Su espíritu triunfador ha hecho que sus paisanos colombianos le

Transcrição

Su espíritu triunfador ha hecho que sus paisanos colombianos le
Su espíritu triunfador ha hecho
que sus paisanos colombianos
le vean siempre como un héroe
épico. Es uno de los grandes mitos colombianos, pero el peso de
la fama tiene también su precio.
Para muchos la sucesión de sus
éxitos en las pistas de Fórmula 1,
donde además del “pie caliente”
hay que tener la cabeza fría.
74
A M E R ICA N A I R L INE S NEXOS
D I C I E M B R E / E N E R O 2005
75
N
ueve de la mañana de un mar-
linda esposa, cambia de escenario. Ya no está sumergido en
condiciones adversas y los portazos de
tes cualquiera. Más allá de las
la comodidad del hotel bogotano sino untado de la infinita
los patrocinadores, valió la pena.
paredes de un elegante hotel
pobreza de un barrio en Cartagena, la ciudad turística por ex-
Su primer gran salto fue la Fórmu-
del norte se extiende en todas
celencia colombiana y un balcón natural en el mar Caribe.
la 3.000, que se corría en Inglaterra.
las direcciones la Bogotá de
“Cartagena sólo era un sitio de vacaciones hasta que me casé
Nada cambió: el mismo anonimato,
ocho millones de habitantes, donde el pesado tráfico es rey.
(el 25 de octubre de 2002). Ahora tiene un valor especial”,
un país desconocido como Austria,
Con semejantes trancones uno entiende que en esas calles,
dice con desparpajo, mientras los niños con una pantaloneta
que era la escudería de su nuevo equi-
donde cada día se mueven un millón de automotores, co-
como única ropa aún no creen que su ídolo les haya ayudado
po y la soledad de siempre.
menzó la carrera de este piloto que a sus 28 años es el colom-
a construir una cancha de microfútbol y baloncesto.
biano más admirado en un pueblo con pocos mitos.
Pido un café mientras espero que aparezca del ascensor. Las cámaras y focos de nuestro fotógrafo ya están listos… Ahí viene él.
Ya en 1999 y 2000, en la Fórmula
“Mire: no es que yo sea frío con los adultos, sino que siempre
CART en Estados Unidos, y desde el
he tenido química con los niños. Me encanta su autenticidad”.
2001, cuando debutó en la Fórmula 1,
Esta frase sirve de introducción al capítulo más novedoso de
su vida dio ese giro deportivo y eco-
No hay histeria, ni locura, ni fans con petición de autógrafos
su carrera: la Fórmula Sonrisas, una fundación social que lide-
nómico que tanto esperó. Pero aún
y fotos casuales, ni esas mujeres insinuantes que él tanto critica.
ra junto a Connie para conseguir fondos y construir escenarios
anhela algo que la popularidad, el
Tampoco hay manos que le quieran arrancar un pedazo de pelo o
deportivos en sitios marginados y barrios pobres de Colombia.
dinero y los carros no le pueden brin-
pellizcar el trasero como le ha sucedido cada tanto que llega a su
Por eso la visita a Cartagena. Para inaugurar la primera cancha.
dar: respeto por su privacidad.
país. Juan Pablo se acerca con las manos hundidas en un pantalón.
“Para ayudar a los niños no existe una razón” repite Juan Pa-
Lo acompañan Felipe Triana (su amigo del alma y, en los
blo, para aclarar que su altruismo no es forzado. “El nombre de
> El amor del ‘Enano’
últimos años, su jefe de prensa) y un guardaespaldas. “Hágale,
la fundación lo resume todo: la idea es alegría, sonrisas, oportu-
Montoya es feliz en la cocina de su
hablemos de lo que quiera”, dice con cordialidad.
nidades a los niños. Tuve la oportunidad de meterme en el de-
apartamento, en Mónaco. Pero su pro-
porte de niño y ahora tengo otra oportunidad que muy poquita
fesión no la puede dejar de lado, ni
gente tiene: brindarles a otras personas esa oportunidad”.
siquiera a la hora del almuerzo, como
>
Fórmula Sonrisas
Una semana después, el mismo Montoya, con el mismo
hombre de seguridad y de la mano de Connie Freydell, su
muy bien lo explica Connie. “Juan Pa-
Dos horas después otro avión lo espera. Otra cita, más co-
blo lleva la velocidad en las venas. Es-
merciales de televisión, más publicidad. Una vida a la carrera.
tamos en la mesa y de pronto empieza
> El destino estaba escrito
a recorrer alguna pista de la Fórmua 1
mentalmente y mueve el cuello hacia
Nació en el seno de una familia de clase media alta, en el norte de Bogotá. Su papá y su
el lado de cada curva que se imagina.
tío fueron pilotos en los 60 y 70. Por eso, cuando el mayor de los cuatro hijos Montoya
Siempre está metido en ese cuento”.
