants. » p. 171
L’anatomie imaginaire et les symptômes hystériques
« La question du sujet que j’ai évoqué la dernière fois tournait autour du
fantasme de grossesse. (…) On sait depuis longtemps que le morcellement
anatomique, en tant que fantasmatique, est un phénomène hystérique. Cette
anatomie fantasmatique a un caractère structural (…). C’est toujours d’une
anatomie imaginaire dont il s’agit. » p. 201
La dimension imaginaire, le corps et le moi
« Il y a l’altérité de l’Autre qui correspond au S, c’est-à-dire le grand Autre, sujet
qui n’est pas connu de nous, l’Autre qui est de la nature du symbolique, l’Autre
154
155
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le corps et sa place de morceaux dans le réel
« Tout ce qui est du réel est toujours et obligatoirement à sa place, même quand
on le dérange. Le réel a pour propriété́ de porter sa place à la semelle de ses
souliers. Vous pouvez bouleverser tant que vous voudrez le réel, il n’en reste pas
moins que nos corps seront encore à leur place après l’explosion d’une bombe
atomique, à leur place de morceaux. L’absence de quelque chose dans le réel est
purement symbolique. » p. 38
L’image du corps n’est pas un objet et ne serait devenir un objet
« (…) l’image du corps n’est pas un objet. (…) non seulement l’image du corps
n’est pas un objet, mais encore (…) elle ne saurait même devenir un objet. Cette
très simple remarque, qui n’a été faite par personne si ce n’est de façon indirecte,
vous permettra de situer exactement le statut de l’image du corps à l’encontre
d’autres formations imaginaires. » p. 41
L’image du corps et son résidu
« A quelque exercice, acrobatie, contorsion, genèse fantasmatique, qu’on se soit
livré, il reste tout de même assez mystérieux qu’à certaines époques de leur vie,
des enfants, mâles ou femelles, se croient obligés d’avoir peur des lions, le lion
n’étant pas un objet rencontré d’une façon excessivement commune dans leur
expérience. Il est difficile d’en faire surgir la forme d’une donnée primitive qui
serait par exemple inscrite dans l’image du corps. On peut s’y exercer, comme on
peut tout faire, il reste néanmoins un résidu.» p. 42
Il y a dans le signifié des éléments qui sont donnés dans l’expérience comme
des accidents du corps
« Inversement, de même que la mort est là reflétée au fond du signifié, de
même le signifiant emprunte toute une série d’éléments qui sont liés à un terme
profondément engagé dans le signifié, à savoir le corps. De même qu’il y a déjà
dans la nature certains réservoirs, de même il y a dans le signifié un certain
nombre d’éléments, qui sont donnés dans l’expérience comme des accidents du
corps, mais qui sont repris dans le signifiant, et lui donnent, si l’on peut dire, ses
armes premières. Il s’agit de ces choses insaisissables et pourtant irréductibles,
parmi lesquelles le terme phallique, la pure et simple érection. » p. 51
Embrouille et image du corps
« Dans la psychogenèse courante que l’on nous fait actuellement dans l’analyse,
tout se passe à la façon d’un rêve idéaliste – chaque sujet est comme une
156
Jacques Lacan
Le Séminaire, livre IV, La relation d’objet (1956 - 1957). Paris, Seuil,
1994
LE CORPS PARLANT
araignée qui doit tirer d’elle-même tout le fil de sa toile, il est là à s’envelopper
de soie dans son cocon, et toute sa conception du monde, il doit la sortir de
lui-même et de ses images. (…) Mais c’est parce que, de l’expérience, on ne veut
retenir que les aspects qui vont dans ce sens, tandis que chaque fois que l’on
s’embrouille, on croit n’avoir affaire qu’à une difficulté de langage, alors que c’est
une manifestation de l’erreur où l’on est. La somatognosie, l’image du corps
comme signifiant, le montre bien. » p. 55
La position ambiguë de l’objet
« Je ne fais ainsi rien d’autre que de mettre en valeur ceci, qui est caractéristique
de la frustration originaire – tout objet introduit par une frustration réalisée, ne
saurait être qu’un objet que le sujet prend dans cette position ambiguë qui est
celle de l’appartenance à son propre corps. » p. 124
L’autonomie de la production imaginaire dans sa relation à l’image du corps
« C’est pourquoi Winnicott s’arrête sur ces objets qu’il appelle transitionnels.
Sans eux, nous n’aurions aucun témoignage de la façon dont l’enfant pourrait
constituer un monde au départ de ses frustrations. (…) L’objet pour autant
qu’il est engendré par la frustration, nous conduit à admettre l’autonomie de
la production imaginaire dans sa relation à l’image du corps. C’est un objet
ambigu, qui est entre les deux, à propos duquel on ne peut parler ni de réalité,
ni d’irréalité. » p. 126-127
La libido conservatrice du corps propre est libido au sens propre, libido
sexuelle
« C’est ainsi que l’oralité devient ce qu’elle est. Etant un mode instinctuel de la
faim, elle est porteuse d’une libido conservatrice du corps propre, mais elle n’est
pas que cela. Freud s’interroge sur l’identité de cette libido – est-ce la libido de la
conservation ou la libido sexuelle ? (…) Elle est libido au sens propre, et libido
sexuelle. » p. 184
Le Séminaire, livre V, Les formations de l’inconscient (1957 - 1958).
Paris, Seuil, 1998
L’image du corps se conquiert comme quelque chose qui à la fois existe et
n’existe pas
« C’est toute la valeur de l’activité jubilatoire de l’enfant devant son miroir.
L’image du corps se conquiert comme quelque chose qui à la fois existe et
n’existe pas, et par rapport à quoi il repère ses propres mouvements comme aussi
bien l’image de ceux qui l’accompagnent devant ce miroir. » p. 225
157
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« D’une façon générale, le sujet peut dans une certaine phase faire en effet un
mouvement d’approche de l’identification de son moi avec le phallus. C’est
pour autant qu’il est porté dans l’autre direction qu’il constitue et structure un
certain rapport, marqué par les points-termes qui sont là sur l’axe de la réalité,
en i-M, avec l’image du corps propre, c’est-à-dire l’imaginaire pur et simple, à
savoir la mère. » p. 227
L’invasion de l’image du corps dans le monde des objets dans les délires
schreberiens
« L’invasion de l’image du corps dans le monde des objets est manifeste dans
les délires de type schreberien, tandis qu’inversement tous les phénomènes
de signifiant sont rassemblés autour du moi, au point que le sujet n’est plus
supporté en tant que moi que par une trame continue d’hallucinations verbales
qui constitue un repli vers une position initiale de la genèse de son monde ou
de la réalité. » p. 228
« L’accès du sujet au caractère radicalement à double sens du signifiant, est
facilité par ceci (…) à savoir le rapport de l’image du corps propre avec le moi
du sujet. » p. 247
Mélanie Klein : sur le corps maternel
« À le négliger tout en l’approchant, à pénétrer aussi près que possible de ce qui
se passe chez l’enfant, Mélanie Klein a découvert beaucoup de choses. Mais à le
formuler simplement dans la confrontation de l’enfant au personnage maternel,
elle aboutit à une relation spéculaire, en miroir. De ce fait, le corps - et il est
déjà très frappant que le corps soit au premier plan - le corps maternel devient
l’enceinte et l’habitacle de tout ce qui peut s’y localiser, par projection, des
pulsions de l’enfant, ces pulsions étant elles-mêmes motivées par l’agression due
à une déception fondamentale. » p. 271-272
Moi idéal et Idéal du moi
« (…) ce qui est menacé quand nous faisons allusion aux craintes d’atteintes
narcissiques au corps propre, ce qui est atteint quand nous parlons de la
nécessité de réassurance narcissique, nous pouvons le mettre au registre du moi
idéal. L’Idéal du moi, quant à lui, intervient dans des fonctions qui sont souvent
dépressives, voire agressives à l’égard du sujet. » p. 288-289
158
Jacques Lacan
L’image du corps propre c’est-à-dire l’imaginaire pur et simple, à savoir la
mère
LE CORPS PARLANT
Incidence du fait que la mère est un être parlant sur la constitution du sujet
« Le phallus est ce signifiant particulier qui, dans le corps des signifiants, est
spécialisé à désigner l’ensemble des effets du signifiant, comme tels, sur le
signifié. (…) Il occupe ici une place privilégiée dans ce qui va se produire de
signifiant dans l’au-delà du désir, c’est à savoir tout le champ qui se situe au-delà
du champ de la demande. (…) Dans l’en-deçà, qui est le champ de la demande,
le pur et simple Autre fait toute la loi de la constitution du sujet, ne serait-ce que
pris simplement au niveau de l’existence de son corps, par le fait que la mère est
un être parlant. » p. 393
La perversion fétichiste du sujet masculin
« La perversion fétichiste du sujet masculin consiste à affirmer que la femme l’a
sur le fond de ce qu’elle ne l’a pas. Sans cela il n’y aurait pas besoin d’un objet
pour le représenter - un objet qui, par-dessus le marché, est manifestement
indépendant du corps de la femme. » p. 453
Sur l’auto-érotisme masturbatoire
« On n’insistera jamais assez sur l’énigme que comporte le complexe de
castration ou le Penisneid, pour autant qu’est ici concerné quelque chose qui tout
de même tient bel et bien au corps, et qu’après tout rien ne menace plus que
n’est menacé n’importe quel membre, ou bras, ou jambe, voir nez ou oreilles.
Cet élément n’est sur le corps propre qu’un point de volupté, et c’est ainsi que le
sujet le découvre d’abord. L’auto-érotisme masturbatoire, qui joue en effet dans
l’histoire du sujet un si grand rôle, n’est pas du tout de nature à déclencher en
lui-même de telles catastrophes, comme nous le savons par l’expérience, tant que
l’organe n’est pas pris dans le jeu signifiant, dans la métaphore paternelle, dans
l’interdiction maternelle ou paternelle. Cet organe n’est rien d’autre à l’origine
pour le sujet qu’un point de volupté de son propre corps, de son rapport
organique à lui-même. » p. 482-483
« Fonction et champ de la parole et du langage » (1953), Écrits.
Paris, Seuil, 1966
Langage, corps subtil
« La parole en effet est un don de langage, et le langage n’est pas immatériel.
Il est corps subtil, mais il est corps. Les mots sont pris dans toutes les images
corporelles qui captivent le sujet ; ils peuvent engrosser l’hystérique, s’identifier
à l’objet du penis-neid, représenter le flot d’urine de l’ambition urétrale, ou
l’excrément retenu de la jouissance avaricieuse. » p. 301
159
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le Séminaire, livre VI, Le désir et son interprétation (1958 - 1959).
Paris, Seuil, 2014
Le sujet, barré, trouve son support dans l’autre et cet autre est l’image du
corps propre
« Le sujet en tant qu’il est barré, annulé, aboli, par l’action du signifiant, trouve
son support dans l’autre, qui est ce qui, pour le sujet qui parle, définit l’objet
comme tel. Cet autre, objet prévalent de l’érotisme humain, nous essayerons de
l’identifier. (…) Cet autre est l’image du corps propre, au sens large que nous lui
donnerons. En l’occasion, c’est là, dans ce fantasme humain, qui est fantasme du
sujet, et qui n’est plus qu’une ombre, c’est là que le sujet maintient son existence,
maintient le voile qui fait qu’il peut continuer d’être un sujet qui parle. »
p. 119
Impasse du rapport du sujet à l’objet
« Pour autant que, comme désir, c’est-à-dire dans la plénitude d’un destin
humain qui est celui d’un sujet parlant, il approche cet objet, le sujet se trouve
pris dans une sorte d’impasse. Cet objet, comme objet, il ne saurait l’atteindre
qu’à se trouver lui-même, comme sujet de la parole, effacé dans cette élision qui
le laisse dans la nuit du traumatisme, dans ce qui est, à proprement parler, audelà de l’angoisse même. Ou alors, il se trouve devoir prendre la place de l’objet,
se substituer à lui, se subsumer sous un certain signifiant. Lequel ? (…) c’est le
phallus. » p. 146
Le Séminaire, Livre VII, L’éthique de la psychanalyse (1959 - 1960).
Paris, Seuil, 1986
L’interdit de la représentation
« Il n’en reste pas moins que le deuxième commandement, celui qui exclut
formellement non seulement tout culte, mais toute image, toute représentation
de ce qui est dans le ciel, sur la terre et dans l’abîme, me semble montrer que ce
dont il s’agit est dans un rapport tout à fait particulier avec l’affection humaine
dans son ensemble. Pour tout dire, l’élimination de la fonction imaginaire s’offre
à mes yeux, et, je le pense, aux vôtres aussi, comme le principe de la relation au
symbolique, au sens où nous l’entendons ici, c’est-à-dire, pour tout dire, à la
parole. » p. 98
160
Jacques Lacan
I /a.2 Le corps du fantasme (sujet du signifiant
complété d’un élément corporel)(1958-1961)
LE CORPS PARLANT
Le phallus remis définitivement à sa place
« Il n’y a plus, d’aucune façon, à rechercher le phallus, ni l’anneau anal, sous la
voûte étoilée - ils en sont définitivement expulsés. (…) Il y a eu longtemps une
âme du monde, et la pensée a pu se bercer de quelque rapport profond de nos
images avec le monde qui nous entoure. C’est un point dont on n’a pas l’air
d’apercevoir l’importance, que l’investigation freudienne a fait rentrer en nous
tout le monde, l’a remis définitivement à sa place, à savoir dans notre corps, et
pas ailleurs. » p. 111
La sublimation élève un objet à la dignité de la Chose
« Nous avons pour nous guider la théorie freudienne des fondements
narcissiques de l’objet, de son insertion dans le registre imaginaire. L’objet –
pour autant qu’il spécifie les directions, les points d’attrait de l’homme dans son
ouvert, dans son monde, (…), - précisément, n’est pas la Chose, pour autant
qu’elle est au cœur de l’économie libidinale. Et la formule la plus générale que je
vous donne de la sublimation est celle-ci – elle élève un objet (…) à la dignité de
la Chose. » p. 133
Sade : le corps morcelé et indestructible de la victime
« Quand on avance dans la direction de ce vide central, en tant que c’est jusqu’à
présent sous cette forme que se présente à nous l’accès à la jouissance, le corps du
prochain se morcelle. Doctrinant la loi de la jouissance comme pouvant fonder
je ne sais quel système de société idéalement utopique, Sade s’exprime ainsi Prêtez-moi la partie de votre corps qui peut me satisfaire un instant, et jouissez,
si cela vous plaît, de celle du mien qui peut vous être agréable. » p. 237
« Le second terme que Sade nous enseigne, c’est de ce qui apparaît dans le
fantasme comme le caractère indestructible de l’Autre, pour autant qu’il surgit
dans la figure de la victime. » p. 238
La beauté d’Antigone
« Antigone nous fait voir en effet le point de visée qui définit le désir. Cette visée
va vers une image qui détient je ne sais quel mystère jusqu’ici inarticulable. (…)
Qu’est-ce qui fait le pouvoir dissipant de cette image centrale, par rapport à
toutes les autres, qui semblent tout d’un coup se rabattre sur elle, et s’évanouir?
Cela tient à la beauté d’Antigone (…) et à la place qu’elle occupe, dans l’entredeux de deux champs symboliquement différenciés. C’est sans doute de cette
place qu’elle tire son éclat - cet éclat que tous ceux qui ont parlé dignement de la
beauté n’ont jamais pu éliminer de leur définition. » p. 290
161
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Encore au temps de Kant, ce qui nous est présenté comme la limite des
possibilités du beau, comme l’idéale Erscheinen, c’est la forme du corps humain.
Elle a été, parce qu’elle ne l’est plus, forme divine. Elle est l’enveloppe de tous
les fantasmes possibles du désir humain. Les fleurs du désir sont contenues
dans ce vase dont nous essayons de fixer les parois. C’est ce qui amène à poser
la forme du corps, et très précisément l’image, telle que je l’ai articulée ici dans
la fonction du narcissisme, comme ce qui représente, dans un certain rapport,
le rapport de l’homme à sa seconde mort, le signifiant de son désir, son désir
visible. » p. 345
La livre de chair
« Manger le livre, c’est bien là où nous touchons du doigt ce que veut dire Freud
quand il parle de la sublimation comme d’un changement non d’objet, mais
de but. La faim dont il s’agit, la faim sublimée, tombe dans l’intervalle entre
les deux, parce que ce n’est pas le livre qui nous remplit l’estomac. Quand j’ai
mangé le livre, je ne suis pas pour autant devenu livre, pas plus que le livre n’est
devenu chair. Le livre me devient si je puis dire. Mais pour que cette opération
puisse se produire, il faut bien que je paie quelque chose. (…) Ce quelque chose
s’appelle la jouissance. Cette opération mystique, je la paie avec une livre de
chair. » p. 371
Le Séminaire, Livre VIII, Le transfert (1960 - 1961). Paris, Seuil,
2001
La psychanalyse, science des érotiques du corps
« Eryximaque nous dit, traduction textuelle, que la médecine est la science des
érotiques du corps. On ne peut, me semble-t-il, donner meilleure définition de
la psychanalyse. » p. 91
L’individualité, le corps et le sujet du désir
« L’équivoque du terme d’individualité, ce n’est pas que nous soyons quelque
chose d’unique comme ce corps qui est celui-là, et pas un autre. L’individualité
consiste toute entière dans le rapport privilégié où nous culminons comme sujet
dans le désir. » p. 207
Se nourrir du corps de l’Autre
« Ce n’est pas seulement du pain du bon vouloir de l’Autre que le sujet primitif a
à se nourrir, mais bel et bien du corps de celui qui le nourrit. Car il faut appeler
les choses par leur nom - la relation sexuelle, c’est cela par quoi la relation à
162
Jacques Lacan
Le beau, l’image du corps et le signifiant du désir
LE CORPS PARLANT
l’Autre débouche dans une union des corps. Et l’union la plus radicale est celle
de l’absorption originelle, où pointe, visé, l’horizon du cannibalisme. »
p. 243
Le non de Sygne de Coûfontaine : psychosomatique et marque du signifiant
« L’homme est devenu l’Otage du Verbe parce qu’il s’est dit, ou aussi bien pour
qu’il se soit dit, que Dieu est mort. A ce moment s’ouvre cette béance, où rien
d’autre ne peut être articulé que ce qui n’est que le commencement même du
ne fus-je, qui ne saurait être qu’un refus, un non, un ne, ce tic, cette grimace,
bref, ce fléchissement du corps, cette psychosomatique, qui est le terme où nous
avons à rencontrer la marque du signifiant. » p. 359-360
Le phallus, un blanc sur l’image du corps
« Tout objet n’est pas à définir, purement et simplement, comme un objet
partiel, loin de là, mais le caractère central de la relation du corps propre au
phallus conditionne après coup, nachträglich, le rapport aux objets les plus
primitifs. Leur accent d’objet séparable, possible-à-perdre, leur mise en fonction
d’objet perdu, tous ces traits ne s’étaleraient pas de la même façon s’il n’y avait
au centre l’émergence de l’objet phallique, comme un blanc sur l‘image du
corps. » p. 449
« Subversion du sujet et dialectique du sujet » (1960), Écrits. Paris,
Seuil, 1966
De l’inanimé qui affecte tout corps vivant
« Reconnaissez dans la métaphore du retour à l’inanimé dont Freud affecte
tout corps vivant, cette marge au-delà de la vie que le langage assure à l’être du
fait qu’il parle, et qui est juste celle où cet être engage en position de signifiant,
non seulement ce qui s’y prête de son corps d’être échangeable, mais ce corps
lui-même. Où apparaît donc que la relation de l’objet au corps ne se définit
nullement comme d’une identification partielle qui aurait à s’y totaliser, puisque
au contraire cet objet est le prototype de la signifiance du corps comme enjeu de
l’être. » p. 803
De l’avatar de l’image narcissique
« Quoiqu’il en soit, ce que le sujet trouve en cette image altérée de son corps,
c’est le paradigme de toutes les formes de la ressemblance qui vont porter sur
le monde des objets une teinte d’hostilité en y projetant l’avatar de l’image
narcissique, qui, de l’effet jubilatoire de sa rencontre au miroir, devient dans
l’affrontement au semblable le déversoir de la plus intime agressivité. »
p. 809
163
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
I /b.1 Le corps de l’objet a (l’organisme dont les
limites vont au-delà du corps) (1962 - 1967)
Le Séminaire, Livre X, L’angoisse (1962 - 1963). Paris, Seuil, 2004
Le phallus est coupé de l’image spéculaire
« L’investissement de l’image spéculaire est un temps fondamental de la relation
imaginaire. Il est fondamental en ceci qu’il a une limite. Tout l’investissement
libidinal ne passe pas par l’image spéculaire. Il y a un reste. (…) Dans toute
la mesure où se réalise ici, en i(a), ce que j’ai appelé l’image réelle, image du
corps fonctionnant dans le matériel du sujet comme proprement imaginaire,
c’est-à-dire libidinalisée, le phallus apparaît en moins, comme un blanc. Malgré
que le phallus soit sans doute une réserve opératoire, non seulement il n’est
pas représenté au niveau de l’imaginaire, mais il est cerné, et, pour dire le mot,
coupé de l’image spéculaire. » p. 50-51
(-φ) « J’ai mis la dernière fois, et entre parenthèses, le signe (- φ). Il vous indique
qu’ici se profile un rapport avec la réserve libidinale, soit avec ce quelque chose
qui ne se projette pas, ne s’investit pas au niveau de l’image spéculaire, qui
y est irréductible, pour la raison qu’il reste profondément investi au niveau
du corps propre, du narcissisme primaire, de ce qu’on appelle auto-érotisme,
d’une jouissance autiste. C’est en somme un aliment qui reste là pour animer
éventuellement ce qui interviendra comme instrument dans le rapport à l’autre,
l’autre constitué à partir de l’image de mon semblable, l’autre qui profilera sa
forme et ses normes, l’image du corps dans sa fonction séductrice, sur celui
qui est le partenaire sexuel. Ce qui, vous ai-je dit la dernière fois, peut venir
se signaler à la place ici désignée par le (- φ), c’est l’angoisse, l’angoisse de
castration, dans son rapport à l’Autre. » p. 57
Le reste car il vient occuper la place prévue pour le manque, devient dès lors
irrepérable
« N’est-ce pas une réponse, non seulement raisonnable, mais contrôlable, que
de dire que c’est ce reste, ce résidu non imaginé du corps, qui vient, par quelque
détour que nous savons désigner, se manifester à la place prévue pour le manque,
et d’une façon qui, pour n’être pas spéculaire, devient dès lors irrepérable ? C’est
en effet une dimension de l’angoisse que le défaut de certains repères. » p. 74
164
Jacques Lacan
I /b. Émergence du corps parlant (1962 - 1970)
LE CORPS PARLANT
L’image spéculaire et son double
« Si cette image spéculaire que nous avons en face de nous, qui est notre
stature, notre visage, notre paire d’yeux, laisse surgir la dimension de notre
propre regard, la valeur de l’image commence de changer — surtout s’il y a un
moment où ce regard qui apparaît dans le miroir commence à ne plus nous
regarder nous-mêmes. Initium, aura, aurore d’un sentiment d’étrangeté qui est
la porte ouverte sur l’angoisse. Ce passage de l’image spéculaire à ce double qui
m’échappe, voilà le point où quelque chose se passe dont l’articulation que nous
donnons à la fonction du a nous permet de montrer la généralité, la présence
dans tout le champ phénoménal. » p. 104
L’objet a, réserve dernière irréductible de la libido
« Qu’est-ce que l’objet a, au niveau de ce qui subsiste comme corps, et qui nous
dérobe en partie, si je puis dire, sa propre volonté ? Cet objet a, c’est ce roc dont
parle Freud, la réserve dernière irréductible de la libido (…) » p. 127
Ce n’est pas du monde extérieur qu’on manque, c’est de soi-même
« Avant le stade du miroir, ce qui sera i(a) est dans le désordre des petits a dont
il n’est pas encore question de les avoir ou pas. C’est le vrai sens, le sens le plus
profond à donner au terme d’auto-érotisme, on manque de soi, si je puis dire,
du tout au tout. Ce n’est pas du monde extérieur qu’on manque, comme on
l’exprime improprement, c’est de soi-même. Ici s’inscrit la possibilité de ce
fantasme du corps morcelé que certains d’entre vous ont rencontré chez les
schizophrènes. » p. 139-140
La façon la plus certaine d’approcher ce quelque chose de perdu, c’est de le
concevoir comme un morceau de corps
« Le manque est radical, radical à la constitution même de la subjectivité telle
qu’elle nous apparaît par la voie de l’expérience analytique. J’aimerais l’énoncer
en cette formule — dès que ça se sait, que quelque chose vient au savoir, il y
a quelque chose de perdu, et la façon la plus certaine d’approcher ce quelque
chose de perdu, c’est de le concevoir comme un morceau de corps. (…) D’où il
résulte, autre vérité, que tout le tourment de notre expérience tient à ceci, que
le rapport à l’Autre, où se situe toute possibilité de symbolisation et de lieu du
discours, rejoint un vice de structure. » p. 158-159
La circoncision : séparation et aliénation
« Je vous ai laissés sur un propos qui mettait en question la fonction de la
circoncision dans l’économie du désir, celle de l’objet au sens où l’analyse
le fonde comme objet du désir. La chute de cette leçon fut sur un passage
165
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’objet perdu est corps
« Objet perdu aux différents niveaux de l’expérience corporelle où se produit sa
coupure, c’est lui qui est le support, le substrat authentique, de toute fonction
de la cause. Cette part corporelle de nous-mêmes est, essentiellement et par
fonction, partielle. Il convient de rappeler qu’elle est corps et que nous sommes
objectaux, ce qui veut dire que nous ne sommes objets du désir que comme
corps. Point essentiel à rappeler, puisque c’est l’un des champs créateurs de la
dénégation que de faire appel à quelque chose d’autre, à quelque substitut. »
p. 249-50
Il y a dans le corps, du fait de l’engagement dans la dialectique signifiante,
quelque chose de sacrifié et d’inerte : la livre de chair
« Il ne s’agit pas du corps en tant qu’il nous permettrait de tout expliquer par
une sorte d’ébauche de l’harmonie de l’Umwelt et de l’Innenwelt, c’est qu’il y a
toujours dans le corps, du fait de cet engagement dans la dialectique signifiante,
quelque chose de séparé, quelque chose de sacrifié, quelque chose d’inerte, qui
est la livre de chair. » p. 254
L’homme aux loups
« Dans la révélation de ce qui apparaît à l’homme aux loups par la béance et le
cadre - préfigurant ce dont j’ai fait une fonction - de la fenêtre ouverte, et qui
est identifiable en sa forme à la fonction du fantasme sous son mode le plus
angoissant, où est l’essentiel ? (…) Il est là dans la réflexion même de l’image,
qu’il supporte d’une catatonie qui n’est point autre chose que celle même du
sujet, l’enfant médusé par ce qu’il voit, paralysé par cette fascination au point
que l’on peut concevoir que ce qui, dans la scène, le regarde, et qui est invisible
d’être partout, n’est rien d’autre que la transposition de l’état d’arrêt de son
propre corps, ici transformé en cet arbre, l’arbre couvert de loups, dirions-nous,
pour faire écho à un titre célèbre. (…) Cette jouissance (…) est là présentifiée
sous cette forme érigée. Le sujet n’est plus qu’érection dans cette prise qui le fait
phallus, le fige tout entier, l’arborifie. » p. 301-302
166
Jacques Lacan
de Jérémie, paragraphes 24 et 25 du chapitre IX, qui a fait au cours des
âges quelques difficultés aux traducteurs car le texte hébreu se traduirait- Je
châtierai tout circoncis dans son prépuce. (…) Ce dont il s’agit n’est point, loin
de là, localisé à ce petit bout de chair qui fait l’objet du rite. (…) la séparation
essentielle avec une certaine partie du corps, un certain appendice, devient
symbolique d’une relation fondamentale au corps propre pour le sujet désormais
aliéné. » p. 247
LE CORPS PARLANT
La photographie : possibilité de détacher du corps, l’image
« Ajoutons-y simplement ce qui connote (…) la possibilité de détacher du corps
l’image, je dis son image spéculaire, l’image du corps, et de la réduire à l’état
cessible, sous forme de photographies, ou même de dessins - à savoir le heurt,
la répugnance, voire l’horreur que provoque dans la sensibilité le surgissement
tout soudain de cet objet, et sous une forme à la fois indéfiniment multipliable
et possible à répandre partout - avec le refus de laisser prendre cette image, dont
Dieu sait, c’est le cas de le dire, où elle pourra aller ensuite. » p. 364-365
Le Séminaire, Livre XI, Les quatre concepts fondamentaux de la
psychanalyse (1963 - 1964). Paris, Seuil, 1973
L’intégration de la sexualité à la dialectique du désir
« L’intégration de la sexualité à la dialectique du désir passe par la mise en jeu
de ce qui, dans le corps, méritera que nous le désignions par le terme d’appareil
- si vous voulez bien entendre par là ce dont le corps, au regard de la sexualité,
peut s’appareiller, à distinguer de ce dont les corps peuvent s’apparier. Si tout est
embrouillis dans la discussion des pulsions sexuelles c’est qu’on ne voit pas que
la pulsion sans doute représente, mais ne fait que représenter, et partiellement, la
courbe de l’accomplissement de la sexualité chez le vivant. Comment s’étonner
que son dernier terme soit la mort? Puisque la présence du sexe chez le vivant est
liée à la mort. » p. 161
La lamelle
« Cette lamelle, cet organe, qui a pour caractéristique de ne pas exister, mais
qui n’en est pas moins un organe, c’est la libido. C’est la libido, en tant que
pur instinct de vie immortelle, de vie irrépressible, de vie qui n’a besoin, elle,
d’aucun organe, de vie simplifiée et indestructible. C’est ce qui est justement
soustrait à l’être vivant de ce qu’il est soumis au cycle de la reproduction sexuée.
Et c’est de cela que sont les représentants, les équivalents, toutes les formes que
l’on peut énumérer de l’objet a. » p. 180
Les zones érogènes sont liées à l’inconscient car c’est là que s’y noue la
présence du vivant
« Le rapport à l’Autre est justement ce qui, pour nous, fait surgir ce que
représente la lamelle - non pas la polarité sexuée, le rapport du masculin au
féminin, mais le rapport du sujet vivant à ce qu’il perd de devoir passer, pour sa
reproduction, par le cycle sexuel. (…) La lamelle a un bord, elle vient s’insérer
sur la zone érogène, c’est-à-dire sur l’un des orifices du corps, en tant que ces
167
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’Autre, champ du vivant où le sujet a à apparaître
« L’Autre est le lieu où se situe la chaîne du signifiant qui commande tout ce
qui va pouvoir se présentifier du sujet, c’est le champ de ce vivant où le sujet a à
apparaître. Et j’ai dit - c’est du côté de ce vivant, appelé à la subjectivité, que se
manifeste essentiellement la pulsion. » p. 185
Ce que le vivant perd à se reproduire par la voie sexuée
« Deux manques ici se recouvrent. L’un ressortit au défaut central autour de quoi
tourne la dialectique de l’avènement du sujet à son propre être dans la relation
à l’Autre (…). Ce manque vient à reprendre l’autre manque qui est le manque
réel, antérieur, à situer à l’avènement du vivant, c’est-à-dire à la reproduction
sexuée. Le manque réel, c’est ce que le vivant perd, de sa part de vivant, à se
reproduire par la voie sexuée. Ce manque est réel parce qu’il se rapporte à
quelque chose de réel, qui est ceci que le vivant, d’être sujet au sexe, est tombé
sous le coup de la mort individuelle. » p. 186
Le sujet, un vivant sexué
« L’expérience analytique substitue la recherche par le sujet, non du complément
sexuel, mais de la part à jamais perdue de lui-même, qui est constituée du fait
qu’il n’est qu’un vivant sexué, et qu’il n’est plus immortel. (…) la pulsion, la
pulsion partielle, est foncièrement pulsion de mort, et représente en elle-même
la part de la mort dans le vivant sexué. » p. 187
« La logique du fantasme » (1967), Autres écrits. Paris, Seuil, 2001
Le sujet s’imagine maître de son être
« La psychanalyse postule que l’inconscient où le « je ne suis pas » du sujet a sa
substance, est invocable du « je ne pense pas » en tant qu’il s’imagine maître de
son être, c’est-à-dire ne pas être langage. » p. 324
Le corps, lieu de l’Autre
« Avec cette référence à la jouissance s’ouvre l’ontique seule avouable pour
nous. Mais ce n’est pas rien qu’elle ne s’aborde même en pratique que par les
ravinements qui s’y tracent du lieu de l’Autre. Où nous avons pour la première
fois appuyé que ce lieu de l’Autre n’est pas à prendre ailleurs que dans le corps,
168
Jacques Lacan
orifices sont liés à l’ouverture-fermeture de la béance de l’inconscient. Les zones
érogènes sont liées à l’inconscient, parce que c’est là que s’y noue la présence du
vivant. » p. 181-182
LE CORPS PARLANT
qu’il n’est pas intersubjectivité, mais cicatrices sur le corps tégumentaires,
pédoncules à se brancher sur ses orifices pour y faire office de prises, artifices
ancestraux et techniques qui le rongent. » p. 327
I /b.2 Le corps de la jouissance discursive (1968 1970)
Le Séminaire, Livre XVI, D’un Autre à l’autre (1968-69). Paris, Seuil,
2006
L’image spéculaire du corps est le support de la métaphore
« C’est une occasion pour rappeler que le recours à l’image pour expliquer la
métaphore est toujours faux. Toute domination de la métaphore par l’image doit
être suspecte, car le support en est toujours l’image spéculaire du corps. Cette
image est en défaut, défaut très simple à illustrer, encore que ce ne soit qu’une
illustration, en disant tout simplement que l’image anthropomorphe, masque la
fonction des orifices. » p. 94
La jouissance est essentiellement rapport au corps
« Depuis que je l’ai introduite dans notre maniement, j’ai essayé d’indiquer que
la fonction de la jouissance est essentiellement rapport au corps, mais ce rapport
n’est pas n’importe lequel. Il se fonde sur une exclusion qui est en même temps
une inclusion. D’où notre effort vers une topologie qui corrige les énoncés
jusqu’ici reçus dans la psychanalyse. » p. 114
L’effet de la blessure entre le corps et sa jouissance
« Ce dont il s’agit, la blessure, se tient ailleurs, dans un effet qu’au départ, pour le
rappeler, j’ai distingué de l’Imaginaire comme Symbolique; il est dans la béance
qui se produit ou qui s’aggrave, car nous ne pouvons sonder ce qui de cette
béance était déjà là dans l’organisme, de la béance entre le corps et sa jouissance,
pour autant que donc, ai-je dit, ce qui la détermine ou qui l’aggrave, et seule
nous importe cette aggravation, c’est l’incidence du signifiant, l’incidence même
de la marque, l’incidence de ce que j’ai appelé tout à l’heure le trait unaire, qui
lui donne donc sa consistance. » p. 127
La jouissance, c’est le réel
« La jouissance, c’est ce qui ne s’aperçoit qu’à en voir la constance dans les
énoncés de Freud. Mais c’est aussi ce qui s’aperçoit à l’expérience, j’entends
psychanalytique. La jouissance est ici un absolu, c’est le réel, et tel que je l’ai
défini comme ce qui revient toujours à la même place. » p. 212
169
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« J’y articule que la dialectique même du plaisir , à savoir ce qu’elle comporte
d’un niveau de stimulation à la fois recherché et évité, d’une juste limite, d’un
seuil, implique la centralité d’une zone, disons, interdite, parce que le plaisir y
serait trop intense. Cette centralité, c’est là ce que je désigne comme le champ
de la jouissance, la jouissance elle-même se définissant comme étant tout ce qui
relève de la distribution du plaisir dans le corps. » p. 224
Le corps séparé de la jouissance
« Aussi bien, à propos du rêve célèbre Il ne savait pas qu’il était mort, ai-je dès
longtemps marqué à la ligne supérieure de mon graphe il ne savait pas comme
la mise en question de l’énonciation comme telle du sujet divisé à l’origine.
(…) Nous trouvons là tout de suite les thèmes fondamentaux sur lesquels j’ai
insisté. Si le désir de l’Autre est tel qu’il soit fermé, c’est qu’il s’exprime en ceci,
caractéristique de la scène traumatique, que le corps y est aperçu comme séparé
de la jouissance. La fonction de l’Autre ici s’incarne. Elle est ce corps en tant que
perçu comme séparé de la jouissance. » p. 274
Le corps de l’obsessionnel est purifié de la jouissance
« Le corps, le corps idéalisé et purifié de la jouissance, réclame du sacrifice de
corps. C’est là un point très important pour comprendre ce que je vous ai
annoncé la dernière fois et que je ne dois faire que télescoper, c’est à savoir la
structure de l’obsessionnel. » p. 372
Le Séminaire, Livre XVII, L’envers de la psychanalyse (1969 - 1970).
Paris, Seuil, 1991
La collusion de l’idée imaginaire du tout avec l’idée de satisfaction
« L’idée imaginaire du tout telle qu’elle est donnée par le corps, comme
s’appuyant sur la bonne forme de la satisfaction, sur ce qui, à la limite, fait
sphère, a toujours été utilisée dans la politique, par le parti de la prêcherie
politique. Quoi de plus beau, mais aussi quoi de moins ouvert ? Quoi qui
ressemble plus à la clôture de la satisfaction ? La collusion de cette image avec
l’idée de la satisfaction, c’est ce contre quoi nous avons à lutter chaque fois que
nous rencontrons quelque chose qui fait nœud dans le travail dont il s’agit, celui
de la mise au jour par les voies de l’inconscient. » p. 33
La vérité, un mi-corps qui sort du puits
« La vérité, on ne peut jamais la dire qu’à moitié. Notre chère vérité de l’imagerie
d’Epinal qui sort du puits, ce n’est jamais qu’un corps. (…) Je pense que vous
voyez ce que veut dire ici la fonction de l’énigme – c’est un mi-dire, comme la
170
Jacques Lacan
La jouissance est tout ce qui relève de la distribution du plaisir dans le corps
LE CORPS PARLANT
Chimère apparaît un mi-corps, quitte à disparaître tout à fait quand on en a
donné la solution. Un savoir en tant que vérité – cela définit ce que doit être la
structure de ce que l’on appelle une interprétation. » p. 39
L’affinité de la marque avec la jouissance du corps même
« Dans la pratique érotique que j’évoque, qui est la flagellation, pour l’appeler
par son nom au cas il y aurait ici des archi-sourds, le jouir prend l’ambiguïté
même par quoi c’est à son niveau, et à nul autre, que se touche l’équivalence
du geste qui marque, et du corps, objet de jouissance. Jouissance de qui ? (…)
Est- il sûr que cela veuille dire jouissance de l’Autre ? Certes, c’est une des voies
d’entrée de l’Autre dans son monde, et assurément, elle, non réfutable. Mais
l’affinité de la marque avec la jouissance du corps même, c’est là précisément où
s’indique que c’est seulement de la jouissance, et nullement d’autres voies, que
s’établit la division dont se distingue le narcissisme, de la relation à l’objet. »
p. 55
Qu’est-ce qui a un corps et qui n’existe pas?
« Nous voici reconduits à ceci, de fait, qu’un corps peut être sans figure. Le
père, ou l’autre, quel qu’il soit, qui ici joue le rôle, assure la fonction, assure la
fonction, donne la place, de la jouissance, il n’est point même nommé. Dieu
sans figure, c’est bien le cas. Il n’est néanmoins pas saisissable, sinon en tant que
corps. Qu’est-ce qui a un corps et qui n’existe pas ? Réponse – le grand Autre. Si
nous y croyons, à ce grand Autre, il a un corps, inéliminable de la substance de
celui qui a dit Je suis ce que je suis. » p. 74
Le lis des champs, un corps tout entier livré à la jouissance
« C’est vrai que le lis des champs, nous pouvons bien l’imaginer comme un
corps tout entier livré à la jouissance. Chaque étape de sa croissance identique
à une sensation sans forme. Jouissance de la plante. Rien en tout cas ne permet
de lui échapper. C’est peut-être une douleur infinie d’être une plante. Enfin
personne ne s’amuse à rêver à ça, sauf moi. Il n’en est pas de même pour
l’animal qui a (…) la possibilité de se mouvoir pour obtenir surtout le moins de
jouissance. C’est ce qu’on appelle le principe du plaisir. Ne restons pas là où on
jouit (…). » p. 87-88
La répétition, dénotation du trait unaire en tant qu’il commémore une
irruption de jouissance
« La répétition, ça ne veut pas dire – ce qu’on a fini, on le recommence, comme
la digestion ou quelque autre fonction physiologique. La répétition, c’est une
dénotation précise d’un trait que je vous ai dégagé du texte de Freud comme
171
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le corps perdu de l’esclave, lieu d’inscription de tous les autres signifiants
« Hegel ose partir, en effet, de la Selbstbewusstsein dans son énonciation la plus
naïve, à savoir que toute conscience se sait être conscience. Et pourtant, il tresse
ce départ avec une série de crises – Aufhebung, comme il dit - , d’où il résulte que
cette Selbstbewusstsein elle-même, figure inaugurale du maître, trouve sa vérité du
travail de l’autre par excellence, de celui qui ne se sait que d’avoir perdu ce corps,
ce corps même dont il se supporte, pour avoir voulu le garder dans son accès à
la jouissance, autrement dit l’esclave.(…) Plus simplement, il s’agit de ceci, qu’il
y a un usage du signifiant qui peut se définir à partir du clivage d’un signifiantmaître avec ce corps dont nous venons de parler, le corps perdu par l’esclave
pour ne devenir rien d’autre que celui où s’inscrivent tous les autres signifiants. »
p. 101-102
Le refus du corps de l’hystérique
« Simplement, le discours de l’hystérique relève la relation du discours du maître
à la jouissance, en ceci que le savoir y vient à la place de la jouissance. Le sujet
lui-même, hystérique, s’aliène du signifiant-maître comme étant celui que ce
signifiant divise – celui, au masculin, représente le sujet -, celui qui se refuse à
s’en faire le corps. On parle à propos de l’hystérique de complaisance somatique.
Encore que le terme soit freudien, ne pouvons-nous nous apercevoir qu’il est
bien étrange ? – Et que c’est plutôt de refus du corps qu’il s’agit. A suivre l’effet
du signifiant-maître, l’hystérique n’est pas esclave. » p. 107
« Adresse à l’école » (1969), Autres écrits. Paris, Seuil, 2001
Sélection d’un corps dit AE
« A en partir, nul n’est contraint de se soumettre à cet examen d’un
moment, qu’elle marque comme la passe : ceci parce qu’elle le redouble d’un
consentement à cet examen même, lequel elle pose comme épreuve de capacité à
prendre part à la critique comme au développement de la formation.
C’est cette liberté même qui impose la sélection d’un corps dit AE. Et s’il est
ainsi confluent au corps existant déjà sous ce titre, c’est qu’il n’y a aucune raison
de refuser à ce corps la capacité dont la nouvelle sélection se motive.
Il y a tout lieu au contraire qu’il en reçoive ici l’hommage.
172
Jacques Lacan
identique au trait unaire, au petit bâton, à l’élément de l’écriture, d’un trait en
tant qu’il commémore une irruption de la jouissance. » p. 89
LE CORPS PARLANT
Que cet hommage, tel le décline, pourquoi pas ? Qu’on applaudisse cette
démission comme un défi, nous rappelle que la démagogie ne saurait être
unilatérale. Il y faut aussi un public : ceci prouve qu’il ne manque pas. »
p. 294
I /c. Le mystère du corps parlant (197O-1977)
I /c.1 La lettre comme inscription de jouissance dans
le corps (1970-1973)
Le Séminaire, Livre XVIII, D’un discours qui ne serait pas semblant
(1970-71). Paris, Seuil, 1991
Le signifiant « corps morcelé »
« L’inconscient et son jeu, cela veut dire que, parmi les nombreux signifiants qui
courent le monde, il va y avoir en plus le corps morcelé. » p. 16
La jouissance de la vie a un terme
« Le monde dit inanimé n’est pas la mort. La mort est un point, un point terme
de quoi ? – de la jouissance de la vie. » p. 21
Le réel fait trou dans le discours scientifique
« L’articulation, j’entends algébrique, du semblant – et comme tel il ne s’agit
que de lettres – et ses effets, voilà le seul appareil au moyen de quoi nous
désignons ce qui est réel. Ce qui est réel, c’est ce qui fait trou dans ce semblant,
dans ce semblant articulé qu’est le discours scientifique…il n’a de référence que
l’impossible auquel aboutissent ses déductions. Cet impossible, c’est le réel. »
p. 28
Si la plainte ne souffrait pas, nous ne saurions pas qu’elle est vivante
« En effet, l’étoffe de toutes les jouissances confine à la souffrance, c’est même à
ça que nous reconnaissons l’habit. Si la plainte ne souffrait pas manifestement,
nous ne saurions pas qu’elle est vivante. » p. 108
La jouissance ne rejoint la dimension du sexuel qu’à porter l’interdit sur le
corps de la mère
« Sa structure, la jouissance sexuelle ne la prend que de l’interdit porté sur la
jouissance dirigée sur le corps propre, c’est-à-dire, très précisément, en ce point
d’arête et de frontière où elle confine à la jouissance mortelle. Et elle ne rejoint la
173
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le Séminaire, Livre XIX, …ou pire (1971 – 1972). Paris, Seuil, 2011
Jouir, c’est jouir d’un corps
« C’est le mérite qu’on peut donner au texte de Sade que d’avoir appelé les
choses par leur nom. Jouir, c’est jouir d’un corps. Jouir, c’est l’embrasser, c’est
l’étreindre, c’est le mettre en morceaux. En droit, avoir la jouissance de quelque
chose, c’est justement ça, c’est pouvoir traiter quelque chose comme un corps,
c’est-à-dire le démolir (…). C’est le mode de jouissance le plus régulier, et c’est
pourquoi ces énoncés ont toujours une résonance sadienne. » p. 32
Le point d’émergence de l’être parlant, c’est le rapport dérangé à son propre
corps qui s’appelle jouissance
« Le point vif, le point d’émergence de (…) l’être parlant (…) c’est ce rapport
dérangé à son propre corps qui s’appelle jouissance. Le discours analytique
nous démontre que cela a pour centre (…) un rapport privilégié à la jouissance
sexuelle. Si la valeur du partenaire autre, celle que j’ai désignée respectivement
par l’homme et par la femme, est inapprochable au langage, c’est très précisément
en ceci que le langage fonctionne d’origine en suppléance de la jouissance
sexuelle. Il ordonne par là l’intrusion de la jouissance dans la répétition
corporelle. » p. 43-44
Du fait d’un signifiant qui a marqué un point du corps « C’est seulement au fait de parler que puisse s’apercevoir que ce qui parle, quoi
que ce soit, est ce qui jouit de soi comme corps, ce qui jouit d’un corps qu’il
vit comme ce que j’ai déjà énoncé du tu-able, c’est-à-dire comme tutoyable,
d’un corps qu’il tutoie et d’un corps à qui il dit tue-toie dans la même ligne. La
psychanalyse, qu’est-ce ? C’est le repérage de ce qui se comprend d’obscurci, de
ce qui s’obscurcit en compréhension, du fait d’un signifiant qui a marqué un
point du corps. » p. 150
Le désir de dormir : suspension du rapport du corps à la jouissance
« En quoi ça consiste, de dormir ? Ça consiste en ceci, qu’il s’agit de suspendre
ce qui est là dans ma tétrade, le semblant, la vérité, la jouissance, et le plus-dejouir. (…) ce qu’il s’agit de suspendre, c’est cet ambigu qu’il y a dans le rapport
au corps avec lui-même, c’est le jouir. S’il y a possibilité que ce corps accède
au jouir de soi, c’est bien évidemment partout, c’est quand il se cogne, qu’il se
fait mal. C’est ça, la jouissance. (…) En tout cas, quand il dort c’est fini. (…)
174
Jacques Lacan
dimension du sexuel qu’à porter l’interdit sur le corps dont sort le corps propre,
à savoir le corps de la mère. » p. 108
LE CORPS PARLANT
Dormir, c’est ne pas être dérangé. (…) Seulement voilà, ce que Freud dit, c’est
que le signifiant, lui, continue à cavaler pendant ce temps-là. » p. 216
L’objet a : pollution dont l’homme prend sa substance
« C’est à la place du semblant que le discours analytique se caractérise de situer
l’objet a. (…) La pollution la plus caractéristique dans ce monde, c’est très
exactement l’objet a dont l’homme prend sa substance (…). Devoir, de cette
pollution qui est l’effet le plus certain de l’homme sur la surface de la Terre, en
faire représentation en son corps, en son existence d’analyste, qu’on y regarde à
plus d’une fois. » p. 218
Le propre de la jouissance : quand il y a deux corps, on ne peut pas dire
lequel jouit
« C’est tout de même du discours que Freud a fait surgir ceci, que ce qui se
produisait au niveau du support avait affaire avec ce qui s’articulait du discours.
Le support, c’est le corps. Encore faut-il faire attention quand on dit que c’est
le corps. Ce n’est pas forcément un corps. A partir du moment où on part de la
jouissance, ça veut dire que le corps n’est pas tout seul, qu’il y en a un autre. (…)
C’est la jouissance de corps à corps. Le propre de la jouissance, c’est que, quand
il y a deux corps (…) on ne peut pas dire lequel jouit. » p. 225
Le corps comme ground
« Il y a ce que je viens d’énoncer, la jouissance, la vérité, le semblant, et le plusde-jouir. C’est là-dessus que ça tourne. Et il y a ce support, ce qui arrive au
niveau du corps – d’où surgit tout sens – mais inconstitué, comme faisant là le
fond, le ground (…). Le ground donc est là. Il s’agit en effet du corps, avec ses
sens radicaux sur lesquels il n’y a aucune prise. » p. 227
Entretien préliminaire et confrontation des corps
« Au niveau du discours du maître, on peut parfaitement dire ce qu’il y a entre,
d’une part, les fonctions du champ du discours, telles qu’elles s’articulent de ce
S1, S2, le S barré et le petit a, et, d’autre part, ce corps qui vous représente ici,
et à qui, en tant qu’analyste, je m’adresse. Quand quelqu’un vient me voir dans
mon cabinet pour la première fois, et que je scande notre entrée dans l’affaire de
quelques entretiens préliminaires, ce qui est important, c’est la confrontation de
corps. » p. 228
175
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« On doit penser que, comme je l’énonce, s’il y a quelque chose qui existe qui
s’appelle le discours analytique, c’est parce que l’analyste en corps, avec toute
ambiguïté motivée de ce terme, installe l’objet a à la place du semblant. »
p. 231
Former l’analyste à distinguer entre le niveau du corps et le discours
« Ce qui Peirce ose nous articuler au joint d’une antique cosmologie, c’est la
plénitude de ce dont il s’agit dans le semblant de corps. C’est le discours dans
son rapport, dit-il, au rien. Cela veut dire ce autour de quoi nécessairement
tourne tout discours. Par cette voie, et en promouvant cette année la théorie des
ensembles, j’essaie de suggérer à ceux qui tiennent la fonction de l’analyste de se
rompre et de se former dans la veine qu’exploitent les énoncés qui se formalisent
de la logique. Se former à quoi ? A distinguer ce que j’ai appelé tout à l’heure
la bourre, le tamponnement, l’intervalle, la béance qu’il y a entre le niveau du
corps, de la jouissance et du semblant, et le discours. » p. 232
Le Séminaire, Livre XX, Encore (1972 – 1973). Paris, Seuil, 1975
Le corps habille l’objet a
« Jouir d’un corps quand il n’y a plus d’habits laisse intacte la question de ce qui
fait l’Un, c’est-à-dire celle de l’identification. La perruche s’identifiait à Picasso
habillé.
Il en est de même de tout ce qui est de l’amour. L’habit aime le moine, parce que
c’est par là qu’ils ne sont qu’un. Autrement dit, ce qu’il y a sous l’habit et que
nous appelons le corps, ce n’est peut-être que ce reste que j’appelle l’objet a. »
p. 12
Un corps, ça se jouit de le corporiser de façon signifiante
« Pour situer, avant de vous quitter, mon signifiant, je vous propose de soupeser
ce qui, la dernière fois, s’inscrit au début de ma première phrase, le jouir d’un
corps, d’un corps qui, l’Autre, le symbolise, et comporte peut-être quelque
chose de nature à faire mettre au point une autre forme de substance, la
substance jouissante. N’est-ce pas là ce que suppose proprement l’expérience
psychanalytique? – la substance du corps, à condition qu’elle se définisse
seulement de ce qui se jouit. Propriété du corps vivant sans doute, mais nous ne
savons pas ce que c’est que d’être vivant sinon seulement ceci, qu’un corps cela
se jouit. Cela ne se jouit que de le corporiser de façon signifiante. » p. 26
176
Jacques Lacan
« L’analyste en corps »
LE CORPS PARLANT
La jouissance du corps est au-delà du phallus
« Il y a une jouissance, puisque nous nous en tenons à la jouissance, jouissance
du corps, qui est, si je puis m’exprimer ainsi - pourquoi pas en faire un titre de
livre?, c’est pour le prochain de la collection Galilée – au-delà du phallus. Ce
serait mignon, ça. Et ça donnerait une autre consistance au MLF. Une jouissance
au-delà du phallus… » p. 69
Je parle avec mon corps sans le savoir
« C’est une des choses essentielles que j’ai dites la dernière fois – l’analyse se
distingue entre tout ce qui a été produit jusqu’alors du discours, de ce qu’elle
énonce ceci, qui est l’os de mon enseignement, que je parle sans le savoir. Je
parle avec mon corps, et ceci sans le savoir. Je dis donc toujours plus que je n’en
sais. C’est là que j’arrive au sens du mot sujet dans le discours analytique. Ce qui
parle sans le savoir me fait je, sujet du verbe. Ça ne suit pas à me faire être. Ça
n’a rien à faire avec ce que je suis forcé de mettre dans l’être. » p. 108
Le corps parlant ne se reproduit que par un malentendu de sa jouissance
« C’est le corps parlant en tant qu’il ne peut réussir à se reproduire que grâce
à un malentendu de sa jouissance. C’est dire qu’il ne se reproduit que grâce
à un ratage de ce qu’il veut dire, car ce qu’il veut dire - à savoir, comme le dit
bien le français, son sens - c’est sa jouissance effective. Et c’est à la rater qu’il se
reproduit - c’est-à-dire à baiser.
C’est justement ça qu’il ne veut pas faire, en fin de compte. La preuve, c’est que,
quand on le laisse tout seul, il sublime tout le temps à tour de bras, il voit la
Beauté, le Bien - sans compter le Vrai, et c’est encore là, comme je viens de vous
le dire, qu’il est le plus près de ce dont il s’agit. Mais ce qui est vrai, c’est que
le partenaire de l’autre sexe reste l’Autre. C’est donc à rater sa jouissance qu’il
réussit à être encore reproduit sans rien savoir de ce qui le reproduit. » p. 109
Le monde n’est qu’un rêve du corps parlant
« Il semble que le sujet se représente les objets inanimés en fonction de ceci qu’il
n’y a pas de relation sexuelle. Il n’y a que les corps parlants, ai-je dit, qui se font
une idée du monde comme tel. Le monde, le monde de l’être plein de savoir,
ce n’est qu’un rêve, un rêve du corps en tant qu’il parle, car il n’y a pas de sujet
connaissant. Il y a des sujets qui se donnent des corrélats dans l’objet a, corrélats
de parole jouissante en tant que jouissance de parole. » p. 114
« Le réel, dirai-je, c’est le mystère du corps parlant, c’est le mystère de
l’inconscient. » p. 118
177
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Par un choix dont on ne sait ce qui l’a guidé, Aristote à pris le parti de
ne donner d’autre définition de l’individu que le corps - le corps en tant
qu’organisme, ce qui se maintient comme un, et non pas ce qui se reproduit. La
différence entre l’idée platonicienne et la définition aristotélicienne de l’individu
comme fondant l’être, nous sommes encore autour. (…) Le corps, qu’est-ce
donc? Est-ce ou n’est-ce pas le savoir de l’un? Le savoir de l’un se révèle ne pas
venir du corps. Le savoir de l’un pour le peu que nous en puissions dire, vient
du signifiant Un. » p. 130
Je parle aux murs (1972). Paris, Seuil, 2011
Pour jouir, il faut un corps
« Où est-ce que ça gîte, la jouissance ? Qu’est-ce qu’il y faut ? Un corps. Pour
jouir, il faut un corps. Même ceux qui font promesse des Béatitudes éternelles ne
peuvent le faire qu’à supposer que le corps s’y véhicule. Glorieux ou pas, il doit y
être. Il faut un corps. Pourquoi ? Parce que la dimension de la jouissance pour le
corps, c’est la dimension de la descente vers la mort. » p. 28-30
La jouissance sexuelle et son point de mirage : la jouissance absolue
« La sexualité est sans aucun doute au centre de tout ce qui se passe dans
l’inconscient. Mais elle est au centre en ceci qu’elle est un manque. C’est-à-dire
que, à la place de quoi que ce soit qui pourrait s’écrire du rapport sexuel comme
tel, se substituent les impasses qu’engendre la fonction de la jouissance sexuelle,
en tant qu’elle apparaît comme ce point de mirage dont Freud lui-même donne
quelque part la note comme de la jouissance absolue. » p. 34-35
Du rapport de l’être parlant avec son corps et son articulation au noyau opaque
de la jouissance
« Personne ne semble s’être aperçu que la question est au niveau de la dimension
entière de la jouissance, à savoir du rapport de l’être parlant avec son corps, car
il n’y a pas d’autre définition possible de la jouissance. (…) A quoi cela tient-il
que, chez l’être parlant, ce soit beaucoup plus élaboré, le rapport à la jouissance ?
La psychanalyse a découvert que cela tient à ce que la jouissance sexuelle émerge
plus tôt que la maturité du même nom. » p. 63-64
« L’étourdit » (1972), Autres écrits. Paris, Seuil, 2001
Jacques Lacan
Le savoir de l’un se révèle de ne pas venir du corps mais du signifiant Un
LE CORPS PARLANT
la circoncision, voyez l’appendice l’attendre pendant des siècles, de la chirurgie.
C’est ainsi que du discours psychanalytique, un organe se fait le signifiant. (…)
Cet organe, passé au signifiant, creuse la place d’où prend effet pour le parlant,
suivons-le à ce qu’il se pense : être, l’inexistence du rapport sexuel. »
p. 456-457
Le langage, stabitat de l’homme
« (…) qu’il n’y a pas de rapport sexuel, ceci du fait qu’un animal a stabitat qu’est le
langage, que d’labiter c’est aussi bien ce qui pour son corps fait organe, – organe
qui, pour ainsi lui ex-sister, le détermine de sa fonction, ce dès avant qu’il la
trouve. C’est même de là qu’il est réduit à trouver que son corps n’est pas-sans
autres organes, et que leur fonction à chacun, lui fait problème. » p. 474
« A l’Ecole Belge de psychanalyse » (1972), Quarto N°5. 1981
Corps sans organe
« (…) les plus récentes sorties de la thématique du corps sans organe, c’est
bien clair que c’est une façon d’éclairer certaine chose enfin, qui s’appelle
la schizophrénie. Cela veut dire que là le langage ne réussit pas à mordre, à
savoir que tout de même le corps n’est pas tellement sans organe, il y en a au
moins un qui est le langage parce que s’il y a quelque chose dans quoi baigne
le schizophrène, c’est devant ce maniement enfin affolé enfin du langage,
simplement il n’arrive pas à le faire mordre sur un corps et en effet à partir de là
on peut considérer que le corps est sans organes mais qu’est-ce que cela veut dire
enfin ? Cela veut dire que si on se pose la question de la fonction d’un organe,
c’est à partir du langage en tant que le langage est le premier à quoi le corps se
trouve absolument subordonné. » p. 21-22
« … ou pire » (1973), Autres écrits. Paris, Seuil, 2001
Le savoir affecte le corps
« Je dis, moi, que le savoir affecte le corps de l’être qui ne se fait être que de
parole, ceci de morceler sa jouissance, de le découper par là jusqu’à en produire
les chutes dont je fais le (a), à lire objet petit a, ou bien abject, ce qui se dira
quand je serai mort, temps où enfin l’on m’entendra, ou encore l’(a)cause
première de son désir. » p. 550
Le langage fait le phallus hors-corps
« Le corps des parlants est sujet à se diviser des organes, assez pour avoir à leur
trouver fonction. Il y faut parfois des âges : pour un prépuce qui prend usage de
178
179
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le Séminaire, Livre XXI, Les non-dupes-errent (1973 - 1974). Inédit
Freud, dupe du réel
Leçon du 12 mars 1974 « Il [Freud] était dupe du réel même s’il n’y
croyait pas. Et c’est bien ça ce dont il s’agit. La bonne dupe, celle qui n’erre pas,
il faut qu’il y ait quelque part un réel dont elle soit dupe. »
Le corps et le vrai
Leçon du 12 mars 1974 « Le vrai n’a aucune autre façon de pouvoir
être défini que ce qui en somme fait que le corps va à la jouissance et qu’en ceci,
ce par quoi il y est forcé, n’est pas autre chose que le principe par quoi le sexe est
très spécifiquement lié à la mort du corps. Il n’y a que chez les êtres sexués que le
corps meurt. »
Le corps et le beau
Leçon du 12 mars 1974 « Cette histoire du Christ qui ne parle que
de la jouissance : ces lys des champs qui ne tissent ni ne filent – qui traverse, lui,
la mort, tout ça en fin de compte n’a de fin que de produire des corps glorieux
dont on se demande ce qu’ils vont faire pendant l’éternité(…). C’est tout de
même curieux que ce soit par cette voie, cette voie non pas du vrai mais du beau,
que ce soit par cette voie que se soit pour la première fois manifesté le dogme de
la Trinité divine, il faut dire que c’est un mystère ! »
Aller un peu plus loin que le tournage en rond de la jouissance, du corps et
de la mort
Leçon du 12 mars 1974 « En quoi le symbolique, l’imaginaire et le
réel, est-ce quelque chose qui aurait la prétention d’aller un peu plus loin que ce
tournage en rond de la jouissance, du corps et de la mort ? »
Ce qui définit le corps, ce n’est pas la vie mais la jouissance
Leçon du 12 mars 1974 « S’il y a quelque chose dont puisse se
définir le corps, ce n’est pas la vie puisque la vie nous ne la voyons que dans des
corps qui sont des choses de l’ordre des bactéries (…). On ne voit pas bien le
rapport entre ça et notre corps. Mais que la définition même d’un corps, c’est
que ce soit une substance jouissante, comment est-ce que ça n’a été encore
jamais énoncé par personne ? »
180
Jacques Lacan
I /c.2 L’incidence de la langue sur le corps (1973 –
1977)
LE CORPS PARLANT
Le corps jouit de lui-même
Leçon du 12 mars 1974 « Un corps jouit de lui-même, il en jouit
bien ou mal mais il est clair que cette jouissance l’introduit dans une dialectique
où il faut incontestablement d’autres termes pour que ça tienne debout, à savoir
rien de moins que ce nœud que je vous sers en tartine. »
Les corps ne se nouent pas
Leçon du 12 mars 1974 « Dans l’amour, ce à quoi les corps tendent,
c’est à se nouer. Ils n’y arrivent pas naturellement parce que ce qu’il y a d’inouï,
c’est qu’à un corps, ça ne lui arrive jamais de se nouer. Il n’y a même pas de trace
de nœud dans le corps ! »
L’imaginaire: prévalence donnée à un besoin du corps, celui de dormir
Leçon du 19 mars 1974 « Il faudrait arriver à ce que je fasse entrer
pour vous dans vos cogitations ceci, que l’imaginaire est la prévalence donnée à
un besoin du corps, qui est de dormir. »
Le corps et le bien
Leçon du 19 mars 1974 « L’essence de ce qui s’agit dans le bien, c’est
que le corps force sa jouissance, à savoir la réprime et ceci au nom de la mort, de
la mort de soi ou de la mort de quelqu’un d’autre. »
Leçon du 19 mars 1974 « Est-ce que cela ne réduit pas le bien à sa
juste portée ? Ces termes dont se font les trois du réel en tant que le réel luimême est trois, à savoir la jouissance, le corps, la mort en tant qu’ils sont noués
seulement par cette impasse invérifiable du sexe, c’est bien là que ce véhicule ce
discours nouveau (…), le discours analytique. »
Limite de la religion
Leçon du 9 avril 1974 « Je rentre d’Italie, vous comprenez, alors je
suis dans un bain de corps qui ruissellent sur tous les murs (…). Enfin ça donne
quand même sa limite au machin, ça montre quand même qu’on est dans la
vérité et qu’on y reste, qu’on n’en sort pas. Ce qu’il faut, c’est d’en sortir de la
vérité, alors là je ne vois pas d’autre moyen que d’inventer et pour inventer de
la bonne façon, de la façon analytique, c’est d’en remettre, d’abonder dans son
sens. »
La jouissance du corps est d’un autre ordre que la jouissance phallique
Leçon du 21 mai 1974 « Il y a ceci qu’assurément l’animal se
distingue de subsister non seulement en un corps, mais que ce corps comme tel
n’identifie, n’a d’identité non pas (…) de la pensée (…) mais de ce qu’il jouisse
181
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Leçon du 21 mai 1974 « La jouissance phallique quelle qu’elle soit n’a
pas la même prévalence, n’a pas le même poids en quelque sorte d’opposition
au regard de la jouissance en tant que deux corps jouissent l’un de l’autre. C’est
là qu’est la faille par où s’abîme, si l’on peut dire, dans l’expérience analytique
tout ce qui s’ordonne de l’amour. Si on parle de nœud, c’est faire allusion à
l’embrassement, à l’étreinte, mais autre chose est la façon dont fait irruption
dans la vie de chacun, cette jouissance qui soit appartient à l’un de ces corps,
mais à l’autre n’apparaît que sous cette forme de référence à un autre comme tel,
même si quelque chose dans le corps peut lui donner un mince support, je veux
dire au niveau de cet organe qui s’appelle le clitoris. »
Body et corpse
Leçon du 11 juin 1974 « Il est difficile de ne pas faire de la vie la
caractéristique du corps parce que c’est à peu près tout ce que nous pouvons en
dire, en tant que corps, il est là et il a bien l’air de se défendre, de se défendre
contre quoi ? contre ce quelque chose auquel il est difficile de ne pas l’identifier,
c’est-à-dire ce qu’il en reste, de ce corps, quand il n’a plus la vie. »
La jouissance phallique se surajoute au corps
Leçon du 11 juin 1974 « Le sème, c’est ce qui fait sens. Tout ce qui
fait sens dans lalangue s’avère lié à l’ex-sistence de cette langue, à savoir que c’est
en-dehors de l’affaire de la vie du corps, et que s’il y a quelque chose que j’ai
essayé de développer cette année devant vous, c’est que c’est pour autant que
cette jouissance phallique, que cette jouissance sémiotique se surajoute au corps
qu’il y a un problème. »
Lalangue, un brin de jouissance qui étend ses racines dans le corps
Leçon du 11 juin 1974 « Lalangue a le même parasitisme que la
jouissance phallique, par rapport à toutes les autres jouissances. Et c’est elle qui
détermine comme parasitaire dans le réel ce qu’il en est du savoir inconscient.
Il faut concevoir lalangue. Et pourquoi pas parler de ce que lalangue serait en
rapport avec la jouissance phallique comme les branches à l’arbre. (…) Disons
que lalangue, n’importe quel élément de lalangue, c’est au regard de la jouissance
phallique, un brin de jouissance. Et c’est en ça que ça étend ses racines si loin
dans le corps. »
182
Jacques Lacan
de lui-même. (…) Ce dont il s’agit, c’est d’une jouissance et d’une jouissance qui
se trouve d’après notre expérience être d’un ordre autre que ce qu’il en est de la
jouissance phallique. »
LE CORPS PARLANT
Le Séminaire, Livre XXII, RSI (1974 - 1975). Inédit
La débilité mentale est enracinée dans le corps vivant
Leçon du 10 décembre 1974 « Je dirais que si l’être parlant se
démontre voué à la débilité mentale, c’est le fait de l’imaginaire. Cette notion
n’a d’autre départ que la référence au corps. (…) Pour tout dire, ça ne va pas de
soi qu’un corps soit vivant. Ce qui atteste le mieux qu’il le soit, c’est précisément
ce mens que j’ai introduit par la débilité mentale. (…) Sans le langage, pas le
moindre soupçon ne pourrait nous venir de cette imbécilité, qui est aussi ce par
quoi le corps nous témoigne d’être vivant. »
Leçon du 10 décembre 1974 « (…) la débilité que j’ai qualifiée de
mentale, pour autant qu’elle est enracinée du corps lui-même. »
L’inhibition, une affaire de corps
Leçon du 10 décembre 1974 « Je dirai que l’inhibition, comme
Freud lui-même l’articule, est toujours affaire de corps, soit de fonction.
L’inhibition, c’est ce qui quelque part s’arrête de s’immiscer dans une figure qui
est figure de trou, trou du symbolique. »
La jouissance de l’Autre du corps fait trou
Leçon du 17 décembre 1974 « Moi je ne peux que témoigner
que j’erre, j’erre dans ces intervalles que j’essaie de vous situer, du sens, de la
jouissance phallique, voire du tiers terme (…) qui nous donne la clé du trou
tel que je le désigne. C’est la jouissance en tant qu’elle n’intéresserait, non pas
l’Autre du signifiant, mais l’Autre du corps, l’Autre de l’Autre sexe. »
L’angoisse comme ce qui borde la jouissance de l’Autre corps
Leçon du 17 décembre 1974 « Pourquoi Freud a qualifié de l’Un
l’Eros, en se livrant au mythe du corps, du corps uni, du corps à deux dos,
du corps tout rond, en osant se référer à cette énormité platonicienne ? Est-ce
que ce n’est pas le fait que d’un autre corps quel qu’il soit, nous avons beau
l’éteindre, ce n’est rien de plus que le signe du plus extrême embarras ? (…) Mis
à part de le mettre en morceaux, on ne voit pas vraiment ce qu’on peut faire
d’un autre corps, j’entends d’un autre corps dit humain. S’y justifie que, si nous
cherchons de quoi peut être bordée cette jouissance de l’autre corps, en tant que
celle-là sûrement fait trou, ce que nous trouvons, c’est l’angoisse. »
L’angoisse et l’association à un corps d’une jouissance phallique
Leçon du 17 décembre 1974 « L’angoisse, c’est ce qui de
l’intérieur du corps ex-siste, ex-siste quand il y a quelque chose qui l’éveille,
183
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Corps et imaginaire
Leçon du 21 janvier 1975 « L’ordre du sens se configure si l’on
peut dire naturellement de ce que cette forme du cercle désigne. La consistance
supposée au symbolique se fait accord de cette image en quelque sorte primaire
dont en somme il a fallu attendre la psychanalyse pour qu’on s’aperçoive qu’elle
est liée à l’ordre de ce corps à quoi est suspendu l’imaginaire. »
Il n’y a rien dans l’inconscient qui au corps fasse accord
Leçon du 21 janvier 1975 « L’Un de sens, c’est l’être spécifié
de l’inconscient en tant qu’il ex-siste du moins au corps. Il n’y a rien dans
l’inconscient s’il est fait tel que je vous l’énonce qui au corps fasse accord.
L’inconscient est discordant. »
La jouissance du corps de l’Autre fait trou
Jacques Lacan
qui le tourmente. Voyez Petit Hans, quand il se trouve que se rend sensible
l’association à un corps, nommément mâle dans l’occasion, défini comme mâle,
l’association à un corps d’une jouissance phallique. Si Petit Hans se rue dans la
phobie, c’est évidemment pour donner corps à l’embarras qu’il a de ce phallus. »
LE CORPS PARLANT
La cogitation est engluée dans l’imaginaire du corps
Leçon du 8 avril 1975 « La cogitation reste engluée d’un imaginaire
qui est imaginaire du corps. Ce qui se cogite est en quelque sorte retenu par
l’imaginaire comme enraciné dans le corps. »
Le signifiant fait trou
Leçon du 15 avril 1975 « L’inconscient, c’est le réel en tant que
chez le parlêtre, il est affligé de la seule chose qui fasse trou, qui du trou nous
assure en l’incarnant dans le signifiant dont en fin de compte il n’y a pas d’autre
définition que c’est ça, le trou. Le signifiant fait trou. »
Le nœud, non pas modèle et réalité du corps mais support et réel du corps
Leçon du 15 avril 1975 « Il n’y a pas d’affinité du corps avec le
nœud, même si dans le corps, ça joue pour les analystes une sacrée fonction. Le
nœud n’est pas le modèle, il est le support. Il n’est pas la réalité, il est le réel. »
Il n’y a que l’inconscient à donner corps à l’instinct
Leçon du 15 avril 1975 « Le symbolique tourne en rond et il ne
La consistance, c’est ce qui se fabrique et s’invente
consiste que dans le trou qu’il fait. Alors tout ce qu’on a dit de l’instinct, ça
ne veut dire que ceci, c’est qu’il a fallu qu’on aille à du réel, à du réel supposé,
pour avoir un pressentiment de l’inconscient. Et au sens où corps veut dire
consistance, l’inconscient dans une pratique donne corps à cet instinct. Si nous
voulons que corps veuille dire consistance, il n’y a que l’inconscient à donner
corps à l’instinct. »
qui se fabrique et qui s’invente. »
Le Séminaire, Livre XXIII, Le sinthome (1975 - 1976). Paris, Seuil,
2005
Le corps: ce qui consiste avant de se dissoudre
Le corps comme sac vide
Leçon du 21 janvier 1975 « Il est clair que s’il n’y a pas de
jouissance de l’Autre comme telle, c’est qu’il n’y a pas de garant rencontrable
dans la jouissance du corps de l’Autre qui fasse que jouir de l’Autre comme tel,
ça existe. Ici est l’exemple le plus manifeste du trou. »
Leçon du 11 février 1975 « La consistance pour le parlêtre, c’est ce
Leçon du 18 février 1975 « Un corps, un corps tel que celui dont
vous vous supportez, c’est très précisément ce quelque chose qui pour vous n’a
d’aspect que d’être ce qui résiste, ce qui consiste avant de se dissoudre. »
Le parlêtre, animal-corps ou diable-au-corps
Leçon du 11 mars 1975 « Le réel, c’est ce qui ex-siste au sens, en tant
que je le définis par l’effet de lalangue sur l’idée, soit sur l’imaginaire supposé par
Platon, à l’animal parlêtre, entre autres animaux-corps ou diable-au-corps. »
Le corps fait semblant
Leçon du 11 mars 1975 « Le réel, c’est le sens en blanc, autrement dit
« (…) les pulsions c’est l’écho dans le corps du fait qu’il y a un dire. Ce dire,
pour qu’il résonne, pour qu’il consonne, (…) il faut que le corps y soit sensible.
Qu’il l’est, c’est un fait. C’est parce que le corps a quelques orifices dont le
plus important est l’oreille, parce qu’il peut pas se boucher, se clore, se fermer.
C’est par ce biais que répond dans le corps ce que j’ai appelé la voix. (…) More
geometrico, à cause de la forme, chère à Platon, l’individu se présente comme il
est foutu, comme un corps. Et ce corps a une puissance de captivation qui est
telle que, jusqu’à un certain point, c’est les aveugles qu’il faudrait envier. (…)
L’étonnant est que la forme ne livre que le sac, ou si vous voulez la bulle, car
elle est quelque chose qui se gonfle. (…) Le sac, en tant qu’il s’imagine dans la
le sens blanc par quoi le corps fait semblant. »
184
185
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
sq. « D’un corps à la Cantor ») Par rapport aux pôles que constituent le corps et le langage, le réel est là ce
qui fait accord
« Loin du corps, il y a possibilité de ce que j’appelais la dernière fois résonance,
ou consonance. C’est au niveau du réel que peut se trouver cette consonance.
Par rapport à ces pôles que constituent le corps et le langage, le réel est là ce qui
fait accord. » p. 40
Nous n’avons idée de consistance que ce fait sac ou torchon
« La consistance là, qu’est-ce que ça veut dire ? Ça veut dire ce qui tient
ensemble, et c’est bien pourquoi elle est ici symbolisée par la surface. En effet,
pauvres de nous, nous n’avons idée de consistance que de ce qui fait sac ou
torchon. C’est la première idée que nous en avons. Même le corps, nous le
sentons comme peau, retenant dans son sac un tas d’organes. » p. 65
L’homme croit qu’il a un corps car c’est sa seule consistance
« Le parlêtre adore son corps parce qu’il croit qu’il l’a. En réalité, il ne l’a pas,
mais son corps est sa seule consistance — consistance mentale, bien entendu car
son corps fout le camp à tout instant. (…) Certes, le corps ne s’évapore pas, et,
en ce sens, il est consistant, le fait est constaté même chez les animaux. Et c’est
bien ce qui est antipathique à la mentalité, parce qu’elle y croit, d’avoir un corps
à adorer. C’est la racine de l’imaginaire. Je le panse, c’est-à-dire je le fais panse,
donc je l’essuie. » p. 66
« Le sens (…) (est) la copulation du langage, puisque c’est de cela que je
supporte l’inconscient, avec le corps. » p. 122
« L’homme a un corps, il le possède comme un meuble « Son corps on l’a, on ne
l’est à aucun degré. » p. 150
Son corps, l’homme le possède comme un meuble
« Il faut bien que vous réalisiez que ce que je vous ai dit des rapports de l’homme
à son corps, et qui tient tout entier dans le fait que l’homme dit que le corps,
son corps, il l’a. Déjà à dire son, c’est dire qu’il le possède, comme un meuble,
bien entendu. Ça n’a rien à faire avec quoi que ce soit qui permette de définir
strictement le sujet, lequel ne se définit d’une façon correcte que de qu’il est
représenté par un signifiant auprès d’un autre signifiant. » p. 154
186
Jacques Lacan
théorie des ensembles telle que l’a fondé Cantor (…) comme pouvant ne rien
contenir, être un sac vide. » p. 17-18 (voir également le commentaire de JAM p. 213 et
LE CORPS PARLANT
Télévision. Paris, Seuil, 1974
L’homme pense de ce que la structure du langage découpe son corps
« En fait le sujet de l’inconscient ne touche à l’âme que par le corps, d’y
introduire la pensée : cette fois de contredire Aristote. L’homme ne pense pas
avec son âme, comme l’imagine le Philosophe.
Il pense de ce qu’une structure, celle du langage – le mot le comporte – de
ce qu’une structure découpe son corps, et qui n’a rien à faire avec l’anatomie.
Témoin l’hystérique. » p. 16
L’affect dérange les fonctions du corps
« L’histoire de l’affect que je négligerais, c’est le même tabac.
Qu’on me réponde seulement sur ce point : un affect, ça regarde-t-il le corps ?
Une décharge d’adrénaline, est-ce que du corps ou pas ? Que ça en dérange les
fonctions, c’est vrai. Mais en quoi ça vient-il de l’âme. C’est de la pensée que ça
décharge. » p. 37
Le corps n’est affecté que par la structure
« Reconsidérer l’affect à partir de mes dires, reconduit en tous cas à ce qui s’en
est dit de sûr.
La simple résection des passions de l’âme, comme saint Thomas nomme plus
justement les affects, la résection depuis Platon de ces passions selon le corps :
tête, cœur, voire comme il dit (épithumia) ou surcoeur, ne témoigne-t-elle pas
déjà de ce qu’il faille pour leur abord en passer par ce corps, que je dis n’être
affecté que par la structure ? » p. 39
L’affect vient à un corps dont le propre est d’habiter le langage
« Ainsi l’affect vient-il à un corps dont le propre serait d’habiter le langage, - je
me geaite ici de plumes qui se vendent mieux que les miennes -, l’affect, dis-je,
de ne pas trouver de logement, pas de son goût tout au moins. On appelle ça la
morosité, la mauvaise humeur aussi bien. Est-ce un péché, ça, un grain de folie,
ou une vraie touche du réel ? » p. 41
« Le sujet de l’inconscient, lui, embraye sur le corps. » p.
60
Il n’y a pas de limite aux concessions qu’une femme fait pour « un » homme,
de son corps, de son âme, de ses biens
« Toutes les femmes sont folles, qu’on dit. C’est même pourquoi elles ne sont
pas toutes, c’est-à-dire pas folles-du-tout, arrangeantes plutôt : au point qu’il n’y
a pas de limites aux concessions que chacune fait pour un homme : de son corps,
de son âme, de ses biens. » p. 63-64
187
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le corps qui parle jouit des objets a
« Le corps est à comprendre au naturel comme dénoué de ce réel qui, pour y
exister au titre de faire sa jouissance, ne lui reste pas moins opaque. Il est l’abîme
moins remarqué de ce que ce soit lalangue qui, cette jouissance, la civilise si
j’ose dire, j’entends par là qu’elle la porte à son effet développé, celui par lequel
le corps jouit d’objets dont le premier, celui que j’écris du a, est l’objet même,
comme je le disais, dont il n’y a pas d’idée, d’idée comme telle, j’entends, sauf à
le briser, cet objet, auquel cas ses morceaux sont identifiables corporellement et,
comme éclats du corps, identifiés. » p. 20
La jouissance du corps est jouissance de la vie
« Si c’est le cas pour ce qu’il en est de la jouissance du corps en tant qu’elle est
jouissance de la vie, la chose la plus étonnante, c’est que cet objet, le a, sépare
cette jouissance du corps de la jouissance phallique. (…)Que la jouissance
phallique devienne anomalique à la jouissance du corps s’est déjà aperçu trentesix fois. » p. 21
Le corps prend sa portée de l’image
« Le corps, s’introduit dans l’économie de la jouissance. C’est de là que je suis
parti. Le rapport de l’homme, de ce qu’on appelle de ce nom, avec son corps,
s’il y a quelque chose qui souligne bien qu’il est imaginaire, c’est la portée qu’y
prend l’image (…) » p. 22
L’angoisse surgit de ce soupçon de se réduire à notre corps
Le parlêtre désigne l’inconscient car l’être tient au langage
« Je vais tout de même vous dire le mot dont je me sers pour désigner
l’inconscient – je dis le parlêtre. Je me permets ici aussi une petite équivoque
– c’est l’être qui parle, mais c’est aussi celui qui parle cette chose fabuleuse qui,
strictement ne tient qu’au langage, à savoir l’être. Si ce n’était pas le langage qui
introduise l’être, tout l’être, cette idée, d’où viendrait-elle ? » p. 20
Le corps n’est pas l’origine du langage
« (…) quelle est la source, l’origine, du langage ? Il paraît impossible de
penser purement et simplement que ce soit le corps – que le corps, comme
on dit, invente son expression. Le langage est un parasite auquel il est possible
de coordonner – ces faits que Freud dénomme du refoulé primordial, de
l’Urverdrängt. Ce qu’il y a comme trou au centre du langage vaut bien ce qu’il y
a comme trou au centre de ce corps, dont nous ne savons que ses proliférations
imaginaires. Il doit y avoir un trou aussi au cœur, au centre du réel. » p. 22
« Joyce le Symptôme » (1975), Autres écrits. Paris, Seuil, 2001
L’homme parle avec le corps qu’il a
« LOM, LOM de base, LOM cahun corps et nan-na Kun. (…) Il a (même son
corps) du fait qu’il appartient en même temps à trois… appelons ça, ordres.
(…) il faut maintenir que l’homme ait un corps, soit qu’il parle avec son corps,
autrement dit qu’il parlêtre de nature. » p. 565
Le Saint, l’icône et la castration de l’escabeau
« Le phénomène lacanien » (1974), Les cahiers cliniques de Nice N°1.
1998
« A vrai dire il n’y a pas de Saint-en-soi, il n’y a que le désir d’en fignoler ce
qu’on appelle la voie, voie canonique. D’où l’on ptôme à l’occasion dans la
canonisation de l’Eglise, qui en connaît un bout à ce qu’elle s’y reconique, mais
qui se f… le doigt dans l’œil dans tous les autres cas. Car il n’y pas de voie
canonique pour la sainteté, malgré le vouloir des Saints, pas de voie qui les
spécifie, qui fasse des Saints une espèce. Il n’y a que la scabeaustration ; mais la
castration de l’escabeau ne s’accomplit que de l’escapade. Il n’y a de Saint qu’à ne
pas vouloir l’être, qu’à la sainteté y renoncer. » p. 567
Avec l’image du corps qu’il adore, l’homme fait le monde
Le symptôme est un événement de corps
« Vous avez un corps, d’où procède votre imaginaire. (…) l’homme aime son
image comme ce qui lui est le plus prochain, c’est-à-dire son corps. Simplement,
son corps, il n’en a strictement aucune idée. Il croit que c’est moi. Chacun croit
que c’est soi. C’est un trou. Et puis au dehors, il y a l’image. Et avec cette image,
il fait le monde. » p. 18
« Laissons le symptôme à ce qu’il est : un événement de corps, lié à ce que : l’on
l’a, l’on l’a de l’air, l’on l’aire, de l’on l’a. Ça se chante à l’occasion et Joyce ne
s’en prive pas.
« L’angoisse, justement, se situe ailleurs que la peur dans notre corps. C’est le
sentiment qui surgit de ce soupçon qui nous vient de nous réduire à notre corps.
Il très curieux que la débilité du parlêtre ait réussi à aller jusque-là – jusqu’à
s’apercevoir que l’angoisse n’est pas la peur de quoi que ce soit dont le corps
puisse se motiver. C’est une peur de la peur. » p. 29
188
Jacques Lacan
« La Troisième » (1974), La Cause freudienne N°79. 2011
LE CORPS PARLANT
189
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Séance de clôture de la Journée d’étude sur les cartels de l’EFP »
(1975), Lettre de l’Ecole freudienne de Paris N°18, 1976
La consistance de l’imaginaire est liée à la séparation du corps de la
jouissance phallique
« L’imaginaire n’a aucune espèce d’autre support que ceci qu’il a le corps, et que
c’est en tant que ce corps se dénoue de la jouissance phallique que l’imaginaire a
consistance. » p. 269
« Conférence à Genève sur le symptôme » (1975), Le bloc-notes de la
psychanalyse N°5, 1985
L’homme est capté par l’image du corps et fait l’Umwelt à l’image de son
corps
« Si l’homme – cela paraît une banalité que de le dire – n’avait pas ce que l’on
appelle un corps, je ne vais pas dire qu’il ne penserait pas, car cela va de soi, mais
il ne serait pas profondément capté par l’image de ce corps. L’homme est capté
par l’image de son corps. Ce point explique beaucoup de choses, et d’abord le
privilège qu’a pour lui cette image. Son monde, si tant est que ce mot ait un
sens, son Umwelt, ce qu’il y a autour de lui, il le corpo-réifie, il le fait chose à
l’image de son corps. » p. 7
La rencontre de lalangue avec le corps
« C’est toujours à l’aide de mots que l’homme pense. Et c’est dans la rencontre
de ces mots avec son corps que quelque chose se dessine. (…) ce langage qui
n’a absolument pas d’existence théorique, intervient toujours sous la forme de
ce que j’appelle d’un mot que j’ai voulu faire aussi proche que possible du mot
lallation – lalangue. » p. 11
« Conférences et entretiens dans des universités nord-américaines »
(1975), Scilicet N°6 et Nº7, 1976
La parole a des effets sur le corps
« Entre le corps en tant qu’il s’imagine et ce qui le lie (à savoir le fait de parler)
l’homme s’imagine qu’il pense. Il pense en tant qu’il parle. Cette parole a des
effets sur son corps. Grâce à cette parole, il est presque aussi malin qu’un animal.
Un animal se débrouille fort bien sans parler. Le réel : rien que d’introduire ce
190
Jacques Lacan
Ainsi des individus qu’Aristote prend pour des corps, peuvent n’être rien que
symptômes eux-mêmes relativement à d’autres corps. Une femme par exemple,
elle est symptôme d’un autre corps. Si ce n’est pas le cas, elle reste symptôme dit
hystérique. » p. 569
LE CORPS PARLANT
terme, on se demande ce qu’on dit. Le réel n’est pas le monde extérieur ; c’est
aussi bien l’anatomie, ça a affaire avec tout le corps. » p. 40
L’homme a un corps car il le traite comme un meuble
« (…) ce sur quoi l’homme insiste, c’est non pas qu’il est un corps, mais, comme
il s’exprime (c’est là quelque chose de saisissant), qu’il en a un. Au nom de quoi
peut-il dire qu’il a un corps ? Au nom de ceci qu’il le traite à la va-comme-jete-pousse, il le traite comme un meuble. (…) Alors, je voudrais dire que cette
histoire de parlêtre, ça se rencontre avec cette autre appréhension du corps et ça
ne va pas tout seul. Je veux dire qu’un corps a une autre façon de consister que
ce que j’ai désigné là sous une forme parlée, sous la forme de l’inconscient, en
tant que c’est de la parole comme telle qu’il surgit. » p. 49
L’homme adore son corps comme image qu’il appréhende comme un sac de
peau
« Cette apparence du corps humain, les hommes l’adorent. Ils adorent en
somme une pure et simple image. J’ai commencé à mettre l’accent sur ce que
Freud appelle narcissisme, id est le nœud fondamental qui fait que, pour se
donner une image de ce qu’il appelle le monde, l’homme le conçoit comme
cette unité de pure forme que représente pour lui le corps. La surface du corps,
c’est de là que l’homme a pris l’idée d’une forme privilégiée. Et sa première
appréhension du monde a été l’appréhension de son semblable. Puis ce corps, il
l’a vu, il l’a abstrait, il en a fait une sphère : la bonne forme. Cela reflète la bulle,
le sac de peau. » p. 54
« L’insu que sait de l’Une-bévue s’aile à mourre : séances du 16
novembre et 14 décembre 1976 », Ornicar N°12 et N°13, 1977
Les trois corps
« Je me suis aperçu que consister voulait dire qu’il fallait parler de corps, qu’il y
a un corps de l’imaginaire, qu’il y a un corps du symbolique – c’est lalangue – et
un corps du réel dont on ne sait pas comment il sort. » p. 7
Le corps comme trique ou tore retourné
« Ce tore n’a pas l’air d’être un corps mais vous allez voir qu’il suffit de le
retourner. » p. 8
« Ce qu’on voit du corps vivant est organisé comme ce que l’autre jour j’ai
appelé trique et qui n’est rien d’autre qu’un tore. C’est à ça qu’aboutit ce que
nous connaissons du corps comme consistant. » p. 12
191
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Propos sur l’hystérie » (1977), Quarto N°2, 1981
Les mots font corps
« (…) l’inconscient n’a de corps que de mots. (…) L’inconscient ? Je propose de
lui donner un autre corps parce qu’il est pensable qu’on pense les choses sans les
peser, il y suffit des mots ; les mots font corps (…). » p. 8
Le corps parlant ne se reproduit que par un malentendu de sa jouissance
« More geometrico… à cause de la forme, l’individu se présente comme il est
foutu, comme un corps. Un corps, ça se reproduit par une forme. Le corps
parlant ne peut réussir à se reproduire que par un ratage, c’est-à-dire grâce à un
malentendu de sa jouissance. » p. 10
Jacques-Alain Miller
« Que tout être vivant se dénomme comme trique, c’est ce qu’un certain nombre
d’études anatomiques (…) confirme. Le tore se présente comme ayant deux
trous (…) il en va de même pour le corps. » p. 14
LE CORPS PARLANT
3.
Les aphorismes de
Jacques-Alain Miller
1994 – 2014
« Les prisons de la jouissance » (Conférence inaugurale des IIIe
Journées de l’EOL « Images et regards » 1994), La Cause freudienne
N°69, 2008
Le sujet, c’est un sujet dans un corps
« Premièrement, le dernier enseignement de Lacan rend sa dignité à l’imaginaire
et en fait l’égal du symbolique et du réel. (…) Le second point (…) c’est
que Lacan a commencé avec l’imaginaire, qu’il a repensé et reformulé le moi
freudien à partir de la relation du sujet à l’image spéculaire, mais le sujet est ici
un individu, c’est un sujet dans un corps. De manière telle que dans les mains
de Lacan, le stade du miroir illustre les pouvoirs de l’image, tantôt de l’image de
soi, tantôt de l’image de l’autre. (…) Dans le cours de son enseignement, s’il a
bien resitué cette référence, il ne l’a jamais abandonnée. » p. 114-115
L’imaginaire c’est le corps
« La Gestalt en jeu dans le supposé stade du miroir est la forme du corps. Dans
notre considération théorique, à partir de Lacan, le corps est essentiellement
une forme. Il s’agit non seulement de la forme du corps comme distinct de
l’organisme en tant qu’il n’est pas un réel biologique mais bien une forme.
De telle sorte que cela impliquerait, depuis le début de l’enseignement de
Lacan, que le corps est imaginaire. Finalement au moment de son dernier
enseignement, Lacan viendra à formuler que l’imaginaire c’est le corps. »
p. 115
192
193
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
La jouissance est impensable sans le corps
« Dire que le corps est une forme, que le corps est imaginaire, que l’imaginaire
est le corps, a de l’importance, (…) en tant que la jouissance – catégorie
populaire, catégorie stimulante – est impensable sans le corps. Comme le dit
Lacan, il appartient au corps seulement de jouir ou de ne pas jouir. » p. 115
La jouissance en tant qu’associée au corps est liée à l’imaginaire
« Dans la dernière partie de son enseignement nous trouvons tant et plus ce mot
de jouissance. Mais dans la partie classique où la trouver, où la situer ? Il est peu
fait mention de ce terme dans les Ecrits de Lacan, mais pensez au commentaire
de Lacan sur le cas Schreber. On le trouve précisément au moment où Lacan
parle de la jouissance narcissique que tire Schreber de son image, et avant, dans
le texte même de sa thèse du stade du miroir, en 1948, on trouve cette notion
de jouissance un peu dissimulée quand Lacan parle de la « jubilation du sujet »,
c’est-à-dire que le sujet se réjouit de sa relation à l’image spéculaire. (…) Ainsi la
jouissance est en tant qu’associée au corps est liée à l’imaginaire. » p. 116
Nous trouvons des images qui emprisonnent la jouissance du sujet
« Nous trouvons dans l’expérience analytique ces images inoubliables qui ne
peuvent s’effacer (…) ces images qui paraissent contenir la jouissance, qui la
retiennent, qui emprisonnent la jouissance du sujet. » p. 116
Le plus important, c’est ce qui ne peut pas se voir
« L’imaginaire postsymbolique est très différent de l’imaginaire présymbolique
d’avant l’introduction de ce registre. Comment se transforme le concept
d’imaginaire une fois introduit celui du symbolique ? En quelque chose de très
précis. Le plus important c’est ce qui ne peut pas se voir. » p. 116-117
« L’image du corps en psychanalyse » (Conférence de clôture des VIIIe
Journées de psychanalyse en Andalousie, Grenade, 1995), La Cause
freudienne N°68, 2008
« Le corps de l’autre, qui est une image, est d’avant le corps propre. » p.
94
« Le corps s’introduit dans le champ de la jouissance par l’image du corps des
autres.
Ce n’est pas par l’image du corps propre que le corps s’introduit dans le champ
de la jouissance, mais par l’image du corps des autres. » p. 94
194
Jacques-Alain Miller
LE CORPS PARLANT
Le corps de l’enfant est objet a
« Lacan donne raison au marquis de Sade quand celui-ci énonce qu’on peut
jouir seulement d’une partie du corps de l’autre. Mais ce n’est pas la vérité du
corps de l’enfant ; concernant l’enfant, on peut jouir de son corps en totalité. Et
pour lui, nous pouvons dire que son corps, dans sa totalité, est objet petit a. »
p. 95
Nous faisons la différence entre la jouissance du corps comme tel et la
jouissance phallique
« Dans cette mesure nous faisons la différence entre la jouissance du corps
comme tel et la jouissance phallique – la jouissance du phallus -, qui est situable,
cernable, close sur elle-même ; c’est une jouissance qui est réellement le privilège
d’un organe déterminé. Ainsi, nous faisons une distinction, dans la psychanalyse,
entre le corps livré à la jouissance dans sa totalité et la concentration libidinale
sur l’organe. » p. 95
La jouissance phallique est hors du corps
« La jouissance phallique est hors du corps, (…) elle fait exploser l’écran de
l’imaginaire corporel » p. 95
« La jouissance du corps semble être asexuée. » p.
96
La prééminence de l’image du corps propre vient cacher un manque
essentiel
« Cette prééminence de l’image du corps propre est un trait de l’espèce humaine.
(…) On ne peut pas comprendre le privilège spécifique de cette image,
l’importance qu’elle a chez les êtres humains, sans supposer qu’elle vient cacher
un manque essentiel. » p. 96
Le corps propre s’expérimente en déficit
« (…) on peut dire que référé à cette image, comparée à la forme visuelle
intégrée, le corps propre s’expérimente en déficit. » p. 97
« Le lieu que l’Autre occupe se personnifie dans l’image du corps. » p.
97
Il y a d’abord l’intérêt pour l’image du corps propre et la castration
s’introduit seulement après
« Dans le Séminaire IV, Lacan ajoute qu’en effet, dans le stade du miroir, il n’y
a pas seulement la jubilation mais que la dépression s’introduit également. C’est
dire que la signification qui s’introduit à partir de l’image spéculaire, loin d’être
stable, est une signification vacillante. Et ici, ce qui apparaît comme fortuit,
comme cause accidentelle, c’est l’image du corps. Mais ceci est une version
195
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« brute » pour ainsi dire, du « moins » qu’il faut introduire pour expliquer le
privilège de l’image du corps propre chez l’être humain (…). Sans développer
davantage, je dirai ici que la version plus complexe de ce « moins » premier n’est
pas chez Lacan le déficit organique, mais que c’est la castration. (…) dans l’axe
diachronique (…) il apparaît qu’il y a d’abord l’intérêt pour l’image du corps
propre et que la castration s’introduit seulement après, sur l’axe temporel. »
p. 97
« C’est sur l’image du corps de l’autre que Freud écrit la castration » p.
98
Le support fondamental des images du corps des autres et du corps propre
est le Nom-du-Père
« C’est dire que le support fondamental des images du corps des autres et du
corps propre est le Nom-du-Père. (…) Comme contre-exemple, nous voyons
les dérangements perceptifs dans les psychoses. Quand nous prenons le cas de
Schreber, nous voyons que, quand pour lui la libido se retire du monde, l’image
des autres se délibidinalise et il ne perçoit plus que des « ombres d’hommes ».
(…) Et quand dans un mouvement inverse, l la libido envahit l’image, nous
voyons en lui son extrême jouissance narcissique. Après avoir expérimenté le
retrait de la libido des images des autres, nous observons la concentration de
libido dans l’image du corps propre, et son image est alors envahie, pour le dire
ainsi, de libido non castrée. Pour cette même raison, il perçoit l’image du corps
propre comme féminin, comme doté d’une jouissance qui ne se réduit pas à la
jouissance phallique, d’une jouissance qui l’envahit totalement. » p. 99
L’image du corps peut fonctionner comme un signifiant
« Evidemment nous observons aussi quelque chose de ces phénomènes dans
l’hystérie, en tant que pour nous le sujet hystérique, en tant que pour nous
le sujet hystérique est par excellence une faille, un manque de signifiant
représentatif dans l’Autre. C’est pourquoi l’image du corps propre peut
fonctionner et avoir une importance maximale comme bouchon du manque de
signifiant du sujet. Cette formule de référence nous permet d’ouvrir ce chemin
suivant lequel l’image du corps peut fonctionner comme un signifiant. »
p. 99
Dans l’hystérie, le sujet se fait représenter dans l’Autre par l’image de son
corps propre
« Pour comprendre la place distinguée que tient l’image du corps propre dans
l’hystérie, nous pourrions dire que le sujet se fait représenter dans l’Autre par
l’image de son corps propre, de telle manière que cette image et sa manipulation
196
Jacques-Alain Miller
LE CORPS PARLANT
fonctionnent comme un message à l’Autre, et, à la fois, dépendent du message
reçu de l’Autre. » p. 99
Dans le surmoi des forces armées, il y a un pouvoir de suggestion sur
l’image du corps
« Dans toute une catégorie de cas de névrose obsessionnelle nous pouvons
observer le soin extrême de l’image du corps propre, au point qu’elle apparaît
parfois totalement signifiantisée et traduit dans l’imaginaire le domaine du
grand Autre, comme si elle fixait les traits obligatoires de l’image que le sujet
doit donner de son corps. On notera, par exemple, le soin que toutes les forces
armées du monde apportent à l’image de leurs soldats. (…) On pourrait se dire
que dans le surmoi des forces armées il y a un « prenez soin de ! » et un pouvoir
de suggestion sur l’image du corps. » p. 99
L’image du corps peut prendre la valeur d’un objet excrémentiel
« Dans la névrose obsessionnelle et dans la névrose en général nous pouvons
voir au contraire, que l’image du corps peut prendre la valeur d’un objet
excrémentiel, quand ce qui se montre est une négligence provocatrice de cette
image. » p. 99
L’image du corps traduit toujours la relation du sujet avec la castration
« J’ai dit qu’elle pouvait prendre un valeur de signifiant, de signifiant chiffré,
étant la limite de toutes les figures sociales qui impliquent que l’on donne une
image totalement standardisée ; mais elle peut aussi avoir une valeur d’objet.
On pourrait se demande si nous ne voyons pas quelque chose comme ça dans
l’anorexie (…). Dans la boulimie, (…) l’image du corps est sacrifiée, (…)
l’amour narcissique est sacrifiée à la jouissance orale. (…) l’image du corps
traduit toujours (…) la relation du sujet avec la castration. Le secret de l’image,
le secret du champ visuel, c’est la castration. » p. 100
L’image idéalisé du corps est celle d’un corps où il n’y a ni jouissance, ni
castration
« La fascination, l’enchantement de la représentation idéalisée du corps dans les
sculptures grecques nous offrent une image d’homéostase parfaite, c’est-à-dire
l’image d’un corps sans jouissance et sans castration. (…) L’image idéalisé du
corps est celle d’un corps où il n’y a ni jouissance, ni castration. » p. 100
Le christianisme nous fait adorer quelque chose de la castration
« Nous avons aussi les représentations du Christ adulte sur la croix, images
d’un corps torturé qui aurait été pour les Grecs un motif d’horreur et de
méconnaissance absolue. C’est ce que Nietzsche considérait comme le
197
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Sur le chemin de l’art a surgi le désir de tuer l’image du corps
« Dans l’histoire de l’art nous avons même connu le moment de l’anorexie
imaginaire. Sur le chemin de l’art, a surgi le désir de tuer l’image du corps, et
même celui de tuer toutes les images, de produire des images dépourvues de
sens, de déconnecter le sens et l’image, alors qu’ils avaient toujours été liés. »
p. 101
Nous pâtissons d’une absorption intense d’images de corps
« Et si on admettait qu’il y a un moment d’anorexie imaginaire dans l’histoire de
l’art, pourquoi ne pas admettre qu’il y a aussi un autre moment dans lequel nous
sommes, dominé par une certaine boulimie imaginaire ? Nous pâtissons d’une
absorption intense, accélérée d’images. D’images de corps. » p. 101
« Les six paradigmes de la jouissance », l’orientation lacanienne III,
1 : « L’expérience du réel dans la cure analytique » (leçons des 24, 31
mars et 7 avril 1999), La Cause freudienne N° 43, 1999
L’imaginarisation de la jouissance :
Le non-rapport entre l’imaginaire et le symbolique se passe de tout référence
à la jouissance du corps
« Le geste inaugural, libérateur, de Lacan a été accompli sous la bannière du
non-rapport de l’imaginaire et du symbolique. Il a dégagé de façon inoubliable
l’ordre symbolique dans son autonomie et a enseigné aux analystes qu’il y avait
quelque chose comme la logique, se passant de toute référence à la jouissance du
corps, pour établir ses lois, pour répondre à des principes et pour conditionner
aussi bien ce que tout un chacun peut dire. Ce mot d’ordre de la pureté du
symbolique ne veut dire qu’une seule chose : son non-rapport avec l’imaginaire
comme lieu de ce qui, chez Freud, s’appelle la libido. » p. 7-10
La signifiantisation de la jouissance :
Le fantasme le corps vivant par l’insertion de petit a
« La jouissance n’est pour une part rien d’autre que le désir, qui est en même
temps désir mort. Ce qui fait d’autant plus le devoir du second terme où Lacan
inscrit la jouissance, à savoir le fantasme qui contracte tout ce que la jouissance
comporte de vie. Ce fantasme comporte la vie, le corps vivant par l’insertion de
198
Jacques-Alain Miller
scandale du christianisme qui nous fait don, pour que nous l’adorions, d’une
représentation du corps mutilé, du corps en souffrance, là où les Grecs nous
offraient la représentation d’un corps parfait et serein, sans castration. Comme si
le christianisme nous faisait adorer quelque chose de la castration. » p. 101
LE CORPS PARLANT
petit a comme image incluse dans une structure signifiante, image de jouissance
captée dans le symbolique. »
La jouissance normale :
L’inconscient structuré comme l’appareil du corps, comme une zone
érogène avec un bord qui s’ouvre et qui se ferme
« Dans le Séminaire XI, on commence par le corps fragmenté des pulsions
partielles, par les zones érogènes qui sont autonomes et qui ne pensent qu’à leur
bien chacune, et puis, au contraire, s’il y a une intégration, elle se réalise grâce à
la jouissance pulsionnelle qui est une jouissance automatique atteinte en suivant
le chemin normal de la pulsion, son aller et retour, et sans transgression. »
« Il (Lacan) a structuré l’inconscient de la même façon que quelque chose dans
l’appareil du corps, de la même façon qu’une zone érogène, comme un bord qui
s’ouvre et qui se ferme. Il modèle là la jouissance sur le sujet lui-même. »
Le corps dans la logique des opérations d’aliénation et de séparation
« L’opération de l’aliénation ne nous délivre qu’un sujet du signifiant, réduit à un
manque de signifiant, c’est-à-dire qui n’a pas d’autre substance que l’ensemble
vide. On peut chercher à tâtons où se trouve là une substance qui serait
susceptible de jouir, on n’en trouve aucune. Pour pouvoir présenter l’opération
de la séparation et l’introduction d’un objet petit a comme venant répondre au
manque de signifiant, il faut discrètement substituer au sujet le corps vivant, le
corps sexué. Il faut encore introduire les propriétés du corps sexué, en particulier
sa mortalité, son rapport à l’Autre sexe, son individualité, et par là même ce qui
est traduit par Lacan sous les espèces d’une perte de vie que comporte comme
elle l’existence du corps du sujet. On peut alors introduire les objets de la
pulsion comme réparant, comblant cette perte de vie.» p. 14-18
La jouissance discursive :
Le point d’insertion de l’appareil signifiant, c’est la jouissance
« Nous avons ici une détermination de ce qu’est l’être préalable à la mise en
marche du système signifiant, et sous la forme la plus précise. L’être préalable est
un être de jouissance, c’est-à-dire un corps affecté de jouissance. C’est pourquoi
Lacan dit en toutes lettres dans son Séminaire de L’envers que le point d’insertion
de l’appareil signifiant, c’est la jouissance. Ce point d’insertion n’était jamais
mentionné comme tel jusqu’alors et obligeait à une subreptice substitution du
corps au sujet, parce que nous avions avant un fonctionnement en quelque sorte
autonome, fermé sur soi-même, de l’ordre symbolique. »
199
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Dans ce Séminaire, (Séminaire XVII) l’accent est mis à la fois sur le signifiant
comme marque de jouissance – il peut dire que le signifiant-maître commémore
une irruption de jouissance – et en même temps il introduit une perte de
jouissance et il produit un supplément de jouissance. Par une analogie qui lui
fait emprunter à la thermodynamique le terme d’entropie, il dit – L’entropie
fait prendre corps au plus-de-jouir à récupérer. Et, ailleurs dans le Séminaire – Le
plus-de-jouir prend corps d’une perte. Dès lors, l’accès à la jouissance ne se fait
pas essentiellement par la voie de la transgression, mais par la voie de l’entropie,
de la déperdition produite par le signifiant. C’est ainsi que Lacan peut dire
du savoir qu’il est moyen de jouissance. On ne peut pas mieux renoncer à
l’autonomie de l’ordre symbolique. Il est moyen de jouissance en un double
sens, en tant qu’il a effet de manque et qu’il produit le supplément, le plus-dejouir. »
« Pour en rendre compte, il faut en effet introduire une division de plus en
plus apparente entre le corps et sa jouissance, puisque c’est finalement dans
les produits de l’industrie et de la culture que le corps trouve à alimenter sa
jouissance et son manque-à- jouir, ou encore impliquer comme le fait Lacan
dans L’envers de la psychanalyse, une section entre la libido et la nature. Il faut
compléter en disant que c’est précisément cette section de la libido et de la
nature qui introduit une connexion entre la libido et la culture. » p. 18-24
Le non-rapport
Il y a jouissance en tant que propriété d’un corps vivant
« Son point d’arrivée, c’est – La psychanalyse ne fonctionne pas, et de se demander
pourquoi elle ne fonctionne pas. C’est tout à fait autre chose de partir de
l’évidence de E y a jouissance. Il y a jouissance en tant que propriété d’un corps
vivant, c’est-à-dire d’une définition qui rapporte la jouissance uniquement au
corps vivant. Il n’y a de psychanalyse que d’un corps vivant, et sans doute – et
qui parle. Et le et qui parle est encore, pour Lacan, dans ce Séminaire, ce qui
mérite d’être qualifié de mystère –il achève ainsi une de ses leçons de cette
année. »
« Autrement dit, le supposé, c’est le par le corps. Vous trouvez cela page 26
– N’est-ce pas là ce que suppose proprement l’expérience psychanalytique,
la substance du corps, à condition qu’elle se définisse seulement de ce qui se
jouit. »
« Il faut même entendre le titre de Encore homophoniquement, comme à
un moment Lacan y invite – En-corps. C’est le corps qui est là en question
200
Jacques-Alain Miller
Le signifiant maître : commémore l’irruption et la perte de jouissance
LE CORPS PARLANT
beaucoup plus que la répétition dont il a parlé dans son Envers de la psychanalyse
dans les noces de la jouissance et du savoir. »
« C’est, premièrement, l’exigence de situer le lieu de la jouissance sans aucun
idéalisme, et à ce moment-là le lieu de la jouissance, comme les cyniques
l’ont aperçu, c’est le corps propre. La démonstration de Lacan, c’est que toute
jouissance effective, toute jouissance matérielle est jouissance Une, c’est-à-dire
jouissance du corps propre. C’est toujours le corps propre qui jouit, par quelque
moyen que ce soit. »
« Une dialectique est évidemment possible entre la jouissance du corps propre
et la jouissance phallique, c’est-à-dire spécialisée, mais si Lacan met l’accent sur
la jouissance phallique, c’est en tant qu’une autre figure de la jouissance Une, de
l’Unejouissance. Il définit cette jouissance phallique comme jouissance de l’idiot,
du solitaire, une jouissance qui s’établit dans le non-rapport à l’Autre. »
« Il y a un corps qui parle. Il y a un corps qui jouit par différents moyens. Le lieu
de la jouissance est toujours le même, le corps. Il peut jouir en se branlant ou
simplement en parlant. Du fait qu’il parle, ce corps n’est pas pour autant lié à
l’Autre. Il n’est qu’attaché à sa jouissance propre, à sa jouissance Une. »
« C’est sur ce fond que se justifie la proposition II n’y a pas de rapport sexuel,
qu’elle devient en quelque sorte inévitable. Il n’y a pas de rapport sexuel veut dire
que la jouissance relève comme telle du régime de l’Un, qu’elle est jouissance
Une, tandis que la jouissance sexuelle, la jouissance du corps de l’Autre sexe, a
ce privilège d’être spécifiée par une impasse, c’est-à-dire par une disjonction et
par un non-rapport. C’est ce qui permet à Lacan de dire que la jouissance ne
convient pas au rapport sexuel. La jouissance comme telle est Une, elle relève de
l’Un, et elle n’établit pas d’elle-même de rapport à l’Autre. Il n’y a pas de rapport
sexuel veut dire que la jouissance est en son fond idiote et solitaire. »
p. 24-29
« Biologie lacanienne et événement de corps », l’orientation
lacanienne III, 1 « L’expérience du réel dans la cure analytique »
(leçons des 12, 19, 26 mai et 2, 9, 16 juin 1999), La Cause freudienne
N°44, 2000
C’est spécialement dans l’hystérie que le défaut d’identification corporelle a
été mis en évidence
« On peut dire encore plus simplement que le sujet, à partir du moment où
il est sujet du signifiant, ne peut s’identifier à son corps, et c’est précisément
de là que procède son affection pour l’image de son corps. L’énorme
201
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Ni imaginaire, ni symbolique, mais vivant, voilà le corps qui est affecté de la
jouissance.
« Le corps vivant, qu’est-ce à dire ? Cela dit qu’il ne s’agit pas seulement du
corps imaginaire, du corps sous la forme de sa forme. Il ne s’agit pas du corps
image, de celui que nous connaissons, auquel nous nous référons parce qu’il est
opératoire dans le stade du miroir, ce corps spéculaire qui double l’organisme.
Il ne s’agit pas non plus du corps symbolique, celui qui à plusieurs reprises fait
venir sous la plume de Lacan la métaphore du blason. Les armoiries sont un
code. Des parties du corps peuvent certes y être représentées, d’ailleurs avec
d’autres éléments naturels, mais elles ont valeur de signifiants. Ce sont des
signifiants imaginaires, des signifiants dont la matière est empruntée à l’image.
Lorsque nous disons « le corps vivant », nous écartons ce corps symbolisé
comme aussi bien le corps image. Ni imaginaire, ni symbolique, mais vivant,
voilà le corps qui est affecté de la jouissance. Rien ne fait obstacle à ce que l’on
situe la jouissance comme un affect du corps. »
La question est de donner son sens à cet adjectif de vivant et aussi bien de saisir
par quel biais, de quelle incidence l’affect de jouissance advient au corps. »
p. 17
« Pour autant que la jouissance passe par le corps, la définition du symptôme
comme événement de corps est inévitable. »
« On admet que symptôme est jouissance, satisfaction substitutive d’une
pulsion, comme dit Freud – son caractère substitutif n’enlève rien à son caractère
authentique, réel, puisque la satisfaction substitutive n’est pas une satisfaction
moindre. Pour autant que le symptôme constitue une jouissance au sens de
satisfaction d’une pulsion, et pour autant que la jouissance passe par le corps,
qu’elle est impensable sans le corps, le corps comme forme ou plutôt comme
modalité, comme mode de la vie, la définition du symptôme comme événement
de corps est inévitable. » p. 24
Le secret de la libido freudienne
« Pour cet anté-Lacan, on trouve dans ce décalage initial le secret de la libido.
Comme il s’exprime, nul besoin de chercher plus loin la source de l’énergie
libidinale, nul doute qu’elle ne provienne de la passion narcissique. Ce que
Freud nous laisse comme guide du moi, comme réservoir de la libido, Lacan
en rend compte par l’insertion, dans le morcellement initial de l’organisme, de
202
Jacques-Alain Miller
boursouflure narcissique, qui est caractéristique de l’espèce, procède de ce défaut
d’identification subjective au corps. C’est spécialement dans l’hystérie que le
défaut d’identification corporelle a été mis en évidence. » p. 13
LE CORPS PARLANT
l’image totalisante du corps qui promeut l’image au centre de la vie psychique
du corps vivant de l’espèce humaine. C’est là qu’il trouve, avant d’être
structuraliste, le secret, la source de la libido freudienne. Il la trouve dans la
discorde, dans la discordance, dans la déhiscence. Cette libido narcissique est
une libido qui est vitale, positive, qui tire en avant le développement, qui est la
forme anticipée de la synthèse du corps, mais qui est en même temps agressive à
l’endroit de l’image. La démonstration que Lacan accomplit au sujet de ce stade
du miroir, c’est une libido qui inclut à la fois les valeurs de vie et de mort qui se
trouvent scindées chez Freud. Rapporter la libido à ce clivage, c’est conjoindre
les valeurs de vie et les valeurs de mort. » p. 27
Des corps malades de la vérité
« L’exception dans le règne de la vie, ce sont les corps habités par le langage, qui
font vraiment tache dans l’animé, les corps de l’espèce humaine. C’est la honte
de la création parce que ce sont des corps malades de la vérité. Ils sont malades
parce que la vérité embrouille. La vérité variable, la vérité qui parle, la vérité
qui change, embrouille le rapport du corps avec le monde et avec le pur réel.
L’homme, les exemplaires de l’espèce humaine ne retrouvent un rapport net et
certain avec le réel que par le biais d’un autre savoir que le savoir du corps, et
qui est le savoir de la science. C’est seulement à devenir sujet de la science qu’il
parvient à ne pas se laisser embrouiller par la vérité et par son corps malade de la
vérité. » p. 40
Refus du corps
« En quoi le corps est-il malade de la vérité dans l’espèce humaine ? La
psychanalyse a commencé par là, par s’intéresser à ces corps-là, aux corps qui
cessent d’obéir au savoir qui est en lui, qui cesse d’obéir au savoir que l’on peut
dire naturel. En effet, le corps est savoir et il obéit. C’est ce que François Jacob
appelle très bien «les algorithmes du vivant». L’idée ou le songe de l’âme traduit
le fait que le corps se présente comme Un et qu’il obéit. C’est pourquoi Lacan
a pu imaginer formuler que l’âme était du côté du manche. C’est l’équivalent
d’un signifiant-maître. La psychanalyse a pu commencer parce qu’elle s’est
souciée précisément de l’hystérie, et ce qui caractérise l’hystérie est que l’on y
rencontre le corps malade de la vérité. Freud l’a exprimé dans les termes du
refoulement et du retour du refoulé. Le corps hystérique est celui qui refuse le
diktat du signifiant-maître, le corps qui affiche son propre morcellement et qui
en quelque façon se sépare des algorithmes, du savoir inscrit dans sa substance.
C’est le phénomène que Freud appelait curieusement complaisance somatique
et que Lacan, dans sa perspective, nomme «refus du corps». C’est un double
refus dont il s’agit là dans le corps hystérique, par le corps hystérique. Cela veut
203
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Des traces qui dérangent le corps
« Peut-être faut-il épiloguer, varier, préciser cette définition de l’événement
de corps. Cette expression est une condensation. Il s’agit en fait toujours
d’événements de discours qui ont laissé des traces dans le corps. Et ces traces
dérangent le corps. Elles y font symptôme, mais seulement pour autant que le
sujet en question soit apte à lire ces traces, à les déchiffrer. Cela a finalement
tendance à se ramener à ce que le sujet puisse penser retrouver les événements
dont ces symptômes se tracent. » p. 44-45
L’affection traçante de la langue sur le corps
« La définition générale de l’événement produisant traces d’affect, c’est ce que
Freud appelle le trauma. C’est le traumatisme en tant qu’il est un facteur devant
lequel les efforts du principe de plaisir échouent, un facteur qui ne peut pas être
liquidé selon la norme du principe de plaisir, c’est-à-dire qui met en échec la
régulation du principe de plaisir. L’événement fondateur de la trace d’affect est
un événement qui entretient un déséquilibre permanent, qui entretient dans le
corps, dans la psyché, un excès d’excitation qui ne se laisse pas résorber. Nous
avons là la définition générale de l’événement traumatique, celui qui laissera des
traces dans la vie subséquente du parlêtre. Le traumatisme au sens de Lacan, le
noyau de l’événement traumatique n’est pas rapportable à un accident, ou ça
l’est toujours, mais la possibilité même de l’accident qui laisse des traces d’affect
au sens étendu que j’ai donné, la possibilité même de l’accident contingent
qui se produit nécessairement toujours, mais tel ou tel, ouvre l’incidence de la
langue sur l’être parlant, et précisément l’incidence de la langue sur son corps.
L’affection essentielle, c’est l’affection traçante de la langue sur le corps. Cela
veut dire que ce n’est pas la séduction, ce n’est pas la menace de castration, ce
n’est pas la perte d’amour, ce n’est pas l’observation du coït parental, ce n’est pas
l’Œdipe qui est là le principe de l’événement fondamental, traceur d’affect, mais
c’est la relation à la langue. » p. 47
Corporisation, envers de la signifiantisation
« La seconde structure, que l’on pourrait appeler la corporisation, est en quelque
sorte l’envers de la signifiantisation. C’est bien plutôt le signifiant entrant dans
le corps. C’est une structure tout à fait différente de la première. La première
est élévation, sublimation de la chose vers le signifiant. Or, la corporisation est
au contraire le signifiant saisi comme affectant le corps de l’être parlant, et le
204
Jacques-Alain Miller
dire – premièrement, que le corps refuse d’obéir à l’âme, au savoir naturel, refuse
de servir la finalité de son autoconservation – deuxièmement, que le sujet de ce
corps-là refuse le corps de l’Autre. »
LE CORPS PARLANT
signifiant devenant corps, morcelant la jouissance du corps et en faisant saillir le
plus-de-jouir, découpant le corps, mais jusqu’à en faire sourdre la jouissance, le
plus-de-jouir qui y est virtuel. » p. 57
L’affect, ce qui dérange les fonctions du corps vivant
« Le savoir dans le corps, son effet propre, c’est ce que Lacan appelle affect, en
un sens sans doute étendu, généralisé. Il appelle affect, à partir du Séminaire XX,
l’effet corporel du signifiant, c’est-à-dire non pas son effet sémantique, qui est le
signifié, non pas son effet de sujet supposé, c’est-à-dire non pas tous les effets de
vérité du signifiant, mais ses effets de jouissance. C’est ce qu’il rassemble sous le
terme d’affect, comme tel dérangeant les fonctions du corps vivant. » p. 58
L’orientation lacanienne III, 3 « Le lieu et le lien » (2000-2001)
Inédit, La Cause freudienne N°50, 2002
D’avoir un corps, on a un monde
Leçon du 6 décembre 2000 « Le monde tourne, le monde tourne
autour de vous, c’est ce qu’il y a de plus naturel, et pour que le monde tourne
autour de vous il n’est pas besoin d’être mégalomane, il suffit d’avoir un corps,
d’avoir un corps on a un monde. (…) Il y a lien, corrélation, du corps et du
monde, et c’est ce lien qui constitue comme tel l’imaginaire. »
Le corps a un lien à la part excédante de jouissance
Leçon du 6 décembre 2000 « Le corps a bien un lien au réel
parce que ce lien se trouve dans l’instance de la jouissance. Et précisément, on
distingue deux jouissances, deux parts, la part homéostatique, qu’on appelle en
français plaisir, et la part excédante, qui fait que le corps garde un lien, a un lien
avec une partie hors, une partie excédante. »
Le corps vivant qui parle
Leçon du 28 mars 2001 « Dans le dernier enseignement de Lacan
– au moins c’est là que ça devient manifeste –, le symbolique est confronté
au vivant, au corps vivant. Ce n’est pas anodin ces expressions, le vivant qui
parle. Ça ramène, ça centre le point d’application du symbolique sur le corps
vivant où le symbolique apporte des discordances. Ce qui devient la référence,
si je puis dire, c’est le vivant, le bios, la vie, alors que le point de départ de
son enseignement c’est bien plutôt le social. (…) le corps individuel, devient
référence à la place du corps social. »
Disjonction entre le corps imaginaire et le vivant réel dans le nœud
borroméen
205
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
tripartition de Lacan, RSI, le corps est affecté à l’imaginaire, alors que la vie, cela
peut être un nom du réel. Dès lors, inscrivons une disjonction au moins possible
entre le corps et le vivant. Et je dirais: de là, le nœud, de là apparaît le nœud
borroméen. »
L’être et les trois dimensions
Leçon du 16 mai 2001, La Cause freudienne N°50 « Le parlêtre est
une autre façon de dire le sujet. L’être est toujours du côté du symbolique. On
s’attribue l’être. Il y a l’être aussi du côté de l’imaginaire, c’est quand on le repère
sur l’unité du corps, et là on parle du corps parlant et de son mystère. Mais l’être
s’éclipse devant le réel. C’est ce dont il est question dans ce dernier enseignement
de Lacan, qui décide alors d’opérer d’emblée avec les trois dimensions (…) dans
son architecture nodale. » p. 25
La jouissance du corps propre est opaque
Leçon du 6 juin 2001 « La jouissance exclut le sens et c’est en cela
qu’on peut la dire opaque. Cela rend beaucoup plus intéressante l’opération
de la psychanalyse. La jouissance du corps propre est opaque, parce que cela
veut dire que l’opération propre à la psychanalyse est un forçage qui rapporte la
jouissance au sens pour la résoudre – résolution ici voulant dire dénouement. »
Le mental est le rapport difficile du corps et du symbolique
Leçon du 6 juin 2001 « Ce que Lacan propose avec les nœuds, c’est
le ravalement de la pensée. Et il met la pensée, mais aussi l’inconscient, à rien de
plus qu’au niveau d’un rapport difficile du corps et du symbolique, ce rapport
difficile qu’il appelle le mental. »
L’inconscient est une élucubration de savoir sur la débilité mentale
Leçon du 6 juin 2001 « Il met l’inconscient au niveau du mental, au
niveau de la débilité qui affecte ce mental. Dans l’analyse on n’a pas seulement
affaire au symbolique, au logique pur, mais aussi au corps et au réel comme
exclu du sens. (…) Et c’est pourquoi Lacan peut proposer cette catégorie
nouvelle, la débilité mentale, comme plus radicale que l’inconscient freudien.
La débilité mentale veut dire que le parlêtre est frappé de dysharmonie avec le
symbolique, le réel et l’imaginaire. (…) tout ça tend à dire que l’inconscient
freudien est une élucubration de savoir sur la débilité mentale.»
« Introduction à la lecture du Séminaire L’angoisse », l’orientation
lacanienne, III, 6 (leçons des 28 avril, 5 et 12 mai et 2, 9, 16 juin
206
Jacques-Alain Miller
Leçon du 2 mai 2001 « Le corps, ce n’est pas le réel. Dans la
LE CORPS PARLANT
2004), La Cause freudienne N°59, 2005
La jouissance a comme lieu le corps propre, alors que le désir est relation à
l’Autre.
« Pourquoi Lacan s’attache-t-il avec insistance, dans ce Séminaire, à laisser petit
a du côté du sujet, de l’autre côté de l’Autre ? Parce que petit a est en quelque
sorte une expression, une transformation de la jouissance du corps propre, de
la jouissance dans son statut autistique, fermé – il l’avait rendue d’autant plus
fermée en l’appelant du terme freudien de Das Ding -, tant que le désir est
relation à l’Autre. Il y a donc une antinomie, une béance, entre jouissance et
désir. La jouissance, si l’on prend les choses simplement, a comme lieu le corps
propre, alors que le désir est relation à l’Autre. C’est encore cette antinomie qui
inspirera, dix ans plus tard, l’élaboration de Lacan dans le Séminaire Encore. »
p. 76
« Corréler la jouissance à une totalité unitaire, à un corps de jouissance, cela
signifie qu’ici l’Autre n’entre pas en jeu d’emblée. » p. 78
La sépartition
« C’est pourquoi Lacan est conduit à détailler les séparations anatomiques de
l’objet, les séparations naturelles de l’objet prélevé sur le corps, et précisément
sans l’intervention d’un agent qui serait l’Autre. C’est ce qu’il appelle, terme
repris de Freud, la séparation. Non pas la castration, mais la séparation des
objets, la séparation des organes. Il parle même à un moment de la sépartition,
pour indiquer qu’il s’agit comme d’une partition à l’intérieur qui concerne le
sujet de l’organisme. Là, la séparation d’un organe a son paradigme dans l’objet
anal. C’est pourquoi c’est dans un second temps que se pose la question de la
subjectivation de l’objet et de son inscription dans l’Autre. Ce qui est là objet
petit a est déjà qualifié comme ce qu’il y a de plus moi-même dans l’extérieur,
parce qu’il a été de moi coupé, et c’est ce dont on a l’écho dans la dernière leçon
du Séminaire XI. » p. 79
L’objet séparé du corps impliqué dans la constitution du sujet
« C’est le corps des zones érogènes, c’est-à-dire des zones de bord, ces zones
que Freud a d’abord mises en fonction dans ses Trois essais sur la théorie de la
sexualité, c’est ce corps-là qui revient. On oublie la forme, puisque le corps dont
il s’agit est visé jusqu’à son statut fœtal, et pour les meilleures raisons du monde,
puisque l’angoisse de la naissance a été, dans le discours analytique, accréditée.
C’est un corps dont j’irais jusqu’à dire que l’on n’en connaît pas la forme, on
en ignore la limite. Il y a là, en fait, dans cette quatrième partie, quelque chose
qui s’accomplit dans l’enseignement de Lacan. On ne connaissait jusqu’alors
207
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’organisme est montré comme empiétant sur le corps de l’Autre
« J’ai dit : c’est un corps dont on ignore la limite. C’est même un enjeu
constant de cette quatrième partie. Où est la limite du corps érogène ? Jusqu’où
va le corps comme organisme ? Dans ce qu’en fait valoir Lacan, l’organisme
comprend tout ce qui permet au corps d’être vivant, c’est-à-dire inclut ce qui
le sustente, le nourrit et donc, l’organisme est montré comme empiétant sur
le corps de l’Autre. Ce qui est impliqué d’une phrase rapide dans « Position de
l’inconscient » : « L’organisme dont les limites vont au-delà du corps. ». C’est ce
qui est là montré. Et c’est pourquoi dans « Le stade du miroir » et ses variations,
nous avons toujours une structure de face à face, le corps propre et son image
comme image de l’autre. Mais s’agissant de cet organisme érogène, la structure
du face à face est remplacée, cède la place à la structure de l’empiétement, de
l’ectopie. C’est à cette occasion que l’on voit surgir pour la première fois, au
niveau de cette physiologie, les cercles d’Euler qui se croisent, et où il s’agit
en effet de savoir où commence et où finit ce qui est du sujet et ce qui est de
l’Autre. » p. 86-87
« Pièces détachées » (2004-2005), L’orientation lacanienne III, 7
(leçons des 17 et 24 novembre , 1er, 8 et 15 décembre 2004), La
Cause freudienne N°60 et N°61, 2005
Le statut primitif du corps est d’être en pièces détachées
Leçon du 17 novembre 2004 « Du point de vue psychanalytique
(…), le corps est comparable à un amas de pièces détachées. On ne s’en aperçoit
pas tant qu’on reste captif de sa forme, tant que la prégnance de la forme impose
l’idée de son unité. (…) le statut primitif du corps est d’être en pièces détachées,
contrairement à l’évidence du visible. » p. 158
L’unité du corps est un mirage dont il faut se déprendre
Leçon du 17 novembre 2004 « Dans le Séminaire Encore, on
voit revenir à plusieurs reprises cette interrogation sur l’unité du corps, son
indivision, mirage dont il faut se déprendre (…) » p. 158
208
Jacques-Alain Miller
chez Lacan que le corps comme essentiellement impliqué dans la formation du
moi. Qu’est-ce qui était impliqué dans la constitution du sujet ? Le signifiant.
Et apparaît là ce qui était évidemment annoncé précédemment dans le rapport
à l’objet partiel et du désir : le corps, et plus précisément l’objet séparé du corps,
impliqué dans la constitution du sujet. Le corps fait son entrée en scène sous
les espèces de l’objet petit a, dans la constitution du sujet de l’inconscient luimême. » p. 86
LE CORPS PARLANT
Dans la schizophrénie, il y a échec de l’unification imaginaire du corps
Leçon du 17 novembre 2004 « Les organes sont autant de pièces
détachées et comme on voit, dans la schizophrénie, le sujet a à leur trouver une
fonction. On y voit se déployer le fait du morcellement quand l’opération de
l’unification imaginaire n’a pas marché. » p. 158-159
Le fondamental du nœud borroméen est la consistance du corps
Leçon du 24 novembre 2004 « Dans le Séminaire du Sinthome
vous trouverez, y compris l’image, la représentation du nœud, tout ce qu’il faut
pour montrer que cela suffit comme tel, qu’il suffit de trois, disposés de façon
borroméenne, pour que ça tienne ensemble, et cela suffit pour faire le support
du sujet. (…) Dans cette perspective qui est celle de la consistance et non pas
du système, le fondamental n’est pas l’ordre symbolique – Lacan prend luimême à revers toute sa construction –, mais la consistance du corps. D’où, la
valeur nouvelle que prend cette référence au corps. Ce n’est pas simplement une
conversion au concret que de donner cette valeur-là. » p. 168-169
Adoration du corps
Leçon du 24 novembre 2004 « Le corps, c’est ce que le droit
décerne au sujet comme sa propriété. Habeas corpus – « ton corps est à toi ». Elle
le décerne au sujet de droit qui, du coup, se prend pour une âme. Il se prend
pour une âme quand il s’excepte du monde et qu’il éprouve qu’il l’endure,
c’est-à-dire qu’il en souffre. Du coup, on peut apercevoir en court-circuit, sur
les traces de Lacan, que ce que révèle d’abord une analyse, c’est l’adoration que
celui qui parle a pour son corps, dans la mesure où il y trouve sa consistance,
consistance imaginaire. » p. 169
La question de l’amour comme choix d’un autre corps
Leçon du 24 novembre 2004 « Cette consistance pourtant est
insuffisante, dans la mesure où il y a l’amour ou que se pose la question de
l’amour, c’est-à-dire de faire le choix d’un autre corps. (…) Pourquoi l’amour ?
(…) On peut le rapporter d’abord à ce qu’a d’insuffisant la consistance du corps
propre, mais l’amour est aussi une façon, dans la perspective du sinthome, de
faire sens d’une jouissance qui est toujours parasitaire. » p. 169
La jouissance du corps de l’Autre ne suffit pas pour nouer le nœud
Leçon du 24 novembre 2004 « Qu’est-ce que ce parasite de la
jouissance ? La jouissance n’est pas dans le corps comme consistance, quand la
consistance est articulée à sa forme, elle n’est pas dans le symbolique comme
trou – ce parasite vient en plus entre le corps et le symbolique –, et, si l’on veut,
209
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Lacan spinoziste
Leçon du 1er décembre 2004 « (…) dans le Séminaire du
Sinthome, Lacan est spinoziste – spinoziste du livre II – en ce que la pensée
pour lui est indissolublement liée au corps et à ce qui affecte ce corps. (…)
à ceci près que ce qui affecte le corps ne se laisse pas comprendre comme un
mode de l’étendue, ainsi que le formule Spinoza dans son cartésianisme, mais
est à entendre comme un mode de la jouissance. C’est par là que l’expérience
psychanalytique, dans la perspective de Lacan, oblige à décerner au corps une
autre substance dont il est le mode, la substance jouissante, pour le dire à la
cartésienne. (…) » p. 132
Par le seul fait que le corps jouit, la pensée rate
Leçon du 1er décembre 2004 « Penser est toujours penser le
corps en tant qu’il jouit, et par le seul fait que le corps jouit, la pensée rate. Le
ratage n’est pas un accident mais, chez le dernier Lacan, un concept qui fait la
paire avec la jouissance. La jouissance est du corps comme le ratage est de la
pensée. Le ratage s’ensuit du corps et de sa jouissance. La jouissance du corps,
comme telle, rate la sexualité. (…) Tout ce qui est affaire avec le sexe, dit Lacan,
est toujours raté. » p. 133
Le ratage fatal de la pensée, Lacan l’appelle débilité
Leçon du 1er décembre 2004 « La pensée, y compris cette sorte
de pensée que Freud appelle inconscient, a affaire avec le corps, toujours, et par là
avec sa sexuation. Et c’est pourquoi la pensée, fut-elle celle d’un professeur, rate
toujours ce qui est en question. (…) tout ratage est sexuel. (…) Le ratage fatal de
la pensée, Lacan l’appelle débilité. » p. 133
L’escabeau est une moquerie concernant le beau
Leçon du 1er décembre 2004 « L’escabeau, voilà le concept
inédit que Lacan introduit à partir de James Joyce. C’est une moquerie
concernant le beau, bien sûr, une version sardonique de l’esthétique. »
p. 135
L’escabeau, c’est l’ambition de Joyce, forgé à partir du sinthome
Leçon du 1er décembre 2004 « L’escabeau, c’est ce dont Joyce se
Jacques-Alain Miller
elle les noue. C’est pourquoi Lacan peut parler du parasite de la jouissance
comme du réel. Quelle est la valeur de signalétique du cas Joyce ? (…) C’est que
la jouissance du corps de l’Autre ne suffit pas pour nouer le nœud, il faut que s’y
ajoute la jouissance du symptôme. » p. 169-170
LE CORPS PARLANT
décomposition de son corps. Il s’agit de forger un escabeau et le forger à partir
de l’affect du corps, cet affect du corps auquel fait référence Spinoza mais que
Lacan appelle de son nom freudien « le symptôme », et de son nom freudien
modifié le sinthome. C’est ça l’escabeau, c’est l’ambition de Joyce. Qu’elle est
cette ambition ? De faire de ce qui l’affecte lui, incomparable avec personne, de
ce qui affecte son corps, de ce qui fait événement dans son corps, de faire une
éternité. » p. 135
Porter l’événement de corps jusqu’à une éternité
Leçon du 1er décembre 2004 « Le privilège de Joyce, s’il y en
a un, c’est qu’il a fabriqué cet escabeau avec son dire. Il est exemplaire pour
la psychanalyse. C’est en quoi, Lacan peut dire qu’il a donné de l’escabeau la
formule générale, qu’il lui a donné une consistance logique, en n’y renonçant
pas mais en allant jusqu’au bout : du traumatisme initial subi de la langue, de
l’événement de corps qui en découle, le porter jusqu’à une sorte d’éternité. Et
c’est en cela que Lacan peut dire que Joyce s’accomplit en tant que sinthome,
sans reculer devant l’exil, que cet extrême comporte, que sa fidélité à sa
jouissance comporte. » p. 137
Le réel, c’est le mystère du corps parlant, c’est le mystère de l’inconscient
Leçon du 8 décembre 2004 « C’est une définition du réel. Je
cite : « Le réel, dirai-je, c’est le mystère du corps parlant, c’est le mystère de
l’inconscient. » (Encore, p. 118) (…) Que dit cette phrase que j’ai citée ?
Elle dit que le corps parlant, c’est l’inconscient, et que le corps parlant en tant
que l’inconscient, c’est le réel et que le prix de cette définition, c’est qu’il y a là
du mystère. Soyons plus simple encore. Il y a là trois termes : le réel, le corps
parlant, l’inconscient. Et ces trois termes sont dits identiques les uns aux autres
moyennant mystère. (…) » p. 140
La métaphore borroméenne vise à dissoudre le mystère du corps
Leçon du 8 décembre 2004 « Le nœud représente ou présente
le réel, l’imaginaire et le symbolique sous la forme de trois ronds de ficelle
distincts. Ce qui interdit de les ramener les uns aux autres – ce qui fait mystère.
Le mystère tenait à leur identité, à leur confusion, alors que la perspective
borroméenne transforme en problème leur conjonction. Là où il y avait le
mystère, doit venir le problème, disons que c’est la métaphore que réalise le
nœud borroméen. (…) La métaphore borroméenne vise à dissoudre le mystère
du corps parlant qui est le mystère de l’inconscient et à le dissoudre par
l’intrusion du nœud. » p. 141
promet de faire ce qui sera propre à lui survivre, c’est-à-dire à aller au-delà de la
210
211
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Leçon du 8 décembre 2004 « On peut apercevoir comment
argumenter la disjonction du symbolique et de l’imaginaire. Ça passe dans le
Séminaire du Sinthome par une réduction du corps à l’imaginaire. Comme
Lacan le dit aux Américains : « Du corps, l’analyse n’appréhende que ce qu’il y
a de plus imaginaire » (Scilicet p. 6-7 p. 54), c’est-à-dire la forme. Sans
doute Lacan en a-t-il depuis toujours donné l’exemple par le stade du miroir et
même par sa doctrine de l’angoisse. Pour Lacan – c’est l’antienne –, l’image du
corps est le modèle de l’image du monde. » p. 145
Le corps nous est étranger
Leçon du 8 décembre 2004 « Mais l’accent que place la
perspective borroméenne est distinct. Le corps fonctionne tout seul, sans que
nous ayons le moindre enseignement sur ce fonctionnement. Tout ce que Lacan
formule sur le corps vise à le constituer comme une entité isolée. C’est pourquoi
l’argumentation se tisse autour de cette phrase centrale : « le corps nous est
étranger. » p. 145
La perspective borroméenne disjoint l’être et le corps
Leçon du 8 décembre 2004 « C’est cet accent que Lacan
retiendra quand il rédigera « Joyce le symptôme », et dira : « L’homme a un
corps, il ne l’est pas. » A quoi ça tend ? A une disjonction du corps et de l’être.
Cette disjonction est fondamentale puisque dans la pensée d’avant le nœud on
identifie l’être et le corps. C’est aussi formulé dans Encore : l’être c’est un corps ;
le corps est le premier abord de l’être. La perspective borroméenne introduit
l’avoir pour disjoindre l’être et le corps et elle défait par là ce que Lacan appelait
son hypothèse – l’individu affecté de l’inconscient est le même que le sujet
du signifiant –, pour disjoindre le corps et le symbolique, de telle sorte que la
conjonction devient un problème plutôt qu’une hypothèse ou un mystère. »
p. 145-146
Le parlêtre ne reçoit pas son être du corps, mais de la parole
Leçon du 8 décembre 2004 « Et c’est pourquoi Lacan dira le
parlêtre, qui est exactement un être non-aristotélicien, un être qui ne tient pas au
corps, qui ne reçoit pas son être du corps qu’il serait, mais de la parole, c’està-dire du symbolique. Le parlêtre a un corps, il ne l’est pas, et c’est pourquoi
il peut le laisser tomber et c’est ce que Lacan ira chercher dans l’exemple de
Joyce. » p. 146
212
Jacques-Alain Miller
Du corps, l’analyse n’appréhende que ce qu’il a de plus imaginaire
LE CORPS PARLANT
La rencontre de la langue et du corps fait événement de corps
Leçon du 15 décembre 2004 « Il y a une rencontre entre la langue
et le corps et, de cette rencontre, naissent des marques qui sont des marques sur
le corps. Lacan appelle sinthome la consistance de ces marques. C’est en quoi
il peut réduire le sinthome à être un événement de corps, quelque chose qui est
arrivé au corps du fait de la langue. Cette référence au corps est inéliminable de
l’inconscient. C’est pourquoi le Séminaire du Sinthome se termine sur le rapport
au corps spécifique à Joyce, sur le statut de l’ego (…). » p. 152
L’escabeau est une sublimation
Leçon du 12 janvier 2005 « Sublimation est un mot sublime.
Ce que Lacan ravale en l’appelant l’escabeau. On se hausse, on se monte… la
tête. Cela donne le Beau, le Vrai, le Bon. (…) L’escabeau philosophie, éthique,
esthétique. Surtout le beau qui est dans escabeau – ce que Lacan fait voir en
disant S-K-beau. Le nouveau nom de la sublimation ! Est-ce pas beau. Il faut que
ce soit beau. Il faut faire de ça un objet d’art. » p. 81-82
L’escabeau est conditionné par le fait que l’homme a un corps
Leçon du 12 janvier 2005 « L’escabeau, dit très précisément Lacan
dans son «Joyce le Symptôme », est conditionné par le fait que l’homme a un
corps, un corps dans lequel il y a des événements » p. 81-82
Centrer l’opération analytique sur le rapport du dire au corps, sur les
pulsions.
Leçon du 25 mai 2005 [inédit] « (…) il me semble que la
proposition essentielle de Lacan pour la psychanalyse, c’est de ne pas entrer dans
le cauchemar de l’histoire, de se placer, de s’éveiller du cauchemar de l’histoire –
pour prendre l’expression de Joyce – et se tenir au plus près du rapport entre le
dire et le corps. C’est-à-dire ce que, dans la tradition analytique, on appelait les
pulsions. »
Le corps est la seule consistance du parlêtre
Leçon du 1er juin 2005 [inédit] « Ce qui se dégage comme la
consistance première, c’est le corps, ça n’est pas le sujet du signifiant. C’est le
corps dont Lacan dit qu’il est la seule consistance du parlêtre. (…) Le corps
est la seule consistance du parlêtre et c’est ça qui le fait tenir ensemble, ça veut
dire que le symbolique ne donne pas au parlêtre de tenir ensemble. (…) elle
repose, cette consistance, sur un rapport du parlêtre à son corps, alors là il y a un
rapport au nœud. »
213
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Leçon du 1er juin 2005 [inédit] « Le rapport que Lacan a perdu
au niveau sexuel, dont il a constaté, cru constater l’inexistence au niveau sexuel,
c’est-à-dire le rapport dont il a formulé l’inexistence au niveau sexuel, il le
retrouve au niveau corporel et d’une certaine façon Joyce sert d’exemple à : il y a
un rapport corporel. »
L’adoration du corps propre
Leçon du 1er juin 2005 [inédit] « Lacan étudie, attrape par
différents angles le rapport que le parlêtre a à son corps. (…) Il y a d’abord
ce que Lacan appelle « l’adoration », l’adoration du corps propre, une sorte
d’amour primaire, non pas de l’Autre mais de soi, un culte, dont il dit même à
un moment que c’est le seul rapport que le parlêtre a à son corps. Et remarquons
que c’est à ce niveau-là qu’il définit ce qu’il appelle la mentalité. Il la définit au
niveau de l’amour propre, de l’amour du corps propre. »
La mentalité est attachée au corps propre et la pensée au corps de l’Autre
Leçon du 1er juin 2005 [inédit] « Alors c’est important de le
remarquer parce qu’il y a une différence à exploiter qui est seulement évoquée,
esquissée, dans le Séminaire du Sinthome, une différence entre la mentalité et
la pensée. La mentalité est attachée au corps propre, comme on la distingue en
effet, tandis que la pensée, page 64, il souligne qu’elle comporte une référence,
une gravitation à l’acte sexuel, c’est-à-dire, si je peux développer, elle introduit
l’adoration de l’autre corps. Et donc Lacan isole comme primaire le rapport
corporel, le rapport du parlêtre à son corps propre, avec l’imaginaire étant
impliqué et le distingue du rapport au corps autre, où là il y a pensée, il y a sens
et il y a référence sexuelle. »
Moïsation du corps propre chez Joyce
Leçon du 1er juin 2005 [inédit] « Il y a le rapport corporel joycien
qui est là, au fond d’emblée, qui est d’emblée distinct puisque ce qui est au
centre là, ça n’est pas l’adoration du corps, c’est justement qu’il y a comme une
infraction à cette adoration chez Joyce, mais ce qui subsiste à la place, c’est l’idée
de soi comme corps. Et il me semble qu’il faudrait là opposer l’adoration du
corps propre et la moïsation du corps propre, si je puis dire. Le premier rapport
d’adoration reste un rapport d’avoir alors que l’autre est un rapport d’être. »
Jacques-Alain Miller
Il n’y a pas rapport sexuel et il y a rapport corporel
LE CORPS PARLANT
L’écriture borroméenne
Leçon du 6 décembre 2006 « Qu’est-ce que ça implique ici
? C’est ce qu’opérerait précisément l’écriture borroméenne, cette écriture
difficilement saisissable par la pensée comme par les mouvements de notre corps
nécessaires pour écrire. Nous avons ici une idée qui repose sur la disjonction
du symbolique et de l’imaginaire. Le rond, la droite, doivent quelque chose à
l’imaginaire, à la perception, tandis que la forme borroméenne, elle, ne se trouve
pas dans les affinités imaginaires du corps. » p. 58
Disjonction du symbolique et de l’imaginaire
Leçon du 6 décembre 2006 « (…) dans la mesure où le corps est
à placer dans l’imaginaire, (…), la notion des neurones porteurs de l’énergétique
est forclose, de la même façon que tout ce qui concerne la jouissance, qui
suppose un corps.
Ce moment est important parce qu’il montre que Lacan raisonne ici sur la
disjonction du symbolique et de l’imaginaire. (…) cette disjonction (…) ouvre
nécessairement la question de ce qui connecte le symbolique et l’imaginaire, et
c’est là qu’il introduit le réel. » p. 58
L’étrangeté et l’étranger
Leçon du 13 décembre 2006 « Nous avons un rapport d’étrangeté
avec notre corps. Un corps dont d’ailleurs on dit qu’on l’a et non pas qu’on l’est.
Déjà, en parlant d’avoir, on met une distance. Un avoir qu’on transporte avec
soi, et que Lacan qualifie très précisément de meuble. On peut le mobiliser, on le
transporte, on l’a, mais, par rapport au sujet - j’ajoute, qui est du symbolique - le
fameux sujet barré, ce qui est de l’ordre de l’imaginaire, c’est-à-dire du corps, est
foncièrement étranger. Simplement, cela nous est voilé. » p. 62
Le corps de Joyce
Leçon du 13 décembre 2006 « C’est là que vient le passage que
Lacan a péché dans le Portrait de l’artiste, le moment fugitif où Joyce éprouve
l’étrangeté de son corps comme laissé tomber, de même qu’une pelure. Lacan
s’est dirigé vers ce passage qui est comme une illustration de cette possibilité
qui est toujours présente pour ce que nous appelons l’homme, à savoir que la
forme de son corps lui devienne étrangère et que, même, sa substance lui paraît
pouvoir s’éloigner, sinon se dissoudre. » p. 62
« Le tout dernier Lacan » (2006-2007), L’orientation lacanienne III,
9, leçons du 6 et 13 décembre, 17 janvier), Quarto N°91, Revue de
psychanalyse – ECF – ACF, Belgique, 2007
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215
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’envers de Lacan et l’Un-corps
Leçon du 17 janvier 2007 « Dans l’envers de Lacan, l’Autre est
destitué, le sujet est pensé à partir du réel, du symbolique et de l’imaginaire
comme étant ses trois consistances. Ce n’est d’ailleurs plus le sujet du signifiant,
le sujet de l’identification, mais l’être humain qualifié de parlêtre. À la place de
l’Autre, il y a un tout autre principe de l’identité, (…) il y a le corps. Pas le corps
de l’Autre, le corps propre, comment on s’exprime, mais l’Un –corps. Il faut
bien créer quelques noms pour s’y retrouver dans l’histoire que l’on essaye de
raconter à propos de ces bouts de réel. » p.135
L’ego, lui, s’établit du rapport à l’Un-corps
Leçon du 17 janvier 2007 « Tout ce qui se trouvait investi dans le
rapport à l’Autre est ainsi rabattu sur la fonction originaire du rapport au corps
propre, dont il y al’ idée, idée comme de soi-même, et pour quoi Lacan reprend
le vieux mot freudien de ego, prenant soin de souligner que la définition de ce
que vous êtes comme ego n’a rien à faire avec la définition du sujet qui passe
par la représentation signifiante. L’ego, lui, s’établit du rapport à l’Un-Corps. »
p.135
« Le parlêtre adore son corps »
Leçon du 17 janvier 2007 « Cela a bien affaire avec l’amour, et ce
n’est pas l’amour du père, sinon l’amour-propre au sens de l’amour de l’Uncorps. Le parlêtre adore son corps. C’est le plus sur de ce qui vient à la place des
trois modes de l’identification. » p. 135
L’Un-corps comme la seule consistance du parlêtre
Leçon du 17 janvier 2007 « Lacan insiste, tourne autour de cette
propriété du corps : on ne l’est pas, on l’a. Il l’a écrit. Cet avoir n’est qu’une
croyance, croyance d’avoir son corps comme un objet disponible. L’Un-corps
se pose ainsi du côté de l’avoir plutôt que du côté de l’être. Cet Un-corps, dit
Lacan à peu près, puisqu’il n’utilise pas ce vocable, est la seule consistance du
parlêtre. Voilà qui, d’une phrase, réduit toutes les moires de ce dépotoir de
l’Autre majuscule.
On comprend que c’est ce qu’il faut que l’être humain apporte en analyse. (…).
L’expérience analytique impose de donner au corps une fonction plus relevée
que celle que lui assignait la psychanalyse pensée à partir du symbolique. »
Jacques-Alain Miller
La Cause freudienne N°67, Navarin Editeur, 2007
LE CORPS PARLANT
L’adoration de l’Un-corps est la racine de l’imaginaire
Leçon du 17 janvier 2007 « Consistance, c’est là que ça se
complique -, Lacan ajoute mentale, par quoi je comprends : non pas physique.
Physiquement, le corps fout le camp à tout instant, il se défait, il subsiste le
temps de se détruire, mais il ne s’évapore pas.
Dire que sa consistance est mentale, c’est établir le lien le plus étroit entre cet
Un-corps et, non pas le symbolique mais bien l’imaginaire. D’où la thèse:
l’adoration de l’Un-corps est la racine de l’imaginaire. La pensée (…) ne faisant
que répercuter l’adoration de l’Un-corps. » p. 136
Consistance mentale du corps et temps réel
Leçon du 17 janvier 2007 « Pour compléter ce bout de réel, il
faudrait sans doute ajouter, au moins se poser la question de savoir si le temps,
lui ne serait pas réel. (…) Je me suis interrogé sur pourquoi revient ainsi, dans la
bouche de Lacan, la notation il n’y a pas d’éternité, (…). C’est bien de l’éternité
que l’on peut dire que c’est une construction purement verbale, alors que,
concernant même la consistance mentale du corps, elle est travaillée réellement
par le temps qui passe. » p. 138
La solitude du parlêtre et la géométrie du gant retourné
Leçon du 17 janvier 2007 « Il n’y a pas de rapport sexuel entre
Autres. C’est là aussi la valeur de ce terme de solitude que j’ai martelé. Et s’il y a
rapport sexuel, quand il y a rapport sexuel, ce ne peut être que dans le rapport
à une altérité interne à la structure du parlêtre. (…) C’est pourquoi, même, il
(Lacan) invente une géométrie du rapport sexuel, toute différente de l’espace
concentrique de l’imaginaire. Il invente que la géométrie du rapport sexuel
est plutôt celle du gant retourné à partir de l’adéquation spéciale que Joyce
ressentait de son épouse à son égard : elle me va comme un gant. » p. 139
Une pensée qui ne serait pas fondée sur l’adoration de l’Un-corps
Leçon du 17 janvier 2007 « Lacan tente et tentera jusqu’au bout
d’élaborer le mode d’une pensée disjointe de l’imaginaire, une pensée qui ne
serait pas fondée sur l’adoration de l’Un-corps, appareillée à l’écriture, avec l’idée
que ça permettrait de toucher au réel. Toucher le réel, ce n’est pas le vrai. Et pour
ce qui est du réel auquel nous avons affaire, il faut d’abord s’essayer, s’obliger aux
embrouilles du vrai. » p. 140
p. 135-136
216
217
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Entre le symbolique et le corps, le réel de la jouissance
Leçon du 17 janvier 2007 « Un rapport est par là à établir entre
l’Un-corps et l’inconscient. Ce rapport (…) était habité d’une secrète harmonie.
La signifiantisation du corps supposait précisément que le corps soit docile
au signifiant, qu’il se laisse faire, se laisse élever. C’est le mécanisme d’une
transsubstantiation. Il en va de même du mouvement inverse d’incorporation du
signifiant, qui lui répond. (…) cette harmonie que le tout dernier enseignement
de Lacan met en question. Entre le symbolique et le corps, Lacan inscrit la
pulsion comme en position de médiation, et, conformément à l’indication de
Freud, comme un mythe. C’est pourquoi il peut à la fois placer à cet endroit la
jouissance, et dire c’est le réel au niveau de son Séminaire D’un Autre à l’autre. »
p. 11
L’harmonie dénouée
Leçon du 17 janvier 2007 « La pulsion est censée représenter
par excellence le résultat de l’action du signifiant sur le corps, cette action du
signifiant qui est reconsidérée dans tout le dernier enseignement de Lacan,
d’abord parce que l’aspect que Lacan met en valeur alors du signifiant, c’est son
aspect parasitaire et non pas son aspect actif. De là, problème. L’harmonie est
dénouée, se repose la question du rapport entre l’Un-corps et l’inconscient qui
ne dit qu’une seule et même chose, cette question qu’à la fois répercutent et
enserrent les schémas borroméens. » p. 12
« Choses de finesse en psychanalyse » (2008-2009). Inédit,
l’orientation lacanienne
Dans la séance analytique, tout tient à un événement qui doit être incarné,
à un événement de corps
Leçon du 17 décembre 2008 « Du point de vue du singulier, la
séance analytique tend en effet à se réduire à l’instant. Ah, ce n’est pas conforme
au principe que time is money, ça peut être taxé d’imposture par ceux qui
refusent ce qu’il en est de la vérité. La vérité c’est que, pour le parlêtre, l’effet
de rencontre est instantané. Tout tient à l’événement, à un événement qui doit
être incarné, qui est un événement de corps – définition que Lacan donne du
sinthome. Le reste, disons-le, c’est un habillage – un habillage qu’il faut dans la
plupart des cas.
Mais le noyau, le Kern au sens de Freud, le Kern de l’être, c’est cet instant, c’est
l’instant de l’incarnation. »
218
Jacques-Alain Miller
La petite girafe Nº25, Institut du Champ freudien, 2007
LE CORPS PARLANT
A côté de l’inconscient, où ça parle, il y a le singulier du sinthome, où ça ne
parle à personne
Leçon du 17 décembre 2008 « Mais son tout dernier
enseignement distingue, comme deux ordres inhomogènes, l’inconscient et le
sinthome.
L’orientation vers le singulier ne veut pas dire qu’on ne déchiffre pas
l’inconscient. Elle veut dire que cette exploration rencontre nécessairement
une butée, que le déchiffrement s’arrête sur le hors-sens de la jouissance, et
que, à côté de l’inconscient, où ça parle – et où ça parle à chacun, parce que
l’inconscient c’est toujours du sens commun –, à côté de l’inconscient, il y a le
singulier du sinthome, où ça ne parle à personne. »
L’événement de corps n’est pas réductible au savoir inconscient
Leçon du 17 décembre 2008 « C’est pourquoi Lacan le qualifie
d’événement de corps. Ce n’est pas un événement de pensée, ce n’est pas un
événement de langage, c’est un événement de corps : encore faut-il savoir de
quel corps. Ce n’est pas un événement du corps spéculaire, ce n’est pas un
événement qui a lieu là où se déploie la forme leurrante du corps qui vous aspire
dans le stade du miroir. C’est un événement du corps substantiel, celui qui a
consistance de jouissance. Là, nous sommes à un niveau qui n’est pas celui de
l’inconscient pour autant que la découverte de Freud telle que la formule Lacan
c’est que l’inconscient est entièrement réductible à un savoir. La réduction de
l’inconscient à un savoir c’est- à-dire à une articulation de signifiants – qu’on est
amené à supposer à partir de l’interprétation, du caractère interprétable de ce qui
fait symptôme –, cette qualité d’être un savoir est exclusive de l’événement. »
Le point de vue du sinthome consiste à penser l’inconscient à partir de la
jouissance et non un élément de jouissance à partir de l’inconscient
Leçon du 17 décembre 2008 « Alors, sans doute ce que Lacan a
pu formuler à propos du sinthome peut-il par endroits rappeler ce qu’il a dit de
l’objet petit a. Mais ce qu’il appelait l’objet petit a c’était toujours un élément
de jouissance pensé à partir de l’inconscient, pensé à partir du savoir, alors
que le point de vue du sinthome consiste à penser l’inconscient à partir de la
jouissance. »
Ca jouit là où ça ne parle pas, ça jouit là où ça ne fait pas sens
Leçon du 17 décembre 2008 « Eh bien, ça a des conséquences sur
la pratique, en particulier sur la pratique de l’interprétation : l’interprétation,
ça n’est pas seulement le déchiffrement d’un savoir, c’est faire voir, c’est éclairer
la nature de défense de l’inconscient. Sans doute, là où ça parle ça jouit, mais
219
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’analyste est un sinthome : bien plutôt jouera-t-il à l’événement de corps,
au semblant de traumatisme
Leçon du 17 décembre 2008 « Comme Lacan avait pu inviter
l’analyste à occuper la place de l’objet petit a, dans son Séminaire du Sinthome
il formule : L’analyste est un sinthome. Il est supporté par le non-sens, alors on
lui fait grâce de ses motivations, il ne s’expliquera pas. Bien plutôt jouera-t-il à
l’événement de corps, au semblant de traumatisme. Et il lui faudra beaucoup
sacrifier pour mériter d’être, ou d’être pris pour, un bout de réel. »
Leçon du 14 janvier 2009 « Si le réel c’est la jouissance,
l’inconscient est une défense contre la jouissance. »
La jouissance-satisfaction c’est qu’il y a un fonctionnement qui inclut
l’excès, qui le routinise, c’est le sinthome
Leçon du 14 janvier 2009 « Il y a un statut de la jouissance qui
est celui de l’excès, la jouissance-excès C’est à ce niveau-là qu’on apprend
classiquement à distinguer le plaisir et la jouissance. Le plaisir traduit un état
d’homéostase, et cet état d’homéostase est rompu par un élément qui outrepasse
les limites du bien-être et qui fait la confluence de la jouissance et de la
souffrance, du sublime et de l’horrible. C’est ce que Lacan a déjà mis en valeur
dans son Séminaire XI et que dans son Séminaire XVI il dégage sous le nom de
plus-de-jouir.
Mais il y a un deuxième statut de la jouissance, qui commence avec le
Séminaire XX et qui est présent dans tout ce qui est le dernier et le tout dernier
enseignement de Lacan, c’est la jouissance-satisfaction, ce que n’est nullement la
première. La jouissance-satisfaction, c’est le rétablissement, si je puis dire, d’une
homéostase supérieure ; c’est qu’il y a un fonctionnement qui inclut l’excès, qui
le routinise, et c’est ça que Lacan appelle le sinthome. A cet égard, c’est ce qui du
concept du sinthome invalide, sinon l’objet petit a, du moins l’orientation qui a
donné naissance à l’objet petit a. »
Le lieu de l’Autre, il faut le prendre dans le corps, et non dans le langage
Leçon du 14 janvier 2009 « L’Autre qui n’existe pas, en la matière,
si je puis dire, c’est l’Autre de la vérité, c’est l’Autre du sens. C’est là que pointe
que, le lieu de l’Autre, il faut le prendre dans le corps, et non dans le langage. »
220
Jacques-Alain Miller
l’orientation vers le sinthome met l’accent sur : ça jouit là où ça ne parle pas, ça
jouit là où ça ne fait pas sens. »
LE CORPS PARLANT
La jouissance est ce qui satisfait un corps
Leçon du 18 mars 2009 « Une conséquence est en particulier que
la parole, qu’autorise et qu’incite le discours analytique, relève de ce que Lacan
a appelé la vérité menteuse, la vérité, je précise – c’est de mon cru, je l’essaye
– menteuse sur la jouissance. On ne peut pas dire vrai sur la jouissance. Si on
ne peut pas dire toute la vérité, c’est parce qu’il y a une zone, un domaine, un
registre – de quoi ? – de l’existence, où la vérité n’a pas cours, et ce registre
serait celui de la jouissance, de ce qui satisfait. Et, si on suit Lacan là-dessus, la
jouissance est ce qui satisfait un corps. »
Ce que l’on fait parler, dans la psychanalyse, ce n’est pas un sujet, ce n’est
pas le pur sujet de la parole, c’est un corps – le corps parlant
Leçon du 18 mars 2009 « Si on le suit aussi, ce que l’on fait parler,
dans la psychanalyse, ce n’est pas un sujet, ce n’est pas le pur sujet de la parole,
c’est un corps, celui qu’il appelle déjà dans son Séminaire XX – et la suite en
développera les conséquences dans son enseignement – le corps parlant. Non pas
le sujet de la parole, mais le corps parlant. Il le qualifie de mystère. Parce que,
là, on a peine à construire un mathème – qui est l’antonyme de mystère –, on a
peine à logifier le corps parlant. L’enjeu concerne le statut même de ce patient
qui s’adresse à vous ou que vous êtes : ce n’est pas la même chose de l’écouter
comme sujet de la parole ou comme corps parlant. »
Le parlêtre, si c’est un sujet qui parle et qui est parlé, c’est par rapport à un
corps
Leçon du 18 mars 2009 « On ne conceptualise plus le patient
comme un sujet. On le conceptualise comme un parlêtre. Parlêtre, ça veut dire :
il y a un être du fait qu’il parle – les autres sont peut-être des êtres mais ils n’en
savent rien puisqu’ils ne parlent pas – et cet être tient à ce qu’il y a un corps.
Le sujet de la parole est pensé par rapport au signifiant. Le parlêtre, si c’est un
sujet qui parle et qui est parlé, c’est par rapport à un corps, à quoi Lacan s’est
d’ailleurs abstenu de donner une lettre. Il ne s’est pas mis à en faire un mathème
– il a laissé tomber ses mathèmes pour les nœuds qui en sont peut-être aussi
mais d’une toute autre configuration. »
Le sinthome : un re-engineering qui permet de passer de l’inconfort à la
satisfaction du parlêtre
Leçon du 18 mars 2009 « Le sinthome, ça fonctionne, ça n’est
pas susceptible de traversée ou de levée, c’est susceptible – il n’y a pas de terme
dans Lacan alors je dirai pour emprunter un mot à l’anglais comme j’ai hérité
d’insight – d’un re-engineering, d’une reconfiguration.
221
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
La fonction de la parole est liée à la substance de la jouissance
Leçon du 6 mai 2009 « Il a ajouté une seconde supposition à la
supposition de savoir, cette seconde supposition, indissociable de la supposition
du savoir, est celle de la substance jouissante, du corps supposé jouir. S’il n’y
avait pas un corps supposé jouir, il n’y aurait pas de psychanalyse. Il ne suffit
pas du sujet supposé savoir. Sa nouvelle alliance s’est signée sous les espèces de
la fonction de la parole en tant qu’elle renvoie à la structure de langage, et le
Lacan des familles, des classes, s’en tient là, alors que la fonction de la parole
n’appelle pas seulement la référence à la structure du langage, mais à la substance
de la jouissance. S’il n’y avait pas la substance de la jouissance, nous serions
tous logiciens, un mot en vaudrait un autre, il n’y aurait rien qui ressemble
au mot juste, au mot qui éclaire, au mot qui blesse, il n’y aurait que des mots
qui démontrent. Or les mots font bien autre chose que démontrer, les mots
percent, les mots émeuvent, les mots bouleversent, les mots s’inscrivent et sont
inoubliables : c’est parce que la fonction de la parole n’est pas seulement liée à la
structure du langage, mais bien à la substance de la jouissance. »
Le corps, l’entité du corps, est ce qu’il faut supposer pour que la jouissance
ait un support
Leçon du 6 mai 2009 « Le mot corps n’est pas une partie de
l’étendue. Sa définition radicale, si nous la prenons chez Lacan, est la suivante :
Un corps est ce qui se jouit. Le corps, l’entité du corps, est ce qu’il faut supposer
pour que la jouissance ait un support. C’est ce qui fait objection au concept du
sujet du signifiant. C’est ce qui conduira Lacan à conceptualiser le patient, dans
l’expérience analytique, comme un parlêtre – c’est ce qui l’oblige à remettre de
l’être dans le coup. L’analyste n’y échappe pas : ça n’est pas sous le prétexte qu’il
fait des interprétations qu’il va se prendre pour un sujet du signifiant. Il demeure
quelque chose qui s’appelle sa présence ; ça ne peut pas être simplement une
note en bas de page : en plus, il est présent ; c’est que, lui aussi, apporte son
corps. »
La marque identifie un corps comme objet de jouissance
Leçon du 6 mai 2009 « Lacan dit que le corps ne se jouit qu’à
condition de le corporiser de façon signifiante – il dit ça comme ça précisément
dans son Séminaire Encore, je prends ça comme repère, mais là il est sur le
222
Jacques-Alain Miller
C’est ça qu’il s’agirait d’obtenir : une reconfiguration par quoi on ne peut pas
dire que la jouissance prend sens, pas nécessairement, mais un re-engineering qui
permet de passer de l’inconfort à la satisfaction : la satisfaction du parlêtre en
question. »
LE CORPS PARLANT
chemin qui le conduit à son dernier enseignement, il n’y est pas encore tout à
fait. Alors, qu’est-ce que c’est que cette référence-là, la corporisation signifiante
? Si j’essaye de la représenter, je trouve ça, sur la piste de quoi nous met Freud
dans « Un enfant est battu », la flagellation. Là, dans la scène de la flagellation,
nous avons le rapport le plus direct, le plus immédiat entre le signifiant et le
corps, nous avons comme la matrice de l’incidence de l’Autre sur le corps : il
le marque – il le marque comme chair à jouir. C’est ce que Lacan appelle la
gloire de la marque, et, s’il la place à la racine du fantasme, c’est qu’il se réfère
bien entendu au texte princeps de Freud. La marque, là, est aussi un signifiant
paradoxal : elle ne rentre pas dans un système qui serait la structure de langage
; elle vaut comme un insigne, solitaire, absolu, qui identifie un corps comme
objet de jouissance. »
Il y a pour le parlêtre de l’impossible à négativer, un positif absolu, la
jouissance
Leçon du 6 juin 2009 « Mais, cette nouvelle alliance, marquée par
la parole et le langage, j’ai ajouté qu’elle portait sur la jouissance en tant que
impossible à négativer. J’ai rappelé le symbole que Lacan lui avait assigné, une
fois, p. 823 des Écrits, un grand Phi écrit en grec.
Cette écriture, qu’il qualifiait exactement de phallus symbolique impossible à
négativer – virgule – signifiant de la jouissance, je l’ai distinguée parce que j’y ai
vu l’annonce de ce qui devait être le tourment de son dernier enseignement. A
savoir qu’il y a, pour le sujet, et plus exactement pour le parlêtre, de l’impossible
à négativer, un positif absolu, que nous désignons comme la jouissance. Pas
la libido freudienne, qui lui ressemble : la libido freudienne se déplace ; la
jouissance est là, et elle demeure. »
La pulsion : une forme de demande dont les éléments sont les signifiants du
corps.
Leçon du 13 mai 2009 « La distinction de la demande et du désir
– celle qui a tellement frappé à l’époque par sa clarté et sa faculté de mettre
en ordre les phénomènes de l’expérience analytique – cette distinction n’a
pas simplement pour but de dégager la fonction du désir, mais de dégager la
fonction de la pulsion : de la pulsion comme une forme supérieure de demande,
une forme de demande dont les éléments ne sont pas les signifiants de la langue,
mais, si je puis dire, les signifiants du corps. »
La jouissance, c’est la fêlure de la cloche
Leçon du 13 mai 2009 « Parce que là où il n’y a pas de signifiant, on
ne peut pas être assuré qu’il y a jouissance, alors il faut supposer que le signifiant
223
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’interprétation ne concerne pas seulement par ses effets de signifié,
mais par ses effets corporisés
Leçon du 13 mai 2009 « Si l’interprétation se mesure à la jouissance,
alors l’interprétation est sollicitée, non pas par ses effets de sens, mais elle doit
être sollicitée pour ses effets de jouissance. Elle ne concerne pas seulement par
ses effets de signifié, mais par ses effets corporisés. Et c’est ce qui fait qu’en effet
Lacan a pu rêver d’un effet de sens réel. Si c’est à la jouissance que l’interprétation
se mesure, alors, bien forcé d’élaborer l’interprétation comme un mode de dire
spécial, un mode de dire qui n’est pas de la dimension de la signification, qui
n’est pas de la dimension de la vérité, mais qui accentue, dans le signifiant, la
matérialité, le son. C’est l’hypothèse à laquelle sans doute Lacan était arrivé. Une
hypothèse radicale. »
Le signifiant : c’est la cause du sujet dans le discours et ce serait la cause de
la jouissance dans le corps
Leçon du 20 mai 2009 « On a tout à fait l’idée, concernant la vie,
que sa reproduction, dans l’espèce humaine, est curieusement conditionnée par
le signifiant, et n’est marquée d’aucune automaticité comme en fait preuve le
refus de la reproduction qu’il soit conscient ou inconscient. Au point que Lacan
pouvait dire que, dans l’espèce humaine, la lettre est l’analogue du germen, que
pour que le germen se transmette à travers les générations, il faut qu’un certain
type de signifiant, qu’il appelait la lettre – et donc il insiste sur la matérialité de
ce signifiant – soit transmis.
De la même façon, s’il y a un statut antéprédicatif de la jouissance, ce qu’on est
bien en peine de nier, néanmoins dans l’espèce humaine il n’apparaît pas que la
jouissance soit antésignifiante. C’est dans cette perspective que Lacan a pu dire
une fois : Le signifiant c’est la cause de la jouissance, exactement de la même façon
qu’il avait pu dire : Le signifiant c’est la cause du sujet. Ca se distingue tout de
même en ce que le signifiant c’est la cause du sujet dans le discours, tandis que le
signifiant ce serait la cause de la jouissance dans le corps. »
La jouissance bis est celle qui prend consistance à partir de la parole
Leçon du 20 mai 2009 « Donc, même s’il y a une jouissance
équipollente à la vie, même si toute vie comporte jouissance, il se spécifie, du fait
224
Jacques-Alain Miller
n’a pas simplement des effets de signifié, mais qu’il a des effets de jouissance.
Qui seraient assimilables à quoi ? Ca se rencontre dans les cloches, ça, quand
se produit une fêlure, après, chaque fois que vous donnerez le carillon, vous
continuerez d’entendre la fêlure de la cloche. Eh bien, la jouissance, c’est la
fêlure de la cloche. »
LE CORPS PARLANT
de l’incidence du signifiant, une autre jouissance dans l’espèce humaine. je vais
simplement stratifier, et distinguer la jouissance antéprédicative de tout corps
vivant et la jouissance bis. La jouissance bis est celle qui prend consistance et qui
se fixe à partir de l’incidence du signifiant c’est-à-dire à partir du fait qu’il y a
parole.
Il n’y a pas que le monde de la vie, il y a le monde de la parole – Sprachwelt.
C’est à cette jouissance-là que nous avons affaire dans l’expérience analytique. »
Du fait que le corps, dans l’espèce humaine, est parlant, sa jouissance s’en
trouve modifiée sous les espèces d’un morcellement, et de condensations
Leçon du 20 mai 2009 « Je prélève, dans le Séminaire Encore, cette
formule – : Le langage est appareil de la jouissance. Dans l’espèce humaine, la
jouissance est appareillée par le langage, et ça n’est pas le cas chez l’animal :
même s’il peut être parcouru par des effets de langage, ça n’est jamais, évoque
Lacan, que des effets parodiques.
Je prends aussi comme repère cette formule de Lacan, dans « …ou pire »,
que vous trouvez dans les Autres écrits et où Lacan écrit p. 550 : Le savoir
– dans son usage du moment c’est vraiment le savoir en tant qu’articulation
signifiante – Le savoir affecte le corps de l’être parlant – j’abrège –, ceci de morceler
sa jouissance, de le découper jusqu’à en produire les chutes dont je fais l’objet petit
a. Je reprends : le signifiant affecte le corps du parlêtre en ceci, que le signifiant
morcelle la jouissance du corps, et, ces morceaux, ce sont les objets petit a. Alors,
si on regarde cette formule de près, elle suppose qu’il y a la jouissance, qu’il y a
un premier statut de la jouissance, celui que j’appelais la jouissance de la vie, la
jouissance antéprédicative, et, du fait que ce corps, dans l’espèce humaine, est
parlant, sa jouissance s’en trouve modifiée sous les espèces d’un morcellement, et
disons, de condensations dans des zones qui sont les zones érogènes de Freud et
qui sont, chacune, relatives à un certain type d’objet. Je dirai : morcellement et
condensations. »
Le parlêtre n’est pas son corps. Son corps, il l’a. Il l’a comme on a un bien,
une propriété, un objet
Leçon du 20 mai 2009 « Je l’ai dit la dernière fois, à mon sens, la
jouissance n’est pas de l’ordre de l’anté- prédicatif, utilisant ici un terme que
j’ai emprunté au vocabulaire de Husserl. En termes lacaniens, la jouissance, la
jouissance non transgressive que je vise, la jouissance n’est pas avant le signifiant,
bien qu’elle soit du corps. Chez celui que nous n’appelons plus le sujet, parce
que nous le voulons concerné de façon essentielle par la jouissance, chez celui
que nous n’appelons plus le sujet mais le parlêtre, le corps lui-même, son
225
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Pour faire jouissance, le corps et le langage se conjoignent dans le sinthome
Leçon du 3 juin 2009 « Comment se conjoignent le corps et le
langage pour faire jouissance, pour faire jouir ? Je peux donner une réponse qui
n’en est pas une parce qu’elle s’appuie sur un concept de Lacan qui a sa propre
complexité, mais enfin dont vous avez un certain usage, ne serait-ce que par
les cours que j’y ai consacrés : pour faire jouissance, le corps et le langage se
conjoignent dans le sinthome. Le sinthome emporte le corps, mais le sinthome
est articulation. Et justement on dit sinthome, parce qu’il n’y a pas d’abord
direct de la jouissance, que cette jouissance brute, imaginaire, est toujours
réfractée par le sinthome. »
Le sinthome vient du symptôme freudien en tant que substitution
Leçon du 3 juin 2009 « Ce n’est pas pour rien que, pour qualifier
la pointe du rapport à la jouissance, Lacan a choisi ce mot de sinthome, qui
est une modification, justifiée par l’étymologie, du mot de symptôme : le mot
de symptôme est un mot du vocabulaire de Freud, qui veut dire beaucoup
de choses, mais j’isole ceci dans les sens de ce mot, c’est que, chez Freud, le
symptôme est une substitution.
Je dis que, dans l’écho du mot lacanien de sinthome, persiste cette valeur de la
substitution. »
Rien ne subsiste, pour le parlêtre, qui n’ait son coefficient de jouissance
Leçon du 3 juin 2009 « La jouissance est partout dans le signifiant
: il y a une jouissance de la parole, la jouissance de la parole fait partie de la
métonymie des jouissances substitutives ; il y a une jouissance du savoir ; il y a
une jouissance de l’interdit. Il n’est rien de ce qui entre dans la sphère de l’intérêt
du parlêtre où l’on ne puisse repérer une jouissance. Paraphrasant Leibniz on
pourrait dire : Rien n’est sans jouissance. D’où ce qu’a de ridicule l’idée que la
psychanalyse, ça consiste à abandonner de la jouissance, ça serait de faire venir
de la négativation à la jouissance. Tout ce qu’on peut dire c’est qu’on peut
déplacer la jouissance. Elle peut se répartir autrement, elle peut se métonymiser
autrement, mais elle ne peut pas se négativer – au moins dans l’emploi que j’en
propose ici.
226
Jacques-Alain Miller
corps, n’est pas d’avant le signifiant, n’est pas une réalité d’avant le signifiant.
D’ailleurs, c’est en quoi le parlêtre n’est pas son corps. Son corps, il l’a. Il l’a
comme on a un bien, une propriété, un objet, un objet que l’on traite bien
ou mal, que l’on dédaigne, que l’on délaisse, ou que l’on bichonne. Ce corps,
les soins qu’on lui apporte ou qu’on ne lui apporte pas, dénotent la valeur
inconsciente qu’on lui attribue. »
LE CORPS PARLANT
Il y a aussi une jouissance de pensée, comme il y a une jouissance du corps. La
névrose obsessionnelle par exemple nous manifeste l’existence et l’insistance de
la jouissance propre de la pensée.
Ainsi, la jouissance peut être traquée dans toutes les manifestations de l’intérêt,
et on peut même dire que rien ne subsiste, pour le parlêtre, qui n’ait son
coefficient de jouissance. »
« L’Être et l’Un » (2010-11). Inédit, l’orientation lacanienne Le corps a un statut que n’épuise pas l’imaginaire
Leçon du 26 janvier 2011 « Et évidemment, il y a dans
l’enseignement de Lacan la redécouverte que le corps a un statut que n’épuise
pas l’imaginaire, que n’épuise pas la forme, que n’épuise pas la vision du corps. »
Le phallus donne corps à la jouissance dans la dialectique analytique
Leçon du 9 février 2011 « Dans les Écrits p. 822, il dit : «
Le phallus donne corps à la jouissance. » La jouissance, quand même, n’a pas
attendu le phallus pour avoir un corps ; c’est même… la jouissance comme
telle est impensable sans un corps, qui jouit. Donc, le phallus donne corps à la
jouissance, dans la dialectique analytique ; ça, c’est autre chose, c’est relatif au
discours analytique. En fait, ce qui apparaît à ce moment de l’élaboration de
Lacan, ce n’est pas que le phallus donne corps à la jouissance, c’est qu’il donne
signification à la jouissance et qu’il lui donne une signification très précise, qui
est une signification de transgression, corrélative de l’interdiction. »
Penser la jouissance au-delà de l’interdiction
Leçon du 9 février 2011 « Dans la problématique précédente,
on peut dire que le désir est créé par l’interdit, c’est-à- dire qu’il a une origine
œdipienne, et que la jouissance en dépend parce qu’elle tient à la transgression
de l’interdit. Eh bien, précisément c’est au- delà que Lacan a pu penser la
jouissance, penser la jouissance au - delà de l’interdiction, penser la jouissance
positivée comme celle d’un corps qui se jouit, et la différence est sensible :
la jouissance ne tient pas à une interdiction, la jouissance est un événement
de corps. La valeur d’événement de corps est de s’opposer précisément à
l’interdiction, elle n’est pas articulée à la loi du désir, la jouissance, elle est de
l’ordre du traumatisme, du choc, de la contingence, du pur hasard, ça s’oppose
terme à terme à la loi du désir, et elle n’est pas prise dans une dialectique mais
elle est l’objet d’une fixation. »
227
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Leçon du 9 février 2011 « Et c’est précisément parce que Lacan a pu
passer au-delà de la problématique de l’interdiction qu’il a pu dégager comme
telle la jouissance féminine, c’est-à-dire ne plus la centrer sur le Penisneid,
qui était par excellence une fonction négative. Et ce que Lacan appelle cette
jouissance spéciale qui est réservée à la femme, c’est précisément la part qui
existe sans subir l’interdiction, qui n’est pas prise dans le système interdictionrécupération et son Aufhebung - parce qu’on sait où ça mène, en général, du côté
de la sexualité féminine. »
La pratique analytique doit se centrer sur la jouissance comme évènement
de corps
Leçon du 2 mars 2011 « Et c’est aussi dans son dernier
enseignement, dont je dis qu’il est prophétique pour nous, qu’il invite la
pratique analytique à se centrer sur la jouissance comme événement de corps,
c’est-à-dire comme échappant à la dialectique de l’interdiction-permission. »
La « substance jouissante » vise le corps au niveau de l’existence
Leçon du 23 mars 2011 « On a glosé, moi le premier, sur la
substance jouissante que Lacan amène dans son Séminaire Encore, mais
cette substance jouissante est strictement corrélative de la notion, je dirais
approximative, de la substance signifiante. Substance jouissante, qui est d’un
tout autre registre, puisqu’elle assignée au corps, mais à condition, dit Lacan,
qu’elle se définisse seulement de ce qui se jouit. Ça veut dire que le corps dont
il s’agit ici ne se définit pas par l’image, comme le corps du Stade du miroir, il
ne se définit pas par la forme, et il ne se définit pas même par le Un, Un-corps.
Il ne se définit pas même comme ce qui jouit, mais ce qui se jouit. Donnons-lui
d’abord la valeur qu’implique ici sa connexion à la substance: un corps qui jouit
de lui- même. Ce n’est pas le corps de ce qui serait le rapport sexuel. Le corps
qui est là visé est un corps au niveau de l’existence. »
Jouissance du corps et jouissance du blalabla
Leçon du 23 mars 2011 « Chez Lacan, on voit se mouvoir deux
substances extérieures l’une à l’autre : la signifiante et la jouissante, qui comme
répercutent la différence freudienne de l’inconscient et du ça. Sauf que, quand
il les pose, Lacan implique aussitôt une satisfaction au niveau de l’inconscient.
Et après avoir lié apparemment la substance et le corps d’une façon indissoluble,
il amène contradictoirement une satisfaction qui se supporte du langage : la
jouissance du blablabla. On peut dire qu’ici le langage est à saisir au niveau de
228
Jacques-Alain Miller
Jouissance du corps et jouissance féminine
LE CORPS PARLANT
ce qui s’imprime sur le corps, avec effet de jouissance: le Un s’imprime sur le
corps. »
La jouissance répétitive, auto-jouissance du corps par le biais du S1
Leçon du 23 mars 2011 « La jouissance répétitive, la jouissance
qu’on dit de l’addiction - et précisément, ce que Lacan appelle le sinthome est
au niveau de l’addiction -, cette jouissance répétitive n’a de rapport qu’avec le
signifiant Un, avec le S1. Ça veut dire qu’elle n’a pas de rapport avec le S2, qui
représente le savoir. Cette jouissance répétitive est hors-savoir, elle n’est qu’autojouissance du corps par le biais du S1 sans S2. Et ce qui fait fonction de S2 en la
matière, ce qui fait fonction d’Autre de ce S1, c’est le corps lui-même. »
Jouissance du corps et auto-érotisme
Leçon du 30 mars 2011 « On découvre un au-delà de la sémantique
des symptômes, c’est-à-dire une pure réitération dans le réel de l’Un de
jouissance. C’est bien pourquoi on ne peut pas alors se contenter de parler de
sujet, de dire que l’expérience analytique est au niveau du sujet de la parole.
On est obligé de mettre le corps dans le coup, c’est pourquoi Lacan parle
alors de parlêtre, c’est- à-dire d’un être qui ne tient son être que de la parole,
c’est un être évidemment fragile, contestable et dont rien ne dit a priori qu’il
ait un répondant de réel. Et le corps dont il s’agit, remarquez bien que Lacan
l’introduit non pas comme un corps qui jouit – le corps qui jouit, c’est pour
le porno, là, nous sommes dans le freudo –, il s’agit du corps en tant qu’il s e
jouit. C’est la traduction lacanienne de ce que Freud appelle l’autoérotisme. Et
le dit de Lacan Il n’y a pas de rapport sexuel ne fait que répercuter ce primat de
l’autoérotisme. »
Le corps est essentiellement marqué par le symptôme
Leçon du 11 mai 2011 « Ce corps est essentiellement marqué par
le symptôme, et c’est en cela que le symptôme peut être défini comme un
événement de corps. Ça suppose que ce corps est marqué par le signifiant –
par le signifiant, c’est-à-dire quoi ? –, par la parole en tant qu’elle s’est inscrite,
et qu’elle peut donc être représentée par une lettre ; et c’est cette inscription
qui mérite d’être qualifiée de l’inconscient freudien. Et tout ceci précisément
procède, je vous le fais remarquer, de la jaculation Yad’lun. Yad’lun veut dire
: il y a du symptôme; au-delà du désêtre, il reste l’événement de corps. Et
Yad’lun, c’est une formulation qui constitue le premier pas d’Il n’y a pas de
rapport sexuel. Il n’y a pas de rapport sexuel, au fond, c’est la conséquence de la
primauté de l’Un en tant qu’il marque el corps d’un événement de jouissance. »
229
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Leçon du 18 mai 2011 « Il n’y a pas de deux, il n’y a que le un qui se
répète dans l’itération et j’ajouterai encore une troisième formule: il y a le corps.