Roldán vio las primeras luces su destino casi estaba escrito.
La historia de amor de Juan Pablo
y Connie comenzó cuando se cruzó
con el ‘Enano’ –así lo llama ella– en
“Me encanta la autenticidad de los niños”
un restaurante bogotano y continuó
con las ‘voladas’ a Madrid, donde estudiaba ella. El noviazgo de dos años
se transformó en matrimonio.
76
A M E R ICA N A I R L INE S NEXOS
Cuando a los cinco años manejó por primera un kart se dio cuenta que las
Y la residencia de esta pareja no
cosas se hacen bien o no se hacen. Y comenzó a ganar, y a ganar, y a ganar. Hasta
se vislumbra en Bogotá ni Colom-
los 12 años. El colegio apenas lo cumplía. “Solo perdí un año. Pero fue porque me
bia. “En el futuro me veo viviendo en
rajaron. La peor materia fue español”. En la secundaria los carros eran su pasión.
Miami. Es lo que más se parece a mi
“Me estrellé varias veces. Mi papá no me lo volvió a prestar hasta que yo no tu-
país. No viviría en Bogotá por el per-
viera plata para pagar los daños”. Pero Juan Pablo, fanático de las hamburguesas,
manente acoso de la gente al que es-
las motos de cross y el golf, no se quedó cruzado de brazos. “Por ahí en vacacio-
taría expuesto. Es solo eso. No es por
nes trabajaba de mensajero en la oficina de mi papá”.
la inseguridad, como dijeron un día.
Llegó el fin del colegio. Y comenzó la eterna apuesta del papá: hipotecó varias veces
Es más lo que extraño que lo que me
la casa familiar al detectar que su hijo era talento puro, pero el esfuerzo, a pesar de las
molesta de mi país”, dice Juan Pablo.
D I C I E M B R E / E N E R O 2005
77
Montoya, a toda velocidad
>> Nexos: Los niños de Colombia lo ven a usted
como Superman. ¿Cómo los ve usted a ellos?
>> Juan Pablo Montoya: Mi relación es chévere. Y complicada porque se fijan mucho en mí
y es una gran responsabilidad.
>> Nexos: ¿Usted a quién admira?
>> JPM: En Colombia hay mucha gente ‘berra-
O piloto dos sorrisos
S
eu espírito triunfante faz seus patrícios colombianos o verem sempre como um
Peço um café, enquanto espero que saia
herói épico. É um dos grandes mitos da Colômbia, mas o peso da fama também
do elevador. As câmeras e as luzes do nos-
tem o seu preço. Para muitos, a sucessão de seus êxitos nas pistas da Fórmula
so fotógrafo já estão prontas... Lá vem ele.
Um, onde, além do “pé quente”, é preciso ter a cabeça fria, elevou-o à condição
Não há histeria, nem loucura, nem fãs pedin-
de um ser superior e distante. Montoya, que sente falta dos passeios pelas ruas de Bogotá ou
do autógrafos e fotos fortuitas, nem aquelas
de comer em um restaurante sem ser reconhecido, se aborrece com essa pressão constante
mulheres insinuantes que ele tanto critica.
ca’. Yo los admiro. Fabiola Zuluaga (tenista)
me parece una ‘dura’. Santiago Botero (ciclista), también.
sobre sua liberdade de ir e vir. Ele gostaria de passar despercebido, enquanto caminha com
Tampouco há mãos que lhe querem arrancar
os olhos fechados, a pensar em algum circuito qualquer. Sabe que não lhe é possível, porque
um chumaço de cabelo ou lhe beliscar o trasei-
a sua presença e as tarefas de sua fundação são o tubo de oxigênio para muitas comunidades
ro, como lhe tem acontecido, cada vez que che-
>> Nexos: ¿La fórmula que más sonrisas le
pobres que ele ajuda com canchas de esporte para que surjam novos Montoyas.
ga ao seu país. Juan Pablo se aproxima com as
arranca es la Fórmula 1 o la Sonrisas?