(…) Et à ce niveau il reste à penser les deux, qui ne sont pas les deux sexes, qui
sont le un et le corps et c’est à ce niveau là que le corps apparaît comme l’Autre
du signifiant et c’est ce que Lacan laissait entendre déjà quand il disait : l’Autre
(avec un grand A), c’est le corps. (…) l’Autre du signifiant, c’est l’Autre du corps
et de sa jouissance. Disons voilà une fois le discours nettoyé au niveau du réel,
une fois nettoyé du rapport sexuel, ce qui se dénude, c’est la conjonction de l’Un
et du corps. »
Le terme de « parlêtre » inclut le corps
Leçon du 25 mai 2011 « Et l’énorme, c’est que Lacan pouvait
déjà dire dans Télévision – je le cite – c’est le réel qui permet de dénouer le
symptôme. Je me demande comment on est passé si vite là-dessus parce que
c’est énorme, l’idée qu’on puisse opérer avec le réel, que le réel puisse être un
moyen de l’opération analytique. Et donc cette même bascule se constate, cette
même bascule qui est là marquée par l’implication décidée de la pulsion dans
le symptôme se constate aussi quand Lacan disons efface progressivement le
terme de sujet qui appartenait par excellence à l’ordre signifiant, et le remplace,
voudrait le remplacer par le terme de parlêtre (…) incluant le corps et c’est
cohérent avec la notion du jouis- sens, que il n’y a pas de sens qui aille sans
jouissance et donc il n’y a pas de signifiant, il n’y a pas de désir qui ne soit
connecté à la pulsion, etc., et la racine de l’Autre c’est le Un. »
Le parlêtre « n’a qu’un corps »
Leçon du 25 mai 2011 « Vous voyez à travers – là je parcours
plusieurs années du dernier enseignement de Lacan, mais c’est comme une
nébuleuse et nous trouvons là les indices qui nous permettent de voir dans
quelle direction pointe sa dernière perspective. Alors le parlêtre c’est celui qui
de parler, en quelque sorte superpose un être au corps qu’il a, il superpose un
être à l’avoir et son avoir essentiel c’est le corps. Le parlêtre c’est aussi le « n’a
qu’un corps » ; si je puis dire. Alors dans tout ça ; il y a une dévalorisation
du signifiant, de la valeur de vérité et l‘idée qui modère l’idée de la puissance
signifiante. »
La castration : ce qui fait cesser les embrouilles du sens
Leçon du 25 mai 2011 « (…) c’est avec le signifiant qui commencent
les embrouilles, les embrouilles du vrai, les embrouilles du désir, les embrouilles
de l’interdit, les embrouilles de l’Œdipe , parce qu’à la racine, le signifiant vient
230
Jacques-Alain Miller
La conjonction de l’Un et du corps
LE CORPS PARLANT
percuter le réel, il vient percuter les corps. Et chez le parlêtre, ce choc initial, ce
traumatisme introduit une faille qui est aussi bien le phallus, qui est aussi bien
la faute, le péché ou, dit Lacan - en prenant la première syllabe de sinthome,
sin - en anglais le sinn, le péché. Et la faille, cette faille initiale tend à s’agrandir
toujours, sauf, dit-il, à subir le cesse de la castration. Et donc ce qu’il appelle ici
castration, c’est ce qui ferait cesser le sinthome, c’est ce qui ferait que ça puisse
s’écrire dans un discours ce qui ne sera pas du semblant mais qui serait du réel.
C’est le nouveau sens de la castration : ce qui fait cesser les embrouilles du
sens. »
Le réel du sinthome, pure percussion du corps par le signifiant
Leçon du 25 mai 2011 « L’hérésie, ça n’est pas de quitter le champ
du langage, c’est d’y demeurer, mais en se réglant sur sa partie matérielle, c’està-dire sur la lettre au lieu de l’être. Il est arrivé à Lacan de jouer au contraire
sur les affinités de la lettre et de l’être, sur les assonances ; dans son article qui
s’appelle ‘’L’instance de la lettre’’, il en joue. Mais c’est tout au contraire, dans la
période de sa réflexion que j’évoque, il passe par le mot lituraterre – littérature
transformé comme je l’ai dit, pour faire valoir la lettre comme litura, comme
déchet et donc pour l’arracher à ses affinités avec l’être. Le réel du sinthome
que Lacan nous propose dans cette phrase d’atteindre, disons que c’est la pure
percussion du corps par le signifiant, par la parole. C’est ainsi d’ailleurs que
Lacan définit à cette occasion les pulsions comme l’écho dans le corps qu’il y a
un dire. »
Au cœur du nœud borroméen, il y a à placer un prélèvement corporel
Leçon du 25 mai 2011 « L’analyse orthodoxe essaye de répondre à
l’énigme sexuelle par un effet de vérité, par un : que la lumière soit, par une
élucidation, alors qu’il s’agit, au contraire, d’atteindre ce que la jouissance
comporte d’opacité irréductible et c’est là ce que vise l’hérésie lacanienne. On
a pu croire que l’Autre, c’était l’Autre de la parole, l’Autre du désir et Lacan a
construit son graphe sur cet Autre, et il a même pu situer à côté des formations
de l’inconscient le fantasme de la traverser. Évidement, on opère dans un tout
autre cadre quand on admet que l’Autre, c’est le corps, qui n’est pas ordonné au
désir mais qu’il est ordonné à sa propre jouissance. Que ce réel, Lacan a voulu
lui donner la forme borroméenne, on peut en prendre acte, il n’empêche que au
cœur, là ou se coincent les cercles, le ronds borroméens, il y a toujours à placer
un prélèvement corporel. »
231
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
L’absence du rapport sexuel dans le réel montrée par la profusion imaginaire
de corps
« Rien ne montre mieux l’absence du rapport sexuel dans le réel que la profusion
imaginaire de corps s’adonnant à se donner et à se prendre. » p. 105
L’exhibition religieuse des corps pâmés et la copulation hors champ
« Au retour d’Italie, d’une tournée dans les églises, que Lacan appelait joliment
« une orgie », il notait dans son Séminaire Encore : « tout est exhibition de corps
évoquant la jouissance » - voilà où nous en sommes dans le porno. Cependant
l’exhibition religieuse des corps pâmés laisse toujours hors de son champ la
copulation même, de la même façon que la copulation est hors champ, dit Lacan,
dans la réalité humaine. » p. 106
La scopie corporelle dans le porno, une provocation
« Tel que défini par Lacan, le baroque viserait la régulation de l’âme par la vision
des corps, la scopie corporelle. Rien de tel dans le porno, nulle régulation,
plutôt une perpétuelle infraction. La scopie corporelle fonctionne dans le porno
comme une provocation à une jouissance destinée à s’assouvir sur le mode du
plus-de-jouir, mode transgressif par rapport à la régulation homéostatique et
précaire dans sa réalisation silencieuse et solitaire. » p. 106
Le fait de la pornographie, symptôme de cet empire de la technique
« Mais notre oracle à nous, c’est justement le dit de Lacan sur le rapport sexuel.
Et il nous permet (…) de mettre à sa place le fait de la pornographie. Celui-ci
n’est nullement (…) la solution des impasses de la sexualité. Il est symptôme de
cet empire de la technique, qui désormais étend son règne sur les civilisations les
plus diverses de la planète, même les plus rétives. » p. 107
L’imaginaire, c’est le corps
« On trouve formulé chez Lacan cette équivalence : l’imaginaire, c’est le corps. »
p. 107
Le corps en tant qu’image
« Premièrement, le corps s’y introduit (dans l’enseignement de Lacan) d’abord en
tant qu’image, image au miroir, d’où il donne au moi son statut qui se distingue
singulièrement de celui que Freud lui reconnaissait dans la seconde topique. »
p. 107
232
Jacques-Alain Miller
« L’inconscient et le corps parlant », La Cause du désir N° 88, Navarin
Editeur, 2014
LE CORPS PARLANT
L’idéal du moi et le moi idéal, un jeu d’images
« Deuxièmement, c’est encore d’un jeu d’images que Lacan illustre l’articulation
prévalant entre l’Idéal du moi et le moi idéal, dont il emprunte les termes à
Freud pour les formaliser d’une façon inédite » p. 107
Le corps participe à l’économie de la jouissance
« Cette affinité du corps et de l’imaginaire est encore réaffirmée dans son
enseignement des nœuds. La construction borroméenne accentue que c’est
par le biais de son image que le corps participe d’abord à l’économie de la
jouissance. » p. 107-108
Un monde illusoire sur le modèle de l’unité du corps
« Quatrièmement, au-delà, le corps conditionne tout ce que le registre
imaginaire loge de représentations : signifié, sens et signification, et l’image du
monde elle-même. C’est dans le corps imaginaire que les mots de la langue font
entrer les représentations, qui nous constituent un monde illusoire sur le modèle
de l’unité du corps. » p. 108
Le corps parlant, un mystère
« il m’est apparu que le corps changeait de registre en tant que corps parlant.
Qu’est-ce que le corps parlant ? Ah, c’est un mystère, dit un jour Lacan. Ce dit
de Lacan est d’autant plus à retenir que mystère n’est pas mathème, c’est même
l’opposé. » p. 108
L’union de l’âme et du corps , troisième substance cartésienne
« Chez Descartes, ce qui fait mystère mais reste indubitable, c’est l’union de
l’âme et du corps. (…) Cette union, en tant qu’elle concerne mon corps, meum
corpus, vaut comme troisième substance entre substance pensée et substance
étendue. » p. 108
Mon corps, ma chair
« (Husserl dans les Méditations cartésiennes) distingue d’un mot précieux, d’une
part, les corps physiques parmi lesquels ceux de mes semblables et, d’autre part,
mon corps. Et pour mon corps, il introduit un terme spécial. Il écrit : je trouve
dans une caractérisation singulière ma chair, meinen Leib, à savoir ce qui seul
n’est pas un simple corps, mais bien une chair, le seul objet à l’intérieur de ma
couche abstraite de l’expérience auquel j’assigne un champ de sensation à la
mesure de l’expérience. » p. 108
233
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Cette chair a nourri la réflexion de Merleau-Ponty dans son ouvrage inachevé
Le Visible et l’Invisible, livre auquel Lacan a consacré quelque attention au cours
de son Séminaire Les quatre concepts fondamentaux de la psychanalyse. »
p. 108
Le corps, lieu de l’Autre du signifiant
« Le signe découpe la chair, la dévitalise et la cadavérise, et alors le corps s’en
sépare. Dans la distinction entre le corps et la chair, le corps se montre apte à
figurer comme surface d’inscription, le lieu de l’Autre du signifiant. » p. 109
Le mystère de l’emprise du symbolique sur le corps
« Pour nous, le mystère cartésien de l’union psychosomatique se déplace. Ce
qui fait mystère, mais qui reste indubitable, c’est ce qui résulte de l’emprise du
symbolique sur le corps. Pour le dire en termes cartésiens, le mystère est plutôt
celui de l’union de la parole et du corps. De ce fait d’expérience, on peut dire
qu’il est du registre du réel. » p. 109
Substitution du parlêtre lacanien à l’inconscient freudien
« Cette métaphore, la substitution du parlêtre lacanien à l’inconscient freudien,
fixe une étincelle. Je propose de la prendre comme index de ce qui change dans
la psychanalyse au XXIe siècle, quand elle doit prendre en compte un autre ordre
symbolique et un autre réel que ceux sur lesquels elle s’était établie. » p. 109
Le sinthome d’un parlêtre, c’est un événement de corps
Jacques-Alain Miller
La chair dans Le Visible et l’Invisible
LE CORPS PARLANT
Le refoulement, un chiffrage qui travaille pour la jouissance qui affecte le
corps
« Le refoulement explicité par la métaphore, c’est un chiffrage et l’opération de
ce chiffrage travaille pour la jouissance qui affecte le corps. » p. 110
L’escabeau, croisement de la sublimation freudienne et du narcissisme
« L’escabeau, c’est un concept transversal. Cela traduit d’une façon imagée
la sublimation freudienne, mais à son croisement avec le narcissisme. (…)
L’escabeau est la sublimation, mais en tant qu’elle se fonde sur le je ne pense pas
premier du parlêtre. » p. 110
Le sinthome tient au corps du parlêtre
« Le sinthome, en revanche, comme symptôme du parlêtre, lui, tient au corps
du parlêtre. Le symptôme surgit de la marque que creuse la parole quand elle
prend la tournure du dire et qu’elle fait événement dans le corps. L’escabeau est
du côté de la jouissance qui inclut le sens. En revanche, la jouissance propre au
sinthome exclut le sens. » p. 111
Faire une analyse, mettre à jour la jouissance opaque du symptôme
« Faire une analyse, c’est travailler à la castration de l’escabeau pour mettre à jour
la jouissance opaque du symptôme. Mais faire la passe, c’est jouer du symptôme
ainsi nettoyé pour s’en faire un escabeau » p. 111
Le corps se sépare du parlêtre pour passer au registre de l’avoir
« Comme vous le savez, le symptôme en tant que formation de l’inconscient
structuré comme un langage, c’est une métaphore, un effet de sens, induit par la
substitution d’un signifiant à un autre. En revanche, le sinthome d’un parlêtre,
c’est un événement de corps, une émergence de jouissance. » p. 110
« L’inconscient, quand il est conceptualisé à partir de la parole, et non plus à
partir de la conscience, porte un nom nouveau : le parlêtre. L’être dont il s’agit
ne précède pas la parole. C’est au contraire la parole qui décerne l’être à cet
animal par effet d’après coup, et dès lors son corps se sépare de cet être pour
passer au registre de l’avoir. Le corps, le parlêtre ne l’est pas, il l’a. » p. 112
Être le symptôme d’un autre corps
Le corps parlant avec ses deux jouissances
« Le corps en question d’ailleurs, rien ne dit que c’est le vôtre. Vous pouvez
être le symptôme d’un autre corps pour peu que vous soyez une femme. Il y a
hystérie quand il y a symptôme de symptôme, quand vous vous faîtes symptôme
du symptôme d’un autre, c’est-à-dire symptôme au second degré. » p. 110
« Le parlêtre a affaire avec son corps en tant qu’imaginaire comme il a affaire
avec le symbolique. Et le troisième terme, le réel, c’est le complexe ou l’implexe
des deux autres. Le corps parlant, avec ses deux jouissances, jouissance de la
parole et jouissance du corps, l’une qui mène l’escabeau, l’autre qui soutient le
sinthome. » p. 112
La métaphore nous donne l’enveloppe formelle de l’événement de corps
« Ainsi, de Freud à Lacan, nous dirons que le mécanisme du refoulement est
explicité par la métaphore, comme de l’inconscient au parlêtre, la métaphore
nous donne l’enveloppe formelle de l’événement de corps. » p. 110
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Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
« Il y a chez le parlêtre à la fois jouissance du corps et aussi jouissance qui se
déporte hors corps, jouissance de la parole, que Lacan identifie, avec audace
et avec logique, à la jouissance phallique en tant qu’elle est dysharmonique au
corps. » p. 112
Le corps parlant est divisé quant à sa jouissance
« Le corps parlant jouit donc sur deux registres : d’une part, il jouit de luimême, il s’affecte de jouissance, il se jouit – emploi réfléchi du verbe -, d’autre
part, un organe de ce corps se distingue de jouir pour lui-même, il condense et
isole une jouissance à part qui se répartit sur les objets a. C’est en quoi le corps
parlant est divisé quant à sa jouissance. Il n’est pas unitaire comme l’imaginaire
le fait croire. C’est pourquoi il faut que la jouissance phallique se sépare dans
l’imaginaire dans l’opération qui s’appelle la castration. » p. 112
Le concept de corps parlant, à la jointure du ça et de l’inconscient
« Le corps parlant parle en termes de pulsions. C’est ce qui autorisait Lacan à
présenter la pulsion sur le modèle d’une chaîne signifiante. Il a poursuivi sur
la voie de ce dédoublement dans sa logique du fantasme où il disjoint le ça et
l’inconscient. Mais le concept de corps parlant est en revanche à la jointure du
ça et de l’inconscient. » p. 112
La jouissance pour laquelle travaille l’inconscient est puisée dans le corps
Jacques-Alain Miller
Jouissance du corps et jouissance hors corps
LE CORPS PARLANT
S’accorder à la pulsation du corps parlant, la seule chose que puisse faire
l’analyste
« L’interprétation est un dire qui vise le corps parlant et pour y produire un
événement, pour passer dans les tripes, disait Lacan, cela ne s’anticipe pas, mais se
vérifie après-coup, car l’effet de jouissance est incalculable. Tout ce que l’analyste
peut faire, c’est s’accorder à la pulsation du corps parlant pour s’insinuer dans le
symptôme. » p. 114
Analyser le corps parlant
« Quand on analyse l’inconscient, le sens de l’interprétation, c’est la vérité.
Quand on analyse le parlêtre, le corps parlant, le sens de l’interprétation, c’est
la jouissance. Ce déplacement de la vérité à la jouissance donne la mesure de ce
que devient la pratique analytique à l’ère du parlêtre. » p. 114
« C’est sur le corps que sont prélevés les objets a ; c’est dans le corps qu’est puisée
la jouissance pour laquelle travaille l’inconscient. » p. 113
Le corps parlant n’est pas une fiction
« De la théorie des pulsions, Freud pouvait dire qu’elle était une mythologie. Ce
qui n’est pas un mythe, en revanche, c’est la jouissance. L’appareil psychique,
Freud l’appelle au chapitre 7 de Die Traumdeutung, une fiction. Ce qui n’est pas
une fiction, c’est le corps parlant. » p. 113
L’inconscient, élucubration de savoir sur le corps parlant
« L’inconscient est lui-même une élucubration de savoir sur le corps parlant, sur
le parlêtre » p. 113
Le corps parlant, réel de l’inconscient
« Le réel du lien social, c’est l’inexistence du rapport sexuel. Le réel de
l’inconscient, c’est le corps parlant » p. 113
236
237
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Excursus philosophique
sur le corps
Aristote
Aristote, De l’âme, (IVe s. av. J-C.) Trad.: J. Tricot, 1953
L’âme, quelque chose du corps
« l’âme ne peut être ni sans un corps, ni un corps : car elle n’est pas un corps,
mais quelque chose du corps. » p. 79
Descartes
Descartes, Méditations métaphysiques (1641), « Méditation sixième »,
Flammarion, 1979
Ce corps que je considérais comme une partie de moi-même, ou peut-être
aussi comme le tout
« Premièrement donc j’ai senti que j’avais une tête, des mains, des pieds, et tous
les autres membres dont est composé ce corps que je considérais comme une
partie de moi-même, ou peut-être aussi comme le tout. De plus j’ai senti que
ce corps était placé entre beaucoup d’autres, desquels il était capable de recevoir
diverses commodités et incommodités, et je remarquais ces commodités par un
certain sentiment de plaisir ou volupté, et les incommodités par un sentiment
de douleur. Et outre ce plaisir et cette douleur, je ressentais aussi en moi la faim,
la soif, et d’autres semblables appétits, comme aussi de certaines inclinations
corporelles vers la joie, la tristesse, la colère, et autres semblables passions. »
p. 169
Excursus philosophique sur le corps
4.
LE CORPS PARLANT
et plus étroitement que pas un autre. Car en effet je n’en pouvais être séparé
comme des autres corps ; je ressentais en lui et pour lui tous mes appétits et
toutes mes affections ; et enfin j’étais touché des sentiments de plaisir et de
douleur en ses parties, et non pas en celles des autres corps qui en sont séparés. »
p. 171
Je ne suis pas seulement logé dans mon corps mais, outre cela, que je
compose comme un seul tout avec lui.
« Il n’y a rien que la nature m’enseigne plus expressément, ni plus sensiblement,
sinon que j’ai un corps qui est mal disposé quand je sens de la douleur, qui a
besoin de manger ou de boire, quand j’ai les sentiments de la faim ou de la soif,
etc. Et partant je ne dois aucunement douter qu’il n’y ait en cela quelque vérité.
La nature m’enseigne aussi par ces sentiments de douleur, de faim, de soif, etc.,
que je ne suis pas seulement logé dans mon corps, ainsi qu’un pilote en son
navire, mais, outre cela, que je lui suis conjoint très étroitement et tellement
confondu et mêlé, que je compose comme un seul tout avec lui. Car, si cela
n’était, lorsque mon corps est blessé, je ne sentirais pas pour cela de la douleur,
moi qui ne suis qu’une chose qui pense, mais j’apercevrais cette blessure par
le seul entendement, comme un pilote aperçoit par la vue si quelque chose se
rompt dans son vaisseau ; et lorsque mon corps a besoin de boire ou de manger,
je connaîtrais simplement cela même, sans être averti par des sentiments
confus de faim et de soif. Car en effet tous ces sentiments de faim, de soif, de
douleur, etc., ne sont autre chose que de certaines façons confuses de penser, qui
proviennent et dépendent de l’union et comme du mélange de l’esprit avec le
corps. » p. 179-181
Pascal
Pensées (1670), Editions GF Flammarion, texte établi par Léon
Brunschvicg, 1976
Le moi, ni dans le corps, ni dans l’âme
« Qu’est-ce que le moi ? (…) Où est donc ce moi, s’il n’est ni dans le corps, ni
dans l’âme ? et comment aimer le corps ou l’âme, sinon pour ses qualités, qui ne
sont point ce qui fait le moi, puisqu’elles sont périssables ? » p. 323
p. 141
Je croyais que ce corps m’appartenait plus proprement et plus étroitement
que pas un autre.
« Ce n’était pas aussi sans quelque raison que je croyais que ce corps (lequel
par un certain droit particulier j’appelais mien) m’appartenait plus proprement
238
239
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Spinoza
Ethique, (1677), Trad.: Charles Appuhn, Vrin, 1983
Le corps humain affecté
« Le corps humain peut être affecté en bien des manières qui accroissent ou
diminuent sa puissance d’agir. » p. 245
Diderot
Le Rêve de d’Alembert (1769). Editorial sociales, 1984
Souffrance et jouissance de la matière
« … pas un point dans la nature entière qui ne souffre ni ne jouisse. » p.
269
D’Holbach
Système de la nature, (1770). Trad.: I, Fayard, 1990
Le corps jouit de la vie
« Plus nous réfléchirons et plus nous demeurerons convaincus que l’âme, bien
loin de devoir être distinguée du corps, n’est que ce corps lui-même envisagé
relativement à quelques unes de ses fonctions, ou à quelques façons d’être et
d’agir dont il est susceptible en tant qu’il jouit de la vie. » p. 130
Husserl
Husserl, Méditations cartésiennes, Introduction à la phénoménologie
(1929), « Cinquième méditation », Trad.: G. Peiffer et E. Levinas,
Vrin, 2008
Sur la distinction du corps physique (Körper) et de la chair (Leib)
« Ce que dans la sphère de ce qui m’appartient (d’où l’on a éliminé tout ce qui
renvoie à une subjectivité étrangère) nous appelons Nature pure et simple,
ne possède plus ce caractère d’ « être objectif » et, par conséquent, ne doit
aucunement être confondu avec une couche abstraite du monde lui-même ou
de son « sens immanent ». Parmi les corps de cette « Nature », réduite à « ce
qui m’appartient », je trouve mon propre corps (Leib) se distinguant de tous
les autres par une particularité unique ; c’est, en effet, le seul corps qui n’est
pas simplement corps physique (Körper), mais précisément ma chair ; c’est le
seul corps à l’intérieur de la couche abstraite, découpée par moi dans le monde,
auquel, conformément à l’expérience, je coordonne, bien que selon des modes
différents, des champs de sensations (champs de sensations du toucher, de la
240
Excursus philosophique sur le corps
LE CORPS PARLANT
température, etc.) ; c’est le seul corps dont je dispose d’une façon immédiate ainsi
que de chacun de ses organes. Je perçois avec les mains (c’est par les mains que
j’ai – et que je puis toujours avoir – des perceptions cinesthésiques et tactiles),
avec les yeux (c’est par les yeux que je vois), etc. ; et ces phénomènes cinesthésiques
des organes forment un flux d’action et relèvent de mon « je peux. »
p. 158-159
« Par suite de cette élimination abstractive de tout ce qui est étranger à moi, il
m’est resté une sorte de monde, une nature réduite à « mon appartenance », - un
moi psycho-physique avec sa chair, son âme et son moi personnel, intégré à cette
nature grâce à mon corps. » p. 161
Le corps de l’autre (le corps illic) et mon corps comme « point-zéro »,
comme hic absolu
« Le corps propre étranger, en tant qu’apparaissant dans ma sphère primordiale,
est tout d’abord un corps physique à l’intérieur de ma Nature (unité synthétique
qui m’est presque primordiale) ; et, par conséquent, en qualité d’élément
déterminant de mon être propre, il est inséparable de moi-même. Si ce corps
propre a une fonction apprésentative, j’ai conscience d’autrui en même temps
que de ce corps ; j’ai conscience d’autrui, tout d’abord, en liaison avec son
corps qui se révèle à lui en un « hic absolu ». Mais comment se fait-il qu’en
général je puisse parler de l’identité d’un corps qui, dans ma sphère primordiale,
m’apparaît à moi dans le mode d’illic (là-bas) et qui lui apparaît à lui, dans
sa sphère, dans le mode du hic ? Ces deux sphères primordiales, la mienne
qui, pour moi, - ego – est la sphère originale, et la sienne qui, pour moi, est
apprésentée, ne sont-elles pas séparées par un abîme infranchissable pour moi ?
Car franchir cet abîme signifierait avoir d’autrui une expérience originale et non
pas apprésentative. Si nous nous en tenons à l’expérience de l’autre, telle qu’elle
s’effectue et se réalise en fait, nous constatons que le corps est immédiatement
donné dans la perception sensible comme corps (vivant) d’autrui, et non comme un
simple indice de la présence de l’autre ; ce fait n’est-il pas une énigme ?
Comment s’identifient le corps de ma sphère originale et le corps constitué
pourtant de manière absolument distincte dans un autre ego, corps physique qui
est bien le même corps propre de l’autre, comment cette identification peut-elle
simplement avoir lieu? » p. 196-197
« Les choses ne se passent donc pas comme si le corps, qui, dans ma sphère
primordiale, est là-bas (illic), demeurait séparé du corps propre d’autrui,
comme une espèce d’indice de son analogon (en mettant en jeu une motivation
évidemment inimaginable), comme si ma nature primordiale et la nature
apprésentée des autres, et par suite, mon ego concret et celui des autres, restaient
241
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
p. 199-200
Sartre
Sartre, L’Être et le néant, essai d’ontologie phénoménologique (1943).
Gallimard, 1974
Ce que je sais de mon corps vient de la façon dont les autres le voient
« Or le corps, quelle que puisse être sa fonction, apparaît d’abord comme
du connu. En outre le corps - notre corps - a pour caractère particulier d’être
essentiellement le connu par autrui : ce que je connais c’est le corps des autres
et l’essentiel de ce que je sais de mon corps vient de la façon dont les autres le
voient. Ainsi la nature de mon corps me renvoie à l’existence d’autrui et à mon
être­pour-autrui. Je découvre avec lui, pour la réalité-humaine, un autre mode
d’existence aussi fondamental que l’être-pour-soi et que je nommerai l’être-pourautrui. » p. 260
L’autre me saisit comme lié à un corps
« En ce sens, dans la mesure où l’autre me saisit comme lié à un corps et
immergé dans la vie, je ne suis moi-même qu’un autre. Pour me faire reconnaître
par l’autre, je dois risquer ma propre vie. Risquer sa vie, en effet, c’est se révéler
comme non lié à la forme objective ou à quelque existence déterminée ; comme
non lié à la vie. » p. 282
242
Excursus philosophique sur le corps
séparés dans le champ de l’association et de l’apprésentation. Bien au contraire,
ce corps illic, appartenant à ma Nature primordiale, apprésente immédiatement,
en quelque sorte, l’autre moi ; et cela, grâce à l’accouplement associatif entre
ce corps, d’une part, et mon corps, avec le moi psycho-physique qui en est
maître, d’autre part. Il apprésente avant tout l’activité immédiate de ce moi dans
ce corps (illic), et son action (médiate), au moyen de ce corps, sur la Nature
qu’il perçoit, sur la même nature à laquelle il (illic) appartient et qui est aussi
ma Nature primordiale. C’est la même Nature, mais donnée dans le mode du
« comme si j’étais, moi, à la place de cet autre organisme corporel ». Le corps est
le même ; il m’est donné à moi comme illic, à lui comme hic, comme « corps
central », et l’ensemble de ma Nature est le même que celui de l’autre. La
Nature est constituée dans ma sphère primordiale comme unité identique de
mes multiples modes de présentation, identique dans ses orientations variables
par rapport à mon corps, qui est le « point zéro », le hic absolu ; la Nature est
constituée comme identité des multiplicités encore plus riches qui, sous forme
de phénomènes variables des différents « sens », sous forme de « perspectives »
variées, appartiennent à chaque orientation particulière hic et illic, et
appartiennent à mon corps lié au hic absolu d’une manière toute spéciale. »
LE CORPS PARLANT
Le corps symbolise ici notre objectivité sans défense
« La honte pure n’est pas sentiment d’être tel ou tel objet répréhensible mais,
en général, d’être un objet, c’est-à-dire de me reconnaître dans cet être dégradé,
dépendant et figé que je suis pour autrui. La honte est sentiment de chute
originelle, non du fait que j’aurais commis telle ou telle faute, mais simplement
du fait que je suis « tombé » dans le monde, au milieu des choses, et que j’ai
besoin de la médiation d’autrui pour être ce que je suis. La pudeur et, en
particulier, la crainte d’être surpris en état de nudité ne sont qu’une spécification
symbolique de la honte originelle : le corps symbolise ici notre objectivité sans
défense. Se vêtir, c’est dissimuler son objectivité, c’est réclamer le droit de voir
sans être vu, c’est-à-dire d’être pur sujet. C’est pourquoi le symbole biblique de
la chute, après le péché originel, c’est le fait qu’Adam et Eve connaissent qu’ils
sont nus. » p. 336
Mon corps : beaucoup plus ma propriété que mon être « Mais il importe avant tout de choisir l’ordre de nos connaissances : partir des
expériences que les médecins ont pu faire sur mon corps, c’est partir de mon
corps au milieu du monde et tel qu’il est pour autrui. Mon corps tel qu’il est pour
moi ne m’apparaît pas au milieu du monde. Sans doute j’ai pu voir moi-même
sur un écran, pendant une radioscopie, l’image de mes vertèbres, mais j’étais
précisément dehors, au milieu du monde ; je saisissais un objet entièrement
constitué, comme un ceci parmi d’autres ceci, et c’est seulement par un
raisonnement que je le ramenais à être mien : il était beaucoup plus ma propriété
que mon être. p. 351
Le corps : forme contingente que prend la nécessité de ma contingence
« Cet ordre absolument nécessaire et absolument injustifiable des choses du
monde, cet ordre qui est moi-même en tant que mon surgissement le fait
nécessairement exister et qui m’échappe en tant que je ne suis ni le fondement
de mon être, ni le fondement d’un tel être, c’est le corps tel qu’il est sur le plan
du pour-soi. En ce sens, on pourrait définir le corps comme la forme contingente
que prend la nécessité de ma contingence. » p. 356
Le corps : un engagement dans le monde
« Il découle nécessairement de la nature du pour-soi qu’il soit corps, c’est-à-dire
que son échappement néantisant à l’être se fasse sous forme d’un engagement
dans le monde. » p. 357
Dire il y a un monde ou que j’ai un corps, c’est une seule et même chose
« Ainsi, dire que je suis entré dans le monde, « venu au monde », ou qu’il y
243
Xe Congrès de l’ AMP, Rio de Janeiro 2016
Le corps est nécessaire encore comme l’obstacle à dépasser pour être dans le
monde
Avoir un corps, c’est être le fondement de son propre néant et ne pas être le
fondement de son être ; je suis mon corps dans la mesure où je suis ; je ne le suis
pas dans la mesure où je ne suis pas ce que je suis; c’est par ma néantisation que
je lui échappe. Mais je n’en fais pas pour cela un objet : car c’est perpétuellement
à ce que je suis que j’échappe. Et le corps est nécessaire encore comme l’obstacle
à dépasser pour être dans le monde, c’est-à-dire l’obstacle que je suis à moimême. » p. 375
Merleau-Ponty
Merleau-Ponty, Le visible et l’invisible (1964), « L’entrelacs – Le
chiasme ». Gallimard, 1979
C’est le corps, et lui seul, qui peut nous mener aux choses mêmes
« L’épaisseur du corps, loin de rivaliser avec celle du monde, est au contraire le
seul moyen que j’ai d’aller au cœur des choses, en me faisant monde et en les
faisant chair.
Le corps interposé n’est pas lui-même chose, matière interstitielle, tissu
conjonctif, mais sensible pour soi, ce qui veut dire, non pas cette absurdité :
couleur qui se voit, surface qui se touche – mais ce paradoxe : un ensemble
de couleurs et de surfaces habitées par un toucher, une vision, donc sensible
exemplaire, qui offre à celui qui l’habite et le sent de quoi sentir tout ce qui
au-dehors lui ressemble, de sorte que, pris dans le tissu des choses, il le tire
tout à lui, l’incorpore, et, du même mouvement, communique aux choses sur
lesquelles il se ferme cette identité sans superposition, cette différence sans
contradiction, cet écart du dedans et du dehors, qui constituent son secret
natal. Le corps nous unit directement aux choses par sa propre ontogenèse,
en soudant l’une à l’autre les deux ébauches dont il est fait, ses deux lèvres : la
masse sensible qu’il est et la masse du sensible où il naît par ségrégation, et à
laquelle, comme voyant, il reste ouvert. C’est lui, et lui seul, parce qu’il est un
être à deux dimensions, qui peut nous mener aux choses mêmes, qui ne sont pas
elles-mêmes des êtres plats, mais des êtres en profondeur, inaccessibles à un sujet
244
Excursus philosophique sur le corps
a un monde ou que j’ai un corps, c’est une seule et même chose. En ce sens,
mon corps est partout sur le monde. Mon corps est à la fois coextensif au
monde, épandu tout à travers les choses et, à la fois, ramassé en ce seul point
qu’elles indiquent toutes et que je suis sans pouvoir le connaître. Ceci doit nous
permettre de comprendre ce que sont les sens. » p. 366
LE CORPS PARLANT
de survol, ouvertes à celui-là seul, s’il est possible, qui coexiste avec elles dans le
même monde. » p. 176-177
La double appartenance du corps à l’ordre de l’ « objet » et à l’ordre du
« sujet »
« C’est une question, et nous ne l’éviterons pas, de savoir comment le sentant
sensible peut être aussi pensée. Mais ici, cherchant à former nos premiers
concepts de manière à éviter les impasses classiques, nous n’avons pas à faire
acception des difficultés qu’ils peuvent offrir quand on les confronte avec un
cogito qui, lui-même, est à revoir. Oui ou non, avons-nous un corps, c’est-à-dire
non pas un objet de pensée permanent, mais une chair qui souffre quand elle
est blessée, des mains qui touchent ? On le sait : des mains ne suffisent pas pour
toucher, mais décider pour cette seule raison que nos mains ne touchent pas,
et les renvoyer au monde des objets ou des instruments, ce serait, acceptant la
bifurcation du sujet et de l’objet, renoncer à comprendre par avance le sensible
et nous priver de ses lumières. Nous disons donc que notre corps est un être
à deux feuillets, d’un côté chose parmi les choses et, par ailleurs, celui qui les
voit et les touche ; nous disons, parce que c’est évident, qu’il réunit en lui ces
deux propriétés, et sa double appartenance à l’ordre de l’ « objet » et à l’ordre du
« sujet » nous dévoile entre les deux ordres des relations très inattendues. »
p. 178
L’esprit – La chair
« Nous ne proposons ici aucune genèse empiriste de la pensée : nous nous
demandons précisément quelle est cette vision centrale qui relie les visions
éparses, ce toucher unique qui gouverne d’un bloc toute la vie tactile de mon
corps, ce je pense qui doit pouvoir accompagner toutes nos expériences. Nous
allons vers le centre, nous cherchons à comprendre comment il y a un centre,
en quoi consiste l’unité, nous ne disons pas qu’elle soit somme ou résultat, et si
nous faisons paraître la pensée sur une infrastructure de vision, c’est seulement
en vertu de cette évidence incontestée qu’il faut voir ou sentir de quelque façon
pour penser, que toute pensée de nous connue advient par la chair.
Encore une fois, la chair dont nous parlons n’est pas la matière. Elle est
l’enroulement du visible sur le corps voyant, du tangible sur le corps touchant,
qui est attesté notamment quand le corps se voit, se touche en train de voir et
de toucher les choses, de sorte que, simultanément, comme tangible il descend
parmi elles, comme touchant il les domine toutes et tire de lui-même ce rapport,
et même ce double rapport, par déhiscence ou fission de sa masse. » p. 189
245
E assim tu pintor, de qualquer escola que sejas,
atende segundo as circunstâncias,
à qualidade dos que falam
e a natureza da coisa que te fala.
X Congresso da Associação Mundial de Psicanálise
25 a 28 de abril de 2016, Rio de Janeiro
Leonardo da Vinci, Tratado da pintura
Bibliofalante é um instrumento de investigação baseado na escolha das citações precisas que
ajudem a orientar leituras, desde Freud ao mais contemporâneo dos autores, que se enderecem
ao corpo falante. Uma bibliografia para desbravadores, como indica Jacques-Alain Miller em sua
conferencia de abertura.
Equipes constituídas nas cinco línguas mais faladas no Campo Freudiano tomaram como bússola
compartilhada de investigação o significante parlêtre.
Cada uma das línguas escolheu a fina extensão da articulação do “parlêtre” com outros
significantes que surgiram no curso da investigação: Corpo, RSI, Sinthome, Inconsciente,
Escabelo, etc.
Bibliofalante
O CORPO FALANTE
Sobre o inconsciente no século XXI
As línguas se distinguem por cores, extraindo delas o toque de real que lhes é próprio.
O formato flippingbook, foi escolhido por seu potencial interativo e por ser um suporte que
permite singularizar o percurso de cada um. Pesquisa por autor, por palavra, envio da seleção por
email, acesso no telefone, Ipad, no site, descarga o livro fala por todos os lados.
Até a realização do Congresso, a Bibliofalante será publicada em dois tempos.
Cada língua contou com uma equipe que aparecerá mencionada na sua cor correspondente.
Desde já agradecemos a boa disposição dos colegas aqui nomeados, provenientes de todas as
escolas da AMP, para integrar-se a esta viagem.
Marcela Antelo
[Editora]
246
247
O CORPO FALANTE
BUSCA DE REFERÊNCIAS Primeiro tempo
Maria Silvia G. F. Hanna e Jorge A. Pimenta Filho
“O rio precisa de muita água em fios
para que todos os poços se enfrasem:
se reatando, de um para outro poço,
em frases curtas, então frase e frase…”
Manoel de Barros da Motta, Mirta Zbrun, Aparecida Malvieira, Angélica Bastos, Luiz Felipe C. Monteiro, Maria Silvia
G. F. Hanna, Carmen Silvia Cervellatti, Perpétua Medrado, Luis Moreira, Claudia Figaro Garcia, Kátia Ribeiro, Iordan
Gurgel, Mônica Hage, Sônia Vicente, Maria Isabel de Araújo Lins, Astrea Gama e Silva, Jorge A. Pimenta Filho
Agradecimentos: a todos os colegas que participaram da pesquisa e especialmente a
Marcela Antelo, Manoel de Barros Motta e Mirta Zbrun
João Cabral de Melo Neto, Rios sem discurso
Caros Colegas,
Organizar uma bibliografia para o X Congresso foi inicialmente um desafio que ao poucos
foi tomando sua forma. Desde o inicio tivemos a preocupação de oferecer ao leitor
referências que funcionassem como placas de sinalização que lhe permitissem chegar a
seu destino.
O título do X Congresso: “O corpo falante: Sobre o inconsciente no Século XXI” coloca o
falasser, no centro da cena, funcionando como uma espécie de disparador que estabelece
laços com outros conceitos que encontramos no segundo ensino de Jacques Lacan. Todos
eles promovem uma releitura da experiência analítica, ampliando suas margens e, ao
mesmo tempo oferecendo ao analista, novos recursos para sua elaboração. Os conceitos
destacados nas referencias são: corpo falante, inconsciente, falasser, sinthoma e escabel.
Contamos com as referências ponderadas em língua portuguesa de Freud, de Lacan, de
Miller e de outros autores contemporâneos que formam parte da Orientação Lacaniana.
Desejamos-lhes que possam fazer um bom uso destas referências para a realização de seus
textos.
Maria Silvia Garcia F. Hanna e Jorge A. Pimenta Filho
[Coordenação e Edição]
248
249
O CORPO FALANTE
BUSCA DE REFERÊNCIAS Segundo tempo
Falasser (parlêtre)
Manoel de Barros da Motta, Mirta Zbrun, Aparecida Malvieira, Angélica Bastos, Luiz Felipe C. Monteiro e Maria
Silvia Garcia F. Hanna, Maria Ángela Maia
Inconsciente
Carmen Silvia Cervellatti, Perpétua Medrado, Luis Moreira, Claudia Figaro Garcia, Kátia Ribeiro, Iordan Gurgel,
Mônica Hage, Sônia Vicente, Maria Isabel de Araújo Lins e Astrea Gama e Silva, Maria Ángela Maia
Corpo falante
Carmen Silvia Cervellatti, Perpetua Medrado, Claudia Figaro Garcia, Kátia Ribeiro, Iordan Gurgel, Mônica Hage,
Sônia Vicente, Maria Isabel de Araújo Lins e Astrea Gama e Silva, Lenita Bentes
Sinthoma
Mirta Zbrun, Manoel de Barros Motta, Angélica Bastos, Perpétua Medrado, Claudia Figaro Garcia, Kátia Ribeiro,
Iordan Gurgel, Mônica Hage, Sônia Vicente, Lenita Bentes
Escabelo
Manoel de Barros Motta, Mirta Zbrun, Aparecida Malvieira, Angélica Bastos e Maria Silvia G F Hanna, Jorge A.
Pimenta Filho
Caros colegas,
Demos mais um passo na pesquisa! Eis aqui o resultado!
Apresentamos nas próximas páginas a segunda etapa realizada pela equipe da Bibliofalante
para o site do X Congresso da AMP.
Trabalhamos destacando o falasser, o inconsciente, o sinthoma, o corpo falante e o escabelo,
assim como o fizemos na primeira etapa da pesquisa sobre S. Freud e J. Lacan.
Dessa vez recortamos algumas breves passagens de artigos e de livros publicados por
colegas em língua portuguesa, com as quais damos continuidade à construção do tecido
do tema: O inconsciente no Século XXI; o corpo falante.
A ideia orientadora de nosso trabalho foi oferecer ao leitor um material, a partir do qual,
ele possa ser fisgado por alguns dos trechos escolhidos, suscitando-lhe o interesse de
leitura do texto na íntegra, por um lado e, por outro permitindo-lhe ter um panorama
geral das elaborações de S. Freud, de J. Lacan, de J.-A. Miller e de outros autores.
Desejamos uma boa leitura.
Até breve.
Coordenação:
Jorge Pimenta Filho e Maria Silvia Garcia Fernandez Hanna
Consultores:
Maria Silvia Garcia F. Hanna e Jorge A. Pimenta Filho
[Coordenação e Edição]
Manoel de Barros da Motta e Mirta Zbrun
Colaboradores:
Angélica Bastos, Aparecida Malvieira, Astréa Gama e Silva, Carmen Silvia Cervellatti, Claudia Fígaro Garcia, Iordan
Gurgel, Kátia Ribeiro, Lenita Bentes, Luís Moreira, Luiz Felipe C. Monteiro, Maria Ángela Maia, Maria Isabel de
Araújo Lins, Mônica Hage, Perpétua Medrado, Sônia Vicente.
250
251
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
Conteúdo
1.
Sigmund Freud
I /a. Afeto, Trauma, Defesa, Inconsciente
II /b. Inconsciente
256
256
I /b. Sexualidade, Zonas erógenas, Libido, Sublimação260
I /c. Recalque primário, Pulsão, Fixação, Síntoma,
Inibição
I /d. Narcisismo, Eu, Isso
II /b.2 Outros Escritos
292
II /b.3 Outros Textos
293
II /c. O corpo falante
II /c.1 Os Seminários 294
294
263
II /c.2 Outros Escritos
300
281
II /c.3 Outros Textos
301
II /d. O sinthoma
II /d.1 Os Seminários
301
301
II /d.2 Outros Escritos
303
2.
II /e. O escabelo
Jacques Lacan
286
II /a. Falasser (Parlêtre) II /a.1 Os Seminários
286
286
II /a.2 Outros Escritos
287
II /a.3 Outros Textos 288
252
II /b.1 Os Seminários
289
289
II /e.1 Os Seminários 304
304
II /e.2 Outros Escritos 305
253
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
3.
Jacques-Alain Miller
III /a. Falasser (parlêtre)
306
Outros autores
336
IV /a. Falasser
336
III /a.1 Os cursos psicanalíticos
306
306
IV /b. Sinthoma
345
III /b.2 Outros textos
311
IV /c. Inconsciente
356
IV /d. Corpo falante
360
III /b.1 Cursos Psicanalíticos
313
313
III /b.2 Outros textos
321
IV /e. Escabelo
366
III /b. O inconsciente
III /c. Corpo falante
III /c.1 Cursos Psicanalíticos
323
323
III /c.2 Outros textos
323
III /d. Sinthoma
III /d.1 Cursos Psicanalíticos
328
328
III /d.2 Outros Textos
329
III /e. O Escabelo
333
333
III /e.1 Outros Textos
254
4.
255
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Sigmund Freud
I /a. Afeto, Trauma, Defesa, Inconsciente
FREUD, Sigmund (1893 – 1894). Comunicação preliminar (Breuer
e Freud, 1893). In: _____. Estudo sobre a histeria: Josef Breuer
e Sigmund Freud. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 2).
“Nas neuroses traumáticas, a causa atuante da doença não é o dano físico
insignificante, mas o afeto do susto – o trauma psíquico.” p. 43
“Mas a relação causal entre o trauma psíquico determinante e o fenômeno
histérico não é de natureza a implicar que o trauma atue como mero agent
provocateur na liberação do sintoma…. Devemos presumir que o trauma
psíquico… age como um corpo estranho que, muito depois de sua entrada, deve
continuar a ser considerado como um agente que ainda está em ação…”
p. 44
256
Sigmund Freud
1.
O CORPO FALANTE
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980 (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 2)
“Assim, uma força psíquica, uma aversão, por parte do eu, teria originariamente
impelido a representação patogênica para fora da associação e agora se oporia a
seu retorno ã memória. O “não saber” do paciente histérico, seria, de fato, um
“não querer saber”– um não querer que poderia, em maior ou menor medida,
ser consciente.” p. 265
“Demonstrei como, no curso de nosso trabalho terapêutico, fomos levados
à visão de que a histeria se origina por meio do recalcamento de uma ideia
incompatível, de uma motivação de defesa. Segundo esse ponto de vista, a ideia
recalcada persistiria como um traço mnêmico fraco (de pouca intensidade),
enquanto o afeto dela arrancado seria utilizado para uma inervação somática.”
p. 277
FREUD, Sigmund (1911 – 1913). Uma nota sobre o inconsciente na
psicanálise (1912). In: _____. O caso de Schreber, artigos sobre técnica
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 12)
“O termo inconsciente que foi empregado antes no sentido puramente descritivo,
vem agora a implicar algo mais. Designa não apenas a ideias latentes em geral,
mas especialmente ideias com certo caráter dinâmico, ideias que se mantêm à
parte da consciência, apesar de sua intensidade e atividade.” p. 330
FREUD, Sigmund (1893 – 1894). Casos clínicos (Breuer e Freud).
Caso 5: Sra Emmy Von N., idade 40 anos, da Livônia (Freud). In:
_____. Estudo sobre a histeria: Josef Breuer e Sigmund Freud. Rio de
Janeiro: Imago Editora, 1980. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 2)
“Os pensamentos latentes do sonho não diferem em nenhum aspecto
dos produtos de nossa atividade consciente habitual; merecem o nome de
pensamentos pré–conscientes e, em verdade, podem ter sido conscientes em
algum momento do estado de vigília. Entretanto, por entrarem em contato com
as tendências inconscientes durante a noite, assimilaram–se a estas, degradaram–
se, por assim dizer, à condição de pensamentos inconscientes, e ficaram sujeitos
às leis pelas quais a atividade inconsciente é dirigida.” p. 333
“… cheguei à hipótese de que a causa dessa paralisias residiria na inacessibilidade
a nova associações por parte de um grupo de representações vinculadas, digamos,
a uma das extremidades do corpo; essa inacessibilidade associativa dependeria,
por sua vez, do fato de a representação do membro paralisado estar ligada à
lembrança do trauma…” p. 113
“O sistema assinalado pelo fato de seus atos isolados serem inconscientes
é chamado ‘O inconsciente’, por falta de termo melhor e menos ambíguo.
Em alemão, proponho denotar esse sistema pelas letras Ubw, abreviatura da
palavra Unbewusst. E este é o terceiro e mais significativo sentido que o termo
‘inconsciente adquiriu na psicanálise’.” p. 334
FREUD, Sigmund (1893 – 1894). A psicoterapia da histeria (Freud).
In: _____. Estudo sobre a histeria: Josef Breuer e Sigmund Freud.
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). O inconsciente (1915). In: _____.
A história do movimento psicanalítico, artigos sobre metapsicologia
257
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“… nossa suposição a respeito do inconsciente é necessária e legítima…”
p. 192
“Em geral, o emprego das expressões afeto inconsciente e emoção inconsciente
refere–se a vicissitudes sofridas, em consequência da recalque, pelo fator
quantitativo no impulso da pulsão.” p. 204
“… Sabemos, também, que suprimir o desenvolvimento do afeto constitui
a verdadeira finalidade do recalque, e seu trabalho ficará incompleto se essa
finalidade não for alcançada. Em todos os casos em que o recalque consegue
inibir o desenvolvimento de afetos, denominamos esses afetos (restauramos
quando desfazemos o trabalho de recalque) ‘inconscientes’.” p. 204
“O núcleo do Ics. consiste em representantes pulsionais que procuram
descarregar sua catexia; isto é, consiste em impulsos carregados de desejo….Não
há nesse sistema lugar para a negação, dúvida ou quaisquer graus de certeza:
tudo isso só é produzido pelo trabalho da censura entre o Ics e o Pcs.”
p. 213
“Os processos do sistema Ics. são intemporais, isto é, não são ordenados
temporalmente, não se alteram com a passagem do tempo; não tem
absolutamente qualquer referência ao tempo. A referencia ao tempo vincula–se,
mais uma vez, ao trabalho do sistema Cs. Do mesmo modo os processo Ics.
dispensam pouca atenção à realidade. Estão sujeitos ao principio do prazer; seu
destino depende apenas do grau de sua força e do atendimento às exigências da
regulação prazer–desprazer.” p. 214
“Pelo processo de deslocamento uma ideia pode ceder a outra toda a sua quota
de catexia; pelo processo de condensação pode apropriar–se de toda a catexia de
várias outras ideias. Propus que esse dois processos fossem considerados como
marcos distintivos do assim denominado processo psíquico primário.” p. 213
“O sistema Ics., contém as catexias da coisa dos objetos, as primeiras e
verdadeiras catexias objetais, o sistema Pcs. Ocorre quando essa apresentação da
coisa é hipercatexizada através da ligação com a apresentações da apalavras que
lhe correspondem, São essas hipercatexias, podemos supor, que provocam uma
organização psíquica mais elevada, possibilitando que o processo primário seja
sucedido pelo processo secundário, dominante no Pcs.” p. 230
258
Sigmund Freud
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980. (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 14).
O CORPO FALANTE
FREUD, Sigmund (1923 – 1925). O ego e o Id. In: _____. O ego e o
id e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 19)
“Reconhecemos que o o Ics. não coincide com o recalcado; é ainda verdade que
tudo o que é recalcado é Ics., mas nem tudo o que é Ics. é recalcado…. Quando
nos vemos confrontados pela necessidade de postular um terceiro Ics. que não
é recalcado, temos de admitir que a caraterística de ser inconsciente começa
a perder significação para nós. Torna-se uma qualidade que pode ter muitos
significados, uma qualidade da qual não podemos fazer, como esperaríamos, a
base de conclusões inevitáveis e de longo alcance. No obstante, devemos cuidar
para não ignorarmos esta característica, pois a propriedade de ser consciente
ou não constitui, em última análise, o nosso único farol na treva da psicologia
profunda.” p. 30
“Em outro lugar, já sugeri que a diferença real entre uma ideia (pensamento)
do Ics. ou do Pcs. Consiste nisto: que a primeira é efetuada em algum material
que permanece desconhecido, enquanto que a última (a do Pcs.) é, além disso
colocada em vinculação com representações verbais. ….A pergunta «Como
uma coisa se torna consciente?» seria assim mais vantajosamente enunciada:”
Como uma coisa se torna pré-consciente?” E a resposta seria: Vinculando-se às
representações verbais que lhe são correspondentes.” p. 33
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Inibições, sintomas e ansiedade
(1926 [1925]). In: _____. Um estudo autobiográfico inibições,
sintomas e ansiedade, a questão da análise leiga e outros trabalhos.
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980 (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 20)
“… Uma questão surgiu: o que aconteceu ao impulso da pulsão que fora ativado
no Isso e que procurou satisfação? A resposta foi indireta. Devido ao processo
de recalque, o prazer que se teria esperado da satisfação fora transformado em
desprazer.” p. 112
“… a angústia se faz acompanhar de sensações físicas mais ou menos definidas
que podem ser referidas a órgãos específicos do corpo… Os mais claros e mais
frequentes são ligados aos órgãos respiratórios e ao coração.” p. 155-156
“Presumimos, em outras palavras, que um estado de angústia é a reprodução
de alguma experiência que encerrava as condições necessárias para tal aumento
de excitações e uma descarga por trilhas específicas, e que a partir dessa
circunstância o desprazer da angústia recebe seu caráter específico… Isso não
259
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“A angústia, por conseguinte, é por um lado, uma expectativa de um trauma,
e, por outro, uma repetição dele em forma atenuada… Sua vinculação com a
expectativa pertence à situação de perigo, ao passo que sua indefinição e falta de
objeto pertencem à situação traumática de desamparo –a situação que é prevista
na situação de perigo.” p. 191
I /b. Sexualidade, Zonas erógenas, Libido,
Sublimação
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Três ensaios sobre a teoria da
sexualidade (1905). In: _____. Um caso de histeria, três ensaios sobre
a teoria da sexualidade e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1980 (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 7)
“Uma impressão muito peculiar resulta dos casos em que o objeto sexual normal
é substituído por outro que guarda certa relação com ele, mas que é totalmente
impróprio para servir ao alvo sexual normal.” p. 143
“O substituto do objeto sexual geralmente é uma parte do corpo (os pés,
os cabelos) muito pouco apropriado para fins sexuais, ou então um objeto
inanimado que mantém uma relação demonstrável como a pessoa quem
substitui, de preferencia com a a sexualidade dela (um artigo de vestuário, uma
peça intima).” p. 144
“… os sintomas representam um substituto de aspirações que extraem sua força
da fonte da pulsão sexual.” p. 154
“Portanto, os sintomas se forma, em parte, às expensas da sexualidade anormal;
a neurose é, por assim dizer, o negativo da perversão.” p. 155
“Pulsão, portanto, é um dos conceitos da delimitação entre o anímico e o
físico… O que distingue as pulsões entre si e as dota de propriedades específicas
é sua relação com suas fontes somáticas e seus alvos. A fonte da pulsão é um
processo excitatório num órgão, e seu alvo imediato consiste na supressão desse
estímulo orgânico.” p. 157-158
260
Sigmund Freud
implica que angústia ocupa uma posição excepcional entre os estados afetivos.
Na minha opinião, os outros afetos são também reproduções de experiências
muitos antigas…” p. 156
O CORPO FALANTE
“A atividade sexual apoia-se primeiramente numa das funções que servem à
preservação da vida, e só depois torna-se independente delas… A necessidade
de repetir a satisfação sexual dissocia-se então da necessidade de absorção do
alimento…” p. 170
“No chuchar ou sugar com deleite já podemos observar as três caraterísticas de
uma manifestação sexual infantil. Esta nasce apoiando-se em uma das funções
sexuais somáticas vitais, ainda não reconhece nenhum objeto sexual, sendo
auto-erótica, e seu alvo sexual acha-se sob o domínio de uma zona erógena.
Antecipemos que essas caraterísticas são válidas também para a maioria de outras
atividades das pulsões sexuais infantis.” p. 171
“Do exemplo do chuchar podemos ainda deduzir várias coisas para a
caracterização do que é uma zona erógena. Trata-se de uma parte da pele ou da
mucosa em que certos tipos de estimulação provocam uma sensação prazerosa de
determinada qualidade.” p. 171
“Contudo, devemos admitir que também a vida sexual infantil, apesar da
dominação preponderante das zonas erógenas, exibe componentes que desde
o inicio envolvem outras pessoas como objetos sexuais. Dessa natureza são as
pulsões do prazer de olhar e de exibir, bem como a de crueldade, que aparecem
com certa independência das zonas erógenas e só mais tarde entram em relações
estreitas com a vida genital, mas que já na infância se fazem notar como
aspirações autônomas, inicialmente separadas da atividade sexual erógena.”
p. 179
“Estabelecemos o conceito de libido como uma força quantitativamente variável
que poderia medir os processos e transformações no âmbito da excitação
sexual… A análise das perversões e das psiconeuroses levou-nos à compreensão
de que essa excitação sexual é fornecida não só pelas chamadas partes sexuais,
mas por todos s órgão do corpo.” p. 204
FREUD, Sigmund (1923 – 1925). A organização genital infantil:
uma interpolação na teoria da sexualidade (1923). In: _____. O ego e
o id e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1980 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 19)
“A aproximação da vida sexual da criança à do adulto vai muito além e não se
limita unicamente ao surgimento da escolha de um objeto… a caraterística
principal dessa ‘organização genital infantil’, é sua diferença da organização
genital final do adulto. Ela consiste no fato de, para ambos os sexos, entrar em
261
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
p. 181
“A falta de um pênis é vista como resultado da castração e, agora, a criança se
defronta com a tarefa de chegar a um acordo com a castração em relação a si
própria.” p. 182
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). Sobre o narcisismo: uma
introdução (1915). In: _____. A história do movimento psicanalítico,
artigos sobre metapsicologia e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1980 (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 14)
“Assim, formamos a ideia de que há uma catexia libidinal original do eu, parte
da qual é posteriormente transmitida ao objetos, mas que fundamentalmente
persiste e está relacionada com as catexias objetais…” p. 92
“… estamos destinados a supor que uma unidade comparável ao eu não
pode existir no individuo desde o começo, o eu tem que ser desenvolvido.
Os instintos auto-eróticos, contudo, ali se encontram desde o início, sendo,
portanto, necessário que algo seja adicionado ao autoerotismo –uma nova ação
psíquica– a fim de provocar o narcisismo.” p. 93
“A hipocondria, da mesma forma que a doença orgânica, manifesta-se em
sensações corpóreas aflitivas e penosas, tendo sobre a distribuição da libido o
mesmo efeito que a doença orgânica. O hipocondríaco retira tanto o interesse
quanto a libido… dos objetos, do mundo externo, concentrando ambos no
órgão que lhe prende a atenção.” p. 99
“Podemos decidir considerar a erogenicidade como uma caraterística geral de
todos os órgãos e, então, podemos falar de uma aumento ou diminuição dela
numa parte especifica do corpo.” p. 100
“Somos naturalmente levados a examinar a relação entre essa formação de um
ideal e a sublimação. A sublimação é um processo que diz respeito à libido
objetal e consiste no fato de a pulsão se dirigir no sentido de uma finalidade
diferente e afastada da finalidade sexual… A idealização é um processo que diz
respeito ao objeto; por ela, esse objeto, sem qualquer alteração em sua natureza,
é engrandecido e exaltado na mente do individuo.” p. 111
“A idealização é possível tanto na esfera da libido do eu quanto na da libido
objetal. Por exemplo, a supervalorização sexual de um objeto é uma idealização
262
Sigmund Freud
consideração apenas um órgão genital, ou seja o masculino. O que está presente,
portanto, não é uma primazia dos órgãos genitais, mas uma primazia do falo.”
O CORPO FALANTE
do mesmo. Na medida em que a sublimação descreve algo que tem a ver com a
pulsão e a idealização, algo que tem a ver com o objeto, os dois conceitos deve
ser distinguidos um do outro.” p. 111
“É verdade que o ideal do eu exige tal sublimação, mas não pode fortalecê–la; a
sublimação continua a ser uma processo especial que pode ser estimulado pelo
ideal, mas cuja execução é inteiramente independente de tal estímulo.”
p. 112
“… a formação de um ideal aumenta as exigências do eu, constituindo o fator
mais poderoso a favor da repressão, a sublimação é uma saída, uma maneira pela
qual essas exigências podem ser atendidas sem envolver repressão.” p. 112
I /c. Recalque primário, Pulsão, Fixação,
Síntoma, Inibição
Recalque Primário
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). Recalque (1915). In: _____. A
história do movimento psicanalítico, artigos sobre metapsicologia
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 14)
“Temos motivos suficientes para supor que existe um recalque primitivo,
uma primera fase do recalque que consiste em negar entrada no consciente
representante psíquico (ideacional) da pulsão. Com isso, estabelece–se uma
fixação; a partir de então, o representante em questão continua inalterado e a a
pulsão ligada a ele. Isso se deve às propriedades dos processos inconscientes, de
que falaremos depois.” p. 171
FREUD, Sigmund (1917 – 1919). História de uma neurose infantil
(1918 [1914]). In: _____. Hstória de uma neurose infantil e outros
trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 17)
“Procederemos, em primeiro lugar, a um estudo das relações entre essa
‘cena primária’ e o sonho do paciente, seus sintomas e a história de sua vida;
investigaremos separadamente os efeitos que se seguiram, do conteúdo essencial
da cena e de uma das suas impressões individuais.” p. 56
263
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Consideramos, até agora, a sua identificação com o pai como sendo narcísica,
mas, se levamos em conta o conteúdo da cena primária, não podemos negar que
já atingira o estádio da organização genital.” p. 135
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Além do princípio do prazer
(1920). In: _____. Além do princípio de prazer, psicologia de grupo
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 18)
“A resistência durante o tratamento origina-se dos mesmos estratos e sistemas
elevados da mente que originalmente provocaram o recalque.” p. 32
FREUD, Sigmund (1923 – 1925). O ego e o Id. In: _____. O ego e o
id e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 19)
“O eu, que inicialmente ainda é fraco, dá-se conta das catexias de objeto, e
sujeita-se a elas ou tenta desviá-las pelo processo de recalque.” p. 43
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Inibições, sintomas e ansiedade
(1926 [1925]). In: _____. Um estudo autobiográfico inibições,
sintomas e ansiedade, a questão da análise leiga e outros trabalhos.
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 20)
“Como revelei em outra parte, a maioria dos recalques com os quais temos
de lidar em nosso trabalho terapêutico são de pressão posterior. Pressupõem
a atuação de recalques primitivos, que exercem atração sobre a situação mais
recente.” p. 115
FREUD, Sigmund (1927 – 1931). O mal-estar na civilização
(1930 [1929]). In: _____. O futuro de uma ilusão, o mal–estar na
civilização e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976
(Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de
Sigmund Freud, v. 21)
264
Sigmund Freud
“Já sugeri, num ponto anterior da minha história, que uma parte do conteúdo
da cena primária foi oculta. Estou agora em posição de fornecer essa parte que
falta. A criança interrompeu a relação sexual dos pais fazendo cocô, o que lhe
deu uma desculpa para gritar.” p. 102
O CORPO FALANTE
“Se isso é correto, podemos verdadeiramente afirmar que, de início, a
consciência surge através do recalque de um impulso agressivo, sendo
subsquentemente reforçada por novos recalques do mesmo tipo.” p. 153
“Da mesma maneira pela qual, no cristianismo, essa redenção é conseguida
–pela morte sacrificial de uma pessoa isolada, que desse modo, toma sobre
si mesma a culpa comum a todos– conseguimos inferir qual pode ter sido a
primeira ocasião em que essa culpa primária, que constitui também o primórdio
da civilização, foi adquirida.” p. 160
Pulsão
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). AS pulsões e suas vicissitudes
(1915). In: _____. A história do movimento psicanalítico, artigos
sobre metapsicologia e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1976 (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 14)
“Se agora nos dedicarmos a considerar a vida mental de um ponto de vista
biológico, uma pulsão nos aparecera como sendo um conceito situado
na fronteira entre o mental e o somático, como representante psíquico
dos estímulos que se originam dentro do orgaismo e alcançam a mente,
como uma medida da exigência feita à mente no sentido de trabalhar em
consequência de sua ligação com o corpo”. Estamos agora em condições de
examinar certos termos utilizados com referência ao conceito de pulsão – por
exemplo, sua ‘pressão’ [Drang], sua ‘finalidade’ [Ziel], seu ‘objeto’[Objekt] e sua
‘fonte’[Quelle].” p. 142-143
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Além do princípio do prazer
(1920). In: _____. Além do princípio de prazer, psicologia de grupo
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 18)
“Para ele (Schopenhauer, 1851), a morte é o ‘verdadeiro’ resultado e, até esse
ponto, o propósito da vida, ao passo que a pulsão sexual é a corporificação da
vontade de viver.” p. 60
“O conceito de ‘sexualidade’ e, ao mesmo tempo, de pulsão sexual, teve, é
verdade, de ser ampliado de modo a abranger muitas coisas que não podiam ser
classificadas sob a função reprodutora, e isso provocou não pouco alarido num
mundo austero, respeitável, ou simplesmente hipócrita.” p. 71
265
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“O que se escreve como pulsão sexual mostra ser de uma natureza altamente
complexa e sujeita a decompor–se novamente em suas pulsões componentes.
Cada pulsão componente é inalteravelmente caracterizada por sua fonte, isto é,
pela região ou zona do corpo da qual sua excitação se deriva. Cada uma delas
possui, ademais, como aspectos distinguíveis um objeto e um objetivo. O objetivo
é sempre a descarga acompanhada pela satisfação, mas é capazde ser mudada
da atividade para a passividade. O objeto acha-se menos estreitamente ligado
à pulsão do se supôs a princípio; é facilmente trocado por outro e, além disso,
uma pulsão qu possuia um objeto externo pode ser voltada para o próprio eu
do sujeito. As pulsões separadas podem permanecer independentes uma das
outras ou –de um modo ainda inexplicável– combinar-se e fundir-se uma com
as outras, para realizar um trabalho em comum. Podem também substituir-se
mutuamente e transferir sua catexia libidinal uma para as outras, de forma que
a satisfação de uma determinada pulsão pode assumir o lugar da satisfação de
outras. A vicissitude mais importante que uma pulsão pode experimentar parece
ser a sublimação; aqui tanto o objeto quanto o objetivo são modificados; assim,
o que originalmente era uma pulsão sexual encontra sua satisfação em alguma
realização que não é mais sexual, mas de uma valoração social ou ética superior.
Esses diferentes aspectos ainda não se combinam para formar um quadro
integral.” p. 309
FREUD, Sigmund (1923 – 1925). As dus classes de instintos. In:
_____. O ego e o id e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora,
1976. (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas
de Sigmund Freud, v. 19)
“(…) temos de distinguir duas classes de pulsões, uma das quais, as pulsões
sexuais ou Eros, é, de longe, a mais conspícua e acessível ao estudo. Ela abrange
não apenas a pulsão sexual desinibida quanto ao objetivo ou sublimada que dela
derivam, mas também a pulsão autopreservativa, que deve ser atribuida ao eu e
que, no início de nosso trabalho analítico, tínhamos boas razões para contrastar
com as pulsões objetais sexuais. A segunda classe de pulsões não foi tão fácil
de indicar; ao final viemos a reconhecer o sadismo como seu representante.
Com basse em considerações teóricas, apoiadas pela biologia, apresentamos
a hipótese de uma pulsão de morte, cuja tarefa é conduzir a vida orgânica de
266
Sigmund Freud
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Dois verbetes de enciclopédia
(1923). A teoria do libido. In: _____. Além do princípio de prazer,
psicologia de grupo e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora,
1976 (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas
de Sigmund Freud, v. 18)
O CORPO FALANTE
volta ao estado inanimado; por outro lado, imaginamos que Eros, por ocasionar
uma combinação de consequências cada vez mais amplas das partículas em que
a substância viva se acha dispersa, visa a complicar a vida e, ao mesmo tempo,
naturalmente, a preservá-la. Agindo dessa maneira, ambas as pulsões seriam
conservadoras no sentido mais estrito da palavra, visto que ambas estariam
se esforçando para restabelecer um estado de coisas que foi perturbado pelo
surgimento da vida. O surgimento da vida seria , então, a causa da continuação
da vida e tambem, ao mesmo tempo, do esforço no sentido da morte. E a
própria vida seria um conflito e uma conciliação entre essas duas tendências.
O problema da origem da vida permaneceria cosmológico, e o problema do
objetivo e propósito da vida seria respondido dualisticamente.” p. 54
“Segundo este ponto de vista, um processo fisiológico especial (de anabolismo
ou catabolismo) estaria associado a cada um, as duas classes de pulsões; ambas
estariam ativas em toda partícula de substância viva, ainda que em proporções
desiguais, de maneira que determinada substância poderia ser o principal
representante de Eros.” p. 55-56
FREUD, Sigmund (1923 – 1925). O problema econômico do
masoquismo (1924). In: _____. O ego e o id e outros trabalhos. Rio de
Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 19)
“O masoquismo moral, , (…) se torna uma prova clássica da existência da fusão
pulsional. Seu perigo reside no fato de ele originar-se da pulsão de morte e
corresponder à parte dessa pulsão que escapou de ser voltada para fora, como
pulsão de destruição.” p. 212
FREUD, Sigmund (1927–1931). O mal–estar na civilização (1930
[1929]). In: _____. O futuro de uma ilusão, o mal-estar na civilização
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 21)
“(…) é impossível desprezar o ponto até o qual a civilização é construida sobre
uma renúncia pulsional, o quanto ela pressupõe exatamente a não–satisfação
(pela opressão, recalque ou algum outro meio?) de pulsões poderosas. Essa
‘frustração cultural’ domina o grande campo dos relacionamentos sociais entre
os seres humanos. Como já sabemos, é a causa da hostilidade contra a qual todas
as civilizações têm de lutar. (…) Não é fácil entender como pode ser possível
privar de satisfação uma pulsão. Não se faz isso impunimente. Se a perda não
267
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
FREUD, Sigmund (1933 – 1932). Ansiedade e vida instintual. In:
_____. Novas conferências introdutórias sobre psicanálise e outros
trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 22)
“A teoria das pulsões é, por assim dizer, nossa mitologia. As pulsões são entidades
míticas, magníficas em sua imprecisão. Em nosso trabalho não podemos
desprezá-las, nem por um momento, de vez que nunca estamos seguros de as
estarmos vendo claramente.” p. 98
“O primeiro objeto de nosso estudo era só as pulsões sexuais, cuja energia
denominávamos ‘libido’. Foi em relação a elas que procuramos clarear nossas
ideias a respeito do que é uma pulsão e do que se devia atribuir-lhe. Aqui temos
a teoria da libido. Uma pulsão, por conseguinte, distingue-se de um estímulo
pelo fato de surgir de fontes de estimulação situadas dentro do corpo, de atuar
como força constante e, de a pessoa não poder evitá-la pela fuga, como é possível
fazer com o estímulo externo. Em uma pulsão podemos distinguir sua origem,
seu objeto e sua finalidade. Sua origem é um estado de excitação do corpo, sua
finalidade é a remoção dessa excitação; no caminho que vai desde sua origem até
sua finalidade, a pulsão torna-se atuante psquicamente.
A finalidade pode ser atingida no corpo da própria pessoa; via de regra, inclui-se
um objeto externo, com relação ao qual a pulsão atinge sua finalidade externa;
sua finalidade interna permanece sendo a modificação corporal que é sentida
como satisfação. A evidência da experiência analítica mostra o fato indubitável
que as pulsões proveniente de uma fonte ligam-se àquelas que provêm de outras
fontes e compartilham de suas vicissitudes e, que de modo geral, uma satisfação
pulsional pode ser substituida por outra. (…) As relações de uma pulsão com a
sua finalidade e com seu objeto também são passíveis de modificações; ambos
podem ser trocados por outros, embora sua relação com seu objeto seja, não
obstante, a que cede mais facilmente. Um determinado tipo de modificação da
finalidade e de mudança do objeto, na qual se levam em conta nossos valores
sociais, é descrito por nós como ‘sublimação’.” p. 99
FREUD, Sigmund (1933 [1932]). Porque a guerra?: (Einstein e
Freud).In: _____. Novas conferências introdutórias sobre psicanálise
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 22)
268
Sigmund Freud
for economicamente compensada, pode-se ficar certo de que sérios distúrbios
decorrerão disso.” p. 118
O CORPO FALANTE
“O senhor expressa surpresa ante o fato de ser tão fácil inflamar nos homens
o entusiasmo pela guerra e insere a suspeita de que neles exige em atividade
alguma coisa –um instinto de ódio e de destruição– que coopera com os esforços
dos mercadores de guerra. Também nisto apenas posso exprimir meu inteiro
acordo. Acreditamos na existência de uma pulsão dessa natureza e, durante os
últimos anos temo–nos ocupado realmente em estudar suas manifestações. (…)
De acordo com nossa hipótese, as –pulsões humanas são apenas de dois tipos:
aquels que tendem a preservar e a unir– que denominamos ‘eróticas’, exatamente
no mesmo sentido em que Platão usa a palavra ‘Eros’ em seu Symposium, ou
sexuais, com uma deliberada ampliação da concepção popular de ‘sexualidade’
– e aquelas que tedem a destruir e matar, as quais agrupamos como pulsão
agressiva ou destrutiva. Como o senhor vê, isto não é senão uma formulação
teórica da universavelmente conhecida oposição entre amor e ódio, que talvez
possa ter alguma relação básica com a polaridade entre atração e repulsão, que
desempenha um papel na sua área de conhecimentos. Entretanto, não devemos
ser demasiado apressados em introduzir juizos éticos de bem e de mal. Nenhum
dessas duas pulsões é menos essencial do que a outra; os fenômenos da vida
surgem da ação confluente ou mutuamente contrária de ambos.”
p. 202-203
FREUD, Sigmund (1937 – 1939). Análise terminável e interminável
(1937). In: _____. Moisés e o monoteísmo, esboço de psicanálise
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 23)
“Dos três fatores que reconhecemos como sendo decisivos para o sucesso ou
não do tratamento analítico –a influências dos traumas, a força constitucional
das pulsões e as alterações do eu– o que nos interessa aqui é apenas a segunda,
a força das pulsões. (…) ‘É possível, mediante a terapia analítica, livrar-se de
um conflito entre a pulsão e o eu, ou de uma exigência pulsional patogênica
ao eu, de modo permanente e definitivo?’ Para evitar a má compreensão não
é necessário, talvez, explicar mais exatamente o que se quer dizer por ‘livrar-se
permanentemente de uma exigência pulsional’. Certamente não é ‘fazer-se com
que a exigência desapareça, de modo que nada mais se ouça dela novamente’.
Isso em geral é impossível, e, tampouco, de modo algum, é de se desejar.
Não, queremos dizer outra coisa, algo que pode ser grosseiramente descrito
como um ‘amansamento’ (domesticação) da pulsão. Isso equivale a dizer que
a pulsão é colocada completamente em harmonia com o eu, torna-se acessivel
a todas as influências das outras tendências neste último e não mais busca
269
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Esses fenômenos [remete ao masoquismo imanente e à reação terapêutica
negativa constituem indicações inequívocas da presença de um poder na vida
mental que chamamos pulsão agressiva ou de destruição, segundo seus objetivos
e que remontamos à pulsão de morte original da matéria viva. Não se trata de
uma antítese entre uma teoria pessimista da vida e outra otimista. Somente
pela ação concorrente ou mutuamente oposta das duas pulsões primevas –Eros
e pulsão de morte– e nunca por um outro sozinho, podemos explicar a rica
multiplicidade dos fenômenos da vida.” p. 276
Fixação
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Três ensaios sobre a teoria da
sexualidade (1905). As aberrações sexuais. In: _____. Um caso de
histeria, três ensaios sobre a teoria da sexualidade e outros trabalhos.
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 7)
“A análise clínica dos casos extremos de perversão masoquista mostra a
colaboração de uma ampla série de fatores (como o complexo de castração e a
consciência de culpa) no exagero e fixação da atitude sexual passiva originária.”
p. 149
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Três ensaios sobre a teoria da
sexualidade (1905). As transformações da puberdade. In: _____. Um
caso de histeria, três ensaios sobre a teoria da sexualidade e outros
trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 7)
“O terreno preparado pelos fatores psíquicos que acabamos de mencionar é
favorável aos estímulos acidentalmente vivenciados da sexualidade infantil. Estes
últimos (sobretudo a sedução por outras crianças ou por adultos) fornecem
o material que, com a ajuda dos primeiros, pode fixar–se como um distúrbio
permanente. Boa parte dos desvios da vida sexual normal posteriormente
observados tanto nos neuróticos quanto nos perversos é estabelecida, desde
o começo, pelas impressões do período infantil, supostamente desprovido de
sexualidade. De sua causação participam a complacência constitucional, a
270
Sigmund Freud
seguir independente do caminho para satisfação. Se nos perguntarem por quais
métodos e meios esse resultado é alcançado, não será fácil achar uma resposta.
Podemos apenas dizer: “So muss denn doch die Hexe dran” – a Metapsicologia da
Feiticeira [remete-se à frase do Fausto de Goethe: “temos de convocar a feiticeira
em nosso auxílio].” p. 256-257
O CORPO FALANTE
precocidade, a característica da adesividade elevada e a estimulação fortuita da
pulsão sexual por influências estranhas.” p. 228
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Um tipo especial de escolha de
objeto feita pelos homens (Contribuições à psicologia do amor I).
In: _____. Cinco lições de psicanálise, Lonardo da Vinci e outros
trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 11)
“A escolha de objeto, que é tão estranhamente condicionada, e esta maneira
extremamente singular de se comportar no amor, tem a mesma origem psíquica
que encontramos nos amores das pessoas normais. Derivam da fixação infantil
de seus sentimentos de ternura pela mãe e representam uma das conseqüências
dessa fixação.” p. 152
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Leonardo Da Vinci e uma
lembrança de sua infancia (1910). In: _____. Cinco lições de
psicanálise, Lonardo da Vinci e outros trabalhos. Rio de Janeiro:
Imago Editora, 1976 (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 11)
“Com a descoberta que fará, mais tarde, de que as mulheres não possuem
pênis, este desejo muitas vezes se transforma no seu oposto, dando origem
a um sentimento de repulsa que, na época da puberdade, poderá ser a causa
de impotência psíquica, misoginia e homossexualidade permanente. Porém a
fixação no objeto antes tão intensamente desejado, o pênis da mulher, deixa
traços indeléveis na vida mental da criança, quando esta fase de sua investigação
sexual infantil foi particularmente intensa.” p. 89
“A fixação em sua mãe e nas felizes lembranças de suas relações com ela
continuou preservada no inconsciente, permanecendo, porém, inativa por algum
tempo. Desse modo, a repressão, a fixação e a sublimação desempenharam
sua parte absorvendo as contribuições do instinto sexual para a vida mental de
Leonardo.” p. 120
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Cinco lições de psicanálise (1910
[1909]). In: _____. Cinco lições de psicanálise, Lonardo da Vinci
e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 11)
271
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
dos caracteres mais importantes da neurose e dos que têm maior significação
prática.” p. 19
4ª. lição “Os mais profundamente atingidos pela repressão são
primeiramente, e sobretudo, os prazeres infantis coprófilos, isto é, os que se
relacionam com os excrementos, e, em segundo lugar, os da fixação às pessoas da
primitiva escolha de objeto.” p. 42
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Sobre a tendência universal a
depreciação amorosa (Contribuições à psicología do amor II – 1912).
In: _____. Cinco lições de psicanálise, Lonardo da Vinci e outros
trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976 (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 11)
“Não vacilo em admitir que os dois fatores em atividade na impotência psíquica,
no sentido estrito –os fatores de intensa fixação incestuosa, na infância, e a
frustração devida à realidade, na adolescência– respondam também por esta
característica extremamente comum do amor dos homens civilizados.”
p. 169
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). Luto e melancolía (1917 [1915]).
In: _____. A história do movimento psicanalítico, artigos sobre
metapsicologia e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora,
1976 (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas
de Sigmund Freud, v. 14)
“Do mesmo modo que o luto compele o eu a desistir do objeto, declarando-o
morto e oferecendo ao eu o incentivo de continuar a viver, assim também
cada luta isolada da ambivalência distende a fixação da libido ao objeto,
depreciando-o, denegrindo-o e mesmo, por assim dizer, matando-o.” p. 290
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses
(1917 [1916 – 17]). Conferência XXII: algumas idéias sobre
desenvolvimento e regressão: etiologia. In: _____. Conferências
introdutórias sobre psicanálise (parte III). Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1976 (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“(…) Permitam-me ainda esclarecer que nos propomos descrever o retardamento
de uma tendência parcial num estádio anterior como sendo uma fixação. Isto é,
uma fixação da pulsão”.(…) “É plausível supor que a fixação e a regressão não
272
Sigmund Freud
1ª. Lição “Essa fixação da vida psíquica aos traumas patogênicos é um
O CORPO FALANTE
sejam independentes uma da outra. Quanto mais intensas as fixações em seu
rumo ao desenvolvimento, mais prontamente a função fugirá às dificuldades
externas, regressando às fixações –portanto, mais incapaz se revela a função
desenvolvida de resistir aos obstáculo externos situados em seu caminho”. (…)
“… há regressão de dois tipos: um retorno aos objetos que inicialmente foram
catexizados pela libido, os quais, conforme sabemos, são de natureza incestuosa;
e um retorno da organização sexual como um todo a estádios anteriores.
Ambos os tipos de regressão são encontrados nas neuroses de transferência e
desempenham importante papel no seu mecanismo.” p. 399
“Podem afirmar numa abreviação esquemática que a fixação libidinal representa
o fator interno, predisponente, da etiologia as neuroses, ao passo que a frustração
representa o fator externo, acidental.” p. 405
“São as neuroses doenças exógenas ou endógenas? São elas o resultado
de determinadas experiências de vida prejudiciais (traumáticas)? Mais
particularmente, são elas causadas pela fixação da libido (e pelos outros aspectos
da constituição sexual) ou pela pressão da frustração? (…) “Quanto à sua
causação, os casos de doença neurótica enquadram–se numa série, dentro da
qual os dois fatores – constituição sexual e experiência, ou, se preferirem, fixação
da libido e frustração – estão representados de tal modo que, quando um dos
fatores é mais forte, o outro o é menos.” p. 407
Descrição de um caso “Trata–se de um homem que hoje é
praticamente indiferente aos genitais e a outros atrativos das mulheres, mas
que pode ser tomado de irresistível excitação sexual apenas por causa de um pé
que tenha determinada forma, e que calce um sapato. [Ele] Pode recordar um
acontecimento do seu sexto ano de vida, decisivo para a fixação de sua libido.
Estava sentado num banquinho, ao lado da governanta, uma solteirona de meia–
idade, seca, sem atrativos especiais, com olhos azul–claros e nariz arrebitado,
naquele dia estava com algum problema no pé e, por causa disso, mantinha–o
calçado num chinelo de veludo, estendido sobre uma almofada. Sua perna,
propriamente, estava com decência recoberta pela roupa. Um pé fino, magricela
como aquele que vira pertencendo à sua governanta, desde então, se tornou
(após tímida tentativa de atividade sexual normal lna puberdade) seu único
objeto sexual; e o homem se sentia irresistivelmente atraído se um pé assim
se associava mais a outros aspectos, do qu lembrassem a figura da governanta
inglesa. Essa fixação de sua libido, porém, fazia dele não um neurótico mas um
pervertido – que denominamos fetichista do pé.” p. 407-408
273
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“As neuroses traumáticas dão uma indicação precisa de que em sua raiz se situa
uma fixação no momento do acidente traumático. Esses pacientes repetem
com regularidade a situação traumática, em seus sonhos, onde ocorrem ataques
histeriformes que admitam uma análise, verificamos que o ataque corresponde a
uma completa transportação do paciente para a situação traumática.” p. 325
“Quanto ao tema da fixação numa determinada fase do passado, podemos,
porém, acrescentar que tal conduta é muito mais difundida do que a neurose.
Toda neurose inclui uma fixação desse tipo, mas nem toda fixação conduz
a uma neurose, coincide com uma neurose ou surge devido a uma neurose.
Um perfeito modelo de fixação afetiva em algo que é passado, é o que se nos
apresenta no luto, que realmente envolve a mais completa alienação do presente
e do futuro.” p. 326
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses (1917
[1916 – 17]). Conferência XXIIII: os caminhos na formação dos
sintomas. In: _____. Conferências introdutórias sobre psicanálise
(parte III). Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v.
16)
“A fixação da libido de um adulto, que introduzimos na equação etiológica
da neurose como representando o fator constitucional, agora se desdobra,
para nosso propósitos, em mais dois componentes: a constituição herdada e a
disposição adquirida no início da infância.” p. 423
“O tipo de amor masculino que descrevemos tem os traços dessa evolução e é
fácil de compreender como uma fixação das fantasias formadas pelo menino na
puberdade — fantasias que, afinal, mais tarde, encontraram vazão na vida real.
Não é difícil admitir que a prática assídua da masturbação durante os anos da
puberdade desempenhou seu papel na fixação das fantasias.” p. 155
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Novas conferências introdutórias
sobre psicanálise (1933 [1932]). Conferência XXXII: angústia e
vida pulsional. In: _____. Novas conferências introdutórias sobre
psicanálise e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976.
274
Sigmund Freud
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses (1917
[1916 – 17]). Conferência XVIII: fixação em traumas: o inconsciente.
In: _____. Conferências introdutórias sobre psicanálise (parte III).
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 16)
O CORPO FALANTE
(Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de
Sigmund Freud, v. 22)
“Sem dúvida, quando o supereu foi instituído pela primeira vez, para equipar
essa instância, fez–se uso da parcela de agressividade infantil dirigida contra
os pais, pelo que lhe foi impossível efetuar uma descarga para fora, devido à
sua fixação erótica, bem como em virtude de dificuldades externas; e, por esse
motivo, a severidade do supereu não corresponde necessariamente à rigidez da
criação da criança.” p. 111
Sintoma
FREUD, Sigmund (1893 – 1899). Sobre os mecanismos psíquicos
dos fenônemos histéricos: uma conferência (1893). Conferência
XXXII: angústia e vida pulsional. In: _____. Primeiras publicações
psicanalíticas. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 3)
“Um dos sintomas mais comuns da histeria é a combinação de anorexia e
vômito. Sei de um grande número de casos em que a ocorrência desse sintoma é
explicada de maneira bastante simples. Assim, numa paciente o vômito persistiu
depois de ela ter lido uma carta humilhante pouco antes de uma refeição e ter
ficado violentamente nauseada com isso.” p. 41
FREUD, Sigmund (1901 – 1905). Fragmentos da análise de um
caso de histeria. O caso Dora: quadro clínico (1905). In: _____. Um
caso de histeria, três ensaios sobre a teoria da sexualidade e outros
trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 7)
“Já constatamos que, com bastante regularidade, um sintoma corresponde
simultaneamente a diversos significados; acrescentemos agora que também
pode expressar diversos significados sucessivamente. No decorrer dos anos,
um sintoma pode alterar um de seus significados ou seu sentido principal,
ou então o papel principal pode passar de um significado para outro. Há
como que um traço conservador no caráter das neuroses: uma vez formado,
se possível, o sintoma é preservado, mesmo que o pensamento inconsciente
que nele encontrou expressão tenha perdido seu significado. Mas também
é fácil explicar mecanicamente essa tendência à conservação do sintoma: é
tão difícil a produção de um sintoma dessa natureza, são tantas as condições
favorecedoras necessárias à transposição de uma excitação puramente psíquica
para o corporal –isso que denominei de “conversão”– , e é tão raro dispor-se da
275
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses (1917
[1916–17]). Conferência XVII: o sentido dos síntomas. In: _____.
Conferências introdutórias sobre psicanálise (parte III). Rio de
Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“O sentido de um sintoma, conforme verificamos, possui determinada conexão
com a experiência do paciente. Quanto mais individual for a forma dos
sintomas, mais motivos teremos para esperar que seremos capazes de estabelecer
esta conexão. A tarefa, então, consiste simplesmente em descobrir, com relação a
uma idéia sem sentido e uma ação despropositada, a situação passada em que a
idéia se justificou e a ação serviu a um propósito.” p. 319
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses (1917
[1916 – 17]). Conferência XVIII: fixação em traumas: o inconsciente.
In: _____. Conferências introdutórias sobre psicanálise (parte III).
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“Temos incluído duas coisas como ‘sentido’ de um sintoma: o seu ‘de onde’
e seu ‘para quê’ ou sua ‘finalidade’ –ou seja, as impressões e experiências das
quais surgiu e as intenções a que serve. Assim, o ‘de onde’ de um sintoma se
reduz a impressões que vieram do exterior, que uma vez foram necessariamente
conscientes e podem, a partir daí, ter-se tornado inconscientes através do
esquecimento. O ‘para quê’ de um sintoma, seu propósito, no entanto, é
invariavelmente um processo endopsíquico, que possivelmente teria sido
consciente, no início, mas pode igualmente não ter sido jamais consciente
276
Sigmund Freud
complacência somática necessária à conversão, que o impulso para a descarga da
excitação vinda do inconsciente utiliza, tanto quanto possível, qualquer via de
descarga já transitável. Muito mais fácil do que criar uma nova conversão parece
ser a produção de vínculos associativos entre um novo pensamento carente
de descarga e o antigo, que já não precisa dela. Pela via assim facilitada flui a
excitação da nova fonte excitante para o antigo ponto de descarga, e o sintoma se
assemelha, segundo as palavras do Evangelho, a um odre velho repleto de vinho
novo. Por estas observações, a parte somática do sintoma histérico parece ser a
mais estável e a mais difícil de substituir, enquanto a psíquica se afigura como
o elemento mais variável e mais facilmente substituível. Todavia, não se deve
pretender inferir dessa relação nenhuma hierarquia entre os dois elementos. Para
a terapia psíquica, a parte psíquica é sempre a mais significativa.” p. 56-57
O CORPO FALANTE
e ter permanecido no inconsciente desde o início. Por isso, não é de grande
importância se a amnésia influenciou também o ‘de onde’ –as experiências
em que o sintoma se baseia– como acontece na histeria; é no ‘para quê’, no
propósito do sintoma que pode ter sido inconsciente desde o início, que se
baseia sua dependência do inconsciente –e não menos firmemente na neurose
obsessiva do que na histeria.” p. 335
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses (1917
[1916–17]). Conferência XIX: resistência e reclaque. In: _____.
Conferências introdutórias sobre psicanálise (parte III). Rio de
Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“Já sabemos, através da observação de Breuer, que há uma precondição para a
existência de um sintoma: algum processo mental deve não ter sido conduzido
normalmente até seu objetivo normal –que era o objetivo de poder tornar-se
consciente. O sintoma é o substituto daquilo que não aconteceu nesse ponto.”
p. 346
“Os sintomas, conforme sabemos, são um substituto de algo que foi afastado
pela repressão. Entretanto, vai uma longa distância, ainda, desde a repressão
à compreensão dessa estrutura substitutiva. Quanto a este outro aspecto do
problema, surgem de nossas observações sobre a repressão as seguintes perguntas
a que espécie de impulsos está sujeita à repressão? por que forças ela se efetua?
e por que motivos? Até agora, temos somente uma parcela de informação a
respeito destes pontos. Ao investigar a resistência, constatamos que ela emana
de forças do eu, de traços de caráter conhecidos e latentes. São estes, pois, os
responsáveis pelo recalque, ou, pelo menos, têm uma participação nela.”
p. 350
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Inibições, sintomas e ansiedade
(1926 [1925]). In: _____. Um estudo autobiográfico inibições,
sintomas e ansiedade, a questão da análise leiga e outros trabalhos.
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 20)
“Um sintoma, por outro lado, realmente denota a presença de algum
processo patológico. Assim, uma inibição pode ser também um sintoma.
O uso lingüístico, portanto, emprega a palavra inibição quando há uma
simples redução de função, e sintoma quando uma função passou por alguma
modificação inusitada ou quando uma nova manifestação surgiu desta. Muito
277
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“No tocante às inibições, podemos então dizer, em conclusão, que são restrições
da funções do eu que foram ou impostas como medida de precaução ou
acarretadas como resultado de um empobrecimento de energia; e podemos ver
sem dificuldade em que sentido uma inibição difere de um sintoma, porquanto
um sintoma não pode mais ser descrito como um processo que ocorre dentro do
eu ou que atua sobre ele.” p. 111
“As principais características dos sintomas já foram estudadas há muito e, espero,
estabelecidas sem discussão. Um sintoma é um sinal e um substituto de uma
satisfação pulsional que permaneceu em estado jacente; é uma conseqüência do
processo de repressão.” p. 112
“O que nos resta agora é considerar a relação entre a formação de sintomas e a
geração de angústia. Parece haver duas opiniões amplamente sustentadas sobre
esse assunto. Uma é que a ansiedade é um sintoma de neurose. A outra é que
existe uma relação muito mais ampla entre as duas. De acordo com a segunda
opinião, os sintomas só se formam a fim de evitar a ansiedade: reúnem a energia
psíquica que de outra forma seria descarregada como angústia. Assim este seria o
fenômeno fundamental e o principal problema da neurose.” p. 168
“É claro, portanto, que a finalidade e o resultado da condição imposta de ser
acompanhado na rua e que o ato obsessivo de lavar as mãos consistiam em
prevenir irrupções de ansiedade dessa espécie. Nesse sentido, toda inibição que o
eu impõe a si próprio pode ser denominada de sintoma.” p. 168
“Assim, em nossa opinião, a relação entre a angústia e o sintoma é menos
estreita do que se supunha, pois inserimos o fator da situação de perigo entre
eles. Podemos também acrescentar que a geração de ansiedade põe a geração
de sintomas em movimento e é, na realidade, um requisito prévio dela, pois
se o eu não despertasse a instância de prazer-desprazer gerando ansiedade, não
conseguiria a força para paralisar o processo que se está preparando no isso e que
ameaça com perigo.” p. 168
Inibição
FREUD, Sigmund (1905). Os chistes e sua relação com inconsciente
(1905). Parte teórica: os chistes e as espécies do cômico. In: _____.