>> JPM: Las dos me traen mucha felicidad y
muchos dolores de cabeza.
>> Nexos: Un juguete de infancia que recuerde mucho.
>> JPM: Un carrito de pilas que me regaló mi
papá. Me monté, aceleré unos diez metros y
me bajé. Nunca me volví a montar porque no
me gustó.
mãos metidas nos bolsos das calças.
Nove da manhã de uma terça-feira qualquer. Mais além das paredes de um elegante hotel ao
Vem acompanhado por Felipe Triana
norte, a Bogotá de oito milhões de habitantes, onde reina um trânsito congestionado, estende-se
(amigo do peito e, nos últimos anos, seu
em todas as direções. Com semelhantes congestionamentos, pode-se entender que, nessas ruas,
secretário de imprensa) e por um guar-
onde, a cada dia, se movem um milhão de automóveis, teve início a carreira desse piloto que, aos
da-costas. “Vamos lá, falemos de tudo que
28 anos é o colombiano mais admirado por um povo com poucos mitos.
quiser”, diz com cordialidade.
>> Nexos: ¿Quién le enseñó a manejar carros?
>> JPM: Mi papá.
>> Nexos: Su peor ridículo.
>> JPM: En el 99 llegué a un restaurante y
todo el mundo comenzó a gritar ‘Montoya’ y
a aplaudir. Me dio una pena…
>> Nexos: Una tarde perfecta de domingo.
>> JPM: Que arranque de primero, haga la
Pone un ejemplo de lo que no le gusta, y por lo cual lo tildan de arrogante.
“Una vez estaba almorzando en un restaurante en Bogotá y una señora me
vuelta más rápida y gane. Porque el domingo
es un día de trabajo. En un lunes perfecto desayuno, monto motos o hago ejercicio y voy a
jugar golf acompañado de mi esposa.
pidió un autógrafo. Le dije que esperara a que terminara de comer y que, con
>> Nexos: ¿Quién es el mejor conductor de la
mucho gusto, se lo firmaba. Cuando terminé, se lo envié a la mesa. Ella me lo
familia Montoya?
>> JPM: Mi mamá (risas). No sé, todos. En la
familia todos andamos rápidos. La más responsable es mi hermana Catalina.
devolvió, furiosa, y dijo que yo era un antipático”.
En su última visita a Colombia se dio cuenta de que le será imposible en adelante
salir al cine, comer en un restaurante o ir a jugar maquinitas de carros en un centro
comercial... Todos estarían pendientes de él. Y él solo desea pasar inadvertido.
Se despide dejando ver su alma de colombiano. “Soy un colombiano que salió a
aventurar tras muchos sueños y en mi cabeza siempre ha estado triunfar. Sé que no
debo dar la espalda a la gente que me ayudó y que nunca voy a dejar de ser colombiano. Nunca olvidaré los valores que me enseñaron en mi casa”.
Y aunque hace ya muchos años que la fama le persigue no se acostumbra.
Cuando comprueba la histeria que genera a su alrededor parece buscar la
complicidad de su amigo Felipe Triana para preguntarse de nuevo como hace
ya hace unos años: “¿A qué horas me hice tan famoso?”
Juan Pablo Machado es escritor colombiano especialista en deportes y residente en Bogotá.
78
A M E R ICA N A I R L INE S NEXOS
>> Nexos: El último defecto que se descubrió.
>> JPM: Los mismos de siempre. El desorden, pero eso es viejo. Soy un poco malgeniado y explosivo. También sé que no tengo
tacto para decir las cosas.
>> Nexos: Su ídolo.
>> JPM: Ayrton Senna (piloto brasileño fallecido en 1994, tres veces campeón mundial) era mi ídolo porque siempre me pareció que llegaba a los límites a los que ningún
otro piloto se arriesgaba. Hoy, que estoy
metido en esto, pienso que era mejor de lo
que él mismo creía.
D I C I E M B R E / E N E R O 2005
79
O piloto dos sorrisos
O piloto dos sorrisos
> Fórmula Sorrisos
A história de amor de Juan Pablo e Connie começou quando conheceu a “Anão” – assim ele
Uma semana depois, o mesmo Montoya, com
a chama – em um restaurante bogotano e continuou com as visitas curtas a Madrid, onde ela
o mesmo segurança, e de mãos dadas com
estudava. O noivado de dois anos se transformou em casamento.