Os chistes e sua relação com o inconsciente. Rio de Janeiro: Imago
278
Sigmund Freud
amiúde parece ser assunto bem arbitrário, quer ressaltemos o lado positivo
de um processo patológico e chamemos o seu resultado de sintoma, quer
ressaltemos seu lado negativo e intitulemos seu resultado de inibição.” p. 107
O CORPO FALANTE
Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 8)
“A apreensão do ingênuo processa-se na pessoa que tem as inibições, obtendo
ela sozinha a produção de prazer que o ingênuo deflagra. Aproximamo-nos da
suspeita de que o prazer se origina da suspensão de inibições. Já que o prazer
nos chistes tem a mesma origem –um núcleo de prazer verbal e de prazer no
nonsense, e uma embalagem de prazer na suspensão das inibições ou no alívio da
despesa psíquica– a relação similar com a inibição explica o parentesco interno
entre o ingênuo e os chistes. Em ambos, o prazer se origina pela suspensão da
inibição interna.” p. 175
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses
(1917 [1916 – 17]). Conferência XXII: algumas idéias sobre
desenvolvimento e regressão: etiologia. In: _____. Conferências
introdutórias sobre psicanálise (parte III). Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“Penso que estamos de acordo com as teorias da patologia geral ao supormos que
um desenvolvimento dessa espécie envolve dois perigos: primeiro, de inibição,
e, segundo, de regressão. Isto é, em vista da tendência geral dos processos
biológicos à variação, não há como fugir ao fato de que nem todas as fases
preparatórias são ultrapassadas com igual êxito e superadas completamente:
partes da função serão retidas permanentemente nesses estádios iniciais e o
quadro total do desenvolvimento será limitado por determinada quantidade de
inibição de desenvolvimento.” p. 397
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Teoria geral das neuroses (1917
[1916 – 17]). Conferência XVIII: os caminhos na formação dos
síntomas. In: _____. Conferências introdutórias sobre psicanálise
(parte III). Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“(…) Sem dúvida, deve haver uma convergência de todos os tipos de coisas,
para que tal não se torne o resultado completo de sua evolução; na verdade,
sabe-se muito bem com quanta freqüência os artistas, em especial, sofrem
de uma inibição parcial de sua eficiência devido à neurose. Sua constituição
provavelmente conta com uma intensa capacidade de sublimação e com
determinado grau de frouxidão nas repressões, o que é decisivo para um conflito.
Um artista encontra, porém, o caminho de retorno à realidade da maneira
expressa a seguir.” p. 439
279
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Podemos muito bem denominar de inibição a uma restrição normal de uma
função. Um sintoma, por outro lado, realmente denota a presença de algum
processo patológico. Assim, uma inibição pode ser também um sintoma.
O uso lingüístico, portanto, emprega a palavra inibição quando há uma
simples redução de função, e sintoma quando uma função passou por alguma
modificação inusitada ou quando uma nova manifestação surgiu desta.”
p. 107
“Visto que o conceito da inibição se acha tão intimamente associado com o
da função, talvez fosse valioso examinar as várias funções do eu com vistas a
descobrir as formas que qualquer perturbação dessas funções assume em cada
uma das diferentes afecções neuróticas.” p. 107
“Passemos então a descrever a inibição de forma a deixar muito pouca dúvida
sobre o que se quer dizer com ela, e digamos que a inibição é a expressão de uma
restrição de uma função do eu.” p. 109
“… toda inibição que o eu impõe a si próprio pode ser denominada de
sintoma.” p. 168
FREUD, Sigmund (1937 – 1939). Breves escritos (1937 – 1938).
Achados, idéias, problemas (1941 [1938]). In: _____. Moisés e
o monoteísmo, esboço de psicanálise e outros trabalhos. Rio de
Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 23)
3 de agosto “O fundamento supremo de todas as inibições intelectuais
e de todas as inibições de trabalho parece ser a inibição da masturbação
na infância. Mas talvez isso vá mais fundo; talvez não seja sua inibição por
influências externas, mas sua natureza insatisfatória em si. Há sempre algo que
falta para a descarga e a satisfação completas –en attendant toujours quelque chose
qui ne venait point– e essa parte que falta, a reação do orgasmo, manifesta–se em
equivalentes em outras esferas, em absences, acessos de riso, pranto [Xy], e talvez
outras maneiras. – Mais uma vez a sexualidade infantil fixou nisso um modelo.”
p. 336
280
Sigmund Freud
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Inibições, sintomas e ansiedade
(1926 [1925]). In: _____. Um estudo autobiográfico inibições,
sintomas e ansiedade, a questão da análise leiga e outros trabalhos.
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 20)
O CORPO FALANTE
I /d. Narcisismo, Eu, Isso
Narcisismo
FREUD, Sigmund (1911 – 1913). Notas psicanalíticas sobre um
relato autobiográfico de um caso de paranoia (Dementia Paranóides
– 1911). Sobre o mecanismo da paranoia. In: _____. O caso de
Schreber, artigos sobre técnica e outros trabalhos. Rio de Janeiro:
Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 12)
“Pesquisas recentes dirigiram nossa atenção para um estádio do desenvolvimento
da libido, entre o auto-erotismo e o amor objetal. Este estádio recebeu o
nome de narcisismo. O que acontece é o seguinte: chega uma ocasião, no
desenvolvimento do indivíduo, em que ele reúne seus instintos sexuais (que até
aqui haviam estado empenhados em atividades auto-eróticas), a fim de conseguir
um objeto amoroso; e começa por tomar a si próprio, seu próprio corpo, como
objeto amoroso, sendo apenas subseqüentemente que passa daí para a escolha de
alguma outra pessoa que não ele mesmo, como objeto.” p. 82-83
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). Sobre o narcisismo: uma
introdução (1914). In: _____. A história do movimento psicanalítico,
artigos sobre metapsicologia e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 14)
“O termo narcisismo deriva da descrição clínica e foi escolhido por Paul Näcke
em 1899 para denotar a atitude de uma pessoa que trata seu próprio corpo da
mesma forma pela qual o corpo de um objeto sexual é comumente tratado – que
o contempla, vale dizer, o afaga e o acaricia até obter satisfação completa através
dessas atividades. Desenvolvido até esse grau, o narcisismo passa a significar
uma perversão que absorveu a totalidade da vida sexual do indivíduo, exibindo,
consequentemente, as características que esperamos encontrar no estudo de
todas as perversões.” p. 89
“A libido afastada do mundo externo é dirigida para o eu e assim dá margem
a uma atitude que pode ser denominada de narcisismo. Mas a própria
megalomania não constitui uma criação nova; pelo contrário, é, como sabemos,
ampliação e manifestação mais clara de uma condição que já existia previamente.
Isso nos leva a considerar o narcisismo que surge através da indução de catexias
objetais como sendo secundário, superposto a um narcisismo primário que é
obscurecido por diversas influências diferentes.” p. 91
281
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Podemos decidir considerar a erogenicidade como uma característica geral
de todos os órgãos e, então, podemos falar de um aumento ou diminuição
dela numa parte específica do corpo. Para cada uma das modificações na
erogenicidade dos órgãos poderia, então, verificar–se uma modificação paralela
da catexia libidinal no eu. Tais fatores constituíram aquilo que acreditamos estar
subjacente à hipocondria e aquilo que pode exercer o mesmo efeito sobre a
distribuição da libido tal como produzida por uma doença material dos órgãos.”
p .100
“Uma comparação entre os sexos masculino e feminino indica então que existem
diferenças fundamentais entre eles no tocante a seu tipo de escolha objetal,
embora essas diferenças naturalmente não sejam universais. O amor objetal
completo do tipo de ligação é, propriamente falando, característico do indivíduo
do sexo masculino. Ele exibe a acentuada supervalorização sexual que se origina,
sem dúvida, do narcisismo original da criança, correspondendo assim a uma
transferência desse narcisismo para o objeto sexual.” p. 105
“Já com o tipo feminino mais freqüentemente encontrado, provavelmente
o mais puro e o mais verdadeiro, o mesmo não ocorre. Com o começo da
puberdade, o amadurecimento dos órgãos sexuais femininos, até então em
estado de latência, parece ocasionar a intensificação do narcisismo original, e isso
é desfavorável para o desenvolvimento de uma verdadeira escolha objetal com a
concomitante supervalorização sexual.” p. 105
FREUD, Sigmund (1914 – 1916). Suplemento metapsicológico à
teoria dos sonhos. (1917 [1915]). In: _____. A história do movimento
psicanalítico, artigos sobre metapsicologia e outros trabalhos. Rio de
Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras
Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 14)
“Na investigação dos estados psiconeuróticos, somos levados a ressaltar em
cada um deles o que se conhece por regressões temporais, isto é, a quantidade
de recessão de desenvolvimento que lhe é peculiar. Distinguimos duas dessas
regressões –uma que afeta o desenvolvimento do eu, e outra, o da libido.
No estado de sono, a última é levada ao ponto de restauração do narcisismo
282
Sigmund Freud
“Parece-me que certas dificuldades especiais perturbam o estudo direto do
narcisismo. Nosso principal meio de acesso a ele continuará a ser provavelmente
a análise das parafrenias. Assim como as neuroses de transferência nos
permitiram traçar os impulsos instintuais libidinais, também a demência precoce
e a paranóia nos fornecerão uma compreensão interna (insight) da psicologia do
eu.” p. 98
O CORPO FALANTE
primitivo, enquanto a primeira remonta à etapa da satisfação alucinatória dos
desejos.” p. 253-254
“Desse modo, sabemos que os sonhos são inteiramente egoístas e que a pessoa
que desempenha o principal papel em suas cenas deve sempre ser reconhecida
como aquela que sonha. Isso é agora facilmente explicado pelo narcisismo do
estado de sono. O narcisismo e o egoísmo, na realidade, coincidem; a palavra
narcisismo destina–se apenas a ressaltar o fato de que o egoísmo é também um
fenômeno libidinal; ou, expressando-o de outra maneira, o narcisismo pode ser
descrito como o complemento libidinal do egoísmo.” p. 254
FREUD, Sigmund (1916 – 1917). Luto e melancolía (1915).
Conferência XXII: algumas idéias sobre desenvolvimento e regressão:
etiologia. In: _____. Conferências introdutórias sobre psicanálise
(parte III). Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard
Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 16)
“A melancolia, portanto, toma emprestado do luto alguns dos seus traços e, do
processo de regressão, desde a escolha objetal narcisista para o narcisismo, os
outros.” p. 283
“(Na melancolia) O acúmulo de catexia que, de início, fica vinculado e,
terminado o trabalho da melancolia, se torna livre, fazendo com que a mania
seja possível, deve ser ligado à regressão da libido ao narcisismo.” p. 291
Eu
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). A questão da análise leiga (1926).
In: _____. Um estudo autobiográfico inibições, sintomas e ansiedade,
a questão da análise leiga e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago
Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas
Completas de Sigmund Freud, v. 20)
“O eu, como o senhor se recordará, é a camada externa, periférica do isso.
Ora, cremos que na superfície mais externa desse eu há uma instância dirigida
imediatamente para o mundo externo, um sistema, um órgão, através de cuja
excitação somente ocorre o fenômeno que denominamos de consciência.”
p. 225
“Assim, temos afirmado repetidamente que o eu é formado, em grande parte, a
partir de identificações que tomam o lugar de catexias abandonadas pelo isso;
que a primeira dessas identificações sempre se comporta como uma instância
especial no eu e dele se mantém à parte sob a forma de um supereu: enquanto
283
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
FREUD, Sigmund (1925 – 1926). Inibições, sintomas e ansiedade
(1926 [1925]). In: _____. Um estudo autobiográfico inibições,
sintomas e ansiedade, a questão da análise leiga e outros trabalhos.
Rio de Janeiro: Imago Editora, 1976. (Edição Standard Brasileira das
Obras Psicológicas Completas de Sigmund Freud, v. 20)
“Estávamos justificados, penso eu, em separar o eu do isso, pois há certas
considerações que necessitam dessa medida. Por outro lado, o eu é idêntico ao
isso, sendo apenas uma parte especialmente diferenciada do mesmo.” p. 119
“Na repressão, o fato decisivo é que o eu é uma organização e o isso não. O eu
é, na realidade, a parte organizada do isso. Estaríamos inteiramente errados se
figurássemos o eu e o isso como dois campos opostos e se supuséssemos que,
quando o eu tenta suprimir uma parte do isso por meio de repressão, o restante
do isso vai em socorro da parte que se acha em perigo e mede sua força com o
eu.” p. 119
Sigmund Freud
que, posteriormente, à medida que fica mais forte, o eu pode tornar-se mais
resistente às influências de tais identificações.” p. 64
O CORPO FALANTE
“A questão é a seguinte: qual foi –o eu do homem primitivo ou o seu isso– que
adquiriu a religião e a moralidade, naqueles dias primevos, a partir do complexo
paterno? Se foi o eu, porque não falamos simplesmente que essa coisas foram
herdadas pelo eu? Se foi o isso, como é que isso concorda com o caráter do isso?
Ou estaremos errados em fazer remontar a diferenciação entre eu, supereu e isso
esses tempos remotos? Não deveríamos honestamente confessar que toda a nossa
concepção dos processos do eu não nos ajuda a compreender a filogênese e não
lhe pode ser aplicada?
Respondamos primeiro ao que é mais fácil de responder. A diferenciação entre
eu e isso deve ser atribuída não apenas ao homem primitivo, mas até mesmo a
organismos muito mais simples, pois ela é expressão inevitável da influência do
mundo externo.” p. 53
FREUD, Sigmund (1932 – 1936). Novas conferências introdutórias
sobre psicanálise (1933 [1932]). Conferência XXXI: a dissecção da
personalidade psíquica. In: _____. Novas conferências introdutórias
sobre psicanálise e outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora,
1996. (Edição Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas
de Sigmund Freud, v. 22)
“Pode-se esperar que a própria situação em que nos encontramos no início de
nossa investigação nos aponte o caminho. Queremos transformar o eu, o nosso
próprio eu, em tema de investigação. Mas isto é possível? Afinal, o eu é, em sua
própria essência, sujeito; como pode ser transformado em objeto? Bem, não há
dúvida de que pode sê-lo. O eu pode tomar–se a si próprio como objeto, pode
tratar-se como trata outros objetos, pode observar-se, criticar-se, sabe-se lá o que
pode fazer consigo mesmo.” p. 64
Isso
FREUD, Sigmund (1923) O ego e o Id. In: _____. O ego e o id e
outros trabalhos. Rio de Janeiro: Imago Editora, 1996. (Edição
Standard Brasileira das Obras Psicológicas Completas de Sigmund
Freud, v. 19)
284
285
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Jacques Lacan
II /a. Falasser (Parlêtre)
II /a.1 Os Seminários
Falasser, Corpo, Inconsciente
LACAN, Jacques. Seminário de 17 de dezembro 1974. In: ______. R.
S. I.: o Seminário: 1974 – 1975, livro 22. Inédito
“Foi o que Freud disse, não foi? (…) Diz que a pulsão genital, no homem não é
nada natural. Não só não é natural mas se não houvesse ese diabo de simbolismo
a empurrá-lo pelo trazeiro, para que ele, afinal, ejacule, e para que isso sirva para
alguma coisa, pois se não, há muito que não mais haveria desses falasseres, esses
seres que não falam só de ser, mas que são pelo ser.” p. 13
concerne a um certo gozo, aquele dito do falo, experimentado como parasitário,
devido a essa própria fala, devido ao falasser.” p. 55
“O falasser adora seu corpo, porque crê que o tem. Na realidade, ele não o tem,
mas seu corpo é sua única consistência, consistência mental, é claro, pois seu
corpo sai fora a todo instante.” p. 64
“Não há equivalência, é a única coisa, o único reduto em que se sustenta o que
se chama a relação sexual no falasser, o ser humano.” p. 98
II /a.2 Outros Escritos
LACAN, Jacques. Joyce, o sinthoma (1979). In: ______. Outros
Escritos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro;
versão final Angelina Harari e Marcus André Vieira
“(…) O S.K.belo é aquilo que é condicionado no homem pelo fato de que ele
vive do ser (= esvazia o ser) enquanto tem … seu corpo: só tem, aliás, a partir
disso. Daí minha expressão falasser [parlêtre] que virá substituir o ICS de Freud
(inconsciente, é assim que se lê): saia daí então, que eu quero ficar aí.” p. 560
LACAN, Jacques. Seminário de 15 de abril 1975. In: ______. R. S. I.:
o Seminário: 1974 – 1975, livro 22. Inédito
“(…) Foi para não perdê-lo, esse pulo do sentido [bond du sens], que enunciei
agora que é preciso sustentar que o homem tem um corpo, isto é, que fala com
seu corpo, ou, em outras palavras, que é falasser por natureza. Assim surgido
como a cabeça da arte [tête de l’ art], ele ao mesmo tempo se desnatura, com
o que toma por objetivo, por objetivo da arte, o natural, tal como o imagina
ingenuamente. O problema é que esse é o seu natural: não admira que ele só o
toque como sintoma.” p. 562
“Mas enquanto isso, é novidade; até o presente, só eu disse não haver relação
sexual e que isso faz buraco num ponto do ser, do falasser. O falasser não
abunda! Mas como é mofo, tende a se expandir. Contentemo-nos então em
dizer que o Inconsciente é Real, enquanto no falasser, ele é afligido pela única
coisa que, do buraco, nos assegura, é o que chamo o Simbólico, encarnando-o
no significante cuja definição, no final das contas, não é outra senão essa, o
buraco. O significante faz o buraco.” p. 61
“(…) Via traçada pelos Irmãos mendicantes: eles se entregam á caridade pública,
que tem de pagar por sua subsistência. Nem por isso UOM (escrito U.O.M
[L.O.M]) deixa de ter seu corpo, a ser revestido, entre outros cuidados. A
tentativa sem esperança feita pela sociedade para que UOM não tenha apenas
um corpo está numa outra vertente: fadada ao fracasso, é claro, ao tornar patente
que, se ele teihum [ahun], não tem nenhum outro, apesar de, pelo fato de seu
falasser, dispor de algum outro, sem chegar a torná-lo seu.” p. 563
LACAN, Jacques. O seminário: o sinthoma, livro 23 (1975 – 1976).
Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2007. Tradução: Sergio Laia
“(…) Ter havido um homem que pensou em circunscrever essa reserva e dar
a fórmula geral do escabelo, e a isso que chamo Joyce, o Sintoma. E que essa
fórmula, ele não a descobriu, por não ter dela a menor suspeita. Mas ela já
andava por toda parte, sob a forma do ICS que destaco com o falasser.”
“O gozo fálico, em contrapartida, situa-se na conjunção do simbólico com o
real. Isso na medida em que, no sujeito que se sustenta do falasser, que é o que
designo como sendo o inconsciente, há a capacidade de conjugar a fala e o que
286
Jacques Lacan
2.
O CORPO FALANTE
p. 564
287
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
LACAN, Jacques. A terceira (1974). Opção Lacaniana Nº62, p. 1136, São Paulo, 2011. Tradução: Teresinha N. Meirelles do Prado
“… Quando os biólogos –para nomear esses cientistas– impõem–se o
embargo de um tratamento laboratorial das bactérias sob pretexto de que se as
tornássemos muito fortes e resistentes, elas poderiam escapolir por debaixo da
porta e eliminar no mínimo toda experiência sexuada ao eliminar o falasser,
mesmo assim, isto é algo bastante mordaz.” p. 20
“… é a própria estrutura do discurso que vocês só fundam ao reformar, e até
reformar os outros discursos, na medida em que ex–sistem ao seu. E é no
discurso de vocês que o falasser esgotará essa insistência que é a sua, e que nos
outros discursos permanece limitada.” p. 26
“A angústia se situa em lugar diferente do medo em nosso corpo. É o sentimento
que surge dessa suspeita que nos vem de nos reduzir a nosso corpo. É muito
curioso que a debilidade do falasser tenha conseguido chegar a esse ponto– até
discernir que a angustia não é o medo do que quer que possa motivar o corpo. É
um medo do medo.” p. 30
LACAN, Jacques. O triunfo da religião, precedido de, Discurso aos
católicos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2005. Tradução: André Teles e
Revisão técnica de Ram Mandil
“Houve um pequeno lampejo –entre dois mundos, se posso dizer, entre um
mundo passado e um mundo que vai se reorganizar como um soberbo mundo
vindouro. Não acho que a psicanálise detenha alguma chave do futuro. Mas terá
sido um momento privilegiado o qual ter-se-á tido uma medida bem correta do
que chamo em meu discurso de ‘falasser’ [parlêtre]. O falasser é uma forma de
exprimir o inconsciente. O fato totalmente imprevisto e inexplicável, segundo
o qual o homem é um animal falante, a saber o que é, com que se fabrica essa
atividade da fala –eis sobre o que tento lançar algumas luzes no que vou lhes
contar nesse Congresso. É muito ligado a certas coisas que Freud considerou
vinculadas à sexualidade. Com efeito, tem uma relação, mas liga-se à sexualidade
de forma bem particular.” p. 72
LACAN, Jacques. O fenômeno Lacaniano. Opção Lacaniana, Nº68
e Nº69, p. 11-23, São Paulo, 2014. Tradução: Teresinha N.
Meirelles do Prado
Jacques Lacan
II /a.3 Outros Textos
O CORPO FALANTE
“Vou dizer-lhes da mesma forma a palavra da qual me sirvo para designar
o inconsciente –digo falasser. Permito–me aqui também uma pequena
equivocidade– é o ser que fala, mas é também aquele que fala essa coisa fabulosa
que, estritamente, só se sustenta pela linguagem, a saber, o ser.” p. 19
II /b. Inconsciente
II /b.1 Os Seminários
Inconsciente, Das ding, Trieb, Linguagem, Hiância, Corte
LACAN, Jacques. O seminário: a ética da psicanálise, livro 7 (1959 –
1960). Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1988. Tradução: Antônio Quinet
“Pois esse das Ding está justamente no centro, no sentido de estar excluído.
… ele deve ser estabelecido como exterior, esse das Ding, esse outro préhistórico impossível de esquecer, do qual Freud afirma a necessidade da posição
primeira sob a forma de alguma coisa que é entfremedet, alheia a mim, embora
esteja no âmago desse eu, alguma coisa que no nível do inconsciente, só uma
representação representa.” p. 92
“É precisamente o que revela a natureza própria ao Trieb uma vez que ele não é
puramente o instinto. Mas que tem relação com das Ding como tal, com a coisa,
dado que ela é distinta do objeto.” p. 140
“Quanto a descrença (Unglauben), há aí, na nossa perspectiva, uma posição do
discurso que se concebe muito precisamente em relação à coisa –a coisa aí é
rejeitada no sentido próprio de Werwerfung.” p. 164
LACAN, Jacques. O seminário: os quatro conceitos fundamentais
da psicanálise, livro 11 (1964). Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1988.
Tradução: M. D. Magno
“A maioria desta assembleia tem noção de que já adiantei isto – o inconsciente é
estruturado como uma linguagem – o que se relaciona com um campo que hoje
nós é muito mais acessível do que no tempo de Freud.” p. 25
“O importante não é que o inconsciente determina a neurose… o inconsciente
nos mostra a hiância por onde a neurose se conforma a um real –real que bem
pode, ele sim não ser determinado. Nessa hiância, alguma coisa acontece.”
p. 27
288
289
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“O estatuto do inconsciente, que eu lhes indico tão frágil no plano ôntico, é
ético.” p. 37
“Da última vez, eu lhes falei do conceito de inconsciente, cuja verdadeira
função é justamente estar em relação profunda, inicial, inaugural, com a do
conceito Unbegriff – ou de begriff do Un original, isto é, o corte. Esse corte, eu
o ligue profundamente à função do sujeito como tal, do sujeito em sua relação
constituinte ao próprio significante.” p. 46
“Para nós, em nossa referência ao inconsciente, é da relação ao órgão que se
trata. Não se trata da relação à sexualidade, nem mesmo ao sexo, se é que
podemos dar a este termo uma referência específica –mas de relação ao falo, no
que ele falta ao que poderia ser atingido de real na visada do sexo. É na medida
em que, no coração da experiência do inconsciente, lidamos com esse órgão –
determinado no sujeito pela insuficiência organizada no complexo de castração–
que podemos perceber em que medida o olho é tomado por semelhante
dialética.” p. 100
“O inconsciente é a soma dos efeitos da fala, sobre um sujeito, nesse nível em
que o sujeito se constitui pelos efeitos do significante. Isto marca bem que,
com o termo sujeito –é por isso que o lembrei uma origem– não designamos
o substrato vivo de que precisa o fenômeno subjetivo, nem qualquer espécie
de substância, nem qualquer ser do conhecimento em sua patia, segunda ou
primitiva, nem mesmo o logos que se encarnaria em alguma parte, mas o sujeito
cartesiano…” p. 122
Inconsciente, Gozo, Corpo falante, Alingua
Jacques Lacan
“Assim, o inconsciente se manifesta sempre como o que vacila num corte do
sujeito –donde ressurge o machado que Freud assimila ao desejo– desejo que
situaremos provisoriamente na metonímia desnudada do discurso em causa, em
que o sujeito se saca em algum ponto inesperado.” p. 32
O CORPO FALANTE
sobre a fisiologia do sistema nervoso, nem sobre o funcionamento da ereção,
nem sobre a ejaculação precoce.” p. 156
“O real, eu diria, é o mistério do corpo falante, é o mistério do inconsciente.”
p. 178
“(…)Esses afetos são o que resulta da presença de alíngua no que, de saber, ela
articula coisas que vão muito mais longe do que aquilo que o ser falante suporta
de saber enunciado.” “… Alíngua nos afeta primeiro por tudo que ela comporta
como efeitos que são afetos. Se se pode dizer que o inconsciente é estruturado
como uma linguagem, é no que os efeitos de alíngua, que já estão lá como saber,
vão bem além de tudo que o ser que fala é suscetível de enunciar.” p. 190
“É porque há o inconsciente, isto é alíngua no que é por coabitação com ela
que se define um ser chamado falante, que o significante pode ser chamado a
fazer sinal, a constituir signo. Entendam esse signo como lhes agradar, inclusive
thing do inglês, a coisa. (…) O significante é signo de um sujeito. Enquanto
suporte formal, o significante atinge um outro que não aquele que é cruamente,
ele, como significante, um outro que ele afeta e que dele é feito sujeito, ou, pelo
menos, que passa por sê-lo. É nisto que o sujeito se acha ser, e somente para o ser
falante, um ente cujo ser está alhures, como mostra o predicado. O sujeito não
é jamais senão pontual e evanescente, pois ele só é sujeito por um significante, e
para um outro significante.” p. 194-195
LACAN, Jacques. O seminário: o sinthoma, livro 23 (1975 – 1976).
Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2007. Tradução: Sergio Laia
“Trata-se de situar o que o inconsciente tem a ver com o real, o real do
inconsciente, se o inconsciente for real. Como saber se o inconsciente é real ou
imaginário? É efetivamente a questão. Ele participa de um equívoco entre os
dois.” p. 98
LACAN, Jacques. O seminário: mais ainda, livro 20 (1972 – 1973).
Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1985. Tradução: M. D. Magno
“Aonde isso fala, isso goza, e nada sabe.” p.142
“Creio poder, por uma topologia grosseira, dar suporte ao que está aqui em
pauta, a saber, à função mesma do real distinguida por mim do que julgo poder
com certeza tomar pelo inconsciente – com certeza porque tenho prática com
o termo inconsciente, não é? Na medida em que o inconsciente não deixa de se
referir ao corpo, a função do real pode ser distinguida dele.” p. 131
“… o inconsciente, não é que o ser pense, como o implica, no entanto, o que
dele se diz na ciência tradicional –o inconsciente, é que o ser, falando, goze e,
acrescento que isto quer dizer– não saber de coisa alguma.” p. 143
“Entretanto, se há alguma coisa que tenho articulado desde o princípio com
cuidado, é que o inconsciente nada tem a ver com o fato de um monte de coisas
ser ignorado quanto a seu próprio corpo.” p. 145
“(…) Aonde isso fala, isso goza. E isto não quer dizer que isso saiba de coisa
alguma, porque, mesmo assim até nova ordem, o inconsciente nada nos revelou
290
291
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
LACAN, Jacques. Televisão (1973). In: ______. Outros Escritos. Rio
de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro; versão final
Angelina Harari e Marcus André Vieira
“(…) Freud não encontrou outra melhor, e não há por que voltar a isso. Essa
palavra tem o inconveniente de ser negativa, o que permite supor ali qualquer
coisa no mundo, sem contar o resto. Por que não? Para coisa despercebida, a
expressão ‘por em toda parte’ convém tanto quanto ‘em parte alguma’.”
p. 510
“(…) Nos outros, que só têm ser por serem nomeados, embora se imponham
a partir do real, existe instinto, ou seja, o saber que sua sobrevivência implica.
Nem que seja apenas para nosso pensamento, talvez inadequado nesse aspecto.
Restam os animais que carecem de homem, por isso ditos d’homésticos e que,
por essa razão, são percorridos por sismos, aliás curtíssimos, do inconsciente.”
p. 510
“(…) O inconsciente, isso fala, o que o faz depender da linguagem, da qual
pouco sabemos, apesar do que designo por lingüisteria, para nela agrupar o que
pretende –essa é a novidade– intervir nos homens em nome da linguística. A
linguística é a ciência que se ocupa de lalingua, que escrevo numa só palavra com
isso especificar seu objeto, como se faz em qualquer outra ciência.” p. 510
“(…) o sujeito do inconsciente só toca na alma através do corpo, por nele
introduzir o pensamento: desta vez, contradizendo Aristóteles. O homem não
pensa com sua alma, como imagina o Filósofo. Ele pensa porque uma estrutura,
a da linguagem –a palavra comporta isso–, porque uma estrutura recorta seu
corpo, e nada tem a ver com a anatomia.” p. 511
“(…) Dai o inconsciente, ou seja, a insistência com que o desejo se manifesta,
ou a repetição do que é demandado nele –não foi o que disse Freud a seu
respeito no momento mesmo em que o descobriu? Dai o inconsciente– se a
estrutura que se reconhece por fazer a linguagem em lalíngua como costumo
dizer, a domina bem.” p. 513
“(…) Interpolo aqui uma observação. Não baseio essa ideia de discurso na exsistência do inconsciente. É o inconsciente que situo a partir dela – por ele só
ex-sistir a um discurso.” (…) o inconsciente ex-siste tanto mais que, por só se
atestar claramente no discurso da histérica, só há, em qualquer outro lugar, um
enxerto dele: sim, por mais espantoso que possa parecer, inclusive no discurso do
analista, onde o que se faz com ele é cultura.” p. 517
292
Jacques Lacan
II /b.2 Outros Escritos
O CORPO FALANTE
“(…) A história que eu negligenciaria o afeto é farinha do mesmo saco. Que
me respondam apenas uma coisa: afeto diz respeito ao corpo? Uma descarga de
adrenalina é ou não é do corpo? Que perturba suas funções, é verdade. Mas, em
que isso provém da alma? O que isso descarrega é pensamento.
Então, o que se deve pesar é se minha ideia de que o inconsciente é estruturado
como uma linguagem permite verificar mais seriamente o afeto – do que a ideia
expressa de que ele é um tumulto em que se produz uma disposição melhor. Pois
é isso que me contrapõem.” p. 523
LACAN, Jacques. Joyce, o sinthoma (1979). In: ______. Outros
Escritos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro;
versão final Angelina Harari e Marcus André Vieira
“(…) O inconsciente, em Freud, quando ele o descobre (é o que se descobre é de
uma vez só. mas depois da invenção é preciso fazer o inventário), o inconsciente
é um saber enquanto falado, como constitutivo do UOM. A fala, é claro, definese aí por ser o único lugar em que o ser tem um sentido. E o sentido do ser é
presidir o ter, o que justifica o balbucio epistêmico.” p. 561
II /b.3 Outros Textos
LACAN, Jacques. O triunfo da religião, precedido de, Discurso aos
católicos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2005. Tradução: André Teles e
Revisão técnica de Ram Mandil
“O próprio do inconsciente freudiano é de ser traduzível – mesmo ali onde não
pode ser traduzido, isto é, num certo ponto radical do sintoma, designadamente
do sintoma histérico, que é da natureza do indecifrado, portanto do decifrável,
ou seja, ali onde o sintoma só é representado no inconsciente caso se entregue à
função daquilo que se traduz.” p. 19
“Com efeito, há no inconsciente coisas significantes que se repetem, correndo
constantemente à revelia do sujeito. Isto é algo semelhante ao que eu via ainda
há pouco ao me dirigir a esta sala, isto é, anúncios luminosos deslizando na
fachada dos nossos prédios. O que os torna interessantes para o clínico é que,
em circunstâncias propícias, eles se vêem inseridos no que é essencialmente
da mesma natureza, nosso discurso inconsciente no sentido mais amplo, ou
seja, tudo o que há de retórico em nossa conduta, quer dizer, muito mais que
acreditamos. Deixo aqui o lado dialético.” p. 19-20
293
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Pois convém dizê-lo, o inconsciente é um fato, na medida em que se sustenta
no próprio discurso que o estabelece, …” p. 479
LACAN, Jacques. Considerações sobre a histeria (1977). Opção
Lacaniana, São Paulo, n. 50, p. 17–22, dez. 2007. Tradução: Manoel
Barros da Motta
“… O inconsciente se origina no fato de que a histérica não sabe o que diz,
quando de qualquer maneira ela diz alguma coisa com as palavras que lhe
faltam. O inconsciente é um sedimento de linguagem.” p. 17
“A idiea de representação inconsciente é uma ideia totalmente vazia. Freud
escorregava inteiramente ao lado do inconsciente.” p. 19
“O inconsciente, eu proponho dar-lhe outro corpo, porque é pensável que
se pense as coisas sem pesá-las, bastam aí as palavras. As palavras fazem
corpo… É isto o inconsciente: somos guiados por palavras das quais nada
compreendemos.” p. 19-20
II /c. O corpo falante
II /c.1 Os Seminários
Objeto, Economía libidinal, Gozo
LACAN, Jacques. O seminário: a ética da psicanálise, livro 7 (1959 –
1960). Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1988. Tradução: Antônio Quinet
“Como em Sade, a noção da pulsão de morte (de Freud) é uma sublimação
criacionista, ligada a esse elemento estrutural que faz que, desde que lidamos
com o que quer que seja no mundo, se apresenta sob a forma da cadeia
significante, haja a uma certa altura, mas certamente fora do mundo da
natureza, o para além dessa cadeia, o ex-nihilo sobre o qual ela se funda e se
articula como tal.” p. 260
Corpo, Imagen, Orgão, Objeto a
LACAN, Jacques. O seminário: a ética da psicanálise, livro 7 (1959 –
1960). Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1988. Tradução: Antônio Quinet
“Ainda no tempo de Kant o que nos é apresentado como o limite das
posibilidades do belo, como o ideale erscheinem, é a forma do corpo humano.
Ela foi, porque não é mais, forma divina. Ela é o envoltorio de todas as fantasias
possíveis do desejo humano, as flores do desejo estão contidas nesse vaso do qual
tentamos fixar as paredes.” p. 357
“É o que leva a establecer a forma do corpo, e muito precisamente a imagen, tal
como já articulei aquí na função do narcisismo, como o que representa, numa
certa relação, a relação do homem com a sua segunda morte, o significante de
seu desejo, seu desejo visível.” p. 357
“É o que leva a estabelecer a forma do corpo, e muito precisamente a imagem,
tal como já articulei aqui na função do narcisismo, como o que representa,
numa certa relação, a relação do homem com a sua segunda morte, o
significante de seu desejo, desejo do visível.” p. 357
LACAN, Jacques. O seminário: os quatro conceitos fundamentais
da psicanálise, livro 11 (1964). Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1988.
Tradução: M. D. Magno
“Freud escreve o O mal-estar na civilização para dizer-nos que tudo o que se
passa do gozo à interdição vai no sentido de um reforço sempre crescente de
interdição. Todo aquele que se aplica em submeter-se à lei moral sempre vê
reforçarem as exigências, sempre mais minuciosas, mais cruéis de seu super-eu.”
“Desde quando, por exemplo, a função do órgão, e logo de saída sua simples
presença, apareceram na linhagem do vivo? A relação do sujeito com o órgão
está no coração de nossa experiência. Entre todos os órgãos com que lidamos, o
seio, as fezes, e outros ainda, há o olho, e é surpreendente ver que ele remonta a
muito longe nas espécies que representam o aparecimento da vida.” p. 90
“É nesse ponto que chegamos à fórmula de que uma transgressão é necessária
para aceder a esse gozo, e que… é muito precisamente para isso que serve a lei. A
transgressão no sentido do gozo só se efetiva apoiando-se no princípio contrário,
sob as formas da lei.” p. 217
“O objeto a é algo de que o sujeito, para se constituir, se separou como órgão.
Isso vale como símbolo da falta, quer dizer, do falo, não como tal, mas fazendo
p. 216
294
Jacques Lacan
LACAN, Jacques. O aturdito (1972). In: ______. Outros Escritos. Rio
de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro; versão final
Angelina Harari .e Marcus André Vieira
O CORPO FALANTE
“Em outros termos, trata-se de colocar agora a questão do que é o olho como
órgão… Tudo que está no organismo como órgão se apresenta sempre com uma
grande multiplicidade de funções.” p. 99
295
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Sobre a pseudociese de Anna O.: “Aí ela mostra o quê? – pode-se especular,
seria preciso ainda não se precipitar sobre a linguagem do corpo. Digamos
simplesmente que o domínio da sexualidade mostra um funcionamento natural
dos signos. Neste nível, não são significantes, pois o falso-balão é um sintoma e,
segundo a definição de signo, algo para alguém.” p. 149
“É na função em que o objeto sexual desliza pela encosta da realidade, e se
apresenta como um pedaço de carne, que surge essa forma de dessexualização
tão manifesta que se chama, na histérica, reação de desgosto. O desejo interessa
–graças a Deus, sabemos demais disso– bem outra coisa, e mesmo coisa
completamente diferente do organismo, sem deixar de implicar, em diversos
níveis, o organismo.” p. 163
“A integração da sexualidade à dialética do desejo passa pelo jogo daquilo
que, no corpo, merecerá que designemos com o termo de aparelho –se vocês
quiserem mesmo entender com isso aquilo com que, em relação à sexualidade,
o corpo pode aparelhar-se, a se distinguir daquilo como que os corpos se podem
emparelhar.” p. 163
“A lâmina tem uma borda, ela vem inserir–se na zona erógena, quer dizer, num
dos orifícios do corpo, no que esses orifícios –toda a nossa experiência o mostra–
estão ligados à abertura-fechamento da hiância do inconsciente. As zonas
erógenas estão ligadas ao inconsciente, porque é lá que se amarra a presença do
vivo.” p. 188
“A libido é o órgão essencial para se compreender a natureza da pulsão. Esse
órgão é irreal. Irreal não é de modo algum imaginário… Mas por ser irreal, isso
não impede um órgão de se encarnar.” p. 195
“O corpo da ciência, só conceberemos seu porte ao reconhecermos que ele é, na
relação subjetiva, equivalente ao que chamei aqui de objeto minúsculo.”
p. 251
linguagem, Ser falante, Corpo, Gozo do corpo do Outro,
Substancia gozante, Significante, Não há relacão sexual
LACAN, Jacques. O seminário: mais ainda, livro 20 (1972 – 1973).
Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1985. Tradução: M. D. Magno
“(…) que a linguagem não é o ser falante – que eu não me achava deslocado
por ter que falar numa faculdade de direito, pois é onde a existência dos códigos
296
Jacques Lacan
falta. É então preciso que isso seja um objeto –primeiramente, separável– e
depois, tendo alguma relação com a falta.” p. 101
O CORPO FALANTE
torna manifesta a linguagem, isto se mantém lá, à parte, constituído ao correr
das eras, ao passo que o ser falante, o que chamamos os homens, é outra coisa.”
p. 10
“O hábito ama o monge, porque é por isso que eles são apenas um. Dito de
outro modo, o que há sob o hábito, e que chamamos de corpo, talvez seja apenas
esse resto que chamo de objeto a.” p. 14
“… o ser é o gozo do corpo como tal, quer dizer, como assexuado, pois o que
chamamos de gozo sexual é marcado, dominado, pela impossibilidade de
estabelecer, como tal, em parte alguma do enunciável, esse único Um que nos
interessa, o Um da relação sexual.” p. 15
“… o gozo do Outro, do corpo do Outro, só se promove pela infinitude.”
(…)”o que concerne ao gozo enquanto sexual.” “De um lado o gozo é marcado
por esse furo que não lhe deixa outra via senão a do gozo fálico. Do outro, será
que algo pode ser atingido…” p. 16
“Para situar, antes de deixá-los, meu significante, proponho-lhes sopesar o que,
da última vez, se inscreveu com minha primeira frase, o gozar de um corpo, de
um corpo que, o Outro, o simboliza, e que comporta talvez algo de natureza a
fazer pôr em função uma outra forma de substância, a substância gozante.”
p. 35
“Não é lá que se supõe propriamente a experiência psicanalítica? – a sustância do
corpo, com a condição de que ela se defina apenas como aquilo de que se goza.
Propriedade do corpo vivo, sem dúvida, mas nós não sabemos o que é estar vivo,
senão apenas isto, que um corpo, isso goza.” p. 35
“(…) Como o sublinha admiravelmente essa espécie de kantiano que era
Sade, só se pode gozar de uma parte do corpo do Outro, pela simples razão
de que jamais se viu um corpo enrolar–se completamente, até incluí–lo e
fagocitá–lo, em torno do corpo do Outro. É por isso que somos reduzidos a um
estreitamentozinho assim, a tomarmos um antebraço, ou não importa o que –
puxa!” p. 35
“… O significante é a causa do gozo. Sem o significante, como mesmo abordar
aquela parte do corpo? Como, sem o significante, centrar esse algo que, do gozo,
é a causa material? Por mais desmanchado, por mais confuso que isto seja, é uma
parte que, do corpo, é significada nesse depósito.” p. 36
“Todas as necessidades do ser falante estão contaminadas pelo fato de estarem
implicadas com uma outra satisfação… à qual elas podem faltar. (…) o gozo de
que depende essa satisfação, a que se baseia na linguagem.” p. 70-71
297
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) Um corpo, o de vocês, não importa que outro aliás, corpo que se
movimenta pra lá e pra cá, é preciso que ele se baste. Alguma coisa me faz
pensar nisto, um sindromezinho que vi sair da minha ignorância, e que me foi
lembrado –se por acaso as lágrimas parassem de correr, o olho não funcionaria
mais muito bem. È o que chamo de milagres do corpo.” p. 149
“De tudo que se desenrolou dos efeitos do cristianismo, principalmente na arte
–é nisto que encontro o barroquismo com o qual aceito ser vestido– tudo é
exibição de corpo evocando o gozo…” p. 154
“Aí há um furo, e esse furo se chama o Outro. Pelo menos foi assim que acreditei
poder denominá–lo, o Outro enquanto lugar onde a fala, por ser deposta –
vocês prestarão atenção nas ressonâncias– funda a verdade e, com ela, o pacto
que supre a inexistência da relação sexual, enquanto ela seria pensada, pensada
pensável, dito de outro modo, e que o discurso não seria reduzido a só poder –se
vocês se lembram do título de um dos meus Seminários– partir da aparência.”
Seminário 18: De um discurso que não fosse semblante (1971).” p. 154
“… o osso do meu ensino: que eu falo sem saber. Falo com o meu corpo, e isto,
sem saber. Digo, portanto, sempre mais do que sei”…“É aí que chego ao sentido
da palavra sujeito no discurso analítico. O que fala sem saber me faz eu, sujeito
do verbo. Isto não basta para me fazer ser.” p. 161
“É o corpo falante, no que ele só pode chegar a se reproduzir graças a um malentendido do seu gozo. O que é dizer que ele só se reproduz graças a uma rata
do que ele quer dizer, pois o que ele quer dizer –isto é, como bem diz alíngua,
seu sem-tido– é seu gozo efetivo. E é ao rateá-lo que ele se reproduz– quer dizer,
ao trepar.” p. 163-164
“Parece que o sujeito representa para si os objetos inanimados em função de
não haver relação sexual. Há apenas corpos falantes, eu disse, que fazem para
si uma ideia do mundo como tal. O mundo, o mundo do ser cheio de saber, é
apenas um sonho, um sonho do corpo enquanto falante, pois não existe sujeito
conhecedor. Há sujeitos que se dão correlatos no objeto a, correlatos de fala que
goza enquanto gozo de fala. Que outra coisa ela amarra senão outros Uns?”
Jacques Lacan
“No ser falante o gozo é aparelhado pela linguagem. Aí está mais uma fórmula
que lhes proponho, se é que podemos convir que, o aparelho, não há outro
senão a linguagem. É assim que, no ser falante, o gozo é aparelhado.” p. 75
O CORPO FALANTE
divisão de sujeito. É o que nos explica que, por tanto tempo, o sujeito tenha
podido crer que o mundo sabia tanto quanto ele.” p. 172
“O que se escreve, em suma, o que seria isso? As condições de gozo. E o que se
conta, o que seria? Os resíduos do gozo.” p. 177
“Por uma escolha para a qual não se sabe o que o guiou, Aristóteles tomou
partido de não dar outra definição do indivíduo senão o corpo –o corpo
enquanto organismo, o que se mantém como um, e não o que se reproduz”
“O corpo, o que é ele então? É ou não é o saber do um? O saber do um se revela
não vir do corpo. O saber do um, por pouco que possamos dizer disto, vem do
significante Um.” p. 195
“Não há relação sexual porque o gozo do Outro, tomado como corpo, é sempre
inadequado…” p. 197
“Não há relação sexual porque o gozo do Outro, tomado como corpo, é sempre
inadequado –perverso de um lado, no que o Outro se reduz ao objeto a– e do
outro, eu direi louco, enigmático. Não é do defrontamento com este impasse,
com essa impossibilidade de onde se define um real, que é posto à prova o
amor?” p. 198
LACAN, Jacques. O seminário: o sinthoma, livro 23 (1975 – 1976).
Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2007. Tradução: Sergio Laia
“Quem sabe o que se passa no seu corpo? …Para alguns, chega a ser o sentido
que dão ao inconsciente. Entretanto, se há uma coisa que tenho articulado desde
o princípio com cuidado, é que o inconsciente nada tem a ver com o fato de
um monte de coisa ser ignorado quanto a seu próprio corpo. Quanto ao que se
sabe ele é de uma natureza bem diferente mesmo. Sabe–se um monte de coisas
provenientes do significante.” p. 145
“O inconsciente de Freud é justamente a relação que há entre um corpo que
nos é estranho e alguma coisa que faz circulo, ou mesmo reta infinita, e que é o
inconsciente, essas duas coisas sendo, de todo modo, equivalentes uma à outra.”
p. 145
“Ter relação com o próprio corpo como estrangeiro é, certamente uma
possibilidade, expressada pelo fato de usarmos o verbo ter.” p. 146
p. 171
“Para todo ser falante, a causa do desejo é estritamente, quanto à estrutura,
equivalente, se posso dizer à sua dobradura, quer dizer, ao que chamei sua
298
299
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
LACAN, Jacques. Radiofonia (1970). In: ______. Outros Escritos. Rio
de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro; versão final
Angelina Harari e Marcus André Vieira
“O corpo, a leva-lo a sério, é, para começar, aquilo que pode portar a marca
adequada para situá–lo numa sequência de significantes. A partir dessa marca,
ele é suporte da relação, não eventual, mas necessária, pois subtrair-se dela
continua a ser sustentá-la.” p. 407
LACAN, Jacques. O aturdito (1972). In: ______. Outros Escritos. Rio
de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro; versão final
Angelina Harari e Marcus André Vieira
“Assim é que, do discurso psicanalítico, um órgão faz-se o significante. Aquele
que podemos dizer que se isola na realidade corporal como isca, por nela
funcionar….a) com fânero…b) a fim de servir de logro…” p. 456
LACAN, Jacques. Televisão (1973). In: ______. Outros Escritos. Rio
de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro; versão final
Angelina Harari e Marcus André Vieira
“(…) A cura é uma demanda que parte da voz do sofredor, de alguém que sofre
de seu corpo ou de seu pensamento. O espantoso que haja uma resposta e que
em todos os tempos a medicina tenha acertado na mosca por meio de palavras.”
p. 511
LACAN, Jacques. Joyce, o sinthoma (1979). In: ______. Outros
Escritos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro;
versão final Angelina Harari e Marcus André Vieira.
“(…) Se ele Henriscarnece do Bloom de seu devaneio, é para demonstrar que, ao
se azafamar tanto com a espátula publicitaria, o que ele enfim possui, obtendo-o
dessa maneira, não vale dizer grande coisa. Ao fazer tão barato seu próprio
corpo, ele demonstra que ‘UOM tem um corpo’ não quer dizer nada, se não
fizer todos os outros pagarem o dízimo por isso.” p. 563
“(…) Tem razão, posto que a história nada mais é que uma fuga da qual só
se narram os êxodos. Através de seu exílio, ele sanciona a seriedade de seu
julgamento. Somente deportados participam da historia: já que o homem tem
um corpo, e pelo corpo que se o tem. Avesso do habeas corpus.” p. 565
“(…) Assim, indivíduos que Aristóteles toma como corpos podem não ser nada
além de sintomas, eles próprios, em relação a outros corpos. Uma mulher, por
300
Jacques Lacan
II /c.2 Outros Escritos
O CORPO FALANTE
exemplo, e sintoma de um outro corpo.” p.
565
“(…) O sintoma histérico, resumo, e, para UOM, o sintoma de se interessar
pelo sintoma do outro como tal: o que não exige o corpo a corpo. O caso de
Sócrates o confirma, exemplarmente.” p. 566
II /c.3 Outros Textos
LACAN, Jacques. A terceira (1974). Opção Lacaniana Nº62, São
Paulo, 2011. Tradução: Teresinha N. Meirelles do Prado
“O sujeito suposto saber que é o analista na transferência não é suposto
erroneamente, se sabe em que consiste o inconsciente, em ser um saber que se
articula com lalingua, o corpo que aí fala só está enlaçado a ele pelo real do qual
se goza.” p. 21
LACAN, Jacques. O fenômeno Lacaniano. Opção Lacaniana Nº68 e
Nº69, São Paulo, 2014. Tradução: Teresinha N. Meirelles do Prado
“Os pretensos afetos demonstram, na verdade, apenas a afetação daqueles que
falam deles, O que constitui a emoção? Vocês acreditam que sejam as tripas que
se agitam? O que as agita? Elas agitam palavras. Não há nada que afete mais,
como se diz, aquele que qualifiquei de ser falante.” p. 19
II /d. O sinthoma
II /d.1 Os Seminários
LACAN, Jacques. O seminário: o sinthoma, livro 23 (1975 – 1976).
Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2007. Tradução: Sergio Laia
“Trata-se da falta, o sin, e é uma vantagem que meu sinthome comece com ele.
Em inglês, quer dizer pecado, a falta primordial. Dai a necessidade de que não
cesse a falha que sempre aumenta, exceto ao sofrer o cessa da castração como
possível.” p. 14
“Ao contrário do que pode parecer à primeira vista, o distanciamento de Joyce
quanto à política produz o que chamarei de sint home rule. Esse Home rule, o
Freemans Journal o representava como o sol nascendo atrás do Banco da Irlanda.
Joyce, como por acaso, o faz nascer no noroeste, o que não é comum para um
nascer do sol. Mesmo considerando como esse tema range em Joyce, trata-se,
301
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
ainda assim, do sinthoma que rola, o sinthoma com rodinhas que Joyce junta
com o outro.” p. 15-16
“… temos apenas o equívoco como arma contra o sinthoma.” p.
18
“Digo que é preciso supor tetrádico o que faz o laço borromeano –perversão
quer dizer apenas versão em direção ao pai–, em suma o pai é um sintoma, ou
um sinthoma, se quiserem. Estabelecer o laço enigmático do imaginário, do
simbólico e do real implica ou supõe a ex-sistência do sintoma. (…) Vocês têm a
possibilidade de liga-los. Com o quê? Com o sinthoma, o quarto.” p. 21
“Quando a essa cadeia que, portanto, não constitui mais uma paranoia a não ser
que ela seja comum, a possível floculação terminal de quatro termos nessa trança
que é a trança subjetiva nos dá a possibilidade de supor que, na totalidade da
textura, haja alguns pontos eleitos que se revelam como o fim do nó de quatro.
E é de fato nisso que consiste, propriamente falando, o sinthoma.
Trata–se do sinthoma não na medida em que é ele personalidade, mas na
medida em que, em relação aos três outros, se especifica por ser sinthoma
e neurótico. Dessa forma temos um panorama do que é da ordem do
inconsciente. É na medida em que o sinthoma o especifica que há um termo
que, mais especialmente, vincula-se a ele. O termo que tem uma relação
privilegiada com o que é da ordem do sinthoma é o inconsciente.” p. 53
“(…) Existe para na medida em que há um laço do sinthoma com alguma coisa
de particular. É na medida em que o sinthoma volta a se ligar ao inconsciente
e o imaginário se liga ao real que lidamos com alguma coisa da qual surge o
sinthoma.” p. 53
“Com efeito, se a não-relação deriva da equivalência, a relação se estrutura na
medida em que não há equivalência. Há, portanto, ao mesmo tempo, relação
sexual e não há relação. Há relação sexual na medida em que há sinthoma,
isto é, em que o outro sexo é suportado pelo sinthoma. Permito-me dizer que
o sinthoma é, muito precisamente, o sexo ao qual não pertenço, isto é, uma
mulher. Ser uma mulher é um sinthoma para todo homem, fica absolutamente
claro que há necessidade de encontrar um outro nome para o que o homem
é para uma mulher, posto que o sinthoma se caracteriza justamente pela nãoequivalência. Pode-se dizer que o homem é para uma mulher tudo o que
quiserem, a saber, uma aflição pior que um sinthoma. (…) Trata-se mesmo de
uma devastação. Se não há equivalência, vocês são obrigados a especificar o que
concerne ao sinthoma.” p. 98
“Penso que não se pode conceber o psicanalista de outra forma senão como um
302
Jacques Lacan
O CORPO FALANTE
sinthoma. Não é a psicanálise que é um sinthoma, mas o psicanalista.”
p. 131
LACAN, Jacques. Anexos: Joyce, o sintoma. In: ______. O seminário:
o sinthoma, livro 23 (1975 – 1976). Rio de Janeiro: Jorge Zahar,
2007. Tradução: Sergio Laia
“… ao formular esse título Joyce, o sintoma, nada menos que seu nome próprio,
aquele no qual acredito que ele se reconheceria na dimensão da nomeação.”
p. 158
“O pai, como aquele que nome e como aquele que nomeia, não é o mesmo. O
pai é esse quarto elemento (…) sem o qual nada é possível no nó do simbólico,
do imaginário e do real. Mas há outro modo de chama-lo. É nisso que o que diz
respeito ao Nome-do-Pai, no grau em que Joyce testemunha isso, eu o reviso
hoje como o que é conveniente chamar de sinthoma.” p. 163
“(…) o inconsciente se enoda ao sinthoma, que é o que há de mais singular em
cada individuo (…).” p. 163
II /d.2 Outros Escritos
LACAN, Jacques. Joyce, o sinthoma (1979). In: ______. Outros
Escritos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro;
versão final Angelina Harari e Marcus André Vieira
“(…) O S.K.belo é aquilo que é condicionado no homem pelo fato de que ele
vive do ser (= esvazia o ser) enquanto tem … seu corpo: só tem, aliás, a partir
disso. Daí minha expressão falasser [parlêtre] que virá substituir o ICS de Freud
(inconsciente, é assim que se lê): saia daí então, que eu quero ficar aí.”
p. 560
“(…) Por seu artifício, leva as coisas a um ponto em que nos perguntamos se ele
não é o Santo, o santo homem [saint homme] até não ter mais p1. Graças a Deus,
pois é a ele que devemos, isto é, a esse querer que nele supomos (por sabermos
no intimo que ele não ex-siste), Joyce não é um Santo. Ele joyza demais com a
S.K.belo para isso, tem de sua arte argulharte [art-guei/] para dar e vender.”
p. 562
“(…) Joyce, por sua vez, nada queria ter, exceto o escabelo do dizer magistral,
e é o quanto basta para que não seja um santo homem puro e simples, e sim o
1 Convém ressaltar a homofonia fracesa entre symptome (sintoma) e saint home
(homem santo), que, claro, não tem p. (N.E)
303
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
563
“(…) Deixemos o sintoma no que ele é: um evento corporal, ligado a que: a
gente o tem, a gente tem ares de, a gente areja a partir do a gente o tem! Isso
pode até ser cantado, e Joyce não se priva de fazê-lo.” p.
565
II /e. O escabelo
II /e.1 Os Seminários
Sublimação/ Escabelo
LACAN, Jacques. O seminário: a ética da psicanálise, livro 7 (1959 –
1960). Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 1988. Tradução: Antônio Quinet
“Para guiar–nos temos a teoria freudiana dos fundamentos narcísicos do objeto,
de sua inserção no registro imaginário –uma vez que o objeto que lhe interessa
por ser mais ou menos sua imagem, seu reflexo– esse objeto, precisamente, não
é coisa, na medida em que ela está no âmago da economia libidinal. É a formula
mais geral, que lhes dou da sublimação é esta, ela eleva um objeto à dignidade da
coisa.” p. 141
“Essa coisa, da qual todas as formas criadas pelo homem são do registro da
sublimação, será sempre representada por um vazio, precisamente pelo fato
de ela não poder ser representada por outra coisa… Mas, em toda forma de
sublimação o vazio será determinante.” p. 162
Jacques Lacan
sintoma grafado [ptypé].” p.
O CORPO FALANTE
II /e.2 Outros Escritos
LACAN, Jacques. Joyce, o sinthoma (1979). In: ______. Outros
Escritos. Rio de Janeiro: Jorge Zahar, 2003. Tradução: Vera Ribeiro;
versão final Angelina Harari e Marcus André Vieira
“(…) UOM [LOM]: em francês, isso diz exatamente o que quer dizer. Basta
escrevê-lo foneticamente, o que lhe da uma faunética (com faun…) à sua altura:
o elobsceno [eaubscène]. Escrevam isso com elob …para lembrar que o belo
não é outra coisa. Helessecrêbelo, a ser escrito como o hescabelo, sem o qual
naohaum que seja doidigno dunome diomem. UOM seumaniza [lomellise]
à larga. Envolva-se, dizem, é preciso fazê-lo: porque, sem se envolver, não há
hescabelo.” p. 560
“(…) O S.K.belo é aquilo que é condicionado no homem pelo fato de que ele
vive do ser (= esvazia o ser) enquanto tem … seu corpo: só tem, aliás, a partir
disso. Daí minha expressão falasser [parlêtre] que virá substituir o ICS de Freud
(inconsciente, é assim que se lê): saia daí então, que eu quero ficar aí.” p. 560
“(…) Ter havido um homem que pensou em circunscrever essa reserva e dar
a fórmula geral do escabelo, e a isso que chamo Joyce, o Sintoma. E que essa
formula, ele não a descobriu, por não ter dela a menor suspeita. Mas ela já
andava por toda parte, sob a forma do ICS que destaco com o falasser.”
p. 564
“(…) Joyce é o primeiro a saber escabelotar [escaboter] bem, por ter levado o
escabelo ao grau de consistência lógica em que o mantém, orgulhartosamente
[artgueilleusemnt], como acabo de dizer.” p. 565
“Estou dizendo, portanto, que o interesse pela anamorfose é descrito como o
ponto de virada em que, dessa ilusão do espaço, o artista reverte completamente
sua utilização e se esforça para fazê-la entrar na meta primitiva, ou seja, de fazer
dela o suporte dessa realidade enquanto escondida –uma vez que, de uma certa
maneira, numa obra de arte trata-se sempre de cingir a Coisa.” p. 175
LACAN, Jacques. Anexos: Joyce, o sintoma. In: ______. O seminário:
o sinthoma, livro 23 (1975 – 1976). Rio de Janeiro: Jorge Zahar,
2007. Tradução: Sergio Laia
“Seria preciso continuar esse questionamento da obra maior e última, da obra
para a qual, em suma, Joyce reservou a função de ser seu escabelo.” p. 161
304
305
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Jacques-Alain Miller
III /a. Falasser (parlêtre)
III /a.1 Os cursos psicanalíticos
Miller, J.-A. (2006-2007) Perspectivas do Seminário 23 de Lacan – O
Sinthoma, Rio de Janeiro, Jorge Zahar Editor, 2010
“(…) E esse Um-Corpo – diz Lacan aproximadamente, pois ele não usa esse
vocábulo – é a única consistência do falasser. Eis que com uma frase, ele reduz
todos os reflexos oscilantes desse depósito que é o Outro maiúsculo. O UmCorpo como a única consistência. Segundo entendemos, isso é o que o ser
humano deve trazer em análise.” p.111
“Aprendemos a falar e isso vem dos parentes próximos. Essa é a face do Outro na
aprendizagem da língua, razão pela qual há uma sociologia imediata do falasser.
Por isso o falasser é les trumains. É neles que se parafusa a sociologia de Lacan.”
p.193
Miller, J.-A. Perspectivas dos Escritos e outros escritos de Lacan: entre
desejo e gozo. Rio de Janeiro, Jorge Zahar Editorial, 2011
“(…) Uma vez atravessada a janela da fantasia, o que se manifesta não é a
liberdade de um sujeito barrado, vazio. Mais-além da janela da fantasia há o que
eu chamarei para concluir, de a prisão do falasser.” p. 138
Miller, J. - A. O ser e o Um. Miller, J. A. O ser e o Um. inédito. (2011)
(tradução para circulação interna Vera Ribeiro)
Aula do 16 de março de 2011 “(…) A suposição do
inconsciente é uma suposição ontológica, quer a escrevamos, quer lhe demos o
sentido de falta-a-ser, de sujeito barrado, ou que se fale de ser falante ou falasser.
E quando Lacan utiliza o termo de ser falante e de falasser, ele nunca deixa de
306
Jacques-Alain Miller
3.
O CORPO FALANTE
dizer que só existe ser pelo fato de falar (il n’a d’être que de parler).”
Aula do 23 de março de 2011 “(…) Dito de outro modo,
há uma conjunção entre o par-être e a fala que chega ao seu auge quando nos
expressamos nos termos de ser falante (l’être parlant), assim como há uma
conjunção essencial entre a existência e a escrita, escrita que eu disse primeira.”
Aula do 25 de maio de 2011 “(…) Essa mesma báscula que ali
está marcada pela implicação decidida da pulsão no sintoma se constata também
quando Lacan apaga, digamos, progressivamente, o termo de sujeito que
pertencia por excelência à ordem significante e o substitui pelo termo falasser.
Evidentemente, o sujeito é disjunto da pulsão, ao passo que o falasser inclui o
corpo. Diz Lacan: aqui está o nome que substituirá o do inconsciente. Portanto,
no fundo, ora Lacan diz o inconsciente é real, ora ele evoca que se poderia
substituí-lo pelo termo falasser, incluindo o corpo, o que é coerente com a noção
de gozo-sentido, pois não há sentido sem gozo. E como o inconsciente real é
de fato outra coisa que não o inconsciente freudiano, ele, na ocasião, propõe a
substituição sem ir até o final, bem entendido. Portanto, não há significante,
não há desejo que não esteja conectado à pulsão, etc. E a raiz do Outro é o Um.
Estou percorrendo muitos anos do último ensino de Lacan, mas é como uma
nebulosa. De todo modo, encontramos aqui os índices que nos permitem ver
em qual direção aponta sua última perspectiva.
Então, o falasser é aquele que, por falar, superpõe, de algum modo, um ser ao
corpo que ele tem, superpõe um ser ao ter e seu ter essencial é o corpo. O falasser
é também o “só tem um corpo”, se assim posso dizer. Em tudo isso, há uma
desvalorização do significante, do valor de verdade, e a ideia que modera a ideia
da potência significante”.
“A ideia de Lacan sobre Finnegans wake é que Joyce o escrevera para si mesmo e
que o fato de o haver publicado não evidenciava suas más intenções, mas sim a
intenção de calar a boca dos outros escritores e acabar com a literatura. O que
isso quer dizer? Aqui, Lacan nos convida a tratar a obra de arte, a obra escrita, a
partir da pulsão. A partir, se assim posso dizer, da pulsão escritural. Ela deve ser
entendida no autoerotismo do falasser.”
Miller, J.-A – “O osso de uma análise” – Seminário Proferido no VIII
EBCF e II Congresso da Escola Brasileira de Psicanálise. In: Agente,
Revista de Psicanálise, Salvador, EBP-BA,1998
(…) não haveria caminho, não haveria pedra, se não houvesse ser falante; se não
houvesse ser falante, para quem a pedra falaria? Qual o caminho do ser falante?
307
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
O caminho do qual se trata, para nós, é o caminho da fala, e a pedra da qual se
trata é também a pedra da fala.” p. 32-33
(…) Sobre o que incide a operação-redução em uma cura psicanalítica? Digamos
que ela incide sobre o sujeito, é a redução subjetiva, que se situa num plano além
da retificação subjetiva; mas o sujeito do qual se trata não é esse que no começo
do seminário chamei de ser falante.
O ser falante é o poeta, que tem seu estatuto eminente, o sujeito é antes o
poema que o poeta. É assim que Lacan o indica, o sujeito é antes o ser falado. A
psicanálise efetua, sobre o poema subjetivo, um tipo de análise textual que tem
por efeito extrair o elemento poético, a fim de destacar o elemento lógico.”
p. 45-46
“(…) Lacan introduziu o corpo passo a passo em sua doutrina, como se
houvesse aí o monobloco do grande Outro, que fixa um pedaço do corpo e mais
um pedaço e, cada vez que ele agarra, ele mortifica uma parte; há simplesmente,
alguma coisa que cospe de volta e que continua a palpitar vida e gozo. Foi por
isso que Lacan enfatizou muito a pulsão de morte, enfatizou a relação profunda
entre o gozo e a morte. Mas, o que muda a perspectiva, é simplesmente restituir
a função da vida. Mesmo se mortifica, em definitivo, isso é impensável se não
colocarmos, em seu lugar aquilo que denominamos de substância gozante.
Isso destroi muita coisa do ensino de Lacan. Melhor do que dizer – isso destroi
– seria dizer que isso obriga a ressituar muita coisa do ensino de Lacan; não
podemos mais falar, simplesmente, do sujeito, mas devemos situá-lo como um
efeito produzido no interior do que Lacan denomina de ser falante ou falasser,
isto é, de alguma coisa que vai além do sujeito barrado, porque inclui o corpo.
O conceito de falasser inclui o corpo. Que foi que ele disse, então? Ele disse: se
308
Jacques-Alain Miller
O ser falante tem muitos caminhos; ele vai, ele vem, ele não para num lugar,
ou então, para por muito pouco tempo; ele está em casa, ele vai ao trabalho, ele
volta, ele visita seus amigos, ele viaja de férias, ele vai a um congresso: muitos
caminhos, inumeráveis caminhos. Mas todo ser falante tem um caminho mais
essencial, um caminho único que ele percorre enquanto continua a ser falante,
é o caminho de sua fala. Mas o caminho fica invisível, inaudível, desconhecido,
é também a pedra desse caminho da sua fala, e é somente naquilo que se chama
de cura psicanalítica que ele se apercebe estar na rota do caminho de sua fala, e
que nesse caminho tem uma pedra. A cura psicanálitica é a experiência daquilo
que significa estar-na-fala. Carlos Drummond de Andrade situa sua obra poética
sob o título de “Tentativa de exploração e interpretação do estar-no-mundo”.
Digamos que a psicanálise é uma tentativa de exploração e de interpretação do
estar-na-fala.
O CORPO FALANTE
necessariamente se deve mudar a definição de sujeito, deve-se, necessariamente,
mudar a definição de grande Outro, e é isso o que chamo de parceiro-sintoma,
que é correlato do falasser. Usei a expressão parceiro-sintoma utilizando-me de
termos que estavam em Lacan, e me parece que o casal do falasser e do parceirosintoma é aquilo de que precisamos para pensar o fim de análise em outros
termos, em termos mais realistas.” p.88-89
“(…) É uma outra concepção do poder do significante, não apenas que ele
mortifica o corpo, que ele o recorta, que ele libera do corpo o mais-de-gozar,
mas que ele determina o regime do gozo do ser falante. O que quer dizer, em
particular, que é o significante que sustenta o princípio do prazer. O princípio
do prazer, no ser falante não é o mesmo princípio do prazer no animal. O
Lustprinzip tem necessidade do significante, ele precisa da fala.
O gozo de que se trata, por isso mesmo, não é apenas o gozo do corpo, é
também o gozo da linguagem, na medida em que o sujeito tem um corpo. O
gozo do corpo de que se trata é um gozo do corpo habitado por um sujeito
do significante, quer dizer, não um gozo bruto, não um gozo anterior ao
significante; no falasser, o gozo é ligado ao significante como sua consequência.
(…) Gozar de um corpo, na espécie do falasser, passa sempre por bater no corpo,
estragá-lo de alguma forma, ou, pelo menos, pelo fato de se chocar com ele, e
isso pode ir até destrui-lo; o que a fantasia “Uma criança é espancada” revela é o
sadismo do significante.
(…) Dizer que o falasser goza quando fala, não significa apenas que o
significante anula o gozo, mas também o sustenta e não é somente sobre o seu
próprio corpo que a palavra tem efeitos de gozo, mas também sobre o corpo
do Outro. Se se quiser que eu seja completo, acrescento o gozo da escrita, que
Lacan trata ao mesmo tempo.” p.100-102
“(…) o sujeito é sempre um elemento mortificado; aliás Lacan o definiu
como falta-a-ser, e é por isso que ele faz entrar o corpo vivo na psicanálise. Ele
substituiu o termo sujeito por falasser, que é o contrário de falta-a-ser, é o sujeito
mais o corpo, é o sujeito mais a substância gozante. Mas dessa forma o conceito
do grande Outro é tambem posto em questão, e é para fixar as idéias que, de
modo simétrico ao falasser, introduzi no nosso vocabulário o parceiro-sintoma.
(…) O Outro do qual se trata com o parceiro-sintoma não é mais um corpo
mortificado, esvaziado de seu gozo, é um corpo vivo; o Outro é sempre
representado por um corpo vivo. E isso nos obriga a que nos apercebamos que
esse corpo é sexuado. O grande Outro é representado por um corpo sexuado e,
correlativamente, o falasser tem também um corpo sexuado; e é por isso que,
309
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) Tomemos a questão do parceiro-sintoma. É uma nova definição do grande
Outro. É o grande Outro definido como meio de gozo. Isso concerne ao grande
Outro sob duas formas: primeiramente o Outro representado pelo corpo e, em
segundo lugar o Outro como lugar do significante. A promoção do corpo em
Lacan não anula absolutamente o Outro como lugar do signficante. Ela coloca
simplesmente mais em destaque que o significante é, ele próprio, um meio de
gozo.
É aqui que toma sentido a fórmula – não há relação sexual. Ela quer dizer que o
falasser, como ser sexuado faz parceria, não no nível do significante puro, mas no
nível do gozo e essa ligação é sempre sintomática.” p.106
“(…) o parceiro-sintoma do homem tem a forma fetiche, enquanto que o
parceiro-sintoma do falasser feminino tem a forma erotomaníaca. Isso se vê no
passe: os homens, de início, têm de resolver a questão da fantasia, da forma
fetiche que as fantasias impõem ao parceiro, enquanto que o falasser feminino
na análise tem, em primeiro lugar, de resolver a questão do amor, e é isso a
erotomania. Da mesma maneira que a Bíblia diz que o homem terá Sodoma e
a mulher terá Gomorra, poderíamos crer que há uma maldição que diria que o
homem terá o fetiche e a mulher a erotomania.” p. 109-110
“(…) Do lado feminino o falasser impõe ao parceiro uma forma distinta, em
função, precisamente, da ilimitação do gozo. Para aproximá-lo, pensemos no
papel central da demanda de amor na sexualidade feminina. A demanda de
amor desempenha na sexualidade feminina um papel incomparável ao lado
masculino. A demanda de amor comporta, em si mesma, um caráter absoluto
e uma visada ao infinito, que é manifestada no fato de que o Todo não está
formado, o Todo não faz Um, e isso abre para o infinito, além de tudo o que se
pode trocar de material, tudo que pode se oferecer como prova. É uma demanda
que incide sobre o ser do parceiro, e é isso que desnuda sua forma erotomaníaca
– que o Outro me ame.” p. 111
“(…) No que diz respeito ao parceiro do falasser feminino há dois axiomas que
temos de guardar no espírito se não quisermos ser embrutecidos.
Em primeiro lugar, para amar é preciso falar; o amor é inconcebível sem a
palavra, justamente amar é dar o que não se tem, e não se pode dar o que não
se tem senão falando, porque falando damos a nossa falta-a-ser. É ainda melhor
quando falamos de amor, mas não é de jeito nenhum necessário, porque há
mulheres que se satisfazem muito bem se o parceiro as critica, contanto que ele
310
Jacques-Alain Miller
necessariamente, se coloca a questão da relação sexual, esta questão que estava
apagada da perspectiva da relação com o Outro.” p. 102-103
O CORPO FALANTE
lhes fale. O verdadeiro problema do lado feminino é forçar o homem a falar,
ao invés de olhar a televisão, ler o jornal ou ir ao jogo de futebol, mas enfim, as
mais inteligentes vão com eles ao futebol; aliás para o homem é melhor falar,
porque se ele não fala, vai ser ela quem vai falar e reclamar que ele não fala.
Segundo axioma: para gozar é preciso amar; isso é, verdadeiramente, uma
exigência do lado feminino e eu poderia escreverr a sequência – falar, amar,
gozar. Do lado feminino não se pode gozar senão da fala, de preferência da fala
de amor, mas não apenas.” p. 112-113
“(…) Escrevo o falasser feminino como Não-Todo que se dirige ao parceiro e,
se dirige pela demanda de amor, que é pontecialmente infinita e que retorna
ao parceiro feminino precisamente sob a forma de devastação. Com efeito,
podemos dizer que, em função da estrutura do Não-Todo, o parceiro-sintoma
da mulher torna-se o parceiro devastação. A devastação é a outra face do amor, é
o retorno da demanda de amor, o que quer dizer que é como o sintoma, exceto
que tem o índice de infinito.” p.114-115
III /b.2 Outros textos
Miller, J.-A. A ex-sistência. (2006-2007). In: Opção Lacaniana Nº33.
São Paulo, Edições Eolia, 2002. Tradução Vera Avellar Ribeiro
“(…) O que é uma psicanálise na história da metafísica? Uma psicanalise põe
o falasser à prova do sentido. Ela põe o que para ele faz sentido à prova do
enunciado. Ela põe à prova um ser que só deve esse ser ao sentido. Ela o põe à
prova do sentido que se segue à cadeia significante. E a questão é a de saber se,
dessa prova, ele acede a um real, quer dizer, se ele acede a uma posição que exsiste ao sentido.” p. 14
“Lacan vai operar esse deslocamento em seu último ensino, quando falar do
falasser, ou seja, quando ele situará o ser do lado do simbólico. O falasser é uma
outra maneira de dizer o sujeito. O seu ser está sempre do lado do simbólico.
Há também o ser do lado do imaginário, quando o balizamos sobre a unidade
do corpo, e aqui falamos do corpo falante e de seu mistério. Mas o ser se eclipsa
diante do real. É disso que se trata no último ensino de Lacan, que decide então
operar, de saída, com as três dimensões, sem reservar ao real esse para além da
travessia. Ele o reinclui, o situa e o articula, de primeira, em sua arquitetura
nodal.” p.21
311
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) Isto será resumido de uma forma talvez excessivamente lógica por Lacan
na fórmula “O significante é a causa do gozo”, mas se inscreve na noção de
acontecimento fundamental de corpo que é a incidência da língua. É, aliás,
o que fez a força da referência de Lacan a James Joyce, e precisamente no seu
Finnegans Wake, que se acha absolutamente indecifrável a partir do que seriam as
lembranças infantis de Joyce.”
“Lacan desconheceu verdadeiramente, por tanto tempo, a necessidade disso
passar pelo corpo? Será que precisou que despontasse esta hipótese, para que
revisasse as categorias as mais fundamentais de sua orientação, ou que as
completasse? Será que essa foi uma exigência desconhecida? Não, visto que, ao
lado do simbólico, onde girava em círculos o sujeito do significante, ele sempre
reservou o lugar do registro do imaginário, que foi, aliás, no inicio o monturo
do gozo. Ele jamais negligenciou o fato de que o sintoma, mesmo concebido
como metáfora, tomasse os elementos corporais como significantes. Mas Lacan
se deu conta do corpo essencialmente no nível do fantasma enquanto intervém
na formação dos sintomas, o que se acha sublinhado em seu grafo duplo. Até
introduzir o “parlêtre”, deu-se conta do corpo no nível da fórmula do fantasma,
que escreve, com efeito, a necessidade de completar com um elemento corporal
o sujeito do significante – este sujeito do significante negativo, intervalado,
interino perpétuo, está morto, natimorto -, a necessidade de dar-lhe um
complemento corporal, quer dizer, a pequeno.” p. 54
Miller, J.-A. Conclusão das aulas sobre o Sinthoma. In: Opção
lacaniana Nº46. São Paulo, Editorial Eolia, 2006. Tradução Teresinha
N. Meirelles.
“(…) Colocarei em série: o sintoma terá o sujeito, o sinthoma terá o falasser. O
falasser, de fato, tem uma base bem mais ampla que o sujeito, uma vez que o
sujeito é uma função pontual e evanescente, enquanto no falasser incluímos o ser
que até então lhe era dado pela fantasia.” p. 14
“O sujeito é falta-a-ser, enquanto o falasser, como seu nome o indica, é um ser,
ainda que ele só se sustente pela fala… A diferença entre o sujeito e o falasser é
que este tem um corpo, ele se define pelo fato de ter um corpo como condição sine qua
non para gozar.” p. 15
Jacques-Alain Miller
Miller, J.-A. Biologia Lacaniana e acontecimentos de corpo. (20062007). In: Opção Lacaniana Nº41. São Paulo, Edições Eolia, 2004,
p. 07-67. Tradução Ana Lúcia Paranhos Pessoa
O CORPO FALANTE
Miller, J. –A. “O inconsciente e o corpo falante” - Apresentação do
tema do X Congresso da AMP”. 2014
https://www.congressoamp2016.com/
uploads/8d43a017ed95340e07f9ca4dbb5cb235eb472a04.pdf
“(…) quando falamos do sintoma como de um sinthoma. Aí está uma palavra,
um conceito que é da época do falasser. Ele traduz um deslocamento do
conceito de sintoma, do inconsciente ao falasser.
O falasser tem de se haver com seu corpo como imaginário, assim como tem de
se haver com o simbólico. O terceiro termo, o real, é o complexo ou o implexo
dos dois outros.
No falasser há, a um só tempo, gozo do corpo e também gozo que se deporta
para fora do corpo, gozo da fala que Lacan identifica, com audácia e com lógica,
ao gozo fálico, uma vez que este é desarmônico em relação ao corpo.
Pois bem, quando inconsciente é conceitualizado a partir da fala e não mais a
partir da consciência, ele porta um nome novo: o falasser. O ser de que se trata
não precede a fala. É o contrário, a fala outorga o ser a esse animal por um efeito
a posteriori. Desde então, seu corpo se separa desse ser para passar para o registro
do ter. O falasser não é o corpo, ele o tem.
Quando se analisa o inconsciente, o sentido da interpretação é a verdade.
Quando se analisa o falasser, o corpo falante, o sentido da interpretação é o gozo.
Esse deslocamento da verdade ao gozo dá a medida do que se torna a prática
analítica na era do falasser. Por essa razão, proponho, para o próximo Congresso,
nos reunirmos sob a seguinte bandeira: «O inconsciente e o corpo falante». Isto
é um mistério, dizia Lacan. Tentaremos penetrar nele e esclarecê-lo. Para tanto,
que cidade nos seria mais propícia senão o Rio de Janeiro? Com o nome Pão de
Açúcar, ela tem como emblema o mais magnífico dos escabelos.”
III /b. O inconsciente
III /b.1 Cursos Psicanalíticos
Miller, J. –A. A interpretação pelo avesso. Opção Lacaniana Nº15.
São Paulo, Edições Eolia, 1996
“(…) Dizemos a interpretação como dizemos o ‘inconsciente’.”
“O que é o inconsciente? Como se interpreta seu inconsciente? – quando não
312
313
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
mais referido à consciência, mas à função da palavra e campo da linguagem? – a
defasagem que se repete no que quero dizer ao que digo – como se o significante
desviasse a trajetória programada do significado, e isso fornece elemento para
ser interpretado – como se o significante interpretasse a seu modo o que quero
dizer. Freud situou aí, nessa defasagem, o que chamou o “o inconsciente”- como
se no lugar do meu querer dizer, que é minha “intenção de significação”, ficasse o
querer dizer de significação outra que seria o próprio significante, designado por
Lacan com o “desejo do Outro”.” p. 96
“A interpretação não é outra coisa que o inconsciente, a interpretação é o
próprio inconsciente.” p. 96
“A equivalência do inconsciente e da interpretação é o que surge no fim do
seminário O Desejo e sua interpretação - neste paradoxo o desejo inconsciente é
sua interpretação.” p. 96
“É o inconsciente que interpreta. A interpretação analítica vem depois, ela se
apoia na interpretação do inconsciente, daí o erro de crer que é o inconsciente
do analista que interpreta.” p. 96
“Fazer ressoar, fazer alusão, subentender, silenciar, fazer oráculo, citar, fazer
enigma, meio-dizer, revelar – quem faz isso? Quem o faz melhor? Quem
maneja esta retórica desde a nascença, enquanto você se esforça por aprender
rudimentos dela? Quem? – a não ser o próprio inconsciente.” p. 96
“Toda a teoria da interpretação jamais teve outro objetivo – ensiná-lo a falar
como o inconsciente.” p. 96
“Quando o analista se cala, é porque o inconsciente interpreta.” p.
“O inconsciente interpreta e quer ser interpretado.” p.
97
“Interpretar é decifrar, mas decifrar é cifrar novamente.” p. 97
97
“A interpretação propriamente analítica funciona pelo avesso do inconsciente.”
p. 99
Miller, J.-A. (2006-2007) Perspectivas do Seminário 23 de Lacan – O
Sinthoma. Rio de Janeiro, Jorge Zahar Editor, 2010 “ (…) Ao mesmo tempo em que situa o inconsciente, o sujeito do inconsciente,
nas hiâncias do significante, nas topadas, nos tropeços da cadeia significante,
ele [Lacan] pode dizer, cito: algo no aparelho do corpo é estruturado da mesma
maneira. E ele acrescenta em razão da unidade topológica de hiâncias em jogo.”
p. 131
314
Jacques-Alain Miller
O CORPO FALANTE
Miller, J.-A. (2008-2009) Perspectivas dos Escritos e Outros Escritos
de Lacan. Entre desejo e gozo, Rio de Janeiro, Jorge Zahar Editorial,
2011
“(…) Se falei em fineza não foi somente por causa de Pascal. É em razão do
texto de Freud de 1935, que se intitula “Die Feinheit…”, “As sutilezas de um ato
falho”. Freud não se via diminuído ao apresentar, já tão longe em sua elaboração,
um ato falho de seu inconsciente, de apresentá-lo à comunidade de psicanalistas.
É o que ele queria lembrar-lhes, tão tarde: que um analista continua a aprender
com seu o inconsciente. Ser analista não o exonera desse testemunho. Ser
analista não é analisar os outros; é, a princípio, continuar a se analisar, continuar
a ser analisando – é uma lição de humildade. A outra via seria a enfatuação do
analista – caso ele se considere em dia com seu inconsciente. Não se está jamais.
É aquilo que, em ato, em ato de escrita, Freud comunicava a seus alunos.”
p. 28
“Lacan tentou outrora algo em nome do passe para responder à pergunta:
como nos tornamos analistas? Era o seguinte: recrutar o analista com base no
que se modificou de seu inconsciente pela experiência analítica, com base nas
hipóteses de que um inconsciente analisado se distingue, por assim dizer, de
um inconsciente selvagem, de que um inconsciente analisado tem propriedades
singulares, de que um inconsciente mais sua elucidação fazem com que
sonhemos de outra forma, fazem com que não sejamos submetidos aos atos
falhos e aos lapsos de todo mundo. Claro, isso não anula o inconsciente, mas faz
com que suas irrupções se distingam.” p. 36
“De qualquer forma, está posta a questão do inconsciente como critério. É
a questão que põe o passe, que faz da modificação da relação do sujeito com
seu inconsciente o critério de recrutamento. Isso deve se estender, além do
recrutamento, ao analista recrutado. Que relação ele continua a ter com o
inconsciente? Que relação com o próprio inconsciente tem um sujeito que,
ao longo do dia, trata do inconsciente dos outros? Seria excessivo pedir que,
no contexto de sua Escola, esse analista seja capaz de testemunhar – como
testemunhamos no passe – acerca da relação que mantém com o seu não quero?”
p. 37
“Os cursos que posso ministrar a vocês, que eu diga ou não, estão sempre
ligados, por assim dizer, a um de meus sonhos. Sempre parto de um Einfall, de
uma ideia que me passa pela cabeça. Tenho um esboço, claro, os matemas, mas
não venho jamais, diante de vocês, o mesmo. Venho sempre como um sujeito
do inconsciente, pelo menos gosto de crer nisso. É nessa disciplina que encontro
o motor para prosseguir ainda a elucidar, após tantos anos, sem dúvida, a
315
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“… Lacan, por sua vez, ao fazer em seu curso um lapso de escrita, disse: “É
um erro grosseiro.” Com efeito, para transformar um erro em lapso, é preciso
implicar uma intenção inconsciente. O mesmo ocorre com o que chamei – eu
chamei? -, o que foi dito, uma vez, por Lacan, num contexto pouco claro: o
inconsciente real. Pois bem, é nesse nível que consideramos ter feito um erro
grosseiro. Somente se transformarmos esse erro, implicando nele uma intenção
inconsciente, ele se tornará um lapso.” p. 54
“Nada os impede de tomar o inconsciente real no discurso do mestre. Se vocês
o capturarem no discurso do mestre, obterão um certo número de efeitos
terapêuticos, pois é isso que busca o mestre, a terapia universal.” p. 54
“… Os discursos são modos de tratamento. O discurso da histérica também:
é um tratamento do inconsciente real que tende, preferencialmente, a tornar
doente, mas também é um tratamento que se aplica ocasionalmente.” p.54
“O que pude desenvolver – evocarei na próxima vez – é congruente com a
verdade fundamental da psicanálise. A harmonia nunca é alcançada pelo ser
falante, a doença lhe é intrínseca e essa doença se chama foraclusão, a foraclusão
da mulher. Ela comporta não haver relação sexual. E está aí a mola da mínima
formação do inconsciente.” p. 58
“Essas formações continuarão a florescer enquanto formos seres falantes.
O analista, seja um analista nomeado, analista autoinstituído, analista
experimentado, ou analista iniciante, o analista não está, em nenhum caso,
exonerado de tentar, como Freud nos deu o exemplo, esclarecer sua relação com
o inconsciente. Não disse amá-lo.” p. 58-59
“… O que Lacan chama de sujeito suposto saber é um certo efeito de
significação que obtura a solução do desejo do analista. É, para simplificar, a
suposição do inconsciente, a noção, a nuvem espessa segundo a qual o que se diz
na análise quer dizer outra coisa.” p. 115
“Uma vez que prestamos atenção à verdade – como deve ser entendido -, saímos
dela, deslizamos para a mentira. Lacan formulou isso nos seguintes termos: “Não
há verdade que, ao passar pela atenção não minta.” * Como indiquei da última
vez, trata-se de pôr em questão o sentido da própria operação psicanalítica, já
que ela consiste precisamente em prestar atenção às emergências de verdade, as
que emergem nas chamadas formações do inconsciente.” p. 119
316
Jacques-Alain Miller
prática analítica que nos ocupa a todos, coletivamente; porém, a elucidar, mais
secretamente, mais discretamente, o que, como sujeito, me motiva a desejar, a
amar e a falar.” p. 38
O CORPO FALANTE
“Lacan manteve-se na linha da descoberta de Freud quando dizia, no começo
de seu ensino: Este discurso é o próprio inconsciente. É o que ele chamava de
discurso do Outro,*ou seja, ele concebia o inconsciente como um discurso, e
quando ele os deitou por terra, continuou a definir o inconsciente como um
saber, uma articulação. Essa última irrupção no ensino de Lacan foi feita para
negar isso. Pelo menos para abalá-lo, para nos ajudar a situar de modo diferente
o que acontece na experiência analítica.” p. 119
“Quando Lacan diz que o inconsciente é real, ele acrescenta: “caso se acredite
em mim”.* Se acreditássemos no Lacan de 1953, diríamos que o inconsciente
é simbólico. No final de seu ensino, a definição de inconsciente passa por uma
virada: o inconsciente é real, quer dizer, o inconsciente não é simbólico, ou ainda,
quando ele se torna simbólico, torna-se outro. Por isso, podemos dizer que a
operação analítica faz o inconsciente passar do real para o simbólico, da verdade
para a mentira.” p. 120
“… O que Lacan nos indica, aqui, é enorme, pois ele próprio enfatizara
que Freud descobrira a psicanálise prestando atenção nas histéricas, tema
abundantemente abordado por ele e também retomado. O que ele aqui nos
indica é que a autoanálise de Freud foi a primeira – e dizer autoanálise é dizer
muito -, ou seja, primeiro foi o fato do inconsciente real e, nesse sentido, a
associação livre é segunda. Ela é o romance da verdade. Por isso, também Lacan
disse que Freud não sabia o que fazia ao inventar o instrumento da associação
livre, ou seja, ele recorria ao sentido para resolver a opacidade do que emerge nas
formações do inconsciente.” p. 121
“… Em termos definitivos, se fizermos surgir a fórmula segundo a qual o real
é bem mais contingente que impossível, então, com efeito, nos damos conta
da relação entre o real e o inconsciente – a fórmula, me apresso em dizer,
não é de Lacan, é de minha lavra, estou experimentando-a. Fala do modo de
surpresa através do qual o inconsciente se manifesta. Não se sabe quando o lapso
interferirá. Não se sabe quando o sonho nos trará um efeito de emoção que
traduziremos em termos de verdade. Não sabemos quando faremos o ato em que
tropeçaremos e cujo motivo explicaremos em nosso relato dizendo: é por isso,
implicando, assim, uma intenção.” p. 127
“Do ponto em que estamos, não podemos não ver esse ponto de partida em
que a psicanálise é pensada pautada na ficção: uma ficção de psicanálise, já que
ela põe em cena um inconsciente sem real, um inconsciente todo simbólico,
puro correlato da interpretação, à medida que ela é bem-sucedida. Eu mesmo
desenvolvi essa questão, há anos: era lógico ir do conhecido ao desconhecido,
o inconsciente era o desconhecido, conhecia-se a interpretação e o fato de ela
317
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Foi o que uma vez levou Lacan a escrever, na Apresentação feita por ele, a
pedido meu, das Memórias do presidente Schreber: o sujeito do gozo. Se ele,
não o repetiu, foi porque isso não se sustentou. Ele precisou de mais dez anos
para lançar o falasser, sem dúvida o ser que só o é por falar – quando não se
fala não se é um ser -, essencialmente, o ser que fala de seu gozo, digamos isso
inclusive como complemento de objeto direto: o ser que fala seu gozo, cujo gozo
é a razão última de seus ditos.” p. 131
“Lacan destituirá o sujeito chamando-o de falasser, retirando-lhe até mesmo seu
nome de sujeito. E, além de chamá-lo de falasser, no final da última parte de
seu ensino trará, como nome do sujeito, o sinthoma. Esse é o verdadeiro nome
do sujeito ao longo de toda a parte final do último ensino de Lacan. Aliás,
quando ele escreve sobre Joyce, diz: “Joyce o Sintoma”, ou seja, ele o junta a seu
nome próprio para fazer dele um sobrenome. Lacan chamará de sinthoma o
nome daquilo a que outrora chamava a Coisa, das Ding, ou então, em termos
freudianos, ele chama de sinthoma uma figura do isso, não mais como uma
instância, mas como uma montagem.” p. 137
“Podemos dizer que ele se apega ao inconsciente. Em alguns casos, o gosto de
decifrar-se é inteiramente palpável. Alguns se mantêm em análise por conta
desse gosto, mas não todos. Talvez se possa dizer que eles se apegam ao fato de
falar em análise, falar em pura perda, fora do utilitarismo que preside a vida
social, ou falar a rédeas soltas.” p. 140
“… Ao passo que a fala em análise deve obrigar-se a ser irrefletida. É o que
chamamos de associação livre. Em definitivo, essa fala irrefletida é o que
chamamos de inconsciente. Há uma estreita relação entre a associação livre e o
inconsciente, uma vez que fazemos da associação livre o modo eletivo de acesso
ao inconsciente.” p. 140
“… Essa opacidade está sempre ali, na fala do analisando, ela a constitui a tal
ponto que, enquanto essa opacidade não aparecer como fenômeno, sob uma
318
Jacques-Alain Miller
ser bem-sucedida demonstrava que a substância do inconsciente era a mesma
que a da interpretação. Ou seja, o inconsciente tinha a estrutura de linguagem.
Estendi isso ao máximo quando enunciei, há algum tempo, o inconsciente
intérprete. Com efeito, o real ficava na porta, e todo interesse incidia sobre os
mecanismos da cadeia significante, sobre o recalque, a denegação, a foraclusão,
a recusa. Se deixamos o real de fora, se sua função só aparece sob a inércia dos
fatores imaginários, então é legítimo conceber o paciente como sujeito do
significante. Mas, quando percebemos que a finalidade do aparelho significante
é o gozo, a coisa é diferente.”