Connie Freydell, sua linda esposa, muda de
A residência desse casal não está prevista para Bogotá nem Colômbia. “No futuro,
cenário. Já não está submerso na comodi-
vejo-me radicado em Miami. É o lugar que mais se parece com o meu país. Não me es-
dade do hotel bogotano, mas mergulhado na
tabeleceria em Bogotá por causa do permanente assédio das pessoas a que estaria ex-
infinita pobreza de um bairro de Cartagena,
posto. É só por isso. Não é pela insegurança, como disseram um dia. É mais pelo o que
a cidade colombiana turística por excelência
sinto falta do que pelo o que me chateia em meu país”, disse Juan Pablo.
e um mirante natural sobre o mar do Caribe.
Dá um exemplo do que não gosta, o que lhe resulta na pecha de arrogante. “Certa vez, eu estava
“Cartagena era apenas um recanto de férias
almoçando em um restaurante de Bogotá, e uma senhora pediu-me um autógrafo. Eu lhe pedi que
até quando eu me casei (em 25 de outubro de
esperasse eu concluir a refeição, após a qual, com muito prazer, a atenderia. Quando terminei,
2002). Agora tem um valor especial”, diz com
enviei-lhe o autógrafo à mesa. Ela me devolveu o papel, furiosa, e me chamou de antipático.”
conhecimento, enquanto os garotos, vestin-
Em sua última visita à Colômbia, deu-se conta de que lhe será impossível, no futuro, ir ao cine-
do somente calções, ainda não acreditam que
ma, comer fora ou sair para brincar com joguinhos de corrida de carros nas máquinas de videojo-
seu ídolo os tenha ajudado a construir uma
gos de um centro comercial... Deseja tão-só passar despercebido.
quadra de futebol de salão e basquetebol.
Despede-se, pondo à mostra sua alma de colombiano. “Sou um colombiano que saiu em bus-
“Veja bem: não é que eu seja frio com os
ca de aventuras, atrás de muitos sonhos e, em minha cabeça, a idéia da vitória sempre esteve
adultos, mas é que sempre tive uma química
presente. Sei que não devo dar as costas à gente que me ajudou e que nunca deixarei de ser
com as crianças. A autenticidade delas me
colombiano. Jamais esquecerei os valores que recebi em meu lar.”
encanta.” Esta frase serve de introdução ao
E ainda que já se tenham passado muitos anos, durante os quais a fama o tem perse-
capítulo mais movimentado de sua carreira:
a Fórmula Sorrisos, uma fundação social
guido, não consegue se acostumar. Quando constata a histeria que gera ao seu redor,
quatro filhos Montoya Roldán viu as primeiras luzes, seu destino estava quase traçado.
que ele lidera junto a Connie, para conseguir
Quando, aos cinco anos, dirigiu um kart pela primeira vez, deu-se conta de que as coisas, para
fundos e construir complexos desportivos
serem feitas, devem ser bem feitas. E começou a ganhar, a ganhar, a ganhar, até os 12 anos.
em localidades marginalizadas e nos bairros
Na escola, apenas assistia às aulas. “Só perdi um ano. Mas foi porque me expulsaram. A pior
pobres da Colômbia. Por isso, a visita a Car-
matéria era o espanhol.” No curso secundário, os carros eram a sua paixão. “Bati várias vezes.
tagena. Para inaugurar a primeira quadra.
Meu pai não me emprestou mais dinheiro até quando eu não tinha mais nada para pagar pelos
“Para ajudar os meninos, não existe uma
razão”, repete Juan Pablo, para esclarecer
consertos.” Mas Juan Pablo, fanático por hambúrgueres, motocross e golfe, não ficou de braços
cruzados. “Quando eu estava de férias, trabalhava de contínuo no escritório do meu pai.”
que seu altruísmo não é forçado. “O nome
Chegou o fim do período escolar. E teve início a eterna aposta do pai: hipotecou várias vezes
da fundação resume tudo: a idéia é alegria,
a casa da família ao perceber que o filho era puro talento, mas o esforço, apesar das condições
sorrisos, oportunidades para os garotos.
adversas e de os patrocinadores lhes terem batido com a porta na cara, valeu a pena.