O CORPO FALANTE
forma ou outra, pode-se dizer que não se está em análise. Tudo isso se deixa
reunir na fórmula eu não sei. O que chamamos de sujeito do inconsciente
emerge na consciência, ou emerge no dito, sob formas que se deixam reunir na
rubrica do não sei.” p. 142
“… A fórmula do sujeito suposto saber não deve fazer acreditar que o analista
seja minimamente afetado pelo índice eu sei. Lacan diz com clareza que tanto
o analista quanto o analisando estão do mesmo lado quanto ao inconsciente:
reclamando para que a porta se abra. O que chamaremos de inconsciente é o
lugar do saber, o lugar onde isso sabe.” p. 144
“… O que as formações deixam de lado é o fundo de gozo do sintoma, do
sonho, do lapso etc. Lacan designou esse fundo de gozo de objeto a. Nesse
sentido, pode-se dizer que a fórmula da fantasia seria a boa fórmula de todas
as formações do inconsciente: todas as formações do inconsciente devem ser
retomadas com referência à conexão entre o significante e o gozo.” p. 154
“Isso tem consequências. Não conceitualizamos mais o paciente como sujeito,
e sim como falasser, o que significa: há um ser pelo fato de ele falar – os outros
talvez sejam seres, mas nada sabem disso porque não falam -, e esse ser se deve ao
fato de haver um corpo. O sujeito da fala é pensado em relação ao significante.
O falasser é um sujeito que fala e é falado, e isso com relação a um corpo, ao que
Lacan se absteve de dar uma letra.” p. 169
“Essa noção encontra-se ainda em seu esquema do discurso do mestre, que
é também o discurso do inconsciente, conforme ele precisa, no qual o S do
significante encontra-se desdobrado – S1. Poderia utilizar o que já escrevi no
quadro, pondo S1 nesse ponto, S2 e o efeito-sujeito no ponto terminal do
primeiro vetor retroativo.” p. 173
“… Quando Lacan dizia a história de um sujeito essa era, ao contrário,
extremamente valorizada: a verdade estava ligada a essa história no singular.
Para Lacan, a expressão história do sujeito correspondia ao termo “inconsciente”,
chegava até esse ponto.”
“Assim, na p. 260 dos Escritos, em “Função e campo da fala e da linguagem
em psicanálise”, seu primeiro grande texto, encontramos a definição segundo a
qual o inconsciente é um capítulo censurado, o capítulo censurado de um texto
que é a história do sujeito. Diz Lacan: “O inconsciente é o capítulo de minha
história que é marcado por um branco ou ocupado por uma mentira.”* Em
outras palavras: para ele, o inconsciente era correlativo de minha história como
sujeito, visto que, nessa história, alguma coisa não pôde inscrever-se, figurar,
manifestar-se e, exatamente ser dita.”
319
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“… Lacan deu-lhe toda uma fulgurância com a expressão sujeito suposto saber,
que se compreende por si mesma, razão pela qual fez grande sucesso. Com
sujeito suposto saber ele designava uma suposição da experiência analítica, o
estado do saber já ali que seria adquirido pelo paciente. No fundo, por sujeito
suposto saber ele designava o que Freud chamara de inconsciente.” p. 186
“Naquele que não mais chamamos de sujeito por querê-lo concernido de
maneira essencial pelo gozo, naquele que não mais chamamos de sujeito, mas
falasser, o próprio corpo, seu corpo, não antecede o significante, não é uma
realidade anterior ao significante. Aliás, é nisso que o falasser não é seu corpo.
Seu corpo, ele o tem. Ele o tem como se tem bem, uma propriedade, um objeto
que tratamos bem ou mal, desdenhamos, negligenciamos ou embonecamos. Os
cuidados que temos ou não com o corpo denotam o valor inconsciente que lhe
atribuímos.” p. 208
Miller, J.-A. Conferência de Jacques –Alain Miller: 27 de abril de
2012 – Buenos Aires. Há desordem no real no século XXI https://
ebpsp.wordpress.com/%E2%96%AAo-real-no-seculo-xxi%E2%96%AA/
“(…) Houve um tempo que Lacan falava do inconsciente como um saber no
real, quando ele dizia que ele era estruturado como uma linguagem. Ele buscava,
então, as leis da fala, a partir da teoria do reconhecimento de Hegel: reconhecer
para ser reconhecido.
É por isso que o inconsciente tradicional – para nós, o inconsciente freudiano
– nos aparece como uma elucubração de saber sobre um real, uma elucubração
transferencial de saber, que acrescenta a esse real uma função de sujeito suposto
saber, pronta para se encarnar em outro ser vivo. O inconsciente, se ele pode
se ordenar enquanto discurso, só é extraído da experiência analítica, e a
elucubração transferencial visa dar sentido à libido, condição necessária para que
o inconsciente seja interpretável. Isso supõe uma interpretação prévia, quer dizer,
que o inconsciente interprete.
Numa análise, o inconsciente transferencial é uma defesa contra o real, que
conserva uma intenção, um querer dizer, enquanto o inconsciente real não tem
intencionalidade, mas se exprime por um: «É assim.», é nosso «Amém»
320
Jacques-Alain Miller
“No início do ensino de Lacan, o que mais chamou atenção foi a ênfase posta na
fala e na estrutura de linguagem. Isso, é claro, causou debates. Foi nesse ponto
que Lacan apareceu como radical. Mas, de onde estamos, o que aparece é outra
coisa, a correlação estabelecida entre inconsciente e história, uma história que,
para falar com propriedade, seria o lugar da verdade.” p. 174
O CORPO FALANTE
O que o inconsciente vai interpretar? Para responder a esta pergunta, é preciso
introduzir a palavra: «real». Na transferência, é o sujeito suposto saber que
interpreta o real. O que se elabora é um saber não no real, mas sobre o real.”
III /b.2 Outros textos
Miller, J.-A. Sintoma e fantasma. Clinica Lacaniana, vol. I.
UNICOPI, São Paulo, 1985
“(…) Isto pode ser uma definição: o fantasma é o que permite ao sujeito, na
presença da falta do Outro, uma produção de prazer. Permite que em lugar da
angústia produzida pela falta do Outro haja produção de prazer. ” p. 25
“O fantasma no seu sentido amplo é distinto do sintoma porque o sintoma, para
o sujeito, é o que não está dando certo em sua vida, enquanto que o fantasma
para ele é, ao contrário, sua própria vida.” p. 36
Miller, J.-A. Sobre o sujeito Suposto saber e o objeto a. In: Correio
Nº59. Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2007
“(…) A própria definição de ser analisado é identificar-se com o sintoma. Isso
não quer dizer não ter mais sintomas, mas sim ser capaz de se representar como
sujeito da manifestação sintomática do inconsciente, e saber também o que diz
o inconsciente, do qual se é sujeito, ou seja, possuir algo do inconsciente saber.”
p. 24
“O que há de real no inconsciente? Pode-se dizer, seguindo Lacan, que isso se
desloca em direção à língua, que é na língua e não na linguagem que está o
núcleo traumático, nos erros das palavras e em sua relação de defasagem com a
escritura. Também procuramos no corpo o que há de Real.” p. 25
Miller, J.-A. “Falar com seu corpo” in: Opção lacaniana Nº66.
Edições Eolia, São Paulo, 2013
“(…) Constamos que esse encontro marca o corpo com um vestígio
inesquecível. É o que chamamos de acontecimento de corpo. Este
acontecimento é um advento de gozo que não volta jamais ao zero. Para saber
sobre esse gozo é preciso tempo na análise. É preciso tempo sobre tudo para
saber fazer com esse gozo sem a muleta, a tela, os artifícios do inconsciente
simbólico e suas interpretações. Aqui dizemos que se trata do inconsciente real,
aquele que não se decifra, mas, pelo contrário, motiva o ciframento simbólico
do inconsciente. O corpo não fala, ele goza em silêncio, nesse silêncio que Freud
atribuía às pulsões. Mas é com esse corpo que falamos, a partir desse gozo fixado
321
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Mas o gozo, no âmbito do inconsciente real, não poderia ser equacionado e
permanece insolúvel. Freud soube disso antes que Lacan o admitisse.” p. 16
“… Falando com propriedade, o que se emparelha com a inexistência da saúde
mental é “falar com seu corpo”.” p. 16
Miller, J.–A. “O inconsciente e o corpo falante” - Apresentação do
tema do X Congresso da AMP”, 2014. https://www.congressoamp2016.
com/uploads/8d43a017ed95340e07f9ca4dbb5cb235eb472a04.pdf
“(…) “Não chegaremos a isso esquecendo a estrutura do sintoma do
inconsciente, nem tampouco esquecendo que a segunda tópica de Freud não
anula a primeira, mas se compõe com ela. Do mesmo modo, Lacan não veio
para apagar Freud, mas para prolongá-lo. Os remanejamentos de seu ensino
se fazem sem fissuras utilizando-se os recursos de uma topologia conceitual
que garante a continuidade sem interditar a renovação. Assim, de Freud a
Lacan, diremos que o mecanismo do recalque nos é explicitado pela metáfora,
tal como do inconsciente ao falasser a metáfora nos dá o envelope formal do
acontecimento de corpo. O recalque explicitado pela metáfora é uma cifração e a
operação de cifração trabalha para o gozo que afeta o corpo. É com um remendo
como este, de peças diversas, de diferentes épocas, tomadas emprestadas de
Freud e de Lacan, que se tece nossa reflexão - não temos de recuar diante do fato
de assim fazer um remendo a fim de avançar na circunscrição da psicanálise no
século XXI.”
“Lacan substituiu o aparelho psíquico estruturado pelo arco reflexo pelo
inconsciente estruturado como uma linguagem. Não se trata de estímuloresposta, mas de significante-significado. Só que – e esta é uma expressão de
Lacan já enfatizada e explicitada por mim – essa linguagem é uma elucubração
de saber sobre lalíngua [18], lalíngua do corpo falante. Disso decorre o fato de o
inconsciente ser, ele próprio, uma elucubração.”
“O real do laço social é a inexistência da relação sexual. O real do inconsciente
é o corpo falante. Enquanto a ordem simbólica era concebida como um saber
regulando o real e lhe impondo sua lei, a clínica era dominada pela oposição
entre neurose e psicose. Agora, a ordem simbólica é reconhecida como um
sistema de semblantes que não comanda o real, mas lhe é subordinada. Um
sistema respondendo ao real da relação sexual que não existe.”
322
Jacques-Alain Miller
de uma vez por todas. O homem fala com seu corpo. Lacan diz: ele é falasser por
natureza.” p. 16
O CORPO FALANTE
III /c. Corpo falante
III /c.1 Cursos Psicanalíticos
Miller, J.-A. Perspectivas dos Escritos e outros escritos de Lacan: entre
desejo e gozo. Jorge Zahar Editorial, Rio de Janeiro, 2011
“(…) a orientação para o singular não quer dizer não decifrarmos o inconsciente.
Ela quer dizer que essa exploração encontra necessariamente um obstáculo, que
essa decifraçãoo se interrompe no fora de sentido do gozo e que, ao lado do
inconsciente, onde isso fala – e fala a cada um porque o inconsciente e sempre
sentido comum -, há o singular do sinthoma, onde isso não fala a ninguém.
Razão pela qual o qualifica de acontecimento de corpo….. É um acontecimento
de corpo substancial, aquele cuja consistência é de gozo.” p. 96
III /c.2 Outros textos
Miller, J.-A. A salvação pelos dejetos. In: Correio Nº67. Escola
Brasileira de psicanálise, São Paulo, 2010
(…) “Observo o caráter problemático do que se designa como gozo do outro,
….Quando esse Outro se encarna sob o modo de outro corpo, o gozo que ele
suscita no corpo de alguém permanece evidentemente separado do gozo que
esse outro corpo experimenta. Quando o Outro designa o corpo social, se posso
dizer, seu gozo, o gozo desse outro, mantém-se como uma abstração.” p. 22
Miller, J. –A. Seminário sobre os caminhos da formação de sintomas.
In: Opção Lacaniana Nº60. Edições Eolia, São Paulo, 2011
“ (…) Nesta direção, pode assinalar a condição de inconsciente, a Unbewusstheit,
do sintoma, que somente floresce a partir do inconsciente. Isto é, há um sentido
que quer se expressar, que não consegue e, então, surge o sintoma.” p. 20
“… Lacan deduzirá que há algo excessivo no gozo que obriga o sujeito sempre a
defender-se do gozo que busca.” Lacan dará conta disso destacando a linguagem
(o significante), na medida em que esta negativiza o gozo. Isto é, o poder de
recalque está na própria linguagem; o Nome-do-Pai é a linguagem. Resta o maisde-gozar, o ganho de prazer, o Lustgewinn.” p. 21
323
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Faz com que a castração, o (–φ), retorne sobre o próprio gozo. Isso implica,
finalmente, pensar a relação entre a linguagem e o corpo que, para Lacan, se
traduz como a captura do corpo pela estrutura com seu duplo efeito: de um
lado, o (– φ), a estrutura leva a castração ao gozo, o deserto de gozo; do outro, o
suplemento, o objeto a.” p. 33
Miller, J.-A. A introdução ao inconsciente. Falo: Revista Brasileira do
Campo Freudiano, Fator II, vol. II. Salvador, 1988
“ (…) introduzir o paciente numa primeira localização de sua posição, em
relação ao seu dito. É o que acabei de demonstrar, que só podemos nos
aproximar do real através do dito.” p. 118
“A introdução ao inconsciente é, na realidade, uma introdução à falta-a-ser. O
sujeito é uma falta-a-ser, isto é, não tem substância, propriamente existe apenas
como a torção dos três tempos.” p. 122
“Porém, o neurótico, é justamente o sujeito que tem a mais aguda experiência
da falta da causa-de-ser, que pode experimentar a falta de necessidade de sua
vida, quer seja a ansiedade que pode desaparecer amanhã, quer a contingência
fundamental de sua existência.” p. 123
“Quando alguém encontra algo impossível, pode dizer isso é real, e localizar o
real como excluído, porém, dentro do próprio campo da linguagem.” p. 134
Miller, J.-A. Os usos do lapso. In:Agente. Revista de Psicanálise Nº13,
vol. VII. Salvador: EBP- BA, 2000. Tradução: Marise Pinto
“(…) E, por aí, o S1 aqui, que joga essa função eminente no inconsciente, sob a
forma dessas falas que marcam você, esse S1, ele está ao mesmo tempo veiculado
e acarretado no discurso universal.” p. 18
“Não: quando Freud quer fazer o público acreditar na noção que o inconsciente
é do real, ele recorre ao inconsciente-mestre, ele coloca em evidencia as ações
compulsivas, repetitivas, em que o sujeito aparece evidentemente como
comandado por algo mais forte do que ele, como eu quando chego atrasado a
este curso.” p. 19
324
Jacques-Alain Miller
“(…) apresenta o gozo do sintoma, esse gozo oculto como algo estranho, que
tem Befremdung, que não é familiar nem reconhecível. Aqui Freud fala do autoerotismo ampliado do sintoma, que constitui uma modificação do ser mesmo do
sujeito e, eventualmente, do seu próprio corpo.” p. 30
O CORPO FALANTE
“Isto é, que tudo isso, a articulação do inconsciente-verdade, do inconscientemestre e do inconsciente-saber, era feito para gozar, era feito para obter o
Lustgewinn, um ganho de prazer.” p. 20
Miller, J.-A. Biologia Lacaniana e acontecimento de corpo. In:
Opção Lacaniana Nº41. Eólia, São Paulo, 2004. Tradução: Ana Lúcia
Paranhos Pessoa
“(…) Isto nos diz qualquer coisa de fundamental sobre o estatuto do corpo,
deste corpo que dá o modelo imaginário do Um. Identificamos de alguma forma
espontáneamente, imaginariamente, o corpo e o ser vivo. (…) Se é lícito, para o
animal, identificar o ser e o corpo, não o é para a espécie humana. Isto concerne
ao estatuto do corpo falante: o corpo não avulta do ser, mas do ter.” p. 13
“(…) Lacan, no contexto onde tomou a fala, disse que a biología freudiana não é
a biología. Com efeito, a morte de que se trata na pulsão de morte não é a morte
biológica, não é o simples retorno do corpo vivo ao inanimado. É morte em
que se trata do além da vida. Uma biología que inclui a pulsão de morte é uma
biología do além da vida, mas um além da vida que está aberto ao ser falante
pela língua. Este além da vida é materializado pela sepultura, visto que a espécie
humana é a única em que o corpo morto conserva seu valor.” p. 14
Miller, J. A. Silet – os paradoxos da pulsão, de Freud a Lacan. Jorge
Zahar Editorial, Rio de Janeiro, 2005
“(…) Ora, o corpo lacaniano é imaginário. Só se introduz na experiencia
analítica, na metapsicología, na teoría do significante, por meio da imagem. Esta
é a lição do estágio do espelho. Por isso, há uma conexão esencial entre o gozo
e a imagem. E foi o que fez com que, quando falei aqui pela primeira vez sobre
o imaginário, eu desse como título “As prisões do gozo”, a fim de qualificar as
imagens no sentido de Lacan.” p. 81
Miller, J. A. Nota passo a passo In: O Seminário:, O Sinthoma. Livro
23 (1975-1976) de J. Lacan, Rio de Janeiro, Jorge Zahar Editorial
2007. Tradução: Sérgio Laia
“(…) E cabe a Lacan se interrogar então sobre a origem verdadeira do
significante Um.
“(…) A resposta está aquí, nessa página do Sinthoma, que sugere que o corpo
poderia ser o modelo, ou seja, a origen imaginária, não do um-todo-só, que é
significante, marca, traço, corte, mas do um-a-mais que é o conjunto vazio.
Trata-se de dizer, simplesmente, que o corpo existe como saco de pele, vazio,
fora e ao lado de seus órgãos.” p. 213
325
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) O ponto de partida é que a língua falada por cada um é um assunto
de família e que a família no inconsciente é, primordialmente, o lugar onde
aprendemos a língua materna. É por isso que o lugar da família está ligado à
língua que falamos, quero dizer, que falar, falar numa língua já é dar testemunho
de um laço com a família.” p. 82
“Lacan procurou um fundamento biológico para a falta-a-ser, mostrando que o
ser humano nasce inacabado, mais inacabado que qualquer outro animal, pois,
para satisfazer suas necessidades, lhe é preciso o cuidado do outro. Os animais
também têm necessidade dos cuidados do outro quando são pequenos, mas o
que especifica o humano é que ele chama o Outro, que ele transforma em gritos
os apelos, de modo que os primeiros gritos da criança são já balbucios, com
escansões nos sons que variam de uma língua para a outra; muito rápido, aquilo
que dizem as crianças – o balbucio, os barulhos – se distingue segundo a língua
em que se banharam.” p. 82
“Podemos dizer que a família se instala no inconsciente do neurótico porque ela
é o lugar onde o sujeito experimentou o perigo. A família, com efeito, é o lugar
do Outro da língua, logo, é o lugar do Outro da demanda.” p. 82
Miller, J. –A. O monólogo da aparola. http://.opcaolacaniana.com.br/
pdf/numero_9/O_monologo_da_aparola.pdf
“(…) É isto que ele propõe como gozo da fala, a Outra satisfação, a que se
fundamenta na linguagem e é distinta do que seria o puro gozo do corpo não
falante. Mas a própria expressão gozo da fala pode deslizar, sem que se perceba
o valor que deve ser dado a ela. Analistas ortodoxos – como eles se chamam
– estavam prestes a colocar isso no registro da pulsão oral. Não é esse o valor
próprio que Lacan dá a esta expressão, gozo da fala. É preciso dar um valor
radical a essa expressão, ou seja: o gozo fala. A fala é animada por um querergozar. Não se trata apenas de demanda. Seria possível dizer que a demanda
visa uma necessidade, uma satisfação, inclusive um gozo e que, portanto, esse
querer-gozar já estava presente na noção de demanda, porém um querer-gozar
que passa, que é dominado, pelo querer-dizer.” p. 17
Jacques-Alain Miller
Miller, J.-A. Assuntos de família no inconsciente, In: aSephallus
Revista de Orientação Lacaniana Nº4, vol. II. 2007
O CORPO FALANTE
Miller, J. –A. “O inconsciente e o corpo falante” - Apresentação do
tema do X Congresso da AMP”. 2014. https://www.congressoamp2016.
com/uploads/8d43a017ed95340e07f9ca4dbb5cb235eb472a04.pdf
“(…) Estava quase endossando essa ideia quando me dei conta de que o
corpo, como corpo falante, muda de registro. O que é o corpo falante? Ah,
é um mistério, disse Lacan um dia. Esse dito de Lacan deve ser ainda mais
mantido pelo fato de que mistério não é matema, é até mesmo o oposto. Em
Descartes, o que faz mistério, mas permanece indubitável, é a união da alma
com o corpo. A «Sexta meditação» lhe é dedicada e, por si só, ela mobilizou
tanto a engenhosidade de seu mais eminente comentador quanto as cinco
precedentes. Essa união, uma vez que ela concerne meu corpo, meum corpus,
vale como terceira substância entre substância pensamento e substância extensão.
Esse corpo, diz Descartes – a citação é famosa -, «não apenas estou alojado
em meu corpo, como um piloto em seu navio, mas, além disso, estou muito
estreitamente ligado a ele e de tal forma confundido e misturado que componho
com ele como uma só totalidade».”
“O corpo falante fala em termos de pulsões. Isso autorizava Lacan a apresentar
a pulsão sob o modelo de uma cadeia significante. Ele prosseguiu na via
desse desdobramento em sua lógica da fantasia, na qual ele disjunta o Isso e o
inconsciente. Mas, em contrapartida, o conceito de corpo está na junção do
Isso com o inconsciente. Ele lembra que as cadeias significantes que deciframos
à maneira freudiana são conectadas com o corpo e são feitas de substância
gozante. Quanto ao Isso, Freud dizia que ele era o grande reservatório da libido.
Esse dito é deportado para o corpo falante que, como tal, é substância gozante.
É do corpo que são extraídos os objetos a; é no corpo que é buscado o gozo para
o qual trabalha o inconsciente.”
“A interpretação não é um fragmento de construção incidindo sobre um
elemento isolado do recalque, como o pensava Freud. Ela não é a elucubração
de um saber. Ela não é tampouco um efeito de verdade logo absorvido pela
sucessão das mentiras. A interpretação é um dizer que visa ao corpo falante para
produzir nele um acontecimento, para passar para as tripas, dizia Lacan. Isso não
se antecipa, mas se verifica a posteriori, pois o efeito de gozo é incalculável. Tudo
o que a análise pode fazer é afinar-se com a pulsação do corpo falante para se
insinuar no sintoma.”
“Trata-se do corpo falante com seus dois gozos, gozo da fala e gozo do corpo:
um leva ao escabelo, o outro sustenta o sinthoma.”
326
327
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
III /d.1 Cursos Psicanalíticos
Miller, J.-A. Perspectiva dos Escritos e Outros Escritos de Lacanentre o desejo e o gozo, Rio de Janeiro, Jorge Zahar Editorial, 2011
“(…) Sou impelido a começar dizendo que – tal como quando se trata do
inconsciente e da interpretação – não se deve pensar que o conceito de sinthoma
anula as outras leituras clínicas. Ele se acrescenta a elas. Ou seja, ele supõe a
arqueología de tudo o que o precede: a clínica freudiana e a clínica lacaniana
clássica, que formula a clínica freudiana em termos lingüísticos. Precaução,
portanto, sinthoma não equivale a rasura. Sinthoma é um termo que se
acrescenta, supera clivagens e multiplicidades de conceitos precedentes e adquire
seu sentido a partir daquilo que supera.” p. 70
“(…) O ponto de vista do sinthoma, ao por em primeiro plano o modo de
gozar em sua singularidade, isto é, subtraindo-o das categorías, apaga a distinção
neurose-psicose. Singularidade quer dizer então subtração das categorías, ao
passo que particularidade ainda há categorias. Nela, por certo, não se tem
a categoria todos, como no universal, tem-se, porém, a categoría de alguns,
a categoría tipo, ao passo que com o singular as categorías desaparecem. A
distinção neurose-psicose, tal como reformulada por Lacan a partir de Freud,
pauta-se, com efeito, numa distinção significante: a presença ou não do Nomedo-Pai. Mas isso se traduz, de fato, numa tipología dos modos de gozar. Assim
na neursose há um condensador de gozo estritamente debruado pela castração, o
que Lacan grafou como a/ (-φ).” p. 70-71
“(…) O conceito de sinthoma foi inventado para o caso de James Joyce, um
caso sem análise. É uma inspiração recebida de um caso do qual temos dados
biográficos, literários, sua obra, sua correspondencia, as lembranças de seus
próximos e, para Lacan, até o fato de ter visto, em sua juventude, Joyce na rua
do Odeon.” p. 82
“(…) O fato foi consagrado por Lacan quando disse que Joyce era desabonado
do inconsciente. Quer dizer, pelo fato de não se ter testemunho algum do
inconsciente de Joyce, por não haver nenhuma experiência. Lacan inferiu que
Joyce não tinha, propriamente falando, relação com o inconsciente. É que, em
termos precisos, essa articulação de quatro termos sobre o pivô do binário S1S2 não valia para aquele que podemos chamar de o falasser Joyce. Este se revela
ser muito mais um escritosser (scriptuêtre), já que dele temos a escrita. Portanto,
328
Jacques-Alain Miller
III /d. Sinthoma
O CORPO FALANTE
dessa articulação Lacan diz que “em Joyce não há nada que se pareça com o
discurso do inconsciente”. No lugar dessa articulação ele inventa, a fim de dizer
o que há ali, o sinthoma. É, portanto, um conceito que se propõe onde não há o
inconsciente. É, se quisermos, o negativo do inconsciente.” p. 83
(…) estaria assim anulada a função do sujeito? Não diria isso. Mas, em relação
ao sinthoma, o sujeito esmera-se em sua periferia.
Centrar a operação analítica sobre a fantasia abre para uma problemática da
queda, da separação, da travessia daquilo que reuni ao dizer fratura da fantasia.
Em contrapartida, no que concerne ao sinthoma não há nada semelhante, uma
vez que a busca se orienta mais no sentido da identificação, ou seja, no sentido
do: eu sou isto, o sinthoma.
Não se reconhece o ser do sinthoma do sujeito num objeto a, mas num
processo, numa repetição e uma montagem. Assim o reviramento no ensino de
Lacan, a partir do passe, não anula o que concerne à fantasia, mas isola o que
resta, isto é, o sinthoma, como aparelho de gozo. Em outras palavras, isso ordena
o passe num mais-além- do passe que é esse opaco aparelho. Razão pela qual
darei valor de sentido ao que Lacan formula sobre a satisfação que marca o final
da análise.” p. 138
III /d.2 Outros Textos
Miller, J.-A. Peças avulsas – comentário sobre Le Sinthome. In: Opção
Lacaniana Nº44. Edições Eólia, São Paulo, 2005
“(…) O sinthoma, aquele que Lacan inventa após seu Seminário: Mais, ainda, é
uma peça avulsa, uma peça que se destaca para disfuncionar, uma peça que não
tem outra função – aparentemente é assim que ela se destaca – a não ser a de
entrevar as funções do indivíduo e, longe de ser apenas um entrave, ela tem, em
uma organização mais secreta, uma função iminente. Disso decorre a ideia de
que na análise se trata de encontrar, de bricolar uma função para ela.
O Sinthoma se apoia, se escora na literatura muito especial de James Joyce, e
principalmente no que é, mesmo se Lacan pouco o mencione, o testemunho
de uma peça avulsa da literatura, Finnegans Wake, com o qual jamais se soube
muito bem o que fazer.” p. 15-16
“(…) Mas o sinthoma não se cura. Trata-se de saber que função encontrar para
ele. Lacan introduz a noção de que não é a literatura, mas sim a lógica que debe
ser aplicada ao sinthoma, o que significa reconhecer sua natureza, em particular,
329
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
O uso lógico do sinthoma ao qual Lacan nos convida se opõe ao seu uso de
decifração, que remete à noção de verdade do síntoma e conduz ao real do
sinthoma. Ao mesmo tempo, isso certamente implica, nos esboços da teoría
propostos por Lacan e em sua prática, uma depreciação da verdade e, mais que
isso, a ideia de que visar a verdade do síntoma é alimentá-lo.” p.16
“(…) Tratar-se-ia de apreender aquí o pedaço de real que se visa quando se diz
‘não há relação sexual’, que é a face negativa do fato positivo: “há sinthoma.”
p. 17
“(…) O uso lógico do sinthoma, sobre o qual Lacan entende reorientar
a operação analítica, é, como tal, disjunto de uso social, que é sempre
comunicacional. É um uso que tende a ser solipisístico – para dizê-lo em termos
filosóficos -, ou ainda autista, em termos clínicos. O uso lógico do sinthoma é
o ponto de partida do Seminário: o Sinthoma e se opõe à decifração do sintoma
em termos de verdade. Ele introduz, sem dúvida, um desenvolvimento – não é
uma estagnação – mas não é revelação, é redução. Redução de que? Redução a
um osso. Redução a um elemento, ou mesmo redução a um significante, mas
tudo muda se o significante é representado e, por isso mesmo, concebido como
um aro de barbante. Nesse Seminário, o aro de barbante com o qual se compõe
o nó, aro pra toda obra, vem no lugar do uso que Lacan dava ao significante. O
aro de barbante não é um traço, ele fecha, isola, supõe um furo.” p. 22
Bordados
“(…) Se é isso, pode-se dizer que, para cada um, o sinthoma se inscreve sempre
na demissão do pai, e que é na via aberta pela demissão do pai que o significante
é causa de gozo. Disso resulta esta função atribuida ao sinthoma: ser reparador.”
p. 24
“(…) É o que é realçado no Seminário: O Sinthoma, no qual se vê o sinthoma
reparar a cadeia borromeana quando seus elementos não se mantém bem
juntos. O sinthoma aparece como um operador de consistência que permite ao
simbólico, ao imaginário e ao real continuar mantendo-se juntos.” p. 25
“(…) No caso Joyce, o sintoma é exatamente uma compensação da carência
paterna, carência que se conclui na geração seguinte pela esquizofrenia da filha
de Joyce. Como se Joyce tivesse sido o intercessor entre a carência de seu pai e a
esquizofrenia de sua filha. É nesse intervalo, no qual se aloja Joyce, que se pode
330
Jacques-Alain Miller
que ele não é uma formação do inconsciente, e deve ser usado lógicamente até
atingir seu real, suponho que, no final, ele não terá mais sede. Ele nota que Joyce
fez mais ou menos isso.
O CORPO FALANTE
fazer a hipótese de que ele foi servo da polifonia da fala. Para ele, a língua não
pôde se ordenar no regime do pai, pondo-se então a retinir ecos. A hipótese é
que esse era seu sinthoma, do qual ele fez um produto de arte, de sua arte.”
p. 25
Miller, J.-A. Peças avulsas – comentário sobre Le Sinthome. In: Opção
Lacaniana Nº45. Edições Eólia, São Paulo, 2006. Tradução Márcia
Souza Bandeira
“ (…) No Seminário: O sinthoma, o nó é uma escrita. Ele é traçado, desenhado.
Esse nó como escrita, como desenho, não deve nada à conexão entre o
significante e o significado. Desse modo Lacan pode dizer que o nó modifica
completamente o sentido da escrita. Em que consiste essa mudança? O nó
desatrela a escrita da fala e, ao fazê-lo, o próprio nó demonstra poder ter o
valor de um traumatismo. Ele teve, para os seus ouvintes, e terá, na história da
psicanálise, o valor de um traumatismo.” p. 15
Miller, J.-A. Conclusão das aulas sobre o Sinthoma. In: Opção
Lacaniana Nº46, São Paulo, Edicões Eólia, 2006. Tradução Teresinha
Meirelles Prado
“(…) O que faz a diferença entre o sintoma e o sinthoma? Começamos a
apreendê-lo melhor. O sintoma para Freud – pelo menos o Freud renovado,
reconfigurado por Lacan – é pensado a partir da verdade. É uma emergência da
verdade, ele a representa, e mesmo: ele é verdade – com “é” em itálico, como o
encontramos uma vez nos Escritos (“A direção do tratamento e os princípios de
seu poder”). Para Lacan, e não para Freud, há o sinthoma.
(…) O sinthoma, é pensado, se articula, não a partir de a verdade, mas do gozo,
como um modo-de-gozar. (…) Os dois termos, verdade e gozo, correspondem
a dois regimes bastante diferentes. Como dizer em poucas palavras o regime
da verdade? É uma questão de trajetória e de travessia, de errância e de erro,
de dissimulação e de decifração, de surpresa e de espanto. O regime do gozo,
por outro lado, é pleno de positividade. O gozo só varia do mais ao menos e
vice-versa. São dois regimes distintos, duas perspectivas clínicas distintas, duas
codificações da experiência!” p. 13
“(…) Pelo lado do sinthoma e do gozo, não há falta. É aí que Lacan diz, um
tanto atabalhoadamente: as pessoas são felizes. Mesmo quando declaram sua
infelicidade. Todo encontro, toda hora lhes é boa na medida em que ser serve à
repetição.” p. 14
331
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Miller, J.-A. Perspectiva do Seminário 23 de Lacan. O Sinthoma, Rio
de Janeiro, Jorge Zahar Editorial, 2009
“(…) Contento-me opor aqui a definição de sinthoma e, inicialmente, pela
negativa. O sinthoma não é uma formação do inconsciente. O sinthoma tem
uma relação com o inconsciente mais complexa, de todo modo, diferente.”
p. 135
“(…) O sinthoma, diz ele (Lacan) – em uma frase que tem alguma coisa que
poderia parecer banal; em todo caso ela não atrai nosso olho imediatamente
quando a lemos -, é o que há de singular em cada indivíduo.” p. 136
“(…) O sinthoma se oporia como singular a tudo o que o síntoma, em sua
primeira acepção, comporta de generalidade. Isso me parece coerente com o que
Lacan formulará no fim do Seminário 24: L’Une-bévue – fórmula com a qual
debemos nos acostumar – a saber: a neurose tem a ver com as relações sociais.”
p. 136
“(…) Ele (Lacan) aloja o inconsciente no Outro e, pelo contrario, para fazer
simetria, aloja o sinthoma no Um. E inclusive define o Um pelo sinthoma.
Faz dele a consistência relativa à definição do Um, se assim posso dizer. Faço
essa referência ao que me parece volta no derradeiro ensino: a oposição entre o
sinthoma e o inconsciente.” p. 137
Miller, J.-A. O inconsciente e o corpo falante - Apresentação do tema
do X Congresso da AMP”, 2014. https://www.congressoamp2016.com/
uploads/8d43a017ed95340e07f9ca4dbb5cb235eb472a04.pdf
“(…) Aprendemos a dizê-lo, por exemplo, quando falamos do sintoma como de
um sinthoma. Aí está uma palavra, um conceito que é da época do falasser. Ele
traduz um deslocamento do conceito de sintoma, do inconsciente ao falasser.
Como vocês sabem, o sintoma como formação do inconsciente estruturado
como uma linguagem é uma metáfora, um efeito de sentido induzido pela
substituição de um significante por outro. Em contrapartida, o sinthoma de
um falasser é um acontecimento de corpo, uma emergência de gozo. O corpo
em questão, aliás, nada diz que é o de vocês. Você pode ser o sintoma de outro
corpo desde que você seja uma mulher. Há histeria quando há sintoma de
sintoma, quando você faz sintoma do sintoma de um outro, ou seja, sintoma no
332
Jacques-Alain Miller
“(…) Pela vertente do sintoma, é a repetição do encontro faltoso, uma repetição
do evitamento, ao passo que pela vertente do sinthoma, é a repetição daquilo que
sustenta o sujeito no ser, e é porque tudo lhe é bom. Só podemos falar aqui de
mais e de menos em termos econômicos.” p. 14
O CORPO FALANTE
segundo grau. O sintoma do falasser resta, sem dúvida, a ser esclarecido em sua
relação com os tipos clínicos – apenas evoco, sobre os rastros de Lacan, o que
acontece na histeria.” p. 4
“O sinthoma, em compensação, como sintoma do falasser, está ligado a seu
corpo. O sintoma surge da marca escavada pela fala quando ela toma a aparência
do dizer e faz acontecimento de corpo. O escabelo está do lado do gozo da fala
que inclui o sentido. Em contrapartida, o gozo próprio ao sinthoma exclui o
sentido”.
III /e. O Escabelo
III /e.1 Outros Textos
Miller, J.-A. Peças avulsas. In Opção lacaniana Nº45. São Paulo,
Edições Eolia, 2006. Tradução: Márcia Souza Bandeira
“(…) Escabelo; eis o conceito inédito introduzido por Lacan a partir de James
Joyce. É certamente, uma gozação concernente ao belo, uma versão sardônica da
estética. p. 12
“O escabelo é o que Joyce se decide a fazer, o que será próprio a sobreviver a ele,
ou seja, ir além da decomposição de seu corpo. Trata-se de forjar um escabelo. E
forjá-lo a partir do afeto do corpo, ao qual faz referencia Spinoza, mas que Lacan
chama com seu nome freudiano, “o sintoma, modificando-o, passando a chamálo: o sinthoma. Isto é o escabelo à ambição de Joyce.” p. 12-13
“Como fazer desse acontecimento singular, desse traumatismo contingente,
desse acontecimento que afeta cada ser falante em sua singularidade, alguma
coisa que possa valer como uma lição….? Como, dessa infelicidade, dessa
medíocre infelicidade, fazer algo que pode ser chamado de belo, e que não passa
de um ‘escabelo’?” p.13
“…ele diz que sempre é preciso o sintoma, ou seja, uma invenção, para que isso
se mantenha junto.
Essa invenção é uma obra. Essa obra enraizada no sinthoma é o que Lacan
chama de escabelo, ele escreveu como um gracejo: S.K. belo. O ser falante
precisa de um escabelo, porque a linguagem introduz ou repercute um furo, ele
precisa de um suplemento para subir na vida. O privilegio de Joyce, se existe
algum, é que ele fabricou esse escabelo com seu dizer. Nisso ele é exemplar para
333
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Miller, J.-A. Sublimação = Escabelo. - Nota Passo a passo. In: O
Seminário: o sinthoma. livro 23 (1975-1976) de Jacques Lacan. Jorge
Zahar Editorial, Rio de Janeiro, 2007. Tradução: Sergio Laia
“(…) O recurso de elevação próprio à sublimação como operação
ascensional era sempre nomeado por Lacan como o conhecido termo
hegeliano de Aufhebung. Ele lhe dá em seu escrito “Joyce, o Sintoma o
nome mais expressivo de ‘escabelo’.
O escabelo enfatiza o corpo. Do mesmo modo, Lacan designa o sinthoma
como “acontecimento de corpo” enquanto definia o sinthoma freudiano
como “verdade”. Joyce, “herético”, partidário do sinthoma-que-rola-como-eute-impulsiono, “faz decair o sinthoma de seu masdiaquinismo”. Mas isso não o
impede de querer se içar com seu sinthoma sobre “o SKbelo da obra de arte.”
p. 208
Miller, J. –A. “O inconsciente e o corpo falante” - Apresentação do
tema do X Congresso da AMP”, 2014. https://www.congressoamp2016.
com/uploads/8d43a017ed95340e07f9ca4dbb5cb235eb472a04.pdf
“ (…) A palavra que situo ao lado de sinthoma é escabelo [escabeau], que tomo
emprestado de «Joyce o Sintoma» [14]. O escabelo não é uma escada – é menor
que uma escada -, mas tem degraus. O que é o escabelo? Penso no escabelo
psicanalítico, não apenas aquele que precisamos para pegar os livros na estante
de uma biblioteca. O escabelo é, de um modo geral, aquilo sobre o qual o
falasser se ergue, sobe para se fazer belo. É seu pedestal, que lhe permite elevar a
si mesmo à dignidade da Coisa [15]. Isto, por exemplo, é um pequeno escabelo
para mim [mostrando o pequeno estrado sob a mesa].”
“O escabelo é um conceito transversal. Traduz de maneira imagética a
sublimação freudiana, mas em seu cruzamento com o narcisismo. Aqui está
uma aproximação que é propriamente da época do falasser. O escabelo é a
sublimação, mas na medida em que ela se funda sobre o eu não penso inicial do
falasser. O que é esse eu não penso? É a negação do inconsciente por meio da
qual o falasser se crê senhor de seu ser. E, com seu escabelo, ele acrescenta a isso
o fato de se crer um senhor belo. O que chamamos de cultura não é nada além
334
Jacques-Alain Miller
a psicanálise. Por isso Lacan pode dizer que ele deu a fórmula geral do escabelo,
deu-lhe uma consistência lógica, não renunciando a ele, mas indo até o fim: do
traumatismo inicial da lalíngua, do acontecimento do corpo que dele resulta,
leva-lo até uma espécie de eternidade.” p. 15
O CORPO FALANTE
da reserva dos escabelos na qual se vai buscar com o que esticar o colarinho e
bancar o glorioso.”
“O que fomenta o escabelo? O falasser sob sua face de gozo da fala. Esse gozo da
fala origina os grandes ideais do Bem, do Verdadeiro e do Belo.”
“Se Lacan se apaixonou por James Joyce e especialmente por sua obra Finnegans
Wake, foi devido à façanha – ou à farsa – que representa por fazer convergir
sintoma e escabelo. Em termos exatos, Joyce fez do próprio sintoma como fora
do sentido, ininteligível, o escabelo de sua arte. Ele criou uma literatura cujo
gozo é tão opaco quanto o do sintoma, nem por isso deixando de ser um objeto
de arte elevado sobre o escabelo à dignidade da Coisa.”
“… no que concerne ao que chamamos de Belas Artes, o iniciador talvez tenha
sido um certo Marcel Duchamp. Joyce, Schoenberg, Duchamp são fabricantes
de escabelos destinados a fazer arte com o sintoma, com o gozo opaco do
sintoma. E teríamos bastante dificuldade em ponderar sobre o que é o escabelosintoma no que concerne à clínica. Temos, antes, de tirar disso uma lição.”
“Mas, digam-me uma coisa, fazer de seu sintoma um escabelo não é
precisamente o de que se trata no passe, no qual se joga com seu sintoma e
com seu gozo opaco? Fazer uma análise é trabalhar a castração do escabelo para
trazer à luz o gozo opaco do sintoma. Fazer o passe é jogar com o sintoma assim
esvaziado, a fim de fazer dele um escabelo, sob os aplausos do grupo analítico. E,
para dizê-lo em termos freudianos, isso é evidentemente um fato de sublimação
e os aplausos não são fortuitos. O momento em que a assistência está satisfeita
faz parte do passe. Pode-se até dizer que o passe se realiza aí.”
“Digamos que eu inventei fazer uma mostração pública dos passes porque
eu sabia, eu pensava, acreditava que isso era a própria essência do passe. Os
escabelos aí estão para fazer a beleza, pois esta é a defesa última contra o real.
Mas, uma vez que os escabelos são derrubados, queimados, resta ainda ao
falasser analisado demonstrar seu saber fazer com o real, saber fazer com ele um
objeto de arte, seu saber dizer, saber bem dizê-lo. É o que constitui o estopim, a
tomada da palavra que ele é convidado a fazer”.
335
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Outros autores
IV /a. Falasser
Alvarenga, Elisa. Do inconsciente recalcado ao céu constelado In :
Textos de Orientação do site do X Congresso da AMP, O corpo
falante : o inconsciente no século XXI. 2015
“(…) Para tentar elucidar esta proposição de Jacques-Alain Miller, segundo a
qual analisar o falasser é diferente de analisar o inconsciente do primeiro ensino
de Lacan, parece-me interessante evocar casos que atendemos em nossa prática,
cuja fala, constelar, não parece organizar-se por um traço unário, mas por um
enxame de significantes que são muito mais fonte de gozo que de sentido.
(…) Cada paciente, com sua fala constelar, pode construir uma bricolagem que
dê consistência a seu corpo e existência ao seu sintoma, do qual deve manter a
distância necessária para deixar aberta a fresta da relação sexual que não há. A
partir dessa fresta, ele poderá inventar uma maneira singular, sinthomática, de
existir, e talvez um novo laço com o Outro.” p. 42
Alvarez, Patricio. Escabelo. In: Papers 1. Site do X Congresso da
AMP: O corpo falante: sobre o inconsciente no século XXI. Tradução:
Paola Salinas
“(…) Em síntese: o inconsciente estruturado como uma linguagem é uma
elucubração do parlêtre, o sintoma é o envelope formal do sinthoma, e o corpo
é a construção simbólico imaginária que se monta sobre o corpo falante. Estas
substituições não anulam o termo anterior, mas o enriquecem ao destacar um
tempo lógico inicial.”
Baptista, Angela. Sobre o incurável do sinthoma. In: Opção
Lacaniana Nº45. Escola Brasileira de Psicanálise. Edições Eolia, São
Paulo, 2005
“(…) Trata-se de localizar o campo da incidencia do pulsional no falasser que
336
Outros autore
4.
O CORPO FALANTE
permite, cernir a letra de seu gozo. Neste sentido, o ato analítico produz uma
separação entre S1 e o objeto a, fixados no gozo de seu sinthoma.”
Caldas, Heloisa. Trauma e linguagem: acorda. In: Opção Lacaniana
online nova série ano 6. Nº16. http://www.opcaolacaniana.com.br/pdf/
numero_16/Trauma_e_linguagem_acorda.pdf
“(…) Lacan virá a dizer que o falasser seria um nó tecido de letra e gozo.”
Carrijo, Luiz Fernando. Sonhos, lapsos, chistes: como o fundamental
significante ainda interessa ao analista lacaniano? In: Psicanálise: a
clínica do Real / Jorge Forbes [editor]; Claudia Riolfi [organizadora],
Barueri, SP: Manole, 2014
“Ora, nossa pergunta que desejamos compartilhar diz respeito a este ponto; se
não há saber no Real, onde se ancora a certeza do parlêtre que o permite afirmar
ter chegado a essa ‘zona de não impacto de sentido” que sustenta o final de um
tratamento? Ainda que não seja nosso propósito nesse capítulo, gostaríamos
de tocar nesse ponto por achá-lo fundamental. Se a certeza e a satisfação
encontradas não se ancoram na elaboração de um saber, a nosso ver, a única via
possível seria a da “invenção” ou a da criação, e não a da substituição de um
mito por outro. Mas quais as condições para isso e de que modo essa invenção
pode sustentar o parlêtre em sua vida?” p. 189
Coelho, Tânia. Os corpos falantes: sujeitados ao supereu ou ao
supersocial? In: segunda produção de Papers, Site do X Congresso da
AMP, O corpo falante : o inconsciente no século XXI. 2015
“(…) Miller (2014) aposta que os testemunhos de passe hoje provam que o
sintoma/castração (inconsciente/desejo) foi substituído pelo sinthoma/pedestal
(narcisismo/sublimação). Esta aproximação da sublimação com o narcisismo
é alguma coisa relacionada com a época do falasser. O pedestal é a sublimação
que se funda no estado primordial do falasser, o ‘eu não penso’. É a negação do
inconsciente. É aquilo por meio de que alguém se acredita o ‘belo mestre de seu
ser’.” p. 100
Collier do Rego Barros, M. do Rosário. In: Opção Lacaniana online
nova serie Nº16, ano 6. http://www.opcaolacaniana.com.br/pdf/
numero_16/Trauma_uma_nova_perspectiva_sobre_um_real.pdf
“(…) Abordar o conceito de trauma a partir da indicação de Lacan em seu
ultimissimo ensino, como relação do falasser com a lingua, pode orientar
nossa maneira de acolhê-lo e de fazer face ao empuxo atual da civilização,
337
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Drummond, Cristina – Olhar de mãe. In: Revista Curinga, EBP-MG,
2015
“(…) Para muitos falasseres esquizofrênicos, encontramos um impasse no
enlaçamento do real do corpo da criança e sua imagem. Para eles, a criança
pode ser tomada como uma extensão do corpo materno e nos deparamos com
vivências de gravidez nas quais o corpo do filho não pode ser imaginado pela
mãe. Nesses casos, a criança pode estar na posição de condensador de gozo
que satura a falta da mãe, encontrando muitos impasses para se separar desse
lugar. Essa apresentação do objeto para além da imagem que o encobre, ou,
ainda separado dela, mostra-se de modo impactante na psicose, sobretudo nas
ocorrências de infanticídio e de negação da gravidez.” p. 96
(…) Interessa-nos, (…), perceber como o ser mãe é impossível de ser subjetivado
por esse falasser e que, na base disso está uma desamarração do imaginário que
não possibilita que esse tenha um corpo e muito menos que possa reconhecer
seu bebê como um filho que tem um corpo distinto do seu. O que aprendemos
com Lacan é que o amor materno é contaminado por um ilimitado que tem
como avesso o ódio, e que esse ódio pode se manifestar em situações graves que
chegam ao ponto de levar a mãe a matar o próprio filho.” p. 98
Ferreira da Silva, Rômulo. “O incurável do choque do significante
com o corpo”. In: Carta de São Paulo Revista da Escola Brasileira de
Psicanálise São Paulo Nº21. O trauma e a clínica psicanalítica no
século XXI. 2014
“(…) Na minha experiência de análise o real foi tocado pelo real não só pela
introdução de significantes que se apresentavam fora do sentido, mas também
por intervenções que engendravam transferência negativa. Ela era fugaz, surgia
no corpo, real, finalizando-se num gesto em direção ao analista.” p. 91
“Só depois de terminada a análise, no ultrapasse, é que pude novamente articulálo como um significante: ‘toma!’. Um significante que aparece articulado no
discurso do falasser de várias maneiras, não mais fixado no modo de gozo
instaurado na constituição do sujeito. Portanto, há uma violência da palavra
sobre o organismo que faz surgir um corpo, um corpo que, por definição via
psicanálise, é traumatizado e em torno do qual o falasser constrói sua lógica.”
Outros autore
que considera que se poderia anulá-lo e eliminar seus efeitos, de forma a
não perturbar o desenrolar da vida segundo as exigencias da produção e de
consumo.”
O CORPO FALANTE
Forbes, J. Não tenho a menor ideia. In: Opção Lacaniana Nº55,
Revista Brasileira Internacional de Psicanálise. Edições Eolia, São
Paulo, 2009
“(…) A posição de sujeito suposto saber é insuficiente para tocar o corpo do
parlêtre. – “Não se conceitualiza mais o paciente como um sujeito – diz Miller
em sua décima-segunda aula [Coisas de fineza] –, conceitualiza-se como um
parlêtre (…), o que quer dizer que ele depende de um corpo.” p. 71
“(…) O final da análise, tomado em sua dupla acepção: de objetivo e de
término, parece-me ser a questão mais interessante que se impõe hoje a uma
clínica que diferencia o sinthoma de todas as suas expressões em semblantes –
“O sinthoma, isto funciona, isto não é suscetível de travessia ou de revelação,
é suscetível, não existe um termo em Lacan – diz Miller, ainda em sua aula
doze -, então vou tomar emprestada a palavra do inglês, como herdamos o
insight, suscetível de uma re-engineering (reengenharia em português), de uma
reconfiguração. É isto que se trata de obter: uma reconfiguração através da qual
não podemos dizer que o gozo ganha sentido, não necessariamente, mas uma
re-engineering que permite passar do desconforto à satisfação: a satisfação do
parlêtre em questão.” p. 71
Galletti Ferretti, Maria Cecília. O passe. In: Correio Nº77, Revista da
Escola Brasileira de Psicanálise O corpo falante Analisar o parlêtre,
São Paulo, 2015
“(…) O passe do falasser não é testemunhar sobre a travessia da fantasia; trata-se
da elucidação da relação como gozo e como foi adquirido um saber com o que
não muda no gozo.” p. 80
Harari, Angelina. A psicanálise fora de quatro paredes: por que as
instituições têm tantas crises? In: Psicanálise: a clínica do Real / Jorge
Forbes [editor]; Claudia Riolfi [organizadora], Barueri, SP: Manole,
2014
“(…) É nessa medida que Miller (2007) postula o avesso de Lacan, não se
tratando de mudança de tópico como em Freud, mas de um recomeço que não
cessa jamais. No avesso de Lacan, o Outro é destituído e o sujeito é pensado a
partir das categorias clínicas: real, simbólico e imaginário. Mas, a rigor, não é
mais do sujeito que se trata aí, não é mais do sujeito do significante, e sim do ser
humano qualificado como falasser.” p. 376
p. 91-92
338
339
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) Vocês percebem a homologia dessas duas frases? No seminário O sinthoma,
temos: “o falasser adora seu corpo porque crê que o tem”. Na realidade, ele não
o tem, mas “seu corpo é a única consistência – consistência mental, pois seu
corpo cai fora a todo instante” e, em Nice, “o homem ama sua imagem como o
que lhe é mais próximo, isto é, seu corpo. Simplesmente, de seu corpo, ele não
tem nenhuma ideia”. Ele crê que seja eu. Cada um crê que seja ele. É um furo. E
depois, fora, há a imagem. E com essa imagem ele faz o mundo.” p. 12
“O corpo “é um furo”. E o falasser tenta preencher esse furo com uma crença.
(…) O falasser é um ser de vazio, é o furo da conferência de Nice, tanto quanto
um ter ou uma terência [avoiement] [11], segundo uma grafia de Lacan, segundo
uma terência primeira.” p. 13
Laia, Sérgio – Joyce e a modulação do objeto a. In: Ao pé da letra –
leitura e escritura na clínica psicanalítica. (Ana Lúcia Lutterbach
Holck e Tatiane Grova, organizadoras). Subversos-ICP-RJ, Rio de
Janeiro, 2014
“(…) nas psicoses, o despojamento do corpo, do ego, pode tomar formas
que, por exemplo, vão desde a despreocupação com os mínimos cuidados da
chamada “higiene pessoal” até essa preocupação excessiva com a “aparência
pessoal” que, em muitos casos diagnosticados como Transtorno Dismórfico
Corporal (Body Dysmorphic disorder) pode fazer com que o corpo seja
recortado por infindáveis formas de cirurgia plástica ou mesmo por automutilações. É possível sustentar que, se os psicóticos podem suportar tal
despojamento do corpo, do ego, é porque não largam esse ossobjeto que Lacan
chamou de objeto a e ao qual muitas vezes se identificam. Com esse ossobjeto,
que é o objeto a, os psicóticos procuram se fazer um corpo e se contrapor aos
significantes que a forclusão do Nome-do-Pai faz precipitar sobre eles. Eles se
agarram ao corpo como um ossobjeto e podem encontrar nesse tipo de adesão
uma nomeação para o que são, ou seja, uma espécie de “ego”. Trata-se de uma
outra espécie de narcisismo, diverso daquele tradicionalmente problematizado
pela psicanálise e mesmo da acepção mais convencional dessa palavra, porque se
trata de um “narcisismo” ligado a um osso, a um ossobjeto, e não a uma imagem
corporal.” p. 223-224
340
Outros autore
Laurent, E. Apresentação do Seminário. E. Laurent. Falar com seu
corpo-escabelo. In: Rádio Lacan (transcrição pela equipe reunida por
Didier Mathey, 2015. Tradução: Teresinha N. Meirelles do Prado
O CORPO FALANTE
Leguil, Clotilde. As paixões do corpo no século XXI, in: Papers 2, site
do X Congresso da AMP, O corpo falante : o inconsciente no século
XXI, 2015
“(…) mas sua relação com o significante, relação que é sobretudo, uma relação
de gozo, isto é, de certo modo de fazer vibrar seu ser com o sentido que ele ouve,
que interpreta, de que acredita padecer.” p. 91
Lutterbach Holck, Ana Lúcia, Patu, a mulher abismada. Subversos,
Rio de Janeiro, 2008
“(…) “a falta-a-ser se superpõe a falta-a-ter (manque-à-avoir) que corresponde
à vertente imaginária da castração. Nos dois sexos, ter o órgão introduz a
dimensão da falta, em um por temer perdê-lo, na outra porque se sente privada.
No seminário 20 a função fálica não é tornar um parceiro do outro, como está
proposto em A significação do falo (Lacan 1998), mas qualificar a relação do
próprio sujeito com essa função e o termo manque-à-être, associado ao corpo de
gozo, é substituído pelo termo parlêtre, ser falante.” p. 63
Mandil, Ram Avraham – Psicanálise de “uma nota só”, in: Opção
Lacaniana – Revista Brasileira Internacional de Psicanálise Nº68 e
Nº69. Edições Eólia, São Paulo, 2014
“(…) Gostaria de destacar nesse momento a dimensão do falasser, mais
precisamente o modo como pude apreender as formas de apresentação do corpo
falante, de sua relação com o inconsciente e com o sinthoma.
Há um modo de experimentar o corpo, de se assegurar de sua pertinência, a
partir de sua sustentação pela fantasia. Trata-se do corpo constituido como
cena, do corpo como unificação de experiências fragmentadas, heterogêneas,
cuja consistência é assegurada por sua forma, pela relação com sua imagem. É
o que permite a Lacan, por exemplo, interrogar-se sobre o sintoma de Joyce,
ao perceber que sua consistência corporal não passava pelo acionamento da
fantasia. Isso está na análise que ele faz do episódio da surra desferida contra
Stephen Dedalus em Um retrato do artista quando jovem.” p. 47
“(…) Para concluir, vou retomar aqui o sonho que relaciono ao final de minha
análise. Trata-se de um sonho de duas partes. Na primeira, sou comunicado
por minha mulher que ela estaria me deixando por outro. Imediatamente sinto
uma contração na mandíbula, o que, no entanto, não me impede de falar. Não
há como não reconhecer a presença de um witz corporal nesta cena. A palavra
francesa “mandibule” articula meu nome de família à forma como eu havia
constituído uma bolha (bulle, em francês) em minha estratégia neurótica de
341
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Mazzotti, Maurizio Falequivoco. In: Papers 1, Site do X Congresso
da AMP. O corpo Falante: Sobre o Inconsciente no Século XXI.
Tradução: Ana Paula Sartori Lorenzi
“(…) O encontro do falasser com a apreensão do corpo é marcado pela
incidência do equívoco da lalíngua. Equívoco do significante, sem o qual (…)
existiria um “abismo” entre o corpo “ao natural” e o seu real, a opacidade mais
radical, o impossível de vir a se saber algo. Ao contrário, Lacan diz que as
pulsões são o eco do dizer no corpo, de um corpo que goza dos objetos a, em
torno dos quais elas fazem sua volta, silenciosas, mas não sem que, via o trabalho
de lalíngua, se sedimente um traço que não as deixe de todo sem inscrição.
Por outro lado, o alcance da referência ao traço, bem como ao sedimento
elementar que a lalíngua deixa no falasser, é um tema complexo sobre o qual
Lacan trabalhou, ressaltando a tensão que atravessa, de um lado, a fragmentação
operada pela linguagem no gozo do corpo, e de outro lado, o fundo não
negativizável do gozo no coração do real do sinthoma.
“Que se possa alcançar a marca literal do gozo, o Um que se reitera a partir do
múltiplo jogo sonoro do equívoco, do eco do dizer. É a nossa aposta no nível
da interpretação, a fim de que ela possa apontar para o real, para a apreensão do
corpo, retomando a expressão de Lacan, através da marca literal do inconsciente.
Mas não se chega aí por via “direta”, com um corpo a corpo, nem somente pela
via indireta do sentido.”
Naveau, Laure. A experiência da supervisão. In: Papers 1. Site do X
Congresso da AMP: O corpo falante: sobre o inconsciente no século
XXI.2015. Tradução: Teresinha N. M. Prado
“Da mesma forma, sublinhava ele, para que sua fala ganhe força, para que
possa ser «criacionista», é preciso que o analista em supervisão aprenda a se
calar. É preciso «que sua fala seja rara a fim de que possa portar, a fim de que
possa reter a atenção do paciente», ainda que, conforme Lacan indicou em seu
texto sobre l’esp d’un laps quando se presta atenção à sua fala, não se está mais
no inconsciente. Ora, para alcançar essa raridade da fala, é preciso, parece-me,
na sua própria análise, ter-se distanciado do sentido, do excesso de sentido que
afeta o parlêtre e suportar o real que, por conseguinte, surge dessa distância,
342
Outros autore
defesa diante do real. À repercussão do vazio, do desamparo, a partir do que
me fora comunicado, segue uma resposta do falasser, pela via de contração da
mandíbula. No entanto, para minha surpresa, essa contração não me impede
de falar, o que reconheço como um modo de assumir o vazio, o furo que habita
meu corpo.” p. 50
O CORPO FALANTE
desse hiato entre o inconsciente e o sentido, sem mais defender-se disso por
meio de nenhum afeto do corpo falante. E, contudo, demonstrar uma presença
encarnada.”
Pimenta Filho, J. A. - Do acontecimento de corpo a busca do
singular. In: Cartas de Psicanálise – Centro de Estudos e Pesquisa em
Psicanálise Nº4, vol. II, Ano 3. Ipatinga –CEPP, Vale do Aço, 2008
“(…) O corpo é, pois, a sede do gozo; há, então, um gozo do corpo, um
acontecimento de corpo.
(…) Falar com seu corpo e o que distingue o parlêtre (falasser), noção criada
por Lacan, nos anos setenta para pensar um mais além do inconsciente, ou o
inconsciente que se completaria com o corpo, mas não o corpo simbolizado, o
corpo imaginário, mas aquilo que ele tem de real. (Miller, La experiencia de lo
real en la cura psicoanalítica. Buenos Aires, Paidós, 2003: 373). Ou seja, se para o
animal e licito identificar o ser e o corpo, para a espécie humana isso não ocorre
uma vez que, quanto ao humano, ha o estatuto do corpo falante. Aqui torna-se
interessante uma breve discussão que assinale em que essa noção se distinguiria
do que foi situado como o silencio dos órgãos na tradição da epistemologia.
René Leriche, professor de Medicina e cirurgião no inicio do século XX na
França , propunha “a saúde e a vida no silencio dos órgãos” (Apud Canguilhem
- O normal e o patológico, 1982; 67). Ou inversamente: “a doença é aquilo que
perturba os homens no exercício de sua vida e em suas ocupações e, sobretudo,
aquilo que os faz sofrer”. Georges Canguilhem, outro autor e epistemólogo
francês, retomou essa proposta de Leriche assinalando: “(…) o estado de saúde
para o individuo é a consciência do seu próprio corpo. Inversamente, tem-se
consciência do corpo pela sensação de seus limites, das ameaças, dos obstáculos
à saúde” (Canguilhem, 1982; 67). “E se a saúde é a vida no silêncio dos órgãos,
não há propriamente ciência da saúde”. (Dai) “se saúde é a inocência perdida,
como toda inocência, deve ser perdida para que o conhecimento seja possível.”
p. 165
Reymundo, Oscar. De corpos. In: Correio Nº77, Revista da Escola
Brasileira de Psicanálise O corpo falante. Analisar o parlêtre, São
Paulo, 2015
“(…) Com o ultimíssimo ensino de Lacan, a orientação do Outro que não existe
implica, já faz algum tempo, no desafio de nos posicionarmos perante o falasser
e suas posições sexuadas à luz do saber fazer, um por um, com cada modo de
amarração, de costura, de sutura que, ao fim de contas e nos dizer de Lacan, é
disso que se trata em uma análise.” p. 52
343
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) Ah!, o falasser tem um corpo: sabe que tem um corpo, por isso o
manipula, o transforma, o define, pensando-o como eterno. Que saber é este
que utiliza uma escopia infinita? É um saber que deriva da palavra, do banho da
linguagem que preexiste ao próprio sujeito, mas também um saber encontrado
na ciência, que trata o real do organismo investigando seus mecanismos,
as partes infinitesimais das quais é composto, as doenças que o afligem.
Certamente, no nosso século, o corpo, o seu uso testemunha não a falta a ser,
marca do sujeito do inconsciente, decifrável nas suas significações através do
dizer analisante, mas a consistência da substância gozante de que é feito desde
o início, e, em seguida, engajado na palavra, do gozo residual e sintomático de
lalíngua.
(…) Do sujeito ao falasser do último ensino de Lacan, se desdobra o percurso
da psicanálise freudiana à psicanálise lacaniana, a isso que constitui a orientação
lacaniana. Do significante ainda freudiano ao nó totalmente lacaniano, o
corpo não está mais somente sob a apreensão necessária da imagem ilusória e
mistificante do espelho, mas participa do gozo, tornando-se sua sede. No nó
particular de cada falasser, o corpo participa, freudianamente, da inibição, do
sintoma e da angústia, e, lacanianamente, do imaginário, do simbólico e do
real. O corpo vivo é real, o corpo cadáver é simbólico e o corpo como forma é
imaginário.
(…) O falasser adora o corpo, faz dele objeto de um gozo imaginarizado e não
quer saber do fato de que este, ao contrário, na sua substância gozante escapa,
se esvanece, não está de todo preso na linguagem, mas está também em outro
lugar, num para além, que o despedaça e o torna evanescente. Somente a pulsão,
na sua relação com a inexistência da relação sexual, o vivifica distanciando-o
do cadáver, o faz carne significantizada, através da perda pulsional por obra do
significante, das palavras que fazem o corpo do inconsciente.”
344
Outros autore
Tassinari, Alide. O que acontece com o corpo na psicanálise hoje?
In: Papers 2. Site do X Congresso da AMP: O corpo falante: sobre
o inconsciente no século XXI. 2015. Tradução: Ana Paula Sartori
Lorenzi
O CORPO FALANTE
IV /b. Sinthoma
Alvarenga, Elisa - O passe na prática. In: http://wapol.org/ornicar/
articles/208alv.htm, 2008
“(…) Falta falar dos efeitos da nomeação, que me parecem diferentes dos efeitos
do passe tal como relatei até agora. É mais difícil falar desses efeitos, uma vez
que estou ainda em vias de experimentá-los. Posso dizer que a nomeação, após
um primeiro efeito de alegria e entusiasmo, não deixou de produzir em mim
angústia, diante da tarefa de transmitir, à Escola, uma experiência que possa
acrescentar algo ao saber da psicanálise. O trabalho de elaboração não tem
sido, tampouco, isento de sintomas ou inibições. Tento pensar isso com o nó
borromeano que, na sua forma original, pode se tensionar no recobrimento
do real pelo simbólico, e temos o sintoma, no recobrimento do simbólico pelo
imaginário, e temos a inibição, ou no recobrimento do imaginário pelo real,
e temos angústia. O trabalho de transmissão sofre com estes efeitos, mas o
trabalho do analista parece estar num outro registro. O que assegura a amarração
deste nó é o analista como sinthoma, resíduo da análise: o analista como a,
resíduo do saber e causa de desejo. Há um resíduo da análise, um sem remédio,
que funciona, por um lado, como causa de elaboração, e por outro, como
certeza, retirada da análise, de querer estar num certo lugar, conduzindo outros
em uma análise.”
Beneti, Antônio - Tatuagem e laço social. In: Opção Lacaniana online
nova série Nº7, Ano 3, 2012
“(…) Na clínica nomeada por Lacan com a clínica do sinthoma, a suplência
sintomática subjetiva, reparação dos defeitos do nó borromeano, aparece como
um significante articulado ao objeto pequeno a: S1, a. De tal maneira que o
sujeito constrói um nome capaz de levá-lo à inscrição no campo do Outro. É
pela via do nó borromeano que o sujeito se inscreve no campo do Outro. (…)
Zlotnik, Manoel. Por em dia a imagem com relação ao sinthoma.
In: de Papers 2, site do X Congresso da AMP, O corpo falante : o
inconsciente no século XXI. 2015
Como poderíamos abordar a tatuagem articulada com o laço social? Diante
do exposto, isto se daria no discurso ou no nó borromeano? Para se falar de
tatuagem no discurso, podemos tomá-la a partir de duas letrinhas: o S1, o traço
identificatório, e o a como objeto. Não creio que possamos pensá-la a partir do
S2, pois teríamos que nos indagar se há um saber na tatuagem. Tampouco creio
que ela possa ser indicada a partir do $, já que o sujeito dividido é representado
para outro significante.
“(…) trata-se do narcisismo secundário. Podemos nos perguntar por que J.
Lacan diz que esse narcisismo é radical, podemos pensá-lo radical para o manejo
que o falasser possa fazer de sua imagem.” p. 98
A questão que me fez entrar nesse tema foi: como abordar a tatuagem em
relação ao nó borromeano, ou seja, como uma tatuagem poderia constituir-se
em uma solução sinthomática? Quando o sujeito se tatua com uma imagem, esta
345
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Bentes, Lenita. As Patologias do Ato. Vermelho Marinho Editor, Rio
de Janeiro, 2014
“(…) Se o esforço de Lacan foi de passar ao plano ôntico, situar o gozo neste
ponto é toma-lo pela via de uma positividade absoluta, que não é da mesma
ordem do positivo do mais-de-gozar. O gozo positivo do sinthoma abre-se
para um mais além da articulação significante, isto é para um regime de gozo
ao nível do ôntico, da coisa que é. Essa nova aliança com o gozo que podemos
depreender nos testemunhos de Passe-indica haver no falasser um impossível de
negativizar. A função da fala não é mais ligada apenas a estrutura da linguagem,
mas a substancia de gozo. As palavras afetam o corpo, de um corpo se goza. Isso
é o falasser.” p. 68
Bogochvol, Ariel. A manutenção do trabalho analítico: o que impede
uma análise de progredir? In: Psicanálise: a clínica do Real / Jorge
Forbes [editor]; Claudia Riolfi [organizadora], Barueri, SP: Manole,
2014
“(…) Lacan não cessou de inventar termos que permitiam juntar o simbólico e o
Real; falo como significante do gozo, fantasma como articulador entre o sujeito
vazio e seu mais gozar, o sinthoma como uma condensação, uma conjunção
do significante e do gozo. O sentido de seu último ensino, na medida em que
privilegia o Real, inverte toda perspectiva. Os fatos da clínica apontam algo
que é de outra ordem que o magnífico descobrimento freudiano em todo seu
esplendor. Evidenciam o Real enquanto antinômico ao desejo do analista. A
partir da nova perspectiva, percebe-se que se trata de circunscrever o gozo como
princípio real da resistência (MILLER, 2011, p. 109).” p. 229-230
Brodsky, Graciela. A loucura nossa de cada dia. In: Opção Lacaniana
online nova série Nº12, Ano 4, 2013.Tradução: Nelly Brito, Cristina
Bion, Mingnon Lins, Heloisa Shinabukuro. Revisão: Elisa Monteiro
“(…) Dado que o rechaço do gozo se produz em todos os casos, a questão é: o
que domestica o gozo? Por isso a função do pai é a função do sinthoma, axioma
do último ensino de Lacan, no qual o que importa não é tanto o Nome-do-Pai,
mas o que domestica o gozo.”
346
Outros autore
imagem escrita no real do corpo poderia produzir um efeito de estabilização, de
inscrição no campo do Outro? É uma interrogação: como ela poderia aparecer
com uma função de reparação dos defeitos do nó? Será que o sujeito psicótico,
por exemplo, ao escrever uma letra no real do corpo, poderia, a partir disso, se
estabilizar? p. 12-13
O CORPO FALANTE
Campos, Sérgio de. – Passema: testemunhos de um final de análise.
Belo Horizonte, Scriptum: 2014
“(…) Leonardo Gorostiza propôs uma tradução da fórmula de Miller: “Medir
o verdadeiro com o real” para “Medir o verdadeiro com a vara do real”. Creio
que essa vara é o próprio analista como inconsciente real, resultado de seu fim
de análise. Contudo, não se trata de uma vara reta, mas de uma vara torta. Torto
é o nome do sinthoma, pois é aquilo que não se retifica no fim do percurso
de uma análise, tampouco em nenhuma marcenaria. Portanto, testemunhar
a tortuosidade do sinthoma faz um que o elemento transmissível no passe seja
menos da ordem de um êxito e mais de um fracasso. Trata-se de um gozo que o
parlêtre não conseguiu modificar, tampouco ultrapassar no crepúsculo da análise.
O retorcido do sinthoma faz com que cada analista seja exclusivo e único, de
sorte que ele jamais se inclui num conjunto de semelhantes. Portanto, se todas
as árvores são tortas numa mata de cerrado, será preciso examinar de perto e
à luz do dia a tortuosidade de cada galho para sabermos distingui-las. Numa
análise, ao girar o sintoma em sinthoma, usa-se a força do adversário em favor
do próprio sujeito. Eis o judô de Lacan.” p. 77
Garcia, Célio – Do Sintoma ao Sinthoma, in: http://webcache.
googleusercontent.com/search?q=cache:wl4Fof47NBQJ:www.
escolaletrafreudiana.com.br/UserFiles/110/File/artigos/letra1718/003.
pdf+&cd=1&hl=pt-BR&ct=clnk&gl=br
“(…) De início, Lacan havia isolado a dimensão do gozo em termos de
fantasma; assim ele pôde opor sintoma à fantasma a partir de traços distintivos.
Como fazer com os pacientes que persistem em seus sintomas? Lacan responde
a esse desafio com a noção de sinthomeé formação significante carregada
de gozo, nossa única substância, único suporte do ser, único ponto a dar
consistência ao sujeito graças a que evitamos a loucura. Referido sinthome não
cabe interpretá-lo tal como estávamos acostumados a fazê-lo quando se tratava
do que chamávamos sintoma; este sinthoma não será atravessado como nos
propúnhamos fazer em se tratando do fantasma.
Que fazer? Identificar-se a ele, foi a resposta boutade de Lacan.”
Gonçalves, Nora. A escola Una e a sustentação da diferença. In:
Correio Nº67. Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2010
“(…) Tornar-se analista, autorizar-se de si mesmo supõe que o analista
se torne analisante de sua própria análise e que ele se analise sempre –
independentemente do fato de ele ir ou no de novo ao analista – do ponto
sinthomático ao qual chegou, aquele ponto mais próximo do real, irredutível, o
347
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Gorostiza, Leonardo – A brecha do sintoma. In: Curinga Nº28, Belo
Horizonte: Escola Brasileira de Psicanálise – Seção Minas, 2009
“(…) É nesse ponto, como no caso de James Joyce, que o sinthoma se situa
como o que se inventa no lugar do inconsciente (como discurso).
O sinthoma é, portanto, uma invenção face do encontro contingente do
inconsciente real, entendido como o buraco traumático da não relação sexual,
sobre o qual poderá logo estabelecer-se, pela repetição da letra do sintoma – o
que não cessa de se repetir do sintoma -, a articulação do inconsciente como
discurso, quer dizer, como laço social que, em si mesmo, é um tratamento do
inconsciente real.
O sinthoma como tal, todavia, é fechado sobre si mesmo e, portanto, não
faz laço social. Trata-se do gozo opaco que exclui o sentido e que deve ser
diferenciado do mais-gozar.” p. 19-20
Gorostiza, Leonardo. Os confins da caridade freudiana. In: Opção
Lacaniana Nº61. Edições Eólia, São Paulo, 2011
“(…) Seria fazer do gozo opaco do sinthoma não a “última palavra” da
experiência analítica, mas sim um ponto fixo de orientação, feito a partir
daquilo que a palavra, o semblante, jamais poderá nomear, mas poderá indicar.
E, ao fazê-lo – já que na clínica do sinthoma podemos afirmar que não há, no
sentido estrito, “a última palavra”, portanto se prossegue permanentemente a
conversação com o real – uma palavra pode se tornar a palavra do fim (la fin
mot), que não é o mesmo que a última palavra. A palavra do fim é a que tem a
função de indicar o absoluto do gozo singularíssimo fora de sentido, e que é o
que Lacan em Mais Ainda chama de S1, o significante do gozo. Trata-se daquele
semblante que designa – retomando a fórmula de Lacan no Seminário 11 – a
“diferença absoluta”. “Absoluta” se entende como a diferença de um significante
que já não é relativo a outro significante e que, portanto, não cumpre a função
de representação, e sim a de indicar o gozo singularíssimo onde se situa esse resto
incurável chamado sinthoma.” p. 77
Grostein, Sandra. Nasce a ciência desaprece o pensamento, nascem as
neurociências desparece o sujeito. In: Correio Nº69. Escola Brasileira
de Psicanálise, São Paulo, 2011
348
Outros autore
osso. Como denominou Jacques-Alain Miller, ponto que vai lhe dar um savoirfaire, ponto de sustentação na condução do tratamento de outros que lhe vem
demandar análise. É a pragmática do objeto a, seus usos como mais-de-gozar,
instrumento para o analista.” p. 72
O CORPO FALANTE
“(…) Se a perspectiva das neurociências faz desaparecer o sujeito, a psicanálise
então propõe, com Lacan, o sinthoma como aparelhagem de gozo, numa
certa medida prescindido do sujeito por se servir do sujeito do inconsciente
estruturado como uma linguagem.” p. 41
Guimarães, Leda. Gozos da mulher. Editora KBR, Petrópolis, 2014
“(…) Lacan define o sinthoma como o modo singular de gozo de cada um,
quer dizer, esse gozo do corpo, do qual estive falando até o momento como um
gozo sem lei que reside no silêncio, é um gozo essencialmente singular, privado,
não transmissível nem compartilhado. Trata-se, portanto, de um gozo autista,
experimentado no silêncio do corpo, que corresponde ao modo singular de gozo
de cada um.” p. 127
Harari, Angelina. O que há de feminino na mulher. In:
Opção Lacaniana Nº65 Revista Brasileira Internacional de
Psicanálise. Ediçòes Eolia, São Paulo, 2013
“(…) Se considerarmos que a transferência é o amor à língua, no final de análise
uma língua proibida, foracluída, retornou de forma erótica no real da solução
sintomática. Em uma leitura clássica, temos aí a interdição que se transforma em
permissão. Mas, como o núcleo do sinthoma é real, falamos de foraclusão e seu
retorno no real.” p. 47-48
“(…) Na lalíngua, a alteridade que a define não é mais a diferença, mas o
mesmo. A alteridade que se cava na própria solitude do falasser/parlêtre, no exato
ponto em que se é estrangeiro para si mesmo, lugar de um exílio do qual não se
pode desfazer-se.” p. 49
Jimenez, Stella. No cinema com Lacan. O que os filmes nos ensinam
sobre os conceitos e a topologia lacaniana. Ponteio, Rio de Janeiro,
2014
“(…) - que o sinthoma é um equivalente do Nome-do-Pai, já que, a partir
do Seminário 23, o Nome-do-Pai passa a ser degradado à indignidade de um
sinthoma;
– que, à diferença da psicose, na neurose o Nome-do-Pai e/ou sinthoma está
presente, senão desde o início, pelo menos a partir da resolução do Édipo ou, no
mais tardar, a partir do início da puberdade;
– que o sinthoma tem íntima relação com a fantasia fundamental, ou seja, com
a maneira singular e pulsional de cada um fazer existir a relação sexual. Isso é: ele
349
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
– que o sinthoma está presente nos sintomas dos neuróticos, mas de maneira
pouco clara, tal como a fantasia fundamental e que umas das tarefas de uma
análise seria a de que o sujeito pudesse articulá-lo.” p. 220-221
Ottoni Brisset, Fernanda. Dessa vida que vai além da vida dos corpos.
In: http://www.encontrocampofreudiano.org.br/2014/05/dessa-vida.html
“(…) Esse esforço de grampear a substância gozante à imaterialidade
significante, deixa um resto, desobediente e sem lei… (A “vida loka”, que
dizem os jovens que sabem e testemunham, no despertar da adolescência, a
força viva que vai além da vida dos corpos) e que, de forma contingente, pode
se manifestar. A vida que conta é a vida que passa em corpos esburacados, em
corpos traumatizados. Há Um que passa por aí, e a psicanálise trabalha para
produzir sintomas, amarrações lá onde isso insiste em passar livremente. Os
analistas testemunham que isso pode passar pelo sinthoma, que cada um pode
encontrar uma forma, não-toda, de dizer e saber fazer com o impossível de dizer.
Talvez hoje não passe mais amarrado à exceção da norma fálica ou paterna, mas
alojado ao que decanta como único, modo de gozo de cada um.”
Pimenta Filho, J. A. - Do acontecimento de corpo a busca do
singular. In: Cartas de Psicanálise – Centro de Estudos e Pesquisa em
Psicanálise Nº4, vol. II, Ano 3 –CEPP, Vale do Aço, Ipatinga, 2008
“(…) o corpo para o humano não depende do ser, senão do ter, como Lacan tão
bem e surpreendentemente acentuou ao enunciar, no Seminário “O sinthoma”,
que o homem tem um corpo, não é um corpo (Lacan, J. - O Seminário, livro
23. O sinthoma. Rio de Janeiro, JZE, 2007:64). Com essa noção, que ressoa
com o que e tomado pelo discurso do Direito na formula latina do habeas
corpus, como nos indica Miller, Lacan propõe que para o homem a questão
do ser se coloca do lado do saber enquanto que o corpo esta do lado do ter.
Se a posição do homem é da ordem do ser, mesmo quando esteja formulada
como falta-a-ser, isso pode ser explicado de maneira mais simples: a partir do
momento em que o sujeito é sujeito do significante, ele não pode identificarse com seu corpo e dali procede a sua afecção pela imagem corporal. Assim,
a enorme afetação narcisista da espécie (humana) procede precisamente dessa
falta de identificação subjetiva com o corpo, continua Lacan na sua discussão do
Seminário sobre ”O Sinthoma”, fato que, nos lembra Miller (La experiencia de lo
real en la cura psicoanalítica. Buenos Aires, Paidós, 2003:380), fica evidenciado
sobretudo na histeria. Postula-se, portanto, que não há uma conaturalidade do
350
Outros autore
teria íntima relação tanto com o Édipo quanto com o além do Édipo, por sua
relação com a fantasia fundamental;
O CORPO FALANTE
homem com o mundo, critica de Lacan a Merleau-Ponty na medida em que
ele pressupunha uma identificação do ser com o corpo cujo resultado seria o
apagamento do sujeito. A ideia de descrever o comportamento em termos de
estimulo/resposta, deixando de lado toda a introspecção, descansa em uma
equivalência entre o ser e o corpo. A psicanálise se propõe a discutir a falha
dessa identificação sublinhando que a relação que o sujeito possui com o corpo
e a de ter. (Miller, 2003: 372). O que e proposto pela orientação lacaniana
sobre esse tema do corpo e seus acontecimentos surgiu, originalmente, a partir
daquilo que Lacan nomeou “substância gozante”: “(…) gozar de um corpo,
de um corpo que o Outro simboliza e que, comporta talvez algo de natureza a
fazer por em função uma outra forma de substância, a substância gozante. Não
é lá que se supõe propriamente a experiência psicanalítica? - a substância do
corpo com a condição de que ela se defina apenas como aquilo de que se goza.
Propriedade do corpo vivo, sem duvida, mas nos não sabemos o que e estar vivo,
senão apenas isto, que um corpo, isso se goza. (…) Gozar tem esta propriedade
fundamental de ser em suma o corpo de um que goza de uma parte do corpo do
Outro. Mas esta parte também goza - aquilo agrada ao Outro mais ou menos,
mas e fato que ele não pode ficar indiferente. (Lacan J., O Seminário, livro 20 Mais, Ainda. Rio de Janeiro, JZE, 1985: 35).” p. 165-166
Lutterbach Holck, Ana Lúcia, Patu, a mulher abismada. Subversos,
Rio de Janeiro, 2008
“(…) no sonho, não há história, nem linha, nem centro, o corpo de mulher sem
consistência desliza para dentro, pára de fazer fita e vira fita, sem direito nem
avesso”. Quem está dentro e fora não é o eu, não se trata de angústia ou gozo
mortífero, mas de uma satisfação no corpo.
Essa satisfação é encontrada a cada vez que escrevo um lugar no mundo, que
faço de algo externo um objeto que desliza para algum lugar dentro e volta,
um sinthoma que possibilita inscrever, a cada vez, isso que está fora. Não virei
escritora, meu ofício é a psicanálise, uma outra modalidade de tratar o real. O
que introduz o psicanalista na dimensão da escrita é a leitura do que se escuta e a
descoberta do que se escreve ali a cada vez.” p. 115
Mandil, Ram Avraham – Psicanálise de “uma nota só”, in: Opção
Lacaniana Nº68 e Nº69, Revista Brasileira Internacional de
Psicanálise. Eólia, São Paulo, 2014
“(…) Nesse sentido, o que chamamos de travessia da fantasia pode ser
interpretado como a perspectiva que se abre, numa análise, ao se abordar o
trauma por outra via que não a fantasmática, e de poder destacar aí a função do
351
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Maron, Glória. Limites e possibilidades. In: Correio Nº69. Escola
Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2011
“(…) Do ponto de vista do sinthoma, a regulação do sujeito ao gozo se dá por
vias que não se inscrevem no Outro. O analista é convocado a verificar o recurso
que vai operar como limite para cada sujeito, quais as ferramentas que utilizará
e, em última instância, qual a solução sinthomática que em cada caso terá o
efeito regulador sobre seu gozo, enlaçando real, simbólico e imaginário.”
p. 48-49
Motta, Manoel. Poesia e clínica psicanalítica Casa das Rosas. In:
Correio Nº75. Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2014
“(…) No entanto, Mallarmé, para a psicanálise lacaniana, como demonstra
Attié, liga-se a uma vertente mais alta, que Lacan investigou em Joyce, outro
eminente mallarmeano, com seu Finnegans Wake: a vertente do sinthoma, onde
o sujeito e, mais exatamente, o falasser, se ancora na obra que cria.” p. 21
Murta, Alberto. O passe, o rateio e um psicanalista. In: Opção
lacaniana online nova série Nº5, Ano 2, 2011
“(…) Interrogar o final de análise a partir de uma satisfação que convém, é
apreender que a operação analítica é uma operação de redução que deixa restos.
É afirmar que a experiência analítica visa reduzir o sintoma à sua parte mais
íntima e mais estrangeira, a saber, seu modo de gozo. A redução operada implica
em chegar ao núcleo do sinthoma enquanto gozo opaco. Pode-se sublinhar
que no último ensino de Lacan, ocorre uma inadequação entre o sentido e o
real. Isto quer dizer que há uma distância entre o que se reduz como pouco de
sentido e o que fica como inexprimível.”
Paes Barreto, Francisco. Semblante e laço social. In: Curinga Nº28 –
Escola Brasileira de Psicanálise – Seção Minas, 2009
“(…) A criação de uma língua comum, de um discurso, é o fundamento do laço
social. Este pertence à ordem universal, do semblante. O sinthoma, que é da
ordem do singular, faz objeção ao laço social, e o discurso analítico se constitui
no único laço social que trata o outro como sujeito. Ele produz um laço social a
partir do irredutível do sinthoma.” p. 32
352
Outros autore
sinthoma como uma forma de aparelhar o corpo, com as marcas e inscrições
dos seus modos de gozo, por uma vertente depurada da inflação imaginária
ou requerendo um outro imaginário que não aquele comprometido com a
proliferação de sentidos.” p. 49
O CORPO FALANTE
Rennó Lima, Celso. Da forclusão generalizada e das suplências. In:
http://clinicalacaniana.blogspot.com.br/
“(…) Quando Lacan vai estruturar o nó a quatro, ele o faz complementando,
fazendo suplência a um dos três na sua função primeira que é de dar nome,
nomear. Dito de outra forma, dar um nome, nomear, é onde reside a suplência,
isso que vai responder a S (A/), à falha do Outro.
É por isso que Lacan vai poder propor as “três formas do Nome-do-Pai”, aqueles
que nomeiam o Imaginário, o Simbólico e o Real. Como se constata, “não é
necessário que o simbólico tenha o privilégio dos Nomes-do-Pai, não é obrigado
que a nomeação seja conjunta ao buraco do simbólico” (Lacan, RSI).
Assim Lacan acrescenta à nomeação do simbólico como sintoma, as nomeações
do Imaginário como inibição e a nomeação do Real como angústia.
Pode-se, então, depreender que Lacan vai valorizar o sinthoma como quarto
nó, como suplência à função do pai, como um dos Nomes-do-Pai necessários a
disfarçar a falha estrutural do Outro, e realizar o enlaçamento do R, S e I.”
Rumenos Guardado, Cássia M. “Foraclusão generalizada e delírio”.
In: Todo mundo delira/Maria do Carmo Dias Batista e Sérgio Laia
(Organizadores). Belo Horizonte: Scriptum Livros, 2010
“(…) o que é do sujeito, do falasser, de sua diferença enquanto tal, sua
singularidade, só aparece com o quarto laço que amarra Real, Simbólico e
Imaginário e que Lacan chama de Sinthoma. É só com o quarto laço que aparece
a diferença entre os três registros, evidenciando-se a sua descontinuidade – são
desenlaçados por princípio, não há relação a priori entre eles, tanto quanto não
há relação entre homem e mulher. (…) O que fará o enlace será o quarto laço –
o Sinthoma – marca específica do sujeito. Portanto, haverá tantos nós de quatro
quanto forem os sujeitos aí implicados, já que para Lacan não só a experiência
analítica se estrutura borromeanamente como toda a experiência humana.”
p. 140
Santiago, Ana Lydia – Do amor pelo pai ao feminino. In: Opção
Lacaniana Nº65 – Revista Brasileira Internacional de Psicanálise.
Edições Eólia, São Paulo, 2013
“(…) No início dos anos 1960, Lacan observa que aquilo diante do qual o
neurótico recua, não é a angústia de castração mas sim o que falta ao Outro.
Trata-se, pois, de transmutar essa castração em algo positivo, ou seja, em um
significante da falta, S(A/), de que o Outro se furta, para garantir ao sujeito um
destino, para lhe assegurar um universo de significação ou para lhe endossar uma
353
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Santiago, Jésus - O engodo viril. In: Opção Lacaniana Nº68 e Nº69,
Revista Brasileira Internacional de Psicanálise. Ediçòes Eólia, São
Paulo, 2014
“(…) A salvação que se fez pelo intratável da repetição, pressupõe o
esquartejamento como nome que gerou eco de um dizer no corpo que remonta
ao trauma Jesus. Não se tratava, porém, de uma questão concernente a memória,
mas da comemoração de um gozo inesquecível com se defrontou a conclusão
da análise. Efetivou-se, assim, o “há-Um” do gozo, que se extrai do impossível
do sacrifício e se decanta como resto das formas interpretáveis do sintoma.
Ao se confundir com o Um próprio do gozo intratável, esse gozo se reduz no
sinthoma, portanto, ao consentimento de que não se pôde liberar da repetição,
tampouco eliminá-la. Em decorrência do esquartejamento, configurado no
final da experiência, ao visar a causa de o sujeito estar atrapalhado em face da
repetição, extrai-se a fonte de um saber-fazer com o intratável do amor.”
p. 42-43
354
Outros autore
mirabolante ficção. Afeiçoado à significação de sua existência, o falante, que goza
do sentido, defende-se do furo constitutivo do Outro. O S(A/), é, portanto, o
significante que delimita esse furo concernente à inexistência da relação sexual.
Representa o gozo; mas, ao fazê-lo, falha, porque o gozo inapreensível tem
relação com o objeto, embora, ao mesmo tempo, se encontre em cisão com
ele, na medida em que o objeto não se deixa absorver pela cadeia significante.
Esse “significante da falta do Outro”, constitui o sinthoma, a única demarcação
possível desse gozo inapreensível.” p. 55-56
O CORPO FALANTE
na simples conjunção do Um e do corpo. Portanto, a constatação da existência
do Um acontece como consequência da constatação da inexistência do Outro,
da inexistência da relação sexual. O espaço do ultrapasse é, então, ordenado,
como demonstra Miller, por “um existe e um não existe”: o que não existe tem a
ver com o Outro e o que existe tem a ver com o sinthoma.” p. 23
Viganò, Carlo. Novos enovelamentos do simbólico. In: Correio Nº70.
Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2011
“(…) O significante, nesse paradigma do sinthoma, opera uma espécie de
enlaçamento com o imaginário, somatiza-se, para condensar gozo. A estrutura
desse laço foi escrita por Lacan em referencia ao nó borromeano, no qual
o significante não tem mais o primado de ordenador linguístico, mas pode
contribuir para orientar o real que “não tem ordem”, quanto a se gerar, junto
com o sinthoma, um verdadeiro furo.” p. 39
Veras, Marcelo. A nova ordem simbólica do século XXI, mais além do
Anti-Édipo. In: Correio Nº67. Escola Brasileira de Psicanálise, São
Paulo, 2010
“(…) Quando nos apoiamos no seminário sobre o sinthoma, percebemos que
o Nome-do-Pai, tal como é apresentado no Seminário 3, traduzia a epopeia da
crença humana de que há sentido no real. Isso implica um forçamento, digamos,
uma invenção, que procura, apagar a constatação lacaniana dos anos 70 de que
real e sentido se excluem.” p. 50
Sota Fuentes, Maria Josefina. A presença do analista como limite e
o ato sobre o abismo: a salvação pelo furo. In: Correio Nº69. Escola
Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2011
Vieira, Marcus André. ​O Corpo Falante: Sobre o Inconsciente no
Século XXI- Apresentação ao X Congresso da Associação Mundial de
Psicanalise. 2015. In: Site do X Congresso da Associação Mundial de
Psicanálise: O corpo falante: sobre o inconsciente no Século XXI
“(…) Se, ao isolar os S1s determinantes de um sujeito por meio da função
do corte, a análise permite nova costura com o real mediante a construção do
sinthoma, este não poderia ser o produto de um lapso do ato do analista que
descarta a travessia da fantasia e recua diante do salto sobre o furo, ali onde
se revela o essencial; o saber que não há no real e que, finalmente, resta como
abertura necessária à contingência.” p. 64-65
“(…) Deste ponto de vista, a moça do cartaz só tem corpo porque o sinthoma,
esta incidência inaugural da linguagem sobre o vivente, faz-se fala e que esta
fala se entrecruza com outras compondo o mosaico linguageiro que dá a seu
usuário uma miragem de unidade. É por falar, portanto, que ela pode ter um
corpo, e mais: acreditar ser um. Disto deriva o termo proposto por Lacan nestes
seminários, falasser.”
Souto, Simone. A formação do analista no século XXI. In: Correio
Nº70. Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2011
Zbrun, Mirta. A formação do analista de Freud a Lacan. Petrópolis,
1ª Edição. POD. KBR. Petrópolis. 2014
“(…) O discurso, uma vez livre da existência da relação sexual ou, melhor
dizendo, da tentativa de fazer a relação existir por meio da fantasia, desnuda-se
“(…) há uma outra perspectiva que me interessa apresentar, para poder
demonstrar a validade do fim da análise como identificação ao sinthoma, e que
355
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
IV /c. Inconsciente
Brodsky, Graciela. Dizer não. In: Opção Lacaniana online nova serie
Nº1, ano 1, 2010. http://www.opcaolacaniana.com.br/pdf/numero_1/
dizer_nao.pdf
“(…) A expressão “fazer parte” condensa muito bem o miolo do que está em
jogo entre a identificação e a segregação. O desejo de fazer parte, de inserção,
que leva o sujeito a se inscrever como significante no campo do Outro
(alienação), é necessariamente seguido pela separação, que não é separação do
Outro, mas do gozo, é a extração que se opera no corpo dessa parte de gozo com
a qual o sujeito jogará daí em diante sua partida sem querer saber nada disso
(separação). Os fenômenos de identificação e segregação adquirem então uma
dimensão diferente, menos sociológica e mais psicanalítica se forem considerados
em função das estratégias – que vão do amor ao ódio – que cada sujeito usa para
se virar com esse resto de gozo segregado do corpo e separado do Outro.”
Brousse, M. Hèléne. Morte e ressurreição da histérica. In: Correio
Nº71. Revista Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2012
“(…) Como o analista, a histérica só tem o inconsciente para consistir. É o
ponto em comum entre os dois discursos. Mas a diferença entre a histérica e
o analista “a histérica e eu”, escreve Lacan, é que o inconsciente da histérica
é sustentado pelo amor por seu pai, quando, após uma análise, o significante
mestre desvela seu laço não com o pai, mas com o modo de gozo determinado
pelo objeto.” p. 58
Cervellati, Carmen Silvia. Uma leitura sobre a Transferência no
Seminário 11. In: Carta de São Paulo, São Paulo Nº1, Ano 9, 2012
“(…) Freud formulou o inconsciente a partir de suas formações (sonhos,
atos falhos, chistes e sintoma). Nelas, ao modo do tropeço, nada se esclarece
propriamente, pois na transferência analítica, seu surgimento convoca o sujeito
a secretar sentido a partir do que emerge da hiância, da fenda aberta no instante
mesmo para no instante seguinte fechar. Por isso, a interpretação aponta ao
equívoco, demonstrando a razão do inconsciente como pura pulsação, e convoca
356
Outros autore
consiste em colocar sintoma e fantasia dentro do mesmo parêntese e obter com
isso a definição de (sinthoma = sintoma + fantasia). Sob esse novo ângulo, sob
essa nova perspectiva, a diferença entre as dimensões clínicas do sintoma e da
fantasia se desvanece.” p. 98
O CORPO FALANTE
o analisante a produzir o sentido naquilo que falta sentido. Isso nos remete
ao Prefácio à edição inglesa do Seminário 11 (1976) onde Lacan diz que é
somente quando o “espaço de um lapso já não tem mais impacto de sentido (ou
interpretação), só então temos certeza de estar no inconsciente”. As formações
brotam da fenda, da falha do inconsciente, possibilitam o sentido, mas aí não se
está mais no inconsciente. Não podemos dizer que Freud teorizou o inconsciente
desta maneira; Lacan sim lhe deu o estatuto de real.” p. 55
Dias Batista, Maria do Carmo, Simbólico derramado. In: Correio
Nº63. Escola Brasileira de Psicanálise, São Paulo, 2009
“(…) Contudo, em Leite Derramado, novo livro de Chico Buarque, o
Simbólico – este mesmo com S maiúsculo – de Freud e de Lacan, do recordar,
repetir, elaborar; e da linguagem como condição para o inconsciente, se derrama
e nos coloca diante de um desaparecimento que a escrita procura cingir: Se não
fossem meus tremores e câimbras nas mãos, eu preencheria de meu próprio punho,
com caligrafia miúda, um caderno para cada dia vivido ao lado de minha mulher.”
p. 67
Laurent, Eric. Apresentação do Seminário. Falar com seu corpoescabelo. In: Rádio Lacan (transcrição pela equipe reunida por
Didier Mathey. 2015. Site do X Congresso da AMP. O corpo falante:
Sobre o Inconsciente no Século XXI. 2015. tradução de Teresinha N.
Meirelles do Prado
“(…) A crença no corpo, no escabelo de antes da esfera, é também um
desconhecimento – e esse é um esclarecimento decisivo que Jacques-Alain Miller
nos traz em sua conferência para nos permitir decifrar essa passagem que vamos
ler. Miller a liga ao fato de que ela “se funda no ‘eu não penso’ inicial do falasser.
O que é esse ‘eu não penso? ’, se pergunta Jacques-Alain Miller: “É a negação
do inconsciente pelo qual o falasser se acredita senhor de seu ser”. (…) que
faz com que, ao se apoiar em uma recusa primária do tecido dos equívocos do
inconsciente e, apoiando-se a acreditando em seu escabelo, o falasser se esqueça
para se encontrar, para se pensar mestre de si mesmo, senhor de seu corpo.”
p. 13
“Esse esclarecimento é decisivo porque ele liga o narcisismo da crença no ídolo
corporal com a adoração do corpo como superfície de inscrição do trouma e
uma recusa do “falar sem saber”, para continuar a crer-se mestre de seu ser. (p.
13) É desse modo, e por essa crença, que se desconhece o fato de que “Falo com
o meu corpo, e isto sem saber. Digo, portanto, sempre mais do que sei” [12]. É
um ponto insuportável.” p. 14
357
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Lutterbach Holck, Ana Lúcia, Patu, a mulher abismada. Subversos,
Rio de Janeiro, 2008
“(…) Quando Lacan volta à letra freudiana, recupera seu vigor e originalidade
utilizando-se dos recursos do seu tempo para tornar de manifesto o conteúdo
latente da obra de Freud. Ele não está mais só com a história dos sonhos,
da neurologia e do mecanismo do tempo de Freud; ele tem, entre outros,
a linguística, a lógica e a literatura. Lacan demonstra aquele inapreensível
freudiano com a fórmula “não há relação”. Isto é, há um impossível na
comunicação entre os falantes e só há articulação graças a um efeito de escrita.”
p. 125
Machado, Ondina. Violência e feminização do mundo. In: A
violência: sintoma social da época. Derezensky, Ernesto; Machado,
Ondina (Orgs). Belo Horizonte, Scriptum Livros. 2013
“(…)A agressividade surge na relação com o semelhante, no jogo de
identificações e estranhamentos a ela pertinente, que, ao passar pela rede de
significantes, pode ser recalcada. Já a violência é o essencial na agressão, e Lacan
diz que, por ser o contrário da fala, não pode ser recalcada. A violência, tomando
por base essa consideração, rompe com o sentido e nos direciona ao real. A
passagem ao ato seria seu paradigma, uma força performática que prescinde
do Outro. O ato violento é um curto-circuito na fantasia, uma forma radical
de defesa contra a divisão subjetiva que, no seu extremo, exclui o inconsciente.
Desse modo, a violência seria um mergulho no real.” p. 132-133
Nicéias, Carlos Augusto. Introdução ao Narcisismo – O Amor de si.
Coleção Para ler Freud. Civilização Brasileira, Rio de Janeiro, 2013
“(…) Quando há consentimento do sujeito em falar, respondendo ao convite do
analista, produz-se um deslocamento necessário para que haja a experiência de
análise, provoca-se um abandono da queixa e o sujeito se entrega a um trabalho
inédito com as palavras. Essa tarefa de simbolização, insistamos uma vez ainda,
é o que inaugura, justamente, a transferência. Ou seja, o amor de transferência
começa a operar quando, a partir do desejo decidido de ter querido dar nome
358
Outros autore
“Ele [Lacan] considera então que a única forma admissível de falar desse
inconsciente descoberto é dizer – ele justifica o inconsciente como – é “um saber
enquanto falado, como constitutivo do UOM”. (p. 14) (…) De início o que
constitui o UOM, que é o trauma fora de sentido, que provoca um falar sem o
saber, depois o saber se deposita a partir dos equívocos do falado – falado com
“ado”, no passado.” p. 15
O CORPO FALANTE
à causa escondida que o faz sofrer, o sujeito se aplica a construir um saber que
ainda não é sabido, que é apenas suposto. Freud, pelo fato de já haver descoberto
anteriormente o inconsciente, pôde conceituar em 1912 a transferência em sua
dinâmica própria.” p. 112
Rêgo Barros, Romildo Compulsões e Obsessões: uma neurose do
futuro. Civilização Brasileira, Rio de Janeiro, 2012
“(…) se antes era a esperança de produzir um saber sobre a causa do seu
sofrimento que mobilizava alguém até a análise, agora é o próprio encontro com
o analista que tem a função de despertar o saber e fazer com que o sintoma, que
se apresenta inicialmente como pura repetição, produza o seu Outro e de alguma
forma permita a construção de um laço social possível. Nos termos de Miller, “o
que faz existir o inconsciente como saber é o amor.” p. 115
Vieira, Marcus André. O Corpo Falante: Sobre o Inconsciente no
Século XXI - Apresentação ao X Congresso da Associação Mundial
de Psicanalise. In: Site do X Congresso da AMP, O corpo falante : o
inconsciente no século XXI. 2015
“(…) Aceitar a aposta do inconsciente é assumir a seguinte premissa: o que nos
sustenta como Um não é o que o espelho nos devolve. Esta aposta nos abre a
profusão de imagens e de fragmentos que gravitam a nosso redor e é, sobretudo,
nela que encontraremos essa sustentação.”
Seynhaeve, Bernard. Verdade Mentirosa e fim de análise. In: Papers
2, Site do X Congresso da AMP, O corpo falante : o inconsciente no
século XXI. 2015
“(…) Tudo muda radicalmente quando procuramos elaborar a teoria do
inconsciente do último Lacan, uma teoria que não está elaborada a partir
da histeria e da história, mas a partir da psicose”. Há uma báscula ou uma
reviravolta histórica no ensino de Lacan, da qual se tem a indicação discreta
em «o esp de um laps» quando ele evoca o personagem Freud que impôs a ele,
jovem psiquiatra, aquela que ele batiza de Aimée na sua tese de psiquiatria. “É
a indicação de que antes de suas construções do inconsciente-história, ele havia
entrado na teoria de Freud por meio da psicose.
É então que Lacan fará esse deslocamento consistindo em minorar o
inconsciente-história, ou o inconsciente transferencial para formular sua tese
do inconsciente real a partir do inconsciente na psicose, onde precisamente não
está mais em jogo a história, a associação de dois significantes, mas a letra, o
S1 sozinho.”
359
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) O apego à verdade inconsciente pode ter o mesmo valor de véu da
castração …trata-se de amar não a verdade, mas a “função de verdade” como
aquilo que pode pôr em jogo uma significação, um sentido subjetivo. De certo
modo, seria esse o amor do analista que faz existir o inconsciente.” p. 144
“É por essa razão que o enigmático se desloca do campo do saber como
inconsciente para o campo do gozo de lalíngua, levando Lacan a se autorizar,
na conferência “Joyce, o Sinthoma” a propor que o “falasser” ou o “parlêtre”, é o
novo modo de se nomear o inconsciente.” [Lacan, 1975/2003, p. 561].”
p. 171
IV /d. Corpo falante
Antelo, Marcela. Abertura XI Congresso da EBP: Analisar o parlêtre,
como bem dizê-lo? In: Correio Nº77, Revista da Escola Brasileira de
Psicanálise, O corpo falante. Analisar o parlêtre, São Paulo, 2015
“(…) No discurso analítico, na experiência de uma análise, obedecendo às regras
fundamentais, dois corpos fazem uso da palavra, pouco a pouco demonstram as
falácias e maximizam as estranhezas. Vocês concordaram comigo que se trata de
todo um acontecimento.” p. 46
Badari, Patricia. “Desnaturalização do sexo. In: Correio Nº77,
Revista da Escola Brasileira de Psicanálise, O corpo falante. Analisar
o parlêtre, São Paulo, 2015
“(…) Quando, hoje, ouvimos na experiência analítica vários sujeitos que
vêm relatar encontros sexuais com parceiros do mesmo sexo, não podemos
apressadamente, dizer que se trata de homossexualidade ou bissexualidade.
Às vezes, podem tratar-se justamente, de sujeitos que vêm nos dizer dessa
“desnaturalização “do sexo e da irrupção de um gozo caótico, e, em um curtocircuito, tentam ordenar as experiências de gozo desse corpo vivo.” p. 54
Bassols, Miquel. Corpo da Imagem e Corpo Falante. In: Textos de
Orientação do Site do X Congresso da AMP: O corpo falante: sobre o
inconsciente no século XXI. 2015. Tradução: Maria Silvia G F Hanna.
Revisão: Oscar Reymundo e Yolanda Vilela
360
Outros autore
Zucchi, Marcia. Outro Corpo: Inconsciente, Sintoma e a Clínica do
Corpo. Rio de Janeiro, Editoração KBR, 2015
O CORPO FALANTE
“(…) O que torna humano um corpo é que ele seja, com efeito, um
corpo falante. O termo “falante” não funciona aqui como um adjetivo
que complementaria um substantivo definido de antemão – o corpo –
acrescentando-lhe o ato de falar (…). O corpo falante é um mistério (…). Não
se chega a ter um corpo falante por um processo evolutivo senão através de uma
experiência na qual está implicado o gozo, a satisfação da pulsão.”
“(…) De fato, há que se chegar às consequências clinicas e logicas desse ponto
para que se apreenda a estranheza do real com o corpo falante, esse mistério que
Lacan igualou ao mistério do inconsciente.”
Bassols Miquel. Entrevista com Miquel Bassols por Heloisa Caldas.
In: Correio Nº77 Revista da Escola Brasileira de Psicanálise. O corpo
falante. Analisar o parlêtre, São Paulo, 2015
“(…) O corpo falante, o corpo da imagem, o corpo do gozo não pode ser
deduzido unicamente do Estádio do Espelho e da Gestalt formadora da unidade
imaginária do corpo. O corpo falante é um corpo que “se goza”a partir da
substância gozante que a linguagem introduz no real.”
“(…) Para que se produz essa sincronia entre o imaginário da “imagem do
corpo” e o simbólico do “corpo da imagem” é preciso que o Um da substância
gozante tome lugar no corpo.”
“Digamos, então que ao “Estádio do Espelho” deve suceder, de forma
sincrônica, um “Estádio da substancia gozante” que, todavia, devemos investigar
melhor.”
Blancard, Marie-Hélène. Uma Odisseia singular. In: Opção Lacaniana
Nº66. Edições Eolia, São Paulo, 2013
“(…) Enfim, há o que ex-siste ao significante, o Um de gozo que itera sem pé
nem cabeça. É uma invariante que se opõe à verdade variável e às significações
do ser suportadas pelo desejo. Ali só reside o sintoma como acontecimento de
corpo, reduzido ao Um sem Outro e remetendo a um acontecimento traumático
não simbolizável, que funda a existência do sujeito.” p. 59
Borsoi, Paula. Objetos fora do corpo. http://www.enapol.com/pt/
template.php?file=Las-Conversaciones-del-ENAPOL/Los-objetos-fueradel-cuerpo/Paula-Borsoi.html
“(…) Certos pacientes são tomados pela irrupção da angustia por uma
opacidade do gozo no corpo, refletindo a desorden do real que se manifesta em
experiências radicais. A busca de alivio encontra em procedimentos médicos
361
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Brousse, M. H. Os corpos Lacanianos: novidades contemporáneas
sobre o Estádio do Espelho. In: Opção Lacaniana online nova
série Nº15, Ano 5, 2014. http://www.opcaolacaniana.com.br/pdf/
numero_15/Corpos_lacanianos.pdf
“(…) O laço entre a imagem e o organismo tem a ver, então, com as
experiências de gozo. As experiências de gozo articulam, “grampeiam”, unem.
Os pontos que grampeiam têm a ver com as experiências de gozo – isto é muito
freudiano. À boca, anus, falo, Lacan vai acrescentar os ouvidos e os olhos, todas
as zonas que permitem grampear a imagem com o organismo (o que Freud já
enfatizara e que Lacan vai retomar), chamando este grampo de objeto pequeno
a”.
Caldas, Heloisa. O amor nosso de cada dia. In: Opção lacaniana
online 5. http://www.opcaolacaniana.com.br/antigos/pdf/artigos/
HECOamor.pdf
“(…) Se pensarmos, com Lacan, que todo encontro é lido segundo a lógica
instaurada pelo encontro primordial com lalíngua, encontrar a felicidade
dependerá da posição subjetiva diante da maldição do sexo. Temos nisso uma
chave para pensar o que um sujeito pode ou não fazer com a repetição e o
retorno do real: ele pode encontrar o mesmo para fazer igual ou diferente; viver
o mesmo de novo ou viver o novo uma vez mais; subjetivar o imprevisto com as
mesmas leis ou inventar variações novas para elas.”
Carrijo da Cunha, Luiz F. O real da psicanálise é a inscrição de uma
desordem. In: Opção Lacaniana. Nº66. Edições Eolia, São Paulo,
2013
“(…) Um real é constituído pelo “choque inicial do corpo com a língua” vivido
como uma desordem, aonde a defesa vem se alojar. Tal desordem diz respeito
ao gozo que se instaura marcando o corpo do humano. É a este real que Lacan
aponta como o alvo a ser atingido, de modo singular e que a experiência do
passe, fora da perspectiva científica pode transmitir.” p. 36
Coccoz, Vilma. O ser falante se dá ares. In: Papers 1. Site do X
Congresso da Associação Mundical de Psicanálise. O corpo Falante:
Sobre o Inconsciente no Século XXI. Tradução: Paola Salinas
362
Outros autore
ações no corpo para tentar silenciar a pulsão. (…) tomamos aquí o uso de
medicamentos como objetos-fora-do-corpo, que afetam o corpo e modificam o
simbólico.”
O CORPO FALANTE
“(…) imaginariamente ser e corpo são identificados. Mas, à diferença do
rato, que vale pela unidade de seu corpo de espécie roedora, o corpo falante,
acometido da falta a ser que a linguagem impõe, faz-se presente como sintoma,
como um acontecimento do corpo. O corpo “a gente tem ares de, a gente areja a
partir do a gente o tem.
(…) A dupla vida do ser falante depende do ar. Porque do ar depende a função
da fonação, verdadeira essência do Phi, nos diz Lacan. Função que opera a
substituição do macho na vida natural, pelo que se chama “homem” na dupla
vida. Nesta, a fonética se torna faunística, segundo o equívoco lacaniano
(fonétique, faunetique), quando os nomes, fatos de fonemas que se enchem de
sentido.”
Cottet, Serge. As referências freudianas sobre o corpo. Textos de
Orientação do Site do X Congresso da AMP : O corpo falante: o
inconsciente no Século XXI. 2015. Tradução: Cristina Drumond;
Revisão: Teresinha N.M. Prado
“(…) É útil lembrar nesta ocasião que Freud não encontra outro suporte para a
imagem do eu além do corpo. Freud não fala do corpo senão em relação ao eu, a
título de ser sua base material; é um corpo representado, um corpo imaginário.
Ele é definido como a projeção de uma superfície, portanto como uma abstração
que o reduz a duas dimensões, não um dentro, um interior, mas, sobretudo, um
fora (« O eu e o isso », capítulo II, in ESB XIX, RJ, Imago, 1976); a imagem
narcísica da bela unidade mascara um despedaçamento que a pulsão faz o corpo
sofrer; a pulsão despedaça o gozo do corpo no aspecto de que a fonte pulsional
está na superfície, ou seja, nos buracos do corpo. A noção de borda pulsional
retomada por Lacan implica, com efeito, uma topologia da superfície. Esta
superfície anatomicamente furada localiza as pulsões orais, anais, escópicas,
genitais. Ocorre a Freud, então, reduzir o eu ao corpo próprio, (Ichkörper)
ao ponto em que o sujeito dividido pelo inconsciente sinta seus efeitos em
um despedaçamento corporal tal como na histeria. O fato de que Lacan diga
«despedaçamento funcional» (in Escritos, p. 220-21) a respeito disso, designa o
impacto do significante sobre o corpo. O problema é saber como se articula a
linguagem sobre essa superfície, quer ela seja furada ou unificada pela imagem.”
p. 30
“(…) Outra pista: Lacan será sensível à elaboração filosófica de MerleauPonty que buscará definir « o entrelaçamento, cap. 4 » que formam o corpo
e o mundo, a extensão de meu corpo no mundo, unidade indissolúvel que
ele chama de « a carne » em O visível e o invisível, e que discute os limites
anatômicos do corpo. Um prolongamento dessa entidade corporal pode ser
363
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Freitas de Macedo, Luciola. O testemunho do trauma: entre o sujeito,
o Outro…e o objeto. In: Arquivos da Biblioteca 11 – Escola Brasileira
de Psicanálise, Rio de Janeiro, 2015
“(…) O trauma como acontecimento encontrará suas raízes naquilo que
repercute do choque de um significante com o corpo, num acontecimento de
corpo. É também ese instante, o instante desse choque, e do mais absoluto
desamparo que dele advém, que é possível localizar no recurso de Primo Levi
ao poema. Levi parecía intuir que desse encontro contingente e, às vezes,
fulminante não se poderia escrever senão seu rastro, a se alastrar pelo corpo,
como um rash cutáneo, uma infecção viral.” p. 161-162
Forbes, Jorge Indo para o Rio com os novos desafios do real. In:
Papers 2. Site do X Congresso da AMP O corpo falante: sobre o
inconsciente no século XXI, 2015
“(…) O passe que se conclui – ou não – quando o relato vem a público, como
se refere Miller – sempre no mesmo texto – se concluiria em público porque a
extimidade do corpo falante se faz e ganha sentido por intermédio do confronto
com os outros?”
Garcia Fernandez Hanna, Maria Silvia. Sinthoma e Psicose. In: Latusa
Nº10. Escola Brasileira de Psicanálise- Rio de Janeiro, 2005
“(…) Ter um corpo implica poder usá-lo como instrumento. Mais ainda, ter um
corpo depende de uma amarração dos três registros real, simbólico e imaginário.
Em outras palabras, o corpo resulta de um nó borromeano.” p. 214
Gurgel, Iordan. O imaginário é o corpo In: Correio Nº77 Revista da
Escola Brasileira de Psicanálise. O corpo falante. Analisar o parlêtre,
São Paulo, 2015
“(…) A idéia do corpo vazio e da pulsão no corpo como o eco do fato de que há
um dizer nos traz a noção de que algo repercute no corpo. Se assim acontece é
porque há um oco, tem um vazio que permite a ressonância…” p. 50
Horne, Bernardino. O que existe ao não ser. In: Papers 1. Site do X
Congresso da AMP: O corpo falante: sobre o inconsciente no século
XXI, 2015
364
Outros autore
encontrado no pintor Bacon, ao pintar cabeças como uma «carne assustadora»,
assim como a análise que Deleuze fez delas em Pintura e sensação, quer dizer o
real do corpo privado da imagem narcísica.” p. 33
O CORPO FALANTE
“(…) É no instante da encarnação que o corpo do ser humano se faz um corpo
falante, e o faz pela incorporação do significante.
Em … Ou pior, Lacan (1971-1972/2012) abre o Capítulo do Uniano e afirma
que o que está em jogo é: “O que só existe ao não ser”. Assim inaugura um
campo de puro gozo, porque o significante não é significante, deixa de ser e
somente existe. No entanto, podemos dizer que o significante que não é, há,
existe. Ele o faz na forma de gozo-corpo. Trata-se de um momento anterior
ao gozo propriamente dito de alíngua, que é o gozo do Um sozinho. O S1 da
encarnação, do acontecimento de corpo, não é significante. Materializa-se no
corpo e, assim sendo, é gozo. Ao mesmo tempo, ao existir e materializar-se
(MILLER, 1998-1999/2003), ao se tornar corpo o afeta e, desse modo, o corpo
é gozo e o corpo é significante. Esse momento, que Miller chamou encarnação,
configura o Troumatisme original.” p. 64
“(…) No troumatismo apresenta-se, no mesmo instante, a negatividade absoluta,
ou seja, a morte e a vida, o gozo, de sinal positivo. Convive a experiência do
desamparo total que no discurso aparece como ser Nada que ou cai no vazio
infinito sugado pelo redemoinho sem fim, ou o S1 consegue injetar-se na
matéria, incorporar-se. Nesse momento Significante e objeto são Um. Só depois
cada um terá seu lugar. A experiência negativa, de morte, convive no tempo com
a experiência de produção de vida, como gozo de signo (+) Positivo.” p. 64
Naparstek, Fabián. “Da Bússola ao GPS Entre os Sexos”. In: Textos
de Orientação. Site X Congresso da AMP: O corpo falante: sobre
o inconsciente no século XXI. 2015. Tradução: Mª Cristina Maia
Fernandes; Revisão: Pablo Sauce
“(…) Lacan, por sua vez, quando aborda a época atual, dá conta de que “os
objetos a se metem por todos os lados, isolados, sozinhos e sempre prontos a
surpreendê-los no primeiro encontro” [Cf.“Pequeno discurso aos psiquiatras”,
1968, inédito]. Sublinho aqui, a indicação de que ditos objetos a se encontram
isolados e sozinhos. Quer dizer, sem a ligação fixa que supõe o fantasma de cada
um.”
Seldes, Ricardo. Gozo da palavra, gozo do corpo. In: Papers 1: Site
do X Congresso da AMP: O corpo falante: sobre o inconsciente no
século XXI. 2015. Tradução: Mª Cristina Maia de O. Fernandes;
Revisão: Paola Salinas
“(…) Com Freud e com Lacan, advertimos que quando desembocamos na
indagação sobre o corpo, chegamos à noção de satisfação. O homem tem um
365
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
Temos seguido as indicações precisas de J-A. Miller no curso ‘Sutilezas
analíticas’, para situar os acontecimentos do corpo como não sendo meros
fatos de corpo. São aqueles [que] produzem momentos memoráveis, traços
inesquecíveis, um advento de gozo, fixações que não cessam de exigir o cifrado
simbólico do inconsciente. Assim como há um corpo que fala, temos um corpo
que não fala, que goza no silêncio pulsional.” p. 58
Tassinari, Alide. O que acontece com o corpo na psicanálise hoje? In:
Papers 2. Site do X Congresso da AMP: O corpo falante: sobre o
inconsciente no século XXI. Tradução: Ana Paula Sartori Lorenzi
“(…) O corpo, porque falante, tal como a vida, é um mistério. O mistério do
corpo falante contém o enigma da sexualidade humana na versão de sua não
naturalidade: armadilha na qual o neurótico é capturado, e se ressente, porque
não lhe é evidente, porque tenta fazer existir a relação sexual.”
Vieira, M. A. O corpo da fantasia e o do sinthoma (ou sujeito e
objeto, quem fala?). In: Correio Nº77. Revista da Escola Brasileira de
Psicanálise, São Paulo, 2015
“(…) O corpo falante, como outro nome para o falasser, é o corpo de lalingua.”
p. 179
IV /e. Escabelo
Alvarez, Patricio. Escabelo. In: Papers 1. Disponível
em: https://www.congressoamp2016.com/uploads/
beb5f7159c8ca475521103bcc4795cb8390c8cfa.pdf, Tradução: Paola
Salinas
“(…) Miller define o escabelo como “aquilo sobre o qual o falasser se ergue,
sobe para se fazer belo. (…) traduz de maneira imagética a sublimação freudiana,
mas em seu cruzamento com o narcisismo”. Redefine assim a sublimação, que
se forja com o gozo da palavra com sentido. O escabelo está do lado do gozo da
palavra que inclui o sentido e se opõe ao gozo que exclui o sentido, o sinthoma.
O gozo opaco do sinthoma “surge da marca escavada pela fala quando ela toma
366
Outros autore
corpo afetado pelo significante que encontra diferentes formas de satisfação,
conhecidas ou desconhecidas. O gozo é o produto do encontro contingente do
corpo com o significante, encontro que mortifica o corpo, mas ao mesmo tempo
recorta na carne o vivo que anima o mundo do psiquismo. A satisfação está
sempre em jogo, causa e busca ao mesmo tempo, na experiência da análise.
O CORPO FALANTE
a aparência do dizer e faz acontecimento de corpo”. As pegadas desta citação
podem ser localizadas no Seminário 21, onde Lacan diz “não toda palavra é um
dizer (…) Um dizer é da ordem do acontecimento”. Por isso Miller destaca
que a fala que marca é aquela que adquire a aparência do dizer e produz
acontecimento de corpo. Mas é um dizer opaco, que não faz cadeia: o dizer da
lalíngua. A marca que escava é o troumatismo, furo que o simbólico da lalíngua
produz no real.”
“Qual relação existe entre o gozo com sentido do escabelo e o gozo-sentido do
fantasma? Essa relação está no livro Los signos del goce: “o escabelo é outro nome
da montagem do fantasma, daquilo sobre o qual o homem pode subir para se
fazer valer (…) remete ao objeto a, montagem do fantasma”. Anos depois insiste,
em Sutilezas: “O sujeito está empoleirado em sua fantasia e a perspectiva é a de
fazê-lo decair dela, destituindo-o, assim, como sujeito”. Localiza-os em uma
relação íntima: há que destituí-lo do fantasma, desmontá-lo do escabelo. Por isso
Lacan fala da escabelostração, a castração do escabelo. Se o escabelo do neurótico
implica a passagem do gozo opaco ao gozo com sentido, a análise vai na direção
de castrar esse gozo. Miller diz: “fazer uma análise é trabalhar a castração do
escabelo para trazer à luz o gozo opaco do sintoma”. Entende-se mais ao ler esta
castração como a direção rumo à queda do fantasma.” p. 5-6
Bassols, Miquel. Corpo da Imagem e Corpo Falante in: Textos de
Orientação do Site do X Congresso da AMP: O corpo falante: sobre o
inconsciente no século XXI. 2015. Tradução: Maria Silvia G F Hanna.
Revisão: Oscar Raymundo e Yolanda Vilela
“(…) Teremos que nos apoiar na tensão proposta por Jacques Alain Miller na
mesma conferencia entre sinthoma e escabelo. Este último, parte da “negação
do inconsciente”, por meio da qual alguém pode se “acreditar ser seu ser” para, a
seguir tomar da cultura um escabelo, ou seja, “aquilo sobre o qual um falasser se
iça, no qual sobe para ficar belo”, para “empinar o nariz e dar uma de glorioso.”
Laurent, Eric. Apresentação do Seminário. E. Laurent. Falar com seu
corpo-escabelo. In: Rádio Lacan (transcrição pela equipe reunida por
Didier Mathey. 2015. Site do X Congresso da AMP. O Corpo falante:
sobre o inconsciente no século XXI. 2015. Tradução: Teresinha N.
Meirelles do Prado
“(…) Passemos, agora, ao escabelo e ao modo como, em sua conferência,
Jacques-Alain Miller fala desse escabelo. Ele fala com uma distância crítica, mas
ele o introduz como “isto sobre o que o falasser se ergue, sobe para se embelezar.
É seu pedestal, que lhe permite elevar-se à dignidade da coisa.” p. 8
367
X Congresso da AMP, Rio de Janeiro 2016
“Depois de introduzir o escabelo da mesma forma que o sinthoma, como
conceitos da época do falasser, Miller os separa pelo registro de gozo que lhes é
próprio. O escabelo é “o falasser sob sua face de gozo da fala. (…) “O escabelo
está do lado do gozo da fala que inclui o sentido. Em contrapartida, o gozo
próprio ao sinthoma exclui o sentido”. Encontramos aí uma crítica voltada para
a nova forma de sublimação que implica o escabelo. Ela implica um gozo ligado
ao sentido. Isto pelo que é preciso passar antes de alcançar o fora de sentido.”
p. 22
“Desse modo, falar com seu corpo-escabelo, é passar pelos desfiladeiros da fala
sustentada pela dimensão do sentido.” p. 22
“(…) Nem um, nem outro, nem visio, nem neuro, falar com seu corpo-escabelo
supõe um gozo particular, que se experimenta com o corpo: o gozo da fala.”
Outros autore
“(…) o esclarecimento de Jacques-Alain Miller é crucial. “O escabelo é a
sublimação, na medida em que ela se funda sobre o eu não penso primordial do
falasser.” p. 16
O CORPO FALANTE
Kruger, Flory Congresso 2016 Rio. In: Textos de Orientação do Site
do X Congresso AMP, O corpo falante : o inconsciente no século XXI.
2015
“(…) Mas, conhecer as diferenças teóricas entre cada um desses inconscientes é
suficiente para entender o que é analisar o falasser?”
“(…) Essa mudança reflete também na concepção de sujeito, agora pensado
como o individuo e seu corpo. Não é esse o modo de definir o falasser? Entendo
que é o que “concerne ao mais singular do sujeito, não ao seu estatuto subjetivo
senão a seu sintoma e a certa conjunção e disjunção entre significante e gozo.”
p. 52
p. 23
Briole, Guy. O escabelo invertido (pequeno ensaio de uma primeira
leitura em torno da música). In: Textos de Orientação do Site do X
Congresso AMP, O corpo falante : o inconsciente no século XXI.
2015
“(…) O escabelo é um achado de Lacan para indicar isso sobre o que se apoia o
falasser; seu pedestal, pelo qual ele pode se elevar, sublimar. Cada um teve que
construir o seu escabelo, aquele que o elevou ao lugar onde estaria visível para
os outros. Muito frequentemente, isso se sustenta do jeito que pode, por uma
bricolagem sempre provisória.”
“(…) Para a música, o escabelo faz parte dos usos: o Maestro se eleva para
coordenar o todo dos instrumentos no Um da obra, é preciso estar em uníssono.
O dispositivo, frequentemente mais sofisticado, se constitui de um escabelo-bis
com púlpito e batuta. Se dá a ver para convocar à escuta.” p. 44
“(…) A precisão que traz H. Castanet indica bem esta trajetória na escrita de
Lacan, do escabelo ao S. K.Belo: « A palavra S.K.Belo é reutilizada aqui no
nosso ensaio, com a sua tipografia surpreendente, para desnudar esse real ao
qual o artista se confronta e que as sublimações possíveis encobrem: no cerne
do Belo (do verdadeiro, do bom, do perfeito, do sublime…) sempre este S.K.
enigmático, fora de sentido ».” p. 45
368
369
Dunque tu, pittore,
attempra dell’una e dell’altra setta, attendi,
secondo che accade,
alle qualità di quelli che parlano
ed alla natura della cosa di che si parla.
X Congresso di la Asociacione Mundiale dei Psicanálise
25 a 28 de Abrile di 2016, Rio de Janeiro
Leonardo da Vinci, Trattato della pittura, II, 112
Biblioparlante è uno strumento di ricerca basato sulla scelta di citazioni precise che possano aiutare
a orientarsi nelle letture, da Freud fino al più contemporaneo degli autori che si occupano del corpo
parlante. Una bibliografia per esploratori, come indica Jacques-Alain Miller nella sua conferenza di
apertura.
Le equipe che si sono costituite nelle cinque lingue più parlate nel Campo Freudiano hanno preso il
significante parlessere come bussola condivisa della ricerca.
Ogni lingua ha scelto la particolare estensione dell’articolazione del parlessere con altri significanti
sorti nel corso della ricerca: Corpo, RSI, Sinthomo, Inconscio, Sgabello...
Biblioparlante
IL CORPO PARLANTE
Sull’inconscio nel XXI secolo
Le lingue si distinguono per colori e se ne può estrarre il pezzo di reale che è loro proprio.
Il formato flippingbook è stato scelto per il suo potenziale interattivo e perché è un supporto che
permette di rendere singolare il percorso di ciascuno. Ricerca per autore, per parola, invio della
selezione per email; accesso via cellulare, Ipad, sito, si può scaricare il libro parlante dappertutto.
Prima del Congresso la Biblioparlante sarà pubblicata in due tempi.
Ogni lingua si è avvalsa del lavoro di un’equipe che sarà menzionata nel colore corrispondente.
Sin d’ora ringraziamo la disponibilità dei colleghi qui nominati, provenienti da tutte le scuole
dell’AMP, a partecipare a questo viaggio.
Marcela Antelo
[Responsabile della pubblicazione]
Traduzione di Roberta Margiaria
370
371
IL CORPO PARLANTE
Edito Primo Tempo
Cura:
Maria Bolgiani (coordinatrice)
Ricerca:
Monica Buemi, Anna Castallo, Roberta La Barbera, Massimiliano Rebeggiani
Collaboratori:
Monica Buemi, Anna Castallo, Roberta La Barbera, Massimiliano Rebeggiani
Questo lavoro di ricerca bibliografica ha trovato il suo orientamento a partire dal testo di
Miller L’inconscio e il corpo parlante e dalla riflessione sul “mistero dell’unione della parola
e del corpo” e sul parlessere, termine agalmatico che viene a sostituirsi all’inconscio
freudiano nell’ultimo insegnamento di Lacan, e che Miller propone di prendere come
indice di quello che cambia nella psicoanalisi nel XXI secolo. Perché oggi ci troviamo ad
analizzare il parlessere più che non l’inconscio freudiano, “dobbiamo però saperlo dire”.
Per arrivare a saperlo dire, abbiamo cominciato reperendo le ricorrenze di “parlessere” nei
testi successivi al Seminario XX (limitando la nostra ricerca – questa era una delle regole
del gioco di questo lavoro – ai testi pubblicati in italiano).
Più complessa è stata la scelta di una modalità di lavoro per i testi e i seminari di
Lacan precedenti, e per i testi di Freud. In entrambi i casi abbiamo scelto criteri di
ricerca piuttosto restrittivi. In Lacan abbiamo selezionato in particolare le ricorrenze di
“essere parlante”, pur nella consapevolezza che sarebbe semplicistico considerare questa
espressione come una “prima versione” di “parlessere”. Tuttavia ci è parso un modo per
seguire le tracce dello sforzo di Lacan di integrare la sessualità nella psicoanalisi e dunque
dello spostamento dal campo dell’inconscio, del linguaggio, a quello del godimento.1
Per Freud, abbiamo cercato di selezionare i punti in cui, in relazione al corpo, viene
messo l’accento sulle componenti libidiche, sulla dimensione economica, sull’affetto, sul
“tornaconto”, vale a dire su ciò che eccede la dimensione simbolica. Molte altre ricorrenze
potrebbero probabilmente essere aggiunte, si tratta intanto di una traccia di lavoro.
Maria Bolgiani
1
Cfr. Jean François Cottes, Dall’Altro all’Uno e ritorno, Annali dell’Istituto Freudiano,
2010.
372
373
IL CORPO PARLANTE
Edito Secondo Tempo
Nella seconda parte del lavoro abbiamo innanzi tutto esplorato i corsi e i testi
di Jacques-Alain Miller, e poi abbiamo cercato di offrire una panoramica dei
principali riferimenti pubblicati in italiano sui temi del Congresso.
La ricerca si è estesa da parlessere a sinthomo e sgabello e ha percorso le
riviste Attualità Lacaniana e La Psicoanalisi, i volumi Scilicet, libri, riviste e
pubblicazioni on line.
È una ricerca che non può essere esaustiva e non ha la pretesa di esserlo, ma il
risultato è una bella testimonianza, ci sembra, dello sforzo, che costantemente
ci tiene impegnati, di decifrazione dei testi di Lacan, della clinica e dei sintomi
contemporanei.
Ci auguriamo che scorrere queste pagine sarà interessante come è stato per noi
costruirle, e che si sia prodotto uno strumento che ognuno potrà utilizzare per
proseguire il suo lavoro.
Maria Bolgiani
374
375
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
Contenuto
1.
Sigmund Freud
3.
378
I /a. Opere, Boringhieri, Torino
378
I /b. Altri testi
385
2.
Jacques Lacan
376
Jacques-Alain Miller
402
III /a. Corsi
402
III /b. Altri testi
409
4.
386
II /a. Scritti
386
II /b. Altri scritti
386
II /c. Seminari
390
II /d. Altri testi
398
Campo Freudiano
413
IV /a. Attualità Lacaniana
413
IV /b. La Psicoanalisi
415
IV /c. Scilicet
416
IV /d. Libri
420
IV /e. Altre riviste
425
IV /f. Pubblicazioni on line
426
377
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Sigmund Freud
I /a. Opere, Boringhieri, Torino
Ipnotismo e suggestione (1888 – 1992). Vol. 1
“Trattamento psichico indica piuttosto: trattamento a partire dall’anima,
trattamento – di disturbi psichici o somatici – con mezzi che agiscono in primo
luogo e immediatamente sulla psiche dell’uomo.
Un tale mezzo è soprattutto la parola, e le parole sono anche lo strumento
essenziale del trattamento psichico. Il profano troverà certo difficile comprendere
come disturbi patologici del corpo e della psiche possano venir eliminati
attraverso le ‘sole’ parole del medico. Egli penserà che si pretende da lui la fede
nella magia.” p. 93
“È vero che la medicina moderna aveva sufficienti motivi per studiare
l’innegabile rapporto tra corpo e psiche; ma essa non smise mai di rappresentare
la psiche come determinata dal corpo e da esso dipendente. (…)
Il rapporto tra corpo e psiche (nell’animale come nell’uomo) è un rapporto
di interazione, ma l’altro aspetto di questo rapporto, l’azione della psiche sul
corpo, trovò in passato poca clemenza agli occhi dei medici. Pareva che questi
temessero di accordare una certa autonomia alla vita psichica, come se con ciò
abbandonassero il terreno della scientificità.” p. 94
“I medici si trovarono di fronte al compito di indagare la natura e l’origine delle
manifestazioni patologiche di questi nervosi e nevrotici. Si scoprì allora che, per
lo meno in una parte di questi malati, i segni del male non provengono se non
da un mutato influsso della vita psichica sul corpo, e che dunque la causa prima
del disturbo è da ricercarsi nella psiche. Quali siano le cause più lontane del
disturbo dal quale è stata colpita la psiche e che ora influisce a sua volta in modo
perturbante sul corpo, è un’altra questione e possiamo a ragione tralasciarla
in questa sede. Ma la scienza medica aveva qui trovato l’allacciamento che le
378
Sigmund Freud
1.
IL CORPO PARLANTE
consentiva di rivolgere tutta la sua attenzione al lato sinora trascurato della
relazione reciproca tra corpo e anima.” p. 96
“I processi della volontà e dell’attenzione sono anch’essi in grado d’influenzare
profondamente i processi corporei e di avere una parte notevole, come
promotori o come inibitori, nelle malattie somatiche.” p. 98
Studi sull’isteria (1892 – 1995). Vol. 1
“Siamo però abituati a trovare nell’isteria che una parte rilevante della ‘somma di
eccitamento’ del trauma si trasforma in sintomi puramente somatici. Si tratta di
quell’aspetto dell’isteria che per tanto tempo ha ostacolato di considerarla come
un’affezione psichica. (…) per brevità, adottiamo il termine di ‘conversione’ per
la trasformazione dell’eccitamento psichico in sintomi permanenti corporei che
caratterizza l’isteria.” p. 245-246
“(…) ostacolo [alla cura] (…) quando è turbato il rapporto tra paziente e
medico (…) quando la paziente viene presa dal timore di abituarsi troppo alla
persona del medico, di perdere la propria indipendenza e persino di poterne
dipendere sessualmente. (…) il suo motivo di resistenza rimane infatti per lo
più inconscio in lei, ed essa lo esprime mediante un sintomo isterico di nuova
produzione. Il mal di testa significa l’avversione a lasciarsi influenzare.”p.
436-437
Minute teoriche per Wilhelm Fliess – Minuta B (1893). Vol. 2
“Che la nevrastenia sia una conseguenza frequente di un’anormale vita sessuale,
si può considerare cosa nota a tutti. Vorrei però sostenere e provare sulla base
delle mie osservazioni la tesi che la nevrastenia è sempre soltanto una nevrosi
sessuale.” p. 10
Minute teoriche per Wilhelm Fliess – Minuta H (1895). Vol. 2
“Isteria. La rappresentazione incompatibile non è ammessa ad associarsi con
l’Io. Il contenuto viene mantenuto escluso, assente dalla coscienza; l’affetto [è
eliminato] mediante conversione nel corporeo. Psiconevrosi il solo [risultato].”
p. 40
Minute teoriche per Wilhelm Fliess – Minuta N (1897). Vol. 2
“Cronologicamente, il primo motivo per la formazione dei sintomi è la libido.
Quindi il sintomo, come il sogno, è un appagamento di desiderio.” p. 65
Meccanismo psichico dei fenomeni isterici (1893). Vol. 2
379
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Progetto di una psicologia (1895). Vol. 2
“(…) se non ci lasciamo confondere da questo, ciò avviene in conseguenza della
premessa che la coscienza non ci dà una conoscenza né completa né attendibile
dei processi neuronici, e che questi processi debbano essere in primo luogo
considerati nel loro insieme come inconsci e spiegati alla stessa stregua di altri
fenomeni naturali.” p. 213
Etiologia dell’isteria (1896). Vol. 2
“Non dimentichiamo che le antiche esperienze degli isterici, in un frangente
attuale esplicano la loro azione come ricordi inconsci. Sembra quasi che la
difficoltà di eliminare un’impressione attuale, l’incapacità di trasformarla in un
ricordo inoffensivo, dipenda proprio dal carattere dell’inconscio psichico.”
p. 358
L’interpretazione dei sogni (1899). Vol. 3
“Anche nei sogni meglio interpretati è spesso necessario lasciare un punto
all’oscuro, perché nel corso dell’interpretazione si nota che in quel punto ha
inizio un groviglio di pensieri onirici che non si lascia sbrogliare, ma che non
ha nemmeno fornito altri contributi al contenuto del sogno. Questo è allora
l’ombelico del sogno, il punto in cui esso affonda nell’ignoto. I pensieri onirici
che s’incontrano nell’interpretazione sono anzi in generale costretti a rimanere
inconclusi e a sfociare da ogni lato nell’intricato groviglio del nostro mondo
intellettuale. Da un punto più fitto di quest’intreccio si leva poi, come il fungo
dal suo micelio, il desiderio onirico.” p. 479-480
“dal momento però in cui i pensieri rimossi sono investiti intensamente
dall’eccitamento inconscio (…) essi sottostanno al processo psichico primario e
mirano unicamente a una scarica motoria.” p. 551
“L’inconscio è lo psichico reale nel vero senso della parola, altrettanto
sconosciuto nella sua natura più intima quanto lo è la realtà del mondo esterno,
e a noi presentato dai dati della coscienza in modo altrettanto incompleto,
quanto il mondo esterno dalle indicazioni dei nostri organi di senso.” p. 557
380
Sigmund Freud
“Molti malati ricorrono a simbolizzazioni di questo genere, nel caso delle
cosiddette nevralgie e di dolori. È come se volessero esprimere la situazione
psichica attraverso una situazione somatica e le espressioni linguistiche
forniscono il ponte che permette l’effettuarsi di questa metamorfosi.” p. 95
IL CORPO PARLANTE
Frammento in un’analisi d’isteria (Caso clinico di Dora) (1901).
Vol. 4
“[Il sintomo isterico] non può insorgere senza una certa compiacenza somatica,
offerta un processo normale o patologico in un organo e su un organo del
corpo.” p. 333
Tre saggi sulla teoria sessuale (1905). Vol. 4
“Per ‘pulsione’, noi innanzitutto non possiamo intendere nient’altro che
la rappresentanza psichica di una fonte di stimolo in continuo flusso,
endosomatica, a differenza dello ‘stimolo’, il quale è prodotto da eccitamenti
isolati e provenienti dall’esterno. La pulsione è così uno dei concetti che stanno
al limite tra lo psichico e il corporeo. (…) Ciò che distingue le pulsioni l’una
dall’altra e le fornisce di qualità specifiche è la relazione che esse hanno con
le loro fonti somatiche e le loro mete. La fonte della pulsione è un processo
eccitante in un organo, e la meta prossima della pulsione risiede nell’abolizione
di questo stimolo organico.” p. 479
“Nel ciucciare o succhiare con delizia abbiamo già potuto notare le tre
caratteristiche essenziali di una manifestazione sessuale infantile. Questa sorge
appoggiandosi a una delle funzioni vitali del corpo; non conosce ancora un
oggetto sessuale, è autoerotica; e la sua meta sessuale è dominata da una zona
erogena. Anticipiamo che queste caratteristiche valgono anche per la maggior
parte delle altre attività delle pulsioni sessuali infantili.” p. 492-493
Fantasie isteriche e loro relazione con la sessualità (1908). Vol. 5
“Il sintomo isterico è il sostitutivo, prodotto mediante ‘conversione’, del ritorno
associativo di queste esperienze traumatiche. (…) Il sintomo isterico serve al
soddisfacimento sessuale e configura una parte della vita sessuale della persona
(corrispondente a una delle componenti della sua pulsione sessuale). (…) Il
sintomo isterico può assumersi la rappresentanza di diversi moti inconsci non
sessuali, ma non può non avere un significato sessuale.” p. 392-393
Analisi della fobia di un bambino di cinque anni (Caso clinico del
piccolo Hans) (1908). Vol. 5
“Una volta instaurato lo stato d’angoscia, l’angoscia assorbe tutte le altre
sensazioni; col progredire della rimozione, man mano che le rappresentazioni
cariche d’affetto che sono state coscienti retrocedono nell’inconscio, tutti gli
affetti divengono capaci di trasformarsi in angoscia.” p. 503
381
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“(…) quasi tutti i sintomi erano sorti come residui – ‘sedimenti’ si potrebbe
dire – di esperienze cariche di affetto, che perciò più tardi abbiamo chiamato
‘traumi psichici’, e la loro singolarità trovava spiegazione nel rapporto con la
scena traumatica che li aveva causati. Essi erano, per usare un termine tecnico,
determinati dalle scene di cui rappresentavano i residui mnestici, e non era più
necessario descriverli come produzioni arbitrarie o enigmatiche della nevrosi.”
p. 133
Osservazioni psicoanalitiche su un caso di paranoia (dementia
paranoides) descritto autobiograficamente (Caso clinico del
presidente Schreber) (1910). Vol. 6
“(…) l’individuo nel corso del suo sviluppo, mentre unifica le pulsioni sessuali
già agenti autoeroticamente al fine di procurarsi un oggetto d’amore, assume
anzitutto se stesso, vale a dire il proprio corpo come oggetto d’amore, prima di
passare alla scelta oggettuale di una persona estranea. Che tale fase di transizione
venga attraversata tra l’autoerotismo e la scelta oggettuale è probabilmente
inevitabile nella normalità dei casi; sembra, però, che molte persone vi si
trattengano per un tempo insolitamente lungo e che in esse persistano molti
tratti di questa fase nei momenti successivi del loro sviluppo.” p. 386
Pulsioni e loro destini. Vol. 8
“Io penso in effetti che la contrapposizione di conscio e inconscio non possa
essere applicata alla pulsione. Una pulsione non può mai diventare oggetto
della coscienza, solo l’idea che la rappresenta lo può. Ma anche nell’inconscio la
pulsione non può essere rappresentata che da un’idea.” p. 60
Il problema economico del masochismo (1924). Vol. 10
“Nei miei Tre saggi sulla teoria sessuale (…) ho affermato (…) addirittura che ‘è
possibile che nell’organismo non avvenga nulla di significativo che non abbia
da fornire la sua componente all’eccitamento della pulsione sessuale’. Secondo
questa ipotesi anche l’eccitamento dovuto al dolore e al dispiacere dovrebbe
avere la medesima conseguenza.” p. 9
“La libido ha il compito di mettere questa tensione distruttiva nell’impossibilità
di nuocere, e assolve questo compito dirottando gran parte della pulsione
distruttiva verso l’esterno (…) una parte di questa pulsione è messa al servizio
della funzione sessuale (…) Un’altra parte, invece, non viene estroflessa,
permane nell’organismo, e con l’aiuto dell’eccitamento sessuale concomitante
382
Sigmund Freud
Cinque conferenze sulla psicoanalisi (1909) – Prima conferenza.
Vol. 6
IL CORPO PARLANTE
che abbiamo menzionato sopra viene libidicamente legata. In questa parte
dobbiamo riconoscere il masochismo originario, erogeno.” p. 9-10
La perdita di realtà nella nevrosi e nella psicosi (1924). Vol. 10
“Nevrosi e psicosi sono entrambe espressioni della ribellione dell’Es contro il
mondo esterno del suo dispiacere, o, se preferite, della sua incapacità di adattarsi
alla dura realtà, all’Ananke [necessità]. Nevrosi e psicosi si differenziano in modo
assai più netto nella reazione iniziale di partenza che non in quella successiva,
che rappresenta un tentativo di riparazione.” p. 41
Inibizione, sintomo e angoscia (1925). Vol. 10
“L’analisi dimostra che quando il suonare il piano, lo scrivere, e lo stesso
camminare soggiacciono a inibizioni nevrotiche, ciò è dovuto a una sovraintensa
erotizzazione delle dita, e dei piedi e cioè degli organi impegnati in tali funzioni.
Siamo giunti in generale a ritenere che la funzione dell’Io di un organo venga
lesa quando aumenta la sua erogenità, il suo significato sessuale.” p. 239
“(…) l’angoscia non viene prodotta ex–novo nel processo di rimozione bensì
viene riprodotta quale stato affettivo in base a un’immagine mnestica già
esistente. (…) Gli stati affettivi sono incorporati nella vita psichica come
sedimenti di antichissime esperienze traumatiche, e vengono ridestati quali
simboli mnestici in situazioni simili.” p. 243
“Essendo intimamente legato all’Es, l’Io può difendersi dal pericolo pulsionale
soltanto restringendo la sua stessa organizzazione e tollerando la formazione
sintomatica quale sostituto per il pregiudizio arrecato alla pulsione.” p. 302
Il disagio della civiltà (1929). Vol. 10
“La felicità, in quell’accezione ridotta in cui è considerata possibile, è un
problema dell’economia libidica individuale. Non vi è qui un consiglio che valga
per tutti; ogni individuo deve trovare da sé la maniera particolare in cui può
essere felice (…) il successo non è mai sicuro, dipende dall’azione congiunta
di molteplici fattori e, forse, più che da ogni altra cosa dalla capacità della
costituzione psichica di adeguare la propria funzione al mondo circostante e di
usarlo per trarne piacere.” p. 575-576
“Qualche volta crediamo di avvertire che non solo la pressione della civiltà,
ma qualcosa nell’essenza della funzione [sessuale] stessa ci impedisca il pieno
soddisfacimento e ci spinga a percorrere altre strade.” p. 595
383
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“Al rimosso dobbiamo attribuire piuttosto una forte spinta ascensionale,
un’urgenza di farsi strada fino alla coscienza.” p. 181
“All’Es ci avviciniamo con paragoni: lo chiamiamo caos, un crogiuolo di
eccitamenti ribollenti. Ce lo rappresentiamo come aperto all’estremità verso il
somatico, da cui accoglie i bisogni pulsionali, i quali trovano dunque nell’Es la
loro espressione psichica, non sappiamo però in quale substrato.” p. 185
“La concezione secondo cui l’Io è quella parte dell’Es che è stata modificata
dalla vicinanza e dall’influsso del mondo esterno, non ha quasi bisogno di essere
giustificata: è questa la parte predisposta per la ricezione degli stimoli e per la
protezione dagli stessi, paragonabile allo strato corticale di cui si circonda il
grumo di materia vivente.” p. 186-187
Introduzione alla psicoanalisi (nuova serie di lezioni). Lezione 32 –
Angoscia e vita pulsionale (1932). Vol. 11
“(…) come se i sintomi venissero creati per evitare che esploda lo stato
d’angoscia. Con ciò concorda anche il fatto che le prime nevrosi dell’età infantili
sono fobie, ossia stati in cui chiaramente si riconosce come un iniziale sviluppo
d’angoscia viene sostituito dalla successiva formazione di un sintomo (…).”
p. 194
Sigmund Freud
Introduzione alla psicoanalisi (nuova serie di lezioni). Lezione 31 –
La scomposizione della personalità psichica (1932). Vol. 11
IL CORPO PARLANTE
“(…) seguendo il modo di pensare analitico, vedremo in questo comportamento
l’espressione dell’inconscio senso di colpa, ove la malattia, con le sue sofferenze
e i suoi impedimenti, è appunto desiderata. I problemi sollevati dall’inconscio
senso di colpa, le sue relazioni con la morale, con la pedagogia, con la
criminalità e con la delinquenza giovanile sono attualmente il campo di lavoro
preferito degli psicoanalisti.” p. 217
Analisi terminabile e interminabile (1937). Vol. 11
“Due volte, nel corso dello sviluppo individuale, si verificano rilevanti
rafforzamenti di determinate pulsioni: durante la pubertà e nelle donne,
durante la menopausa. Non ci meravigliamo gran che quando apprendiamo che
individui precedentemente non nevrotici lo diventano in questi periodi.”
p. 509
I /b. Altri testi
Lettere a Wilhelm Fliess [1887–1894] Boringhieri, Torino 1986
Lettera 98 “L’eccesso della sessualità impedisce la traduzione. Sennonché
il solo eccesso di sessualità non può causare la rimozione; si richiede la
cooperazione della difesa. Ma senza un eccesso di sessualità la difesa non conduce
a una nevrosi.” p. 217
“Solo la grandezza della somma di eccitamento trasforma un’impressione in
fattore traumatico, paralizza la funzione del principio di piacere e conferisce alla
situazione di pericolo il suo significato (…) Non affermeremo più che in questo
caso sia la libido stessa a essere trasformata in angoscia. Non vedo comunque
cosa ci sia da obiettare contro una duplice origine dell’angoscia: una volta
come diretta conseguenza del momento traumatico, un’altra come segnale che
minaccia il ripetersi di un simile fattore.” p. 203
“Una pulsione si differenzia dunque da uno stimolo per il fatto che trae origine
da fonti di stimolazione interne al corpo (…). La meta può essere raggiunta nel
proprio corpo; di regola però si inserisce un oggetto esterno in relazione al quale
la pulsione raggiunge la sua meta esterna; la meta interna rimane sempre la stessa
cioè il cambiamento corporeo percepito con soddisfacimento (…). Un certo
tipo di modificazione della meta e di cambiamento dell’oggetto, in cui entrano
in considerazione i nostri valori sociali, è da noi designato come ‘sublimazione’.”
p. 205
384
385
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Jacques Lacan
II /a. Scritti
Sovversione del soggetto e dialettica del desiderio
“Ecco come l’organo erettile arriva a simbolizzare il posto del godimento: non in
se stesso né come immagine, ma come parte mancante all’immagine desiderata.
Per questo esso è eguagliabile al (–1)√ della significazione prima proposta, del
godimento che restituisce grazie al coefficiente del suo enunciato alla funzione di
mancanza di significante: (–1).
Ma se gli è dato di unire in sé in tal modo la proibizione del godimento, non è
però per queste ragioni di forma, ma perché il loro oltrepassamento significa già
che riconduce ogni godimento bramato alla brevità dell’autoerotismo: infatti
le vie interamente tracciate dalla conformazione anatomica dell’essere parlante,
cioè la mano ancorché perfezionata della scimmia, non sono state disdegnate
in una certa ascesi filosofica come vie di una saggezza abusivamente qualificata
come cinica. Ai giorni nostri, taluni, certo ossessionati da questo ricordo, hanno
creduto, parlando alla nostra persona, di potere far derivare lo stesso Freud
da tale tradizione: tecnica del corpo come dice Mauss. Resta che l’esperienza
analitica ci insegna il carattere originale del senso di colpa generato dalla sua
pratica.” p. 826
Jacques Lacan
2.
IL CORPO PARLANTE
fuori degli impegni che hanno fissato, prima ancora che il soggetto sia venuto al
mondo, non solo il suo destino ma la sua stessa identità?” p. 137
Risposte ad alcuni studenti di filosofia
“La migliore antropologia non può che fare dell’uomo l’essere parlante. Io stesso
parlo di una scienza definita dal proprio oggetto.
Ora, il soggetto dell’inconscio è un essere parlato ed è l’essere dell’uomo; se la
psicoanalisi deve essere una scienza, non abbiamo in questo caso un oggetto
presentabile.” p. 210
Piccolo discorso all’ORTF
“Che Freud dimostri come gli effetti della cesoia siano preponderanti in quella
che a buon diritto chiamiamo la pratica sessuale dell’essere parlante non implica
alcuna scoperta riguardo alla biologia del sesso, e tutti coloro che hanno fatto
fare qualche passo in avanti a questo capitolo della biologia, il più difficile,
ridono degli sproloqui che la psicoanalisi, finora, accredita presso il pubblico.”
p. 224
Nota italiana
“Pensare “con i piedi” è alla portata dell’essere parlante fin dal primo vagito.”
p. 203
Della psicoanalisi nei suoi rapporti con la realtà
“Solo per questa opera di taglio il mondo si adatta all’essere parlante. In questi
tagli esso si è a lungo creduto a casa sua, finché animandosi per una congiuntura
da robot, non lo rimossero in quella parte di essi che si prolunga nella sua realtà,
la quale in effetti viene chiamata psichica per il solo fatto di essere cascame del
corpo.
Interroghiamoci sul perché l’essere parlante devitalizzi questo corpo a tal punto
che per lungo tempo gli è sembrato che il mondo fosse la sua immagine.”
p. 353
II /b. Altri scritti
Discorso di Roma
“Infatti, dove situare, di grazia, le determinazioni dell’inconscio se non in
quei quadri nominali su cui da sempre si fondano, nell’essere parlante che noi
siamo, l’alleanza e la parentela, ovvero in quelle leggi della parola su cui le stirpi
fondano il loro diritto, in quell’universo di discorso in cui mescolano le loro
tradizioni? E come concepire i conflitti analitici e il loro prototipo edipico al di
386
Radiofonia
“Nessuno ignora il momento critico a partire dal quale datiamo, nell’uomo,
l’essere parlante: la sepoltura, cioè il momento in cui di una specie si afferma
che, contrariamente a ogni altra, il corpo morto conserva ciò che conferiva
carattere al vivente: corpo. Corpse resta, non diventa carogna, il corpo che la
parola abitava, che il linguaggio corpsificava.” p. 405
387
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“Il rapporto d’organo del linguaggio con l’essere parlante è metafora. Si deve
supporre inoltre che sia stabitat a infliggere un colpo di reale a labitante, che sta
lì come un parassita.” p. 474
“Belœil dove si può pensare che Carlo I, per quanto non della mia linea, mi sia
mancato, ma non di certo il tipo che abitava nella locanda accanto. Mi riferisco
a Coco, Bellocchio per forza di cose, ovvero all’ara tricolore che, pur senza
bisogno di esplorare il suo sesso, ha dovuto classificare come etero –essendo,
come si dice, un essere parlante.” p. 493
Postfazione al Seminario XI
“Al punto che mi sono detto che in questo modo l’essere parlante può sottrarsi
agli artifici dell’inconscio, che non lo raggiungono, per il fatto di chiudervisi.
Caso limite da confermarmi.” p. 503
Televisione
“Non c’è inconscio che nell’essere parlante. Negli altri, che non hanno essere se
non in quanto vengono nominati, benché s’impongano dal reale, c’è un istinto,
ovvero il sapere implicato dalla loro sopravvivenza. Perlomeno è così per il
nostro pensiero, forse inadeguato in questo caso.” p. 507
“Di fatto, è in quanto ogni significante, dal fonema alla frase, può servire
come messaggio cifrato (personale, diceva la radio durante la guerra) che esso
si configura come oggetto, e si scopre che è questo a far sì che nel mondo, nel
mondo dell’essere parlante, ci sia dell’Uno, cioè dell’elemento, lo στοιχεϊον del
greco.” p. 511
… o peggio
“(…) se il godimento sessuale si inietta. Infatti, se il godimento sessuale si inietta
così lontano nelle relazioni di colui che trae essere dalla parola –giacché è questo
l’essere parlante– non è forse perché egli non ha con il sesso in quanto specifica
un partner alcun rapporto quantificabile –indicherei così quello che la scienza
esige (e applica all’animale)?” p. 549
Introduzione all’edizione tedesca degli Scritti
Jacques Lacan
Lo Stordito
IL CORPO PARLANTE
«Joyce il sintomo»
“L’S.Ca.bello è condizionato dal fatto che l’uomo vive dell’essere (= che svuota
l’essere) nella misura in cui ha — il suo corpo: ce l’ha del resto solo a partire
da lì. Ne discende la mia espressione di parlessere che si sostituirà all’ICS di
Freud (si legga: inconscio): fatti in là che mi ci metto io, dunque. Per dire che
l’inconscio, quando Freud lo scopre (si scopre d’un sol colpo, anche se occorre,
dopo l’invenzione farne l’inventario), l’inconscio è un sapere, in quanto parlato,
che costituisce LOM. Dato che la parola, ben inteso, si definisce come l’unico
luogo in cui l’essere abbia un senso. E il senso dell’essere è di presiedere all’avere,
cosa che giustifica lo sproloquio epistemico.” p. 558
“Proprio per non perdere questo balzo del senso ho ora detto che bisogna
sostenere che l’uomo ha un corpo, ossia che parla con il suo corpo, detto
altrimenti che parlessere di natura. Sorto così come testa dell’arte, egli al
contempo si snatura, per cui prende come scopo, come scopo dell’arte, il
naturale, quale ingenuamente se l’immagina.” p. 558
“Via tracciata dai Frati mendicanti, che si affidano alla carità pubblica la quale
ha da pagare per il loro sostentamento. Resta nondimeno che LOM (scritto
L.O.M.) ha il suo corpo, corpo da rivestire, tra le varie cure. Il tentativo, senza
speranza, fatto dalla società affinché LOM non abbia che un corpo si situa su un
altro versante: votato al fallimento, naturalmente, a rendere palese che se n’haun,
non ne ha nessuno altro, sebbene, a causa del suo parlessere, di qualche altro
disponga, senza però arrivare a farlo suo.” p. 559
“Che un uomo abbia accarezzato l’idea di fare il giro di tale riserva e di dare
la formula generale dello sgabello: ecco quello che chiamo Joyce il Sintomo.
Questa formula, infatti, quell’uomo non l’ha trovata, non avendone la minima
congettura. Eppure si era già propagata dappertutto sotto la forma di quell’ICS
che io contrassegno come parlessere.” p. 560
“Se ciò non avviene, ella resta sintomo chiamato isterico, da intendersi come
ultimo. Ossia che paradossalmente è interessato solo da un altro sintomo: esso
si dispone dunque come penultimo, e per di più non è privilegio di una donna,
sebbene si comprenda bene, se si misura la sorte del LOM come parlessere, di
che cosa ella si sintomatizzi.” p.
561
“Insisto: è amore rivolto al sapere. Non desiderio: quanto al Wisstrieb, sebbene
rechi il timbro di Freud, cercate pure, non ce n’è la minima traccia. Tant’è vero
che vi si fonda la maggior passione presente nell’essere parlante, che non è né
l’amore né l’odio ma l’ignoranza. Lo tocco con mano ogni giorno.” p. 550
388
389
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Il Seminario, Libro V, Le formazioni dell’inconscio. Einaudi, Torino,
2004
“La legge della madre è, beninteso, il fatto che la madre è un essere parlante, e
questo basta a legittimare il fatto che io dico la legge della madre.” p. 191
“(…) bisogna che tutto ciò che partecipa della manifestazione del desiderio
primario si installi su quella che Freud, dopo Fechner, chiama l’altra scena. Cosa
necessaria alla soddisfazione dell’uomo in quanto, essendo un essere parlante, le
sue soddisfazioni devono passare per tramite della parola.” p. 367
“Nell’al di qua, che è il campo della domanda, il puro e semplice Altro fa tutta
la legge della costituzione del soggetto, fosse anche semplicemente preso a livello
dell’esistenza del suo corpo, per il fatto che la madre è un essere parlante. Il fatto
che sia un essere parlante è assolutamente essenziale, qualsiasi cosa ne pensi
Spitz. Non bastano le coccole o le cure all’acqua di Colonia per costituire un
rapporto con la madre. Occorre che la madre parli al bambino, tutti lo sanno.”
p. 404
Il Seminario, Libro VIII, Il transfert. Einaudi, Torino, 2008
“L’animale sociale, nel momento in cui si dà alla fuga davanti al segnale datogli
dalla bestia che fa da guardia o altro, è il branco. L’essere parlante, invece,
è essenzialmente la mancanza–a–essere insorta da un certo rapporto con il
discorso – insorta da una poesia, se volete.” p. 402
Il Seminario, Libro XI, I quattro concetti fondamentali della
psicoanalisi. Einaudi, Torino, 2003
“L’esperimento può provocare in lui ogni sorta di disordini, ogni sorta di
turbe ma, non essendo finora un essere parlante, non è chiamato a mettere
in questione il desiderio dello sperimentatore, il quale, d’altronde, se lo
interrogasse, sarebbe molto imbarazzato a rispondere.” p. 232
Il Seminario, Libro XVII, Il rovescio della psicoanalisi. Einaudi,
Torino, 2001
“Infine, abbiamo da sempre sottolineato che da questo percorso risulta qualcosa
che si definisce come una perdita. È ciò che designa la lettera, che si legge come
oggetto a.
390
Jacques Lacan
II /c. Seminari
IL CORPO PARLANTE
Non abbiamo neppure tralasciato di indicare il punto da cui ricaviamo questa
funzione dell’oggetto perduto. Esso proviene dal discorso di Freud sul senso
specifico della ripetizione nell’essere parlante.” p. 8
“Visto che abbiamo il significante, dobbiamo intenderci. Ma è proprio
per questo che non ci intendiamo. Il significante non è fatto per i rapporti
sessuali. Dal momento che l’essere umano è parlante, tutto è fottuto, finisce la
perfezione, ovvero l’armonia della copulazione, del resto impossibile da scovare
da qualche parte nella natura.” p. 32-33
“Ed è questa la dimensione per cui è necessario il lavoro, il sapere che lavora, in
quanto esso dipende in primo luogo, che lo sappia o meno, dal tratto unario e,
sulla sua scia, da tutto ciò che si potrà articolare come significante. È a partire
da qui che si instaura la dimensione del godimento, così ambigua nell’essere
parlante, da poter persino teorizzare il vivere nell’apatia e farne una religione,
essendo l’apatia edonismo.” p. 56-57
“Questo sapere è mezzo di godimento. E, lo ripeto, quando lavora produce
entropia. Entropia o punto di perdita che è il solo punto, il solo punto regolare
tramite il quale abbiamo accesso al godimento. Così si traduce, si chiude e
si motiva quanto riguarda l’incidenza del significante nel destino dell’essere
parlante. Questo ha poco a che vedere con la sua parola. Ha a che fare con
la struttura, la quale si fa apparecchio. L’essere umano, che chiamiamo così
proprio perché non è che l’humus del linguaggio, ha solo da apparolarsi con
quell’apparecchio.” p. 57
“Precisarlo mi sembra possibile, segnatamente a partire dal discorso
psicoanalitico. Infatti, a partire da questo discorso, di affetto ce n’è uno solo, vale
a dire il prodotto della presa dell’essere parlante in un discorso, in quanto questo
discorso lo determina come oggetto.” p. 188
“Non è di alcun essente che si tratta nell’effetto del linguaggio. Non si tratta che
di un essere parlante.” p. 189
“Per esprimermi in questi bei termini approssimativi, prendiamo il principio
maschio, per esempio –qual è su di lui l’effetto dell’incidenza del discorso? In
quanto essere parlante gli è richiesto di dover rendere conto della sua essenza–
ironia, tra virgolette.” p. 200
Il Seminario, Libro XVIII, Di un discorso che non sarebbe del
sembiante. Einaudi, Torino, 2010
391
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“La verità con cui questi giovani esseri parlanti, nessuno escluso, devono
confrontarsi è che c’è chi non ce l’ha, il fallo.” p. 28
“Potremmo dunque dire che, in quanto è nel mondo, in quanto è sotto il cielo,
ecco, è il linguaggio a fare xing, natura. La natura infatti, almeno in Meng–zi,
non è una natura qualsiasi: si tratta della natura dell’essere parlante, quella a
proposito di cui, in un altro passo, egli tiene a precisare che c’è una differenza tra
tale natura e la natura dell’animale, e la specifica con due termini che vogliono
proprio dire quello che vogliono dire: una differenza infinita, la quale è forse
quella che viene definita qui.” p. 52
“Posto questo, che ha il vantaggio di farvi intravedere il mio obiettivo, il mio
disegno, riparto da quel punto, che è dell’ordine della sorpresa, con cui si segnala
l’effetto di regresso con il quale ho cercato di definire la giunzione della verità
con il sapere, e che ho enunciato nei seguenti termini: non c’è rapporto sessuale
nell’essere parlante.” p. 58
“Il modello generale di questo rapporto tra maschile e femminile è quello che
assilla da sempre, da molto tempo, l’individuazione da parte dell’essere parlante
delle forze del mondo, quelle che si trovano tian xia, sotto il cielo.” p. 59
“La scrittura, da parte sua, non il linguaggio, la scrittura conferisce ossatura a
tutti i godimenti che si rivelano aprirsi all’essere parlante tramite il discorso.”
p. 139
“Ne consegue che, in una sorta d’inversione, ogni discorso possibile appare come
il sintomo che –all’interno del rapporto sessuale e in condizioni che, al solito,
riportiamo alla preistoria, negli ambiti extra-storici– arrangia, dà una sorta di
riuscita a quanto può instaurarsi artificialmente per supplire a quel che manca e
che è inscritto nell’essere parlante.” p. 157
Il Seminario, Libro XX, Ancora. Einaudi, Torino, 2011
“A un tale, un giurista che aveva chiesto ragguagli sul mio discorso, ho pensato
di poter rispondere –per fargliene percepire il fondamento, cioè che il linguaggio
non è l’essere parlante– che non mi sentivo spiazzato a dover parlare in una
facoltà di diritto, giacché è la facoltà in cui l’esistenza dei codici evidenzia come
il linguaggio sia qualcosa che sta lì, da parte, costituito nel corso dei secoli,
mentre l’essere parlante, quelli che chiamiamo gli uomini, è ben altra cosa.”
392
Jacques Lacan
“L’importante è questo: l’identità di genere non è nient’altro se non quello che
ho appena espresso con i termini l’uomo e la donna. È chiaro che la questione di
che cosa ne scaturisca precocemente si pone soltanto a partire dal fatto che in età
adulta è destino degli esseri parlanti suddividersi in uomini e donne.” p. 25
IL CORPO PARLANTE
“Chiarirò con una parola il rapporto tra il diritto e godimento. L’usufrutto –
non è forse una nozione giuridica?– riunisce in una sola parola qualcosa che ho
già evocato nel mio Seminario sull’etica, vale a dire la differenza che passa tra
l’utile e il godimento. L’utile, a cosa serve? La questione non è mai stata ben
definita a motivo del rispetto prodigioso che l’essere parlante, in conseguenza del
linguaggio, ha per il mezzo. L’usufrutto vuol dire che si può godere dei propri
mezzi, ma che non bisogna sprecarli.” p. 4
“L’efficienza, che Aristotele ci propone come terza forma della causa, non è allora
altro che il progetto con cui si limita il godimento. Nel regno animale c’è una
varietà di cose che ci presentano la parodia di questo cammino del godimento
nell’essere parlante, e al tempo stesso vi si delineano delle funzioni che hanno
a che vedere con il messaggio: l’ape che trasporta il polline dal fiore maschio al
fiore femmina è qualcosa che assomiglia molto alla comunicazione.” p. 24
“Ma allora, non è forse vero che il linguaggio ci impone l’essere, e ci costringe ad
ammettere che, dell’essere, non abbiamo mai niente?
Dobbiamo abituarci a sostituire a questo essere sfuggente il par-essere, ossia
l’essere παρα, l’essere accanto.
Dico par-essere e non apparire, come si è sempre detto per indicare il fenomeno,
al di là del quale ci sarebbe quella cosa, il noumeno, che in effetti ci ha menati,
menati a tutte quelle opacizzazioni giustamente definite come oscurantismo.
È proprio nel punto in cui scaturiscono i paradossi di tutto quello che giunge
a formularsi come effetto di scritto che l’essere si presenta, si presenta sempre
come par-essere.” p. 43
“La Storia è fatta apposta per darci l’impressione di avere un senso qualsiasi. Al
contrario, la prima cosa che noi dobbiamo fare è prendere atto che ci troviamo
di fronte a un dire, che è il dire di un altro, che ci racconta le sue stupidaggini, i
suoi imbarazzi, i suoi impedimenti, i suoi turbamenti, e che lì si tratta di leggere
–che cosa?– nient’altro che gli effetti di questi dire. Questi effetti –vediamo bene
in che modo gli esseri parlanti ne siano agitati, sconvolti, preoccupati.” p. 44
“Tutti i bisogni dell’essere parlante sono contaminati dal fatto di essere coinvolti in
un’altra soddisfazione –sottolineate queste tre parole– rispetto a cui possono fare
difetto.” p. 49
“In fin dei conti non c’è che questo, il legame sociale. Io lo designo con il
termine discorso perché non c’è altro modo di designarlo una volta che ci si è
accorti che il legame sociale si instaura unicamente ancorandosi nel modo in
393
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“La realtà viene affrontata con gli apparecchi del godimento. Ecco ancora una
formula, che vi propongo a condizione di mettere bene a fuoco che c’è un
unico apparecchio: il linguaggio. È in questo modo che il godimento viene
apparecchiato nell’essere parlante.” p. 52
“Dopodiché proseguo con quanto ho da dirvi oggi, ovvero articolando
ulteriormente la conseguenza del fatto che tra i sessi nell’essere parlante il
rapporto non si dà. Infatti è soltanto partendo da qui che può enunciarsi quello
che, a questo rapporto, supplisce.” p. 63
“Contrariamente a quanto afferma Freud, è l’uomo –voglio dire colui che si
ritrova maschio senza sapere che cosa farne, pur essendo un essere parlante– ad
abbordare la donna, a poter credere di abbordarla…” p. 68
“L’atto d’amore è la perversione polimorfa nel maschio –questo nell’essere
parlante.” p. 68
“Mi resta una mezz’ora per cercare di introdurvi, se posso esprimermi così, a
come stanno le cose dalla parte della donna. Allora, delle due l’una: o ciò che
scrivo non ha alcun senso (…) o, quando scrivo xΦx, questa funzione inedita
in cui la negazione verte sul quantificatore da leggersi come non-tutto, vuol dire
che, se un essere parlante qualsiasi si schiera sotto l’insegna delle donne, è a
partire dal suo fondarsi sull’essere non-tutto, collocandosi nella funzione fallica.
Ecco ciò che definisce la… –che cosa?– la donna, appunto, salvo che non si
può scrivere La donna se non barrando il La. Non c’è La donna, con l’articolo
definito per designare l’universale. Non c’è La donna perché (…) per essenza
essa non è tutta.” p. 69
“Anzitutto, in alto, le quattro formule proposizionali, due a sinistra e due a
destra. Qualunque essere parlante si inscrive da una parte o dall’altra. (…) Di
fronte, avete l’iscrizione della parte donna degli esseri parlanti. A ogni essere
parlante, com’è esplicitamente formulato nella teoria freudiana, è permesso,
chiunque sia, provvisto o no che sia degli attributi della mascolinità –attributi
che restano da determinare–, inscriversi in questa parte.” p. 74
“Non si vede tuttavia perché il fatto di avere un’anima sarebbe uno scandalo per
il pensiero –se fosse vero. Se fosse vero potrebbe chiamarsi anima soltanto ciò
che permette a un essere –all’essere parlante per chiamarlo con il suo nome– di
sopportare l’intollerabile del suo mondo.” p. 78
394
Jacques Lacan
cui il linguaggio si situa e imprime, si situa su ciò che brulica, ovvero l’essere
parlante.” p. 51
IL CORPO PARLANTE
“Dopo la meteora dell’amor cortese, è da tutt’altra partizione che è venuto ciò
che l’ha rigettata nella sua futilità originaria. Ci è voluto nientemeno che il
discorso scientifico, ossia qualcosa che non deve nulla ai presupposti dell’anima
antica.
Ed è soltanto da lì che sorge la psicoanalisi, ovvero l’oggettivazione della
circostanza per cui l’essere parlante passa ancora del tempo a parlare in pura
perdita.” p. 80-81
“Secondo il discorso analitico c’è un animale che si ritrova parlante, e per il
quale, dal fatto di abitare il significante, consegue che ne sia soggetto (…) È
l’eterna ambiguità del termine inconscio. Certo, l’inconscio è supposto per il
fatto che nell’essere parlante c’è da qualche parte qualcosa che ne sa più di lui,
ma questo non è un modello accettabile del mondo.” p. 83
“La contingenza è ciò a cui si riduce quanto sottomette il rapporto sessuale a
non essere altro, per l’essere parlante, che il regime dell’incontro.” p. 89
“(…) se la libido è solo maschile, è solo da dove è tutta, la cara donna, cioè da
dove la vede l’uomo, è soltanto da lì che può, la cara donna, avere un inconscio.
E a cosa le serve? Le serve, come tutti sanno, a far parlare l’essere parlante, qui
ridotto all’uomo, e cioè –non so se lo avete ben rilevato nella teoria analitica– a
non esistere che come madre.” p. 93
“Comincio con le mie formule difficili, o che suppongo essere tali: l’inconscio
non è che l’essere pensa, come è implicato da quanto se ne dice nella scienza
tradizionale, l’inconscio è che l’essere, parlando, gode, e, aggiungo, non vuole saperne
di più.” p. 99
“L’apertura beante inscritta nello statuto stesso del godimento in quanto dir–
mensione del corpo, nell’essere parlante, ecco che cosa si diffonde con Freud
attraverso quel test –non dico nulla di più– che è l’esistenza della parola. Là dove
parla, gode.” p. 109
“C’è qui una riduzione della specie umana –umano risuona come umor malsano,
dove il resto dà luogo a malora. Tale riduzione è il termine per mezzo del quale la
Chiesa intende portare la specie, per l’appunto, fino alla fine dei tempi. Ed essa
è talmente fondata sull’apertura beante propria alla sessualità dell’essere parlante
che rischia di essere almeno altrettanto fondata –dico così perché non voglio
disperare di nulla– dell’avvenire della scienza.” p. 111
“(…) l’analisi si distingue da tutto ciò che è stato prodotto fino a quel momento
dal discorso in quanto essa enuncia quello che costituisce anche il nocciolo del
395
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“È il corpo parlante in quanto non può riuscire a riprodursi se non grazie a un
malinteso del suo godimento. In altri termini esso si riproduce soltanto grazie a
un fallimento di ciò che vuol dire, poiché ciò che esso vuol dire –ovvero, come
dice bene il francese, il suo sens– è il suo godimento effettivo. Ed è mancandolo
che si riproduce –cioè facendo l’amore.” p. 115
“Ho detto che i corpi parlanti sono gli unici che si fanno un’idea del mondo in
quanto tale. Il mondo, il mondo dell’essere pieno di sapere, non è che un sogno,
un sogno del corpo in quanto parla, perché non c’è soggetto conoscente.”
p. 120-121
“Per ogni essere parlante, la causa del desiderio è, quanto alla struttura,
rigorosamente equivalente, se così posso dire, alla sua piegatura, cioè a quella che
ho chiamato la sua divisione di soggetto.” p. 121
“Il reale, dirò, è il mistero del corpo parlante, è il mistero dell’inconscio.”
p. 125
“Vado dritto al punto in questione: il sapere è un enigma. Questo enigma
ci viene reso presente dall’inconscio quale si è rivelato attraverso il discorso
analitico. Esso si enuncia così: per l’essere parlante il sapere è ciò che si articola.”
p. 131
“È perché c’è l’inconscio, vale a dire lalingua, in quanto è per coabitazione con
essa che si definisce un essere chiamato essere parlante, che il significante può
essere chiamato a fare segno. Intendete questo segno come più vi piace, anche
come il thing dell’inglese, ovvero la cosa… È così che il soggetto si trova ad
essere, e soltanto per l’essere parlante, un essente il cui essere è sempre altrove,
come il predicato mostra.” p. 136
“La contingenza l’ho incarnata nel cessa di non scriversi. Perché qui non c’è
nient’altro che incontro, l’incontro nel partner dei sintomi, degli affetti, di tutto
ciò che in ciascuno indica la traccia del suo esilio, non come soggetto ma come
parlante, del suo esilio dal rapporto sessuale” p. 139
Il Seminario, Libro XXIII, Il Sinthomo. Astrolabio, Roma, 2006
“Bisogna infatti supporre che Adamo abbia nominato il bestiame nella lingua
di colei che chiamerò l’Evita. Ho tutto il diritto di chiamarla così poiché in
ebraico, ammesso che l’ebraico sia una lingua, il suo nome vuol dire la madre
dei viventi. Ebbene, l’Evita la lingua la ebbe subito sciolta se, dopo il supposto
396
Jacques Lacan
mio insegnamento, ovvero che io parlo senza saperlo. Parlo con il mio corpo,
senza saperlo. E dunque dico sempre di più di quanto io non sappia.” p. 114
IL CORPO PARLANTE
nominare da parte di Adamo, la prima persona a servirsene fu proprio lei, per
parlare al serpente.
La cosiddetta creazione divina si raddoppia dunque con la chiacchiera del
parlessere, come lo chiamo io, con cui l’Evita fa del serpente quello che mi
permetterete di chiamare lo strizzachiappe, designato anche come faglia, o ancora
meglio come fallo, dato che ne occorre almeno uno per fare il faut-pas, il non si
può, e anche il passo falso.” p. 11
“Non si può tagliare questo nodo, definibile come borromeo, senza dissolvere il
mito del soggetto –del soggetto come non supposto, ossia come reale– che esso
non rende diverso da ogni corpo segnalabile come parlessere, e tale corpo non
ha uno statuto rispettabile, nel senso comune del termine, se non tramite questo
nodo.” p. 36
“Il godimento fallico si situa invece alla congiunzione del simbolico con il reale.
Questo nella misura in cui, nel soggetto che trova supporto nel parlessere, che è
quello che io designo come l’inconscio, c’è il potere di congiungere la parola con
un certo godimento, il cosiddetto godimento fallico, che viene avvertito come
parassitario a causa della parola stessa, a causa del parlessere.Inscrivo dunque qui
il godimento fallico controbilanciando quello che è il senso. È il luogo di ciò che
in coscienza viene designato dal parlessere come potere.” p. 53
“Un nodo dunque si può fare. È per questo che ho scelto la via che unisce
le estremità in maniera elementare. Mi sembrava il modo più didattico di
procedere vista la mentalità – non c’è bisogno di dire di più –la senti-mentalità
propria del parlessere– la mentalità in quanto la sente, ne sente il fardello –e la
ment-alità in quanto mente, è un fatto.
Che cos’è un fatto? È proprio lui a farlo. Non c’è fatto se non per il fatto che il
parlessere lo dice. Non ci sono altri fatti se non quelli che il parlessere riconosce
come tali dicendoli.” p. 62
“L’amor proprio è il principio dell’immaginazione. Il parlessere adora il proprio
corpo perché crede di averlo. In realtà non ce l’ha, ma il suo corpo è la sua sola
consistenza.” p. 62
“Questo è vero per il corpo considerato come tale –voglio dire adorato, poiché
l’adorazione è il solo rapporto che abbia il parlessere con il proprio corpo– solo
quando esso ne adora un altro, un altro corpo. La cosa è sempre sospetta perché
comporta lo stesso disprezzo –un disprezzo veritiero poiché di verità si tratta.”
p. 63
397
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
p. 97
II /d. Altri testi
Discorso ai cattolici (1960) in Dei Nomi–del–Padre seguito da Il
trionfo della religione. Einaudi, Torino, 2006
“La Cosa è dunque ciò che, in qualsiasi vivente venga ad abitare il discorso e si
proferisca in parole, marca il posto in cui egli patisce del fatto che il linguaggio si
manifesta nel mondo. È così che l’essere appare ovunque l’Eros della vita trova il
limite della sua tendenza unitiva.” p. 85
Io parlo ai muri – Sapere, ignoranza, verità e godimento (1971), in Il
mio insegnamento e Io parlo ai muri. Astrolabio, Roma, 2014
“Comunque non ci sono due classi di esseri parlanti, quelli che si governano
seguendo il principio di piacere e il principio di realtà, e quelli che sono al di là
del principio di piacere, soprattutto perché clinicamente, come si dice –ed è il
caso di dirlo–, sono proprio gli stessi.” p. 109
“La dimensione per cui l’essere parlante si distingue dall’animale è certamente
data dal fatto che c’è in lui una falla beante per cui potrebbe perdersi, con cui gli
sarebbe permesso di agire sul corpo o sui corpi, non importa se è il suo o quello
dei suoi simili, o anche quello degli animali che lo circondano, per farne sorgere,
a loro o a proprio beneficio ciò che, in termini propri, si chiama godimento.”
p. 110
“È una cosa importante perché, grazie al progresso di quella che chiamiamo
scienza, stiamo spingendo molto lontano una quantità di faccenduole che si
situano al livello del gamete, al livello del gene, al livello di un certo numero
di scelte, di cernite, chiamate in vari modi, meiosi o altro, e che sembrano
proprio delucidare qualcosa che accade in relazione al fatto che la riproduzione,
perlomeno in una certa zona della vita, è sessuata. Solo che tutto ciò non ha
assolutamente nulla a che fare con quanto concerne il rapporto sessuale, nella
misura in cui è oltremodo certo che nell’essere parlante c’è, attorno a questo
rapporto in quanto fondato sul godimento un ventaglio davvero sbalorditivo nel
suo dispiegamento.” p. 113
398
Jacques Lacan
“Non c’è equivalenza: è l’unica cosa, l’unico appiglio su cui si regge quello
che nel parlessere, nell’essere umano, si chiama rapporto sessuale. Non è forse
quanto ci dimostra quella che chiamiamo clinica, che è un altro uso del letto?”
IL CORPO PARLANTE
“D’altro canto ciò a cui conduce il godimento non ha niente a che fare in senso
stretto con la copulazione, in quanto questa è, diciamo così, il modo usuale –ma
cambierà– in cui, nella specie dell’essere parlante, ha luogo la riproduzione.
In altri termini c’è una tesi: non c’è rapporto sessuale –mi riferisco all’essere
parlante– e c’è un’antitesi che è la riproduzione della vita.” p. 114
Io parlo ai muri – Dell’incomprensibilità e di altri temi (1971), in Il
mio insegnamento e Io parlo ai muri. Astrolabio, Roma, 2014
“Ho detto l’essere perché, dal tempo in cui la filosofia gira in tondo su un certo
numero di punti, mi sembra acquisito che l’essere parlante è per il fatto di essere
parlante (chiedo venia per il primo essere) che viene all’essere, insomma, che ne
ha la sensazione. Naturalmente, non ci arriva, fallisce. Ma questa dimensione
dell’essere, aperta all’improvviso, possiamo dire che per un lungo periodo ha
interessato il sistema… per lo meno dei filosofi.” p. 123
“Di che cosa sto parlando? Ebbene, di nient’altro se non di quelli che
chiamiamo nel linguaggio corrente uomini e donne. Su questi uomini e su
queste donne in quanto tali noi non sappiamo niente di reale.
Non si tratta di cani e di cagne. Si tratta di ciò che sono realmente coloro che
appartengono a ognuno dei sessi a partire dall’essere parlante. Non c’è qui
ombra di psicologia. Uomini e donne: sono qualcosa di reale.” p. 129
“Non sto dicendo che la parola esiste perché non c’è rapporto sessuale – questo
sarebbe assurdo. Non dico nemmeno che non c’è rapporto sessuale perché c’è
la parola. Ma non c’è rapporto sessuale perché la parola funziona a un livello,
di cui il discorso psicoanalitico ha scoperto la preminenza, specificando l’essere
parlante, in tutto ciò che è dell’ordine del sesso, vale a dire il sembiante.”
p. 130
“Sembra che nessuno si sia reso conto che la questione è interamente a livello
della dimensione del godimento, vale a dire del rapporto dell’essere parlante con
il suo corpo, dato che non c’è altra definizione possibile del godimento.Nella
specie animale chi gode del proprio corpo? E in che modo? Ne abbiamo qualche
traccia tra i nostri cugini, gli scimpanzé, che si tolgono l’un l’altro i parassiti con
tutti i segni del più vivo interesse. Da che cosa dipende il fatto che nell’essere
parlante il rapporto con il godimento è molto più elaborato? La psicoanalisi ha
scoperto che dipende dal fatto che il godimento sessuale emerge prima della
maturità che porta lo stesso nome. La qual cosa sembra sia sufficiente a rendere
infantile tutto ciò che concerne questa gamma, indubbiamente corta, ma non
senza varietà, di godimenti qualificati perversi.” p. 131
399
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“Questo senso non ha niente a che fare con ciò che hanno di reale, ma apre uno
spiraglio, una piccola apertura su ciò che può rendere conto dell’entrata del reale
nel mondo dell’essere parlante. Che beninteso ha l’essere solo dalla parola.”
p. 22
Il trionfo della religione (1974) in Dei Nomi-del-Padre seguito da Il
trionfo della religione. Einaudi, Torino, 2006
“Il parlessere è un modo di esprimere l’inconscio. C’è un fatto del tutto
imprevisto e totalmente inspiegabile ed è che l’uomo è un animale parlante.”
p. 102
“Il sintomo non è ancora veramente il reale. È la manifestazione del reale al
nostro livello di esseri viventi. In quanto esseri viventi, siamo morsi, rosi dal
sintomo. Siamo malati, tutto qui. L’essere parlante è un animale malato.”
p. 105
“Non verremo mai a capo del rapporto tra quei parlesseri che diciamo di sesso
maschile e quei parlesseri che diciamo di sesso femminile.” p. 106
La Terza (1974), La Psicoanalisi Nº12
“Quel soggetto supposto sapere che è l’analista nel transfert, non è supposto a
torto se sa in cosa consiste l’inconscio: un sapere che si articola da lalingua, dove
il corpo che parla è annodato solo da quel reale di cui ‘si gode’.” p. 23
“Tutto quello che dico non è necessariamente vero in eterno, del resto mi è
del tutto indifferente che lo sia. Alla struttura stessa del discorso potete dare
un fondamento soltanto riformandola, ovvero riformando gli altri discorsi in
quanto ex–sistono al vostro. È nel vostro discorso potrà esaurirsi l’insistenza che
è propria al parlessere e che negli altri discorsi resta a corto di argomenti.”
p. 29
“Non è quindi tanto sorprendente che al di fuori del parlessere non si abbia
nessuna prova del fatto che gli animali pensano eccetto alcune forme a cui li
supponiamo sensibili, in quanto vi rispondono in modo privilegiato. Ciò che
non vediamo, è che gli etologi, curiosamente, mettono tra parentesi (sapete che
gli etologi studiano gli usi e costumi degli animali) è che non vi è ragione per
immaginare anche noi che il mondo è mondo, lo stesso, per tutti gli animali;
mentre abbiamo tante prove che benché l’unità del nostro corpo ci costringa a
pensarlo come universo, esso evidentemente non è mondo, ma immondo.”
p. 33
400
Jacques Lacan
Intervento (1973) pronunciato al congresso de l’École Freudienne de
Paris 1-4 novembre 1973, in La Psicoanalisi Nº3
IL CORPO PARLANTE
Il fenomeno lacaniano (1974), in La Psicoanalisi Nº24
“Vi dirò tuttavia la parola di cui mi servo per designare l’inconscio – il
parlessere.