Tive a chance de me meter no esporte des-
Seu primeiro grande salto foi a Fórmula 3.000, corrida na Inglaterra. Nada mudou:
de criança e agora tenho outra oportunida-
o mesmo anonimato, um país desconhecido como a Áustria, onde ficava a escuderia de
de que muito pouca gente tem: dar a outras
sua nova equipe, e a solidão de sempre.
pessoas essa mesma oportunidade.”
Já em 1999 e 2000, na Fórmula KART, nos Estados Unidos, e desde 2001, quando
Duas horas depois, outro avião o es-
debutou na Fórmula Um, sua vida deu aquela guinada esportiva e econômica que ele
pera. Outra cidade, mais comerciais de
tanto esperava. Contudo, ainda anseia por algo que a popularidade, o dinheiro e os car-
televisão, mais publicidade. Uma vida de-
ros não lhe podem dar: respeito à sua privacidade.
dicada à carreira.
>
O destino estava escrito
> O amor da “Anão”
Montoya fica feliz na cozinha de seu apartamento, em Mônaco. Mas não pode deixar de
O piloto nasceu no seio de uma família de
lado a profissão, nem sequer na hora do almoço, como bem nos explica Connie. “Juan
classe média alta, na zona norte de Bogo-
Pablo tem a velocidade nas veias. Sentamos à mesa e, imediatamente, ele começa a
tá. O pai e o tio foram pilotos nos anos
percorrer alguma pista da Fórmula Um mentalmente e desloca o pescoço para o lado
60 e 70. Por isso, quando o maior dos
de cada curva que imagina. Está sempre metido nesse devaneio.”
80
A M E R ICA N A I R L INE S NEXOS
parece buscar a cumplicidade de seu amigo Felipe Triana, para se perguntar de novo,
como vem fazendo há alguns anos: “Quando foi que eu fiquei tão famoso?”
Montoya, a toda velocidade
>> Nexos: As crianças da Colômbia o
vêem como um super-homem. Como você
se relaciona com elas?
>> Juan Pablo Montoya: “Minha relação
com elas é bacana. E complicada, porque
me vêem como modelo, o que é uma grande responsabilidade”.
>> Nexos: Quem você admira?
>> JPM: “Na Colômbia há muita gente ‘peituda’. Eu as admiro. Fabíola Zuluaga, a tenista,
me parece ser uma pessoa ‘durona’ e também o ciclista Santiago Botero”.
>> Nexos: A fórmula que lhe arranca mais
sorrisos é a Fórmula Um ou a Sorrisos?
>> JPM: “As duas trazem muita alegria e muitas dores de cabeça”.
>> Nexos: Um brinquedo de infância que lhe
tenha deixado muitas lembranças.
>> JPM: “Um carrinho movido a bateria, presente de meu pai .“
>> Nexos: Quem lhe ensinou a dirigir carros?
>> JPM :“Meu pai”.
>> Nexos: Sua situação mais embaraçosa .
>> JPM: “Um dia, entrei em um restaurante,
e todo o mundo começou a gritar ‘Montoya’ e
aplaudir. Fiquei constrangido...”
Juan Pablo Machado é escritor colombiano, especialista em esportes e residente em Bogotá.
>> Nexos: Uma tarde perfeita de domingo...
>> JPM: “Quando eu arranco em primeiro, faço
a volta mais rápida e ganho a corrida. O domingo é dia de trabalho. Uma segunda-feira perfeita é tomar café de manhã, montar em motos,
fazer exercícios físicos e ir jogar golfe, acompanhado de minha esposa”.
>> Nexos: Quem é o melhor motorista da família Montoya?
>> JPM: “Minha mãe (risos). Não sei, todos.
Na família, todos andamos rápido. A mais
responsável é minha irmã, Catalina”.
>> Nexos: Seu último defeito descoberto.
>> JPM: “Os mesmos de sempre. A desordem, mas esse é velho. Sou um pouco temperamental e explosivo. Também sei que
não tenho tato para dizer as coisas”.
>> Nexos: Seu ídolo?
>> JPM: “Ayrton Senna (piloto brasileiro falecido em 1994, três vezes campeão mundial) era meu ídolo, porque sempre me deu
a impressão de que chegava a limites em que
nenhum outro piloto se arriscava. Hoje, que
estou metido nisso, acho que Ayrton era ain-
D I C I E M B R E / E N E R O 2005
81