Anche qui mi permetterei un piccolo equivoco – è l’essere che parla, ma è anche
colui che parla questa splendida cosa che dipende unicamente dal linguaggio e
cioè l’essere.
Se non fosse il linguaggio a introdurre l’essere, tutto l’essere, da dove ne verrebbe
l’idea?” p. 19
“È qui che, sempre, l’inconscio prende le sue radici. Si radica qui non solo
perché questo essere ha imparato a parlare quando era piccolo a condizione che
sua madre si sia data da fare, ma perché egli è sorto già da due parlesseri.
L’inconscio è questo, che già prima vi erano due persone marcate dal parlessere,
marcate da questa distorsione del pensiero – non si sa perché, come figura o
inquietudine – che dipende dal fatto che c’è del parlessere. Per il fatto di essere
nato da due parlesseri, vale a dire per il fatto di essere nato già prefigurato, per
così dire, come traccia nel loro desiderio. Sorgendo, fa sì che ciascuno abbia un
inconscio.” p. 20
“Il sintomo è l’iscrizione, a livello del reale, di questa proiezione di inconscio, di
questa vera crivellatura – nel senso di proiettili che crivellano una superficie – di
questa crivellatura, dico, del parlessere tramite il dire di due coniugi – Dio sa
come, è proprio il caso di dirlo – di due soggetti che se la ridono della divisione
profonda tra il corpo e la natura del linguaggio.” p. 21
Le malentendu (1980), in Ornicar? Nº22 e Nº23, 1, citato da Vicente
Palomera, Lessico famigliare e inconscio, in Attualità Lacaniana Nº12,
2010
“(…) dobbiamo essere in questo caso radicali: il vostro corpo e il frutto della
discendenza e buona parte della vostra disgrazia proviene dal fatto che nuotava
in pieno nel malinteso… nuotava per il semplice fatto che parlava essere
testardamente. (…) E ciò che vi e stato trasmesso nel darvi la vita, come si suol
dire. Ereditate questo… il malinteso poiché fin da prima di questo bel regalo,
fate parte della balbuzie dei vostri ascendenti. Non occorre che balbettiate voi
stessi, già da prima ciò che vi sostiene a titolo di inconscio radicali (…) nascere
desiderato o no fa lo stesso, dato che si tratta del parlessere.” p. 133
Seminario di Caracas (1980), in La Psicoanalisi Nº28
“La pace sessuale vuol dire che si sa cosa fare con il corpo dell’Altro. Ma chi sa
cosa fare del corpo di un parlessere? – Al di fuori di stringerlo un po’ più o un
po’ meno?” p. 42
401
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Jacques-Alain Miller
III /a. Corsi
Della natura dei sembianti (1991-1992)
La Psicoanalisi Nº11
Lezione del 20 novembre 1991 “Dirò che almeno nella
prospettiva di Lacan e nella psicoanalisi non dobbiamo esitare a distinguere
l’essere dal reale, e a situare l’essere dal lato del sembiante.
È questo il senso esatto che, secondo me, deve darsi alla condensazione lacaniana
parêtre scritto nel modo seguente p.a.r.ê.t.r.e.” p. 120
“(…) l’essere non si oppone al sembrare, al parêtre, come si scrive abitualmente,
ma piuttosto si confonde con esso.
È questo anche il senso da attribuire a un’altra condensazione cui Lacan ricorre
nel medesimo periodo quando parla di par(l)être - p.a.r.l.ê.t.r.e.: alla lavagna ho
messo la l tra parentesi, per mostrarvi l’affinità dei due termini. Il parlêtre non è
semplicemente un’abbreviazione dell’espressione ‘essere parlante’ (être parlant),
ma è una condensazione che attribuisce al termine generico di uomo un essere
di sembiante, gli attribuisce il parêtre.” p. 120
La Psicoanalisi Nº14
Lezione del 22 gennaio 1992 “L’immaginario si dirige verso il
simbolico almeno per noi esseri parlanti – se Lacan fa un’inversione coniando
il termine parlessere (parlêtre), è proprio per dire che non c’è essere, come
sembiante, se non a partire dal fatto che si parla, se non a partire dal simbolico.”
p. 137
402
Jacques-Alain Miller
3.
IL CORPO PARLANTE
Silet (1994-95)
La Psicoanalisi Nº19
Lezione del 30 novembre 1994 “È nel contesto di una teoria
dell’interpretazione che separa rigorosamente il dire e il godere che Lacan
giustifica sia l’uso delle risonanze, della parola che il suo trattamento speciale del
tempo delle sedute. D’altra parte, si trova evocato di passaggio, nel Rapporto di
Roma, un certo legame del dire e del godere, vale a dire la nota, chiusa subito,
che il linguaggio è corpo e che a questo titolo può ‘essere preso in immagini
corporali’.” p. 185
La fuite du sens (1995-96)
La Psicoanalisi Nº20
Lezione del 31 gennaio 1996 (Il monologo de l’apparola)
“Diciamolo in altro modo: il principio del secondo ternario non è voler dire è
voler godere. Il secondo ternario, anch’io l’ho un po’ rabberciato e mi son detto:
il marchese Lacan ha detto ‘l’apparola’, è meraviglioso. Adotto il termine, lo faccio
passare. Il secondo ternario traduce dunque il nuovo statuto del primo quando
è la pulsione e non la significazione ad essere concepita come principio e motore
dell’essere parlante. C’è tutto un sistema concettuale che si trasforma.” p. 28
“L’apparola è ciò che la parola diventa quando è dominata dalla pulsione, e
quando non assicura più comunicazione ma godimento. Diciamo che è quel
che risponde alla formula data da Lacan in Ancora, cioè che ‘l’essere parlando
gode’ (Là où ça parle, ça jouit). Nel contesto, ciò significa che qualcosa gode nel
parlare. Occorre dunque situare qualcosa che di questo blablabla si soddisfa, e si
soddisfa a livello dell’inconscio.”
Quello che Lacan in Ancora cerca di avanzare è una congiunzione radicale del ça
parle e del ça jouit, cioè dell’Altro lacaniano e dell’Es freudiano o groddeckiano”.
p. 31
“Lacan introduce il godimento della parola, l’Altra soddisfazione, quella che
prende il linguaggio come supporto e che è distinta da quel che sarebbe il
godimento puro del corpo non parlante. (…) Occorre attribuire un valore
radicale a questa espressione e cioè che il godimento parla. La parola è animata da
un voler godere. Non è solo la domanda”. (…) La formula del godimento della
parola - per metterla al giusto posto - bisogna iscriverla in rapporto a un’altra
formula: Io, la verità, parlo. (…) Ebbene, si può dire che il godimento della
parola sia una formula simmetrica all’altra, simmetrica e opposta. L’inconscio
403
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“Tutta la tesi di Lacan in Ancora consiste nel mostrare che il dire qualsiasi cosa
porta sempre al principio di piacere, al Lustprinzip. Vuol dire che la dove ça
parle, ça jouit.” p. 37
L’Altro che non esiste e i suoi comitati etici (1996-1997)
La Psicoanalisi Nº34
Lezione del 28 maggio 1997 “Ho detto che il sesso non riusciva a
rendere partner gli esseri parlanti, i parlesseri. Mostrerò che solo il sintomo riesce
a rendere partner i parlesseri. Il vero fondamento della coppia è il sintomo.”
p. 63
L’esperienza del reale nella cura analitica (1998-1999)
La Psicoanalisi Nº29
Lezione del 27 gennaio 1999 “E in fondo è correlativamente alla
nozione dell’interpretazione come disturbo che bisogna introdurre qualcosa
come il parlessere, cioè una funzione, una nozione dell’ordine di quello a cui
Lacan aspira, cioè qualcosa che vada più lontano dell’inconscio. (…)
Dunque ha preso di mira qualcosa che andrebbe al di là della nozione di
inconscio e quello che si iscrive in questo posto è proprio quello che ha chiamato
il parlessere in cui la funzione dell’inconscio si completa con il corpo e diciamo
– questo non potrà che essere approssimativo – non con il corpo simbolico, non
con il corpo immaginario, ma con ciò che c’è di reale del corpo.” p. 181
La Psicoanalisi Nº32
Lezione del 17 marzo 1999 “Noi maneggiamo il soggetto come
mancanza-a-essere.
Soggetto $
Ora, nel Seminario XX. Ancora, si può dire che Lacan gli sostituisce un’altra
istanza: gli sostituisce un altra istanza e nello stesso tempo tenta di articolarla
con quella lì. Si tratta di ciò che chiama ‘l’essere parlante’.
Soggetto $ → Essere parlante
Ho avuto occasione qui di sottolineare la polarità tra il soggetto definito come
mancanza-a-essere e un’istanza che mette in risalto, in evidenza, al contrario,
il termine di essere, fino a proporne, un po’ più tardi, non un matema ma un
404
Jacques-Alain Miller
strutturato come un linguaggio implica che la verità parli, mente, nel contesto
del lalingua e dell’apparola, è il godimento a parlare.” p. 33
IL CORPO PARLANTE
neologismo, il parlessere, che i nostri colleghi americani – colleghi nella lettura di
Lacan – dovranno senza dubbio conservare come intraducibile.
Soggetto $ → Essere parlante ‘Parlêtre’.” p.
207-208
“Se il soggetto diviene in Lacan l’essere parlante è per il fatto che si tratta
di un’istanza fondamentalmente ancorata al corpo. È il corpo che fa qui la
differenza. (…)
Al contrario, l’essere parlante, quella che sarebbe la teoria dell’essere parlante,
differentemente dalla teoria del soggetto, si può dire che tratta degli effetti
del significante in quanto affezione e non in quanto significazione, vale a dire
degli effetti del significante in particolare nel corpo. E, in corto circuito, direi
che questo effetto principale è quello che Lacan ha chiamato il godimento, il
godimento che suppone il corpo. Il godimento necessita del supporto di un
corpo ed è il motivo per cui Lacan lo chiama sostanza.” p. 209
“Si può dire che se ci si orienta sul Seminario XX, al contrario, il soggetto e
il godimento non sono più pensati sotto la specie della relazione. E per una
ragione molto semplice, lo dico così almeno, per il fatto che Lacan rinuncia al
soggetto. Rinuncia al soggetto per inventare una categoria, quella dell’essere
parlante, in cui il soggetto e il godimento sono pensati insieme sotto le specie di
una nuova entità: quella di un corpo affetto dal significante, un corpo mosso,
mobilitato dall’inconscio. (…) E quello che si delinea in questa prospettiva è che
il parlessere potrebbe, dovrebbe sostituirsi alla parola stessa di inconscio.”
p. 210
I sei paradigmi del godimento (1999) in I paradigmi del godimento,
Astrolabio, Roma 2001
Lezione del 7 aprile 1999 “Il punto di arrivo è:
la psicoanalisi non funziona, e chiedersi perché non funziona. È
assolutamente altra cosa partire dall’evidenza del ‘C’è godimento’. C’è
godimento in quanto proprietà di un corpo vivente, cioè si parte da una
definizione che rapporta il godimento unicamente al corpo vivente. C’è
psicoanalisi soltanto riferita a un corpo vivente e senza dubbio ad un
corpo che parla. E il ‘che parla’ è ancora per Lacan in questo seminario
ciò che merita di essere qualificato come mistero (…)” p. 37
405
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Lezione del 14 aprile 1999 “Vedrei in quello che tu segnali una
delle soluzioni che si potrebbe dare a questa frase finale di una lezione di Ancora,
che avevo menzionato e che sembra un po’ piatta, tutto ciò ‘è il mistero del
corpo parlante’ (Sem. XX, p.131).
Mi sembra che il Bunraku dissipi il mistero del corpo parlante, in un modo
molto semplice, vale a dire distinguendo da un lato il corpo che si agita e
dall’altro l’enunciazione del recitante.” p. 232
“Ciò che fa il mistero del corpo parlante è proprio quando non c’è disgiunzione
e che il corpo abita il linguaggio, che è affetto da effetti di linguaggio.”
p. 233
La Psicoanalisi Nº28
Lezione del 9 giugno 1999 “Parlare con il proprio corpo è la
caratteristica del parlessere. L’uomo un po’ dis-umanizzato con la grafia - LOM di natura parla con il corpo mentre nell’animale, parlare è un effetto d’arte.”
p. 77
“È una scoperta molto delicata di Lacan quella di ritrovare la traccia di ciò che
lo porta, lui, a distinguere e a ordinare il soggetto del significante e l’individuo
affetto nell’oscillazione di Aristotele.
E’ proprio per questo motivo che Lacan si tira via da questo binario per portarci
al parlessere. Il parlessere è l’unione tra l’upokeimenon e la ossia di Aristotele,
l’unione tra il soggetto e la sostanza, tra il significante e il corpo. C’è essere ma
essere in quanto parlato, essere in quanto assegnato dal detto.” p. 79
“Fino al momento dell’introduzione del parlessere, [Lacan] ha tenuto conto
del corpo al livello della formula del fantasma che, in effetti, scrive la necessità
di completare con un elemento corporeo il soggetto del significante (…), la
necessità di dargli un complemento corporeo, ma con poca spesa, vale a dire con
il piccolo a.” p. 81
“Così i testi di Lacan si svolgono e presentano talvolta la faccia vuota e talvolta
la faccia piena, talvolta la faccia logica e talvolta quella corporea dell’oggetto
piccolo a. Il termine di parlessere oltrepassa questa dicotomia. Implica in
qualche modo che si tratta dell’insieme del corpo - non come un tutto l’insieme del corporeo che è prelevato e che è considerato come affetto.”
p. 82
406
Jacques-Alain Miller
La Psicoanalisi Nº32
IL CORPO PARLANTE
Pezzi staccati (2004-2005). Pezzi staccati. Introduzione al Seminario
XXIII Il sinthomo, Astrolabio, Roma 2006
Lezione del 1 dicembre 2004 “Lo sgabello è quello che Joyce si
promette di fare affinché gli sopravviva, andando al di là della decomposizione
del corpo. Si tratta di forgiare uno sgabello, e forgiarlo a partire dall’affetto
del corpo (…). È questo lo ‘sgabello’, l’ambizione di Joyce. (…) Si tratta di
fare, con ciò che lo affetta, lui, che non è comparabile con nessuno, con ciò
che affetta il suo corpo, con ciò che costituisce evento nel suo corpo, si tratta
di fare un’eternità. È la questione che pone il Seminario Il sinthomo: come fare
dell’evento qualcosa che somigli a questo sogno d’eternità, cioè che resti lì
quando non si è più. A partire da questo evento singolare, da questo trauma
contingente e che non somiglia a quello di nessuno, da questo evento che
colpisce nella sua singolarità ciascun parlessere, come estrarne qualcosa che
può valere come una lezione, una lezione che varrà per gli altri e da cui essi
impareranno, in futuro e potenzialmente all’infinito?” p. 39-40
“Sublimazione è un termine sublime. È ciò che Lacan sminuisce chiamandola
‘sgabello’. Ci si alza, ci si monta… la testa. Esso dà il Bello, il Vero, il Buono.
(…) Soprattutto il bello che è nello sgabello. Lacan lo fa vedere scrivendo
S.K.beau. Questo è il nuovo nome della sublimazione! Non è bello? Bisogna che
sia bello. Bisogna farne un oggetto d’arte.
Lo sgabello, dice con precisione Lacan in Joyce il Sintomo, è condizionato dal
fatto che l’uomo ha un corpo, un corpo in cui vi sono degli eventi.”
p. 76-77
L’inconscio reale (2006-2007)
La Psicoanalisi Nº43 e Nº44
Lezione del 17 gennaio 2007 “(…) nel rovesciamento
dell’insegnamento di Lacan (…) l’Altro è destituito e il soggetto è pensato
a partire dal reale, dal simbolico e dall’immaginario come tre consistenze.
Ho torto nel dire il soggetto. In effetti, non è più il soggetto del significante,
nemmeno il soggetto dell’identificazione, ma l’essere umano, che Lacan qualifica
come parlessere. Ecco cosa resta del primato del linguaggio che Lacan aveva
installato precedentemente nella psicoanalisi.” p. 221-222
“L’Un-corpo, dice Lacan, è la ‘sola consistenza’ del parlessere.” p.
223
“Quando c’è rapporto sessuale, non può che essere in rapporto a una alterità
interna alla struttura del parlessere.” p. 228
407
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“Mentre nel quadro di una psicoanalisi consacrata al simbolico l’assenza del
rapporto sessuale fa scandalo – del resto Lacan stesso deve spiegarselo, per
esempio nel testo Lo Stordito – non è più la stessa cosa nel suo Seminario Il
Sinthomo, dove si tratta piuttosto di sapere quali sono le condizioni precarie che
permettano di stabilire il rapporto sessuale, vale a dire a condizione di porre
un’alterità interna alla struttura tripartita o quadripartita del parlessere.”
p. 229
La Psicoanalisi Nº49
Lezione del 2 maggio 2007 “L’essere umano – les trumains,
come Lacan lo scrive all’epoca – è condannato al sogno. Ah! Ce n’è da dire sui
trumains rispetto a quello che Lacan chiamava il parlessere. La differenza tra
parlessere e trumains è, innanzitutto, di aver scelto il plurale, di aver privilegiato
il plurale.” p. 199
L’essere e l’Uno (2010-2011)
La psicoanalisi Nº51
Lezione del 9 febbraio 2011 “La virilità è quindi per eccellenza
dell’ordine del fantasma, il che vuol dire che riposa sul colmare, con piccolo a,
la castrazione fondamentale, denotata da Lacan (-phi), di ogni essere parlante. È
questa la virilità.” p. 266
“C’è dunque l’idea che si possa destituire il soggetto del suo fantasma fallico, che
sia possibile – per immaginarlo semplicemente – fargli dire sì alla femminilità.
Lo si può far rinunciare a questo rifiuto della femminilità che lo tocca, che
colpisce l’essere parlante e non soltanto l’uomo.” p. 266
La Psicoanalisi Nº52
Lezione del 16 marzo 2011 “Evidentemente è opportuno che ci
si interroghi sul punto di sapere se il discorso della scienza non sia per caso
animato dalla pulsione di morte. Se al suo acme, non sarebbe forse fatto per
abolire l’umanità, cioè riassorbire l’essere parlante all’Uno, riassorbire l’essere
parlante-parlato, l’essere in preda al significante Uno.” p. 176
“La supposizione del soggetto è una supposizione ontologica, che gli si
conferisca il senso della mancanza d’essere, del soggetto barrato, o che si parli di
408
Jacques-Alain Miller
“Lacan (…) può dunque dire che tutto ciò che sussiste del rapporto sessuale,
nella solitudine del parlessere, è la geometria del guanto rovesciato, cioè ciò che
non è dell’ordine dello spazio concentrico istantaneo della visione.” p. 229
IL CORPO PARLANTE
essere parlante, di parlessere. Lacan, quando utilizza i termini di essere parlante e
di parlessere, non manca mai di dire che c’è essere solo per il fatto di parlare.”
p. 178
III /b. Altri testi
Produrre il soggetto (1983), in I paradigmi del godimento, Astrolabio,
Roma, 2001
“(…) il soggetto come essere parlante sorge da niente è una creatura di
significante. Ma è anche vero, in secondo luogo, che il soggetto deve emergere
dal vivente, che sorge dal suo statuto primario di oggetto. Il soggetto deve
emergere dalla causa del desiderio della madre e almeno dalla chiacchiera di cui
questo desiderio era costituito.” p. 167
La Psicoanalisi Nº2
Riflessioni sul fenomeno psicosomatico (1987)
“Lacan, al contrario, considera come specifico dell’essere parlante (messo in
valore soprattutto dall’isterico) che l’organismo va al di là dei limiti del corpo.
Perché? Perché l’organismo include, a titolo di ciò che introduce come organo, la
libido stessa, ma la libido è al di fuori del corpo, come sono al di fuori del corpo
gli oggetti a.” p. 70
Il Tempo e il sintomo (1997), in Introduzione alla clinica lacaniana
(2006), Astrolabio, Roma, 2012
“Quando si tratta del sintomo come modo di godere, parlare di ‘soggetto’ è un
abuso del linguaggio. Per questa ragione, nell’ultimo insegnamento, incontriamo
l’espressione ‘parlessere’, che ha più estensione, più corpo, di quanto non ne
abbia il soggetto vuoto del significante. Lacan parla qui del corpo parlante e del
suo mistero. Siamo in un’ottica diversa da quella del soggetto del significante,
per questo il soggetto-supposto-sapere non rientra in questa problematica.”
p. 312
L’osso di un’analisi (1998), Franco Angeli, Milano, 2001
“Se la terra parla, se dice sì quando cammino e no quando trovo la pietra,
se parla, è perché in mezzo alla terra c’è un essere parlante che si mette a
camminare e trova una pietra. Non ci sarebbe cammino né pietra senza esseri
parlanti. Se non ci fosse essere parlante per chi parlerebbe la pietra? Qual è il
cammino dell’essere parlante?
409
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“Il soggetto di cui si tratta non è quello che all’inizio del seminario ho chiamato
essere parlante. Il poeta è l’essere parlante nel suo statuto eminente. Il soggetto è
prima poema che poeta, così lo indica Lacan, il soggetto è un essere parlato.”
p. 24
“(…) il significante è la causa del godimento e questo è esattamente ciò che
Lacan introduce a partire dal suo seminario Donc: che il corpo dell’essere
parlante è, al contrario, vivificato di godimento da parte del significante, di più
di godere.” p. 42
“(…) non possiamo più parlare semplicemente del soggetto, dobbiamo risituarlo
come un effetto prodotto all’interno di ciò che Lacan chiama essere parlante,
parlessere, una cosa che va oltre il soggetto barrato, che lo travalica perché
include il corpo. Il concetto di parlessere include il corpo. Che cosa ha detto
Lacan allora? Ha detto che bisogna necessariamente cambiare la definizione del
soggetto e necessariamente si deve cambiare la definizione del grande Altro ed è
questo che io chiamo partner-sintomo, è il correlato del parlessere.
Ho usato l’espressione partner-sintomo servendomi di termini che erano in
Lacan e mi sembra che l’accoppiamento del parlessere e del partner-sintomo è ciò
che abbiamo precisato per pensare alla fine dell’analisi in altri termini, in termini
più realistici.” p. 44
“Nel procedimento che facciamo in questi giorni, tutta questa costruzione
risulta come un vero ostacolo epistemologico che impedisce di concepire il
sintomo del parlessere.” p. 46
È un’altra concezione del potere del significante. Non è quella che mortifica il
corpo, non quella che lo ritaglia appena, non solo quella che libera da esso il più
di godere ma quella che determina il regime del godimento dell’essere parlante.
È il significante in particolare a sostenere il principio di piacere. Il principio di
piacere nel parlessere non è lo stesso che nell’animale. Il Lustprinzip ha bisogno
del significante, necessita della parola. Il godimento di cui si tratta, per questa
stessa ragione, non è solo godimento del corpo, è anche il godimento del
linguaggio nella misura in cui il soggetto ha un corpo. Il godimento del corpo
è il godimento di un corpo abitato da un soggetto del significante, vale a dire,
non è un godimento grezzo, non è un godimento che precede il significante. Nel
410
Jacques-Alain Miller
L’essere parlante ha molti cammini, va e viene, non si ferma in un luogo, o se lo
fa, è per poco tempo. (…) Ogni essere parlante possiede un cammino essenziale,
unico, che percorre mentre continua a essere parlante, è il cammino della sua
parola.” p. 17-18
IL CORPO PARLANTE
parlessere il godimento del corpo si vincola al significante e appare come la sua
conseguenza.” p. 49
“È necessario leggere il fantasma di Un bambino viene picchiato; questo fantasma
non è l’annullamento del godimento nella direzione del soggetto barrato $
o di (-fi). Si tratta della produzione di godimento attraverso il significante,
quindi si presuppone che il godimento del corpo nel parlessere sia segnato dal
significante. Nella specie del parlessere, il godere di un corpo finisce sempre con
colpire un corpo, rovinarlo in qualche maniera, scontrarsi con esso, e persino
distruggerlo. (…) Lacan fa entrare il corpo nella psicoanalisi nello stesso tempo
in cui fa entrare il godimento della parola. Il parlessere gode quando parla. La
simbolizzazione non solo non annulla il godimento ma lo sostiene.” p. 49
“(…) il soggetto è un elemento sempre mortificato che (…) Lacan ha definito
come mancanza ad essere: è in questa messa in discussione che si fa entrare
il corpo vivo nella psicoanalisi: sostituendo il termine soggetto con quello di
parlessere, che è il contrario di mancanza ad essere. Il parlessere è il soggetto più il
corpo, è il soggetto più la sostanza che gode.” p. 49-50
“il parlessere ha anche un corpo sessuato ed è per questo che, necessariamente,
si pone la questione della relazione sessuale, questione che era oscurata nella
prospettiva della relazione del soggetto con l’Altro.” p. 50
“Che cosa significa, allora, il termine partner-sintomo?Nella definizione che
propongo oggi significa quanto segue: la relazione della coppia presuppone che
l’Altro si faccia sintomo del parlessere, cioè, risulti un mezzo di godimento.”
p. 51
“(…) la promozione del corpo in Lacan non annulla assolutamente l’Altro
come luogo del significante, ma semplicemente mette in rilievo il fatto che il
significante stesso è un mezzo di godimento. Di qui prende senso la formula:
non c’è rapporto sessuale, ammesso che voglia dire che il parlessere come essere
sessuato non fa coppia a livello del significante puro, bensì a livello del
godimento, e che questa relazione è sempre sintomatica.” p. 52
L’angoscia. Introduzione al Seminario X di Jacques Lacan (2004),
Quodlibet, Macerata, 2006
È per questo che Lacan, anche se si allontana dai punti di vista del Seminario
L’angoscia e anche se non troviamo più questo posto prioritario dell’angoscia nel
seguito del suo insegnamento, riafferma nondimeno nel Seminario Il rovescio
della psicoanalisi il carattere principale dell’affetto d’angoscia, il carattere di un
affetto intorno al quale tutto si ordina, e che è anche l’affetto unico, l’affetto per
411
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
La Psicoanalisi Nº37, Introduzione all’erotica del tempo. 2004
“Ed è per questo che Lacan ha dovuto aggiungere allo statuto del soggetto quello
di parlessere. Il parlessere non è il soggetto: è il corpo come parlante, il corpo che
è la sede di un soggetto e la sede del significante, ma che ha la sua consistenza, la
sua durata e il suo luogo proprio.” p. 45
La Psicoanalisi Nº38, Una fantasia. 2004
“(…) l’inconscio si sfianca di lavoro, mentre il parlessere lacaniano per niente.
Lacan voleva che il parlessere lacaniano sostituisse l’inconscio freudiano. (…) Il
parlessere lacaniano non lavora. Il parlessere lacaniano, piuttosto, brulica, bolle a
fuoco lento, infetta. Ha piuttosto lo stile del parassita.” p. 33-34
La Psicoanalisi Nº41, Le lezioni sul sinthomo. 2006
“(…) il sintomo avrà il soggetto, il sinthomo avrà il parlessere. Il parlessere,
in effetti, ha una base molto più ampia del soggetto, poiché il soggetto è una
funzione puntuale ed evanescente, mentre nel parlessere includiamo quell’essere
che fino a ora gli dava il fantasma.” p. 24
“Il soggetto è mancanza-a-essere, mentre il parlessere, come indica il suo nome, è
un essere, anche se esso lo trae solo dalla parola. (…) La differenza tra soggetto e
parlessere è che il parlessere ha un corpo, che si definisce in quanto ha un corpo
come condizione sine qua non per godere.” p. 25
La Psicoanalisi Nº47 e Nº48, La passe del parlessere. 2010
“Semplicemente (…) non si tratta più della passe del soggetto del sapere, è
la passe del parlessere. E la passe del parlessere non è la testimonianza di una
riuscita, è la testimonianza di un certo modo di fallire.” p. 27
Campo Freudiano
eccellenza, in quanto è l’affetto che connota la produzione dell’oggetto a, cioè
l’effetto principale del linguaggio sul godimento. È per questo che egli può dire:
‘D’affetto ce n’è solo uno, correlato al prodotto della cattura dell’essere parlante
in un discorso.” p. 114
IL CORPO PARLANTE
4.
Campo Freudiano
IV /a. Attualità Lacaniana
Attualità Lacaniana Nº12, Il corpo fuori posto, 2010 (pubblicazione
on line)
Carlo Viganò, Il tempo nella cura
“In questa logica tra inizio e fine si producono una serie di rovesciamenti
successivi, dal sintomo al fantasma… e ritorno, meglio: ad una nuova scrittura
del sintomo e così via. Sulla ri-scrittura del sintomo si sono arrestate le analisi di
Freud, tranne quella dell’uomo dei lupi, dove un nuovo analista ha dato un altro
nome al sintomo. Oggi diremmo: dalla nominazione della lettera di godimento
(sinthomo) al sintomo come supplenza del N-d-P.” p. 150
Attualità Lacaniana Nº14, Sintomoscrittura. Alpes, Roma, 2012
Carlo Viganò, L’analista nel mercato di Psiche
“Lacan si è opposto a questa tendenza a sostituite il padre con l’Uno del
management, e questo l’ha condotto a scrivere il nodo come passaggio obbligato
attraverso la separazione. (…) Questa scrittura lo porta a scoprire un’altra faccia
del sintomo, il sinthomo, che riporta l’accento sulla sua origine greca.
(…) Se dunque analizzare è il compito dell’analista, la sua causa deve
essere quella di accogliere nel transfert il sinthomo, prodotto dal discorso
contemporaneo e a partire di lì mettere al lavoro la parola su ciò a cui serve, fino
ad appassionare il soggetto ad un inedito lavoro di rimozione simbolica, cioè
secondaria.È il rovescio dell’interpretazione, perché oggi l’analista non può più
essere il nostalgico del daquino, del sintomo-verità.” p. 14-15
Attualità Lacaniana Nº15, Autismo. Spazi d’invenzione. Alpes, Roma,
2012
412
413
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
“L’effetto godimento lo sorprende facendo emergere che in quel che egli dice,
mentre parla, il godimento ‘parla’ a sua volta (…), c’è un ‘non vuole dire niente’
del godimento stesso. L’effetto risonanza del jouis-sance, godi senso, apre, al di là,
al passaggio dal voler dire al non vuole dire niente del godimento.”
p. 156
Attualità Lacaniana Nº18, Sublimazione e perversione, Alpes, Roma,
2014
Adone Brandalise, Erminia Macola, La sublimazione difficile
“La sublimazione che portava prima alla creazione artistica assomiglia ora a una
formazione di compromesso con la sua parte leggibile e quella enigmatica, un
sintomo vero e proprio, la cui specialità è davvero sorprendente: è capace di
alimentarsi d’arte, di perizia intellettuale, addirittura di purezza poetica che si
presenta nelle forme delle più importanti riuscite artistiche del momento.
IV /b. La Psicoanalisi
La Psicoanalisi Nº41, Astrolabio, Roma 2007
Maurizio Mazzotti, Ciò che fonda la nostra politica del sintomo
“Il sintomo, per Lacan, sta lì a indicare che non c’è un rapporto conveniente con
la pulsione, un rapporto naturale, equilibrato, ma che nel godimento c’è eccesso,
per struttura. La lezione fondamentale che ricaviamo è quindi che per l’essere
parlante non c’è modo di rapportarsi al godimento che non sia sintomo o che
non sia sintomatizzato.” p. 75
Carmen Cuñat, Fare come il sintomo
“(…) il sintomo ha solo una finalità e una politica, quella di ottenere un potere
mettendo al riparo al suo interno il godimento dell’essere parlante.” p. 111
Fe Lacruz, La musica dell’essere
Attualità Lacaniana Nº19, Sugli Altri Scritti di Lacan, Alpes, Roma,
2015
“Con Lacan sappiamo che la posizione sessuata non si costruisce a partire dalle
identificazioni, ma che la sua chiave sta nella posizione rispetto al godimento,
vale a dire nel situarsi da un alto o dall’altro delle formule della sessuazione. È a
partire da lì che il parlessere dovrà scegliere un partner-sintomo, ed eterosessuale
è chi è capace di affrontare l’infinitezza del godimento della posizione
femminile.” p. 179
Paola Francesconi, L’a-psicologia di Lacan
Domenico Cosenza, Psicoanalisi e monosintomaticità
“Già nel Discorso di Roma avevamo visto che egli definiva il simbolico, che per la
psicologia è opposto come res cogitans al corpo, come ‘corpo sottile, ma corpo’.
Già il simbolico lì si corporeizza, e ciò anticiperà l’incorporazione, il farsi corpo
del linguaggio nel concetto di lalingua, e di tutto ciò che colpisce l’essere, sì,
ma parlante, il parlessere, e colpendolo vi produce affetti come effetti dell’azione
corporeizzante del simbolico.” p. 44
“Questo ci conduce ad affermare che nel lavoro analitico con le nuove forme
del sintomo, occorre permettere al soggetto, solitamente attraverso un lungo
lavoro preliminare, una riapertura dell’inconscio e della struttura simbolicoevocativa della parola, un’articolazione del transfert simbolico. E ciò proprio
per potergli permettere di accedere, nel corso della cura, a isolare la struttura
reale della parola come parassita ineliminabile, fuori senso, che abita il corpo del
parlessere.” p. 206
Dice bene Lacan quando mostra che un sintomo così fatto diventa sinthomo,
sant’uomo, esposto sul piedistallo dell’opera d’arte (…)” p. 29
Maurizio Mazzotti, Verso l’inconscio svista
“L’inconscio come svista è il frutto del ‘moterialisme’ e della sua presa equivoca
sull’inconscio.È quel che fa sì che (…) ciascun parlessere trovi di che sostenere
quel che per lui è il sinthomo. Ecco dunque perché Jacques-Alain Miller non
ha esitato a definire la svista come una vera e propria categoria clinica, la ‘micro
unità’ che include le formazioni dell’inconscio in seno alla ‘macro unità’ che è il
sinthomo. Un modo preciso di indicare il legame tra la lingua e il corpo.”
p. 6
414
Campo Freudiano
Maurizio Mazzotti, Tra equivoco e corpo
IL CORPO PARLANTE
La Psicoanalisi Nº50, Astrolabio, Roma, 2011
Carlo Viganò, Sinthomo e transfert nell’anoressia
“Il parlessere vive sintomaticamente, il sintomo cioè costituisce la via obbligata
perché il parlessere possa ‘godere’ della vita.” p. 43
La Psicoanalisi Nº53 e Nº54, Astrolabio, Roma, 2013
Antonio Di Ciaccia, Verso il seminario Ancora
415
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Pierre Skriabine, Un caso clinico di inibizione: Isa e il nodo borromeo
“A che cosa risponde l’angoscia e che cos’è che le risponde? L’angoscia parte
da questo impossibile, da questo reale e dà la sua significazione fallica al solo
godimento permesso all’essere parlante, il godimento fallico.” p. 302
La Psicoanalisi Nº56 e Nº57, Astrolabio, Roma, 2015
Paola Francesconi, L’oggetto immateriale, tra vuoto e mancanza
“Si sa che, a differenza di Freud che aveva stabilito la lista degli oggetti pulsionali
prelevandoli dalla realtà del corpo, Lacan li isola invece nella loro immaterialità,
primi tra tutti lo sguardo e la voce, cui aggrega il seno e le feci. Per Lacan, e lo si
capisce sempre di più nell’avanzamento del suo insegnamento, l’oggetto perde
la sua materialità per acquisire una sostanza immateriale, per così dire, fatta di
consistenza logica e, cosa che qui ci interessa forse maggiormente, di linguaggio.
Ma un linguaggio non significabile, non nel suo significare, ma nel puro dire:
moterialità, la chiama Lacan, dell’oggetto.” p. 134
IV /c. Scilicet
Scilicet, Del Nome-del-Padre, 2006, pubblicazione in formato digitale
Samuel Basz, Nominazione
“La generalizzazione del Nome-del-Padre, il luogo del parlessere che predomina
su quello del soggetto del significante, e l’accento messo sullo spessore
prestrutturale de lalingua a spese dell’efficacia simbolica propria della struttura
linguistica, articolano il Nome-del-Padre e la nominazione. Questa articolazione
produce un cambiamento decisivo nella concezione delle psicosi, apre il
cammino a una clinica borromea e ristruttura i fondamenti per una teoria della
fine dell’analisi. Inoltre rinnova la prospettiva psicoanalitica sulla politica.”
p. 235
Jean-Pierre Deffieux, Supplenza 1
“La supplenza si generalizza nel senso che ogni umano non è che un parlessere
in potenza. Si deve partire, allora, dalla disgiunzione che fonda il nodo e
considerare i tre cerchi del reale, del simbolico e dell’immaginario in quanto
giocano la loro partita da soli, mentre la supplenza viene a far tenere insieme i
416
Campo Freudiano
“Per l’essere umano, per il fatto stesso di parlare, il godimento come tale non è
accessibile, al suo posto viene un godimento sostitutivo, ad esempio quello della
parola. Per tutti gli esseri parlanti è così.” p. 30
IL CORPO PARLANTE
tre cerchi con un quarto cerchio. Jacques-Alain Miller, nel suo corso dell’anno
2004-2005, Pièces détachées, mette in valore il fatto che l’uomo è un composito,
fatto di tre elementi disparati, e che solo l’annodamento sintomatico gli dà
sostanza. Perché l’uomo trovi la sua sostanza di parlessere, ci vuole una supplenza
sintomatica che faccia tenere i tre cerchi. Il nome del padre dell’Edipo, che è
sintomo, fa supplenza, ma è solo uno tra molti altri. Joyce ci fornisce l’esempio
di un altro modo di supplenza sinthomatica attraverso la scrittura, che non passa
tramite il Nome del padre dell’Edipo.” p. 417
Scilicet, Gli oggetti a nell’esperienza analitica. Quodlibet, Macerata,
2008
Geert Hoornaert, Lembi di reale
“Il lembo di reale è da ottenere anche nella clinica. L’interpretazione vi gioca un
ruolo centrale. Non già l’interpretazione che lega e mette in rapporto, ma quella
che opera un taglio. Il lembo sorge quando il nodo è tranciato, toccando la base
del soggetto come reale. Non già il soggetto in quanto supposto ma in quanto
ex-sistenza, in quanto il suo reale di parlessere ‘è’ l’annodamento stesso.”
p. 196
Jean-Louis Gault, Oggetto in tasca
“Colui che, nel suo linguaggio forte, Lacan chiama qui il folle, è il solo che
possa essere definito autenticamente libero perché non dipende dall’Altro,
né per amare, né per desiderare, né per godere. (…) Tuttavia anche a volersi
padrone nella città del discorso non si sfugge così facilmente al proprio statuto
di parlessere. Ciò che è rigettato dal simbolico fa ritorno nel reale.” p. 256
Sonia Vicente, Organo
“(…) il discorso del capitalista, promettendo che ha la presenza dell’oggetto,
sempre rinnovata, è un mezzo per tamponare la mancanza, fa sì che il parlessere
si spenga davanti all’eccesso.” p. 278
Scilicet, Parvenze e Sintoma, Franco Angeli, Milano 2009
Emilia Cece, Buco e vuoto
“(…) se l’Altro manca di ogni garanzia, il soggetto ricava la sua particolarità
e la sua stoffa dalla consistenza dell’oggetto a. Il parlessere, nel suo rapporto
con l’indicibile della jouissance, è il risultato incerto di una ricercaa che si
snoda intorno al buco, allo stampo vuoto di quella traccia lasciata beante dal
godimento indicibile che lo ha generato.” p. 64
417
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Maurizio Mazzotti, Arte
“Fare un opera con il traumatismo subito dalla lingua, a partire dall’affetto di
un corpo.È questa l’ambizione dell’arte contemporanea, che si traduce nelle
sue forme ? La questione si può porre sulla base di quello che Lacan (…)
definiva l’escabeau, lo sgabello, che al dire di J.-Alain Miller è il nuovo nome
della sublimazione moderna, la nozione nuova di un arte sgabello con cui
sopravvivere al traumatismo del corpo.” p. 26
Discorso dell’isterica, Paola Francesconi
“È ormai il discorso analitico che può restituire l’isterica alla sua verità, l’analista
arriva dove prima essa decorava la faglia del non rapporto sessuale con la sua
clinica lussureggiante, per farle attraversare il piano delle rappresentazioni, in cui
essa si perde e si disorienta per voler fondare universalmente quello che è fatto di
pura sembianza, insieme al fallo, l’essere femminile preteso ‘tutto’.
Campo Freudiano
Scilicet, L’ordine simbolico nel XXI secolo, Alpes, Roma, 2011
IL CORPO PARLANTE
Scilicet, Un reale per il XXI secolo, Alpes, Roma, 2014
Marta Serra Frediani, Evento di corpo
“(…) il termine parlessere (…) indica un al di qua del soggetto, indica l’istante
nel quale l’organismo, il flusso di vita e il significante s’incontrano e si annodano
fissando un modo unico e immutabile di godere del fatto stesso di essere un
vivente. Questo annullamento Lacan lo ha chiamato sinthomo e lo ha definito
come ‘evento di corpo’. (…) È la dimensione accidentale, contingente, ad essere
cruciale nell’evento di corpo.
(…) Se il sinthomo rimane come evento di corpo inaugurale, nulla impedisce
che altri eventi sopravvengano in rottura, in opposizione con questo primo
evento di corpo, producendo effetti più o meno duraturi, delle destabilizzazioni
e dei riannodamenti più o meno complicati. È così che le parole marchiano il
parlessere.
p. 80
Nonostante ciò, il soggetto del XXI secolo è tentato dal discorso che risulta
dall’alleanza tra la scienza e il capitalismo. Discorso che gli promette di poter
sottrarre il suo corpo alla contingenza dell’incontro con le parole, annullando
così l’evento di corpo e riducendo questo a un puro organismo da cui si potrà
estrarre il godimento a proprio piacere, dimenticando che il corpo è più
contenente che contenuto.” p. 70-71
Emilia Cece, Etica
Florencia Dassen, Parlessere
Oggi, il nuovo ordine simbolico ci porta a cogliere una declinazione diversa del
discorso isterico. Il rapporto con la scienza e la pseudoscienza produce dal lato
dell’isterica una solidarietà ambivalente con le nuove frontiere della tecnica.”
“Intollerante rispetto alla versione genitale della psicoanalisi, [Lacan] spinse
verso il rilancio del desiderio, riconoscendo che l’autenticità del parlessere è
nell’essere per la morte.
Dirà che il fallo è di ostacolo al rapporto e che alla parola è affidata ogni spinta
erotica del soggetto, ad un ordine simbolico quindi che non gli appartiene, che
gli è sovraordinato ed al quale non può fare a meno di essere sottoposto, ordine
che lo condurrà ad incontrare la sua condizione di “essere senza verità e senza
coscienza.” p. 100
“Il parlessere, a differenza del soggetto dell’inconscio, include il corpo come
reale e il godimento di questo corpo come godimento della vita. Il parlessere è
parlante ma anche parlato. (…) L’evento pulsionale tocca il limite del linguaggio
e la sua potenza di far significare le parole, esso mette in evidenza l’impossibile
a dire. È in questo punto che l’evento e il ‘saperci fare con’ vanno insieme per il
parlessere; non ci sono in questo caso istruzioni per l’uso. Occorre allora poter
operare con le parole perché qualcosa risuoni dove ciò non vuol dir niente,
semplicemente gode.” p. 153-154
Rose-Paule Vinciguerra, Fine dell’analisi
Antonio Di Ciaccia, Sinthomo madaquin
“Il sintomo, allora, che cosa diventa? Se il sintomo ‘bricolage (…) instancabile’
era effetto del simbolico nel campo del reale, il sinthomo di fine analisi
non misconosce questa fissazione di godimento; esso presuppone il reale al
principio del simbolico. Il sinthomo può allora nominare il modo in cui questo
godimento può essere al tempo stesso bloccato e utilizzato.” p. 121
“Se il sintomo è una metafora del soggetto ed è interpretato nell’ordine del
significante, nel sinthomo, invece, si pone l’accento non già sull’effetto di verità
ma sull’evento di corpo. Muta così la concezione stessa del linguaggio che
non è più unicamente la struttura dell’inconscio, ma più radicalmente diviene
l’‘apparato’ del parlessere che non mira al senso ma al godimento.” p. 214
“[… la claritas è di pertinenza, in San Tommaso, del corpo glorioso. È questa
‘claritas, a cui Joyce sostituisce qualcosa come lo splendore dell’Essere’ che noi
418
419
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
p. 214-215
Scilicet, Il corpo parlante. Sull’inconscio nel XXI secolo, Alpes,
Roma, 2016
Domenico Cosenza, Joyce (sinthomo e sgabello)
“Ma è nel Seminario XXIII, e nello scritto “Joyce il Sintomo”, che più
radicalmente Lacan, nel suo tentativo di andare alla radice dell’inconscio, è
costretto a lasciare la mano di Freud e ad afferrare quella di Joyce. Si tratta
per Lacan di ripensare il fondamento della psicoanalisi ancorandolo non più
al riferimento al padre, centrale nell’inconscio freudiano, ma piuttosto alla
dimensione reale del godimento che attraversa l’essere parlante. È in questo
movimento che il riferimento a Joyce si rivela decisivo per Lacan, nel compiere
il passaggio dall’inconscio freudiano alla dimensione del “parlessere”. (…) Lacan
articola a partire da Joyce una coppia concettuale che è alla base del suo ultimo
insegnamento e si condensa nelle nozioni di sinthomo (sinthome) e di sgabello
(escabeau). Su di esse fonda il basamento della clinica del parlessere, non più
fondata sul Nome-del-Padre ma sul godimento nei suoi modi di annodamento
singolari. Il sinthomo prende per Lacan il posto del sintomo freudiano,
incarnando non più una metafora dotata di senso ma un evento di corpo senza
senso che fa tenuta per il parlessere, che lo tiene insieme”.
IV /d. Libri
AMP, L’ordine simbolico del XXI secolo. Non è più quel che era.
Quali conseguenze per la cura? (edizione italiana a cura di Maurizio
Mazzotti), Alpes, Roma, 2013
Lucia D’Angelo, Un dire che ha degli effetti
“Recentemente ho avuto l’opportunità di presentare un caso di isteria femminile
molto contemporanea che mi ha insegnato circa i limiti dell’interpretazione
edipica oggi. Il caso mi ha portata a una nuova lettura interpretativa orientata
dal sinthomo, che ha permesso il passaggio del soggetto al parlêtre producendo
un nuovo annodamento di reale, simbolico e immaginario. (…) Dalla mia
pratica posso confermare che, a partire dall’ultimo Lacan, l’interpretazione
ha il vantaggio di risultare più operativa e più pragmatica. Perché i soggetti
ipermoderni non reclamano tanto il racconto, ma il cosa fare.” p. 31
420
Campo Freudiano
ritroviamo nel suo sinthomadaquin. (…) Ed è per il tramite di questo sintomo,
chiamato ‘ortodosso’ da Jacques-Alain Miller, che Joyce arriva a elevarsi sullo
sgabello, vale a dire sulla sublimazione in cui consiste la sua opera d’arte.”
IL CORPO PARLANTE
Monica Torres, Ognuno trova la sua interpretazione
“Poiché la verità è non tutta, è necessario compiere dei giri intorno ai detti,
questi giri trovano degli impedimenti e in questi inciampi s’inscrive la relazione
del soggetto (ora parlessere) con il reale del godimento.” p. 41
Marie-Hélène Brousse, La soggettività nell’epoca della scienza
“(…) soltanto un essere parlante, un parlêtre, nell’orizzonte del linguaggio è
implicato dal sesso e dalla morte. Non sono preoccupazioni degli esseri viventi
né degli organismi. Il sesso e la morte sono preoccupazioni soltanto dei parlêtre.”
p. 131-132
AMP, Aggiornamento sul reale, nel XXI secolo (edizione italiana a cura
di Paola Bolgiani), Alpes, Roma 2015
Guy Briole, Arrischiarsi al reale
“Con il parlessere, il trauma è per tutti. È l’incontro, singolare per ciascuno, con
lalingua. L’allentamento dell’annodamento che libera il reale diviene evento
di corpo e lascia il parlessere alle prese con il sentimento di essere ridotto a un
corpo, attraversato da effetti di godimento che lo sconcertano. (…) Cingere
il reale in analisi mescita non soltanto di scuotere la difesa, ma di smontarla;
disfare ciò che di questo godimento si trova preso in altrettanti nodi che il corpo
stringe. Questo allentamento permette di avvicinarsi al fuori senso, laddove la
questione dell’atto non si gioca più intorno all’interpretazione, ovvero non si
appoggia più sulla garanzia che dava il Nome-del-Padre o anche il fantasma.”
p. IX-X
“Con l’inconscio, la molla dell’analisi è l’interpretazione e la verità; con il
parlessere, che si caratterizza per essere corpo parlante, è il godimento.” p.
XI
Anne Lysy, Un torsolo di reale a fine analisi
“L’analisi può dunque condurre ad accerchiare, a stringere quel punto
d’indicibile singolare. Una volta prodotti lo svuotamento e la deconsistenza, essa
produce un ‘c’è’ che si rivela come positività, come godimento irriducibile. Con
questo sintomo – o sinthomo – non ci si identifica, si sa solamente ‘“averci a che
fare’, come diceva Lacan.” p. 55
Dominique Holvoet, La difesa a fior di reale
“La difesa è l’osso che si trova sotto la rimozione, il sassolino nella scarpa
che cosa lo zoppicamento irriducibile del parlessere. Per i soggetti abbonati
all’inconscio, ovvero per i malati di verità, l’analisi si svolge innanzi tutto come
esplorazione dell’inconscio transferale, prendendo appoggio sulla supposizione
421
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Pierre-Gilles Guéguen, Una finestra sul reale del XXI secolo
“Una volta, Jacques-Alain Miller ha scelto di sottolineare il detto lacaniano ‘il
sintomo è risposta del reale’. Era già porre che oltre il fantasma, ciò che noi
abbiamo di più reale è il sintomo. Questo sintomo residuale dell’analisi, Lacan
l’ha chiamato sinthomo. In un certo senso il reale, come l’inconscio per Freud,
non conosce il tempo e resta identico a se stesso mentre il sinthomo, che per un
soggetto fa rispondere il reale, è incorporato nella soggettività della sua epoca.”
p. 196
Jean Francois Cottes, dall’Altro all’Uno e ritorno, in AA.VV., Annali
dell’Istituto freudiano. Edizioni La vita felice, Milano, 2010
“Con il concetto di soggetto, Lacan ricostituisce l’inconscio freudiano
nella psicoanalisi. In un secondo tempo tenterà di reintegrarvi anche la
dimensione della sessualità. È a questo punto che sarà necessario per lui
un altro concetto oltre a quello di soggetto. (…) Il soggetto dell’inconscio
non conosce la differenza del sesso, vi è un solo significante della libido:
ed è il fallo. Ovviamente tutta la questione è di averlo o non averlo e
su questo piano potremmo dire che la differenza esita, ma la differenza
che Lacan ha di mira nel seminario Ancora va ben al di là: vale a dire
che non si riferisce al significante fallico ed è per questo che è necessario
per Lacan introdurre un altro concetto oltre a quello di soggetto, è per
questo che forgia il concetto di parlessere. (…) Così il campo del soggetto
è l’inconscio, mentre il campo del parlessere è il godimento. Ritorniamo,
ora, dopo questo passaggio, sulla questione dell’Altro. Quale è questo
nuovo Altro che è necessario a Lacan, se non è l’Altro simbolico? Ebbene
è l’Altro sesso, è l’Altro che si separa nel campo nel godimento. È nel
campo del godimento che si costituisce un’alterità per il parlessere.”
p. 70-71
422
Campo Freudiano
di sapere dell’Altro. L’inconscio transferale stesso appare allora come una difesaa,
un rivestimento del reale grazie alle finzioni del dire. Ma l’analisi passa attraverso
il rimedio del senso, attraverso l’inconscio transferale, solo per avvicinare meglio
la difesa, l’inconscio reale. (…) Essendo per definizione la difesa inaccessibile
all’interpretazione, J.-A. Miller in Choses de finesse en psychanalyse, sostiene che
si tratta di sconvolgere la difesa, disturbarla, perfino smontarla. Lo smontaggio
della difesa non porta all’incontro con un reale puro. Il reale in gioco qui è un
reale singolare per ciascun parlessere (…)” p. 187
IL CORPO PARLANTE
Marco Focchi, La mancanza e l’eccesso. Antigone, Torino, 2006
“Ecco il punto allora: accanto alla rivelazione del senso del sintomo occorre la
costruzione delle alternative, occorre cioè che il soggetto abbia a disposizione
qualcosa che svolga la stessa funzione del sintomo nel tamponare l’angoscia e
che non sia altrettanto distruttivo. Se, con il senno di poi, volessimo riprendere
l’esempio di Anna O., dovremmo dire che non bastava ritrovare il senso
dell’idrofobia, era necessario anche creare una diga che la proteggesse dal
disgusto senza impedirle di bere. Il sintomo infatti è questo: un modo di godere
dell’inconscio arginando l’angoscia. Si capisce che non sia così facile venirne a
capo in breve.” p. 38
Marco Focchi, Il trucco per guarire. Antigone, Torino, 2010
“L’intervento psicoterapeutico che prende la via della soppressione del sintomo
per aderire all’ideale normativo, si trasforma inevitabilmente in tecnica
rieducativa o di condizionamento. Ci si può muovere in questa prospettiva solo
se si considera che il sintomo non abbia nessuna funzione, che sia una sorta di
errore nel programma, che si tratti semplicemente di correggerlo, di tagliare
un’escrescenza, di riportare sulla strada della razionalità un’interpretazione
sbagliata che il soggetto dà di sé stesso. L’esperienza clinica della psicoanalisi mostra, in effetti, un panorama
completamente diverso, ed evidenzia la funzione che il sintomo ha
nell’economia psichica del soggetto. Il sintomo non è un difetto del sistema,
né l’elemento deragliato da reinserire nel giusto binario o da sopprimere per
ristabilire l’efficienza delle prestazioni d’insieme.” p. 200
Marco Focchi, Il glamour della psicoanalisi. Antigone, Torino, 2012
“Non è la rivelazione della verità a risolvere una struttura sintomatica, perché il
sintomo, nel suo schema essenziale, piuttosto che nascondere una verità, mette
in cifra un godimento. Lacan considera che la verità si può solo mi-dire, si può
dire solo in parte, si può prendere di sbieco, ci si può avvicinare per via allusiva.”
p. 63
Marco Focchi, Sintomi senza inconscio di un’epoca senza desiderio.
Antigone, Torino, 2014
“Lacan proietta invece l’esperienza psicoanalitica verso il fine di
un’identificazione con il sintomo perché, afferma, con il proprio sintomo ci si
sa fare, e perché il sintomo è ciò che ciascuno conosce meglio: il punto di mira
dell’operazione analitica non è cancellare il sintomo ma sapervisi destreggiare.
Questo implica naturalmente una ridefinizione della nozione di sintomo che la
423
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Eric Laurent, La Battaglia dell’Autismo (2012). Quodlibet Studio,
Macerata, 2013
“La scrittura (…) può accogliere tutti i fenomeni che indicano la presa del corpo
nella materialità della lettera. Pensare in questo modo le istanze della lettera ci
permette di affrontare la clinica a partire non solo dal soggetto del significante
ma anche dal parlessere (…)” p. 117
Erminia Macola, Alberto Turolla (a cura), Scenari dell’angoscia,
Borla, Roma 2008
Filiberto Tartaglia, Alberto Turolla, Che paura!? Dialogo fra un
sociologo e uno psicoanalista sulle paure contemporanee. Aracne,
Roma, 2012
Alberto Turolla, Introduzione.
“Ma ancora non basta, non è solo una carenza a livello istintuale rispetto agli
altri animali quella che si manifesta nell’essere umano. C’è una mancanza che lo
caratterizza proprio in quanto diverso da tutti gli altri animali e che lo identifica
per il fatto di essere un parlessere, termine anche questo usato e coniato da
Lacan (…) Dunque possiamo definirci parlesseri dato che non si tratta tanto
o solo di un linguaggio, cioè un insieme di segni, appannaggio anche degli
animali, per comunicare e impostare una vita sociale.” p. 54-55
Alberto Turolla, Non siamo mai soli.
“Potrei dire che in quanto parlessere il soggetto umano non è mai solo.”
p. 173
Alberto Turolla, Ciò che non inganna.
Alfredo Zenoni, Il corpo e il linguaggio nella psicoanalisi (1991).
Mondadori, Milano, 1999
“Dire ‘parl-essere’, come fa Lacan, significa dire che il corpo è affetto dalle
parole, dai significanti, da una dimensione che definiamo simbolica e questo
mondo di significanti è altro rispetto all’organismo vivente che chiamiamo essere
umano.” p.43
“L’essere parlante (ma bisognerebbe forse dire piuttosto ‘essere nel linguaggio’,
essere ‘precablato’ dal linguaggio) (…) è effettivo sin dall’inizio, in quanto
identificazione primordiale che viene a impegnare, alterare e snaturare la
supposta animalità.” p. 40-41
Chiara Mangiarotti, Céline Menghi, Martin Egge, Invenzioni nella
psicosi. Unica Zürn, Vaslav Nijinsky, Glenn Gould. Quodlibet,
Macerata, 2008
“Per l’essere parlante la dimensione dell’Altro è reale sin dalla sua strutturale
presa nel campo della risposta e della domanda, sin dalla sua appartenenza alla
specie umana.” p. 45
Chiara Mangiarotti, Unica Zürn. Una Unica supplenza.
“Solo l’essere parlante riceve un’effettualità fatta di discorso, generato come chi è
“parlato” ancor prima di essere parlante.” p. 58
“Il lavoro dell’artista consiste nel recupero dell’oggetto del fantasma attraverso
l’opera. Se l’oggetto non è estratto in quanto resto della separazione dell’Altro,
come avviene nella psicosi, all’artista è necessario un doppio movimento: prima
se ne deve separare per potersene poi riappropriare.” p. 123
Martin Egge, Glenn Gould. Un dialogo senza parole.
“Nella struttura psicotica, il vuoto manca, l’Altro è onnipresente e l’imperativo
della sua voce può diventare persecutorio. Ecco allora che la musica, ovvero
il canto, proprio l’elemento che Lacan pone in opposizione alla parola che
individua la voce, diventa per Gould l’antidoto all’invasione dell’Altro, un
tentativo, sempre rinnovato, di renderlo innocuo e di separarsene, separandosi
dal mondo.” p. 289
424
Campo Freudiano
distingua da quella medica che ancora si fa sentire nella concezione freudiana.
Passare dall’interpretazione del sintomo all’identificazione con il sintomo vuol
dire riconoscere al sintomo una funzione nell’economia soggettiva che lo rende
non semplicemente il segno di un disturbo da sopprimere ma, estendendo quel
che Freud aveva detto del delirio, un primo tentativo di guarigione. Il sintomo,
in questo senso, è un mezzo che il soggetto utilizza per trarsi d’impaccio dove il
linguaggio scivola, s’intoppa, incorre nell’une-bévue.” p. 43
IL CORPO PARLANTE
IV /e. Altre riviste
Frammenti, Rivista di Psichiatria Nº1 e Nº2, Anno 23, Editorial
Servizio Sanitario Regionale Emilia Romagna- Sede di Ravenna,
Ravenna, 2014
Paola Francesconi, Quel che non è scritto nella biologia
“Alla fine del suo insegnamento Lacan chiamerà l’essere umano il parlessere,
cioè questo mix tra essere e “parl”, cioè parola, significante e lettera, il parlessere
è questo mix tra due cose completamente eterogenee.È dunque evidente lo iato
425
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
Fort-Da, 1, Aprile 2014, Aracne Editrice, Roma, 2014
Maurizio Mazzotti, L’inconscio, dipendenza dal linguaggio
“Il malinteso è la dimensione in cui ci si immerge quando si parla, quella in cui
le parole veicolano un’altro senso rispetto a quanto avevamo intenzione di dire.
Per la legge del malinteso l’inconscio è ciò che sorge dall’equivoco delle parole
(…). Equivoco che non possiamo padroneggiare, perché non possiamo gestire il
modo in cui le parole equivocano tra di loro. Tra un suono e l’altro l’inconscio è
la dimensione in cui l’equivoco è allo zenith; sono fatti di parole malintese (…)
che incidono in una maniera particolare e incalcolabile.” p.119
IV /f. Pubblicazioni on line
Antonio Di Ciaccia, Il transfert nel XXI secolo, in Appunti, 2014
“Se si segue J.-A. Miller nel suo intervento [per il X Congresso dell’AMP] mi
sembra accentuare il termine incarnazione. Nella rapida disamina che J.-A.
Miller fa partendo da Cartesio, egli si sofferma sul termine husserliano di Leib
che, differenziandosi da Körper, ossia dal corpo fisico, ci dà quel corpo umano
vivente che Merleau-Ponty chiama chair, carne. Termine che Lacan riprenderà
quando evoca la carne che porta l’impronta del segno. (…) Non si può passare
sotto silenzio il fatto che il termine Einverleibung, incorporazione o, meglio
ancora, incarnazione, sia un termine propriamente freudiano, utilizzato per
illustrare quel meccanismo fondamentale nella costituzione del soggetto umano
che Freud ha chiamato identificazione (…) Il mistero dell’unione dell’anima e
del corpo secondo Cartesio prende così il volo verso il mistero dell’unione della
parola e del corpo di Lacan. Da qui il termine ‘parlessere’, neologismo atto a dire
questa misteriosa unione.” p. 33
Antonio Di Ciaccia, Il transfert nel XXI secolo
“(…) come poter analizzare quando l’inconscio di Freud viene sostituito
dal parlessere di Lacan? (…) il mistero dell’unione dell’anima e del corpo
secondo Cartesio prende il volo verso il mistero dell’unione della parola e del
corpo di Lacan. Da qui il termine ‘parlessere’, neologismo atto a dire questa
426
Campo Freudiano
tra l’una e l’altra, non tutto l’essere passa nel linguaggio, cosa che la scienza non
capisce perché punta proprio a quello, né tutto il linguaggio passa nell’essere:
non è possibile modellarci secondo il codice genetico preferito. Ora ci sono
anche questi deliri, quando si fanno i figli in provetta c’è chi delira sul fatto che
si possa manipolare il gene e far sì che il figlio risponda di più a un certo ideale
materno.” p. 14
IL CORPO PARLANTE
misteriosa unione. (…) È in tal modo che uno psicoanalista si adopererà
affiche l’analizzante possa attraversare il fiume e far sì che il parlessere, il corpo
parlante, si accordi con i suoi due godimenti: il godimento della parola,
quello che presiede all’instaurazione ma anche alla castrazione dello sgabello –
scabeaustration, scabellostrazione, come dice carinamente Lacan – e godimento
del corpo, il quale sostiene il sinthomo”.
Sito Slp http://www.slp-cf.it/forum/-/message_boards/view_message/456769
Domenico Cosenza, Avere un corpo che parla. Emergenze del corpo
nell’esperienza psicoanalitica. Presentazione del XIII Convegno della Scuola
Lacaniana di Psicoanalisi
“Entrambi questi aspetti, il senso inconscio con la soddisfazione che veicola
(godi-senso o godimento della parola) e il godimento del corpo al di là del
senso, riguardano l’essenza della scoperta di Freud ed il suo modo inaudito di
ripensare nella clinica psicoanalitica il funzionamento del corpo. Pensare il corpo
come pulsione (Trieb), come spinta libidica irriducibile al bisogno e che si situa
alla radice del desiderio del soggetto, è la sovversione introdotta da Freud nel
modo di pensare il funzionamento del corpo dell’essere umano. Ciò che Lacan,
nel suo ultimo insegnamento, chiamerà ‘parlessere’. (…)
Per questo Lacan, parlando del corpo non più solo come simbolico ma come
corpo vivente, introdurrà nel Seminario Ancora la formula del corpo come
‘sostanza godente’. È la struttura stessa dell’inconscio a venire riarticolata alla
radice, a partire dalla riformulazione che ne trasforma lo statuto, da inconscio
strutturato come un linguaggio a inconscio come sostanza godente: ‘L’inconscio
è che l’essere, parlando, gode, e, aggiungo, non vuole saperne di più’.
Come ci ha ricordato Jacques-Alain Miller recentemente, non si tratterà
dell’ultima parola di Lacan al riguardo, poiché giungerà pochi anni dopo,
nello scritto Joyce il sintomo, a rinunciare alla nozione stessa di inconscio
per preferirgli quella di parlessere (parlêtre), marcando ulteriormente in tale
passaggio la propria distanza da Freud”.
Sito SLP: http://www.slp-cf.it/attivita/-/articolo/56/345608/TEMACONVEGNO-RAVENNA-2014#.VpEGyrbhCog
Emmanuelle Borgnis Desbordes, La Terza. Dal sintomo al sinthomo
“Il partner del parlessere (non dice più ‘soggetto dell’inconscio’, ma ‘parlessere’)
è un corpo che si gode (corpo parlante). Mentre l’insegnamento di Lacan si
orientava nel fondamento del soggetto dell’inconscio con il significante e le sue
combinatorie, ora, invece, Lacan prende la via del corpo e della sua lalingua per
427
X Congresso de la AMP, Rio de Janeiro 2016
A partire dal parlessere l’essere si trova in ciò che è stretto dal nodo, intorno
all’oggetto a. L’annodamento dei tre registri RSI è per Lacan la sola verità che
valga, quella dell’essere, ‘verità’ non nel senso di ‘verità ultima’ ma di verità
singolare, che è quella dell’essere. Il nodo è l’essere. (…)
Il parlessere reintroduce la dimensione della pulsione nel verbo, laddove il
soggetto dell’inconscio e il godimento sono in esilio reciproco, separati. (…)
L’ultimo insegnamento di Lacan con lalangue e il parlessere decide sulla questione
freudiana della divisione (Spaltung). È un rovesciamento di prospettiva dove il
reale del godimento è posto innanzitutto nella singolarità in cui si intrecciano il
vivente e il verbo. (…)
Così, la clinica del parlessere dà alla cura analitica la sua dimensione d’esperienza
inventiva. L’incidenza clinica è nota, la clinica lacaniana del parlessere determina
un’esperienza che apre per ogni soggetto a un’etica della responsabilità del suo
modo singolare di godimento”.
Campo Freudiano
porvi le assise del suo parlessere: il soggetto è parlato ma, soprattutto, parlante
attraverso un corpo che mobilita il suo essere di godimento. (…)
IL CORPO PARLANTE
Blog Istituto freudiano http://istitutofreudiano.blogspot.it/2015/05/seminariodel-11-aprile-2015-docente.html
Maria Laura Tkach, Dal non-senso al non-senso, con un altro annodamento,
Appunti, 2015 (pubblicazione on line)
“Avere un corpo e, in più, che esso parli, non sono cose per nulla scontate, per
questo essere che è un parlessere. Un corpo non è fatto fondamentalmente per
godere, come ha indicato Lacan più volte? Pensare che esso parli implica, a mio
avviso, un capovolgimento completo della struttura del soggetto, così come
siamo abituati a pensarla a partire da Freud e con Lacan, fino al Seminario 20.
Un corpo è parlato, un corpo dà al soggetto un’immagine sulla quale
appoggiare il proprio Io, un corpo lo si gode, ma come dimostrare che un corpo
possa parlare? (…)
Il linguaggio, le parole (che non sono parole per quell’essere, ma puro
troumatisme di non-senso), colpiscono la carne, sulla quale delle lettere
s’imprimono. Ciò crea dei traumatismi, ma allo stesso tempo esse segnano delle
piste significanti necessarie al parlessere. Con quelle lettere, percorrendo quelle
piste, egli troverà i propri modi per farli divenire un dire, fatto di parole, ma
anche di eventi di corpo.” p. 16
428
429
And so your Painter, whichever school it is,
attends according to circumstances, to the quality of the speakers,
and the nature of things that are spoken.
Xth Congress of the WAP
25th to 28th of April of 2016, Rio de Janeiro
Leonardo da Vinci, Treatise on Painting
Speaking-biblio is a research tool based on a choice of precise quotations that can help to orient
our reading, from Freud to the most contemporary of authors who are interested in the speaking
body. A bibliography for explorers, as Jacques-Alain Miller says in his presentation of the theme.
Teams, set up in the five languages most spoken in the Freudian Field, have taken the signifier
“speaking being” (parlêtre) as their common compass for research.
Each team will be responsible for an extension of the articulation “speaking being” with other
signifiers they come across in the course of the research: Body, RSI, Sinthome, Unconscious,
Stepladder (Escabeau), etc.
Bibliospeaking
THE SPEAKING BODY
On the unconscious in the 21st Century
The languages will be differentiated by colour, extracting a touch of real that is proper to each.
The flipbook format was chosen for its interactive potential, and for being a support that makes
it possible to singularise the path each one takes with the material. With research by author or by
word, and the possibility to email the selection, it is accessible on smartphones, Ipads, or on the
website. Once downloaded, the book speaks from all sides.
Up until the congress, the bibliographic research will be published twice.
The team responsible for each language will be noted in its colour.
We thank our colleagues who are named here, who come from all the Schools of the WAP, for
their readiness to be part of this voyage.
Marcela Antelo
[Editor]
Translation: Natalie Wulfing
* [http://www.gutenberg.org/files/46915/46915-h/46915-h.htm] [TN: uncertain translation]
430
431
THE SPEAKING BODY
EDITORIAL COLLECTIVE FIRST TIME
Editors: Aleksandra Wagner and Maria Cristina Aguirre
David Ferraro (Écrits)
Samya Seth (The Seminars)
Ellyn Altman (My Teaching)
Isabel Barata Adler (Almanac)
Fred Baitinger (Analysis and Television)
Azeen Khan (Bulletin NLS and The Later Lacan)
Cyrus Saint–Amand Poliakoff (Culture/Clinic)
Pamela King (Hurly–Burly)
Josefina Ayerza, John Wallace and Samya Seth (Lacanian Ink)
Florencia F. C. Shanahan, Tom Ryan, Azeen Khan, Isabel Barata Adler (Psychoanalytical Notebooks)
Isabel Aguirre.
What’s in a name?
That is what we ask ourselves in childhood
when we write the name
that we are told is ours.
James Joyce
Editorial First Time
The following abbreviations have been chosen to assist the reader:
Books
[SE] – Sigmund Freud, The Standard Edition Of The Complete Psychological Works of Sigmund Freud. London: The
Hogarth Press.
[É] – Jacques Lacan, Écrits. Trans.: B. Fink. New York: Norton, 2006.
[S. XI] – Jacques Lacan, The Seminar Book XI, The Four Fundamental Concepts of Psychoanalysis. Trans.: A. Sheridan.
London: The Hogarth Press, 1977.
[S. XVII] – Jacques Lacan, The Seminar Book XVII, The Other Side of Psychoanalysis. Trans.: R. Grigg. New York: Norton,
2007.
[S. XX] – Jacques Lacan, The Seminar Book XX, Encore. Trans.: B. Fink. New York: Norton, 1999.
[MT] – Jacques Lacan, My Teaching. Trans.: D. Macey. New York: Verso, 2008.
[TV] – Jacques Lacan, Television. Trans.: D. Hollier, R. Krauss and A. Michelson. New York: Norton, 1990.
[LL] – Veronique Voruz and Bogdan Wolf, Eds. The Later Lacan: An Introduction. Albany: SUNY Press, 2007.
Journals
[A] – Almanac of Psychoanalysis: Publication of the G.I.E.P. (Group Israelienne de l’Ecole Europeenne).
[An] – Analysis: Australian Center for Psychoanalysis.
[B] – Bulletin of the NLS (New Lacanian School of Psychoanalysis).
In his 2014 guideline for the 10th Congress of the World Association of Psychoanalysis,
Jacques-Alain Miller proposed an engagement with a new word for the Unconscious
of the 21st Century. His proposal was that we take up Lacan’s neologism –parlêtre/
speaking-being– as a compass to help us deal with an other symbolic and an other real
order.
This compilation follows the Bibliohablante’s principles, especially regarding the
references in Sigmund Freud’s work. We also adopted the Bibliohablante’s grouping
of salient concepts for Jacques Lacan and Jacques-Alain Miller: parlêtre, unconscious,
speaking-body, sinthome and escabeau.
Given that the work of Jacques Lacan and Jacques-Alain Miller is only slowly approaching
‘standard’ English translation, we used only those translations printed in books
and journals. Whenever possible, we have included the date of original presentation
of the work–in order to provoke more thinking about the politics of translation and
dissemination of ideas.
A tool and a teaser, the Bibliospeaking is far from complete. It invites the reader to
integrate a variety of concepts. We hope that it will be useful not only in preparation for
the Congress, but that it will serve anyone interested in clinical and theoreotical research
inspired by the lineage Sigmund Freud/ Jacques Lacan/ Jacques-Alain Miller.
[C/C] – Culture/Clinic, Minneapolis: University of Minnesota Press, 2013.
[HB] – Hurly–Burly: The International Lacanian Journal of Psychoanalysis.
[LI] – Lacanian Ink.
[PN] – Psychoanalytical Notebooks: The London Society of the New Lacanian School.
432
Maria Cristina Aguirre
[Bibliospeaking Coordinator]
433
THE SPEAKING BODY
EDITORIAL COLLECTIVE SECOND TIME
Editors: Aleksandra Wagner and Maria Cristina Aguirre
Maria Cristina Aguirre (Serge Cottet and Éric Laurent)
Fred Baitinger (LC Express)
Isabel Barata Adler, Azeen Khan, Tom Ryan, Florencia F. C. Shanahan
(Psychoanalytical Notebooks)
Pamela King (Hurly-Burly)
Ellie Ragland and Jack Stone ([Re]-Turn)
Cyrus Saint-Amand Poliakoff (Culture/Clinic)
Editorial Second Time
The Bibliospeaking / Part Two featuring contemporary authors of the Freudian Field
requires sharing some of our editorial choices and findings.
The following abbreviations have been chosen to assist the reader:
Books
[FDP] -- Cottet, Serge [1982]. Freud and the Desire of Psychoanalyst. Trans.: B. Khiara, J. Holland and K. Gilbert. London:
Karnac Books, 2012.
[LIC] -- Laurent, Éric [2008]. Lost in Cognition: Psychoanalysis and the Cognitive Sciences. Trans.: A. R. Price. London:
Karnac Books, 2014.
Journals
[C/C] -- Culture/Clinic, Minneapolis: University of Minnesota Press, 2013.
[HB] -- Hurly-Burly: The International Lacanian Journal of Psychoanalysis.
[LI] -- Lacanian Ink.
Texts considered here have been written/translated/published between 2010 and 2015.
With the exception of two books and one online journal, all quotes come from the
periodicals. Our focus was on the sources explicitly devoted to the promulgation of
Lacanian thought in the Freudian Field. A rising tendency, to make the English
translations of articles available sooner than in the past, has not yet been accompanied
with translation and/or publication of books which would allow for a comprehensive
encounter with a single author.
We kept the same grouping of concepts as in Part One. As the readers will notice,
the escabeau is not ‘represented’ in English. While the term itself has been articulated
through Jacques Lacan’s reading of James Joyce as early as 1975, it was only in 2014
that it acquired new relevance due to Jacques-Alain Miller’s text, “The Unconscious and
the Speaking Body.” For Miller, it is precisely escabeau that offers a potential for new
development, as it relates to parlêtre and sinthome. The newness of this proposition may
explain why, in English, the research focused on escabeau is still in its emergent stage.
However, important contributions made by the authors cited on the web page of the
Congress represent a change in this landscape.
[PN] -- Psychoanalytical Notebooks: The London Society of the New Lacanian School.
[RT] -- (Re)-Turn: A Journal of Lacanian Studies.
[LCE] – LCEXPRESS, www.lacaniancompass.com/lcexpress
Maria Cristina Aguirre
[Bibliospeaking Coordinator]
434
435
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
EL CUERPO HABLANTE
Contents
1.
Sigmund Freud
II /c. Speaking Body
440
I /a. Affect, Defense, Trauma
440
I /b. Sexuality, Libido, Sublimation
442
I /c. Repression, Drive, Fixation
444
I /d. Correspondence
446
2.
Jacques Lacan
II /a. Parlêtre, Speaking–Being
II /a.1 Seminars 448
448
II /a.2 Other publications
451
II /b. The Unconscious
436
448
II /b.1 Écrits
452
452
II /b.2 Seminars
453
II /b.3 Other publications
455
II /c.1 Écrits
462
462
II /c.2 Seminars 463
II /c.3 Other publications
465
II /d. Sinthome
II /d.1 Other publications
467
467
3.
Jacques–Alain Miller III /a. Parlêtre, Speaking–Being 468
III /a.1 The Psychoanalytic Courses 468
468
III /a.2 Other publications
474
III /b. Unconscious III /b.1 The Psychoanalytic Courses
476
476
III /b.2 Other publications 486
III /c. Speaking Body
488
488
III /c.1 The Psychoanalytic courses 437
X Congreso de la AMP, Río de Janeiro 2016
III /c.2 Other publications
III /d Sinthome
EL CUERPO HABLANTE
496
III /d.1 The Psychoanalytic Courses
499
499
III /d.2 Other publications
502
III /e. Escabeau
III /e.1 The Psychoanalytic Courses 504
504
III /e.2 Other Publications
505
4.
Authors of the Freudian Field507
IV /a. Parlêtre / Speaking-Being
507
IV /b. Unconscious
512
IV /c. Speaking-Body
525
IV /d. Sinthome 527
BIOS
Maria Cristina Aguirre / Ph.D./ New York, USA.
Elmhurst Hospital Center; New York Freud
Lacan Analytic Group; World Association of
Psychoanalysis.
“Bulimia, Anxiety and the Demand of the
Other,” in Y. Goldman, K. Malone, T. Svolos (Eds.),
Lacan and Addictions, An Anthology (2011).
Ellyn Altman / Ph.D./ New York, USA.
New York Freud Lacan Analytic Group.
Talk with Me: Giving the Gift of Language and
Emotional Health to the Hearing Impaired Child
(1988).
Josefina Ayerza / New York, USA.
New Lacanian School; World Association of
Psychoanalysis.
Editor, Lacanian Ink; lacan.com
Frédéric-Charles Baitinger / New York, USA.
New York Freud Lacan Analytic Group
“Je ris donc je pense : Rire et souveraineté dans
l’œuvre de Georges Bataille.” Revue Humoresques 41
(2015). Isabel Adler Barata / M.D./ New York, USA.
New York Freud Lacan Analytic Group.
David Ferraro / Ph.D./ Melbourne, Australia.
The Lacan Circle of Melbourne.
“A brain is being unbalanced: Structure, science and
the melancholic’s underworld,” in Psychoanalysis
Lacan (2015).
Azeen Khan / Ph.D./ New York, USA.
Brown University; New York Freud Lacan Analytic
Group.
Pamela King / M.A./ Marseille, France.
New Lacanian School; World Association of
Psychoanalysis.
L’American Way of Life, Lacan et les débuts de l’ego
psychology (2013).
Ellie Ragland / Ph.D./ Columbia, MO, USA.
The University of Missouri-Columbia; New
438
Lacanian School; World Association of
Psychoanalysis.
Jacques Lacan and the Logic of Structure (2015).
Tom Ryan / M.A./ Cork, Ireland.
Irish Circle of the Lacanian Orientation.
Cyrus Saint Amand Poliakoff / L.M.S.W./ New
York, USA.
New York Freud Lacan Analytic Group;
Metropolitan Center for Mental Health.
“‘A Hole in Horror’ Enlaces.” Psychoanalysis &
Culture 19(2013).
Samya Seth / M.Phil. / New York, USA.
New York Freud Lacan Analytic Group.
Trans.: Jacques-Alain Miller, “Some Reflections
on the Psychosomatic Phenomenon.” Hurly Burly
12(2015).
Florencia F. C. Shanahan / Dublin, Ireland.
Irish Circle of Lacanian Orientation; New Lacanian
School; World Association of Psychoanalysis.
Jack W. Stone / Ph.D./ Columbia, MO, USA.
University of Missouri-Columbia.
Trans.: “The Holophrase, between Psychosis and the
Psychosomatic”
http://www.wapol.org/publicaciones/lacanian_
compass/LacanianCompass-013.pdf
Aleksandra Wagner / L.P./ New York, USA.
The New School for Public Engagement; National
Psychological Association for Psychoanalysis; Das
Unbehagen.
Editor (w/Carin Kuoni): Considering Forgiveness
(2009).
John Burton Wallace V. / L.M.S.W., M.S.Ed./ New
York, USA.
Lacanian Ink; New York Freud Lacan Analytic
Group.
Trans. (w/Frédéric-Charles Baitinger): Jacques-Alain
Miller, “The Real Is Without Law.” LI 47(2016).
439
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
1.
Sigmund Freud
I /a. Affect, Defense, Trauma
Extracts from Freud’s Footnotes to His Translation of Charcot’s
Tuesday Lectures (1892 – 1894). [SE, I]
“A trauma would have to be defined as an accretion of excitation in the nervous
system, which the latter has been unable to dispose of adequately by motor reaction.”
p. 137
Some Points for a Comparative Study of Organic and Hysterical
Motor Paralyses (1893 [1888 – 1893]). [SE, I]
“(…) I, on the contrary, assert that the lesion in hysterical paralyses must be
completely independent of the anatomy of the nervous system, since in its
paralyses and other manifestations hysteria behaves as though anatomy did not exist
or as though it had no knowledge of it.
(…) It takes the organs in the ordinary, popular sense they bear… ” p.
169
“Considered psychologically, the paralysis of the arm consists in the fact that
the conception of the arm cannot enter into association with the other ideas
constituting the ego of which the subject’s body forms an important part.
The lesion would therefore be the abolition of the associative accessibility of the
conception of the arm. The arm behaves as though it did not exist for the play of
associations.” p. 170
Studies on Hysteria (1893 – 1895). [SE, II]
On the Psychical Mechanism of Histerical Phenomena: Preliminary
Communication (1893)
“In traumatic neuroses, the operative cause of the illness is not the trifling
physical injury but the affect of fright –the psychical trauma.” p. 5-6
440
Sigmund Freud
THE SPEAKING BODY
“We must presume rather that the psychical trauma –or more precisely the
memory of the trauma– acts like a foreign body which long after its entry must
continue to be regarded as an agent that is still at work.” p. 6
“But language serves as a substitute for action; by its help, an affect can be
‘abreacted’ almost as effectively.” p. 8
“It will now be understood how it is that the psychotherapeutic procedure
which we have described in these pages has a curative effect. It brings to an
end the operative force of the idea which was not abreacted in the first instance, by
allowing its strangulated affect to find a way out through speech (…).” p. 17
« Case Histories » (1895). [SE, II]
Frau Emmy von N., age 40, from Livonia
“I showed from examples from ordinary life that a cathexis such as this of an
idea whose affect is unresolved always involves a certain amount of associative
inaccessibility and of incompatibility with new cathexes.” p. 89
Fräulein Elisabeth von R. “I therefore questioned her about
the causes and circumstances of the first appearance of the pains.” p. 155
“She repressed her erotic idea from consciousness and transformed the amount
of its affect into physical sensations of pain.” p. 164
“The motive was that of defence, the refusal on the part of the patient’s whole
ego to come to terms with this ideational group. The mechanism was that of
conversion: i.e. in place of the mental pains which she avoided, physical pains
made their appearance.” p. 166
“In these examples the mechanism of symbolization seems to be reduced to
secondary importance, as is no doubt the general rule.” p. 179
« The Psychotherapy of Hysteria » [SE, II]
“No doubt fate would find it easier than I do to relieve you of your illness. But
you will be able to convince yourself that much will be gained if we succeed
into transforming your hysterical misery into common unhappiness. With a
mental life that has been restored to health you will be better armed against that
unhappiness.” p. 305
« Fragment of an Analysis of a Case of Hysteria » (1905 [1901]). [SE,
VII]
“In this connection we must recall the question which has so often been raised,
whether the symptoms of hysteria are of psychical or of somatic origin, or
441
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
p. 40-41
I /b. Sexuality, Libido, Sublimation
Three Essays on the Theory of Sexuality (1905). [SE, VII]
“What is substituted for the sexual object is some part of the body (such as
the foot or hair) which is in general very inappropriate for sexual purposes, or
some inanimate object which bears an assignable relation to the person whom
it replaces and preferably to that person’s sexuality (e.g. a piece of clothing or
underlinen).” p. 153
“The same example, however, also shows us that any other part of the skin or
mucous membrane can take over the functions of an erotogenic zone, and must
therefore have some aptitude in that direction. Thus the quality of the stimulus
has more to do with producing the pleasurable feeling than has the nature of the
part of the body concern” p. 183
The Psycho–Analytic View of Psychogenic Disturbance of Vision
(1910). [SE, XI]
“Indeed, if we find that an organ normally serving the purpose of sense–
perception begins to behave like an actual genital when its erotogenic role
is increased, we shall not regard it as improbable that toxic changes are also
occuring in it.” p. 218
« On Narcissism: An Introduction » (1914). [SE, XIV]
“(…) a unity comparable to the ego cannot exist in the individual from the
start; the ego has to be developed The auto-erotic instincts, however, are there
from the very first; so there must be something added to auto-erotism –a new
psychical action– in order to bring about narcissism.” p. 77
442
Sigmund Freud
whether, if the former is granted, they are necessarily all psychically determined?
(…) As far as I can see, every hysterical symptom involves the participation of
both sides. It cannot occur without the presence of a certain degree of somatic
compliance offered by some normal or pathological process in or connected
with one of the bodily organs. And it cannot occur more than once –and the
capacity for repeating itself is one of the characteristics of a hysterical symptom–
unless it has a psychical significance, a meaning. The hysterical symptom does
not carry this meaning with it, but the meaning is lent to it, soldered to it, as it
were; and in every instance the meaning can be a different one, according to the
nature of the suppressed thoughts which are struggling for expression.”
THE SPEAKING BODY
“Let us now, taking any part of the body, describe its activity of sending sexually
exciting stimuli to the mind as its ‘erotogenicity’… ” p. 84
“Sublimation is a process that concerns object-libido and consists in the
instinct’s directing itself toward an aim other than, and remote from, that of
sexual satisfaction; in this process the accent falls upon deflection from sexuality.
Idealization is a process that concerns the object: by it that object, without any
alteration in its nature, is aggrandized and exalted in the subject’s mind. (…)
The formation of an ego ideal is often confused with the sublimation of instinct,
to the detriment of our understanding of the facts. A man who has exchanged
his narcissism for homage to a high ego ideal has not necessarily on that account
succeeded in sublimating his libidinal instincts.” p. 94
“It is true that the ego ideal demands such sublimation, but it cannot enforce it;
sublimation remains a special process which may be prompted by the ideal but
the execution of which is entirely independent of any such prompting.”
p. 94-95
“Further, the formation of an ego ideal and sublimation are quite differently
related to the causation of neurosis. As we have learned, the formation of
an ideal heightens the demands of the ego and is the most powerful factor
favouring repression; sublimation is a way out, a way by which those demands
can be met without involving repression.” p. 95
« Instincts and Their Vicissitudes » (1915). [SE, XIV]
“An ‘instinct’ appears to us as a concept on the frontier between the mental
and the somatic, as the psychical representative of the stimuli originating from
within the organism and reaching the mind, as a measure of the demand made
upon the mind for work in consequence of its connection with the body.”
p. 121-122
« The Unconscious » (1915). [SE, XIV]
“In schizophrenics we observe –especially in the initial stages, which are so
instructive– a number of changes in speech (…) Some reference to bodily organs
or innervations is often given prominence in the content of these remarks.
To this may be added the fact that in such symptoms of schizophrenia as are
comparable with the substitutive formations of hysteria or obsessional neurosis,
the relation between the substitute and the repressed material nevertheless
displays peculiarities which would surprise us in these two forms of neurosis.”
p. 197
443
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Next, we must bear in mind that the sexual instinctual impulses in particular
are extraordinarily plastic, if I may so express it. One of them can take the place
of another, one of them can take over another’s intensity; if the satisfaction
of one of them is frustrated by reality, the satisfaction of another can afford
complete compensation. They are related to one another like a network of
intercommunicating channels filled with a liquid.” p. 345
« The Ego and the Id » (1923). [SE, XIX]
“The transformation of object-libido into narcissistic libido which thus takes
place obviously implies an abandonment of sexual aims, a desexualization –a
kind of sublimation, therefore. Indeed, the question arises, and deserves careful
consideration, whether this is not the universal road to sublimation, whether all
sublimation does not take place through the mediation of the ego, which begins
by changing sexual object-libido into narcissistic libido and then, perhaps, goes
on to give it another aim.” p. 30
I /c. Repression, Drive, Fixation
« Repression » (1915). [SE, XIV]
“We have reason to assume that there is a primal repression, a first phase of
repression, which consists in the psychical (ideational) representative of the
instinct being denied entrance into the conscious. With this a fixation is
established; the representative in question persists unaltered from then onwards
and the instinct remains attached to it.” p. 148
« The Unconscious » (1915). [SE, XIV]
“Just as Kant warned us not to overlook the fact that our perceptions are
subjectively conditioned and must not be regarded as identical with what is
perceived though unknowable, so psycho–analysis warns us not to equate
perceptions by means of consciousness with the unconscious mental processes
which are their object.” p. 171
“So, too, when it comes to describing primal repression, the mechanism just
discussed of withdrawal of preconscious cathexis would fail to meet the case;
for here we are dealing with an unconscious idea which has as yet received no
cathexis from the Pcs. and therefore cannot have that cathexis withdrawn from
it.” p. 180-181
444
Sigmund Freud
« Introductory Lectures on Psycho–Analysis » (1916 – 1917 [1915 –
1917]): Lecture XXII. [SE, XVI]
THE SPEAKING BODY
« The Ego and the Id » (1923). [SE, XIX]
“The ego is first and foremost a bodily ego; it is not merely a surface entity, but
is itself a projection of a surface.” p. 26
“At the very beginning, all the libido is accumulated in the id, while the ego is
still in process of formation or is still feeble. The id sends the parts of this libido
out into erotic object-cathexes, whereupon the ego, now grown stronger, tries
to get hold of this object-libido and to force itself on the id as a love-object. The
narcissism of the ego is thus a secondary one, which has been withdrawn from
objects.” p. 46
« Inhibitions, Symptoms and Anxiety » (1925). [SE, XX]
“It has been discovered as a general fact that the ego-function of an organ is
impaired if its erotogenicity –its sexual significance– is increased” p. 8
“I came across an instructive example of this kind of intense, though short-lived,
general inhibition. The patient, an obsessional neurotic, used to be overcome
by a paralysing fatigue which lasted for one or more days whenever something
occurred which should obviously have thrown him into a rage.” p. 90
“As I have shown elsewhere, most of the repressions with which we have to
deal in our therapeutic work are cases of after-pressure. They presuppose the
operation of earlier, primal repressions which exert an attraction on the more
recent situation.” p. 94
“(…) We notice that anxiety is accompanied by fairly definite psychical
sensations which can be referred to particular organs of the body. As we are not
concerned here with the phsysiology of anxiety, we shall content ourselves with
mentioning a few representatives of these sensations. The clearest and most
frequent ones are those connected with the respiratory organs and with the
heart.” p. 132
« The Dissection of Psychical Personality » Lecture XXXI. New
Introductory Lectures on Psycho-Analysis (1933 [1932]). [SE, XXII]
“The ego can take itself as an object, can treat itself like other objects, can
observe itself, criticize itself, and do Heavens what with itself. In this, one part
of the ego is setting itself over against the rest. So the ego can be Split; it splits
itself during a number of its functions –temporarily at least. Its parts can come
together again afterwords.” p. 58
“But, it is more prudent to keep the agency as something independent and to
suppose that conscience is one of its functions and that self-observation, which
445
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“(…) the super-ego and the ego can operate unconsciously, or –and this would
be still more important– that portions of both of them, the ego and the superego themselves, are unconscious.” p. 69
“We approach the id with analogies: we call it a chaos, a cauldron full of
seething excitations. We picture it as being open at its end to somatic influences,
and as there taking up into itself instinctual needs which find their psychical
expression in it, but we cannot say in what substratum. It is filled with energy
reaching it from the instincts, but it has no organization, produces no collective
will, but only a striving to bring about the satisfaction of the instinctual needs
subject to the observance of the pleasure principle.” p. 73
Jacques Lacan
is an essential preliminary to the judging activity of conscience, is another of
them. And since when we recognize that something has a separate existence we
give it a name of its own, from this time forward I will describe this agency in
the ego as the ‘super-ego’.” p. 60
THE SPEAKING BODY
stratification: the material present in the form of memory-traces being
subjected from time to time to a re-arrangement in accordance with fresh
circumstances –to a re-transcription. Thus what is essentially new about
my theory is the thesis that memory is present not once but several times
over, that it is laid down in various species of indications.” p. 233
“But pathological defense only occurs against a memory-trace from an earlier
phase which has not yet been translated.” p. 235
“Thus the ego, driven by the id, confined by the super-ego, repulsed by reality,
struggles to master its economic task of bringing about harmony among the
forces and influences working in and upon it.” p. 78
« Analysis Terminable and Interminable » (1937). [SE, XXIII]
“Analysis, however, enables the ego, which has attained greater maturity and
strength, to undertake a revision of these old repressions; a few are demolished,
while others are recognized but constructed afresh out of more solid material.
These new dams are of quite a different degree of firmness from the earlier ones;
we may be confident that they will not give way so easily before a rising flood of
instinctual strength.” p.
227
I /d. Correspondence
Extracts from the Fliess Papers (1896) [SE, I]
Draft K.
“The trend towards defence becomes detrimental,
however, if it is directed against ideas which are also able, in the form of
memories, to release fresh unpleasure –as is the case with sexual ideas.”
p. 221
Letter 52 “(…) As you know, I am working on the assumption
that our psychical mechanism has come into being by a process of
446
447
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
Jacques Lacan
II /a. Parlêtre, Speaking–Being
II /a.1 Seminars
[S. XI]
“(…) that is why the animal will never learn to speak. At least in this way.
Because, obviously, the animal is one step behind. The experiment may cause in
him all sorts of disorders, all sorts of disturbances, but, not yet being a speaking
creature, he is not called to put in question the desire of the experimenter, who,
indeed, if one interrogated him, would be hard put to reply.” p. 237
[S. XVII]
“Finally, we have always stressed that something defined as a loss emerges from
this trajectory. This is what the letter to be read as object a designates.
We have not left undesignated the point from which we extract this function of
the lost object. It’s from Freud’s discourse about the specific sense that repetition
has in the speaking being. Indeed, repetition is not about just any old effect of
memory in the biological sense. Repetition bears a certain relationship to what is
the limit of this knowledge, and which we call jouissance.” p. 15
“In effect, if jouissance is forbidden, then it is clear that it only comes into play
by chance, an initial contingency, an accident. The living being that ticks over
normally purrs along with pleasure. If jouissance is unusual, and if it is ratified by
having the sanction of the unary trait and repetition, which henceforth institutes
it as a mark–if this happens, it can only originate in a very minor variation in
the sense of jouissance. (…)
And this is the dimension in which work, knowledge at work, becomes
necessary, insofar as, whether it knows it or not, it initially stems from the
unary trait and, in its wake, from everything that can possibly be articulated
448
Jacques Lacan
2.
THE SPEAKING BODY
as signifier. This is the basis on which this dimension of jouissance is instituted,
which is so ambiguous in the speaking being who can also theorize and make a
religion of living in apathy, and apathy is hedonism.” p. 50
“This knowledge is a means of jouissance. And, I repeat, when it is at work, what
it produces is entropy. This entropy, this point of loss, is the sole point, the sole
regular point at which we have access to the nature of jouissance. This is what
the effect the signifier has upon the fate of the speaking being translates into,
culminates in, and is motivated by.” p. 50-51
“This has little to do with his speaking. It has to do with structure, which gets
fitted out. The subject, who is called human, no doubt because he is only the
humus of language, has only to speechify himself to its fittings.” p. 51
“Spelling it out seems possible to me, namely on the basis of the psychoanalytic
discourse. In effect, from the perspective of this discourse, there is only one
affect, which is, namely, the product of the speaking being’s capture in a
discourse, where this discourse determines its status as object. (…)
I mentioned that affect by which the speaking being of a discourse finds itself
determined as an object. It has to be said that this object is not nameable. If I try
to call it surplus jouissance, this is only a device of nomenclature.” p. 151
“It is not a question of beings (étant) in the effect of language. It is only a
question of a speaking Being (être). At the outset we are not at the level of
beings, but at the level of Being. (…)
The initial affect of this effect, let’s now put this in inverted commas, of ‘Being’
only appears at the level of what makes itself the cause of desire, that is to say, at
the level of what we situate, as this initial effect of the setting (appareil), of the
analyst–the analyst as the place that I am trying to grasp with these little letters
on the blackboard. This is where the analyst positions himself. He positions
himself as the cause of desire. This is an eminently unprecedented position, if
not a paradoxical one, one that is validated by a practice.” p. 152
“What does experience indicate to us, in point of fact? That it is only when
this little a is substituted for woman that man desires her. That, inversely,
what a woman has to deal with, in so far as we are able to speak about this,
is this jouissance that is her own and is represented somewhere by a man’s
omnipotence, which is precisely where man, when he speaks, when he speaks as
master, discovers that he is a failure (en défaut).
This is where one has to start from in analytic experience –what could be called
man, that is to say the male as speaking being, disappears, vanishes through the
449
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
Being deprived of woman–this, expressed in terms of the failure (défaut) of
discourse, is what castration means. It is indeed because this is not thinkable
that the speaking order institutes this desire, constituted as impossible, as an
intermediary and that makes the mother, in so far as she is prohibited, the
privileged feminine object.” p. 154
“To express myself in these large-scale, approximate terms, take the male
principle for example –what effect does the incidence of discourse have on it?
It is that, as a speaking being, he is summoned to give an explanation of his
‘essence’– irony, ,inverted commas. It is very precisely and solely because of the
affect that this discourse effect subjects him to –that is, in so far as he receives
this feminizing effect of the small a– that he recognizes what makes him, that he
recognizes the cause of his desire.” p. 160
[S. XX]
“All the needs of speaking beings are contaminated by the fact of being involved
in an other satisfaction –underline the last three words– that those needs may
not live up to.” p. 51
“The gap inscribed in the very status of jouissance qua dit-mension of the
body, in the speaking being, is what re–emerges with Freud –and I’m not
saying anything more than him– through the test constituted by the existence
of speech. Where it speaks, it enjoys (Là où ça parle, ça jouit). And that doesn’t
mean that it knows anything because, as far as I’ve heard, the unconscious has
revealed nothing to us about the physiology of the nervous system, the process
of getting a hard–on, or early ejaculation.” p. 114-115
“The ‘I’ is not a being, but rather something attributed to that which speaks.
That which speaks deals only with solitude, regarding the aspect of the
relationship I can only define by saying, as I have, that it cannot be written. That
solitude, as a break in knowledge, not only can be written but it is that which is
written par excellence, for it is that which leaves a trace of a break in being.
That is what I said in a text, certainly not without its imperfections, that I
called Lituraterre. ‘The cloud of language,’ I expressed myself metaphorically,
‘constitutes writing.’ Who knows whether the fact that we can read (lire) the
streams I saw over Siberia as the metaphorical trace of writing isn’t linked (lié –
beware, lier (to link) and lire consist of the same letters –to something that goes
450
Jacques Lacan
very effect of the master’s discourse– spell it as you will –through being inscribed
solely in castration, which, by this very fact, is properly to be defined as being
deprived of woman– of woman in so far as she would be realized in a suitably
congruent signifier.
THE SPEAKING BODY
beyond the effect of rain, which animals have no chance of reading as such? It
seems rather to be linked to that form of idealism that I would like you to get
into your heads– certainly not that professed by Berkeley, who lived at a time
when the subject had acquired its independence, not the idealism that holds
that everything we know is representation, but rather that idealism related to
the impossibility of inscribing the sexual relationship between two bodies of
different sexes.” p. 120
“I must nevertheless say what there is qua metalanguage, and in what respect it
coincides with the trace left by language. For this is where the subject returns to
the revelation of the correlate of language (langue), which is the extra knowledge
of being, and constitutes for him his slim chance of going to the Other, to its
being, about which I noted last time –and this is the second essential point– that
it wants to know nothing. It is a passion for ignorance.
That is why the other two passions are those that are called love –which has
nothing to do with knowledge, despite philosophy’s absurd contentions– and
hatred, which is what comes closest to being, that I call ‘exsisting.’ Nothing
concentrates more hatred than that act of saying in which ex–sistence is
situated.” p. 121
“For every speaking being, the cause of its desire is, in terms of structure, strictly
equivalent, so to speak, to its bending, that is, to what I have called its division
as subject.” p. 127
II /a.2 Other publications
Television (1973), [TV]
“There is no unconscious except for the speaking being. The others, who possess
being only through being named –even though they impose themselves from
within the real– have instinct, namely the knowledge needed for their survival.”
p. 5
Columbia University: Lecture on the Symptom (1975). Trans.: A. Price
and R. Grigg [C/C]
“How is it that, having distinguished this symbolic, this imaginary, and this
real from one another, and having specified them by the fact that the symbolic
is our bond with language, based on this distinction, we are speaking beings?
It’s viciously circular to say that we are speaking beings, êtres parlants. We are
parlêtres –a word it would be advantageous to substitute for the unconscious,
451
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
The Other is missing (1980), [TV]
“What it shows me is that no truth reponds to malaise other than one particular
to each of those whom I call parlêtres.” p. 133
II /b. The Unconscious
II /b.1 Écrits
Aggressiveness in Psychoanalysis (1948), [É]
“One need but listen to the stories and games made up by two to five year olds,
alone or together, to know that pulling off heads and cutting open bellies are
spontaneous themes of their imagination, which the experience of a busted–up
doll merely fulfills.” p. 85
“The Mirror Stage as Formative of the I Function” (1949), [É]
“This fragmented body –another expression I have gotten accepted into the
French school’s system of theoretical references– is regularly manifested in
dreams when the movement of an analysis reaches a certain level of aggressive
integration of the individual. It then appears in the form of disconnected limbs
or of organs exoscopically represented, growing wings and taking up arms for
internal persecutions that the visionary Hieronymus Bosch fixed for all time
in painting, in their ascent in the fifteenth century to the imaginary zenith of
modern man.” p. 78
“The Function and Field of Speech and Language in Psychoanalysis”
(1953), [É]
“Here speech is driven out of the concrete discourse that orders consciousness,
but finds its medium either in the subject’s natural functions – provided a
painful organic sensation wedges open the gap between his individual being and
his essence, which makes illness what institutes the existence of the subject in
the living being – or in the images that, at the border between the Umwelt and
the Innenwelt, organize their relational structuring.
452
Jacques Lacan
equivocating, as it does, on parleying, on the one hand, and on the fact that it’s
from language that we get this crazy idea that there is being, on the other– for it
is certain that we believe in it, we believe in it because of everything that appears
to make for substance.” p. 14
THE SPEAKING BODY
A symptom here is the signifier of a signified that has been repressed from the
subject’s consciousness. A symbol written in the sand of the flesh and in the veil
of Maia, it partakes of language by the semantic ambiguity that I have already
highlighted in its constitution.” p. 232
“Speech is in fact a gift of language, and language is not immaterial. It is a subtle
body, but body it is. Words are caught up in all the body images that captivate
the subject; they may ‘knock up’ the hysteric, be identified with the object of
Penisneid, represent the urinary flow of urethral ambition, or represent the feces
retained in avaricious jouissance.” p. 248
“Seminar on “The Purloined Letter” (1955), [É]
“Such is the signifier’s answer, beyond all significations: ‘You believe you
are taking action when I am the one making you stir at the bidding of the
bonds with which I weave your desires. Thus do the latter grow in strength
and multiply in objects, bringing you back to the fragmentation of your rent
childhood. That will be your feast until the return of the stone guest whom I
shall be for you since you call me forth.” p. 29
“On My Antecedents” (1966), [É]
“If Freud reminds us of the relationship between the ego and the perception–
consciousness system, it is only to indicate that our reflective tradition –we
would be wrong o think that it has had no social impact insofar as it has served
as a basis for political forms of personal status– has tested its standards of truth
in this system.
But it is in order to call these standards of truth into question that Freud
links the ego, on the basis of a twofold reference, to one’s own body –that is
narcissism– and to the complexity of the three orders of identification.” p. 54
II /b.2 Seminars
[S. XX]
“The other satisfaction is, as you must realize, what is satisfied at the level of the
unconscious–insofar as something is said there and is not said there, if it is true
that it is structured like a language.
Here I am coming back to something I have been referring to for some time,
namely, the jouissance on which that other satisfaction depends, the one that is
based on language.” p. 51
453
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Writing is thus a trace in which an effect of language can be read (se lit).”
p. 121
“Enunciating that sentence, ‘I ask you to refuse what I offer you,’ I could only
motivate it by the ‘that’s not it’ that I took up again last time.
‘That’s not it’ means that, in the desire of every demand, there is but the request
for object a, for the object that could satisfy jouissance. The latter would then be
the Lustbefriedigung presupposed in what is improperly called the ‘genital drive’
in psychoanalytic discourse, that drive in which the full, inscribable relationship
of the one with what remains irreducibly the Other is supposedly inscribed (…)
I have diversified into four causes, insofar as the cause is constituted diversely,
according to the Freudian discovery, on the basis of the object of sucking, the
object of excretion, the gaze, and the voice. It is as substitutes for the Other that
these objects are laid claim to and made into the cause of desire.” p. 126
“That which is written –what would that be in the end? The conditions of
jouissance. And that which is counted– what would that be? The residues of
jouissance. Isn’t it by joining that a-sexual up with what she has by way of
surplus jouissance –being as she is, the Other, since she can only be said to be
Other– that woman offers it to man in the guise of object a?
Man believes he creates –he believes believes believes, he creates creates creates.
He creates creates creates woman. In reality, he puts her to work– to the work
of the One. And it is in that respect that the Other –the Other insofar as the
articulation of language, that is, the truth, is inscribed therein– the Other must
be barred, barred on the basis of (de) what I earlier qualified as the One-missing.
That is what S(A) means. It is in that respect that we arrive at the point of
raising the question how to make the One into something that holds up, that is,
that is counted without being.
Mathematization alone reaches a real –and it is in that respect that it is
compatible with our discourse, analytic discourse– a real that has nothing to do
with what traditional knowledge has served as a basis for, which is not what the
latter believes it to be –namely, reality– but rather fantasy.
The real, I will say, is the mystery of the speaking body, the mystery of the
unconscious.” p. 131
454
Jacques Lacan
“(…) ‘The unconscious is not the fact that being thinks’ –though that is implied
by what is said thereof in traditional science– ‘the unconscious is the fact that
being, by speaking, enjoys, and’, I will add, ‘wants to know nothing more about
it.’ I will add that that means ‘know nothing about it at all’.” p. 104-105
THE SPEAKING BODY
II /b.3 Other publications
“Letter to D. W. Winnicott” (1960), [TV]
“Let us say that the passivity implied in the verb to signify must be reversed, and
it must be imagined that the signifier marks the real as much and more than it
represents it.” p. 76
“Introduction to The Names-of-the-Father” (1963), [TV]
“Concerning which may be said what I have gradually accustomed you to
understand: that a God is something one encounters in the real, inaccessible.”
p. 90
“Responses to Students of Philosophy” (1966), [TV]
“That is why the question of an initial error in philosophy imposes itself as soon
as Freud has produced the unconscious on the stage he assigned to it (‘the other
stage’, as he calls it) and accords it the right to speak. (…)
That right, I say, is held by the unconscious by dint of what it structures as
language, and I would clarify the illumination without end with which Freud
allows that fact to reverberate if you had asked me the question organized
around the terms: the unconscious and the subject.” p. 108
“Only my theory of language as structure of the unconscious can be said to be
implied by Marxism, if, that is, you are not more demanding than the material
implication with which our most recent logic is satisfied, that is, that my theory
of language is true whatever be the adequacy of Marxism, and that it is needed
by it, whatever be the defect that it leaves Marxism with.” p. 111-112
“Now the subject of the unconscious is a spoken being, and that is the being of
man; if psychoanalysis is to be a science, that is not a presentable object.”
p. 114
“Television” (1973), [TV]
“I always speak the truth. Not the whole truth, because there’s no way, to say
it all. Saying it all is literally impossible: words fail. Yet it’s through this very
impossibility that the truth holds onto the real.” p. 3
“The precondition of the unconscious is language.” p.
5 [Manuductio, J.–A.M.]
“This still leaves the category of homme-sick animals, thereby called domestics
[d’hommestiques], who for that reason are shaken, however briefly, by
unconscious, seismic tremors.” p. 5
455
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Which allows for the grounding of the unconscious in the ex–sistence of
one more subject for the soul. For the soul as the assumed sum of the body’s
functions. (…)
In fact the subject of the unconscious is only in touch with the soul via the
body, by introducing thought into it: here contradicting Aristotle. Man does not
think with his soul, as the Philosopher imagined (…)
Thought is in disharmony with the soul. And the Greek nous is the myth of
thought’s accommodating itself to the soul, accommodating itself in conformity
with the world, the world (Umwelt) for which the soul is held responsible,
whereas the world is merely the fantasy through which thought sustains itself‘reality’ no doubt, but to be understood as a grimace of the real.” p. 6
“How did this happen before the unconscious was located? In order to work,
a practice doesn’t have to be elucidated; this is what can be deduced from that.
(…) There are, insofar as the unconscious is implicated, two sides presented by
the structure, by language.” p. 7
“Whence the unconscious, namely the insistence through which desire
manifests itself, in other words the repetition of the demand working through
it–isn’t that what Freud says of it at the very moment he discovers it? whence the
unconscious, if it is true that the structure –recognized as producing, as I say,
language out of lalangue– does indeed order it, reminds us that to the side of
meaning that fascinates us in speech –in exchange for which being– this being
whose thought is imagined by Parmenides –acts as speech’s screen–reminds us, I
conclude, that to the side of meaning the study of language opposes the side of
the sign.” p. 8
“Namely that one of these phenomena is naively articulated: articulated means
verbalized, naively means according to vulgar logic, lalangue’s usage as it is
commonly received (…)
I’ve talked about a side of the sign in order to mark within it its association with
the signifier. But the signifier differs from the sign in that its inventory is already
a given of lalangue.
To speak of a code doesn’t work, precisely because it presupposes meaning.
456
Jacques Lacan
“It speaks, does the unconscious, so that it depends on language, about which
we know so little: despite what under the term linguistery I group whatever
claims –and this is new– to intervene in men’s affairs in the name of linguistics.
Linguistics being the science that concerns itself with lalangue, which I write as
one word, so as to specify its object, as is done in every other science.” p. 5-6
THE SPEAKING BODY
The signifying inventory of lalangue supplies only the cipher of meaning.
According to context, each word takes on an enormous and disparate range
of meaning, meaning whose heteroclite condition is often attested to by the
dictionary.” p. 9
“Lalangue is the precondition of meaning.” p.
9 [Manuductio, J.–A.M.]
“No doubt their grammar is buttressed by writing, and it bears witness, for
all that, to a real, to a real which remains, as we know, an enigma as long as in
analysis the pseudo-sexual spring doesn’t pop out: that real which, capable only
of lying to the partner, is marked as neurosis, perversion, or psychosis. (…)
What Freud discovers in the unconscious –here I’ve only been able to invite you
to take a look at his writings to see if I speak truly– is something utterly different
from realizing that broadly speaking one can give a sexual meaning to everything
one knows, for the reason that knowing has always been open to the famous
metaphor (the side of meaning Jung exploited).
It is the real that permits the effective unknotting of what makes the symptom
hold together, namely a knot of signifiers.” p. 10
“I do not base this idea of discourse on the ex–sistence of the unconscious. It is
the unconscious that I locate through it—it ex–sists only through a discourse.
(…) The unconscious thereby ex–sists all the more in that since it is witnessed
clearly only in the discourse of the hysteric, what’s to be found everywhere else is
just grafted onto it: yes, even, astonishing as it may seem, in the discourse of the
analyst, where what is made of it is culture. (…)
Let’s say that it is the ideal worker, the one Marx made the flower of capitalist
economy in the hope of seeing him take over the discourse of the master; which,
in effect, is what happened, although in an unexpected form. There are surprises
in these matters of discourse; that is, indeed, the point of the unconscious.”
p. 14
“Only analytic discourse gives ex–sistence, to the unconscious, as Freudian.”
p. 14 [Manuductio, J.–A.M.]
“So as to embody what the structure entails, namely allowing the subject, the
subject of the unconscious, to take him as the cause of the subject’s own desire.”
p. 15
“I conclude that scientific discourse and the hysteric’s discourse have almost the
same structure, which explains our error, induced by Freud himself, in hoping
that one day there would be a thermodynamic able to provide –within the
future of science– the unconscious with its posthumous explanation.” p. 19
457
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“I shall indicate from which end one could project a serious follow-up,
understood as serial, to what can be claimed by the unconscious in such an
effect (…).
And if ever this weakness, as reject of the unconscious, ends in psychosis, there
follows the return to the real of that which is rejected, that is, language; it is the
manic excitation through which such a return becomes fatal.” p. 22
“Affect, therefore, befalls a body whose essence it is said is to dwell in language
–I am borrowing plumage which sells better than my own– affect, I repeat,
befalls it on account of its not finding dwelling-room, at least not to its taste.
This we call moroseness, or equally, moodiness. Is this a sin, a grain of madness,
or a true touch of the real?” p. 23-24
“Why couldn’t the family, society itself, be creations built from repression?
They’re nothing less. That, however, may be because the unconscious ex–sists, is
motivated by the structure, that is, by language (…).
Now this analytic discourse implies a promise: to promote a novelty. And that,
awesomely enough, into the field from which the unconscious is produced, since
its finesses [impasses] –among other situations to be sure, but it is still the main
one– come into play in the game of love.” p. 28
“This contains an explication, an unfolding of what the name only dimly pins
down. Namely: that through the transference the subject is attributed to the
knowledge that gives him his consistency as subject of the unconscious, and it is
that which is transferred onto the analyst, namely, this knowledge inasmuch as it
does not think, or calculate, or judge, but carries with it nonetheless the workeffect.” p. 29
“My discourse doesn’t allow the question of what one is able to know, since it
begins by presupposing this as the subject of the unconscious.” p. 36
“What’s at stake now is what we can escape with the help of the real-of-thestructure: what in language is not a number [chiffre], but a sign to decipher
[dechiffrer] (…).
The subject of the unconscious, on the contrary, gears into the body.” p.
37
“But how could a better fit be found for it than this object I’ve mentioned, if
it be the very product of this matheme whose site is related to the structure, as
long as the latter be language [l’en–gage], the language pawned [l’en-gage] to the
mute by the unconscious? (…)
This requires only that somewhere the sexual relation cease not being written,
458
Jacques Lacan
THE SPEAKING BODY
that contingency be established (so to speak), so as to make headway on that
which will later be completed by demonstrating such a relation to be impossible,
that is by instituting it in the real.” p. 39
“Psychoanalysis would allow you, of course, the hope of refining and clarifying
the unconscious of which you’re the subject. (…)
Anyway, the analytic discourse excludes the you who’s not already in
transference, since it exposes this relation to the subject supposed to know–
which is a symptomatic manifestation of the unconscious.” p. 43
“And if the unconscious does not think, nor calculate, etc., it makes it all the
more thinkable.
You will catch it by surprise, in rehearing, if you can, what I was modulating for
fun in my example of what can be known. Better, still–relying less on the good
luck of lalangue than bidding it up into language… ” p. 46
“Columbia University: Lecture on the Symptom” (1975). Trans.: A.
Price and R. Grigg [C/C]
“The experience consists in the fact that from the origins there has been a
relationship with lalangue that deserves to be called, rightly, the mother tongue,
because it’s from the mother that the child, as it were, receives it.” p. 12
“I mean that a body has another way of consisting than what I was just referring
to as a spoken form, in the form of the unconscious, in so far as it is from
speech, as such, that it emerges. These are marks whose trace we can see in the
unconscious. These are marks that have been left by a certain way of relating to
knowledge that constitutes the fundamental substance of the unconscious.”
p. 14-15
“Proposition of 9 October 1967 on the Psychoanalyst of the School”
(1967). Trans.: R. Grigg [An 6, 1995]
“In this change of tack where the subject sees the assurance he gets from this
fantasy, in which each person’s window onto the real is constituted, capsize,
what can be perceived is that the foothold of desire is nothing but that of a
désêtre, disbeing.” p. 9
“The third facticity, real, all too real, sufficiently real for it to be the case that
the real is more prudish than language about promoting it, is what the term
‘concentration camp’ renders speakable, on which it seems that our thinkers, in
drifting from humanism to the terror, have not sufficiently concentrated”
p. 12
459
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“The Place, Origin, and End of My Teaching” (1967), [MT]
“Our subject as such, the subject that speaks (…) being divided, it is bound
up with that other subject–the subject of the unconscious, which happens to
exist independently of any linguistic structure. That is what the discovery of the
unconscious is.” p. 53-54
“On Hysteria” (1977) Trans.: N. Wülfling. [PN 21, 2010]
“The unconscious originates from the fact that the hysteric doesn’t know what
she is saying, when she truly says something with the words she lacks. The
uncoscious is a sediment of language.” p. 9
“The idea of unconscious representation is a totally empty idea. Freud was rather
beating around the unconscious. Firstly, it is an abstraction. We can only suggest
the idea of a representation by removing from the real all its concrete weight.
The idea of unconscious representation is a crazy thing. Yet that is how Freud
approached it. There are traces of this very late in his writings.
The unconscious, I propose to give it another body, because it is thinkable
that one thinks of things without weighing them, it only takes words. Words
give body. It does not mean at all that we understand what it is. That’s the
unconscious: one is guided by words of which one understands nothing.”
“It is not for nothing that man is happy with one, or even several, only. It is
because he doesn’t desire the others. Why does he have no desire for the others?
Because they are not consonant, if I can put it like this, with his unconscious.”
p. 17
“How is it that orthography exists? It is the most stupefying thing in the
world, and that moreover it is manifestly through writing that speech makes its
opening, through writing and uniquely through writing, the writing of what are
called figures [les chiffres], because no one wants to speak of numbers.” p. 23
Columbia University: Lecture on the Symptom (1975). Trans.: A. Price
and R. Grigg [C/C]
“I mean that a body has another way of consisting than what I was just referring
to as a spoken form, in the form of the unconscious, in so far as it is from
speech, as such, that it emerges. These are marks whose trace we can see in the
unconscious. These are marks that have been left by a certain way of relating to
knowledge that constitutes the fundamental substance of the unconscious.”
p. 14-15
p. 11
“Interpretation must always, on the analyst’s side, take into account that, in
what is said, there is the sonorous element. And this has to be consonant with
the unconscious.” p. 15
Geneva Lecture on the Symptom (1975). Trans.: R. Grigg [An 1, 1989]
The Other is missing (1980), [TV]
“The unconscious is not only being un-known.” p.
12
“How can one sustain a hypothesis such as that of the unconscious, unless one
sees that it is the manner in which the subject, if indeed there is such a thing as a
subject that is not divided, is impregnated, as it were, by language?” p. 13
“In those times philosophy was a way of life –a way of life concerning which
it could be perceived, well before Freud, that language, this language that has
absolutely no theoretical existence, always intervenes in the form of what I
call– using a word that I have wanted to make as close as possible to the word
‘lallation’, ‘babbling’–‘lalangue’, ‘llanguage’.
(…) It is absolutely certain that it is in the way in which llanguage has
been spoken and also heard as such, in its particularity, that something will
subsequently emerge in dreams, in all sorts of mistakes, in all manners of
speaking. It is in this moterialism, if you will allow me to use this word for the
first time, that the unconscious takes hold.” p. 14
460
Jacques Lacan
THE SPEAKING BODY
“Contrary to what is said, concerning phallic bliss [jouissance], Woman, if I may
so speak, since she doesn’t exist, is not deprived of it.
She does not have any less of it than the man to whom her instrument
(organon) is hooked However little she herself is endowed with it (for let us
acknowledge that it is slim), she none the less obtains the effect of what limits
the other edge of that bliss, namely, the irreducible unconscious. (…)
It is on the condition of not getting carried away by the idea of an antiphallic
nature, of which there is no trace in the unconscious, that they can hear what in
that unconscious is not intent on being uttered, but attains what is elaborated
from it, as procuring them a properly phallic bliss.” p.
134
461
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
II /c.1 Écrits
Aggressiveness in Psychoanalysis (1948), [É]
“One need but listen to the stories and games made up by two to five year olds,
alone or together, to know that pulling off heads and cutting open bellies are
spontaneous themes of their imagination, which the experience of a busted-up
doll merely fulfills.” p. 85
The Mirror Stage as Formative of the I Function (1949), [É]
“This fragmented body –another expression I have gotten accepted into the
French school’s system of theoretical references– is regularly manifested in
dreams when the movement of an analysis reaches a certain level of aggressive
disintegration of the individual. It then appears in the form of disconnected
limbs or of organs exoscopically represented, growing wings and taking up arms
for internal persecutions that the visionary Hieronymus Bosch fixed for all time
in painting, in their ascent in the fifteenth century to the imaginary zenith of
modern man.” p. 78
“The Function and Field of Speech and Language in Psychoanalysis”
(1953), [É]
“Here speech is driven out of the concrete discourse that orders consciousness,
but it finds its medium either in the subject’s natural functions –provided a
painful organic sensation wedges open the gap between his individual being and
his essence, which makes illness what institutes the existence of the subject in
the living being– or in the images that, at the border between the Umwelt and
the Innenwelt, organize their relational structuring.
A symptom here is the signifier of a signified that has been repressed from the
subject’s consciousness. A symbol written in the sand of the flesh and in the veil
of Maia, it partakes of language by the semantic ambiguity that I have already
highlighted in its constitution.” p. 232
“Speech is in fact a gift of language, and language is not immaterial. It is a subtle
body, but body it is. Words are caught up in all the body images that captivate
the subject; they may ‘knock up’ the hysteric, be identified with the object of
Penisneid, represent the urinary flow of urethral ambition, or represent the feces
retained in avaricious jouissance.” p. 248
462
Jacques Lacan
II /c. Speaking Body
THE SPEAKING BODY
“Seminar on The Purloined Letter” (1955), [É]
“Such is the signifier’s answer, beyond all significations: ‘You believe you
are taking action when I am the one making you stir at the bidding of the
bonds with which I weave your desires. Thus do the latter grow in strength
and multiply in objects, bringing you back to the fragmentation of your rent
childhood. That will be your feast until the return of the stone guest whom I
shall be for you since you call me forth’.” p. 29
“On My Antecedents” (1966), [É]
“If Freud reminds us of the relationship between the ego and the perceptionconsciousness system, it is only to indicate that our reflective tradition –we
would be wrong to think that it has had no social impact insofar as it has served
as a basis for political forms of personal status– has tested its standards of truth
in this system.
But it is in order to call these standards of truth into question that Freud
links the ego, on the basis of a twofold reference, to one’s own body –that is
narcissism– and to the complexity of the three orders of identification.”
p. 54
II /c.2 Seminars
[S. XI]
“Nevertheless, when articulated in this way, this experiment is interesting,
indeed is essential, in enabling us to situate our conception of the psychosomatic effect. I will go so far as to formulate that, when there is no interval
between S1 and S2, when the first dyad of signifiers become solidified,
holophrased, we have the model for a whole series of cases –even though, in
each case, the subject does not occupy the same place.” p. 237
[S. XVII]
“This is the hollow, the gap that no doubt a number of objects initially come
and fill –objects that, in some way, are adapted in advance, designed to be used
as stoppers. This is no doubt where a classical analytic practice stops, with its
emphasis upon these various terms, oral, anal, scopic, not to mention vocal.
These are various names by which we can designate, as an object, the a– but
the a, as such, is strictly speaking what follows from the fact that, at its origin,
knowledge is reduced to an articulation of signifiers.” p. 50
463
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Of a Function That is Not to Be Written” (1971). Trans.: A. R. Price
[HB 9, 2013]
“In other words, sexual jouissance only acquires its structure from the
prohibition concerning jouissance directed at one’s own body, in other words,
very precisely, at this stopping point and frontier where it verges on lethal
jouissance. And it only returns to the dimension of the sexual by bringing a
prohibition to bear upon the body that one’s own body emerges from, namely
the body of the mother. Only in this way is there structured and linked into
discourse what the law alone can lead there, namely what is involved in sexual
jouissance.” p. 25-26
[S. XX]
“Analysis presumes that desire is inscribed on the basis of corporal contingency.”
p. 93
“An opening, by which it is the world that makes us into its partner, is created
thereby. It is the speaking body insofar as it can only manage to reproduce
thanks to a misunderstanding regarding its jouissance. That is to say that it
only reproduces thanks to missing what it wants to say, for what it wants to say
(veut dire) –namely, as French clearly states, its meaning (sens)-is its effective
jouissance. And it is by missing that jouissance that it reproduces– in other
words, by fucking.” p. 120-121
“It’s only speaking bodies, as I said, that come up with an idea of the world as
such. The world, the world of being, full of knowledge, is but a dream, a dream
of the body insofar as it speaks, for there’s no such thing as a knowing subject (il
n’y a pas de sujet connaissant). There are subjects who give themselves correlates in
object a, correlates of enjoying speech qua jouissance of speech (parole jouissante
en tant que jouissance de parole).” p. 126-127
Le Sinthome (1976). Trans.: P. King, [HB 9, 2013]
“Joyce admits something to us. While disagreeing with his friends over
Tennyson, Byron and the poets, they tied him to a barbed wire fence, and the
one named Heron –a name that is not irrelevant– who directed the whole affair,
beat him for some time. Joyce questioned why it was that, as soon the thing was
464
Jacques Lacan
“What object is it that results from this effect of a certain discourse? We know
nothing about this object, except that it is the cause of desire, that is to say that
strictly speaking it manifests itself as want-to-be. There is therefore no being that
is thereby determined” p. 151
THE SPEAKING BODY
over, he wasn’t angry. Metaphorically representing his relationship to his body,
he said that he was divested of the whole affair as a fruit is divested of its soft ripe
peel.” p. 103-104
II /c.3 Other publications
“Note on the Child” (1969). Trans.: N. Wülfing [PN 20, 2010]
“The presence of what Jacques Lacan designates as object a in the fantasy is
realised by the child.” p. 7
“In the object he alienates all of the mother’s possible access to her own truth, by
giving it body, existence and even the demand for protection.
The somatic symptom is the maximum guarantee of this mis–understanding
(méconaissance); it is an inexhaustible resource, for testifying to guilt, for serving
as the fetish or for embodying a primordial refusal, depending on the case.
In short, the child in the dual relationship to the mother, gives her, immediately
accessible, what lacks in the masculine subject, namely the object of her very
existence, appearing in the real. As a result, commensurate with the real he
presents, he is given to greater subordination in the fantasy.” p. 8
“Television” (1973), [TV]
“If you follow along with me there, won’t you feel the difference between energy
–which is a constant that can be marked each time in relation to the One, on
the basis of which what is experimental in science is constructed– and the Drang
or drive of the drive which, jouissance of course, only derives its permanence
from the rims –I went so far as to give them their mathematical form– of the
body? A permance that consists solely in the quadruple agency by which each
drive is sustained through coexistence with three others. It is only as power that
four opens onto the disunion that must be warded off, for those whom sex is
not sufficient to render partners.” p. 24-25
“Freud Forever, and Interview with Panorama” (1974). Trans.: Ph.
Dravers [HB 12, 2015]
“… what the Freudian discovery returns us to is the enormity of the order in
which we are inserted, into which we are, so to speak, born a second time, from
out of the state that is rightly called infans, without speech.” p. 17
“It [anxiety] is something that is situated outside our bodies, a fear, but a fear of
nothing that the body, the mind included, can provide a reason for. In short, the
465
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Yale University: Lecture on the Body” (1975). Trans.: A. Price and R.
Grigg [C/C]
“A body has the property of being able to be seen, poorly seen. People think of it
as a bubble of air, a bag of skin. Here one is dealing with a support, a figure (of
the imaginary, that is), with a material that I posit as real.” p. 5
“Between the body insofar as it is imagined and what binds it (namely the fact
of speaking), man imagines himself as thinking. He thinks insofar as he speaks.
Speaking has effects on his body. (…) The real is not the outside world; it is
anatomy too, it involves the entire body.” p. 6
“Columbia University: Lecture on the Symptom” (1975). Trans.: A.
Price and R. Grigg [C/C]
“On the other hand, what man insists on is not that he is a body, but, as he
expresses it –and this is something quite striking– that he has one.” p. 14
Jacques Lacan
fear of fear! A lot of these fears and anxieties, at the level at which we perceive
them, have something to do with sex. Freud used to say that, for the speaking
animal called Man, sex is without remedy and without hope. One of the
analyst’s tasks is to find, in the patient’s speech, the knot between anxiety and
sex, that great unknown.” p. 21
THE SPEAKING BODY
II /d. Sinthome
II /d.1 Other publications
“Geneva Lecture on the Symptom” (1975). Trans.: R. Grigg [An 1,
1989]
“What I’m drawn to the most, is that this is the human dimension properly
so–called That’s why I spoke of holy Joyce-the-symptom [Joyce-le-sinthôme], like
that, in a single stretch.” p. 26
“Yale University: Lecture on the Body” (1975). Trans.: A. Price and R.
Grigg [C/C].
“Suppose if you will that the body, chit-chat, and the real each go off on their
own, wandering about . . .
Freud’s id is the real.
The symbolic, which the superego comes under, has to do with the hole.
If a fourth element is required, it is what symbolic, in so far as it forms a circle
with the unconscious, brings about.” p. 7
“Overture to the First International Encounter of the Freudian Field,
Caracas, 12 July 1980”. Trans.: A. Price [HB 6, 2011]
”The surprising thing is that number is provided by lalangue itself, with what it
conveys by way of the real.
Why not admit that the sexual peace of animals –if we just take the one that is
said to be their king, the lion– is down to the fact that number is not introduced
into their language, whatever it may be. Doubtless, training animals can
produce something that looks like it, but it’s just appearance.
Sexual peace means that one knows what to do with the Other’s body. But who
knows what to do with a parlêtre’s body? Except to hold it more or less closely?
What does the Other manage to say, and then only when he really wants to? He
says, hold me tight.” p. 19
466
467
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
Jacques–Alain Miller
III /a. Parlêtre, Speaking–Being
III /a.1 The Psychoanalytic Courses
“The Experience of the Real in Psychoanalysis” (1999). Trans.: J.
Jauregui [LI 16, 2000]
“The subject is handled as lack-in-being. In Seminar XX (…) Lacan assigns
another agency to it and at the same time attempts a joint articulation of both
the subject and this other agency. He calls it the speaking being (être parlant).”
p. 11
“The subject, as such, is specially disjoined from the body. Lacan introduces
it, and then deals with it as a correlation, first vis-à-vis parole, and then as pure
correlation of the signifier. You may say that is what makes the difference with
the speaking being. If with Lacan the subject becomes the speaking being, this is
due to the agency fundamentally anchored in the body.” p. 12
“[In] Seminar XX, jouissance and the subject are not cogitated under relational
auspices, and that for a very simple reason, namely Lacan gave up on the
subject. He forgoes the subject in order to invent a category, and this is the
speaking-being. Here subject and jouissance are thought together under the
auspices of a new entity: a body affected by the signifier, a body that is moved,
aroused by the unconscious.
(…) Yet, cautiously too, he wavers all previously familiar categories so that
parlêtre could, might, substitute for the very word ‘unconscious’.” p. 14
“Lacanian Biology and the Event of the Body” (1999). Trans.: B. P.
Fulks and J. Jauregui [LI 18, 2001]
“It is not only that the being of life is not the One of the individual, but also
468
Jacques – Alain Miller
3.
THE SPEAKING BODY
that the being of life, when the body is a speaking being, is this body in pieces.”
p. 12
“The Symptom and the Body Event” (1999). Trans.: B. P. Fulks [LI
19, 2001]
“And speaking with his body is what characterizes the speaking-being (parlêtre).
It’s natural for man, a little dehumanized thanks to this spelling LOM, that he
speak with his body, while for the animal it’s an effect of talent.” p. 23
“Then Lacan extracts himself from this duality to lead us to the parlêtre. The
parlêtre is the union of Aristotle’s upokeimenon and ousia, the union of the
subject and the substance, of the signifier and the body. There is being, but
being in speaking, being discerned by the word. So it’s an oscillating mixture of
the lack-in-being which operates and agitates the individual.” p. 26
“The general definition of the event producing traces of affect is what Freud
calls trauma. Traumatism, insofar as it is produced by the failure efforts of the
pleasure principle, is a factor that cannot be liquidated according to the norm
of the pleasure principle. That is to say, trauma causes the regulation of the
pleasure principle to fail. The foundational event of the trace of affect is one
which maintains a permanent disequilibrium, which maintains in the body,
in the psyche, an excess of excitation which can’t be reabsorbed We have there
the general definition of the traumatic event which will leave traces in the
subsequent life of the parlêtre.” p. 27
“Until he brought in the parlêtre, he accounted for the body at the level of the
formula of the fantasm, which in fact writes the necessity of completing the
subject of the signifier through a corporeal element –this subject of the negative,
interval, perpetually provisional, dead, born–dead signifier– the necessity of
giving it a corporeal complement, but at a small cost, that is to say, the petit a.
And with that, it all adds up.
(…) You have thus some Lacanian texts which circle around, presenting the
empty face, the full face, the logical and the corporeal face of the objet petit
a. The term parlêtre dominates this dichotomy. It implies that it is the body
together, not as a whole but as the body together which is set apart, which is
there considered as affected” p. 28
“Pure Psychoanalysis, Applied Psychoanalysis, and Psychotherapy”
(2001). Trans.: B. P. Fulks [LI 20, 2002]
“L’Étourdit put this structure at the level of the real. ‘The structure is the real,’
he said then. But when he separated lalangue from language, as grammar, as
469
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Religion, Psychoanalysis” (2003). Trans.: B. P. Fulks [LI 23, 2004]
“The question in Moses, when one sees it through the Lacanian prism, is that
no ‘God is dead’ can deliver the kind of speaking/beings from the power of
the signifier ‘one.’ Lacan posed the question in the same vein, a little later in
his Seminar Encore: “Where does the signifier ‘one’ come from; where does
the master–signifier as such come from?” (…) When one hears one of its
spokespersons –a recent convert, or one who has returned not so long ago– one
sees that monotheism condenses its force, the insistence of the master–signifier,
and that it translates, expresses, perpetuates the fixation which attaches the
speaking/beings to the signifier ‘one’.” p. 3
“It was because the Christians had a horror of revelation, inasmuch as the true
revelation is that there is a gap of jouissance, that there is no agreement of the
speaking/being with jouissance, that they are sent to do philosophy. Likewise, the
psychoanalysts had a horror that this analytic experience would reflect on this
revelation, that the speaking/being withdrew sexual rapport.” p. 20
“Introduction to Reading Jacques Lacan’s Seminar on Anxiety II”
(2004). Trans.: B. P. Fulks [LI 27, 2006].
“This is most evident in the way the Seminar puts into play two different
statuses of the body. In the first movement it is the specular body, that of the
mirror stage, in its totality, apprehended as a form, a good form, and even the
best of forms, since, if we believe its construction, it imposes on the speaking
being the perceptive world of its objects. It’s a Gestalt. The first movement plays
on this gestalt, since it shows how it can be disturbed, doubled, depersonalized,
made strange by the incongruous irruption of an object structured differently.
But one finds the specular object in the second movement having a different
structure; somehow, one finds in its place and perfectly informed this objet petit
a. These objets petit a do not stop at five.” p. 35
“Even if Lacan left behind some of the views expressed in the Seminar on
Anxiety and they do not occupy a major place in his later teaching, he reaffirms,
nevertheless, in L’envers de la psychanalyse, the central characteristic of the affect
of anxiety, the characteristic of an affect around which everything is ordered–a
unique affect. This is the affect par excellence, the unique affect inasmuch
as it connotes the production of the objet a, that is to say, the major effect of
470
Jacques – Alain Miller
structure, he only gave a few lucubrations.
He downgraded his concept of
language, and also that of structure, now not carried to the level of the real. It is
a correlative of the systematic replacement, directed to experience, of the term of
‘subject’ by the term parlêtre (speaking being).” p. 13
THE SPEAKING BODY
language on jouissance. This is why he says: ‘there is only one affect, correlated to
the product of the speaking being in a discourse’.” p. 61
“Spare Parts” (2004). Trans.: A. Price [PN 27, 2013]
“The Borromean perspective introduces having in order to disjoin Being and the
body. It thereby undoes what Lacan called his hypothesis—“the individual who
is affected by the unconscious is the same [as] the subject of the signifier”—in
order to disjoin the body and the symbolic in such a way that the conjunction
becomes a problem rather than a hypothesis or a mystery. This is why Lacan
will say parlêtre, which is precisely a non–Aristotelian Being, a Being which does
not abide by the body, which does not receive its Being from the body it would
ostensibly be, but from speech, i.e. from the symbolic. The parlêtre has a body,
a body is not what he is, and this is why he can let it drop. This is what Lacan
went and found in the example of Joyce.” p. 110
“Profane Illuminations” (2005). Trans.: B. P. Fulks [LI 28, 2006]
“Lacan will then take up defining the parlêtre. The parlêtre is the subject become
uration and inscribing itself as One of the body. What gives Lacan’s number 1 its
function is the relationship of the barred subject with petit a. The precipitation
around S opens the place of the body. Man has a body; one cannot say it’s of
the barred subject. Man speaks with his body and, says Lacan, “He parlêtre by
nature”–the word nature leading to the fact that he is denatured.
Parlêtre is, for Lacan, the equivalent or what replaces the Freudian unconscious,
and one sees that if one can employ it as the transformation of the barred
subject or of the unconscious, it is because it is functionally particularized.”
p. 24
“A Reading from Jacques Lacan’s Seminar From an Other to the other
I” (2006). Trans.: B. P. Fulks [LI 29, 2007]
“Jouissance lacks in the Other,” making this Other inconsistent. The whole
seminar From an Other to the other explores this proposition (…) the
relationship between the inconsistency of the Other and what returns from
jouissance on the side of the subject. In the same way, later, the correlation of
the subject and of jouissance will lead Lacan to make that singular being which
he calls the parlêtre intervene.” p. 14
“A Reading from the Seminar: From an Other to the other II” (2006).
Trans.: B. P. Fulks [LI 30, 2007]
471
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“It is believed that this is an attribute that particularizes man, but not only man
can efface traces, animals do it equally. What distinguishes him is: man is the
animal who can read his trace and transfer it where it didn’t exist before. The
causes are very elevated functions. We have here in some way the neologism of
the speaking–being (parlêtre) in genesis when it is a matter of the animal who
speaks, which Lacan will need to use later.” p. 60
“A Reading from the Seminar: From an Other to the other III”
(2006). Trans.: B. P. Fulks [LI 31, 2008]
“The themes of the original trauma of the parlêtre marked by the foreclosure
of the sexual rapport are distinguished It is not excessive to bring up the term
parlêtre, not introduced until years later by Lacan, since it signals that one
cannot say ‘the person’ in the place of the subject, but that a more ample seating
for the subject which involves jouissance as well was aimed for.” p. 115
“Lacan poses at this moment a question and responds to it, no doubt a little
quickly, that a sujet–supposé, a hupokaiménon, is what is satisfied by the drive.
We already know in advance that the barred subject is too flimsy to be able to
be what is satisfied by drive jouissance; being articulated in a chain, it cannot
be made to support this function. Lacan will speak later, much later, of the
parlêtre.” p. 124
“The Other Side of Lacan” (2007). Trans.: B. P. Fulks [LI 32, 2008]
“In the other side of Lacan, the Other is destitute, the subject is conceptualized
from the real, from the symbolic and from the imaginary as being these three
consistencies. This is, moreover, no longer the subject of the signifier, the subject
of identification, but rather the human being characterized as parlêtre. This is
what remains of the primacy of language (…) There is no identification there,
but rather belonging, ownership. This is not divided along the modes of the
extremity of the unary trait, if I may say so; it is not aimed at the point of lack of
the Other subject. It has to do with love, not the love of the father, but self–love
in the sense of the love for the One–body. The parlêtre adores his body. This is
the most certain of what is in the three modes of identification.” p. 63-64
472
Jacques – Alain Miller
“This God who can say ‘I,’ is the God who is a speaking–being. One does not
play a match with the God of the philosophers, but with the God who is a
speaking–being. This ‘I’ is, at the level of the unconscious, unpronounceable in
truth, and the beginning of the Seminar is taken up with the confrontation of
the unpronounceable ‘I’ with the inconsistent Other.” p. 16-17
THE SPEAKING BODY
“In the same fashion, the negation of the primacy of the Other brings the
absence of the sexual relationship into the order. There is no sexual relationship
between Others. Here also is the value of the term ‘solitude’ that I have
emphasized And if there is sexual relationship, when there is sexual relationship,
it can only be in relationship to an internal alterity to the structure of the
parlêtre. We owe the famous opposition between the symptom and devastation
to this: the woman causes sinthome, the man makes devastation. This is how
Lacan saves the sexual relationship, by indexing it to an alterity that is internal
to the structure of the parlêtre. This is why he invents a geometry of sexual
relationship, completely different from the concentric space of the imaginary.
He invents the geometry of sexual relationship as rather that of the returned
glove from the special use that Joyce felt about his wife in this regard: she fits
me like a glove. Lacan then formulates that everything that subsists in the sexual
relationship in the solitude of the parlêtre is the geometry of the returned glove,
that is to say, what contradicts, what is not on the order of the instantaneous
concentric space of vision. Hysterization is there to function as aid, to the extent
to which Lacan defines the hysteric as the final perceptible reality of what there
is of sexual relationship. While in the practice of psychoanalysis ordered by the
symbolic, the absence of sexual relationship causes scandal, and Lacan must
explain himself with himself: in L’Étourdit for example, he is absolutely not
the same as in Le sinthome. It is rather a matter of knowing in what precarious
condition the sexual relationship is established, and it is on condition that it is
comfortable with an alterity internal to the tripartite or quadripartite structure
of the parlêtre. It is stripped.” p. 69-70
“The Economics of Jouissance” (2009). Trans.: A. Alvarez [LI 38,
2011]
“Knowledge as a signifying articulation, affects the body of the speaking being
(…) by fragmenting its jouissance, by cutting it up until it produces the failures
which I turn into the objet a. The signifier affects the body of the parlêtre, the
speaking being, in that it fragments the bodily jouissance; these fragments are the
objets a.” p. 34
“If we take as our reference the state of wellbeing and the adjustments in
functional values which it involves –which I have already represented in
my course as a loop symbolizing the homeostatic regulation of the pleasure
principle, which has always been attached to a midpoint: neither too much nor
too little, just what is needed– jouissance then appears as a transgression, which
a connotation of more, a supplementary value resulting from a forcing where
the more turns easily into too much. Surplus pleasure thus communicates with
473
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Jouissance is not prior to the signifier, even if it is of the body. In what we no
longer call the subject but the parlêtre, the speaking being –as we regard it as
essentially concerned by jouissance– the body itself, its body, does not come
before the signifier either. It is not a reality prior to the signifier. By this fact, the
parlêtre is not its body. It has its body–in the same way as someone has a good,
a property, an object, which is well or badly treated, disdained, abandoned or
pampered. The care that is given or not to the body denotes the unconscious
value that is attributed to it.” p. 40-41
“The jouissance of which the parlêtre is capable is always the unsuitable jouissance.
We can always say of jouissance, in Latin: Non decet–it is not suitable. The only
suitable jouissance would be that of the sexual relationship, which does not
exist.” p. 45
“In this regard, if we remove its original reference, jouissance is everywhere in
the signifier. There is a jouissance of speech, which is part of the metonymy of
substitutive jouissances. There is a jouissance of knowledge, of the forbidden, etc.
There is nothing within the sphere of the parlêtre to which a jouissance cannot
be attached. Paraphrasing Leibniz, we might say: Nothing is without jouissance.”
p. 47
“Jouissance can be tracked down in all manifestations of interest. We might
even say that nothing subsists for the parlêtre which does not have a jouissance
coefficient. This is how the formulation of symptoms is coextensive to the
emergence of jouissance.” p. 48
III /a.2 Other publications
“Lacan with Joyce: The Seminar of the Clinical Section of Barcelona”
(1996). Trans.: Ph. Dravers [PN 13, 2005]
“Joyce shows us that the trauma is that of the incidence of language on the
speaking being. All that Freud says about fixation passes through language.
Joyce shows us in a pure way the essence of this trauma, which is the trauma
of language. He exploits this trauma, sintraumatises it as Lacan says. This is
the essence of any symptom. They usually hide themselves beneath fantasies,
but with Joyce we have the essence of what a symptom is. It is the knot of the
clinic.” p. 31
474
Jacques – Alain Miller
the start of suffering– for example, with the equivocation of cries, which in the
speaking being, can spell out this irruption.” p. 37-38
THE SPEAKING BODY
“Interpretation in Reverse” (1996), [LL]
“Beyond this, another dimension opens up where the structure of language
itself is relativized and merely appears as an elaboration of knowledge [savoir]
on lalangue. The term ‘signifier’ fails to grasp what is at stake since it is designed
to grasp the effect of the signified, and it struggles to account for the jouissance
produced. From then on, interpretation will never again be what it used to be.
The age of interpretation, the age in which Freud turned the universal discourse
upside down by means of interpretation, is over.” p. 6
“Equivalence Between the Other and the Symptom” (1998). Trans.:
B. Wolf [PN 12, 2004]
“The Thing of the speaking being has nothing to do with the pure, vital
jouissance of the image being; there is a special status of jouissance beyond the
symbolic–the jouissance in question in the Thing is an effect of the signifier. And
that is why from L’Envers onwards Lacan can say that the signifier is introduced
as an apparatus of jouissance.” p. 19
“Psychotic Invention” (1999). Trans.: A. R. Price [HB 8, 2012]
“The subject’s language–organ forms a parlêtre. This means that a dire, a fact of
saying, issues him Being, but at the same time it issues him ‘having’, his essential
‘having’ which is to have a body.” p. 261
“On the Discourse of Science” (2002). Trans.: L. Singer and T. Sowley
[A 4, 2004]
“Language as such is not necessarily spoken. It is a set comprising a lexicon
and a grammar. It is dead. There is discourse when a speaking being, a parlêtre,
brings life to language, or is enlivened by it, when he dwells in it, when he is
infiltrated, inhabited by language.” p. 18
“The Other Side of Lacan” (2007). Trans.: B. B. Fulks [LI 32, 2008]
“In the other side of Lacan, the Other is destitute, the subject is conceptualized
from the real, from the symbolic and from the imaginary as being these three
consistencies. This is, moreover, no longer the subject of the signifier, the subject
of identification, but rather the human being characterized as parlêtre. This is
what remains of the primacy of language. In the place of the Other, there is
a whole other principle of identity, of which Lacan only gives some fugitive
glimpses: in lieu of the Other there is the body. Not the body of the Other, the
475
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“The Unconscious and the Speaking Body” (2014). Trans.: A. R. Price
[HB 12, 2015]
“This is the operation which I suggest can provide us with our compass for the
next congress. This metaphor –the substitution of the Lacanian parlêtre for the
Freudian unconscious– fixes down a scintillation. I propose that we take it as an
index of what is changing in psychoanalysis in the twenty–first century, when it
has to take into account an other symbolic order and an other real besides those
upon which it was established.” p. 126
“Debility, delusion, dupery, this is the cast–iron trilogy that echoes the knot of
the imaginary, the symbolic and the real. (…) Analyzing the parlêtre requires
one to play one’s way between delusion, debility and dupery. (…) What is
called the ‘return of the repressed’ is always dragged into the flow of the parlêtre
where truth turns out to be incessantly mendacious. In place of repression, the
analysis of the parlêtre installs mendacious truth, which stems from what Freud
recognized as primary repression. This means that truth is intrinsically of the
same essence as the lie. The proton pseudos is also the ultimate falsehood. What
doesn’t lie is jouissance, the jouissance of the speaking body.” p. 131
III /b. Unconscious
III /b.1 The Psychoanalytic Courses
“The Other Who doesn’t Exist and His Ethical Committees”(1996).
Trans.: M. Julien, R. Klein, K. Polley, M. Twitchin and V. Voruz [A 1]
“But this real –that of which I have said there is a real in analytic experience– is
not the real of the discourse of science, not the real made gangrenous by those
semblants which emerge from it, and which one is reduced to approaching
by numbers to locate it, as has always been done. It is, on the contrary, the
real specific to the unconscious, or at least that to which, following Lacan’s
expression, the unconscious bears witness.” p. 19
“The Semblant and the Real” (1998). Trans.: V. Voruz and B. Wolf,
[PN 9, 2002]
476
Jacques – Alain Miller
body itself, as one expresses it, but the One–body. We must create some names
in order to find it there in the history that one is trying to tell about these pieces
of real.” p. 63
THE SPEAKING BODY
“These two operations will indeed allow Lacan to rejuvenate our reading of
Freud, and in particular of what in Freud could figure as the raw real, namely
id which is thereby signifierised and defined in the following way: the id, in
German Es, is of the signifier, says Lacan, which is already there in the real, some
misunderstood signifier.” p. 17
“We see why it is a problematic reference: on the one hand, it is a kind of
deduction made from the unconscious, it is the unconscious itself which appears
as a response made to the real at the level of the semblant, a response to the hole
in the real, a response which has to do with the vain effort to make the absence
of sexual programming signify at the level of the real–it appears as a deduction
made from the unconscious, and maybe even as an invention.” p. 26
“Likewise, we see that to situate the unconscious in relation to the real is entirely
different from situating it in relation to the Other. To situate the unconscious in
relation to the real amounts to saying that the unconscious is fundamentally a
soliloquy, that the unconscious amounts to speaking alone in the semblance as
a defence against the real. It amounts to rendering psychoanalysis an exception.
Lacan’s last teaching is situated along this edge.” p. 28
“What is the Real?” (1998), [LI 43/44, 2014]
“(…) in On a Question Prior to Any Possible Treatment of Psychoses, Lacan
indicates that the dimension by which the letter manifests itself in the
unconscious is less etymological than it is homophonic.” p. 17
“To say that the unconscious is history is to say that it is constituted by
the sum of the effects of meaning, where it has, in a certain way, its real
substance. Lacan’s teaching originates, precisely from the notion that the real
is the meaning. This starting point was veiled by Lacan’s next step –and what
crystallized as Lacanianism– according to which the psychoanalytic real is the
signifier.” p. 22
“In order to situate the ideas, I offer Lacan’s second matheme, the one that erects
a bar between what is real and everything that is no more than semblance. I will
add that, at the same time, it deals with bringing to question the unconscious as
meaning, as history, that is, as meaning and as knowledge. For this reason Lacan
hinted that what he was searching for was located, these are his words, ‘beyond
the unconscious’, according to his first lesson in his seminar titled L’insu que sait
de l’une-bévue s’aile à mourre. It is the search of a notion, a concept, a movement,
a vector that would go beyond the unconscious.” p. 22-23
477
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“And that is how he accounts for the phenomenon, for affinities between the
position of the analyst and the closure of the unconscious. To be the cause of
desire of the analysand, the ideal of the analyst is to close himself off to his own
unconscious, which is precisely what is hidden behind that which grants unity
to what is called orthodox psychoanalysis: the counter–transference which
invites the analyst to take as ideal their being as subject of the unconscious,
while the position of the analyst, according to Lacan, is inverse and
complementary to the analysand position.
The desire of the analyst as a desire to obtain the absolute difference –I take
Lacan’s definition– is not a desire of knowing.” p. 25-26
“We repeat these days that the symptom is real, that there is a real coming
from the symptom, but this real is first of all imaginary –let’s stop here– it is a
signification. There are registers where it is perceived especially in everything
relative to the complaint about jouissance, complaints relative to the masculine
impotence, where the dependence is confirmed with respect to women’s sayings.
As for the feminine relationship with the orgasm, this finds itself deeply marked
by phenomena of belief and a subjective modality subject to variations, which,
if one believes in the real of the symptom at this level, sometimes surprises
because of its flexibility. The first statute of the symptom is imaginary, and it is
in analysis where its symbolic statute moves to the first plane, until a reduction
permits saying that it reaches the symptom as real.” p. 28
Lacanian Biology and the Event of the Body (1999). Trans.: B. P.
Fulks and J. Jauregui [LI 18, 2001]
“This analogy of the letter and the germ is evidently made to give us the notion
of a reproduction of the letter, but which supposes the exteriority of knowledge
(savoir) in relationship to being, in relationship to body. It is a transmission of
the letter, but in a position of exteriority. Thus Lacan says: ‘Knowledge (savoir)
is in the Other. It is a knowledge which is supported by the signifier and which
owes nothing to the knowing (connaissance) of life (vivant)’.” p. 21
“What emerges instead is a drive that restores the living to death –the opposite
of self-preservation. Lacan reads it like detours of the signifying system, which is
the Freudian name for the superego. There is in Freud, supported and valued as
such, a dualism of drives. There is death drive, which I translate as drive of the
478
Jacques – Alain Miller
“Lacan denies that it is beyond psychoanalysis, although the pass is evidently
a strengthening, a supplement to the analytic experience. It is already in the
movement that will drive it, towards the end, to posit a dimension beyond the
unconscious. This already present movement animates the pass.” p. 23
THE SPEAKING BODY
superego, and there is the sexual drives, life drives adverse to the drives that lead
to death– hence they are not drives of self-preservation, but of reproduction.
Freud bases this dualism on Weismann’s biology, on the difference between
soma and the germ-cell.” p. 27
“You must notice the striking transformation that Lacan performs on the theory
of drives allegedly grounded on biology. When we say drive we are not taking
into account, in spite of Freud’s repeated warnings, the dualism of the drives:
Lacan’s perspective outclasses the dualism of the drives. Lacan takes great pains
to extract the drive as such from what Freud accepted under the form of this
dualism.” p. 28
The Symptom and the Body Event (1999). Trans.: B. P. Fulks [LI 19,
2001]
“Ah! Another couple, the real and truth. The real mocks truth, and in regard
to the real it makes sense to say that variable truth is only a semblance. The
correlate of the real is not truth but certitude, which is, if one wishes, a truth
that does not change. We arrive at certitude of the real only by the signifier as
knowledge, and not as truth. As for truth, it is not eternal except as given by a
God who would only want the good.” p. 14
“Here we have on the one hand the logic of the signifier with its dead subject,
and on the other the palpitating individual, affected by his unconscious. Because
of these two sides Lacan introduces his hypothesis, knowing that the subject
of the signifier and the individual or affected body are one and the same: “My
hypothesis is that the individual who is affected by the unconscious is the same
individual who constitutes what I call the subject of a signifier.”
This implies that the signifier not only has the effect of signifying, but also the
effect of affect in a body. We have to give the term ‘affect’ all of its generality.
It’s what comes to disturb, to make a trace in the body. The effect of affect also
includes the effect of the symptom, the effect of jouissance, and even the effect
of subject, but the effect of subject situated in a body, not as the pure effect of
logic. When it’s a durable effect, a permanent effect, one can justifiably speak of
traces.” p. 25
Pure Psychoanalysis, Applied Psychoanalysis, and Psychotherapy
(2001). Trans.: B. P. Fulks [LI 20, 2002]
“I remember that Lacan, in a detour in his Seminar, reproached himself
for having once joined them, instead of separating them, in his ‘that which
speaks.’ He reproached himself for having joined the id and the unconscious,
479
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
p. 6
“Lacan pointed it out in black and white: the subject–supposed–to–know is not
real. Thus it is not equivalent to savoir in the real.
Lacan always insisted on this.
The motivation for psychoanalysis is the supposed transferability of savoir. This
does not at all assure that there is savoir in the real. Thus the status he gave to
the unconscious as being functionally a hypothesis, or even an extrapolation.”
p. 18
“It is to make the distinction between the real, properly stated, and meaning
that we find something like lalangue. How did Lacan invent lalangue,
distinguished from language? He raised his concept of language and structure a
notch to the level of the futility of meaning. He said: “In the end, this language
with its structure is a construction, a lucubration of knowledge which is
established above the real.” p. 25
Countertransference and Intersubjectivity (2002). Trans.: B. P. Fulks
[LI 22, 2003]
“Because he makes transference essentially a blockage of the dialectic, he
formulates precisely: “Transference is nothing of the real in the subject.” (…) In
the proposition of the pass in 1967, the same term return[s] concerning the sujet
supposé savoir. ‘The sujet supposé savoir is not real’.” p. 51
Religion, Psychoanalysis (2003). Trans.: B. P. Fulks [LI 23, 2004]
“We see a marvelous effort, a new youthful vigor of religion in its effort to flood
the real with meaning. Psychoanalysis is not a narcotic. Nor is it good sense. It
has to accommodate the real, the new real, the real which is the production of
the discourse of science, which has nothing to do with nature. If I dared give it
this title, parodying Heidegger, I would say that the analyst makes himself the
shepherd of the real.” p. 8
“Structure for Lacan is what allows for doing censoring and prohibition. And
more precisely, in psychoanalysis, structure is what replaces the prohibition
through the impossible. That is Lacan’s operation on Freud. This is the meaning
of the return to Freud, namely the reprise of the Freudian project turned
upside down. This reprise consists in making two of the unconscious and
480
Jacques – Alain Miller
in its manifestation as parole, in his ‘that which speaks.’ This schematic shows
the lesson of what Lacan had at one time considered as his confusion, which
distinguishes the place of parole and the drive, here the Other and the id.”
THE SPEAKING BODY
psychoanalysis. There is the unconscious and there is psychoanalysis. (…) The
unconscious is not psychoanalysis. Lacan said it: the unconscious is the political.
The unconscious is the presupposed master–signifier.” p. 12
Introduction to Reading Jacques Lacan’s Seminar on Anxiety I (2004).
Trans.: B. P. Fulks [LI 26, 2005]
“Lacan tries to animate the bodies of jouissance which are not signifiers with the
organs. He illustrates this throughout in a summary fashion as a piece of body–
he alludes to the ‘pound of flesh’ that Shakespeare mentions in his play. In fact
it’s a matter of bits of the real which are found for the first time illustrated in an
imaginary fashion, in a material fashion, which will only later find their status of
logical consistency.” p. 39
“Of course, anxiety is what does not deceive, but what does not deceive is what
does not become signifier, what does not partake of Aufhebung. It is the real
remainder. This real remainder is jouissance, in as much as it does not let itself
be captured by the signifier, the irreducible jouissance of the pleasure principle,
and, it is anxiety, in as much as it is the affect of displeasure which connotes the
non–signifiable. Lacan begins his seminar with the formula: “anxiety is the sign
of the desire of the Other,” but it will be surmounted by another formula in
Chapter XII, “anxiety is the signal of the real.” The essential function of anxiety
is not its liaison to desire, but its liaison to the real. p. 63-64
Introduction to Reading Jacques Lacan’s Seminar on Anxiety II
(2004). Trans.: B. P. Fulks [LI 27, 2006]
“The concept of the unconscious, as it is presented at first in The Four
Fundamental Concepts of Psychoanalysis, is constructed to conform to the
structure of the orifice as it is demonstrated in the fourth part. This is why,
throughout Seminar XI, for the best reasons in the world, Lacan states that the
drive is organized according to gaps homologous to that of the unconscious,
precisely because he constructed his concept of the unconscious in the fourth
part of the Seminar on Anxiety.” p. 36
Detached Pieces (2005). Trans.: B. P. Fulks [LI 28, 2006]
“It speaks is on occasion so powerful, however, that it obscures that the reading
aloud of what is written (…) the passage from writing through the voice (…)
has historically been a condition of readability of the writing. Writing has to be
spoken (parlé) in order to become speaking (parlant). This is true of writing as
inscription of speech, as notation of what is said, its reception, its representation.
481
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Two terms correspond to these modes of writing. First, the signifier, writing
which is there in order to signify, in order to have the effect of signified; and
second, properly speaking –but very hard to speak of it properly– the letter.”
p. 30
“The signifier and the letter, that makes two, are obscured, when the letter serves
to write speech (…) but this ‘making two’ between the letter and the signifier
cannot be misunderstood when the letter spreads out, twists, as in types of
knots. Lacan’s knots are a writing, writing suitable for the sinthome. p. 33
“When Lacan introduced the notion of a discourse which would not be of
the semblant, the conditional usage almost led him to believe that discourses
were condemned to be of the semblant. (…) But having constructed the cage,
having pointed out the bars, Lacan advanced towards the effective construction
of a discourse which would not be of the semblant. It was deployed (…) in the
Seminar on the Sinthome. He managed to find in the letter a usage which is
not a usage of semblant, which is not a usage of the signifier, which leads the
signifier to the letter which borders it.” p. 33-34
“Finnegans Wake brings the signified to the stage (…) an enormous stratification
of signifieds, of resonances, which show that most of the time, one is satisfied
with a good gross signification, and then, in psychoanalysis, one manages to
make another. (…) In a free state, even if it takes a lot of work to get there, a
word can have infinite resonances. Or language is the zero stratum, sigma zero,
and with Joyce one has the idea of something like an infinite sigma.”
p. 34-35
A Reading from the Seminar: From an Other to the other II (2007).
Trans.: B. P. Fulks [LI 30, 2007]
“There is thus a whole zone of this Seminar where he deals with what is attached
to pure speech and what is attached to pure writing, heading, after this Seminar,
in a certain fashion, more toward pure writing.” p. 15
A Reading from the Seminar: From an Other to the other III (2007).
Trans.: B. P. Fulks [LI 31, 2008]
“Knowledge of the drives is enough to render the sexual act problematic,
inasmuch as the drives are capable of satisfying themselves outside the sexual
482
Jacques – Alain Miller
What interested Lacan in the act of writing (…) was another mode of the act
(…): writing as mark, isolated trait (…) unary trait, a translation which he
invented for what he focused on in Freud’s text in relation to identification
through einziger Zug.” p. 29
THE SPEAKING BODY
goal. This is their capacity of sublimation, says Freud, and Lacan follows him
to the letter in this Seminar where he returns to his constructions of The Ethics
of Psychoanalysis, adding that the drives are not satisfied by exception or by re–
routing, but they are satisfied outside the sexual goal, properly speaking. We still
do not have here the premises of this antinomy between the drive and sex on
which he will begin his Seminar Encore. Lacan preserves here the notion that the
sexual is still on the horizon of the drive.” p. 124-125
The Other Side of Lacan (2007). Trans.: B. P. Fulks [LI 32, 2008]
“The term ‘real unconscious’ has not held in Lacan’s teaching, the Freudian
mark being too powerful on the term ‘unconscious’ to be able to characterize
it as real. The unconscious as Freudian is an unconscious that has meaning and
that is interpreted, while the meaning and interpretation are extinguished in
the term ‘real’. That is why–I suppose–Lacan was at an impasse with the real
unconscious. Then, the following year, he tried to propose ‘something that goes
further than the unconscious’. He did not name this something, for which we
keep the pseudonym of real unconscious. It is the real, such as in labyrinths,
vortices, the complications presented in the form of a quest in analysis.”
p. 61-62
“Thus also the notation that, for Freud, the relationships of the symbolic and
the real ‘are very ambiguous,’ and the question raised when Lacan supposes that
‘the unconscious is real’. We are close here to the famous phrase of L’esp d’un
laps. How do we know if the unconscious is real or imaginary? (…) It presents
an ambiguity between the two. We thus see the impeccable ordering of the three
get complicated with ambiguities and equivocations, to the point that Lacan
says that for the most part, real, imaginary and symbolic pass from one to the
other, merge, and that the absolute distinction we theorize and introduce is
only the effect of the ordering they are subjected to. This is a mental, conceptual
fabrication.” p. 65
Pass Bis (2007). Trans.: A. Price [PN 17, 2008]
“It’s through putting the very notion of the signifying finality of the formations
of the unconscious into question that Lacan then isolates the real unconscious,
which is an unconscious without repression.” p. 101
From the Neurone to the Knot (2008). Trans.: A. Price [PN 22, 2011]
“[ … ] there is no sexual causality. He [Lacan] said rapport, relation (…) to say
that there is no causality and there is no law of relation between the sexes.
483
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“What could be considered here as an impotence of the analytic discourse to
formulate the sexual relation is treated by Lacan as an impossibility. Analysis
becomes the very locus at which the unconscious attests to this real, a real, if you
will, without knowledge.
In what measure is there a matheme of the real? We are forced to say that it
is a real without matheme (…) Ultimately he [Lacan] invents a real without
matheme, or, he makes the sexual relation a real without matheme (…)
When Lacan formulated, in his last written text, that ‘the unconscious is
real’, he meant that the unconscious is not imaginary (…) He means that the
unconscious is not symbolic (…) He means that the unconscious is at the level
of the lawless, and that it doesn’t even represent the return of truth in the field of
science, because truth, compared to this real, is but a mirage.” p. 120
Everyone is Mad (2008). Trans.: A. Price [C/C]
“What goes against psychoanalysis is, first, ‘the fragmentation … from the
outset in the combinatory of the unconscious’; second, ‘the breakdown of the
drive into its component parts’.” p. 21
The Economics of Jouissance (2009). Trans.: A. Alvarez [LI 38, 2011]
“This transport–export enterprise was developed by Lacan under the form:
the drive is a signifying chain. Why not? Why not say, indeed, that a drive is a
demand, a demand which cannot be refused–to put it like Marlon Brando in
The Godfather, a headless demand: it’s a bodily demand.” p. 13
“Lacan’s distinction between demand and desire –which was particularly
striking for us back in the day due to its clarity and its capacity to arrange the
phenomena in the psychoanalytic experience– didn’t simply have the aim of
detaching the function of desire, but also the function of the drive as a higher
form of demand, that is to say a demand whose elements are not the signifiers of
language but the signifiers of the body. It’s a higher form of demand, as Lacan’s
graph is built on the basis of this schema. It involves two lines, the lower line
being the line of demand, and the upper line that of the drive–conceived as
parallel (…) simultaneous on the temporal level, in which signifiers are organic
484
Jacques – Alain Miller
He thought that he was thereby pitting the real proper to psychoanalysis, in the
shape of a real that would not contain a knowledge and that would carry the
knowledge of the unconscious, against the real of science which does contain
knowledge. But it would specifically carry the absence of law, it would precisely
carry the hole of this knowledge. There is no sexual relation is the notion of an
absence of law. Sexual law cannot be written.” p. 119
THE SPEAKING BODY
signifiers, as Lacan expressed himself at the time. The upper chain is, he says,
‘constituted by signifiers, that is, it develops in terms of the drive’.” p. 15
“To the extent that Lacan was able to say that, in the human species, the letter is
analogous to the germ, that in order for the germ to be transmitted through the
generations, a certain type of signifier –which Lacan called the letter in order to
stress the materiality of this signifier– must be transmitted.” p. 31
“Lacan’s knots are knots of sens-joui. It is this unit that lies at the heart of the
triplicity placed at the forefront of this entire last teaching. There are three
dimensions, there are three threads of string; three thus seems to dominate this
reflection, whereas it’s invisible foundation is the one of the coalescence of the
sens-joui. The signifier itself is altered by this. When Lacan shows lalangue as the
foundation of language, when he isolates it beneath the artificial constructions
of language, he distinguishes in the same way the signifier from the letter –
which means that, in both cases he moves along the lines of what I will call,
for lack of a better word, materiality– as is evidenced by the handling of the
Borromean knots.” p. 35
“This leads to a status of the signifier prior to the structure of language, which
can be called prelinguistic, if linguistics starts when signification effects are taken
into account. It was along these lines that Lacan invented lalangue, woven with
signifiers but prior to language. The structure of language appears as derived
with respect to lalangue.” p. 56
Theory of Caprice (2000), trans A. R. Price [PN 21, 2010]
“The formula that best corresponds to this is less the formula of the fantasy
than that of the drive, i.e., a will that is properly acephalic, where the subject
disappears in as much as he is acted upon.
What is nice in capriciousness is that the subject assumes the will that acts
upon him as his own will. What is divine is capriciousness –capriciousness is
attributed to the gods par excellence– is an ‘I want,’ not ‘what may be the law
for everyone,’ but ‘I want what is driving me’. I express an absolute ‘I want’ what
is acting upon me as drive, what is driving me. ‘I have little aggressive drive with
regard to the slave’ says Madame, ‘I want him crucified’.” p. 23
“The principle of this will is very well indicated by Lacan, it’s the small a. The
truth of ‘I want’ is the object small a, which in the Other divides the subject,
i.e., extracts a barred subject from the good little subject that Lacan calls the
‘brute subject of pleasure’, the natural subject. Lacan identifies this dividing will
with the will of the drive, with the drive as will–to–enjoy.” p. 25
485
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
Lacan with Joyce: The Seminar of the Clinical Section of Barcelona
(1996). Trans.: Ph. Dravers [PN 13, 2005]
“Joyce was compelled to put the relation between sound and sense down black
on white, for he was not totally protected from the echoes by The–Name–
of–the–Father, any more than he could protect his own daughter who was
schizophrenic. Writing functioned as a screen to prevent him from the infinite
echoes of language. His being was his symptom.” p. 27-28
Interpretation in Reverse (1996), [LL]
“What Lacan christened as object petit a is indeed the ultimate waste of a
grandiose attempt, the attempt to integrate jouissance in the structure of
language–even if it meant extending this structure to the structure of discourse.
Beyond this, another dimension opens up, where the structure of language is
itself relativised and merely appears as an elaboration of knowledge [savoir] on
lalangue. The term ‘signifier’ fails to grasp what is at stake, since it is designed
to grasp the effect of the signified and struggles to account for the jouissance
produced.” p. 6
“Psychosis, here as elsewhere, strips the structure bare. Just as mental
automatism exposes the fundamental xenopathy of speech, so the elementary
phenomenon is there to manifest the original state of the subject’s relation to
lalangue. The subject knows that what is said [le dit] concerns him, that there is
some signification, although he does not know which one.
This is why, at this point precisely, as he advances in the other dimension
of interpretation, Lacan resorts to Finnegan’s Wake, namely, to a text that
unceasingly plays on the relations between speech and writing, sound and sense,
a text full of condensations, equivocations, homophonies, but nevertheless has
nothing to do with the old unconscious. In Finnegan’s Wake, every quilting point
is made obsolete. This is why, despite heroic efforts, this text can neither be
interpreted nor translated. That’s because it is not itself an interpretation, and it
wonderfully brings the subject of reading back to perplexity as the elementary
phenomenon of the subject in lalangue.
(…) What we still call ‘interpretation’, although analytic practice is ever more
post–interpretative, is revealing no doubt, but of what if not of an irreducible
opacity in the relation of the subject to lalangue. And this is why interpretation
–this post-interpretation– is no longer, if we are to be precise, a punctuation.”
p. 8
486
Jacques – Alain Miller
III /b.2 Other publications
THE SPEAKING BODY
Psychotic Invention (1999). Trans.: A. R. Price [HB 8, 2012]
“[Lacan refers] to the trauma that the signifier of lalangue and its jouissance
invariably produce, to the trauma that lalangue produces for a subject. In
the late phase of his teaching, Lacan even turns this into the kernel of the
unconscious. The kernel of the unconscious is the fact that people were speaking
around you, and their signifiers were invested in and traumatised you. When
one searches, this is what one finds definitively as a kernel. This is precisely
the trauma of the signifier, the enigmatic signifier, the jouissance signifier,
which calls upon a subjective invention. This invention is an invention of
meaning, which is always more or less a delusion. There are the delusions of
the established discourses, and then there are delusions that have truly been
invented. But a delusion is an invention of meaning.” p. 263
The Analytic Session (2000). Trans.: V. Voruz and B. Wolf [PN 10,
2003]
“What does Lacan demonstrate? He demonstrates that speaking generates the
Other as a locus. Speaking supposes a position of speech. Speaking always poses
itself as truth and, in posing itself as truth, speech moves away from itself and
towards another locus, the locus of the Other, which is at the same time the
locus of its address and the locus of its inscription. (…)
The function of language is deducted from the field of language, and this field
has the value of locus of the Other. It is a locus that is materialised by writing in
so far as it requires a surface for inscription whereas, conversely, the address of
speech fades away in writing–hence the delocalisation of address it entails.”
p. 22
Presentation of Book VI of the Seminar of Jacques Lacan (2013).
Trans.: A. R. Price [HB 10, 2013]
“It is thus a question of the subject–object relation in unconscious desire that
Lacan names fantasy. The true title of Seminar VI, I would say, is Desire and
Fantasy, at least this is what I have concluded from my reading and editing.
Here, fantasy is in the singular. It is not a question of the subject’s reveries, it is
not a question of the stories that the subject tells himself or tells his analyst, it
is a question of a relation that remains unconscious. (…) It is in this seminar
that we encounter just once, the expression ‘the fundamental fantasy’ (…) and it
will reappear again, just once, ten years later when Lacan comes to develop the
theory of the pass as the end of analysis, the theory of the pass as the traversal of
the fantasy.” p. 26
487
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
The Unconscious and the Speaking Body (2014). Trans.: A. R. Price
[HB 12, 2015]
“The unconscious structured as a language (…) is ‘a flight of fancy of
knowledge about lalangue’, the lalangue of the speaking body. It follows that
the unconscious is itself a flight of fancy of knowledge about the speaking body,
about the parlêtre.” p. 130
“(…) not everything is semblance, there is a real. The real of the social bond is
the inexistence of the sexual relation. The real of the unconscious is the speaking
body.” p. 131
III /c. Speaking Body
III /c.1 The Psychoanalytic courses
Lacanian Biology and the Event of the Body (1999). Trans.: B. P.
Fulks and J. Jauregui [LI 18, 2001]
“Death is the other side of life. A biology which includes the death drive is a
biology of the other side of life, an other side which is open to the speaking
being through language. This other side of life is materialized through the
sepulcher, since the human species is the only one in which the dead body
keeps its value. Sade himself is the example of this other side of life which is
open to the speaking body. He dreamed of the death of molecules. He dreamed
of a criminal who could, beyond the individual, kill molecules. Practically,
as we know, he demanded in his will that his proper name be effaced on his
tombstone.” p. 17
“My sole interest for life is its connection to jouissance in as much as it could
be that life is what deserves to be qualified as real. I believe Lacan’s propositions
do not object the formulation that life is the condition of jouissance. If life is
condition of jouissance, it is a necessary condition, not a sufficient one. I’ve
been careful to distinguish life as such, to not say as force, and the body. Life
488
Jacques – Alain Miller
“Unconscious desire remains attached, in fantasy, to jouissances that, in
relation to the norm idealized by psychoanalysts, remains intrinsically perverse.
Perversion is not an accident that happens to desire. All desire is perverse in so
far as jouissance is never in the place that the so–called symbolic order would
like it to be.” p. 27
THE SPEAKING BODY
overflows the body. What obliges you to attest there isn’t jouissance unless life
appears under the form of a living body.” p. 22
The Symptom and the Body Event (1999). Trans.: B. P. Fulks [LI 19,
2001]
“Until Freud–because we have read Lacan–truth did not speak. One spoke of
it, and one could imagine speaking truly. Really one could not speak without
understanding ‘I speak the truth.’ This is true even for he who says, ‘I lie.’ Thus
the paradoxes of logic.
After Freud, truth itself began to speak in the speaking body, to speak in the
word and in the body. And since truth began to speak for itself, to speak in
the stutterings of speech (the lapsus), as in the exploits of speech (witticism),
as in the slips of the body (parapraxis), the naïve ‘I speak the truth’ ceded its
until then immovable place. It is because I don’t tell the truth that I need to be
interpreted. Someone must design in my inevitably well–intentioned lie, in its
misunderstanding, in its mistake, the moment, the instant in which the truth
shines, is made clear.” p. 13
“Psychoanalysis could begin because it was interested in hysteria, and what
characterizes hysteria is what we find in the body sick of truth. Freud expressed
it in terms of repression and the return of the repressed. The hysterical body
refuses the dictates of the master signifier. It parades itself in pieces, in some way
separated from its algorithms, from the knowledge inscribed in its substance.
Curiously, Freud called this phenomenon somatic complaisance, while Lacan
calls it ‘refusal of body’. It is a double refusal, both of and by the hysterical body.
This means first that the body refuses to obey the soul, natural knowledge. It
refuses to serve the ends of its self–conservation. Second, the subject of the body
refuses the body of the Other. Thus the sexual relation becomes problematic:
the subject refuses the body in its body, that is to say the infant, reproduction
(the hysterical body tends to be confused about the reproduction of life), and
she refuses her own body, a refusal connoted by the affect of disgust which we
recognize in the clinic.” p. 16
“The symptom as body event is connected to ‘having a body’ and underlines the
fact that man, as a generic term, is characterized among the animal species by
having a body. Lacan mentions it in his style, ‘LOM cahun corps et nan–na Kun’.
(…) From the fact that he has a body, man also has symptoms he cannot at
once identify with. In the lack of identification it is precisely the dysfunctional
causing the relief of the symptom to stand out. You cannot identify yourself,
except through psychoanalysis, in which one of the issues, when everything is
489
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“Perhaps we should scrutinize, vary, specify on the body event definition. The
expression is a condensation. In fact, it’s always a matter of events of discourse
which leave traces in the body. And these traces disturb the body. They make
a symptom, but only if the subject in question is able to read these traces, to
decipher them. They have a tendency to lead finally to what the subject can
manage to retrieve from the events the symptoms trace.” p. 22
“In traumatism in the Lacanian sense, the core of the traumatic event is not
attributable to an accident. Or it is, but the possibility itself of the accident
which leaves traces of affect in the full sense I’ve given, the possibility itself
of the contingent accident, which is always necessarily produced, opens the
incidence of language on the speaking being, and precisely on the body. The
essential attachment is the tracing of language on the body. The principal of
the fundamental event, tracer of affect, is not seduction, not the menace of
castration, not the loss of love, not the observation of parental coitus, not
Oedipus, but the relation to language.
Lacan will condense this, perhaps in an excessively logical way, ‘the signifier is
the cause of jouissance’; but that is written in the notion of the fundamental
body event which is the incidence of language. Thus he refers to Joyce’s
Finnegan’s Wake, the totally indecipherable account of Joyce’s infantile
memories.” p. 27
“If we take the categories I’ve presented from the beginning, the Lacanian
event, in the sense of trauma, that leaves traces in each one is the sexual non–
relation. Lacan states that the trace left in each one is not as subject but as
speaker. It leaves symptoms and affects as traces in the body. Lacan defines the
encounter of love as the encounter with everything that marks the trace of exile
of the sexual in a body. That is to say, the traces in the body of what is most
intolerable. Quoting Freud, the internal end of drive is only the modifications, felt
as satisfaction of the body itself.” p. 33-34
“Is the signifier matter? Is the signifier properly speaking material? An ambiguity
persists in the measure in which we only apprehend it as a form which
materializes. But the signifier as such, that is to say as order, is pure formalism.
490
Jacques – Alain Miller
subtracted, is to identify with the remaining symptom. The assumption is that
in order to have symptoms, one must have a body, one must not be a body; and
that, in order to identify with the symptom, one must have a psychoanalyst. The
use of language is proof that there are many resources in ‘having’. The symptom
in its natural state, the symptom not denaturalized by analysis, is what shows
that one cannot identify man with his body.” p. 21-22
THE SPEAKING BODY
This is the point that Lacan makes in his writing Lituraterre. He speaks of
the signifier as matter in suspension, and he pictures it as clouds displaced by
the wind, but which are susceptible to precipitate in water, and this water is
susceptible to having material effects on the soil, on the ground. In this imagery,
it is the material character of the signifier or lack of it that is in question.
Lacan’s final response made the signifier and its semblance equivalent; that is, he
accented the formal character of the signifier, its logical character, wielded and
traced with small signs, occasions for the signifier to materialize. It materializes
in that which supports the signifier. It is thus that one can understand that
the signifier can borrow its matter from sound, but also from the body. This is
what one valorizes in the hysterical symptom, that the signifier is susceptible to
materializing in the body.” p. 41-42
“This is not the only structure in play in the rapport of the body and the
signifier. There is a second structure which is distinguished from the structure of
elevation, which is what Lacan studies, examines, introduces correlatively after
his last teaching. The second structure, which one could call embodiment, is
in some way the reverse of signifiantisation. It is rather the signifier entering the
body.” p. 43-44
“It’s a completely different structure from the first. The first is elevation,
sublimation of the thing toward the signifier. Embodiment is, on the contrary,
the signifier understood as affecting the body of the speaking being, and the
signifier becoming body, fragmenting the jouissance of the body and causing
excess pleasure to gush forth, cutting up the body, but only to make jouissance
flow, the excess pleasure which is virtual.” p. 44
Spare Parts (2004). Trans.: A. Price [PN 27]
“This reference to the body cannot be eliminated from the unconscious. This
is why the Seminar Le sinthome ends with the relationship to the body that is
specific to Joyce, with the status of the Ego, which is undoubtedly narcissistic
but in the sense that narcissism means that the idea of the self as a body
carries a weight that cannot be eliminated, and in particular one that cannot
be eliminated in the name of the subject representing a signifier for another
signifier. The relation to the body as such–which is what is meant by the
disjunction between the three rings of string–has nothing to do with anything
that might allow the subject to be defined.” p. 120
Detached Pieces (2005). Trans.: B. P. Fulks [LI 28, 2006]
“In order to read the Seminar on the Sinthome, we should orient ourselves
by distinguishing two writings: writing which speaks and the designs of the
491
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
Pure Psychoanalysis, Applied Psychoanalysis, and Psychotherapy
(2001). Trans.: B. P. Fulks [LI 20, 2002]
“It is a speaking symptom calling to be heard, to be understood. In order to have
a woman as symptom –the only way to love her– one must hear her, one must
decipher her. When the gentlemen are not ready, when they do not have time,
or when they are in front of their computers–another symptom to decipher,
another symptom which speaks–or they are deciphering the symptoms of their
clients, well, the women go into analysis.” p. 24
A Reading from Jacques Lacan’s Seminar From an Other to the other I
(2006). Trans.: B. P. Fulks, [LI 29, 2007]
“I hesitate to define exactly what the four objects corresponding one by one to
this quaternity are. The term ‘topological structure’ [is] used here in regard to
permit one to join corporeal specimen and logical consistency and especially to
move to the background the identification of the object to something concrete.
What Lacan calls here objet a is a hole in the Other, inasmuch as there are
borders and each one of these objects imposes a topological structure distinct
from the other. Since he imposes a structure on it, this is why one can say
that it has a weight equivalent to that of the big Other; and he frees us from
considering the Other as a collection where, for example, the signifiers are found
to be totalized. On the contrary, the objet a is here above all designed in its
function of hole having a border. This is not the hole we find in the Borromean
knots.” p. 22
“[T]he hole which can be distinguished by the title of the objet a (…) when it is
designed as topological structure and as logical consistency, has, if I may say, the
substance of the hole, and then some detached pieces of the body are moulded
in this absence (…) the objet a as hole and what comes to fill it in.” p. 25
“The Freudian list of drives includes already, but not clearly, the scopic object
and the vocal object. (…) Lacan gives us a definition which is based on and
takes its value from the fact that we admit that this hole in the Other has the
structure of the objet a and that it is going to capture jouissance in this form.”
p. 26
492
Jacques – Alain Miller
knots. (…) there is a mode of writing which speaks, which is like a body. Saint
Augustine held that meaning is created from writing in the same way in which
the soul causes the vitality of the body. The other mode is writing which means
nothing, in any case that which is not read. Lacan put his terms of ‘not to be
read’ in circulation before launching into his Sinthome enterprise.” p. 30
THE SPEAKING BODY
“Separation is the invented operation which modifies dialectically the second
logical form, that of intersection. Lacan formulates it from an equivalence, as if
two dented sets came here to superimpose themselves. The separation is in fact
a superimposition which leads the subject, Lacan says, to find in the desire of
the Other the equivalence to what he is as subject of the unconscious, that is to
say, a limit position, in which the lack in the Other (the origin of desire) and
lack of being of the subject come together (…) he situates (…) the unconscious
in the gaps which are established in the subject by the distribution of signifying
investitures. And one must suppose that something in the apparatus of the
body is structured in the same way as the unconscious. (…) Lacan calls it the
topological unity of the gaps in play (…) as if the place of meaning, the outside
meaning, came to recover the mysterious lack which inhabits the desire of the
Other. This will allow Lacan to give to the drive its role in the functioning of the
unconscious.” p. 32-33
“Lacan takes the Freudian example of Anna O. (…) On the one hand she
speaks, and on the other hand, there is the hysterical symptom that is there,
well and good, an event of the body. There is ‘something which empties out
at the level of the body’ –Lacan again takes up the void of the empty set– ‘a
field in which sensitivity disappears, another field, connected or not, in which
movement becomes absent’. At the same time, this event of the body is not
legible on the diagrams of the anatomy; it is here anti-anatomical, that is to say,
it is signifying.” p. 37
“A Reading from the Seminar: From an Other to the other II” (2006).
Trans.: B. P. Fulks [LI 30, 2007]
“For example, Lacan says it well one time when he deduces the function of
demand. One asks why one would need to deduce it, since one could appeal to
evidence, but he deduces it from the inconsistency of the Other: ‘It is because
the field of the Other is not consistent that the enunciation takes the form of
demand’ –demand is already under the operation of S (A)– ‘and this before
whatever it is which can respond carnally even comes to lodge there’. The flesh
arrives there with the notion that, formally, one can determine a whole logical
order, and that, secondarily, the flesh comes to obey this structure. There is this
the notion of a primacy or of a primarynesss of the signifier of the flesh.”
p. 18
“One finds this problematic again with the drive, in as much as it ‘designates to
itself alone the conjunction of logic and of corporality. The enigma bears rather
on this: how has jouissance on the edge managed to be called the equivalence
of sexual jouissance?’ We have here a problematic that is going to occupy
493
Xth Congress of the WAP, Rio de Janeiro 2016
“A Reading from the Seminar: From an Other to the other III”
(2006). Trans.: B. P. Fulks [LI 31, 2008]
“The place of the Other is here seen as the body–a surprise no doubt for the
listeners–not as an abstract function, but the body as place of inscription of
signifiers. Supported by a whole library of anthropological works that show in
effect the attention and importance accorded to everything that can decorate, or
mutilate or hook into or scar the body.” p. 128
“A Reading from the Seminar: From an Other to the other IV”
(2007). Trans.: B. P. Fulks [LI 32, 2008]
“The first jouissance, pulled from her own body, is always there. One does not
wager that one, one does not put it into play. It is at the same time ‘inaugural
and existent’. This way of stating it is rather striking. It exis